Monasterios De EspaĂąa
Los monasterios en España constituyen un rico patrimonio histórico, artístico y cultural. Son testimonio de su propia historia religiosa y de la historia político-militar que se desarrolló tanto en la Edad Media como en tiempos anteriores, con la llegada y asentamiento de los visigodos. Los monasterios tuvieron un papel importante en la repoblación llevada a cabo por los distintos reyes y condes cristianos tras el avance de la Reconquista y el consiguiente retroceso de los musulmanes hacia el sur de la península. Su presencia en la península data de los primeros siglos del cristianismo, cuando la primitiva vida eremítica dio lugar a la formación de comunidades religiosas y a la construcción de pequeños monasterios hispanos en los siglos VI y VII. Durante la repoblación, muchos de estos edificios evolucionaron, o incluso fueron levantados de nueva planta, hacia un estilo que tradicionalmente viene llamándose mozárabe.[1] La segunda fase se desarrolló con la llegada de los benedictinos de Cluny, ya en época de Reconquista y a partir de ese momento fueron evolucionando o cambiando, de acuerdo con las nuevas órdenes: císter, órdenes militares, premostratenses, cartujos, jerónimos, agustinos, camaldulenses y mendicantes. En el siglo XVII tuvo lugar una eclosión de conventos situados o muy cerca o dentro de la ciudad.[2] Desde la actual Cataluña hasta Galicia fueron apareciendo conjuntos monasteriales de diversas dimensiones que se transformarían unos en edificios más importantes y consistentes y otros serían abandonados o destruidos. La mayor parte de los monasterios en España están distribuidos en la mitad norte en consonancia con el discurrir histórico de la zona en la Edad Media. Son mucho menos numerosos en el sur, Andalucía y Canarias.[3] La creación de monasterios durante la Edad Media fue primordial desde un punto de vista social y cultural así como para la repoblación. Supuso un gran avance en la agricultura y surgieron poblamientos en derredor de los grandes edificios. También se beneficiaron el arte y la cultura. Otro factor importante a tener en cuenta para la construcción de monasterios en España fue el Camino de Santiago, a lo largo del cual fueron surgiendo estas instituciones religiosas cuyo principal objetivo fue la ayuda al peregrino.
Monasterio de Yuste (Cรกceres)
Monasterio de San Isidoro (Santiponce – Sevilla)
Monasterio de UclĂŠs (Cuenca)
Monasterio de Nuestra SeĂąora de Alconada (Ampudia)
Atrio del Monasterio de las Claras (Tordesillas – Valladolid)
Cartuja de Miraflores (Burgos)
Monasterio de las Huelgas (Burgos)
Monasterio de Santa Maria de Carracedo (Leรณn)
Cartuja de Santa María de la Defensión (Jerez de la Frontera – Cádiz)
Santa MarĂa de la Piedad de Casalarreina (la Rioja)
Claustro de Monasterio de San Zoilo (Carrión de los Condes – Palencia)
Claustro Monasterio de San Vicente (Asturias)
Claustro del Monasterio de Piedra (Zaragoza)
Monasterio de Montehano en Escalante (Cantabria)
Monasterio de El Paular (Madrid)
Las Pelayas (Oviedo)
Monasterio de Santa MarĂa de Medina del Campo (Valladolid)
Monasterio de Irache (Ayegui -Estella – Pamplona)
Monasterio de Herrera (Burgos)
Monasterio de la Santa Faz (Alicante)
Monasterio de San Pedro el Viejo (Huesca)
Monasterio de Suso de San Millรกn de la Cogolla (La rioja)
Monasterio de Valvanera (La Rioja)
Monasterio de Sant Pere de Rodes (Gerona)
Monasterio de Montserrat (Barcelona) Vista desde Roca de San Jaume
Monasterio de Montserrat (Barcelona)
Monasterio de San Juliรกn de Samos (Lugo)
Monasterio de Santa MarĂa de Acibeiro (Pontevedra)
Monasterio de Bidaurreta (Oñati – Guipuzcoa)
Monasterio de Santa Clara (Palencia)
fin