Las siete iglesias del Apocalipsis: Introducción Pr. Oscar S. Mendoza Orbegoso Distrito Misionero “Lurín”
Asociación Peruana Central, Lima, Perú
Introducción Apocalipsis 1:9-3:22 registra una de las profecías más dramáticas e interesantes de la Biblia. El problema es que hoy se está discutiendo si es que la visión de las siete iglesias es profética, o solo fueron mensajes para los cristianos del primer siglo. ¿Realmente el primer septenario fue solo para el primer siglo? ¿Qué enseñanzas podríamos extraer de esta visión?
Aspectos básicos
Desde la isla árida de Patmos, donde Domiciano pensaba que había apagado para siempre por lo menos una antorcha de la verdad, surgió la más magnífica revelación de todo el canon sagrado, para derramar su divina luz sobre todo el mundo cristiano hasta el fin del tiempo.
Urias Smith, Las profecías de Daniel y Apocalipsis (Florida, CA: Publicaciones Interamericanas, 1949), 2:23.
Aspectos básicos El Apocalipsis fue escrito en el año 95 DC, en un contexto de persecución.
Juan fue desterrado a la isla de Patmos en el año 95 DC. Fue el emperador romano Domiciano (8197 DC) que lo encarceló. Este emperador ordenó que todo ser lo adorase, diciéndole “el César es Señor”, “Señor y Dios”. Domiciano
La isla de Patmos tiene una superficie de 34.6 km2, con una poblaci贸n de 2,500 personas.
Aspectos básicos Juan y muchos discípulos cristianos, decidieron adorar únicamente al Señor Jesús, y no al emperador.
Según la Tradición, parece que Juan fue arrojado a una cisterna con aceite hirviendo. Él salió, milagrosamente, sin quemadura alguna. A pesar de las persecuciones y de haber estado en Patmos, llegó a pastorear en Éfeso y morir naturalmente en el año 100 DC.
Aspectos básicos Estas siete cartas fueron escritas para siete iglesias principales de Asia menor.
Si bien es cierto fueron escritas para aquellas siete, aquellos mensajes debían ser leídos por todos los cristianos de aquel siglo.
Aspectos básicos El propósito principal de los mensajes a las siete iglesias es revelar el estado de cada una de ellas, y cómo Dios las pastorea.
Esta visión no fue dirigida solo para los creyentes del primer siglo, sino también para la Iglesia de toda la historia. Su naturaleza es profética, y revela al pueblo de Dios en siete etapas de tiempo, desde la primera venida de Cristo hasta su segundo retorno y de manera ininterrumpida.