1. De grande seré sacerdote Beato Santiago Alberione nació el 4 de abril de 1884 en Fossano (Cúneo) Italia, y fue bautizado al día siguiente en la parroquia San Lorenzo Mártir. A los dos años de edad su familia se trasladó a Cherasco, otro pueblito de Italia. En la escuela elemental, un día la maestra preguntó a los alumnos qué harían en el futuro y el pequeño Santiago de 6 años de edad dijo: “Yo seré sacerdote”, fue la primera luz vocacional, en adelante lo orientó todo hacia esa meta. Dios me eligió desde el seno de mi madre y me llamó para revelar en mí a su Hijo (Gál 1, 15-16).