4 minute read
¿Cómo se gana un Oscar?
from Cine - Nigromante Octubre 2019
by Nigromante. Revista de la DCSyH, Facultad de Ingeniería, UNAM.
¿Cómo se gana un Oscar?
Por Uriel Siliceo
Advertisement
Los premios de la academia, conocidos también como Premios Óscar, son probablemente los premios más populares, prestigiosos y glamorosos del mundo. La ceremonia de premiación es seguida por millones de personas y en ella se reconoce el mérito a la excelencia de los profesionales de la industria del cine, así que podemos afirmar que es un premio extremadamente deseado por casi todos. Es por eso que las películas, sea su principal objetivo o no, piden la consideración de la academia para poder ser seleccionadas y ganar algún premio. Tan solo en 2017 hubo 341 filmes elegibles para una nominación del premio de la academia. Con semejante número de participantes ¿Cuál es el camino que recorre una película para ser nominada y ser contendiente al premio mayor: el Óscar a Mejor Película?
En los más de 90 años de existencia de los premios de la academia lo que significaba ser “la mejor película” ha cambiado dramáticamente. En los años 70’s, la emoción por los relatos de criminales y las actividades ilegales llenaban los ojos de los miembros de la academia, mientras que en los 80’s ese lugar lo ocupaban los dramas localizados en tierras lejanas y exóticas. Pero en esta última década se ha resaltado una nueva tendencia: la de los festivales de cine. Por los últimos 12 años, todas las películas que ganaron el premio a “Mejor Película” tuvieron su estreno en uno de estos exclusivos y renombrados festivales, donde se reúnen excepcionales aficionados al cine, críticos, miembros de la academia, directores y estrellas de cine para celebrar los filmes que se ahí se proyectan. Hay una cantidad inmensa de festivales de cine, para cualquier gusto, pero los que poseen un mayor renombre (y por lo tanto, más peso a la hora de votar por los nominados) son estos cinco:
THE SUNDANCE FILM FESTIVAL: El paraíso de los filmes indie. Aquí se han estrenado Little Miss Sunshine (2006), Boyhood (2014) y Whiplash(2014). Las películas que han sido compradas por grandes estudios en estos festivales garantizan una consideración para la temporada de premios al final del año.
THE FESTIVAL DE CANNES: Este festival es la excusa perfecta para tirar la casa por la ventana. Nunca se sabe cómo reaccionará la audiencia en estas proyecciones llenas de glamour. Pueden ir desde los abucheos despiadados hasta las ovaciones de pie. Aquí se han estrenado películas como No Country for Old Men (2007) y The Artist (2011). Es el más prestigioso de los festivales, también el más exclusivo, dando acceso a solo 30,000 profesionales de la industria del cine.
VENICE FILM FESTIVAL: Es el festival de cine más antiguo de todos y es el punto de reunión de las películas con una gran posibilidad de éxito en los galardones y en lo comercial, como por ejemplo La La Land (2016) y Birdman (2014).
TELLURIDE FILM FESTIVAL: El más íntimo de todos, pero en años recientes también el de más peso para las premiaciones. Aquí se han estrenado Moonlight (2016), Room (2015), Lady Bird (2017), The Shape of Water (2017) y The Darkest Hour (2017). Suele ser el lugar de reunión de los “caballos negros” de las premiaciones
TORONTO INTERNATIONAL FILM FESTIVAL (TIFF): Lo maravilloso de este festival no solo se reduce a la calidad de sus estrenos, como Lion (2016) o The Theory of Everything (2014), sino que no esta reservado solo para profesionistas de la cinematografía, también abre sus puertas a consumidores comunes de cine, siendo el opuesto de Cannes. Alberga aproximadamente a 480,000 asistentes.
Uno de los puntos más importantes para ser serio contendiente al Oscar es que la mayoría de sus nominados comparten un mensaje que conecta con cierto momento de la historia, como por ejemplo Get Out (2017), donde se exploraba el racismo a menor y mayor escala que sufren las personas de color, o también Mad Max: Fury Road (2015), donde el protagonista se vuelve secundario al ver a un estandarte del feminismo como Furiosa.
Con tantos estrenos alrededor del mundo en tan poco tiempo, los estudios se enfocan en campañas para mantener a sus películas en el centro de la conversación, concentrándose primero en conseguir una nominación y después crear una publicidad para ganar la estatuilla, como hizo Lion (2016) después de haber sido nominada, apoyándose en las políticas antiinmigrantes de Donald Trump, telegrafiando a los miembros de la academia que un voto por Lion, era un voto por los inmigrantes.
Y finalmente, después de todas las estrategias posibles, todo se reduce al grupo principal, la élite de la élite de Hollywood: La Academia. Aproximadamente 8,000 miembros componen la academia que es dividida en 17 secciones, conteniendo actores, directores de casting, cinematógrafos, diseñadores de vestuario, directores, ejecutivos, productores, editores, y muchos más. Cada uno con sus requisitos para ser aceptados. Los miembros de la academia solo pueden nominar películas en sus respectivos campos de especialidad, siendo la excepción la nominación a “Mejor Película”, en la que todos pueden votar. Puede haber de 5 a 10 nominados (se dice que se expandió la cantidad de nominados a causa de la indignación generalizada por la no nominación de The Dark Knight (2008)) y para recibir una nominación, una película necesita de al menos del 5% de los votos de la academia (cerca de 400 votos, asumiendo que todos los 8000 miembros voten). Y como los estadounidenses evitan de cierta manera el camino más sencillo, para ganar el premio a “Mejor Película”, a diferencia de todos los demás premios y al igual que en las votaciones presidenciales, el contar con la mayoría de votos no es suficiente.
Así que, si hay, por ejemplo, 10 nominados, lo votantes los ordenan del 1 al 10, y si ninguno de los nominados obtiene el 50% de preferencia, se elimina la película con menor valoración y sus votos se le asignan a la segunda opción en la boleta. El proceso continúa hasta que una película obtiene el 50%+1 de los votos, convirtiéndose así, en la mejor película del año.