Mientras todo el edificio del sistema económico occidental se está desmoronando bajo el peso de una deuda de 100 trillones de dólares que nadie puede pagar, los países de la Alianza Atlántica (OTAN) están desplegando un escudo antimisiles en Europa, que ha despertado la inquietud en Rusia, y cuando Occidente pareciera preparse para una eventual invasión a Irán, dos grandes potencias nucleares, China y Rusia, han manifestado que la única forma de detener lo que consideran una agresión de parte de Occidente y de Estados Unidos es por medio de “acción militar directa e inmediata”, por lo que han llamado a sus fuerzas militares a “prepararse para la guerra”. Según el analista norteamericano Greg Hunter, “nunca en la historia ha estado el mundo tan cerca del caos financiero total y de la guerra nuclear al mismo tiempo”