El Alma Máter muestra el camino Página 11
SISTEMA DE COMUNICACIONES • http://almamater.udea.edu.co • almamater@udea.edu.co • ISSN 1657-4303
El mar: laboratorio universitario para la ciencia Página 14
La Madre Tierra en el aula de clase
Un biólogo congénito
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Foto cortesía del proyecto Ecourabaes
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Primer trasplante de órgano vivo en Colombia: 40 años después Por CAROLINA SÁNCHEZ
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n 1973, el Grupo de Trasplantes de la Universidad de Antioquia y el Hospital San Vicente de Paul llevó a cabo un procedimiento que para la época aún parecía lejano: el primer trasplante de órgano vivo en Colombia, mediante el cual un paciente con insuficiencia renal terminal recibió el riñón de un hermano. Los primeros pasos del grupo se dieron en 1962 cuando, impulsado por la cantidad de personas que morían de insuficiencia renal en el país, el hoy Hospital Universitario San Vicente Fundación creó la sección de nefrología y la unidad de diálisis, donde se trataban los pacientes. En 1970, el doctor Álvaro Velásquez, quien regresaba de la Universidad de Denver en Estados Unidos, donde estudió trasplantes de órganos, propuso al Consejo Directivo de la Universidad de Antioquia, en compañía de otros colegas, la creación de un grupo de trasplantes. Después de que se realizará el primer trasplante, el Grupo continuó la capacitación en la especialidad, con lo cual contribuyó a la creación de otros grupos en las diferentes regiones de Colombia. Los primeros 12 años el Grupo no cobraba honorarios, y solo hacia 1982 se organizó de tal forma que le permitió a sus integrantes dedicarse con mayor tiempo y posibilidades a él, explica el doctor Gonzalo Mejía
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otro de los fundadores de este grupo y actual director científico de la Clínica Las Américas. Desde entonces —explica Mejía— se ha avanzado no solo tecnológicamente, sino además en las competencias de los cirujanos y nefrólogos que ahora tienen mucha más experiencia en la seguridad de los procedimientos y el ajuste de los medicamentos inmunosupresores que debe tomar el paciente para evitar que el sistema inmunológico rechace el órgano trasplantado. Igualmente, se ha progresado en cuanto al número de procedimientos que se ejecutan en el país. Según el Instituto Nacional de Salud, durante 2012 se realizaron en Colombia 1.108 trasplantes de órganos, de los cuales 386 fueron en Antioquia, y 222 en el Hospital Universitario San Vicente Fundación, siendo así la IPS que más trasplantes realizó en el país durante este periodo. En el primer trimestre de 2013 se realizaron 243 en el país y 44 en este hospital. En cuanto a órganos, el trasplante de riñón sigue siendo el más realizado con 767 procedimientos durante el 2012, seguido del de hígado con 207 y el de corazón con 99. El Hospital Universitario San Vicente Fundación realizó el 24% de los trasplantes renales de ese año. Debido a que el trasplante aún es un tratamiento de alto costo las EPS le ponen freno a la autorización de estas intervenciones, explica Mejía. “Hacen una regulación donde se atiende solo un número de casos y los otros van quedando en la fila con el fin de
n cuanto a la polémica suscitada en el país por la atención a pacientes extranjeros con necesidad de trasplantes, cabe recordar que el decreto 2493 de 2004 prescribe que “la prestación de servicios de trasplante de órganos o implante de tejidos a extranjeros no residentes en el territorio nacional podrá efectuarse siempre y cuando no existan receptores nacionales o extranjeros residentes en Colombia en lista regional y nacional de espera”. Para el doctor Gonzalo Mejía esta decisión fue como una especie de retroceso, que se tomó en gran medida por las denuncias sobre irre-
Foto cortesía periódico El Colombiano
equilibrar sus presupuestos y no se desborden, lo que desde el punto de vista del manejo es razonable, pero no desde las expectativas de las personas y las posibles complicaciones que ocurren mientras se autorice”, dice. Al 31 de diciembre de 2012 estaban en la lista de espera para trasplante de riñón 1.120, 72 para hígado y 24 para corazón. Lo que equivale casi al número de trasplantes realizados ese año. Actualmente se siguen haciendo esfuerzos en todo el mundo para que el procedimiento de trasplantes sea cada vez más seguro para los pacientes. “El día en que se haga un trasplante y no necesitemos drogas inmunosupresoras que son costosas, sino
gularidades en cuanto a los trasplantes y tráfico de órganos. “Nosotros intentamos hacer ver que podían controlar y supervisar la situación pero no lo logramos”. Países como España tienen la misma legislación que pone los derechos de sus nacionales y residentes por encima de extranjeros. Explica Mejía que si bien “algunos países se definen por proteger los pacientes nacionales, en otros son conscientes que en los trasplantes hay un fenómeno muy especial” pues, explica, si por ejemplo un paciente en diálisis entró en lista de espera hace dos años pero no ha resultado un donante compatible no
que se haga con una genética e investigación correcta y ser capaces de saber porque se produce el rechazo de los órganos y evitarlo, será la felicidad de los pacientes”, explica Velásquez. Después de 40 años de haber realizado el primer trasplante de riñón en Colombia, Gonzalo Mejía piensa que la principal reflexión debe girar en “cómo hace tantos años se logró unir voluntades, conocimientos y trabajo en equipo para llevar a cabo una cosa que en este tiempo era poco común; y lo otro es todas las personas a las que hemos logrado salvar a lo largo de estos años no solo nosotros sino los que hemos formado en estas disciplinas y han continuado” concluye.
se puede trasplantar; en cambio, si una persona lleva dos meses en la lista y encuentra un donante compatible se le asigna el órgano. Por su parte, el doctor Álvaro Velásquez opina que lo más lógico es que se favorezca a los receptores en Colombia por encima de los extranjeros no residentes, sin embargo afirma que la legislación no ha solucionado el problema que tiene el país en cuanto a trasplantes de órganos, donde más de 10.000 pacientes mueren al año de insuficiencia renal terminal. En 2012 fueron trasplantados cuatro extranjeros no residentes en Colombia, 2 para corazón y 2 de hígado.
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Foto cortesía Parque Explora
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Estudiantes de Medellín y de municipios como Cañasgordas, Concordia, San Luis, Barbosa y Caldas pudieron conocer en detalle el quehacer de los científicos de la Universidad.
La Universidad acerca la ciencia a los bachilleres Por JOHANNA PINO QUICENO
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Foto cortesía Parque Explora
La idea es disfrutar con los investigadores, conocer más, concretar más nuestros proyectos”. “De esta visita uno espera saber qué estudiar cuando salga del colegio, abrir las expectativas, expandir nuestra mente, nuestros conocimientos”, dijeron Jorge Figueroa y Yasmín Tobón antes de ingresar a la Sede de Investigación Universitaria, SIU. Como ellos, 400 jóvenes de instituciones educativas de Antioquia compartieron un día de trabajo con los investigadores de la Alma Máter, tras su visita en septiembre a las instalaciones de la SIU, gracias al programa Explora la UdeA. Jorge Zuluaga, coordinador del pregrado en Astronomía, fue el encargado de abrir la jornada con una charla orientada a la motivación de los jóvenes por la investigación. En el encuentro, el vicerrector de Investigación Fanor Mondragón contó que en la SIU trabajan 36 de los 248 grupos de investigación que totaliza la Universidad de Antioquia, grupos que —añadió— han contribuido a la consecución de 24 patentes, producto de un arduo y prolongado trabajo. Las patentes, agrega Adriana
Foto cortesía Parque Explora
Echavarría, coordinadora del grupo de investigación Catalizadores y Absorbentes, “es un reconocimiento nacional e internacional al desarrollo tecnológico”. Este diálogo estudiantes-investigadores, promovido desde 2009, cuenta con el apoyo de la Alcaldía de Medellín, el Parque Explora y la Universidad de Antioquia. Según Pilar Aubad, coordinadora científica de la Feria
de la Ciencia, la Tecnología y la Innovación, en Explora la UdeA “permitimos este diálogo entre los científicos y los estudiantes de octavo a once para que ellos conozcan otras áreas del conocimiento, conozcan la investigación y a los investigadores y cómo es la dinámica” “Este lugar como tal me impresionó muchísimo porque yo pensé que era un tipo de sede de
literatura o filosofía de la de Antioquia pero es una cosa muy distinta, hay materiales radioactivos, hay de todo acá”, expresó Juan David Tobón Ospina del Colegio Loyola, al terminar el recorrido por los laboratorio. Explora la UdeA, sostiene Dora Ángela Hoyos, directora científica de la SIU, es motivador para los estudiantes, pero también para los grupos e investigadores “por la interacción con estos jóvenes que a futuro se pueden constituir en un semillero de investigación y posteriormente ser los científicos que requiere la sociedad”. En esta ocasión se vincularon municipios del Departamento gracias al respaldo de la Gobernación de Antioquia. “La experiencia y lo que nos dicen las vivencias de los años anteriores es muy linda porque los bachilleres terminan viéndose reflejados en los estudiantes e investigadores que hay en la SIU; ven la ciencia mucho más cercana y ven que ellos pueden ser también actores activos del conocimiento, que pueden generar conocimiento y pueden ser parte de toda esta dinámica de ciencia y tecnología en la ciudad”, afirma Pilar Aubad.
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Foto Luis Javier Londoño Balbín
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e había demorado la Universidad de Antioquia para contar con una sede administrativa en la capital del país fue una voz reiterada en el encuentro con la diplomacia y la dirigencia antioqueña que propició la institución en Bogotá el 25 de septiembre pasado, y en el que los más de cien asistentes no solo celebraron el anuncio del rector Alberto Uribe Correa relacionado con la casa que se está adecuando en el barrio La Soledad para estrechar los vínculos del Alma Máter con los capitalinos sino también el positivo balance que presentó el directivo. Uribe Correa calificó el encuentro como necesario y estratégico en los 210 años de la institución y señaló que dado que los egresados y la dirigencia antioqueña en la capital de la República pueden incidir en el Departamento y en la Universidad resultaba pertinente rendirles un informe pormenorizado sobre los avances en investigación, en formación en pregrado y posgrado, en el relacionamiento con la sociedad, en el bienestar universitario y en los aportes a los sectores sociales más desprotegidos. Del mismo modo, consideró vital enterar al cuerpo diplomático del devenir de la institución, en consonancia con la política y el proceso de internacionalización que adelanta desde hace varios años la Universidad. Asimismo consideró trascendental la casa adquirida en Bogotá como una ‘embajada’ que garantizará la presencia permanente del claustro, para fortalecer los lazos y
facilitar la proyección de la docencia, la investigación y la extensión en la capital. “He asistido con gran emoción a este acto, el informe del rector es satisfactorio, de una universidad con proyección nacional e internacional, con matrícula gratuita para estudiantes de estratos 1 y 2, con un excelente Comité UniversidadEmpresa-Estado”, manifestó el egresado de la Facultad de Derecho Javier Henao Hidrón. La Universidad, resaltó el exmagistrado del Consejo de Estado, ha evolucionado muy positivamente y “no mira solo a Medellín donde ha tenido su ámbito de acción durante mucho tiempo, sino que ya tiene proyección en todo el Departamento de Antioquia, con seccionales en las subregiones, y en el ámbito nacional e internacional; estamos orgullosos de la Universidad de Antioquia”, expresó Henao Hidrón. El también egresado de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas, el exgerente de la Federación de Cafeteros Jorge Cárdenas, manifestó la complacencia por el encuentro, “porque nos da la oportunidad de estar en contacto, de saber de primera mano los progresos y los programas que viene desarrollando la Universidad, y nos sentimos muy orgullosos de hacer parte de esa comunidad”. El egresado de la Facultad de Economía Jorge Valencia Jaramillo manifestó su gratitud con la insti-
Foto cortesía
“Estamos orgullosos de la Universidad de Antioquia”
tución por la educación que recibió y a la vez expresó admiración por la Universidad. “Nos representa muy bien a todos, por su labor en la docencia, la investigación, el compromiso con el desarrollo del país y la comprensión de que hay que tener integración total con el sector público y privado, que permite avanzar en la innovación y el cambio”, dijo el actual presidente del Consejo Nacional Profesional de Economía. La auditora general de la República, Laura Emilse Marulanda Tobón, no es egresada pero expresó que se siente como si lo fuera, no solo porque su hijo estudia Astronomía en la Alma Máter y sus hermanos “orgullosamente”, dice, han estudiado en el claustro, sino porque considera a la Universidad como patrimonio de los antioqueños. “Así no seamos egresados la sentimos como propia, nos sentimos muy orgullosos, y por lo mismo felicito al rector por la excelente gestión y por traer a Bogotá a la Universidad de Antioquia, con lo
cual le permitirá crecer y darse a conocer más”. El oficial de enlace de la Oficina de la Agencia de la ONU para los Refugiados, Acnur, Manuel Oviedo Herrera, destacó el papel que ha cumplido la Alma Máter con la población desplazada en Medellín y Antioquia, de la mano con los gobiernos local y departamental. “Para la Acnur en Colombia ha sido muy valiosa la relación que hemos mantenido con la Universidad de Antioquia, porque a través de sus diferentes facultades hemos logrado que profesionales en formación puedan prestar sus servicios a la población desplazada en programas que van desde el acompañamiento en la garantía de sus derechos por parte de los consultorios jurídicos de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas hasta las propuestas de urbanismo y soluciones de vivienda”, dijo, y agregó que la institución “allí está dando un avance muy importante para la construcción de la paz”. Por su parte, el embajador de Turquía Engin Yurur, al tiempo que expresó que siente mucha cercanía con la Universidad y que recientemente visitó la ciudad universitaria y se entrevistó con el rector Uribe Correa, informó que está en curso la firma de convenios con tres universidades de Turquía. Expresó, además, el interés de trabajar en el programa de Ciencias del Mar en Urabá, pues las universidades turcas —las principales son públicas— tienen mucha experiencia en el área, dado que el país cuenta con varios mares. Radu Sarbu, embajador de Rumania en Colombia, destacó que el encuentro le permitió conocer más los logros de la Universidad, si bien hace poco visitó a la Alma Máter y la UPB. Manifestó que lo que más le impactó fue el desarrollo científico de la Universidad, “que ha contribuido a que Medellín sea una ciudad innovadora”.
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La educación es vital para la democracia Por LAURA GARCÍA RESTREPO
Foto cortesía Relaciones Internacionales
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En la Secretaría General de la OEA creemos que una buena educación es un componente vital para fomentar el desarrollo económico, la equidad social y la seguridad en cualquier sociedad democrática; por lo que colaboramos con los Estados Miembros en sus esfuerzos por garantizar una educación de calidad y coordinamos una serie de programas educativos para brindar mayores oportunidades a los jóvenes y fortalecer la formación docente”, sostiene el director de Asuntos Internacionales de la Organización de los Estados Americanos Jorge Sanín, con quien la Dirección de Relaciones Internacional de la Universidad conversó a su paso por la institución. ¿En qué consiste la oferta de becas y pasantías de la OEA? —Actualmente tenemos el Programa de Becas Académicas de la OEA que se otorgan anualmente para maestrías, doctorados o investigación; el Programa de Becas Especiales para el Caribe
Angloparlante para los dos últimos años de estudios universitarios; más de 300 oportunidades de becas académicas para realizar estudios de maestría y de doctorado en universidades brasileñas y más de 600 para estudios de posgrado en ciencias e ingenierías en México. También tenemos las Becas OEA de Desarrollo Profesional que ofrecen oportunidades de capacitación y el Programa de Pasantías de la OEA que abre convocatoria tres veces al año.
¿Cómo ve a las universidades públicas en Colombia? —Consideramos que las universidades públicas han logrado avanzar en la calidad de la educación superior en un contexto donde cada vez son más competitivas académicamente, más inclusivas, tienen más estudiantes matriculados y con mayor retención en el sistema educativo, más graduados y más programas acreditados en alta calidad. El reciente informe de la organización Quacquarelli Symonds (QS) sobre las 300 mejores universidades de América Latina señala que 42 de éstas son colombianas y entre ellas, 16 son públicas. Estos resultados se basan en la reputación académica, la de los empleados, el número de profesores con doctorados, los trabajos de investigación y los artículos citados. ¿Cuáles son los retos de estas universidades? —Continuar fortaleciendo los programas de estudio, ampliar los presupuestos para proyectos de investigación, facilitar el acceso y las acciones afirmativas hacia grupos vulnerables, como los pueblos indígenas y los afrodescendientes; aumentar los programas acreditados en alta calidad y fortalecer
una alianza estratégica entre el sector público, el sector privado y la academia. De igual manera, fomentar la creación de centros de investigación que se enfoquen en los temas de la agenda interamericana, como desarrollo y reducción de la pobreza, y de programas que otorguen becas a estudiantes con un alto rendimiento académico. ¿Qué se puede hacer desde las universidades para aportar a los principios de trabajo de la OEA? “En la OEA estamos convencidos de que el trabajo mancomunado entre gobiernos, sociedad civil, universidades y sector privado fortalece el alcance de nuestros objetivos en materia de democracia, derechos humanos, seguridad multidimensional y desarrollo integral. Son varias las experiencias de exitosas de cooperación que hemos desarrollado con diversas universidades, las cuales nos han hecho aportes en asuntos como apoyo técnico, evaluaciones de impacto y factibilidad, difusión de los instrumentos del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, acompañamiento en terreno a nuestros programas, entre otros.
Foto cortesía Relaciones Internacionales
Alemania es el invitado a De país en país en octubre
Arte Espacio Alemania, la muestra de arte contemporáneo alemán con más de 40 obras que exhibirá el Museo Universitario a partir del 9 de octubre, dará apertura al programa institucional de la Universidad de Antioquia De país en país, en esta oportunidad con la República Federal de Alemania como invitado. No obstante, la agenda académica, científica y cultural que la Alma Máter
definió en conjunto con las instituciones germanas con presencia en Colombia se cumplirá del 21 de octubre al 1 de noviembre. La programación académica está compuesta por más de 40 conferencias y talleres sobre diversos temas dictados por invitados locales, nacionales e internacionales. También se celebrarán los 50 años de cooperación académica de la Universidad de
Giessen con Colombia y se realizarán foros sobre temas como el papel de la cooperación internacional en la construcción de paz en Colombia. Habrá tres días de feria científica en la Sede de Investigación Universitaria con la exhibición de pósteres sobre investigaciones colombo-alemanas y una serie de conferencias con investigadores de la Universidad, Colciencias, el Observatorio Colombiano de Ciencia y Tecnología y el Instituto de Capacitación e Investigación del Plástico y del Caucho. En De país en país, que coordina la Dirección de Relaciones Internacionales, también se llevará a cabo el foro Alianzas competitivas para el desarrollo sostenible, un encuentro con empresas alemanas que se realizará con la Andi en el marco del Comité Universidad-Empresa-Es-
tado, con la participación de Lufthansa, Siemens y Bayer. Además, Peter Gruss, presidente de la Sociedad alemana Max Planck, considerada referente mundial en investigación científica, visitará por primera vez a Colombia y ofrecerá una conferencia. Dentro de la agenda cultural se realizarán otras dos exposiciones de arte, un ciclo de cine alemán, un taller sobre memoria culinaria alemana, conferencias sobre cerveza artesanal y cerca de cuatro conciertos de música clásica alemana interpretados por la Red de Escuelas de Música de Medellín y la Orquesta de la Facultad de Medicina de Mannheim, Universidad de Heidelberg, Alemania. La programación, abierta a toda la ciudadanía, incluye también una completa agenda en Urabá, del 28 de octubre al 1 de noviembre.
Apoyan Embajadas de Alemania en Colombia y de Colombia en Alemania, Consulado de Alemania en Medellín, Gobernación de Antioquia, Alcaldía de Medellín, Servicio Alemán de Intercambio Académico, DAAD, Instituto Goethe, Normal Superior de Copacabana, Colegio Alemán, Fescol, Instituto Cultural Alexander von Humboldt, Asociación de Profesionales con Estudios en Alemania, ASPA, universidades Pontificia Bolivariana y Eafit, Andi, Colciencias, Icetex, Tecnnova, ACI Medellín, cervecerías 3 Cordilleras y Apóstol, festival gastronómico Maridaje, Bancolombia, Comfenalco, Bayer, Lufthansa, Siemens, Comité Universidad-Empresa-Estado, Ruta N, universidades de Giessen y Heidelberg en Alemania, Metro de Medellín, Deutsch Welle, Red de Escuela de Música de Medellín, Zenú.
Para conocer la agenda completa del programa De País en País ingrese a www.udea.edu.co/depaisenpais
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para dedicarle tiempo completo al emprendimiento. Mientras avanzaba el proceso de Bialtec, ellos crearon otra empresa, Edulcorantes Biotecnológicos, Ebiot. “Con esta nos movemos en el mercado de los jarabes glucosados, que tradicionalmente se han hecho a base del maíz. Brindamos una fuente alternativa para un gran mercado, pues la yuca, para esta aplicación específica, comparada con el maíz, tiene menor costo, mayor rendimiento, y más atributos de calidad”, asegura Agudelo.
Desde su creación, en septiembre de 2006, el Parque E trabaja en la promoción de la cultura emprendedora, como una opción para convertir ideas de negocio en proyectos empresariales exitosos, con perspectivas en mercados locales nacionales e internacionales.
Foto cortesía Parque E
Acompañamiento
Bialtec y Ebiot, ejemplos de emprendimiento en Parque E Por CARLOS PEÑA
Foto cortesía Parque E
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urante siete años, el Parque E ha fomentado la cultura emprendedora, ayudando a dar vida a 273 empresas con alto potencial de crecimiento y diferenciación, las cuales partieron de una iniciativa empresarial, y pasaron por un proceso de acompañamiento y asesoría profesional, en el que se consolidaron gracias al acompañamiento de un equipo humano, con conocimiento técnico especializado. Tal es el caso de Javier Mauricio Agudelo Rendón, ingeniero químico de la Universidad de Antioquia, quien llegó a Parque E con una idea de negocio, en busca de asesoría para hacer realidad su sueño, y al finalizar su ciclo, creó y consolidó dos empresas. Cuando Javier Mauricio realizaba su práctica universitaria como ingeniero químico, en 2008, conoció a Jorge Darío Rueda Ordóñez, ingeniero químico de la Universidad Nacional; cuando caracterizaban materias primas para la nutrición de animales se dieron cuenta del potencial de la yuca como endulzante y de su uso para otros fines. Tras un proceso de investigación, a partir de la yuca obtuvieron la materia prima para la producción de jarabes reemplazantes parciales del azúcar, los cuales brindan
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Javier Mauricio Agudelo Rendón y Jorge Darío Rueda Ordóñez, ingenieros químicos de la Universidad de Antioquia y de la Universidad Nacional. mayor calidad a productos finales como arequipe, helados, cerveza, entre otras aplicaciones en la industria de alimentos. Esta iniciativa dio lugar a la empresa Biotecnología Aplicada en Complementos Alimenticios, Bialtec. En el desarrollo enfrentaron dificultades, como la falta de credibilidad y de recursos financieros. En Parque E estos emprendedores recibieron asesoría para estructurar un plan de negocios, con el que participaron en diferentes concursos. “Parque E fue nuestro primer aliado, recibimos orientación para formalizar y estructurar nuestro proyecto empresarial; allí nos acompañaron en diferentes convocatorias, donde obtuvimos reconocimientos como el concurso Capital Semilla y Antójate de Antioquia, por dos años consecutivos, en 2010 y 2011”, destaca Javier Mauricio.
Bialtec ha participado en concursos de emprendimiento en El Salvador, Panamá, México y Venezuela. En 2011, fueron galardonados con el Premio Innovadores de América, realizado en República Dominicana, por su innovación en biotecnología aplicada en complementos alimenticios. “Con Bialtec creamos un alimento probiótico, que se produce a través del cultivo de células vivas, en el reactor Fortcell System, el cual patentamos. Con este reactor los ganaderos producen el complemento y alimentan sus vacas”, dice Javier Mauricio. El anhelo de crecer profesionalmente, la oportunidad del mercado, el potencial de la materia prima —Colombia es el tercer productor de yuca en América Latina y el Caribe— y la convicción, influyeron para que Mauricio y Darío renunciaran a sus empleos
Ser un emprendedor acompañado por Parque E, permite, entre otros beneficios, el acceso a financiación, formación en temas administrativos y financieros, asesoría legal, y relacionamiento con grandes compañías, a través de los comités de presidencia, que se constituyen en una oportunidad para que los emprendedores den a conocer sus iniciativas empresariales, y de esta manera los gerentes descubran cómo ellos, con sus ideas y desarrollos, pueden aportarle soluciones a su organización. Las empresas Bialtec y Ebiot encontraron en Parque E factores que se integraron para materializar un sueño empresarial. “Un emprendedor ve cosas que otros no, o quizás ellos las han visto pero no las han ejecutado, esa es la diferencia. Ser emprendedor es tomar acción y perseverar; además de pensar, es ejecutar y llevar a feliz término esas acciones, independiente de los obstáculos, y en la medida que adquiere logros, debe establecer nuevas metas, siempre racionales”, concluye el emprendedor. Otros casos de empresas basadas en conocimiento, lideradas por emprendedores de la Universidad de Antioquia son: Ecology Rubber, Enterdev, Tekvo, Rutech, Creación Estratégica, Aquaproject, Esprofin, Delta Climático, y Conocimientos y Servicios de Ingeniería - Conoser. En julio, Parque E y las universidades de Antioquia, Eafit y Pontificia Bolivariana, firmaron el convenio para desarrollar el nuevo modelo de emprendimiento para Medellín, y fortalecer las capacidades de emprendimiento de dichas instituciones. La directora de Parque E, Patricia Fuel, afirmó al respecto que “vemos la importancia de fomentar cultura emprendedora en los claustros universitarios para que si bien no todos se conviertan en empresarios, tengan una alternativa de cómo proyectarse profesionalmente en empresas basadas en conocimiento”. Los resultados del trabajo con la comunidad universitaria comprometida con este modelo, se podrán evidenciar en diciembre de 2013, cuando finalice la prueba piloto, realizada con el objetivo de crear nuevas empresas con alto potencial de crecimiento y diferenciación.
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Puntos clave del agro colombiano
Por SARA GIRALDO MAESTRE
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egún el Informe Nacional de Desarrollo Humano 2011–PNUD, en Colombia el 75% de los municipios son rurales, cubren el 94% de la superficie del país y en ellos vive el 30% de la población, razón de más para pensar que problemáticas como la concentración de la tierra, la ganadería extensiva, el modelo de desarrollo, la agricultura, el desplazamiento, los tratados de libre comercio y la restitución de tierras, estén en el centro del debate nacional. Debate que se avivó cuando en días recientes el DANE indicó que en el segundo trimestre de este año el sector agropecuario creció 7,6%, lo cual generó escepticismo entre analistas como Juan Manuel Ospina Restrepo, exdirector del Instituto Colombiano de Desarrollo Rural, Incoder, para quien no cuadran las cuentas porque “es indudable que el sector agropecuario está viviendo una situación muy crítica”. Para Ospina la situación crítica tiene que ver con la falta de preparación al sector agropecuario para los tratados de libre comercio, las condiciones de confianza y la no consolidación de la política de tierras de restitución, debido a las amenazas que se presentan a quienes reclaman sus propiedades. Por su parte, el director de la Consultoría para los Derechos Humanos y el Desplazamiento, Marco Romero Silva, sostiene que con la ley de víctimas el país ha tomado un camino pragmático y, por tanto, plantear que se resuelva la guerra primero para lanzar la restitución lleva a aplazar el tema y a que se consolide el despojo. Aun así, reconoce que es necesario hacer reformas rurales incluyentes para que los 5.2 millones de desplazados retornen, pues si bien las condiciones de seguridad influyen también lo hace la falta de oportunidades. “No podemos resolver el desplazamiento retornando a los desplazados a un modelo rural anacrónico”, expresa. La concentración de la tierra, es otro de los puntos clave, pues según el informe del PNUD el 52% de la gran propiedad está en manos del 1,15% de la población. “Como lo ha documentado el informe Colombia rural, el país tiene un
Foto Luis Javier Londoño Balbín
Juan Manuel Ospina Restrepo y Marco Romero Silva, fueron los invitados a la Cátedra de formación ciudadana Héctor Abad Gómez, el pasado 20 de septiembre.
índice Gini de 0,87, es decir es casi feudal”, dice Romero. Además, asegura que en el país solo se destinan 5 millones de hectáreas a agricultura y más de 40 a ganadería extensiva. Ospina observa que para definir cuáles son los modelos más apropiados es necesario reconocer y diferenciar la diversidad que caracteriza al campo colombiano, desde la geografía, la orografía, la cultura, los esquemas de poblamiento hasta el desarrollo de infraestructura. En ese sentido propone en primer lugar definir qué suelos y qué tipo de cultivos pueden funcionar en un esquema de gran extensión, cuáles en forma de pequeños productores asociados y cuáles en parcelas, eso sí, modernizadas.
Diálogos de paz Romero, quien respalda decisivamente el proceso de paz que se adelanta en La Habana, advierte que hay una ambivalencia del Gobierno cuando afirma que no está dispuesto a discutir el modelo económico. “Si yo digo que quiero discutir el modelo rural sin discutir el modelo económico es un contrasentido”, aunque dice que la transformación del modelo rural no va a depender solo del proceso de paz. Tanto Ospina como Romero destacan algunos puntos que se deben tener en cuenta en un posible escenario de posconflicto. Por ejemplo, Romero señala que si la paz avanza los gobiernos de las ciudades receptoras de población desplazada tienen que reaccionar y entender que muchas personas se van a quedar y que es necesario brindarles una formación, no solo primaria, sino técnica y universitaria para que sea posible que se vinculen a la dinámica laboral. Ospina, por su parte, expresa que el presidente Juan Manuel Santos entendió que la llave para abrir la puerta de la paz es la política rural. Aunque expresa que se trata de un problema complejo por factores como la ausencia de inventario de baldíos y de censo agropecuario, la informalidad en la tenencia de la tierra, la violencia, la debilidad institucional del sector agropecuario y el tema presupuestario. Finalmente, señala que hay que centrar la atención en cuál va a ser el futuro político de los dirigentes de la guerrilla, pero también cuál será el futuro económico y social de los otros miles de hombres que cargan fusiles, porque si eso no se atiende –dice– la violencia tiene una gran capacidad de mutación.
Jornadas internacionales de acceso a la información Entre el 10 y 11 de octubre se llevarán a cabo en el Auditorio 1 del edificio de Extensión las Jornadas internacionales de acceso a la información. Estas jornadas representan el avance y la continuidad del simposio “Acceso a la información”, del movimiento internacional del conocimiento, presentado en el II Congreso de la Internacional del Conocimiento, celebrado en Santiago de Chile en 2010. En enero de 2013 el simposio se celebró en el Congreso Ciencias, tecnologías y culturas. Diálogo entre las disciplinas del conocimiento. Mirando al futuro de América Latina y el Caribe, hacia una internacional del conocimiento. Y ahora, en Colombia, se avanzará en la reflexión interdisciplinaria sobre el acceso a la información, teniendo como ejes centrales la transparencia, la ciudadanía y la investigación científica. Durante el evento se presentará además el programa Profesional en Archivística que la Escuela Interamericana de Bibliotecología puso en marcha a partir del semestre 2013-I. Este programa, el primero en el país en impartir formación especializada de rango universitario, pretende “formar profesionales capacitados para gestionar documentos administrativos e históricos; preparados para desempeñar su labor con base en principios y valores éticos; consciente de la responsabilidad de salvaguardar el patrimonio documental y la memoria de la nación, a través de la aplicación de políticas nacionales, en cumplimiento de las normas legales”. El libre acceso a la información –observan los organizadores de las jornadas– se plantea como un reto para la consolidación de la democracia. El reconocimiento del derecho es un avance, pero queda pendiente el fortalecimiento de las capacidades del Estado, del compromiso de las organizaciones de la sociedad civil, de los medios de comunicación, entre otros, para la promoción y garantía del derecho a la información. La inscripción se puede realizar mediante la plataforma reune.udea.edu.co. Informes en el teléfono 2195930 y en el correo electrónico: mbetancur@ bibliotecologia.udea.edu.co
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Por CAROLINA SÁNCHEZ
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as movilizaciones de diferentes sectores agropecuarios, mineros y de transporte que paralizaron el tránsito en gran parte del país e impactaron la economía durante casi un mes, deja varias preguntas en cuanto a los medios para mostrar y exigir soluciones a las problemáticas. ¿Cuándo y por qué se vuelve legítima la protesta? ¿Hay garantías para hacerlo? La protesta, explica el profesor del Instituto de Estudios Políticos William Freddy Pérez, “es una expresión de una insatisfacción que no siempre tiene que ser violenta, puede ser pacífica, entre pacífica y violenta, muda, ruidosa, pero siempre tiene que ser visible”. La legitimidad de estas movilizaciones y las acciones que se llevan a cabo durante estas, afirma Jaime Granada Vahos, profesor del Instituto de Estudios Políticos, se pueden dar bien sea por la Constitución donde caben los mecanismos plegados a la legalidad o que en su defecto no están configuradas como ilegales; o las que por la dinámica misma del movimiento se adaptan a la cultura y son legitimadas por las comunidades o la sociedad en general. Por esto, si en una sociedad la violencia es condenada la protesta se puede volver ilegítima, aunque hay sectores que pueden deslegitimar una marcha, y legitimar la violencia. En Colombia por ejemplo, la violencia tiene una connotación muy negativa, por lo que se hace ilegitima por el contexto mismo del país, explica Granada. Sin embargo, en países como Francia y Bolivia comúnmente las protestas tienen un carácter más violento, y hay cierta tolerancia a esas formas de protesta. Para Pérez, la percepción general de que una situación es justa le otorga legitimidad. “Es la fuerza de los hechos lo que hace que las personas crean que algo es justo, argumentado, comprensible”, asegura. “Legítimo es que hay consenso frente a él, que se le reconoce como correcto, valorable, adecuado, masivo. Hay otras maneras de legitimar por medio de los argumentos en las protestas pequeñas”. Por esto, afirma que “una protesta como la pasada que agregó tantas demandas de tanta gente tan distinta durante el mismo tiempo y apuntando al mismo lugar: un
Foto cortesía Camilo Rios Mejía
Panorama de la protesta en Colombia modelo económico, un gobierno desacertado, entre otras, genera la percepción de legitimidad, por eso el sujeto al que se le reclama atiende rápidamente”. ¿Hay garantías para protestar en Colombia? Jaime Granada considera que hay garantías para protestar en Colombia pues constitucionalmente es un estado social de derecho, lo que facilita mucho la protesta, pero, explica, “tampoco se puede desconocer que no todas las poblaciones tienen el mismo acceso a los derechos y en esa medida al derecho a la protesta, no todo el mundo tiene las mismas facilidades, recursos”. Por su parte, Pérez afirma que se debe diferenciar entre las garantías legalmente vigentes en el orden jurídico, es decir el derecho a protestar, y las garantías de hecho. “En un país de estos, esas garantías de hecho son precarias, en parte porque las autoridades confunden el desorden físico con atentados de orden público, y ese problema de orden público es atendido por personas que están entrenadas en actividades de choque y no en actividades de control de protestas públicas”. De esta manera, asegura, la fuerza pública debe acompañar las movilizaciones para defender a los protestantes de los de afuera, y no al contrario, pues “los que
protestan generalmente molestan a gente que no protesta”. Igualmente quienes protestan también viven en un país donde el choque es un dato de realidad y por tanto en muchas ocasiones no permiten que las fuerzas policiales los protejan porque desconfían de ellas, afirma Pérez. “De hecho, se puede mostrar que muchas de las protestas que no podrían calificarse de violentas derivaron en violencia a partir de un ejercicio de desconfianza, es decir, ciertas paranoias que hacen ver en cualquier levantada de voz o cualquier carrera es un inminente atentado contra personas y bienes”. Explica Granada que, constitucionalmente “el acompañamiento de la policía a una protesta no es solamente para atacarla, y de hecho cuando uno ve estas marchas autorizadas sobre todo en la ciudad la policía acompaña la protesta”, asegura. “El papel de la fuerza pública finalmente es permitir el derecho a la protesta, pero ya cuando se convierte en actos de violencia ¿qué hacer? La policía tendrá que intervenir ¿hasta qué punto? ¿Afectando a quiénes? ¿Limitando qué?’”. Para el profesor de la Universidad Nacional Darío Acevedo, el papel de la fuerza pública es “evitar los hechos de violencia y controlar a grupos pequeños de activistas o agitadores que se parapetan en las
protestas para realizar actos contra la fuerza pública, bienes públicos y del Estado, entre otros”. Pérez considera que hay experiencias en otros países en los cuales se protege la manifestación, y donde la fuerza se usa como último recurso. “Esos manuales de uso de la fuerza por la fuerza pública se respetan y si no se respetan se sanciona fuertemente. Por ejemplo en España un policía desenfunda un arma y al otro día está destituido”. Por su parte, Granada afirma que “es cierto que se han presentado acciones violentas, pero si bien fueron las más cubiertas por los medios, no necesariamente han sido las más numerosas”. Finalmente, las protestas que vivió el país el mes pasado, y que aún no terminan totalmente en todas las regiones, piensa Acevedo que es normal que se presenten, pues “es natural que la gente exprese sus cosas, pues eso es consustancial con una democracia y no hay por qué tenerle temor”. Lo que habría que entrar a evaluar entonces, no es solo los mecanismos que se utilicen para protestar, sino a su vez el papel de los actores a los que se dirigen las demandas para ofrecer soluciones oportunas a las problemáticas, y tal vez así evitar que las insatisfacciones alcancen una magnitud como la tuvo el paro agrario.
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Actualidad de una pedagogía de la memoria en Colombia Por GABRIEL JAIME MURILLO ARANGO
La verdadera crisis es el olvido absoluto, la noche carente de sueño: sin embargo, ahí no hemos llegado todavía —Imre Kertész—
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ún en medio del intenso conflicto armado que ha azotado a Colombia durante decenios, a partir del 9 de abril de 2012 se conmemora el día nacional de la memoria y la solidaridad con las víctimas, al amparo de la Ley 1448 de 2011 conocida como Ley de Víctimas y de Restitución de Tierras. Su promulgación señala ya un punto de inflexión política que conjuga la rememoración del duelo por las víctimas de ayer y el de las víctimas de hoy, con la intención manifiesta de despojar esta fecha de su original sello partidista y proyectar un horizonte de expectativa abocado al deber público de memoria. El carácter polisémico de la efeméride se abre a la vez a múltiples formas de resistencia social y al cambio generacional, pues se trata de una convocatoria especialmente dirigida a la juventud que ha crecido a espaldas del bipartidismo tradicional y en medio de conflictos de naturaleza distinta, con otros discursos y otros rituales políticos, en cuyas manos se pretende depositar la esperanza de poner fin a la guerra interminable. No obstante el buen juicio de los legisladores comprometidos con el deber de memoria, se mantiene la pregunta acerca de por qué el tema histórico nacional por antonomasia, como es este de la violencia, no es tema de diálogo en las aulas de clase, antes bien es un capítulo elusivo en las clases de ciencias sociales o de ética y formación ciudadana del currículo oficial. Las sucesivas generaciones de colombianos que han crecido y se han hecho maduras a lo largo de más de cincuenta años aturdidas por los bombazos del terror, las oleadas de campesinos pobres desplazados forzosamente a las ciudades, el secuestro, el miedo, no han sido educadas en el ejercicio de la memoria histórica, no han contado con espacios en la escuela para hacer frente al rostro sombrío de un duelo colectivo. Plantear la pregunta revela una disparidad palpable entre los distintos órdenes de producción de memoria. Es así como se puede constatar una notable producción social reflejada en la proliferación de lugares de memoria en la geografía nacional, la fundación del Museo Nacional de Memoria, las iniciativas populares de variada especie, como también en las artes, el cine, la narrativa testimonial. En el orden de la producción jurídica y política tardía expresada
Las sucesivas generaciones de colombianos que han crecido y se han hecho maduras a lo largo de más de cincuenta años aturdidas por los bombazos del terror, las oleadas de campesinos pobres desplazados forzosamente a las ciudades, el secuestro, el miedo, no han sido educadas en el ejercicio de la memoria histórica, no han contado con espacios en la escuela para hacer frente al rostro sombrío de un duelo colectivo.
en los esfuerzos de la institucionalidad legal por la restitución de la dignidad, los derechos y los bienes de las víctimas, sus resultados no pocas veces nos hacen pensar con el deseo de que se trata de una marcha lenta pero segura. Y, no obstante, comparada con los logros de los órdenes señalados, la producción pedagógica de memoria es todavía una asignatura pendiente en la vida nacional. Los mejores avances, ciertamente, corren a cargo del Centro Nacional de Memoria Histórica, cuya misión consiste en elaborar una narrativa integradora e incluyente sobre el conflicto armado interno con opción preferencial por las memorias de las víctimas y los desaparecidos. Una narrativa capaz de reconocer la indisociable relación existente entre memoria y democracia, que es también en sí misma una forma de justicia, en la medida en que plantar cara al silencio y al olvido implica dar cuenta de un pasado de violencia como un asunto que trasciende el ámbito de historias de vida individuales, para configurar un espacio público que puede y debe ser cargado de sentido en los rituales del reconocimiento social, en los procesos judiciales y en las reparaciones que correspondan. Las arduas investigaciones emprendidas a lo largo de cinco años sobre los llamados “casos emblemáticos”
del horror de la guerra contemporánea recién han coronado con la publicación del informe general titulado Basta ya! Colombia: memorias de guerra y dignidad. No es de sorprender que en los avatares de la guerra en Colombia, como en cualquiera otra guerra pasada y presente, también se asista a una transferencia del duelo en los campos de batalla al campo de los discursos y las memorias. Como demuestra Tzvetan Todorov, en este juego del control de la memoria los guerreristas no cejan en recurrir a los más horrendos procedimientos: la desaparición de las huellas, por la vía de convertir en polvo los cadáveres, los hornos crematorios, la quema de archivos; la intimidación y la prohibición de recibir y transmitir información; el uso de eufemismos; la mentira sistemática, el encubrimiento, la propaganda a través de todos los medios masivos de comunicación. Reivindicar una narrativa de los vencidos se opone a la idea del deber de memoria, entendido como un precepto categórico anudado a un relato de recuerdos inalterados que portan un mismo sentido para todos, presa fácil a la vez de la sacralización y la banalización, nada más ajeno a la posibilidad humana de habitar la memoria como experiencia del tiempo. Así, el empeño del trabajo pedagógico de la memoria no es tanto la esencia o la sustancia del ser idéntico sino la indagación por las circunstancias o las contingencias, no es tanto la identidad como el proceso de identificación, es decir, cómo hemos llegado a ser lo que somos y cómo podemos vivir. La agenda temática del 2° Simposio internacional de narrativas en educación: Historias de vida, infancias y memoria —organizado por la Facultad de Educación de la Universidad de Antioquia en el Auditorio Fundadores de Eafit del 9 al 11 de octubre 2013— tiene como finalidad considerar la vigencia histórica de una pedagogía de la memoria y del testimonio como una respuesta incondicional al otro, sin esperar nada a cambio, ajena a toda noción mezquina de utilidad. Una pedagogía de la memoria asume el desafío de hacer frente al juego de tensiones y relevos de una época caracterizada paradójicamente por el “boom de la memoria” y una cultura del olvido, que imprime su matiz propio a los trabajos de memoria histórica desarrollados en un país como Colombia azotado por una guerra prolongada.
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La entrega de los premios será el 29 de noviembre, en el Teatro Camilo Torres, a las 6:30 p.m.
• También serán galardonados en la edición 45 de los Premios Nacionales de Cultura Universidad de Antioquia 2013 el periodista Ricardo Enrique Abdallah Camacho, ganador del premio en literatura, categoría cuento, y José Guillermo Martínez Rubiano, ganador del premio en artes, modalidad música.
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Es muy difícil equivocarse al escoger entre quienes ya tienen una trayectoria avalada por los años, la crítica, los espectadores de la cultura y los discípulos. Porque aquí tiene sentido hablar de Maestros”, conceptuaron los jurados del 14° Premio Nacional de Cultura por Reconocimiento, al seleccionar entre 19 postulados a Totó La Momposina —Sonia Bazanta Vides— como merecedora del galardón. “Su nacimiento en Taligua — dice el jurado integrado por Paula Marcela Moreno Zapata, Pascual Gaviria Uribe y Edgar Rey Sinning—, en medio de la isla sobre el río Magdalena, esa isla a la que el curso de la historia le hizo un quite, es una metáfora que puede explicar por qué Totó decidió dejar la orilla del río para llevar su música y su tambor hasta Bogotá”. “En el río —agregan— saben que los cantos perduran porque se repiten como un murmullo, porque algunos deciden buscarlos como si fueran parte de un llamado. Totó La Momposina sacó la música de su pequeño rincón y terminó siendo referente de la música tradicional e ingrediente imprescindible de eso que llamamos lo nuestro, cuando de bailar y cantar se trata”. De acuerdo con quienes la postularon al Premio Nacional de Cultura por Reconocimiento, Totó La Momposina se interesó por la música y aprendió los bailes tradi-
Foto cortesía periódico El Colombiano
Totó La Momposina, Premio Nacional de Cultura por Reconocimiento
Sonia Bazanta Vides, conocida como Totó La Momposina, fue elegida como la ganadora del 14° Premio Nacional de Cultura por Reconocimiento, un premio a toda una vida consagrada al arte.
cionales del Caribe desde pequeña. En 1974 se dedicó a la música de manera profesional. Estudió en el Conservatorio de la Universidad Nacional de Colombia. En París estudió historia de la música, coreografía y ritmo en la universidad de La Sorbona y más tarde adelantó estudios sobre bolero en Cuba. Investigadora incansable, ha recorrido centenares de pueblos de la costa Atlántica colombiana en busca de leyendas, tradiciones, instrumentos, ritmos y canciones que incorpora en su repertorio, por lo que se la considera antropóloga empírica por un lado y por el otro académica de la música. Los especialistas consideran a Totó La Momposina una de las mejores en su género, por la vitalidad y espontaneidad en sus presentaciones y por sus mezclas de ritmos indígenas, de los esclavos africanos y de los ritmos provenientes de España, todos los cuales se encuentran presentes en la isla de Mompox.
Premio de literatura El ganador del 30° Premio Nacional de Literatura, modalidad cuento, fue el periodista colombiano radicado en Francia, Ricardo Enrique Abdallah Camacho, con el trabajo Libro II. El sol es siempre igual. El jurado, integrado por Julio Alberto Paredes Castro, Andrés Mauricio Muñoz Chaparro y Fedosy Santaella Kruk, resaltan del libro de cuentos “una voz narrativa
clara, una sicología que sostiene un mundo particular y enigmático dentro de un entorno cotidiano y siempre verosímil”. Añaden que se trata de un el libro “que logra el equilibrio entre la anécdota y la manera personal de recrearla. Es una propuesta que sobresale por la capacidad de disponer elementos y detalles narrativos en cada una de las historias y en el conjunto”.
Premio de artes José Guillermo Martínez Rubiano ganó el 9° Premio Nacional de
Artes, modalidad música, con la composición Mutaciones 1, para orquesta sinfónica. El balance entre lo musical y lo técnico, “además de un interesante uso sincrético de la música tradicional colombiana”, fueron razones suficientes para que el jurado le otorgara el reconocimiento. “La notación de la obra es directa, consiguiendo una sonoridad atractiva y contextualizada en su época”, agrega el jurado integrado por Víctor Hugo Agudelo Ramírez, Adolfo Enrique Hernández Torres y Moisés Bertrán Ventejo.
“Recibimos propuestas de buena parte de los departamentos del país, pero también de colombianos residentes en Francia, Bélgica, Venezuela y Estados Unidos, lo que muestra que los premios siguen teniendo un buen nombre y resonancia tras 45 años de convocatorias ininterrumpidas”, dijo María Adelaida Jaramillo, jefa del Departamento de Extensión Cultural de la Universidad de Antioquia, cuando se dieron a conocer los ganadores el 20 de septiembre. Este año se postularon a la convocatoria 124 obras, de las cuales 102 cumplieron los requisitos del reglamento. Al 14° Premio Nacional de Cultura por Reconocimiento fueron postuladas 19 personas. En el 30° Premio Nacional de Literatura, modalidad cuento, se evaluaron 65 propuestas, 17 en el 9° Premio Nacional de Artes, modalidad música, y 1 en el 10° Premio Nacional de Comunicaciones, modalidad medios digitales, a la postre declarado desierto.
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Incidencia de la Universidad en Urabá Por DIRECCIÓN DE REGIONALIZACIÓN
y culturales, convirtiéndose en parte fundamental del quehacer sociocultural de los municipios que forman la subregión, sobretodo de la zona central o eje bananero. El estudio señala que se han dado avances importantes, en especial en lo que respecta a la docencia, sin embargo reconoce la importancia de incrementar el recurso humano y profesional situado en la seccional y consolidar los proyectos de infraestructura que están en curso, como la nueva ciudadela universitaria en Apartadó, la segunda fase de la Sede de Ciencias del Mar y las reformas de la Sede de Estudios Ecológicos y Agroambientales que permitan ampliar y diversificar los proyectos allí presentes. La Alma Máter ha construido relaciones con actores del sector productivo de la subregión, como el bananero, que genera la mayoría de los empleos formales (cerca de 15 mil empleos directos y 40 mil indirectos) y ocupa buena parte de la tierra fértil de la subregión (cerca de 32 mil has.). Con éste sector se han desarrollado diversos convenios, cuyo propósito central es aportar al proceso de tecnificación y diversificación pro-
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En lo económico La presencia de la Universidad en Urabá le ha significado a la subregión disponer de nuevas oportunidades de formación profesional, técnica, tecnológica y educación continuada, así como desarrollos tecnológicos, sociales
Foto cortesía del proyecto Ecourabaes
nte la necesidad de identificar la incidencia que la Universidad de Antioquia ha tenido en los territorios donde se ha asentado y proyectar las estrategias para la próxima década, la Dirección de Regionalización encargó en 2012 al Instituto de Estudios Regionales —INER— y a la Facultad de Educación identificar los aportes que la presencia de la institución ha generado en los procesos de desarrollo de dos subregiones del departamento, una de ellas Urabá. Para comprender el entorno de actuación del Programa de Regionalización se tomaron las seis dimensiones del desarrollo territorial empleadas en los diagnósticos subregionales del Plan Estratégico de Regionalización (2002), reorganizándolas para las condiciones del estudio actual, así: económico-ambiental, sociopolítica y educativo cultural. Del mismo modo, se problematizó el análisis a través de seis preguntas que indagaron por el quehacer de la Universidad en aspectos estratégicos para el desarrollo subregional como la comprensión y solución de los problemas el territorio; la contribución a la reducción de la inequidad; la promoción de las potencialidades endógenas; la producción, circulación y socialización de nuevos conocimientos para las subregiones; el fortalecimiento interinstitucional, las interacciones y alianzas con sectores estratégicos, y la incidencia del Programa en emprendimiento, innovación e internacionalización. Los siguientes son los hallazgos en Urabá:
ductiva a través de la formación de diferentes profesionales, técnicos y tecnólogos que han liderado estos procesos en la subregión. De otro lado, la presencia de los programas de Ingeniería Agropecuaria e Ingeniería Acuícola y de sus egresados aporta a la tecnificación de las actividades (diferentes al banano), propicia su sostenibilidad en el tiempo y las hace más competitivas en los mercados. Su pertinencia para Urabá se refleja en que el 62% de los egresados de Ingeniería Acuícola y 78% de Ingeniería Agropecuaria ejercen allí su profesión.
En lo ambiental De acuerdo con lo evidenciado en el estudio, la Universidad de Antioquia ha hecho una contribución significativa a la subregión en temas ambientales, desde sus diferentes actividades misionales, especialmente en docencia y extensión, lo cual está acorde con el momento en que se encuentra la estrategia de Regionalización de posicionar y consolidar la Universidad en las diferentes subregiones del departamento. Al ser lo ambiental una dimensión tan estratégica para el desarrollo
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de Urabá y dada su característica biodiversa y la consiguiente contribución a la sostenibilidad nacional, se reconoce que es fundamental lograr mayores desarrollos en la investigación, para lo que se prevé que la consolidación de la Sede de Ciencias del Mar, la apuesta por fortalecer el abordaje del agua como recurso estratégico y el capital humano que se está localizando en la subregión, van a propiciar una dinámica académica más enérgica. Se destaca que a través de los programas de formación profesional relacionados con el medio ambiente, la Universidad de Antioquia está formando profesionales enfocados en el conocimiento de los ecosistemas, la valoración y cuidado de los recursos naturales de la subregión y está contribuyendo a comprender los problemas de degradación y pérdida de los recursos naturales. La necesidad y pertinencia de este tipo de profesionales en Urabá se refleja en el mercado laboral; se calcula que aproximadamente el 94% de los egresados de Ecología en Zonas Costeras y 86% de los de Tecnología en Ecología y Turismo laboran en la subregión.
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En lo cultural Frente al desconocimiento y poco reconocimiento de la diversidad y riqueza cultural de la región, la Universidad ha promovido proyectos de extensión e investigación que reconocen las prácticas e identidad de comunidades locales que buscan su preservación y memoria. Además, se han generado espacios para el fomento, capacitación y potenciación de competencias artísticas, así como para dinamizar procesos y actividades artísticoculturales, al igual que espacios para la divulgación de sus obras, costumbres y diversidad cultural. En la oferta formativa, se han diseñado programas propios para la región, que fortalecen su vocación, como Gestión Cultural, Tecnología en Artesanías y Antropología. De manera particular se reconoce el programa Pedagogía de la Madre Tierra, ya que con el mismo se contribuye al desarrollo cultural múltiple y diverso y se hacen esfuerzos por incorporar la sabiduría tradicional.
En lo educativo La presencia de la Universidad ha permitido aportar a la construcción de un proyecto educativo subregional en consonancia con el entorno y ha coadyuvado al mejoramiento de la calidad de la
educación, tanto para los niveles básico y medio con el desarrollo de programas especiales para fortalecer competencias de los estudiantes, como con la formación de formadores y la articulación y reflexión con directivos y docentes del sector educativo. Por otra parte, se ha acercado a los habitantes al conocimiento de su propia realidad, fortaleciendo y adecuando el área de investigación educativa y elevando el conocimiento de situaciones relacionadas con la educación, el acto educativo y los educadores. Esto se ha dado a través de la ejecución de proyectos de investigación de estudiantes y docentes, la conformación de semilleros, el esfuerzo constante por promocionar la investigación entre estudiantes de la educación media y la investigación formativa en los programas ofertados.
Retos Si bien los avances en el proceso de posicionar y consolidar la Universidad en las regiones están a la vista, aún es necesario dar pasos más firmes para “crear universidad en las regiones” (tercera etapa planteada en el Plan Estratégico de Regionalización 2003). Para ello será fundamental articular académicamente la seccional, localizar
grupos de investigación en el territorio y crear posgrados. Del mismo modo, es necesario democratizar el acceso a la educación superior en Urabá, mediante la descentralización de la matrícula. En este sentido es imperativo reforzar las acciones de corte subregional que busquen cubrir e incluir la totalidad del territorio, adelantar proyectos de bienestar universitario que atraigan y mantengan a los estudiantes de las otras zonas, diseñar métodos alternativos de llegar a la población distante del centro subregional, entre otras acciones. También se propone continuar desarrollando el programa Ciencias del Mar, dado que es el proceso más estratégico que adelanta la Universidad en Urabá, ampliando y profundizando su oferta educativa e investigativa, así como las alianzas internacionales pensando en el beneficio de la sociedad subregional. Por último se plantea mantener en el tiempo y fortalecer las actividades y las alianzas con otras instituciones que la conectan con el sector terciario de la economía, pues presentan un alto potencial y propenden por un desarrollo incluyente y sustentable.
Validación En el primer semestre de este
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año, el Instituto de Estudios Regionales —INER— y la Facultad de Educación entregaron a la Dirección de Regionalización el informe final del estudio para que fuera puesto a consideración de la comunidad universitaria, en un ejercicio de validación y retroalimentación. Del mismo modo, se diseñó una estrategia de socialización que implica la realización de talleres y conversatorios con grupos de interés en el ámbito universitario. Actualmente se han llevado a cabo seis talleres en los que distintas instancias y actores han expresado sus percepciones y opiniones sobre los resultados del estudio y, en general, sobre la incidencia de la regionalización en el desarrollo subregional. Tales aportes alimentarán el informe final que se convertirá en insumo para seguir fortaleciendo la presencia, pertinencia y fuerza de la Universidad en las regiones.
Los elementos abordados en este artículo fueron retomados del informe “Incidencia del Programa de Regionalización de la U. de A. en los procesos de desarrollo de Urabá y Oriente. Dirección de Regionalización, Instituto de Estudios Regionales –INER– y la Facultad de Educación. Medellín, febrero de 2013”.
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Nº 624, UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA Medellín, octubre de 2013
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La educación superior, eje central en la gerencia de Urabá Por LUIS JAVIER LONDOÑO BALBÍN
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n los ejes básicos y transversales que contempla el proyecto regional integral para el desarrollo de Urabá —región sostenible en lo ambiental; industrial, agroindustrial y portuaria; conectada y accesible; socialmente responsable; legal y con gobiernos locales fuertes—, la educación superior ocupa un lugar preponderante. Y no es para menos. El eje se aviene con Antioquia la más educada, el eslogan que caracteriza el programa que impulsa el gobierno departamental, y resulta, como lo ha señalado el rector Alberto Uribe Correa, tanto o más estratégico que las dobles calzadas que se proyecta construir, por cuanto en la educación y el conocimiento se cifra, en últimas, las opciones competitivas del país. El gerente para el desarrollo integral de Urabá, Federico Restrepo Posada, explica que el foco puesto en la zona por el gobierno de Sergio Fajardo Valderrama responde a las oportunidades que allí se vislumbran pero también a los problemas que arrastra, al punto que es una de las regiones, con el Nordeste y el Bajo Cauca antioqueño, en situación más precaria y con los indicadores de desarrollo más bajos. “La forma más eficaz de generar e inducir el desarrollo es empezando por las regiones que tienen los indicadores más precarios”, dice, y asegura que el beneficio marginal de invertir un peso en una región en una situación de pobreza extrema es mucho mayor que si se hiciera en una con indicadores de desarrollo superiores. De ahí la apuesta por Urabá, considerada también “región de oportunidades” por la posición geoestratégica, por las riquezas naturales históricamente desaprovechadas, como el mar y la biodiversidad, y por la pluralidad de culturas que allí confluyen. Apuesta en la que, reitera Restrepo Posada, ya hay proyectos e inversiones en marcha, en particular en lo que tiene que ver con la vía al mar, el sistema portuario y el sistema de educación superior, en torno a una oferta
Foto cortesía del proyecto Ecourabaes
de educación pertinente, y ahí la Universidad de Antioquia cumple un papel fundamental. Según el gerente del proyecto regional para Urabá se debe analizar qué es lo que necesita la región hoy en ingenieros, economistas, antropólogos, sociólogos, agrónomos y demás, “y empezar a prepararlos allá, con profesores allá, de acuerdo con las circunstancias, las necesidades y el medioambiente”. Restrepo Posada observa que se debe ofrecer los programas que requiere la región y generar semestres de transición “que nos permitan preparar los jóvenes que no salen bien preparados desde el sistema de educación media para que puedan acceder a una universidad como la UdeA, que tiene un sello y marca como una de las mejores de Colombia”. En esa dirección, considera que la UdeA puede aportar toda su capacidad académica y su estructura profesoral, aunque señala que hasta ahora la presencia ha sido con profesores de cátedra que no residen en la zona. “En eso hemos venido trabajando, generando y aportando recursos de base presupuestal que le permita a la Universidad tener una base profesoral allá, y que
con el transcurso del tiempo los egresados de las sedes sean los docentes”, dice. Al tiempo que observa que tanto la Universidad de Antioquia como la Gobernación de Antioquia están destinando recursos para mejorar la infraestructura en la Sede de Ciencias del Mar en Turbo, la Sede de Estudios Biológicos en Carepa y la ciudadela universitaria en Apartadó, reitera en la importancia de ofrecer programas en todas las disciplinas que la región demanda hoy y que va a demandar en función de lo que allí se va asentar, como ingeniería industrial, ingeniería civil, ciencias agrícolas, ciencias sociales, medicina, enfermería y demás. “Todo está planteado en términos muy conceptuales pero tendrá que ponérsele tren de aterrizaje a todo esto y por supuesto la Universidad es la llamada a mover el motor de la educación superior”, dice. Según el alto funcionario, hoy hay en la región más de veinte instituciones de educación superior, pero un gran porcentaje ofrece programas “a través de tercerías, de entidades incluso de dudosa reputación”, que —afirma— expiden títulos, pero están preparando gente para nada.
“Ese círculo hay que romperlo y ese es el rol que fundamentalmente tiene que cumplir la Universidad conjuntamente con las otras dos instituciones del ámbito departamental como el Politécnico Jaime Isaza Cadavid y el Tecnológico de Antioquia”, observa Restrepo Posada. El gerente del proyecto regional para Urabá reconoce que las restricciones presupuestales y la falta de voluntad política de quien aporta los recursos son factores que han dado al traste con la política de regionalización de la Universidad de asentarse en la zona, con una comunidad académica universitaria propia. Al respecto, afirma que la voluntad ya existe y por eso la Gobernación viene trabajando para que la Asamblea Departamental apruebe recursos que hagan base presupuestal para que la Universidad pueda funcionar en la región con profesores de tiempo completo. “Eso resuelve el tema de aquí en adelante, independientemente de qué administración sea la que viene, y es muy importante allegar los recursos no solo los de inversión para la infraestructura, sino los que se requiere para una operación adecuada”, afirma.
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Ciencias del Mar, ejemplo de pertinencia educativa en Urabá Por DIEGO ALFONSO JARAMILLO GIRALDO DIANA MARCELA TABORDA CARDONA
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l mar como eje de desarrollo para la economía regional y nacional es prioritario y se convierte en uno de los principales retos de Antioquia y de las instituciones de educación superior que tienen la misión de generar el talento humano capaz de llevar a cabo este cometido. En tal sentido, la Universidad de Antioquia, a través de la Dirección de Regionalización, ha dado pasos importantes con la apertura desde hace 18 años y la consolidación de programas académicos en la subregión de Urabá que permiten aprovechar el gran potencial y la amplia biodiversidad de los recursos marinos y costeros del territorio. Así, la institución ofrece Tecnología en Ecología y Turismo, Gestión en Ecología y Turismo, Ecología de Zonas Costeras, Oceanografía e Ingeniería Oceanográfica en la sede de Ciencias del Mar, municipio de Turbo, programas académicos coordinados por la Corporación Académica Ambiental y la Facultad de Ingeniería. Estos programas, además de impulsar el desarrollo económico de la región y aprovechar las fortalezas de los municipios por su ubicación geográfica, atienden necesidades de formación que demanda el país en el área de ciencias del mar. Es lo que sucede, por ejemplo, con Tecnología en Ecología y Turismo, que ha admitido en sus dos cohortes a 49 estudiantes, de los cuales se han graduado 25 y, a la fecha, ocho están recibiendo formación de manera virtual para titularse profesionalmente como gestores en esta área. Con ello se busca aprovechar las potencialidades turísticas de la región y la riqueza natural, con egresados preparados para desarrollar proyectos ecoturísticos y brindar asesoría a empresas y entes estatales interesados en la conservación del medio ambiente y la explotación turística de la región. Ecología de Zonas Costeras fue abierto en 1999 como una respuesta a la necesidad de explorar los ecosistemas marinos y costeros, con el fin de aprovechar de manera sostenible los recur-
sos naturales para beneficio de las comunidades. En cuatro cohortes terminadas y dos activas ha admitido 182 estudiantes, de los cuales 64 ya han obtenido su título profesional.
“El impacto del pregrado en la zona ha sido importante y el grado de empleabilidad de los egresados es alto. Las alcaldías, corporaciones, ONG y entidades del orden privado se han interesa-
do en los egresados para gestionar proyectos de apoyo al desarrollo sostenible de la subregión”, afirma Paula Quiceno Cuartas, coordinadora de los pregrados de la Corporación Académica Ambiental. Agrega que Antioquia es el segundo departamento con más costa del país, razón de más para pensar en un pregrado que estudie la problemática de la dinámica marina como Oceanografía, que integra los principios de la biología, la química, la geología y la física, para aplicar la ciencia y los métodos científicos al análisis y la solución de los problemas relacionados a la dinámica de los océanos, estuarios y aguas interiores, e intervenir científicamente en todos aquellos temas vinculados con el océano y sus interacciones con la tierra, la atmósfera y los organismos vivos. Este pregrado, abierto en 2011, cuenta con dos cohortes activas. Del mismo modo, Ingeniería
Foto cortesía del proyecto
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Oceanográfica está encaminado a solucionar problemas que tienen que ver con la ingeniería civil aplicada específicamente en la franja tierra-mar. Según el profesor Angeres Atehortúa, coordinador del programa, “el objetivo principal del mismo es educar y formar muy
buenos ingenieros que tengan capacidades no solo de aplicación del conocimiento sino de generación de progreso”.
Posgrados Otra de las grandes apuestas de la Alma Mater en Urabá para
mejorar la calidad de la educación superior y fortalecer el componente de investigación en la región es la oferta de programas de posgrados. La Universidad de Antioquia, en convenio con la Universidad Nacional de Colombia, Universidad de Bogotá Jorge
Tadeo Lozano, Universidad del Magdalena, Universidad del Valle, Universidad del Norte, la Comisión Colombiana del Océano e Invemar, crearon el Doctorado en Ciencias del Mar. En la actualidad, la Universidad de Antioquia cuenta con tres estudiantes de dicho doctorado, cuyas tesis se realizan en el Urabá antioqueño. A futuro se piensa dar apertura a dos maestrías, una en Ciencias del Mar y otra en Ciencias Ambientales, afirma la coordinadora de Investigación y Docencia de la Corporación Académica Ambiental, profesora Paula Andrea Urán Carmona. Uno de los grandes logros gestados gracias a la creación de estos programas académicos es la construcción e inauguración de la primera fase de la Sede de Ciencias del Mar en el municipio de Turbo, ubicada en una zona de gran proyección educativa. En esta sede los estudiantes cuentan con las condiciones administrativas y de infraestructura necesarias, y con un recurso humano representado en profesores permanentes instalados en la región para consolidar su formación académica e investigativa. A la fecha, se está adelantando la segunda fase de construcción de la Sede de Ciencias del Mar, que se espera culminar en junio de 2014. Al mismo tiempo se avanza en la construcción del campus universitario en Apartadó y en las reformas y mejoramiento de la Sede de Estudios Ecológicos y Agroambientales en Carepa. Todo esto permitirá ampliar la oferta académica de la universidad en la subregión a 3000 estudiantes en 2015.
Instituto de Educación Física iniciará el pregrado Profesional en Entrenamiento Deportivo en Carepa Por CARLOS ALBERTO AGUDELO*
El pregrado Profesional en Entrenamiento Deportivo es un nuevo programa que surge como respuesta de la Universidad a la demanda social por la formación explícita del talento humano para desarrollar la labor de entrenador deportivo. La tradición empírica del oficio de ser entrenador y la creencia arraigada de que “hacer deporte” es propio de ociosos esconde una realidad: la oferta académica en la preparación de profesionales para dirigir procesos de rendimiento deportivo es escasa y en el mejor de los casos se visualiza como un temática dentro de los pregrados de educación física o de las áreas afines a la actividad física y la denominada cultura deportiva. Por lo mismo, formar un profesional preparado para dirigir los procesos de rendimiento deportivo en cualquiera de las fases deportivas de un atleta —iniciación, formación, especialización, rendimiento o alto rendimiento— es el objetivo del pregrado Profesional en Entrenamiento Deportivo, con el rigor académico e investigativo de la Alma Máter. De esta forma la Universidad de Antioquia incluye un nuevo perfil profesional, que busca elevar la calidad del talento humano para preparar atletas que puedan representar su región o su país con una preparación deportiva planeada, realizada y controlada de manera óptima.
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Formar profesionales en esta área específica es, además, aceptada como necesaria por la legislación colombiana al aprobar la ley que reglamenta la profesión del entrenador, basada en el alto riesgo social que implica preparar atletas para el rendimiento deportivo. La región de Urabá, donde la Universidad ofrecerá el pregrado, se ha caracterizado por ser una gran cantera de atletas destacados en múltiples deportes en seleccionados departamentales y nacionales, que incluso han trascendido en el ámbito internacional como Catherine Ibargüen, medalla de oro de los Campeonatos Mundiales de Atletismo Rusia 2013 en la modalidad de salto triple. Por tanto se espera que este pregrado logre articular la excelencia académica con la más alta formación para transformar el deporte de rendimiento en una herramienta para potenciar la región tanto en lo social y humano como en lo deportivo. El deporte de alto rendimiento es la excusa perfecta para desarrollar socialmente una región como Urabá, pues implica mejorar el entorno del atleta en el ámbito educativo, de salud, las necesidades básicas, los servicios públicos, los ingresos adecuados para la comunidad, los escenarios deportivos y demás, si se quiere de veras aprovechar el talento natural y el potencial que hay en la zona. * Docente investigador del Instituto Universitario de Educación Física, coordinador del Pregrado Profesional en Entrenamiento Deportivo
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Foto cortesía del proyecto
Pueblos ancestrales, estudiantes de Pedagogía de la Madre Tierra
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a experiencia del Programa de la Licenciatura en Pedagogía de la Madre Tierra ha sido un reto histórico para la Universidad, para los pueblos ancestrales de Antioquia y sobre todo para las regiones de Antioquia, en especial para la zona de Urabá, puesto que la mayoría de los pueblos ancestrales indígenas del Departamento se encuentra en esta región: el pueblo Senú habita principalmente en los municipios de Arboletes, Necoclí, San Juan, San Pedro, Apartadó y Turbo; Gunadule en Necoclí y Turbo; el Êberâ Eyabida en los municipios de Turbo, Apartado, Carepa, Chigorodó y Mutatá, además el Chamí en los municipios de Chigorodó y Apartadó, el pueblo Êberâ Dobida que habita por el río Atrato es un vecino importante de nuestra región. Los territorios que habitan los pueblos originarios son de alta biodiversidad, lo que hace que esta zona sea rica, no solamente por la presencia de las culturas ancestrales, sino también por la presencia de las comunidades afro, los campesinos y otras culturas. La diversidad cultural y territorial de la región es palpable, y esto hace necesario que se construya de forma participativa entre comunidades locales y Universidad un proceso de formación
en educación superior que dialogue con las necesidades e intereses de la región, como lo es el Programa de la Licenciatura en Pedagogía de la Madre Tierra. Desde que comenzamos la experiencia hemos estado permanentemente en la zona; nuestro plan de estudio es un tejido que tiene en cuenta los conocimientos de pueblos ancestrales en relación con conocimientos de otras culturas y pueblos provenientes de contextos mestizos, rurales y afro descendientes. Nuestra metodología la llamamos de presencialidad concentrada, la cual consiste en distribuir el tiempo asignado a cada curso por el semestre académico en encuentros educativos intensivos, así: Un encuentro regional: donde todos los estudiantes y profesores se reúnen en un solo lugar (ciudad universitaria) en donde se desarro-
lla de acuerdo con la programación de cursos y se favorece el relacionamiento inter e intracultural, así como el reconocimiento del contexto urbano institucional. Los encuentros zonales tienen en cuenta la cercanía territorial y afinidad cultural. En el caso de la región de Urabá tenemos dos zonas: Urabá Norte, en una comunidad de Necoclí se reúnen estudiantes de las comunidades Gunadule y de los Senúes, y en Urabá Sur con estudiantes provenientes de la cultura Êberâ (Eyabida y Chami). En los encuentros locales cada estudiante tiene la responsabilidad de realizar encuentros en sus comunidades. Es un espacio para la práctica, la socialización, la investigación y el fortalecimiento pedagógico comunitario. En estos espacios de aprendizaje los estudiantes se reúnen para deliberar los saberes aprendidos y donde la
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Por ABADIO GREEN STÓCEL*
presencia de los sabios y sabias de las comunidades son importantes para continuar construyendo los planes de vida de sus comunidades. Además permite conocer de cerca las historias, las fortalezas, las problemáticas que padecen, y da cuenta de las relaciones que día a día construyen con las poblaciones vecinas y con el Estado. Urabá, región de riqueza, tiene una deuda histórica con sus habitantes originarios que antes de la invasión ya venían construyendo su historia, sus conocimientos, y que en el transcurso de las secuenciales colonizaciones, hasta hoy, ha sido violentada, masacrada y su población silenciada. Precisamente, Pedagogía de la Madre Tierra intenta construir otra forma de ver la realidad histórica con el diálogo de saberes, con una pedagogía nueva donde los estudiantes vuelvan a caminar su camino, reconociendo su rostro y su voz. No podemos continuar alargando esta historia de opresión y de pobreza, tenemos la tarea de construir otra forma de ver el mundo, un mundo lleno de riquezas no para saquear la vida de la madre tierra. Debemos ser más concientes de la necesidad de protegerla porque es la vida de todas y todos nosotros. En ese sentido, la presencia de la Universidad de Antioquia a través de la Pedagogía de la Madre Tierra se hace necesaria y urgente porque contribuye en una búsqueda más pertinente y duradera de la paz que soñamos como personas y como sociedad, y sobre todo para entender que los conocimientos ancestrales deben encabezar cualquier decisión que realicemos con la vida de la madre tierra. La Pedagogía de la Madre Tierra ha significado para nuestros estudiantes de Urabá un cambio en su modo de ver la realidad, de asumir que la cultura y la identidad deben ir de la mano, que la identidad, la cultura y la política deben defender la vida de todos y todas incluyendo el agua, la selva, los animales grandes y pequeños, no la destrucción como está en los planes de desarrollo, tanto nacional, regional y municipal. Pedagogía de la Madre Tierra quiere contribuir para entender que somos parte de ella, que lo que le suceda a ella también nos repercute, y lo que nos suceda, también afecta a ella; en ese sentido llamamos a sus autoridades, que no solamente se gobierna con el saber político, sino, también en el saber de las culturas milenarias y la riqueza de la madre tierra. Para poder lograr este equilibrio debemos trabajar juntos y juntas y tener en el corazón una Pedagogía de la Madre Tierra. *Creador y director del Programa Licenciatura y Pedagogía de la Madre Tierra. Doctor en Educación.
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Por SARA GIRALDO MAESTRE
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ace qu i n c e añ o s Urabá fue protagonista. Carlos Bernal, profesor del Departamento de Pediatría de la Universidad de Antioquia, estableció que en 1997 esa era la región del departamento en donde habían muerto más niños menores de cinco años por causa de la diarrea o por sus complicaciones. La sorpresa fue mayor cuando su grupo de investigación descubrió que el 90% de los niños que murieron habían sido atendidos por un profesional de la salud un día antes de su muerte y que la mitad fallecieron en su casa. La conclusión: se conocía el diagnóstico pero no la forma de tratarlos. Un año más tarde la Organización Mundial de la Salud —OMS— lanzó la estrategia AIEPI –Atención integrada a las enfermedades prevalentes de la infancia–. Esta tiene como objetivo disminuir la mortalidad por las enfermedades más frecuentes en niños menores de cinco años tales como diarrea, neumonía, malaria, desnutrición entre otras. Así, con el problema por un lado y la solución por el otro el grupo de investigación, encabezado por el profesor Bernal, dio inicio a la UVI, Unidad Vida Infantil en el año 2000, con el apoyo de la Dirección de Regionalización y la participación de las Facultades de Medicina, Enfermería y la Escuela de Nutrición y Dietética. Este programa tiene su sede en el Hospital Francisco Valderrama de Turbo y busca ofrecer una atención integrada a la niñez de la región para reducir las altas tasas de morbilidad y mortalidad por enfermedades infecciosas. Para lograrlo se procura brindarle bienestar al niño en su núcleo más cercano dándole instrumentos de empoderamiento a la familia para su cuidado y atención desde el hogar, además de la utilización adecuada de los servicios de salud. “No tiene sentido que nuestros niños se mueran por causas que son prevenibles o fácilmente tratables”, dice Jorge Eliécer Botero, coordinador actual del programa. Explica, además, que la unidad se ha especializado en el manejo de desnutridos graves y de niños con diarrea y deshidratación.
La UVI ha sido lugar de práctica para estudiantes de Medicina, Enfermería, Nutrición y Dietética, Microbiología, Psicología y Trabajo Social y sitio para la investigación de estudiantes de las maestrías en Alimentación y Nutrición Humana, Ciencias Básicas Biomédicas y Salud Colectiva
La UVI le da vida a Urabá Poco tiempo después de comenzar su funcionamiento, la Unidad se convirtió en un sitio de referencia y comenzó a recibir niños de Ríosucio, Chocó, San Pedro de Urabá, Necoclí y lugares aledaños. Por lo anterior se pensó en una estrategia para que los hospitales tuvieran sus propios centros y atendieran a los menores en lugar de remitirlos. En ese sentido, se realizó una capacitación en todo el departamento, en alianza con la Gerencia de Seguridad Alimentaria DepartamentalMana, para consolidar centros similares en los hospitales. De los cuales formaron 68, y 32 están en funcionamiento. Es así, cómo los más de 77 mil menores de cinco años que viven en Urabá cuentan no solo con la UVI sino con médicos y personal de salud capacitados para atender y tratar la diarrea, trastornos de nutrición y demás enfermedades que contempla la AIEPI. Uno de los logros más significativos de la Unidad es que al cuarto año de la implementación de la estrategia AIEPI la UVI redujo su tasa de mortalidad por desnutrición grave a un 0%. Entre todas las investigaciones que se han realizado en la Unidad Vida Infantil se realizó un estudio para establecer qué tan efectivo y seguro resulta un suero de rehidratación oral a base de harina
de plátano en niños con diarrea. “Demostramos que el suero basado en harina de plátano es tan efectivo y tan seguro para corregir la deshidratación como el suero oral que propone la OMS”, explica Botero. El interrogante, ahora, es si este mismo suero tiene un efecto antidiarreico, lo que se convertiría en un valor agregado del producto. “Lo que queremos comprobar es que este suero además de hidratar disminuye la diarrea”, indica la investigadora María Isabel Lalinde, quien hace parte del proyecto. El estudio, que está siendo financiado por el CODI, el Hospital Francisco Valderrama, la Fundación Social de Banacol – Corbanacol y la Escuela de Nutrición y Dietética, se realiza con una muestra de 100 niños y se espera obtener resultados definitivos en 2014. Las investigaciones de este tipo resultan importantes si se tiene en cuenta que, de acuerdo con Lalinde, la segunda causa de enfermedad y muerte del país, en menores de cinco años, es la diarrea. Cuidados básicos como el aseo personal y el de la vivienda, el lavado de las manos antes de cocinar y después de cambiar al niño son prácticas básicas que pueden ayudar a prevenir esta infección. Sin embargo, existen otros factores que hacen de los niños de Urabá una población
vulnerable. ”Por su situación de miseria la gente no come bien, no tiene capacidad adquisitiva y los niños están desnutridos y es más fácil que a un niño desnutrido le de una diarrea o una enfermad respiratoria”, explica Lalinde. En la actualidad no existe un consolidado del impacto detallado del programa, sin embargo hay cifras que dan algunas luces. Por ejemplo, de acuerdo con el profesor Botero en los primeros años la Unidad recibía mensualmente entre 20 y 25 menores con desnutrición aguda grave, hoy recibe uno cada mes. Así mismo, moría por lo menos un niño cada semana por desnutrición y otro por diarrea. En la actualidad aunque se presentan muertes sucede de forma esporádica. “Se ha logrado una concientización por parte de las madres. Antes lo llevaban donde el chamán o lo manejaban con remedios caseros, ahora consultan. Además el médico que los atiende tiene herramientas para tratarlos”, puntualiza Botero. La Unidad Vida Infantil que hoy cuenta con una médica, una practicante de microbiología y cuatro auxiliares de enfermería atiende en promedio a 600 niños cada mes. Así, la UVI se convierte en un espacio más de la Universidad en favor de los niños de la región.
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Ecourabaes, aplicación práctica del conocimiento universitario
Por NIDIA MARÍA MONTOYA
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sentada en recursos hidrobiológicos, ecosistemas mangláricos y humedales de importancia global, no contaba con una empresa que se dedicara al turismo ecológico. Con este diagnóstico y la ayuda de la Universidad y el Parque E formuló el plan de negocios que derivó en la constitución de Ecourabaes, empresa con la cual ella y
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jemplos como el de Catalina Gaviria demuestran que medir el impacto positivo del proceso de regionalización de la Universidad de Antioquia va más allá de citar cifras de cupos, programas o cantidad de egresados. El turismo ecológico, una de las fortalezas de la subregión de Urabá, propició que esta egresada de Tecnología en Ecología y Turismo y de Ecología de Zonas Costeras le apostara a un proyecto productivo para la región. Catalina partió de pensar que Urabá, una zona geoestratégica del país, con potencial turístico y gran riqueza ambiental repre-
Manuel Santiago Parra, su socio, fueron ganadores del concurso Antójate de Antioquia, en 2009. Una de las zonas donde opera Ecourabaes es Bocas del Atrato, un caserío en el que habitan alrededor de 70 familias afrodescendientes en su mayoría, y cuya principal actividad económica es la pesca. Ante las dificultades económicas propias del sector y conscientes de la riqueza natural que los rodea, esta comunidad decidió medírsele al proyecto. Hoy este corregimiento de Turbo cuenta con un hotel que tiene un sistema solar de iluminación y un sistema para el tratamiento de aguas del río Atrato. Infraestructura que ha sido posible gracias a la unión de entidades públicas y privadas como Naciones Unidas, Universidad de Antioquia, Corpourabá, y Fundaunibán, entre otras. De ahí que Patrocinio Cuesta, líder comunitario del caserío, afirme que la Universidad de Antioquia le cumple a la región, y asegura, al igual que su comunidad, que la calidad de vida del corregimiento mejoró en gran medida desde la llegada de la institución, presencia que se manifiesta en actividades como la señalización de los hidrosenderos, el inventario de aves y la publicación de una guía, que
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incluye al Bucco noanamae, ave endémica de Colombia que se conoce muy poco, pero que en Bocas del Atrato, por estar cerca al manglar, se hace más fácil su avistamiento. Los encargados de prestar los servicios de Ecourabaes y atender a los turistas son los habitantes de Bocas del Atrato, quienes recibieron por parte de estudiantes de la Universidad talleres en temas como cuidado de los recursos, manejo de residuos sólidos, inventario de la biodiversidad en fauna y flora, atención a visitantes y sensibilización a los turistas en educación ambiental y conservación de los ecosistemas. Catalina Gaviria considera que esta iniciativa tiene mucho futuro, dada la importancia que hoy se le da a Urabá en el Plan de Desarrollo de la Gobernación de Antioquia y en el Plan de Desarrollo Institucional de la Universidad de Antioquia, aunque reconoce dificultades en la comercialización de la oferta ecoturística frente a los destinos tradicionales. A esto se le suma que el ecoturismo es un producto para un público específico. Por su parte, Adriana Bermúdez Cardona, coordinadora de los programas del área de turismo de la Corporación Académica Ambiental, considera que este tipo de proyectos tiene un valor agregado y es la generación de confianza de las comunidades hacia la Universidad de Antioquia. En 1997 la Universidad de Antioquia inició la oferta de la Tecnología en Ecología y Turismo y luego en 2011 la profesionalización en Gestión en Ecología y Turismo, de la cual han egresado 40 profesionales. Actualmente estudiantes de la Universidad de Antioquia Seccional Urabá trabajan en proyectos como el diseño de productos turísticos para los municipios de Necoclí y Capurganá y en la capacitación ambiental y manejo de residuos sólidos. Adriana Bermúdez recordó que un estudiante de la región tiene la posibilidad de materializar su proyecto a través de la financiación del Banco Universitario de Proyectos de Extensión, BUPE, del Comité para el Desarrollo de la Investigación, CODI, de las convocatorias del Gobierno Nacional, y de la Corporación Académica Ambiental que apoya con la formulación o la ejecución de los proyectos. Antioquia es el segundo departamento con mayor costa sobre el litoral Caribe, y para Elkin Villalobos, director de Turismo de Turbo, esta es una fortaleza que se debe aprovechar. Para el funcionario la presencia de la Universidad es fundamental y espera que ésta se fortalezca más en la región con la construcción de la nueva sede ubicada en Apartadó. Afirmó que tanto el municipio, como la comunidad valoran el trabajo que durante 18 años ha realizado la Universidad de Antioquia en la región y consideran que la institución cumple muy bien su tarea en la zona.
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l interés de la gobernación de Antioquia en la región de Urabá, validado a través de la creación de una gerencia especial para esta importante zona del departamento, no es fortuito, obedece a que históricamente es una de las regiones más pobre, con los niveles de vida más bajos, y la que presenta las mayores necesidades básicas por satisfacer (Tabla 1). Si bien esta situación le ha merecido una atención especial en los últimos años, vale la pena decir que dicha mirada y sus débiles intervenciones, no han logrado traducirse en políticas públicas eficientes, que a más de incrementar la empleabilidad y el desarrollo, han estado lejos de mejorar la calidad de vida de sus habitantes, quienes a su vez se han visto altamente golpeados por los complejos fenómenos de violencia en la región. Desde esta perspectiva, es importante resaltar que la Universidad de Antioquia lleva cerca de 17 años haciendo presencia en la región, aportando, con programas académicos, desde sus saberes, y con el acompañamiento a diferentes instituciones promotoras del desarrollo, soluciones a las problemáticas, enmarcadas en la estrategia de impulsar el fortalecimiento del capital humano en la zona desde la docencia, la investigación y la extensión. En este sentido, la Facultad de Ciencias Económicas a través del grupo de investigación Macroeconomía Aplicada, en asocio con la Red de Observatorios Regionales del Mercado de Trabajo que apoyan el Departamento para la Prosperidad Social, el Ministerio del Trabajo y el Programa de Naciones Unidas, ha venido desarrollando una serie de estudios que han iniciado con la creación de un observatorio de mercado laboral para esta importante zona del departamento. El primer estudio, realizado en febrero del presente año tuvo como objetivo central caracterizar la oferta laboral para cinco municipios de la región, Apartadó, Carepa, Chigorodó, Necoclí y Turbo, con el fin de generar capacidades instaladas en estas localidades para construir indicadores del mercado laboral relacionados con los principales atributos de la población ocupada y desempleada. Esta información resulta relevante para el diseño, formulación y seguimiento de una política pública de empleo, cimentada en un conocimiento real de las características laborales de la población de estos municipios. Sin duda, esto se constituye en un importante aporte de la Universi-
Superar la informalidad laboral en Urabá, una apuesta por el desarrollo
Foto cortesía del proyecto
Por RAMON JAVIER MESA CALLEJAS MAURICIO LOPEZ GONZALEZ Profesores Facultad de Ciencias Económicas
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los índices de violencia más altos del departamento, originados en parte por los bajos salarios, los niveles de informalidad, la falta de oportunidades para la población con formación, las diferencias de género y el alto desempleo de los jóvenes. Para la muestra, es alto el porcentaje de población ocupada perteneciente a los estratos uno y dos, 86%, el cual es un reflejo de las precarias condiciones de la población de estos municipios; también el mayor nivel de desempleo que se registra en la zona, correspondiente a una tasa cercana al 27% de la población económicamente activa. De la misma manera, pese a que la mayor población ocupada solo
dad a una de las problemáticas más apremiantes para la región como lo es la empleabilidad, no sólo porque se construye información que hoy en día no existe en la región, sino también porque dicha información queda disponible como insumo que le permite a las autoridades de estos municipios, direccionar sus políticas en materia laboral. Al respecto, teniendo en cuenta algunos de los resultados del estudio, se arroja evidencia significativa que valida, además de los problemas más comunes de la región, como son las condiciones de pobreza de la población y las altas tasas de desempleo, el por qué el Urabá antioqueño presenta
Tabla 1. Indicador de calidad de vida en Antioquia y por subregión 2011 Subregión
Urbano
Rural
Total
Antioquia
70,4
55,8
66,76
Valle de Aburrá
72,5
70,7
72,34
Bajo Cauca
60,8
47,2
55,09
Magdalena Medio
61,1
56,1
59,00
Nordeste
63,3
50,2
56,72
Norte
67,4
51,4
58,78
Occidente
65,1
52,4
56,78
Oriente
67,9
57,3
62,85
Suroeste
66,1
52,3
58,79
Urabá
62,6
41,9
54,10
Fuente: Plan Departamental de Desarrollo
contaba con el bachillerato y la primaria, la presencia de un gran número de entidades educativas en la región ha logrado ampliar los niveles de formación de la población, de tal forma que un porcentaje alto de la población ocupada del Urabá antioqueño (42%) había realizado estudios técnicos, 11,9% estudios tecnológicos, 11% estudios de posgrado y 36,3% formación universitaria. Estas cifras ponen a la región por encima de la media nacional en formación, sin embargo, contrastan con los altos índices de informalidad donde el 34% de la población ocupada se encontraba en condiciones de subempleo como trabajador por cuenta propia y empleado doméstico; igualmente, un 42,7% de los trabajadores no contaban con un contrato legal y poco más del 92% de los técnicos y tecnólogos, a más que se encontraban trabajando en actividades informales, recibía menos de un salario mínimo legal vigente o entre uno y dos salarios mínimos, reflejando así un claro problema de bajos salarios que evidencian un fuerte desequilibrio del mercado laboral. Esto último tiene una alta incidencia en los bajos niveles de ingreso de la población y en la baja productividad, afectando el crecimiento económico de la región y la sostenibilidad de nuevas actividades productivas. Sin duda, el camino para hacer de Urabá un importante polo de desarrollo regional, deberá comenzar por superar las condiciones de informalidad de la región, especialmente, de ese gran volumen de capital humano formado en las instituciones radicadas en la zona. Para ello se requiere, de un lado, que el empresariado de la zona contribuya con la práctica de una política laboral que respete los derechos de los trabajadores y valore el grado de calificación de la población económicamente activa. De otro lado, todas las iniciativas, proyectos y buenas intenciones que se tengan desde la gerencia para Urabá, deben comenzar por hacer protagonistas del desarrollo a los actores productivos y sociales de la región, como una condición necesaria para lograr armonizar los intereses de la región con los de la política pública departamental. En este punto, las contribuciones de la Universidad de Antioquia son muchas, empezando por el real compromiso de sus dependencias para extender el conocimiento con pertinencia y direccionado sobre las realidades de la región.
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as bibliotecas públicas son instituciones sociales claves para el desarrollo de las comunidades, son el principal medio para que hombres y mujeres accedan a la información que les permita el aprendizaje permanente, pero también la participación y la toma de decisiones. Para que las bibliotecas tengan el lugar que les corresponde, sean reconocidas como parte del equipamiento de una comunidad y alcancen los niveles de uso y de impacto esperado es necesario reorientar su funcionamiento, mejorar la gestión de sus materiales bibliográficos, ofertar servicios acordes con las necesidades de la comunidad y brindar espacios dignos y confortables para todos los públicos. El reconocimiento del estado actual de las bibliotecas públicas del Departamento, tarea de bibliotecólogos y el compromiso de la Universidad de hacer una devolución a la sociedad, a partir de saberes específicos, se conjugaron para formular una propuesta de intervención y mejoramiento de las bibliotecas públicas del Urabá antioqueño. Propuesta que se articula con el Plan de Desarrollo Departamental 2012-2015, Antioquia la más educada, que entre sus lineamientos estratégicos propone “el acompañamiento a los municipios para una adecuada planificación y gestión cultural, las intervenciones en diferentes equipamientos, la promoción de los hábitos de lectura y de asistencia a las bibliotecas y la protección y difusión del patrimonio cultural”. El proyecto propone intervenir cinco bibliotecas públicas del Urabá antioqueño, organizar alrededor de 20.000 materiales bibliográficos, además de un software para sistematizar las colecciones, elaborar documen-
Foto cortesía del proyecto
“La misión universitaria se haya indisolublemente ligada al destino y proyecto de las sociedades y a su cultura. Éstas delegan en la universidad no sólo parte de su patrimonio histórico y cultural y el acervo de saberes y conocimientos, sino la responsabilidad de agregar valor y hacer devoluciones en un proceso permanente y vigilante de realimentación y retribución mutua”. (Plan de Desarrollo de Antioquia 2012-2015).
El apoyo que en principio apunta a un mejoramiento técnico, se espera redunde en un mayor uso de las bibliotecas, un mejor acceso a la información y en mayores niveles de lectura.
Gobernación y Universidad * mejoran bibliotecas en Urabá tos para mejorar las prácticas de los bibliotecarios y mejorar la dotación de diez salas infantiles. Con una inversión que supera los $250.000.000, entre aportes de la Gobernación (61,85%), la Vicerrectoría de Extensión y la Escuela Interamericana de Bibliotecología de la Universidad de Antioquia (35,14%) y los municipios (3,01%), se intervendrán entre agosto y diciembre de 2013 las bibliotecas públicas de Turbo, Chigorodó, Mutatá, Carepa, y Necoclí. Se espera que en 2014 el proyecto se extienda a los municipios restantes de Urabá. Las administraciones municipales firman un acta en la que dejan plasmado su interés en el proyecto y el aval para que la Universidad inicie el proceso de intervención. Este proyecto se desarrolla a partir de brigadas y es liderado por docentes de la Escuela de Bibliotecología y personal administrativo, en el que se conjuga la interdisciplinariedad y donde cada participante aporta desde su campo de formación. Cuenta con el valioso apoyo de egresados y estudiantes que han visto en él una posibilidad de formación que retroalimenta el proceso que día a día viven en las aulas de clase. Las bibliotecas públicas municipales de la región de Urabá se convierten en laboratorios para el
aprendizaje en ambientes reales, cuyo corazón es una apuesta por la extensión solidaria y un importante paso hacia la integración efectiva de las tres funciones misionales universitarias, docencia, investigación y extensión, y el trabajo orquestado de una comunidad académica que como una serie de notas, variadas en su tono, color y entrada, son guiados por la batuta de sus maestros desde las aulas, dando sentido y forma a una hermosa sinfonía. Como estrategia que garantice la continuidad del proyecto se propone la capacitación de los bibliotecarios, pues mientras el equipo de la Universidad hace presencia en cada una de las bibliotecas serán ellos quienes se involucran, haciendo de este un momento formativo que conlleve al mejoramiento de las prácticas. Adicionalmente se dejarán unos lineamientos o documentos orientadores que permitan hacer una mejor gestión de las bibliotecas. A la fecha se han intervenido las bibliotecas de Turbo y Chigorodó, con una primera fase que corresponde a la evaluación de colecciones y a la reorganización de espacios físicos. Los principales hallazgos indican que las bibliotecas cuentan con amplias colecciones y una buena iluminación. Sin embargo se observó que no cuentan con procesos
de automatización para agilizar la recuperación de información y se desconoce el número total de volúmenes. Además se estableció que hay una gran cantidad de material que presenta deterioro físico insalvable como hongos, humedad, presencia de animales y polvo. En cuanto al espacio físico, las estanterías están ubicadas de manera inadecuada, hay presencia de goteras y roedores y una ausencia de señalización. Falta, además, ventilación apropiada, aspecto urgente de resolver, debido a que las condiciones climáticas generan deterioro en los materiales e inconformidad en los usuarios. En el proceso de evaluación de la colección los principales criterios aplicados en el descarte, fueron estado físico, actualidad y pertinencia, seguidos de material incompleto, valor del contenido, uso, autoridad e idioma. Al finalizar esta primera fase, las bibliotecas se entregan reorganizadas físicamente, es decir, mejoradas en su espacio, accesibilidad y confort y con la colección evaluada y revisada, consecuente con las necesidades de la comunidad.
*En la elaboración del texto participaron los profesores María Teresa Arbeláez Garcés, Hernán Alonso Muñoz Vélez y Mónica Montoya Ríos.
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La ruta del bullerengue
Foto cortesía Instituto de Patrimonio y Cultura
Por JUAN ANDRÉS ÁLVAREZ CASTAÑO
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l bullerengue, esa danza de ascendencia africana que nació en San Basilio de Palenque y se extendió en el siglo XIX por el Caribe colombiano, es un ritmo que se le mete a la gente en la sangre, afirman Enay Álvarez, oriunda de San Juan de Urabá: “es tan fuerte que no hay que cogerle el paso. Es la música la que lo obliga a usted a que se mueva”. Ella, que ha bailado ese ritmo durante toda su vida, lo siente como algo más que una música: “acá en San Juan todo se celebra con los tambores, el palmoteo y los cantos del bullerengue, por eso desde que uno tiene uso de razón aprende que esa es una forma de comunicarse.” Justamente por recoger parte de la historia de las comunidades afrocolombianas y ser una expresión que define una cultura y tiene una fuerte presencia en el Urabá antioqueño, se inició en julio de 2013 La ruta de bullerengue, un proyecto que tiene como fin el crecimiento de los procesos y el desarrollo artístico y cultural de toda la región: Arboletes, Necoclí, San Juan de Urabá, San Pedro de Urabá, Apartadó, Turbo, Carepa, Chigorodó, Mutatá, Murindó y Vigía del Fuerte. Un territorio caracterizado por la diversidad en el que conviven el 51.6% del total de población afrocolombiana de Antioquia con por lo menos ocho etnias indígenas y población proveniente de los departamentos de Córdoba, del interior de Antioquia y del Chocó. La ruta del bullerengue es el resultado de la alianza entre la Gobernación de Antioquia por medio del Instituto de
Cultura y Patrimonio de Antioquia, la Universidad de Antioquia, la Institución Universitaria Tecnológico de Antioquia y el Politécnico Colombiano Jaime Isaza Cadavid. El proyecto incluye la realización de actividades asociadas a la gestión, el emprendimiento, la formación musical y la preservación de la memoria y el patrimonio cultural de la región: talleres y cursos de danza y música, exposiciones fotográficas, temporada de Teatro a lo legal, diplomado en cultura de la legalidad, organización de fiestas tradicionales, asesorías territoriales, tertulias, apoyo al Festival nacional del bullerengue y al Festival de bullerengue al parque. Julio Carlos Angulo, director de la Casa de la Cultura de San Juan de Urabá, desataca el proyecto como la posibilidad de potenciar un ritmo musical, pero enfatiza que además “es una oportunidad para que toda Antioquia reconozca que también es Caribe”. Jusseh Restrepo Orrego, coordinador del Programa Empresas Culturales y Creativas, advierte que “todos los ojos están puestos en el Urabá y la Universidad no podía ser ajena. Por eso para nosotros esta alianza con el Instituto de Patrimonio y Cultura es otra oportunidad para impulsar y dar a conocer los procesos culturales que están ocurriendo en la región, que como todo el mundo sabe es riquísima en esta materia”. Restrepo Orrego anota que con el liderazgo de la Facultad de Artes la Universidad ha llevado a cabo actividades que complementan el propósito de La ruta del bullerengue: en la sede de la Universidad en Urabá van tres cohortes del programa en Gestión Cultural, dos graduadas y una en curso con sesenta beneficiarios hasta la fecha. También en convenio con el Instituto de Patrimonio y Cultura, la Facultad adelanta procesos de formación y acompañamiento para mejorar las técnicas de interpretación dirigidos a bandas de música, coros y grupos de
cuerdas y músicas tradicionales. De noviembre 2012 a mayo 2013 se han beneficiado 762 personas de la región. Por su parte Juan Carlos Sánchez Restrepo, director del Instituto de Patrimonio y Cultura, recuerda que La ruta del bullerengue es una plataforma enmarcada dentro del plan de desarrollo Antioquia la más educada y en particular hace parte del Plan Integral para Urabá, en una de sus líneas estratégicas: “Nosotros en Urabá tenemos una apuesta por la educación, y el arte y la cultura son fundamentales. Queremos crear más oportunidades para que estos chicos y chicas, desde Mutatá hasta Arboletes, puedan tener un proyecto de vida asociado al arte y puedan vivir igual que un odontólogo o un ingeniero”. El acto inaugural de La ruta del bullerengue se llevó a cabo en julio en la casa de la cultura de Chigorodó con la presencia de músicos y líderes culturales de la región. Actualmente, y como parte de la estrategia, el Instituto de Patrimonio y Cultura realiza el festival Antioquia vive la música y se prevé que en octubre la Universidad de Antioquia, por medio de la Dirección de Regionalización, inicia la Cátedra Abierta Regional 2013-2014 y la Cátedra Abierta: Universidad, Cultura y Sociedad 2014.
Foto cortesía Programa Empresas Culturales y Creativas
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En Urabá también se impulsan empresas culturales y creativas
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vocatoria de Estímulos al Talento Creativo 2013, ambas de la Gobernación de Antioquia. Para María Victoria Suaza, directora general de la Corporación Cultural Camaleón de Urabá, el acompañamiento del Programa ha sido significativo porque “nos ha ayudado a fundamentar los conceptos en torno a la labor cultural, la imagen institucional y la calidad del producto artístico, entendiendo que la gestión no es solo consecución de recursos sino la organización al interior de la entidad.” Para la fase de Urabá, el proyecto tuvo tres componentes. Uno, la conformación de un grupo de apoyo de entidades públicas y privadas, el cual recibió formación general en temas de emprendimiento y gestión cultural, con el fin de contar con capacidad instalada en la región. Dos, el acompañamiento a emprendedores y gestores seleccionados mediante dos convocatorias (2012-1 y 20132) de ideas de negocio, a quienes posteriormente se les ofreció asesorías especializadas y ayuda en la búsqueda de financiación. Y tres, la articulación con entidades públicas y gobiernos locales, mediante un proceso de formación a funcionarios en temas de economía de la cultura, de donde se espera surja una política
Transferencia
Por JUAN CARLOS GIL ACEVEDO
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l Programa Empresas Culturales y Creativas es una iniciativa de la Facultad de Artes de la Universidad de Antioquia y la Fundación Interarts de Barcelona, con el apoyo de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo, AECID. El Programa está concebido como un modelo que integra la producción cultural al desarrollo local, con el objetivo de crear un sistema sostenible que vincule la esfera del arte y la cultura con los ámbitos académico, social y económico. Desde 2007 Empresas Culturales y Creativas ha acompañado ideas de negocio y empresas del sector artístico y cultural con el fin de que sean sostenibles, contribuyan con la dinamización, organización, visibilización, productividad del sector y el mejoramiento de la calidad de vida de los artistas, gestores y creativos. Del acompañamiento hecho a las ideas de negocio surgieron dos proyectos asociativos para Medellín, uno en el sector audiovisual, Asociación AVA —audiovisual, videojuegos y animación— y otro en música, USM —Unión del Sector de la Música- Comisión Corporación Revista Música—.
En 2012 se implementó en Urabá el proyecto “Fomento del tejido empresarial del sector cultural en la región de Antioquia/ subregión de Urabá (FOMECC Colombia)”, como una forma de llevar a las regiones el conocimiento y la experiencia de la Universidad y del Programa, mediante un proceso que ha llevado a cabo formación, acompañamiento y asesoría a emprendedores culturales, conformación de procesos asociativos y fortalecimiento de las cadenas de valor en la industria cultural. Ejemplo de ello ha sido la Red Cultural de Urabá, ente autónomo nacido durante la ejecución del proyecto. El objetivo de esta fase en Urabá es fortalecer las capacidades de gestión y emprendimiento de los agentes culturales, promoviendo así su empoderamiento y participación en el desarrollo regional. El proyecto aporta al fortalecimiento de las dinámicas de cambio cultural, la generación de nuevos ámbitos de convivencia y la apertura de perspectivas de transformación económica para la zona. De igual manera, busca el mejoramiento de la calidad de vida de los emprendedores, brindándoles herramientas prácticas para hacer de la opción empresarial sobre la base de su cultura una posibilidad viable de desarrollo económico para ellos y sus familias. “Había soñado mucho tiempo con una galería de arte, entonces empecé a investigar sobre este tema. Me di cuenta de que este tipo de negocio en Urabá no se sostiene
Foto cortesía Programa Empresas Culturales y Creativas
solo y me dije: hay que hacer algo y comencé a estructurar la empresa de una manera diferente, que no fuera simplemente vender recordatorios sino hacer algo por el reconocimiento de los artesanos de la región, y de ahí nació la idea de una galería artesanal”, recuerda Auberto Garcés, emprendedor de Apartadó. Y al tiempo que reconoce que Empresas Culturales y Creativas ha fortalecido su empresa, expresa que lo que más ansían los empresarios culturales y artistas es posicionar la cultura de Urabá. “Generalmente a la cultura siempre le han inyectado dinero y no genera ingresos, o eso pensaba hasta las asesorías sobre el comercio de la cultura con módulos sobre derechos de autor y mercadeo cultural”, dice. El proyecto emprendedor de Auberto, Creartes Garcés ganó las convocatorias de estímulos Capital Semilla y Segunda Con-
pública que favorezca la transformación económica regional a partir de los bienes y servicios creativos. Uno de los aciertos del Programa ha sido la elaboración del Directorio Virtual de Artistas y Creativos de Urabá, una estrategia conjunta con la empresa privada y las administraciones locales que permite el reconocimiento y posicionamiento ante la comunidad de aquellas organizaciones, personas e instituciones que trabajan por la cultura. Este directorio se aloja en la página web www.empresasculturales.com, donde además se consignan los logros y las diferentes fases de este proceso. El proyecto piloto en Urabá ha sido una experiencia exitosa que expone la riqueza cultural de la región, las necesidades puntuales de los emprendedores y el papel de la Universidad de Antioquia como formadora y asesora en los procesos de gestión cultural.
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Asoprudea. Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia. Ciudad Universitaria. Bloque 22, oficina 107. Teléfono 2195360. Fax 2636106 • http//Asoprudea.udea.edu.co • La columna “Ágora” es responsabilidad de Asoprudea.
¿Para qué los sindicatos en la educación? MARÍA ROCÍO BEDOYA BEDOYA Presidenta Asoprudea
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l pasado viernes 16 de agosto, en un ejercicio académico, Asoprudea organizó un conversatorio con Luciano Sanín Vásquez, profesor de cátedra de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas y Subdirector General de la Escuela Nacional Sindical –ENS–, para tratar el papel de las agremiaciones y las organizaciones sindicales en la UdeA. Se partió de afirmar que la libertad sindical y el derecho de asociación de los trabajadores colombianos son derechos regulados en la legislación colombiana mediante los artículos 38 y 39 de la Constitución Política, que confieren la posibilidad a todo trabajador o trabajadora de asociarse a un sindicato y negociar colectivamente sus condiciones laborales, sin intervención del Estado. Son varios los elementos que permiten enmarcar el momento por el que el sindicalismo atraviesa en el país. Aunque históricamente se le ha señalado como una fuerza negativa para la industria, en Colombia se ha excluido y se sigue excluyendo a las organizaciones sindicales, estamos en un momento propicio para crear sindicatos, dados los contextos de precarización laboral y movilización social que se viven en el país. A pesar de que la exclusión ha sido recurrente, no es posible hablar de un Estado Social de Derecho si no hay asociación: el mundo del trabajo sin sindicato
no es libre. Es un principio democrático de participación en el trabajo, que en Colombia ha sido vulnerado en muchas ocasiones. La legislación laboral colombiana tiene más de sesenta años y fue pensada para impedir la autonomía de la sindicalización. Sin embargo, la realidad laboral en Colombia indica que el 72% de las personas buscan contrato de trabajo, lo que significa que necesitan conquistar los derechos sindicales. Colombia es un país que recibe presión sindical internacional. Esto ha provocado que el Estado asuma un comportamiento diferente, cesando la estigmatización de los sindicatos para responder a las expectativas generadas con la firma del tratado de libre comercio –TLC– con los Estados Unidos. Se evidencia por parte del gobierno una intención de mostrar resultados en lo concerniente al diálogo social y al mejoramiento de las condiciones de los sindicatos en Colombia. Ante esta nueva situación, algunas organizaciones se han propuesto transformarse y crecer. En este contexto, la Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia –Asoprudea–, asume la tarea de reflexionar y debatir acerca de la posibilidad de reorganizarse en sindicato, sin obviar su objeto social que ha sido el debate académico e intelectual y la dignificación del trabajo docente. Actualmente, se encuentra en la fase inicial de un proceso que pretende suministrar información a todo el profeso-
A pesar de que la exclusión ha sido recurrente, no es posible hablar de un Estado Social de Derecho si no hay asociación: el mundo del trabajo sin sindicato no es libre. Es un principio democrático de participación en el trabajo, que en Colombia ha sido vulnerado en muchas ocasiones.
rado de la Universidad sobre la importancia del sindicalismo en ámbitos educativos, para debatirla y luego tomar una decisión suficientemente informada y reflexionada. De acuerdo con el profesor Sanin, los sindicatos en la educación son fundamentalee en la construcción y defensa del carácter público de la educación, para darle dignidad al maestro como educador, para que las nuevas generaciones se acerquen y reconozcan la importancia de la ciudadanía laboral y la libertad sindical, para la construcción de la democracia escolar, que es impensable sin los trabajadores de la educación, para la construcción de autonomía y para activar y cultivar el pensamiento propio y crítico. La Asociación de Profesores de la Universidad de Antioquia, Asoprudea, tiene una gran oportunidad política ya que su trasegar histórico –cincuenta y un años de trabajo y movilizaciones– la convierte en la asociación de profesores universitarios más antigua del país, en un patrimonio que no puede ni debe desaparecer, sino transformarse, para pensar e incluir en una forma organizativa la totalidad del profesorado sin importar la forma de su vinculación laboral, lo cual nos permitiría tener la fuerza necesaria para negociar mejores condiciones de trabajo. Además, podríamos gozar de protecciones sindicales, presentar pliegos de solicitudes, tener representación de todos los profesores y tener mayor voz. Asumir este nuevo reto requiere formación en ciudadanía laboral para defender el patrimonio colectivo, así como el diseño de una propuesta integradora que sensibilice al profesorado en la necesidad del ejercicio de una cultura política. Asoprudea desea renovarse pensando en el estamento profesoral y en la defensa y protección de sus derechos, con un cambio de sus estatutos que permita incluir al profesorado de cátedra y ocasional, abarcando la totalidad de los docentes de la Universidad de Antioquia, con el fin de darle continuidad a sus principales fines: la defensa de la universidad pública y de los derechos de los profesores.
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Ilustración Juan Andrés Álvarez Castaño
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WILLIAM FREDY PÉREZ TORO Profesor Instituto de Estudios Políticos
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unque en cada caso puede haber márgenes de incertidumbre, en general podemos diferenciar una acción violenta de una que no lo es; o con un poco más de esfuerzo, podemos también discriminar entre conductas prohibidas y permitidas por la ley. E inclusive, acercándonos, podemos hasta diferenciar comportamientos violentos de comportamientos ilegales, así como podemos llegar a saber cuándo una conducta es simultáneamente ilegal y violenta. Por ejemplo, podríamos acordar que una persona que vemos a la distancia regando unas plantas de marihuana en el jardín de su casa no está ejerciendo violencia; pero podríamos también estar de acuerdo en que ese es un comportamiento ilegal. O podríamos rápidamente admitir que hay violencia en el hecho de atar a un hombre a una silla y aplicarle una descarga eléctrica hasta producir su muerte; pero en cuanto descubramos un guardia a su lado, por ejemplo de Alabama, Florida, Carolina del Sur, Tennessee o Virginia en los Estados Unidos, sabremos que se trata de una ejecución legal, de una conducta permitida por la ley. O, por último, normalmente estaríamos de acuerdo en que una persona que súbitamente apuñala a otra, está teniendo un comportamiento violento e ilegal. En cada caso, he dicho, puede haber márgenes de incertidumbre. Pues hay no sólo perspectivas, ángulos, enfoques distintos desde los cuales se observa el mismo episodio, sino también razones, argumentos, justificaciones, contextos, que pueden hacer esas imágenes ya menos claras de lo que ahora parecen. Así sean solo un momento de largas secuencias, por lo menos frente a esas escenas
Y los dueños del espectáculo, ahí así congeladas casi que podemos coincidir: en unas identificamos violencia, en otras no, en aquellas reconocemos ilicitud, en las otras legalidad, en las demás una y la otra cosa… y así. Por supuesto, hay formas más prácticas y menos extensas de diferenciar acciones como las que se presentan en aquellas simples imágenes. Formas de distinguir, que inclusive sirven para resumir toda la secuencia a la que pertenecen las escenas. Citaré inicialmente una de tantas como las que pueden encontrarse. Después, aludiré a la que realmente me interesa para referirme a los episodios recientes de violencia entre hinchas del fútbol. Una técnica muy extraña, pero todavía recurrida para simplificar distinciones como las que he indicado, consiste en remitir al mundo de la violencia todo comportamiento ilegal y, por lo tanto, al de la paz todo cuanto sea legal. Fácil: se es legal o se es ilegal. Lo demás se sobreentiende. En su variante más “elaborada”, esta técnica no solo remite todo cuanto sea ilegal a la violencia, sino que remite todo cuanto sea violento al salvajismo. Fácil: civilización o barbarie. No es extraño que esta manera de restar complejidad coexista con sistemas de clasificación, también simples, pero exactamente opuestos. Por ejemplo, con una técnica que consiste en reducir la ley a la violencia: “se me exigió el comportamiento en nombre de la ley que es, y yo lo desacaté en nombre de la paz que será”. También fácil: opresivo o libertario. Lo demás se sobreentiende. Hay otra técnica bastante útil que consiste ya no en clasificar acciones aquí o allá, sino en atribuirlas a un tipo especial de individuo que de ninguna manera es como nosotros, que no pertenece a nuestra congregación, que se habría colado en el club o que inclusive no es miembro de la especie. Fácil: normales y enfermos, moros o cristianos, socios o colados, personas o bestias. Esta técnica, como se ve, es vital: permite negar
lo que podríamos hacer —o hicimos— alguna vez en determinadas circunstancias, reafirma nuestra pertenencia al grupo de los que no hacen esas cosas, y consolida la identidad de los que sí las hacen. Pues bien, si no fuera porque existe esta técnica, francamente sería muy difícil concebir esos que por estos días han sido descritos por el gobierno como “delincuentes disfrazados de hinchas”. De hecho, así podría también entenderse que los conductores borrachos, no son conductores, sino borrachos disfrazados de conductores; o que Fujimori era un delincuente disfrazado de presidente; o que, de ser condenado, quien presidió el Consejo Superior de la Universidad de Antioquia jamás fue realmente gobernador del departamento, ni presidente de la máxima corporación universitaria, ni nada de nada que tuviera que ver con la autoridad. Y así. Pero me temo que no obstante su insuperable carácter simplificador, esas formas de ordenar acciones —e individuos— ayudan muy poco a entender problemas sociales, sobre todo si estamos interesados en intervenirlos. Porque el caso es que esos comportamientos sí son desplegados en algún momento por quienes tienen la condición de autoridad pública, presidente de la república, funcionario, conductor o, por supuesto, hincha de fútbol; es decir, por personajes que cualquiera de nosotros podría representar siempre y cuando, eso sí, se dan las condiciones adecuadas. No se nace gobernador, ni conductor, ni hincha. Y tampoco se nace delincuente. Algunas personas, sin dejar de ser hinchas, podrían llegar a ejercer violencia. Y a veces, en las condiciones adecuadas, el ejercicio de esa violencia puede tener relación con su condición de hinchas. Un gobernador cualquiera, sin dejar de ser gobernador, podría llegar a cometer ilegalidades. A veces inclusive por ser gobernador. Los conductores no son gente ilegal.
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Pero a veces podrían llegar a ser violentos e ilegales, precisamente por ser conductores. En esas eventualidades, cuando el status guarda relación con algún comportamiento ilegal o violento, obviamente las condiciones importan. Y habría entonces que hacer preguntas del tipo: ¿qué hace y cómo se llega a ser gobernador?, ¿cuál es el peso cultural que tiene poseer, conducir y llegar a la reunión o a la rumba en vehículo propio?, ¿dónde y cómo se convierte uno en hincha “hasta la muerte” y lejos de la cancha?... El fútbol «no tiene la culpa de la violencia», ha dicho también el presidente de la República. Bueno, eso puede ser cierto porque el fútbol no tiene consciencia, no experimenta esa sensación. Pero si lo que quería decir el ciudadano presidente es que no hay ninguna relación entre las lógicas de ese negocio y la violencia, habría que discutirlo. O si lo que insinúa es que no hay relación entre la violencia y la manera como se gestiona el espectáculo, habría que examinar esa conclusión. O si lo que afirma es que nada tiene que ver ese “soberano privado” que regenta el fútbol, que asume sólo sus glorias y su rentabilidad, habría que verlo. O si lo que quiere decir el señor presidente es que la cultura, el lenguaje y los discursos prácticos de tantos locutores y periodistas no inciden en la idea de ser hincha fiel y “pase lo que pase”, es difícil estar de acuerdo. Por supuesto es terrible, eso no se hace, hay una responsabilidad qué reclamar de quienes asesinaron a otros. Sin duda que esas conductas no son “funcionales a la vida”. Pero no hay que mirar a otro lado: esos actos ilegales y violentos fueron cometidos por miembros de la especie, que son parte de la congregación, que no se colaron, que son hijos y vecinos, y que pertenecen plenamente a este mundo que hemos creado. Una especie de civilización de despilfarro, consumo, competencia voraz y muerte violenta que —como decía José Mujica recientemente en la ONU—, tampoco parece ser muy funcional a la vida, ni a la felicidad. Se matan algunos muchachos entre ellos. Las imágenes son desgarradoras. Me recuerdan las de un país en el cual se arma camorra antes, durante y después de cada evento político, así se gane, pierda o empate. Y como en el fútbol, los dueños del espectáculo… ahí. Apenas diciéndole a los seguidores de sus equipos como es que también a su turno pueden simplificar: ellos y nosotros. Finalmente, una recomendación. El presidente de la República anunció que va “con todo contra los delincuentes disfrazados de hinchas”. Así que, para no correr riesgos como los que ya experimentamos en otros casos, conviene pensárselo dos veces antes de usar la camiseta. No porque así podamos llegar a delinquir, sino porque de todas maneras iremos disfrazados.
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Disputa por el fallo de La Haya Por DIANA SOFÍA VILLA MÚNERA
normatividad interna pase por encima de la normatividad exterior, cuando la misma Constitución dice que Colombia se va a regir por las disposiciones internacionales”. Por lo cual, concluye, tarde o temprano Colombia va a tener que aplicar el fallo.
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El Pacto de Bogotá se demandó dos veces A la Corte Constitucional llegaron dos demandas contra el Pacto de Bogotá, una hecha por particulares y otra firmada por el
media que se puede interpretar de diferentes maneras por lo cual se ayuda a mejorar la imagen del presidente”, señala Gómez. Por su parte, Vargas observa que “todo viene de un proceso complejo, pues el Presidente sufre una gran afectación con los paros, y eso baja su popularidad y lo pone en función de pronunciarse de una manera distinta, esperando subir su popularidad que es muy importante en tiempos preelectorales. Esto es sobre todo retórica porque en el plano
Ilustración Juan Andrés Álvarez Castaño
olombia afronta una nueva contienda por los límites marítimos en el Caribe, después de que Nicaragua radicara otra demanda ante la Corte Internacional de Justicia —CIJ—, con el fin de buscar la concesión de una plataforma extendida que arrebataría al país más de los 75.000 km2 que le reconoció el tribunal de La Haya en 2012. Previo a la radicación de la nueva demanda y a raíz de las “pretensiones expansionistas del gobierno de Ortega”, el presidente Santos declaró el fallo proferido en noviembre pasado como inaplicable. Para Luis Fernando Vargas, coordinador del área de Relaciones Internacionales de la Universidad Eafit, esta estrategia no involucra una medida jurídica sino una decisión política que pretende dilatar la sentencia. “Los fallos —dijo— no son inaplicables o aplicables, los fallos o se acatan o no”. A pesar de que en septiembre Colombia demandó ante la Corte Constitucional el Pacto de Bogotá, que compromete al país a aceptar las decisiones del tribunal, aún está sometido a la jurisdicción de la CIJ por un año más, por lo cual se podría fallar nuevamente en contra de Colombia. El argumento del gobierno para declarar la inaplicabilidad del fallo y de paso demandar la inconstitucionalidad del Pacto de Bogotá está en el artículo 101 de la Constitución que sentencia que los límites del país solo pueden ser modificados después de un trámite por el Congreso. Por lo cual, el fallo va en contravía de la Carta Magna, pues “no puede aceptarse ningún cambio de nuestros límites, de nuestras fronteras, automáticamente, en virtud de ningún fallo”, sentenció el primer mandatario. Al respecto, Milani Gómez, filósofa egresada de Universidad de Antioquia y candidata a magíster en relaciones internacionales de la Universidad de Medellín, afirma que el Presidente está dando “patadas de ahogado” y agrega que Colombia intenta “que una
cuales La Haya no tendría jurisdicción para cambiar los límites del territorio. Jessica Mancipe, argumenta que el pacto viola aspectos claros de la Constitución y no solo el artículo 101, “que es el que dice cómo se modifican los límites, sino también los artículos 2, 79, 189 y 226. Artículos que permiten señalar que las relaciones del Estado colombiano se fundamentan en la integridad del territorio, en la soberanía y en la conveniencia nacional”, y que, agrega, invo-
El reconocimiento de una Zona Contigua Integral, la protección de la reserva natural Seaflower y la entrega de una carta de protesta al Secretario General de la ONU, firmada en conjunto con Panamá, Costa Rica y Jamaica, hacen parte de las estrategias diseñadas por el Gobierno Nacional para contrarrestar el fallo de la CIJ.
puño presidencial. En ambas se argumenta, desde diferentes puntos de vista, que el pacto firmado en 1948 y ratificado por la Ley 37 de julio de 1961, viola artículos de la Constitución de 1991. La demanda presentada por los abogados Juan Carlos Moncada y Jessica Alejandra Mancipe, egresados de la Facultad de Derecho y Ciencias Políticas de la Universidad de Antioquia, y por Carlos Eduardo Borrero, fue radicada casi un mes antes de que el Gobierno demandara. En ella los juristas argumentan que hubo una inconstitucionalidad sobreviniente cuando se firmó la Constitución, pues hay artículos en el Pacto de Bogotá que van en contravía de la Carta, según los
lucran la defensa de principios como la autodeterminación de los pueblos, el trámite para la fijación de límites por el Congreso y la obligación que el presidente tiene de defender los intereses de la nación.
¿Esperanza o resignación? Tanto para el coordinador del área de Relaciones Internacionales de la Universidad Eafit, Luis Fernando Vargas, como para Melani Goméz quien además es docente de la Universidad Católica de Oriente, la estrategia del gobierno es una jugada política que no solo pretende dilatar un inminente acatamiento del fallo, sino que “es una decisión que le ha servido para que tanto detractores como simpatizantes acojan esa posición
del derecho internacional Colombia perdió, y ya Nicaragua es soberana sobre esos 75.000 km2”. Desde otra perspectiva, la abogada Mancipe ve en la demanda del Pacto una esperanza pues si se declara inexequible Colombia no estaría sujeta la jurisdicción de la CIJ por lo cual no tendría por qué acatar el fallo. La Corte Constitucional tiene un plazo de seis meses para tomar una decisión respecto al Pacto de Bogotá, mientras que la Corte Internacional de La Haya tendrá que decidir si abre un proceso nuevo después de la segunda demanda que interpuso Nicaragua, y si así lo hace puede tardarse varios años para resolver si se concede una plataforma extendida a Nicaragua.
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Foto Juan Andrés Álvarez Castaño
“El periodismo es el mejor oficio digitalizado del mundo”
De izquierda a derecha Germán Rey, Carlos Fernando Chamorro, Sergio Ramírez, Jean-Francois Fogel, Jaime Abello Banfi, Héctor Abad Faciolince, Jon Lee Anderson, María Teresa Ronderos y Martín Caparrós. Por JUAN ANDRÉS ÁLVAREZ
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cho maestros del periodismo, miembros del Consejo Rector del Premio Gabriel García Márquez, se reunieron en septiembre en el Teatro Universitario Camilo Torres para hablar sobre lo que el gran maestro de Aracataca denominó “el oficio más bello del mundo”: Martín Caparrós, Jon Lee Anderson, Sergio Ramírez, Jean-Francois Fogel, María Teresa Ronderos, Héctor Abad Faciolince, Carlos Fernando Chamorro y Germán Rey. Jaime Abello Banfi, director general y cofundador de la Fundación Gabriel García Márquez para el Nuevo Periodismo Iberoamericano, FNPI, llevó el compás de la conversación. Al referirse al premio que la FNPI entregará entre el 19 y el 21 de noviembre con el apoyo de la Alcaldía de Medellín, el investigador experto en medios German Rey expresó que “en principio de lo que se trata es de hacer una gran fiesta en la cual se reconozca que en América Latina, en España y en Portugal hay hombres y mujeres que están haciendo periodismo de excelencia, con rigor y belleza de la escritura”. El premio quiere ser un reconocimiento de la dignidad humana a través de un oficio que a Jon Lee Anderson, reportero del semanario The New Yorker, le llevó tiempo reconocer como su vocación: “Hice muchas cosas antes de escribir, fui guardia en una cárcel, labriego, corté caña y tabaco”. La primera vez que se enfrentó a la reportería quedó perplejo: debía averiguar cómo desaparecían las pelotas de
En América Latina, nuestra historia pública está marcada por las anormalidades. Y por eso se puede hacer una lista de temas que han interesado tanto a la novela como a la crónica. Desde las dictaduras militares del siglo XX hasta el imperio del narcotráfico. Todos pertenecen al periodismo y a la literatura: “de la excepcionalidad nacen la literatura y la crónica en América Latina”. tenis de la cancha de su universidad. “Me pareció tan absurdo que me fui y no regresé”. Sin embargo, cuando un tiempo después en la redacción del semanario The Lima Times su director le propuso escribir sobre su experiencia como viajero, supo que allí estaba su pasión: “saber que estaba compartiendo esas experiencias con otra gente me cautivó. Algunos se mueren por cantar en público, pero otros, bichos raros, nos morimos por contar historias.” Carlos Fernando Chamorro, periodista nicaragüense, recordó la situación de la prensa en su país: “hacer prensa independiente en un entorno hostil como el que se vive en Nicaragua es difícil porque hay una caracterización del Estado entre prensa amiga y enemiga y porque el sector económico, que tiene una alianza con el poder, no favorece la posibilidad de que además de contar buenas historias, se fiscalice al poder público y privado.” Nicaragua, según Chamorro, comparte con Ecuador, Venezuela y Argentina un nuevo modelo de limitación de la libertad de expresión que no apunta a la represión física o al asesinato de periodistas sino a la intimidación estatal. En ese contexto el reto es cómo conservar la credibilidad cuando el trabajo se
desarrolla bajo asedio: “es una batalla que se libra día a día, historia a historia. Y estamos aquí para contar que estamos sobreviviendo”. María Teresa Ronderos, directora del portal Verdad Abierta, dijo que Colombia ha sufrido más de lo que se ha permitido aceptar que ha sufrido: “en general no conocemos nuestra historia reciente y los periodistas podemos prestar un enorme servicio para reconstruir. Doscientos veinte mil asesinatos políticos en los últimos 60 años no es de un país normal, algo estamos haciendo mal. Y descubrir por qué ha ocurrido eso ha jalado toda mi carrera profesional, por eso hago periodismo de investigación”. Martín Caparrós, periodista y escritor argentino, habló acerca dela objetividad: “todo relato es subjetivo”. Pero aclaró que hay una diferencia entre un relato informativo como los que se publican diariamente en los periódicos y la crónica, ese género al cual García Márquez se refirió alguna vez como “un cuento que es real”, aludiendo al estilo cercano a la literatura, pero siempre fiel a la realidad. Para Caparrós la crónica deja en claro desde el principio que la subjetividad existe: “lo que te voy a contar no es lo que pasó, dice el cronista, es solo una de las infinitas versiones posibles de lo que pasó”.
Sergio Ramírez, escritor nicaragüense que utiliza recursos del reportaje para escribir sus novelas, anotó que no obstante la subjetividad, siempre hay un punto en el que el periodismo y la ficción se separan. En América Latina, asegura Ramírez, esa separación está definida por el entorno, porque nuestra historia pública está marcada por las anormalidades. Y por eso se puede hacer una lista de temas que han interesado tanto a la novela como a la crónica. Desde las dictaduras militares del siglo XX hasta el imperio del narcotráfico. Todos pertenecen al periodismo y a la literatura: “de la excepcionalidad nacen la literatura y la crónica en América Latina”. El columnista y novelista Héctor Abad Faciolince resaltó que el periodista es una persona que ni manda ni obedece: “yo soy escéptico, y escéptico es quien mira para todos los lados”. Dijo que el oficio más bello del mundo solo le ha traído problemas, suspensión del colegio y expulsión de la universidad. “Dudar de todo, yo siempre quiero dudar y eso es lo que siempre he querido llevar a mis columnas”. El francés Jean Francois Fogel se refirió a los cambios en los medios de comunicación: el nacimiento de YouTube en 2006, Facebook y Twitter en 2004 y 2006 respectivamente, y el primer smartphone con aplicaciones en 2007. Cada uno de estos elementos provocó una ruptura en las salas de redacción, porque hoy las grandes categorías cambiaron, y ya no es hacer televisión, escribir o hacer radio: “a los jóvenes les toca entrar en el momento de una reinvención del oficio. El periodismo es el mejor oficio digitalizado del mundo”, concluyó Fogel.
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El oficio del intelectual
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Por MAURICIO RAMÍREZ GÓMEZ
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n 1955, cuando la empresa cultural de Mito apenas comenzaba, Jorge Gaitán Durán se hizo cargo de la crítica de cine y de la sección de comentarios “Día a día”, de El Espectador, en reemplazo de Gabriel García Márquez, enviado como corresponsal a Europa. Fue el inicio de sus colaboraciones en este diario, que se prolongaron de manera intermitente por seis años. Estas páginas constituyen lo más extenso de su obra. En ellas ratifica su confianza en la capacidad de los intelectuales para influir en la transformación ética del país, mediante una efectiva crítica social. Estaba convencido, como Sartre, de que “un intelectual es aquel que es fiel a un contexto político y social, pero no deja de discutirlo”. Debía usar, en consecuencia, todos los medios que tuviera a su alcance para hacer escuchar sus opiniones: Ser intelectual, es decir, un hombre que trabaja con la inteligencia, que se sirve de sus facultades mentales para operar sobre el mundo, sea escritor o periodista, economista o bacteriólogo, no es algo fácil. No solo por la simple razón de que la inteligencia no es un regalo, sino una virtud que se conquista por medio del estudio y la reflexión, sobre la base de una predisposición que, contra la opinión admitida, puede desarrollarse o transformarse en la más vil ceguedad. [...] El intelectual tiene también, fuera del marco que le es propio, la responsabilidad por sus semejantes. Lo que define su situación en el mundo es su conciencia; su papel es alertar, protestar, denunciar, en nombre de una ética razonada, cuando otras personas en otras ramas de la actividad humana, poderosas o miserables, no pueden hacerlo, dominadas con razón o sin ella por los imperativos, a veces tremendos, de la historia. Si bien ser escritor o ser artista es una elección del hombre, un proyecto que se hace para vencer la nada, no desconozcamos que en nuestros países personas radicalmente dotadas pueden elegir, asediadas por condiciones sociales particularmente crueles, una mediocridad silenciosa. Puede decirse que muy escasas personas, surgidas de nuestras clases menos favorecidas, como se dice tan graciosamente hoy, logran remontar los obstáculos económicos, geográficos o educativos que los separan del ejercicio adulto de la inteligencia y de la plenitud esquiva de la cultura. Razón de más para que, quienes sin
mayores esfuerzos han logrado entrar a la universidad o han tenido éxito en el fascinante reino de la literatura, el arte o la ciencia, arriesguen, si es que esto puede llamarse un riesgo, su tranquilidad.1 Para Gaitán Durán, la mala conciencia de los intelectuales colombianos era un tema predilecto, pues evidenciaba las fracturas éticas que acusaban muchos proyectos estéticos estimados como patrimonio cultural del país. Sabía, no obstante, que su caso era particular, pues no dependía de la diplomacia o de la burocracia estatal, que albergó a tantos escritores, poetas y artistas nacionales, de todas las épocas, quienes fueron privados de sus empleos una vez se atrevieron a fustigar a los poderosos. Él mismo era consciente de las ventajas que le ofrecía la fortuna de su familia: Mi caso —escribió en las notas preliminares de La revolución invisible— no tiene nada de asombroso: no le debo favores a nadie; no dependo de ningún partido, de ninguna secta; no acepto jefes, ni index de ninguna clase; no pueden asediarme económicamente, no pueden aniquilarme éticamente, no pueden impedirme que escriba, ni mucho menos que piense; leo lo que quiero, estudio, observo e intento con obstinación comprender ciertos panoramas políticos y sociales, ciertas pasiones humanas. No soy un inconforme profesional: creo apenas que la fuerza de una posición no proviene del desprecio, ni siquiera del talento o de una adhesión ideológica, sino de la independencia y de la conciencia.2
Su tono desafiante no puede confundirse hoy con heroísmo. Era más bien una denuncia de los condicionantes que obraban sobre sus compatriotas. También un llamado a sus semejantes a renunciar a la “pequeña porción de comodidad” de cada uno y contribuir a la transformación del país, que tanto demandaban del Gobierno. Quizás su error haya sido pretenderse más libre que los demás, y proclamarlo, pues su crítica implacable desde la comodidad del burgués le valió en ocasiones el calificativo de extranjerizante, y su inconformismo fue recibido como pedantería. A quienes lo atacaban les respondió aplicándoles su ironía e insistiendo en proponerles una valoración diferente de la realidad colombiana. Sucumbir ante la posibilidad de un debate era para él facilitar el paso “del terreno de las ideas al terreno de la violencia. Lo que no puede ser resuelto por la expresión libre de las opiniones contrarias, se resuelve por medio de la fuerza o del choque armado. La tolerancia no es solo el caldo de cultivo de la cultura, sino también su vehículo”.3 […] En este sentido, es pertinente precisar que las incursiones de Jorge Gaitán Durán en la política, el periodismo, la docencia universitaria, la industria editorial, la crítica de cine e, incluso, la radiodifusión, demuestran una preocupación constante por comunicarse eficazmente con sus semejantes. Era en esencia un escritor, un poeta, pero en esas otras facetas encontraba la posibilidad de expresarse y actuar que no le brindaba la literatura. En este aspecto radica la importancia de su vida y de su obra. No quería conformarse con el reconocimiento por su trabajo literario. No buscaba simplemente el éxito, tras el cual se esconden en ocasiones las más vergonzosas complicidades. Quería incidir en la transformación cultural del país. Lejos de la acción, su obra hubiera perdido sentido, o al menos vitalidad, pues viajar, curiosear, enterarse, analizar y divulgar eran manifestaciones naturales de su existencia, y de esta se nutría su poesía. Era, parafraseando lo que Sartre dijera sobre Camus, la búsqueda de la plena correspondencia entre un pensamiento, una obra y una acción.
*Extracto del capítulo “El oficio del intelectual”, del libro Jorge Gaitán Durán, un mar que se ignora, escrito por Mauricio Ramírez Gómez y publicado recientemente por la Editorial Universidad de Antioquia®. Notas 1. Jorge Gaitán Durán, “De la inteligencia”, El Independiente, Bogotá, 10 de enero de 1958, p. 4. Las cursivas son criterio del autor de este libro. 2. Jorge Gaitán Durán, La revolución invisible, Bogotá, Tierra Firme, 1959, p. 10. 3. Jorge Gaitán Durán, “Sanín Cano y la situación del intelectual colombiano”, en: Un solo incendio por la noche. Obra crítica, literaria y periodística recuperada de Jorge Gaitán Durán, Mauricio Ramírez Gómez, comp., Bogotá, Casa de Poesía Silva, 2004, p. 169.
LA UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA HACE CONSTAR: • Que se encuentra en trámite el reconocimiento de prestaciones sociales de la señora ADRIANA MARÍA DE LA HOZ PATIÑO fallecida el 4 de julio de 2013. Se ha presentado a reclamar la señora MARÍA GRACIELA PATIÑO LOPERA en calidad de madre. • Que se encuentra en trámite el reconocimiento de prestaciones sociales del señor LUIS FERNANDO VÁSQUEZ BEDOYA fallecido el 22 de agosto de 2013. Se han presentado a reclamar el señor JULIO CÉSAR VÁSQUEZ ALZATE y la señora OLGA ESNEDA BEDOYA TORO en calidad de padres. • Que se encuentra en trámite el reconocimiento del traspaso de la pensión jubilación que percibía el señor JOSE ALCIDES MARTINEZ ORTIZ, quien falleció el 18 de agosto de 2013. Se ha presentado a reclamar la señora ANGELA CANO DE MARTINEZ en calidad de cónyuge. Otras personas que se consideren con derecho, presentarse dentro de los 30 días siguientes a esta publicación.
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Foto Luis Javier Londoño Balbín
Nº 625, UNIVERSIDAD DE ANTIOQUIA Medellín, octubre de 2013
Laura Restrepo y Juan Manuel Roca, en el teatro universitario Camilo Torres de la Universidad de Antioquia compartieron su visión sobre la cultura en los destinos de Colombia.
La cultura: hábitat para la supervivencia Por ELIZABETH CAÑAS
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n medio de la decepción que acusan ambos escritores colombianos, Laura Restrepo y Juan Manuel Roca convinieron que la cultura es un meridiano necesario, en un país donde la exaltación a la muerte, el desamparo y la guerra son constantes. Durante la cátedra pública que auspicia la Rectoría de la Universidad de Antioquia y la charla “El papel de la cultura en los destinos del país”, Laura Restrepo denunció que en el país la inteligencia no tiene sex-appeal, “la democracia no la conocemos porque no la hemos vivido y se vació de contenido, lo que conocemos son sus excepciones; la ignorancia del otro, la exaltación del ego nos hace olvidar a los demás, y definitivamente la cultura es lo único que valida la esencia del ser humano, lo único que ayuda”.
Por su parte, el poeta Juan Manuel Roca, en defensa del rol que cumple la cultura en una sociedad como la colombiana, señala que “la cultura es de una imperiosa necesidad en tiempos tan difíciles como los que se viven; lo otro sería solo un esteticismo, y en un momento en que se debate en La Habana los destinos del país, la cultura tendría que estar muy presente”. En ese sentido, dice que la cultura debe comprometerse más con la búsqueda de la paz y ser una herramienta útil, que permita al ciudadano “alejarse del cataclismo que puede generar una realidad tan apabullante como la colombiana, del poder y del taxímetro que corre apurando por un cambio”. Frente a la realidad nacional, observa que el oficio del escritor debe servir para poner al descubierto todos los escenarios posibles; convertirse en una herramienta que reduzca la ostentación del poder, aun desde la escritura y, en cambio, facilite generar sentidos más colectivos, apuestas sociales. El poder, dice Laura Restrepo,
deforma el sentido del escritor, cada vez menos comprometido y sometido a la “feria de las vanidades”, incongruente con la cotidianidad, con lo popular. Es un asunto que hay que replantear por los escritores —añade Juan Manuel Roca—, y señala que a algunos escritores se les olvida su misión y se prestan a las manos que aplauden y a la vez pueden construir los barrotes de la jaula, porque hay un distanciamiento de la realidad y alejamiento de la cotidianidad. “Adicionalmente —afirma— la vanidad y la ausencia de lectura y de buena crítica literaria pesan mucho el empobrecimiento cultural en el país”. En Colombia —observa Laura Restrepo—, la literatura de los 80 reprodujo la realidad, faltó poesía y los escritores hicieron parte de una literatura de feria, “una sinfonía de guerra, de gente al borde del abismo de la tensión, en la que se trataba la muerte como lo mejor. Era una obra fantástica, una exaltación luctuosa que no reivindicaba el día a día, la maravillosa tarea de vivir, y que vivía el heroísmo al estilo griego, pero no la cotidianidad”.
¿Cuál debería ser el compromiso de los lectores ¿Y qué puede surgir de una humanidad que no piensa, falta de crítica? Esta es una tarea difícil para la cultura, para la supervivencia misma; envolvente y de vida y muerte en términos literales, expresa Laura Restrepo. Más aun cuando se gestan diálogos, contesta Juan Manuel Roca, porque “aun desde el pensamiento con los deseos, el diálogo es esperanzador y podría superar el pedaleo en la bicicleta estática que es usual en este país, sin avances aparentes. Es la posibilidad de menguarle espacios a la guerra, que es un problema estructural, pero puede silenciar muchos elementos de su propia sordera”. Es, dice Laura Restrepo, un proceso para aprender, y tenemos que estar al tanto para entender y perdonar. Es en esta tarea, en la que la literatura debe abrir puertas. La literatura tiene que superar esa cultura heroica y revelar la cotidianidad, ajena a las novelas que no tienen escenas a puertas cerradas y sin violencia”.
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Foro presencia de Antioquia en la construcción del país Martes 22 de octubre de 2013 • 8:00 a.m a 5:00 p.m. • Plaza Mayor – Centro de Convenciones • Medellín • ENTRADA LIBRE Más de dos siglos de historia han trasegado Antioquia y la Universidad de Antioquia de sueños, iniciativas y empresas colectivas que han transformado a la región y al país en los ámbitos público y privado. Para entender cómo lo hemos logrado se revisarán cinco ejes esenciales que influyeron en el desarrollo de nuestro Departamento y en el progreso de Colombia en los terrenos de la planeación, la cultura y la sociedad, como prueba fehaciente de que Antioquia se ha constituido como una región con visión de futuro:
Mistral
Galeano
Educación -El camino que va del colegio seminario a la Universidad de Antioquia. -¿Cómo aportar desde la formación de maestros al desarrollo del país? Minería -El aporte del Código de Minas del Estado Soberano de Antioquia a Colombia. -La minería en Antioquia y su aporte en la construcción del país Derecho -Aporte de la Facultad de derecho a la cultura jurídico – política nacional -Estudios de Derecho en la Universidad de Antioquia: 186 años de historia Ingeniería -Aportes de la ingeniería antioqueña en el siglo XIX -Aportes de la ingeniería antioqueña en los siglos XX y XXI
Borges
Camps
Medicina -La fotografía médica en Antioquia 1813 – 2013 -Universidad y sociedad en la historia de la medicalización de la vida en Antioquia Diálogo de saberes -Antioquia: continuidades y discontinuidades del “ideal de lo práctico” -La minería y la industrialización del país. Una mirada desde Antioquia -El discreto aporte del derecho -La ingeniería antioqueña y su presencia en Colombia -Facultad de Medicina de la Universidad de Antioquia: 142 años orientando el rumbo de la medicina en Antioquia y en Colombia. Conferencia inaugural: Antioquia, 210 años de educación, trabajo y desarrollo para Colombia. Nicanor Restrepo Santamaría.
Mutis
Mejía
Sábato
Presencias memorables Por GISELA SOFÍA POSADA
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s imposible hacer el inventario exacto de quienes han dado lustre a la Universidad; visitantes que con sus palabras han fortalecido el pluralismo. Lo que si es preciso es constatar que el teatro universitario Camilo Torres Restrepo y la histórica aula máxima del Paraninfo han acogido figuras insoslayables de la cultura, y que allí ha confluido la voz y la reflexión de quienes, desde su oficio, han participado de la transformación de la sociedad. He aquí una muestra enunciativa —y por tanto con muchas omisiones— de personajes de las letras, de la cultura, de la intelectualidad que en los 210 años de la Alma Máter han dignificado lo público y dejado una estela de lucidez con su presencia: Gabriela Mistral (Chile 1889 – Nueva York 1957). Escritora y poeta que al visitar la Universidad de Antioquia en la década de 1950, dijo “estamos enfermos de muchos errores y de otras tantas culpas, pero nuestro peor delito se llama abandono de la infancia, descuido de la fuente”. Eduardo Galeano (Montevideo 1940). Escritor y poeta que al dictar su conferencia a mediados de la década de 1980 en el Paraninfo planteó: “una de las tareas
importantes de los intelectuales progresistas en América Latina consiste en recuperar, justamente, la historia como vía viva, arrancarla de los museos, donde la tienen encerrada los dueños del poder, para devolverla a la calle que es su verdadero lugar, porque la historia fue realidad y la realidad es historia”. Jorge Luis Borges (Buenos Aires 1899 – 1986). Escritor. En dos ocasiones recaló en Medellín, la primera en el Paraninfo de la Universidad de Antioquia, en 1967, cuando dictó una conferencia sobre los sueños: “Los sueños son una obra estética, quizá, la expresión estética más antigua, no solo de la humanidad sino de otras especies también”. Álvaro Mutis (Bogotá 1923 2013). Novelista, poeta y ensayista. En su larga lista de reconocimientos se incluye, en 1983, el Premio Nacional de Poesía por Reconocimiento Universidad de Antioquia. En 1993, cuando recibió el título Honoris Causa en Lingüística y Literatura, se refirió a la cultura antioqueña: “Se ha hecho un elogio y se ha insistido enormemente en la capacidad de esta raza antioqueña en crear riqueza, en fundar industria, en su empeño por el trabajo, en ser sembradores de prosperidad. Esto es cierto, pero es una versión incompleta, falta lo que a mi juicio es la esencia de este pueblo: su imaginación desbocada; su vocación de sueño; su verter
hacia la locura de un mundo mejor, del mundo de la poesía, del mundo del arte, del mundo del corazón, todos estos esfuerzos…capaces de mayores locuras, de crear belleza permanentemente, de hacer mucho más noble nuestra vida y la vida de Colombia”. Manuel Mejía Vallejo (Jericó, 1923 – Medellín, 1998). Escritor. En 1997 la Alma Máter le otorgó la distinción Orden al Mérito Universitario Francisco Zea, categoría Oro. En el homenaje, dijo: “Yo siempre he creído que el ejercicio literario tiene un premio en sí mismo. Para mí no es ningún mérito escribir, el mérito sería no hacerlo puesto que me costaría mayor esfuerzo”. Ernesto Sábato (Argentina 19112011). Escritor. En el Paraninfo, dictó la conferencia “El novelista y sus fantasmas” y enunció: “… luchen por la verdad, no importa que se equivoquen. Se van a equivocar infinidad de veces. Yo me he equivocado infinidad de veces, soy casi especialista en equivocaciones. Luchen por los ideales que tienen, no importa si los van a rectificar más adelante, pero hagan todo lo que sientan con fervor, lo que sientan que es auténtico, no cedan jamás a la mistificación, jamás cedan a la mentira ni al acomodo. Luchen por lo que sientan de verdad, por lo que quieran, verdaderamente, establecer en el destino de su propia vida”. Victoria Camps (Barcelona,
1941). Una de las figuras claves de la filosofía ética en España. Fue invitada en 2006 a la Cátedra Pública para hablar sobre “Ética, ciudad y comunicación en el mundo de hoy”. Allí expresó: “Los medios no reflejan todo lo que hay en la realidad, sino que los medios contribuyen a construir realidad. Los medios contribuyen a hacer la realidad”. Ecos de presencias que son la vigencia de un pensamiento dinámico que se ha instalado, para orgullo universitario, en el trasegar de su historia hasta volverse materia viva del presente. De esa pléyade también hacen parte los pintores Enrique Grau, Fernando Botero, Eduardo Ramírez Villamizar y Manuel Hernández; el periodista Germán Arciniegas; el científico, Rodolfo Llinás; el mimo más grande del mundo, Marcel Marceau; los poetas Fernando Charry Lara y José Manuel Arango; el político y periodista, Alberto Lleras Camargo; el poeta ruso Eugenio Evtushenko; los filósofos Gianni Vattimo, Fernando Savater, Ernst Tugendhat y Jesús Martín Barbero; los sociólogos Alain Touraine y Orlando Fals Borda; el pensador Edgar Morin; los escritores Germán Espinosa, Fernando Vallejo, William Ospina, Piedad Bonnet, Laura Restrepo y Juan Manuel Roca; y el Premio Nobel de Química Roald Hoffmann, entre otros. Figuras que con sus ideas y actitud visionaria han dado lustre a esta casa de estudios.
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onsolidar un pensamiento que trasciende el concepto de salud y entiende la enfermedad más desde los determinantes sociales; garantizar condiciones para el mejor vivir de la población; aportar en el direccionamiento de políticas públicas que ayuden desde el entorno político a generar condiciones para transformar la realidad sanitaria del país y promover un liderazgo de salud pública en el mundo, principalmente en Centroamérica y el Caribe, de donde se formaron los primeros ministros y autoridades sanitarias, hacen parte del legado que la Facultad Nacional de Salud Pública, FNSP, ha sabido cumplir en cinco décadas de existencia. Así lo considera la decana María Patricia Arbeláez Montoya, para quien esos legados hoy se traducen en proyección de la facultad en la docencia, en la formación de personal en salud pública tanto en los niveles técnicos y tecnológicos, profesionales y posgraduados —especializaciones, maestrías y doctorados— en programas con toda la pertinencia en los territorios, y en los proyectos de investigación que adelantan los distintos grupos. Pero también el trabajo constante para mostrar, por ejemplo, los impactos de la reforma sanitaria, la necesidad de la gobernabilidad en el sector, de mejorar condiciones de acceso a los servicios, en últimas —señala— de hacer abogacía pública por unas mejores condiciones de salud. “Y pienso que ahí se sintetiza el pensamiento y el actuar que también recibimos como legado del profesor Héctor Abad Gómez, y hemos querido que ese pensamiento continúe construyendo la Facultad”, dice la decana. Tras 50 años los desafíos que afronta la Facultad Nacional de Salud Pública —considera Arbeláez Montoya— se orientan a persistir como proyecto social, porque ante la coyuntura del actual sistema de
El gobernador Sergio Fajardo Valderrama entregó a la FNSP la distinción Escudo de Antioquia, categoría oro. Recibió la decana María Patricia Arbeláez y el rector Alberto Uribe Correa.
FNSP, cinco décadas por la salud pública salud tan centrado en el mercado la salud pública necesita un sitial de mucho más liderazgo y relevancia en la vida del país. El reto de la Facultad es, dice la decana, “conservar esa abogacía política por hacer de la salud pública una prioridad para los estados, para las comunidades y para la reivindicación de los derechos de salud y de bienestar de la población”. Para el rector Alberto Uribe Correa, los cincuenta años de la Facultad Nacional de Salud Pública reafirman medio siglo de arduo trabajo científico y académico al servicio de la sociedad, para mejorar las condiciones de las poblaciones más vulnerables y formar con excelencia profesionales que propugnan por el derecho fundamental a la salud. El directivo destacó el aporte al desarrollo de la administración, las
clínicas y hospitales que ha propiciado la FNSP desde la investigación en el campo de la epidemiología, la estadística y la salud pública propiamente dicha, como guía de los planes de acción del ministerio de Salud y las secretarías departamentales y locales de salud, y las contribuciones en planes básicos para la conservación de la salud de los colombianos mediante asesorías y consultorías. Asimismo, exhortó a la comunidad académico investigativa que integra la facultad para que prosiga contribuyendo con la investigación de los problemas de la salud y “siga mostrando a los gobernantes y a la sociedad los caminos que debemos recorrer en formación y en planes de acción y de desarrollo en salud pública”. Especialistas por hospitales En los actos conmemorativos en septiembre, a los que asistió el vi-
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ceministro de Salud, el rector Uribe Correa manifestó la preocupación por la propuesta gubernamental de autorizar a los hospitales universitarios para formar especialistas en las áreas médicas. El directivo universitario se mostró extrañado de que el Gobierno Nacional, empeñado en una reforma o una nueva ley de salud pública, trate de hacer una reforma a la educación superior a ultranza, entregándole a los hospitales universitarios la responsabilidad de formar el recurso humano que tan sabiamente —dijo— han preparado las universidades por tantos siglos como la bicentenaria Universidad de Antioquia, “delegando en ellos esa razón de hacer, que han tenido las universidades y las facultades de medicina en la formación del recursos humano en las residencias, en las especializaciones médicas clínicas y quirúrgicas”. El rector de la Universidad de Antioquia subrayó que tanto los decanos como los rectores están abiertos a trabajar de la mano con el ministerio de Salud para superar el déficit de especialistas “que somos conscientes sufre el país”. Pero solicitó vehementemente que no se les quite a las universidades la formación de los médicos especialistas, máxime cuando el Gobierno se comprometió a que en esta administración no se va a hacer una reforma a la educación superior. “Hagamos y fortalezcamos los hospitales universitarios, las redes en atención en salud”, dijo, pero insistió en que “no deformemos la formación de ese recurso tan importante que por tantos años en nuestra Universidad hemos venido mostrando y entregando a la sociedad, no solo los especialistas en las áreas clínicas y quirúrgicas sino en otras áreas, como estamos celebrando en esta ocasión en los 50 años de la Facultad Nacional de Salud Pública”, concluyó.
8° Congreso Internacional de Salud Pública
Justicia social, derechos humanos y equidad en salud 2° Congreso Panamericano de Salud y Ambiente Noviembre 27, 28 y 29 de 2013 - Plaza Mayor Medellín Convenciones y Exposiciones Informes http://saludpublica.udea.edu.co Correo: congresosaludpublica@ciec.udea.net.co • Teléfonos: (574) 2198932, 2196875 Medellín
Comité editorial: profesores John Jairo Arboleda Céspedes • Luquegi Gil Neira • Olga Castaño Martínez • Eufrasio Guzmán Mesa • Fabio Giraldo Jiménez • Heiner Castañeda Bustamante Director: Heiner Castañeda Bustamante • Edición de contenidos: Luis Javier Londoño Balbín • Ilustraciones: Juan Andrés Álvarez Castaño • Auxiliares: Diana Sofía Villa Múnera, Sara Giraldo Maestre, Carolina Sánchez Álvarez • Diagramación: Juan Camilo Vélez Rodríguez • Secretaria: María Mercedes Morales Osorio •
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Neurociencias de la UdeA, Premio en Ciencias de la FAÁE • El Hospital Universitario San Vicente Fundación fue declarado “Fuera de concurso”, un galardón especial para reconocer su trabajo durante cien años de existencia. • Los reconocimientos se entregarán en Bogotá el 9 de octubre
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a investigación Alzheimer genético por mutación E280A en el gen de la presenilina-1 (PS1) en familias de Antioquia: una oportunidad para el desarrollo de las terapias preventivas, del Grupo de Neurociencias de la Universidad de Antioquia, fue galardonada con el Premio en Ciencias Exactas, Físicas y Naturales que otorga la Fundación Alejandro Ángel Escobar, FAAE. La investigación —señala la comunicación de la FAAE— se convierte en una gran oportunidad para que la comunidad científica internacional pueda ofrecerles a más de 30 millones de personas en el mundo con enfermedad de Alzheimer tratamientos efectivos o preventivos en menor tiempo, con menores dificultades y menor costo. Los autores son Francisco Javier Lopera Restrepo, Margarita María Giraldo Chica, Natalia Acosta Baena, Gloria Patricia García Ospina, Daniel Camilo Aguirre Acevedo, Madelyn Gutiérrez Gómez, Victoria Claudia Tirado Pérez, Sonia Moreno Másmela, Amanda Lucía Saldarriaga Henao, Claudia Cecilia Muñoz Zapata, Adriana Lucía Ruiz Rizzo, Liliana María López Mejía, Diego Sepúlveda Falla, Sergio Álvarez, Juan Gabriel Castrillón, Carlos Mario Lopera Gómez y Andrés Arbeláez, investigadores de la Universidad de Antioquia, y Yakeel Quiroz Gaviria, investigadora del Hospital General de Massachusetts, Estados Unidos. El Premio en Ciencias Sociales y Humanas fue para la investigación La tierra en disputa. Memorias del despojo y resistencias campesinas en la Costa Caribe (1960 - 2010). Para el jurado se trata de “una obra magistral que documenta de manera muy juiciosa las luchas, las esperanzas y los retos de los procesos de memoria y restitución.” Los investigadores Absalón Machado Cartagena, Jeannette Lucía Castro Hernández, John Jairo Rincón García, Pablo Andrés Nieto Ortiz, Javier Mauricio Soto y Eliana Pinto Velásquez, del Centro Nacional de Memoria Histórica, fueron los autores de este trabajo. El Premio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible lo obtuvo la investigación Aportes a la conservación estratégica de los páramos: identificación de los límites inferiores a escala 1:100.000, realizada desde una visión multidisciplinaria, “lo cual es una fortaleza a la hora de aunar esfuerzos para la conservación estratégica de la diversidad biológica, cultural y paisajística de estos ecosistemas”. En su elaboración participaron Carlos Enrique Sarmiento Pinzón, Brigitte LG Baptiste Ballera, Jerónimo Juan Diego Rodríguez Rodríguez, Camilo Esteban Cadena Vargas, Jessica Andrea Zapata Jiménez, María Victoria Sarmiento Giraldo, Diana Patricia Ramírez Aguilera y
Jimena Cortés Duque, investigadores del Instituto de Investigación de Recursos Biológicos Alexander Von Humboldt; July Andrea Medina Triana, estudiante de La Guardia Community College, Long Island City, Nueva York, Estados Unidos, y Luisa Fernanda Pinzón Flórez, estudiante de la maestría en Geomática de la Universidad Nacional de Colombia, sede Bogotá.
Premios Solidaridad La Fundación Cultural Teatro Experimental de Boyacá y la institución Meta con Mirada de Mujer fueron los ganadores de los Premios Solidaridad que también otorga la FAAE. Asimismo, los jurados de los premios en Ciencias y Solidaridad otorgaron mención de honor a los siguientes trabajos: —Ecoepidemiología molecular y diversidad genética de Trypanosoma cruzi en Colombia: implicaciones biológicas, clínicas y evolutivas, de Juan David Ramírez González y Felipe Guhl Nannetti, del Centro de Investigaciones en Microbiología y Parasitología Tropical de la Universidad de los Andes, Bogotá. —Glaciares de Colombia, más que montañas con hielo, de Jorge Luis Ceballos Liévano, Edgard Leonardo Real Núñez y Camilo Eduardo Rodríguez Murcia, del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, IDEAM, Bogotá. —¿De quién es la tierra? Propiedad, politización y protesta campesina en la década de 1930, de Marco Antonio Palacios Rozo, del Centro de Estudios Históricos del Colegio de México, México. —Birds of empire, birds of nation: a history of science, economy, and conservation in United States-Colombia relations, de Camilo Quintero Toro, de la Universidad de los Andes, Bogotá. El reconocimiento de Colombia: diplomacia y propaganda en la coyuntura de las restauraciones (1819-1831), de Daniel Gutiérrez Ardila, de la Universidad Externado de Colombia, Bogotá. —Wetlands on the edge. A strategic intervention for the recovery of Jaboque Wetland in Bogotá, Colombia, de Juana Marcela Leal Simbaqueba, de la Universidad de los Andes, Bogotá. —Aumento de la producción de hidrógeno de Escherichia coli, tamizado genómico para la identificación de los genes relacionados con la producción de ADN extracelular y estudio de la influencia de las proteínas con el dominio GGDEF en la formación de biopelículas, de Viviana Sánchez Torres, de la Universidad Industrial de Santander. Las menciones de Solidaridad fueron para la Fundación Pequeño Corazón, la Asociación Concheras de Nariño – ASCONAR y la Fundación Génesis para la Niñez.
Sebastián Gómez, Premio Nacional de Historia El profesor de Historia, de la Facultad de Ciencias Sociales y Humanas, Sebastián Gómez González, obtuvo el Premio Nacional a la Investigación en Historia conferido por el Ministerio de Cultura y el Instituto Colombiano de Antropología e Historia, por la investigación La frontera selvática. Españoles, portugueses y su disputa por el noroccidente amazónico Siglo XVIII, que será publicada como libro en diciembre. La máxima distinción otorgada a los historiadores de Colombia fue para la tesis doctoral del profesor Gómez, resultado a su vez de una extensa investigación que él comenzó en 2008. La investigación, producto de información proveniente de los archivos históricos de Portugal, España, Brasil, Ecuador, del Archivo General de la República y del archivo central del Cauca en Popayán, describe la disputa por fronteras, la ocupación y la conquista de la cuenca amazónica por parte del imperio portugués y la pérdida de tierras del imperio español entre los siglos XVI y XVIII. Sobre sus conclusiones, Gómez señala que “lo más revelador fue entender el papel tan crucial que jugó la Compañía de Jesús en la cuenca del Amazonas, pues era una institución misional designada por el imperio español para evangelizar y adoctrinar y también era un proyecto de defensa. Ellos fueron expulsados del territorio americano por extralimitarse en sus funciones y este hecho fue aprovechado por el imperio portugués para ganar terreno y fundar fortificaciones militares”.
CONSEJO SUPERIOR UNIVERSITARIO: Sergio Fajardo Valderrama, Gobernador del Departamento y Presidente de la Corporación • Alberto Uribe Correa, Rector • Antonio Yepes Parra, Representante del Presidente de la República • Paula Marcela Arias Pulgarín, Representante de la Ministra de Educación Nacional • Clemencia Uribe Restrepo, Representante del Consejo Académico • Rafael Nieto López, Representante Profesoral • Mario Arturo González Arboleda, Representante de los Egresados • Manuel Santiago Mejía Correa, Representante del Sector Productivo, Luis Javier Arroyave Morales, Representante de los ex Rectores • Luquegi Gil Neira, Secretario General. CONSEJO ACADÉMICO: Alberto Uribe Correa, Rector • Fanor Mondragón Pérez, Vicerrector de Investigación • Juan Carlos Amaya Castrillón, Vicerrector de Docencia • María Helena Vivas López, Vicerrectora de Extensión • Rubén Alberto Agudelo García, Vicerrector Administrativo • Francisco Londoño Osorno, Decano Facultad de Artes • Luis Guillermo Palacio Baena, Decano Facultad de Ciencias Agrarias • Ramón Javier Mesa Callejas, Decano Facultad de Ciencias Económicas • Nora Eugenia Restrepo Sánchez, Decana Facultad de Ciencias Exactas y Naturales • Gloria Patricia Peláez Jaramillo, Decana Facultad de Ciencias Sociales y Humanas • David Hernández García, Decano Facultad de Comunicaciones • Clemencia Uribe Restrepo, Decana Facultad de Derecho y Ciencias Políticas • Carlos Arturo Soto Lombana, Decano Facultad de Educación • Sandra Catalina Ochoa, Decana Facultad de Enfermería • Carlos Alberto Palacio Tobón, Decano Facultad de Ingeniería • Élmer de Jesús Gaviria Rivera, Decano Facultad de Medicina • María Patricia Arbeláez Montoya, Decana Facultad Nacional de Salud Pública • Clara Eugenia Escobar Güendica, Decana Facultad de Odontología • Juan Carlos Alarcón Pérez, Decano Facultad de Química Farmacéutica • Lucía Stella Tamayo Acevedo, Representante Profesoral Consejo Académico • Luquegi Gil Neira, Secretario General. Invitados: John Jairo Arboleda Céspedes, Vicerrector General • Fabio Giraldo Jiménez, Director de Posgrado • Jaime Ignacio Montoya Giraldo, Director de Desarrollo Institucional • María Carolina Laverde Velásquez, Directora de Relaciones Internacionales • Daryeny Parada Giraldo, Directora de Bienestar Universitario • Dora Nicolasa Gómez Cifuentes, Directora Programa de Regionalización • Liliana Marcela Ochoa Galeano, Directora Escuela de Microbiología • María Teresa Arbeláez Garcés, Directora Escuela Interamericana de Bibliotecología • John Jairo Giraldo Ortiz, Director Escuela de Idiomas • Berta Lucía Gaviria Gómez, Directora Escuela de Nutrición y Dietética • Francisco Cortés Rodas, Director Instituto de Filosofía • Gloria María Castañeda Clavijo, Directora Instituto de Educación Física y Deporte • Jaime Cardona Usquiano, Director Oficina de Asesoría Jurídica • Claudia María Rivera Osorio, Auditora Interna • Heiner Castañeda Bustamante, Director de Comunicaciones.
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