Boletín No. 29 Año X
GEU
Grupo Evangélico Universitario
Nuevos Grupos San Marcos y Salamá Compartir del amor de Dios y el plan de Salvación en un lugar donde el libertinaje es claramente visible, no es algo que a los jóvenes cristianos se nos facilite, pero el hecho de saber que se cuenta con apoyo de otras personas y sobre todo que lo que se habla se acopla al contexto que como universitarios vivimos día a día es confortable, es como sentir el respaldo de Dios para invitar a otros jóvenes a experimentar ese amor que con nada se compara.
Estando en mi segundo año en el Programa de Desarrollo de Liderazgo (LDP) de Compassion Guatemala, mis líderes decidieron enviarme al Campamento Nacional del Grupo Evangélico Universitario (GEU), como un entrenamiento para seguir desarrollando mi liderazgo. Previo a dicho campamento, me encontraba intentando aclarar cómo podía ser un misionero sin tener que salir de mi departamento ni mucho menos de mi país. En este proceso muchos amigos misioneros me invitaron para empezar escuelas misioneras, pero en realidad no sentía hacerlo, así que oraba a Dios para saber y discernir su Voluntad.
El tomar la decisión de abrir mi grupo en la Universidad me ayudó no solo a escuchar la palabra de Dios entre semana, sino a conocer más a mis compañeros, a enterarme de sus puntos de vista con respecto al cristianismo y me dio ánimos para invitar a personas que creí que nunca aceptarían formar parte de un grupo en donde el centro es Jesús. También pude notar como es que hay personas entregadas a la obra de Dios, quienes no importando distancia o cansancio, están dispuestas a compartir ese evangelio.
Al llegar al Campamento Nacional, un sentir de confirmación vino a mí por parte de Dios; así que en el momento de desafíos y compromisos, sentí que Dios me había llamado para formar parte del movimiento estudiantil en Guatemala y ser un misionero en mi universidad. Así que, decidí aceptar el desafío y comprometerme a organizar un grupo en Baja Verapaz. Aquel entrenamiento fue más allá de lo que yo mismo había pensado.
Me agrada saber que formo parte de un grupo grande que quiere atraer a muchos jóvenes a la verdad. Evelin Barrios. Medicina CUSAM/San Marcos
Actualmente Dios me ha guiado de muchas maneras y he conocido más del movimiento a través de las visitas al movimiento de Cobán y de Chiquimula. Estoy en el proceso de encontrar a los estudiantes quienes también sientan esta llamado, y así ser parte del equipo organizador del movimiento. Quiero terminar con esto. Con mi equipo y compañeros estudiantes del Programa de Desarrollo de Liderazgo, organizamos un Congreso Evangélico Universitario, teniendo como objetivo formar y a ayudar al estudiante para que pueda definir su cosmovisión cristiana, inspirarlo a ser un emprendedor y motivarlo para pensar y actuar en el desarrollo de su comunidad. En este congreso tuvimos a muchas personas del Grupo Evangélico Universitario, tanto como expositores, asistentes y músicos. ¡Pido sus oraciones para seguir siendo dirigido por el Maestro de maestros! Ronal Cuxún Mendoza Admo. de Empresa UMG/ Salamá