Arbitraje

Arbitraje Internacional en materia energética II

María Yazmín Morlan Cahue

Edith Romero Juárez

Gabriela Maryela Román Domínguez

José Alberto Flores Barco

En cuanto al tiempo de desarrollo, el arbitraje internacional es muy irregular, pues existen una serie de variables que pueden llevar a que un proceso arbitral vaya de los 10 meses hasta los 36 meses, e incluso más. A continuación, se presenta un cronograma estándar, considerando que la solicitud de arbitraje se hubiera ingresado el pasado 04 de enero del presente año. Con base en lo anterior, el proceso arbitral prestado en este cronograma, conllevaría una duración aproximada de 303 días. Así, al considerar las diversas etapas del procedimiento y sin variables dentro del mismo, el arbitraje internacional concluiría el 03 de noviembre del 2021 con la emisión del laudo.

Ahora bien, en cuanto a costos y/o gastos, hay que considerar que atender una disputa en arbitraje, tiene un costo que debe cubrir los honorarios de los árbitros, y en su caso, el arancel administrativo, la cuota de la institución arbitral, los honorarios de los abogados y/o del tribunal arbitral, así como gastos administrativos. En un arbitraje internacional el 82% de los costos están relacionados con los honorarios legales, los honorarios de expertos y los costos de testigos. Así, los honorarios legales son el costo principal, mismos que pueden ir desde los 50 dólares hasta los 600 dólares por hora.

Un arbitraje internacional, en promedio, requiere entre 1,000 y 5,000 horas de trabajo, dependiendo de su complejidad. En casos de baja complejidad (menos de 2, 000 horas de trabajo legal) y en casos con pequeñas cantidades en disputa (menos de 2,000,000 de dólares) no se requiere de expertos, aunque puede no ser siempre el caso. Es importante considerar que, cada parte paga los gastos administrativos y los costos del tribunal por igual. Si un demandado se niega a pagar, no se escucharán sus contrademandas y el demandante debe asumir los costos del demandado, aunque luego podrá reclamar los gastos en el laudo, y la parte ganadora puede ser reembolsada en totalidad o con una parte significativa de sus costos legales.

A continuación, se presenta un ejemplo de costos y/o gastos en un arbitraje internacional: En el ejemplo que se presenta, la cantidad en disputa es pequeña y las horas de trabajo que se requieren de trabajo legal representan una disputa de baja complejidad, por lo que el costo total por Parte sería de 168,182 dólares. Sin embargo, debe considerarse que en algunos arbitrajes internacionales los gastos pueden ir en una media de 2.5 millones de dólares en cuanto a gastos, mientras que los laudos reflejan un costo de 9.6 millones de dólares. Conclusión El mundo se encuentra inmerso en una economía a escala global que generó mercados extranjeros, siendo en este sentido, un parteaguas la reforma energética, pues aún y cuando el arbitraje internacional ya era una figura conocida y aplicada en México, su desarrollo y ejecución en materia energética, así como su reconocimiento en contratos específicos, se hizo más evidente. El arbitraje internacional se ha convertido en uno de los MASC más desarrollados, con reglas y procedimientos más o menos claros, que varían de acuerdo con la normativa que se defina aplicar, con instituciones determinadas y tiempos establecidos, que pretenden contribuir a la solución de conflictos de un modo imparcial que se ha venido perfeccionando acorde a las necesidades, convirtiéndose así en una solución alterna eficaz y la opción más favorable para los inversionistas gracias a que el panel que se constituye para llevar a cabo la solución de un conflicto, adecúa sus funciones de manera imparcial. Sus ventajas se centran en la especialización, seguridad, imparcialidad y rapidez, así como la prevalencia del acuerdo de las partes en la definición de algunas de sus reglas como son la determinación del idioma, la normativa por aplicar y la nacionalidad de sus árbitros, por mencionar algunos, ello frente a los procedimientos judiciales públicos en cualquier Estado nación. No obstante, su principal desventaja para el comercio internacional, es justamente su aplicación, pues sería mejor no tener que acudir a él, particularmente cuando se vincula a proyectos energéticos, pues aunque su finalidad es resolver un conflicto; llegar a un conflicto, detiene su realización o ejecución. 2/2