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provocadorpoetatransgresorsituacionistacabalísticolídereruditosubversivorevoluciona
...soy sensible a lo bueno,
y más a lo hermoso, sensible a la sensibilidad...
José Antonio Maenza deja muestras de su marcada personalidad desde muy temprana edad. Con una gran inquietud por las artes y especialmente por el cine, a los 18 años abandona el círculo familiar y deja atrás Teruel, matriculándose en la Universidad de Zaragoza (Filosofía y Letras). El primer curso (1966-67) posiblemente le sirviera para tomar posiciones y plantear su campo de batalla. En el siguiente curso, pasaría al ataque. Participa en el boletín Cine, Ciudad y Universidad, Frente Cine Libre. Se dan a conocer sus collages, poemas y caligramas en la revista Más Margen. Forma parte en la antología dedicada a los nuevos poetas, Generación del 65, elaborada por Fernando Villacampa y Juan María Marín. Con Alejo Lorén, Emiliano Puértolas, entre otros, presenta películas en el cine club del Centro Pignatelli. Se introduce en foros artísticos e intelectuales como el de la librería Hesperia, fuente de referentes literarios y de pensamiento.
En 1967, junto con Lorén, amigo y compañero de clase, elaboran un curso de cine (La aventura de los realismos: introducción al cine como forma de expresión completa: para un entendimiento del cine independiente) financiado por el Departamento de Actividades Culturales de la Delegación de Alumnos de Filosofía y Letras. Dentro de este curso teórico se incluye un ejercicio práctico que daría como fruto: El lobby contra el cordero. Amigos, compañeros de clase y adeptos persuadidos por el turolense, conforman el Grupo de Cine Independiente, que en colectivo pero liderados por Maenza, llevarían a cabo esta aventura. El lobby... titulado inicialmente Händelequia, en su primer montaje rondaba las cuatro horas de duración. El metraje se iría reduciendo en revisiones posteriores a sus proyecciónes. En 1968 la película solo pudo verse de forma clandestina en Zaragoza y Madrid.
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ariomalditodrogadictogenialobsesivoamateurirreverenteegoístaprofetaesquizofrénico Un Líder en el Reino de Aragón
Maenza se centró su acción en tres ciudades: Zaragoza > El lobby contra el cordero (1967-68) Valencia > Orfeo filmado en el campo de batalla (1968) Barcelona > Hortensia / Beancé (1969).
En su ópera prima trazaría las líneas, conceptos e intereses, tanto estéticos como filosóficos, que maduraría en posteriores proyectos cinematográficos. Maenza crea un universo complejo, laberíntico y casi inabarcable, entendiendo el cine como un medio de expresión completa, un vehículo de finalidad transformadora donde tenía cabida la revolución, el marxismo, la ritualidad, la sexualidad, la liturgia, el Situacionismo, la representación, la improvisación, la performance, el happening... Todo ello desde una posición política y estética radical. ¿Cómo sería Maenza hoy? ¿Qué haría? Esta pregunta abre un juego de hipótesis cabalística, algo que seguro le agradaría. En este juego debemos ser conscientes que cualquier acercamiento a su pensamiento y a la interpretación de su obra, son meras aproximaciones y tentativas ante una propuesta poliédrica, polifónica y abierta.
El lobby... parte de un esbozo escrito donde traza las líneas conceptuales y estéticas, continua como guión mecanografiado añadiendo acotaciones y diálogos, el rodaje es su siguiente paso que supera al guión que le da pié, pasa a un nuevo guión que enriquece y añade caligramas, en los diversos montajes sigue reescribiendo la película y posteriormente elabora un texto añadiendo reflexiones que envuelven todos los pasos previos.
En 1969, desde Barcelona y en contacto con Pere Portabella para realizar Hortensia/Beancé, Maenza revisa por última vez El lobby... y queda el montaje que se puede ver a día de hoy. Sería una constante en su trabajo: revisar, reescribir, recomponer, una lucha permanente en el intento de que la obra siga viva y vaya más allá del marco en el que se crea.
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...riéndome como una mandrágora ante los técnicos del cine...
Desde esta posición rotundamente política, al igual que en Orfeo... utiliza las herramientas necesarias para obtener del sistema hegemónico, los recursos necesarios que posibiliten la película que a él le interesa. En este proceso teje las estrategias más convenientes para golpear al sistema en su objetivo de aniquilarlo. En El lobby... el empresario que financia la película, es engañado doblemente en un ejercicio de metaficción y détournement. Como personaje es traicionado en la pantalla y como productor, en la realidad.
“...película que solo persigue un resultado y solo se fundamenta en un factor: la contestación al material fotográfico pagado por el lobby. Se trata de conseguir que no diga nada cada escena...”
Uno de las prácticas preferidas de Maenza era desbordar el marco establecido entre lenguajes, formas y convenciones, en un juego que confunde la realidad y la ficción mientras atraviesa un entramado de capas y esferas. No se puede entender mínimamente su trabajo sin conocer su vida. En él son indisociables los conceptos de arte y vida, idea que lleva hasta las últimas consecuencias. Como confirma su amigo Enrique Murillo hablando de El lobby... una obra de arte total en la que cabía todo. Parafraseando a Mallarmé, podíamos decir que la vida existía para convertirse en una película. Su obra es un orden caótico con multitud de lecturas que parece no tener fin. Un ejercicio constante de desdoblamiento y desborde. Un gran poema de formas y sentidos, un collage hipersensible a cada nueva señal significante que puede surgir en el camino. Una deriva fértil que no cesa de gestar situaciones que transforman la realidad.
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Sentido de una realización automática: llamada desde el otro lado “El lobby contra el cordero” y desde este lado, “Financiación de un cocido del que solo quedan los posos”
El lobby contra el cordero es una precoz visión de Maenza que, a finales de los 60, adelantó formulaciones que en la década siguiente conmovieron Occidente. El grupo Pintura-pintura (Broto, Rubio, Tena) y Grupo Forma, podrían ser muestras cercanas de esa influencia, tanto a nivel formal como intelectual. Jiménez Losantos, quien conoció a Maenza y secundaba al grupo de Broto, Rubio y Tena en los años 70, lo certifica en su libro Lo que queda de España: “el empujón definitivo en la dirección telqueliana me lo dio el cineasta de vanguardia, también turolense, Antonio Maenza, cuya película Béance, de lacaniano título, era un mito en los ambientes artísticos, aunque nadie la había podido ver”.
La intuición y sensibilidad de Maenza le hicieron adelantarse a su tiempo. El malditismo, en muchas ocasiones cosechado, y una aureola de misterio creada a su alrededor, contribuyen a que Maenza siga estando vivo y en el contexto presente, nos sigue provocando e interpelando. Marc Martínez - Paola Marugán
El lobby contra el cordero forma parte del ciclo alô alô mundo! cinemas de invenção na geração 68, comisariado por Marc Martínez y Paola Marugán. alô alô mundo! cinemas de invenção na geração 68, se muestra en diversos espacios: Filmoteca de Catalunya (mes de julio) filmografías brasileñas. El Palomar: 16 mayo Hortensia/Beancé (J.A. Maenza) 23 mayo Manderley (J. Garay) HalfHouse: 22 mayo Orfeo filmado en el campo de batalla (J.A. Maenza).
Las citas y parte de la información han sido extraídas del libro: Maenza filmando en el campo de batalla, de Pablo Pérez y Javier Hernández, a quienes estamos eternamente agradecidos por rescatar a Maenza de las catacumbas.
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