EL RUIDO Capítulo 1 Día 1/4/1997 Querido diario, hace dos días, me dejé esto en el campanario, después de que mi primo me regalara esto en medio del barrio, no sé si vas a ser beneficiario, ahora voy a mi casa a limpiar el acuario. Día 2/4/1997 Querido diario, hoy me he extrañado, al oír un ruido que provenía del baño. Quise ir a ver qué era, pero me asusté tanto, que decidí salir afuera. -Hijo, ¿qué ha pasado? -Yo oí un ruido extraño, en el baño y pensé que alguien trataba de hacerme daño. Día 3/4/1997
Querido diario, mi madre fue a ver qué es lo que era aquel ruido. Simplemente era el crujido de un cepillo caído en el suelo por culpa del perrillo de color amarillo. Día 4/4/1997 Querido diario, ya todo está más tranquilo, pero, después escuché un chillido, eso sí que no se parecía a un cepillo, pues los cepillos no hacen esos ruidillos. Me asusté y, en ese momento, mi madre fue supermercado, así que llamé a mi padre, pero estaba durmiendo en el tejado. No me dio tiempo de avisar, así que, salí corriendo sin más, entonces pensé que ese ruido no lo había escuchado nunca jamás. Día 5/4/1997 Querido diario,-¡Oh no!-Grité al pensar que en mi casa se hallaba un ladrón. De repente, mi perro sale de la casa comiéndose un bombón y grité-¡Doky, suelta eso! Volví a entrar a mi casa, tenía que deferla, así que cogí un bate, entré, y en la puerta había un alicate.
No lo vi, así que lo pisé y me hice daño, y tenía un corte de un gran tamaño. Capítulo 2 Día 6/4/1997 Al ver que sangraba mucho del pie, porque no llevaba zapatos, decidí entrar en casa a coger unos calcetines baratos. En ese momento, salí de casa y me topé con un vecino que se hallaba saliendo de un casino. -¡Ayúdame!-Grité -¿Qué te pasa?-Preguntó el vecino que intentó esquivar la grasa de un coche con olor a masa. Día 7/4/1997 -Me he cortado, además creo que en mi casa se halla alguien armado. El vecino se sacó del bolsillo un paño con el que evitó el daño que no me ocurría desde hace un año.
Este trató de llamar a la policía, pero la bolsa estaba vacía, la bolsa donde se encontraba el móvil estaba vacía, este lo buscaría, pero quiso llamar a la policía con el móvil de un hombre que estaría por la avenida. Día 8/4/1997 El policía vino y entró en casa a ver que hacía el sospechoso que dejó una huella de oso. -¡Qué haces!-Gritó el policía al ver que el ladrón estaba robando un jarrón. el policía cogió el jarrón y esposó al ladrón. -¡Ese jarrón es muy valioso!, aunque su color marrón sea muy soso. Día 9/9/1997 Metieron en el calabozo al ladrón que robó el jarrón y acabó recogiendo agua de un pozo. -¡Ya no volveré a robar más!-Gritó el ladrón. FIN