Detrás de: El Exorcista

Por Erick Núñez

Film dirigido por William Friedkin que sería recordada por la gran mayoría de cinéfilos como la mejor película de terror de la historia. Este merito no ha sido sólo otorgado por el público sino por la crítica y los numerosos premios que obtuvo por parte de los Premios Oscar y Globos de Oro en comparación de cualquier otra del mismo genero debido al gran conjunto cinematográfico que conforma.

Toda gran película inicia con un gran guion, la historia es originalmente una novela de William Peter Blatty quien también se encargó de escribir la adaptación del guion para el filme y tuvo una breve aparición. La novela está basada en hechos reales, específicamente del caso sobre la supuesta posesión demoniaca sobre el joven Roland Doe en el año de 1949, y fue Warner Bros la casa encargada de la distribución de su adaptación cinematográfica.

La película cuenta con un buen montaje y escenas de terror adelantadas a su tiempo, un ejemplo es la escena donde el personaje de Regan baja por las escaleras en una difícil posición sangrando de la boca, ésta escena fue eliminada de la versión original debido a que el director William Friedkin pensó que no sería bien recibida y no fue revelada hasta décadas después. Para lograr ésta difícil escena se necesitó contratar a una contorsionista sujetada con un arnés.

Éste largometraje cuenta con una de las apariciones más memorables de una presencia sobrenatural, ya que fue añadido el rostro del demonio, interpretado por Eileen Dietz, que posee al cuerpo de Regan en varias escenas de manera simple y momentánea, además de la estatua de un demonio llamado Pazuzu que aparece al iniciar la película en una excavación arqueológica, hay algunas intenciones cinematográficas muy interesantes con ésta estatua, por ejemplo, en la primera escena donde se aprecia hay un acercamiento al rostro del demonio mientras escuchamos a un par de perros peleando, dando la impresión que es el mismo demonio Pazuzu quien produce ese ruido tan agresivo, y en esa misma escena hay un plano donde aparece el personaje del Padre Merrin, interpretado por Max von Sydow, y la estatua aparecen dentro de cuadro, y en una transición se desvanece lentamente y se sobrepone un plano del sol justo en medio de la estatua y el padre formando una imagen, son dos diferentes planos logrando una contorsión surrealista.

Otro dato surrealista es que la clásica portada de la película está inspirada en una pintura del artista René Magritte llamada The empire of light (1947). También una escena cerca del final donde el padre Damien Karras ve a Regan poseída sin las cuerdas que las sujetan frente a un deslumbrante juego de iluminación y la estatua integrada en el mismo cuadro.

El trabajo de maquillaje también fue muy bien elaborado, ya que además de que el trabajo sobre el personaje de Regan siendo consumida por la posesión es impresionante, al actor Max von Sydow lo maquillaban entre dos y tres horas para aparentar la edad requerida para su personaje.

Una falla que quedó como un dato interesante es cuando el demonio le vomita al Padre Karras en el rostro, esto no debía suceder así, realmente se tenía planeado que el vomito fuera proyectado contra el pecho de Jason Miller, actor que interpreta al padre Karras, pero el tubo propulsor falló dándole directamente al rostro del actor, teniendo una real e inesperada reacción de desagrado, además de que Miller ni siquiera estaba enterado que recibiría el disparo vomitivo, la escena no se rodó una segunda vez quedando en la versión final.

El spot publicitario que consta de imágenes fijas de la posesión de Regan interpretada por Linda Blair y el rostro del demonio que posee su cuerpo fue censurado ya que se consideró que era bastante traumático para el público general.

El director llegó a ser bastante metódico con su trabajo del montaje dificultando el trabajo de los actores, sobrepasando ciertos límites, Friedkin aumentaba la tensión de los actores para conseguir interpretaciones más naturales, explotaba petardos detrás de los actores. Linda Blair y Ellen Burstyn fueron sujetadas con arnés para que sus movimientos fueran más convincentes según su visión, también propinó bofetadas a William O’Malley para lograr una escena cercana al final.

Para crear el efecto donde Regan gira su cuello 180° se creó una muñeca que pudiera simularlo, hoy en día se encuentra en Nueva York en el Museo De La Imagen En Movimiento. El aliento congelado de los actores es real, ya que la habitación se refrigeró con varios ventiladores logrando una temperatura aproximada de 40° bajo cero. En la escena final donde el demonio libera el cuerpo de Regan para poseer al padre Karras, el efecto de sonido fue creado con fragmentos de audio de puercos en un matadero. Su tema principal Tubural Bells de Mike Oldfield es muy reconocido e icónico, manteniendo la esencia de terror en la memoria de la audiencia.

Hay muy buen trabajo detrás de ésta película, al grado que incluso ni los mismos premios Globo de Oro y los Oscar pudieron ignorar, ganando varios reconocimientos importantes, entre ellos 4 Globos de oro en las categorías: Mejor Película, Mejor Director, Mejor actriz de reparto (Linda Blair) y Mejor Guion. Además de dos estatuillas doradas en las categorías de Mejor Guion Adaptado y Mejor Sonido, al igual que estuvo nominada a mejor película, siendo así la primera en el género en estar en esta categoría. Pero lo más importante es el reconocimiento y aceptación del público ya que sin duda esta cinta marcó época y sigue siendo referente importante no solo en las películas de terror sino en la Industria cinematográfica.