Sin bolsa plástica, por favor

Por: Rodrigo Cózar Castro Mtro. Dirección de Marketing y Marketing Digital

Durante muchos años la promoción y publicidad de los locales comerciales, las multi tiendas e incluso las tiendas de barrio han usado diferentes estrategias para poder dejar su marca dentro de los hogares, volviéndose parte del panorama cotidiano en los hogares; Hoy en día la generación del milenio y la generación Z han crecido con un espíritu más preocupado por el medio ambiente y por el mañana.

En contradicción a esto, encontramos que el polietileno ha sido un gran colaborador de la historia del retail, lo que hace que en la actualidad las organizaciones internacionales estén preocupadas por los millones de toneladas de plástico que se encuentran en el fondo del mar, lo cual, definitivamente no pasó de la noche a la mañana, pues dentro de nuestra cultura se ha interiorizado por generaciones, ya que una bolsa plástica puede tener usos infinitos, desde un depósito de desechos, un archivador o incluso la lonchera de la colación y, si nos encontramos con destellos de creatividad, un buen sustituto para el empaque de la tubería, pero ¿Cómo llegamos a esto?

En la década de los treinta en una pequeña planta de Inglaterra, resultado de una casualidad, un equipo de químicos que realizaba experimentos con polímeros, produjeron un residuo ceroso blanco, que el día de hoy es conocido como polietileno y George Feachem fue testigo de este descubrimiento, el cual fue utilizado inicialmente por los militares británicos en la Segunda Guerra Mundial.

Su uso masivo comercial tuvo sus primeros momentos de gloria en Europa durante la década de los sesenta, cuando Celloplast una empresa Sueca, comenzó a producir las bolsas plásticas reemplazando rápidamente a la tela, pero fue hasta 1980 que este espectacular producto fue introducido al mercado norteamericano bajo la bandera de la superioridad del papel y las bolsas reutilizables, siendo 1982 el año donde las cadenas de supermercados Safeway y Kroger popularizaron el uso de la bolsa plástica, teniendo miles de seguidores en todo el país y el mundo, logrando prácticamente, reemplazar el uso del papel al final de la década.

Desde la mirada del Branding, el transportar los productos en una bolsa con el gran logotipo de la tienda y/o el centro comercial, ayuda a que se haga más popular su uso y se convierte en un activo publicitario importante para cualquier tienda de retail, con bajo costo y alta masificación; así como un indicador importante para saber dónde se realizan las compras familiares y dónde el cliente, está compartiendo el gasto de su billetera.

Llegando a finales de los noventa, Charles Moore, marinero e investigador, descubre una gran mancha de basura en el Pacífico, concentrado en una de las más grandes corrientes marinas del mundo, siendo un riesgo y amenaza para los ecosistemas marinos. Sin embargo, las verdaderas prohibiciones del uso de las bolsas plásticas no se debían a los riesgos de la vida marina sino a la obstrucción de los sistemas de drenaje durante las inundaciones, siendo Bangladesh el primer país del mundo que implementa la prohibición del uso de bolsas plásticas.

Para 2011 el mundo consume aproximadamente 1 millón de bolsas plásticas por minuto y a partir de este año muchos países están promoviendo la reducción del uso de este material. Desde 2014 en Chile se comenzaron los trabajos de prohibición del uso de bolsas plásticas en este país del sur del mundo, siendo Punta Arenas la primera ciudad que implementó esta medida el mismo año, pues el Ministerio del Medio Ambiente informó que, en ese año, se consumían aproximadamente tres mil millones de bolsas al año, y se buscó promover el uso de bolsas reutilizables.

En mayo de 2018 se informó, en este país, que el Congreso presenta el proyecto de ley que prohíbe el uso de bolsas plásticas, generando un trabajo colaborativo con las municipalidades para implementar el reglamento, así como su fiscalización. De esta forma, Chile se convertirá en el primer país latinoamericano en establecer

la prohibición nacional del uso de bolsas plásticas en el comercio.

Este año el tema del “Día Mundial del Medio Ambiente 2018” es un planeta #SinContaminación por plástico. Con este panorama, el comercio en todo el mundo está obligado a generar nuevas tendencias en uso y manejo de envases y embalajes así como concientizar a la población, no solo de reducir el uso de bolsas plásticas, sino de dónde terminarán todos estos desechos, ya que es responsabilidad de cada uno de nosotros, los usuarios, evaluar donde hacemos llegar el material que llega a nuestras manos, por eso te invitamos a que cuando visites una tienda, lleves tu bolsa reutilizable, y que podamos decir con más regularidad: sin bolsa plástica, por favor.