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que allí brotaron, convierten nuestro pavor ante la Covid-19 en meras lágrimas de cocodrilo. No sé si se han escrito lamentos más serios en toda la historia humana. Y, sin embargo, en medio de aquella desesperación rebrota y resuena la voz del poeta: aquel hombre que dice “haber probado el dolor”, y que “le han arrancado la paz y no recuerda la dicha”, se atreve a gritar en seguida que “la misericordia del Señor no termina y su compasión no se acaba”, que “el Señor no goza afligiendo, sino que se compadece siempre”. Y ello “le da esperanza”. (Ver el capítulo 3 de esas Lamentaciones) No hace falta que hagamos una lectura religiosa de todo eso. Basta con lo que podríamos llamar una “fe terrena”, pero que sea verdaderamente fe y no falsa ilusión, fácil y cómoda. Recordemos el célebre verso del poeta Hölderlin: “donde hay peligro crece lo que nos salva”. Pero no crece por sí mismo: necesita ser cultivado por nosotros.
A
nte la inminente situación de pandemia donde no se ve clara la “luz al final del túnel” dada la creciente velocidad e incremento de los contagios, saturación de hospitales e insumos sanitarios, crisis económica y desempleo. Es inevitable que las personas creyentes lleguen a cuestionarse ¿por qué Dios no escucha nuestras plegarias?, ¿por qué ordena el mal? Se debe tener muy bien claro que Dios no quiere ni ordena el mal, solamente lo permite para obtener algo muy bueno de sus hijos. Ninguna plegaria es ignorada o desoída por Él. Por ello debe estar lejos de los creyentes el supuesto de que Dios castiga a la humanidad por su desenfreno, desobediencia o maldad. No necesitamos ningún Dios “castigador”
porque nuestra misma conducta es la que nos coloca ahora ante una doble amenaza que nos obligará a optar: seguir como estábamos a costa de la vida de media humanidad y destrozando nuestra casa (que no me atrevo a llamar “común”), o buscar eso que la Biblia suele llamar conversión, traduciendo una palabra hebrea que significa cambio de rumbo.
Como pequeñas estrellas en la noche de hoy, los medios comentan maravillados cómo han descendido las emisiones de CO2 y cómo se ha purificado nuestra atmósfera. O cómo han disminuido los accidentes de tráfico. Cómo hemos descubierto la capacidad de sacrificio, de solidaridad y ternura en nuestro personal sanitario. Son cosas pequeñas, pero pueden ser gérmenes. Y el que lo sean, va a depender de nosotros y nos exige un estudio serio y un esfuerzo constante.
Porque, a pesar de todo lo dicho en la primera parte, si leemos esos maravillosos poemas bíblicos llamados Lamentaciones falsamente atribuidos a Jeremías descubriremos algo importante: que Jerusalén fuera tomada y arrasada era algo tan increíble para un judío (y parecía tan ratificado por experiencias previas), que el dolor y la desesperación
El amor todo lo puede: las cosas más imposibles no le parecen difíciles. Jesús no mira tanto la grandeza de las obras, ni siquiera su dificultad, sino el amor con que tales obras se hacen... Santa Teresita de Niño Jesús
Afirmamos, acorde con la evidencia científica, que la vida humana comienza desde el momento de la concepción. Reafirmamos que todo ser humano es merecedor de respeto y debe ser reconocido y tratado como persona, sin limitarlo por su grado de desarrollo, su salud, su origen o su condición social o económica.” (n. 11, b. y c.) Esto concuerda con el proyecto divino y es concordante con los hallazgos de las ciencias. En el mismo documento se mencionó que existe una tendencia a “confrontar a la madre y sus anhelos contra la vida de su hijo” (n 6.d). El bienestar de madre e hijo son convergentes. La dignidad de la vida humana, que inicia desde la fecundación se extiende también a lo largo de toda su vida. El aborto no es un apoyo para la mujer, que puede ser incluso víctima al encontrarse en el vientre de su madre. Es necesario que sea reconocida y atendida esta dignidad humana en particular en el caso de la mujer en situación vulnerable. Los obispos reconocemos la necesidad de una atención especial para aquellas mujeres que requieren protección, apoyo en sus necesidades materiales y de salud física y psicológica.
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l martes 21 de julio de 2020 se dio a conocer que la Suprema Corte de Justicia de la Nación próximamente analizará, en su primera sala, un expediente relacionado con el aborto y con la protección del derecho a la vida de los seres humanos en gestación en el estado de Veracruz. Las implicaciones de dicho análisis y su resolución podrían impactar directamente en la protección legal del derecho humano fundamental a la vida, en concreto en sus primeras etapas. Si bien sus consecuencias inmediatas tendrían efecto en ese estado, sus efectos se podrían extender a las demás entidades de país.
En relación con dicha noticia, y ante las inquietudes presentadas por fieles católicos, los obispos de México confirmamos lo expuesto en la Declaración Conjunta que hicimos sobre la Vida y la Dignidad Humana, dada a conocer el jueves 16 de julio del presente: “Celebramos que cada persona es creada por Dios como un ser que merece ser amado por sí mismo y nunca deber ser usado como mero medio. La vida que cada ser humano posee desde la concepción y hasta la muerte natural, es un don que hay que custodiar como algo verdaderamente sagrado.
Compete a las autoridades de cualquiera de los tres poderes, o de cualquier nivel de gobierno, actuar en miras a otorgar la máxima protección legal al derecho a la vida que tiene cada individuo de la especie humana en cualquier momento y circunstancia. Exhortamos a todos los fieles católicos y a todos los ciudadanos a que sumemos nuestros esfuerzos para lograr que la dignidad de cada ser humano sea apreciada y que salgamos delante de los graves desafíos que se nos presentan en este momento de la historia de nuestro país. Hacemos esta comunicación como ciudadanos y como mexicanos, en ejercicio de nuestro derecho de expresión ratificado en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la libertad que nos da la misma Constitución para expresar nuestra libre creencia y conciencia de fe (CPEUM art. 6 y art. 7). Fraternalmente +José Jesús Herrera Quiñones Obispo de Nuevo Casas Grandes Chihuahua Y Responsable de la Dimensión Episcopal de Vida.
Vatican News
cielos, para que en nuestras palabras y en nuestros gestos se manifieste el amor que Dios nos ha donado mediante Jesús. Después del Ángelus Queridos hermanos y hermanas, en la memoria de santos Joaquín y Ana, los “abuelos” de Jesús, quisiera invitar a los jóvenes a realizar un gesto de ternura hacia los ancianos, sobre todo a los que están más solos, en las casas y en las residencias, los que desde hace muchos meses no ven a Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días!
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l Evangelio de este domingo (cfr. Mt 13, 44-52) corresponde a los últimos versículos del capítulo que Mateo dedica a las parábolas del Reino de los cielos. El pasaje tiene tres parábolas apenas esbozadas y muy breves: la del tesoro escondido, la de la perla preciosa y la de la red lanzada al mar. Me detengo en las dos primeras en las cuales el Reino de los cielos es comparado con dos realidades diferentes «preciosas», es decir el tesoro escondido en el campo y la perla de gran valor. La reacción del que encuentra la perla o el tesoro es prácticamente igual: el hombre y el mercader venden todo para comprar lo que más les importa. Con estas dos similitudes, Jesús se propone involucrarnos en la construcción del Reino de los cielos, presentando una característica esencial de la vida cristiana: se adhieren completamente al Reino aquellos que están dispuestos a jugarse todo, que son valientes. De hecho, tanto el hombre como el mercader de las dos parábolas venden todo lo que tienen, abandonando así sus seguridades materiales. De esto se entiende que la construcción del Reino exige no solo la gracia de Dios, sino también la disponibilidad activa del hombre. ¡Todo lo hace la gracia, todo! De nuestra parte solamente la disponibilidad a recibirla, no la resistencia a la gracia: la gracia hace todo pero es necesaria “mi” responsabilidad, “mi” disponibilidad. Los gestos de ese hombre y del mercader que van en busca, privándose de los propios bienes, para comprar realidades más preciosas, son gestos decisivos, son gestos radicales, diría solamente de ida, no de ida y vuelta: son gestos de ida. Y, además, realizados con alegría porque ambos han encontrado el tesoro. Somos llamados a asumir la actitud
de estos dos personajes evangélicos, convirtiéndonos también nosotros en buscadores sanamente inquietos del Reino de los cielos. Se trata de abandonar la carga pesada de nuestras seguridades mundanas que nos impiden la búsqueda y la construcción del Reino: el anhelo de poseer, la sed de ganancia y poder, el pensar solo en nosotros mismos. En nuestros días, todos lo sabemos, la vida de algunos puede resultar mediocre y apagada porque probablemente no han ido a la búsqueda de un verdadero tesoro: se han conformado con cosas atractivas pero efímeras, de destellos brillantes pero ilusorios porque después dejan en la oscuridad. Sin embargo la luz del Reino no son fuegos artificiales, es luz: los fuegos artificiales duran solamente un instante, la luz del Reino nos acompaña toda la vida. El Reino de los cielos es lo contrario de las cosas superfluas que ofrece el mundo, es lo contrario de una vida banal: es un tesoro que renueva la vida todos los días y la expande hacia horizontes más amplios. De hecho, quien ha encontrado este tesoro tiene un corazón creativo y buscador, que no repite sino que inventa, trazando y recorriendo caminos nuevos, que nos llevan a amar a Dios, a amar a los otros, a amarnos verdaderamente a nosotros mismos. El signo de aquellos que caminan en este camino del Reino es la creatividad, siempre buscando más. Y la creatividad es la que toma la vida y da la vida, y da, y da, y da… Siempre busca muchas maneras diferentes de dar la vida. Jesús, Él que es el tesoro escondido y la perla de gran valor, no puede hacer otra cosa que suscitar la alegría, toda la alegría del mundo: la alegría de descubrir un sentido para la propia vida, la alegría de sentirla comprometida en la aventura de la santidad. La Virgen Santa nos ayude a buscar cada día el tesoro del Reino de los
sus seres queridos. ¡Queridos jóvenes, cada uno de estos ancianos es vuestro abuelo! ¡No les dejéis solos! Usad la fantasía del amor, haced llamadas, videollamadas, enviad mensajes, escuchadles y, donde sea posible respetando las normas sanitarias, id a visitarlos. Enviadles un abrazo. Ellos son vuestras raíces. Un árbol separado de las raíces no crece, no da flores ni frutos. Por esto es importante la unión y la conexión con vuestras raíces. “Lo que el árbol tiene de florido, vive de lo que tiene sepultado”, dice un poeta de mi patria. Por esto os invito a dar un aplauso grande a nuestros abuelos, ¡todos!
en la ciudad del Señor de los ejércitos, en la ciudad de nuestro Dios: que Dios la ha fundado para siempre. ¡Oh Dios!, meditamos tu misericordia en medio de tu templo: como tu renombre, ¡oh Dios!, tu alabanza llega al confín de la tierra; tu diestra está llena de justicia: el monte Sión se alegra, las ciudades de Judá se gozan con tus sentencias. Dad la vuelta en torno a Sión, contando sus torreones; fijaos en sus baluartes, observad sus palacios, para poder decirle a la próxima generación: “Este es el Señor, nuestro Dios.” Él nos guiará por siempre jamás.
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manece, Jesús, y yo, aunque estoy un poco quebrantado de mi cuerpo, siento ganas de cantarte, de proclamar por todos lados que Tú eres nuestro refugio y fortaleza. Y cómo no hacerlo si creo que nos ayudaste anoche. Cuando escondimos al hijo de mi mejor amigo. Ya sabes, si no lo protegíamos lo secuestraban. Y aunque pudimos ponerlo temporalmente bajo seguro, me pregunto: ¿Por cuánto tiempo podremos hacerlo así? y me respondo: no por mucho. Nuestros hijos te necesitan. Necesitan aprender a refugiarse en ti. Así que muéstrales tu misericordia. Dales un corazón firme. Que aprendan de gracia y de lealtad. Que cada mañana se levanten, como yo ahora, cantando tu gloria, despertando a la aurora llenos de gratitud y fidelidad.
Misericordia, Dios mío, misericordia, que mi alma se refugia en ti; me refugio a la sombra de tus alas mientras pasa la calamidad. Invoco al Dios Altísimo, al Dios que hace tanto por mí: desde el cielo me enviará la salvación, confundirá a los que ansían matarme, enviará su gracia y su lealtad.
Mi corazón está firme, Dios mío, mi corazón está firme. Voy a cantar y a tocar: despierta, gloria mía; despertad, cítara y arpa; despertaré a la aurora.
Estoy echado entre leones devoradores de hombres; sus dientes son lanzas y flechas, su lengua es una espada afilada.
Te daré gracias ante los pueblos, Señor; tocaré para ti ante las naciones: por tu bondad, que es más grande que los cielos; por tu fidelidad, que alcanza a las nubes.
Elévate sobre el cielo, Dios mío, y llene la tierra tu gloria.
Elévate sobre el cielo, Dios mío, y llene la tierra tu gloria.
Han tendido una red a mis pasos para que sucumbiera; me han cavado delante una fosa, pero han caído en ella.
—Salmo 56— Este salmo canta la pasión del Señor. San Agustín Grande es el Señor y muy digno de alabanza en la ciudad de nuestro Dios, su monte santo, altura hermosa, alegría de toda la tierra: el monte Sión, vértice del cielo, ciudad del gran rey; entre sus palacios, Dios descuella como un alcázar. Mirad: los reyes se aliaron para atacarla juntos; pero, al verla, quedaron aterrados y huyeron despavoridos; allí los agarró un temblor y dolores como de parto; como un viento del desierto, que destroza las naves de Tarsis. Lo que habíamos oído lo hemos visto
—Salmo 47— Me transportó en espíritu a un monte altísimo y me enseñó la ciudad santa, Jerusalén. Apocalipsis 21, 10 Deseo que me escuchen todos. Que sepan que Tú nos guardas igual que un pastor a su rebaño, y nos rescatas de la mano de los más fuertes. Déjame ir por ahí durante el día, aclamándote por los bienes que nos concedes. Que quienes me escuchen experimenten su alma como un huerto regado. Que se alegren por igual jóvenes y viejos, que te canten con sus ilusiones, que bailen con sus éxitos, que sean agradecidos y misericordiosos. Y que aprendan a convertir su tristeza en gozo, porque Tú, Jesús, hoy y siempre eres nuestro refugio y fortaleza. Amén.
ILUMINACIÓN DESDE LA FE
Por: Pbro. Carlos Sandoval Rangel
adelante con dignidad y será causa de muchas complicaciones. En ese sentido podemos hablar del orden de vida, de pensamientos, en el trabajo, en el dinero y en todo. Nace porque sabemos para qué vivimos, para qué es el trabajo, para qué es el dinero, para qué es cada cosa. Cuando eso sucede, las relaciones con Dios y con las personas siempre serán adecuadas. Si nos vamos a lo concreto de cada persona, podemos decir que se parte de un orden interior y será, a partir de ahí, que se ordenan las demás cosas y toda la vida. Ese orden interior se reflejará en lo que hacemos, en lo que hablamos, en lo que tenemos, en lo que pretendemos.
Por ejemplo, para un niño, no puede tener la misma importancia el estudio que cualquier otra actividad lúdica. Las dos son válidas y necesarias, pero hay un orden. El orden es algo indispensable para toda la vida, lo propio es que se aprenda en familia, pero será fundamental que nos acompañe por toda nuestra existencia. Sin él difícilmente se saldrá
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ecía el maestro Aristóteles que “es misión del sabio ordenar las cosas” (Metafísica, L. 11). Afirmación que, igual, podemos traducir: el sabio es el que es capaz de ver el todo y dar un orden a cada elemento, dando el lugar justo a cada uno. De hecho, sabio no es el que sabe más cosas, sino el que sabe actuar de actuar de modo adecuado a la realidad. Aclarando que si el sabio, además de actuar en orden, se va nutriendo de más conocimientos, entonces tendrá más argumentos para saber discernir y decidir. Por su parte, Tomás de Aquino, comentando a Aristóteles, decía que “en las cosas se dan dos clases de orden: uno, el de las partes entre sí de un todo o de una multitud; así, por ejemplo, las partes de una casa están ordenadas entre sí. Otro, es el orden de las cosas al fin” (Comentario a la ética a Nicómaco). Los dos son importantes, pero el segundo es el más.
Todas las cosas están ordenadas a un fin, así las pensó Dios y, es a partir de eso, que es importante no sólo darles un lugar y relacionarnos con todo de modo justo, sino que también desde ahí ordenar nuestra propia vida. El agua tiene como fin hidratar, la silla es un instrumento que ayuda al descanso del ser humano, la comida a nutrir, el aire a oxigenar, el músico a generar música, la persona a amar y, así, todo tiene un fin esencial. Su naturaleza está dotada para responder a ese fin, por lo que los seres humanos debemos relacionarnos con cada cosa a partir del fin que les corresponde por naturaleza. De ahí que, por el significado y el valor, no pueden tener el mismo lugar las personas, los animales o los bienes materiales. Todo es importante a partir de un orden. Igual, cualquier actividad toma un orden jerárquico en la medida que suma a que las personas y las demás cosas cumplan con sus fines más altos.
Como sugerencia, es bueno ordenar la vida y el tiempo, en el día a día, partiendo de la familia, del espacio para alimentar nuestro interior, del trabajo, la lectura, los alimentos bien hechos, algo de deporte y otras actividades lúdicas. Todo alimenta, sea el espíritu, las emociones o el cuerpo, por tanto, todo es necesario. Pero si nos saturamos en determinadas actividades, entonces terminamos por descuidar otras. Somos seres corpóreos, con emociones y con una bella dimensión espiritual. Cuando damos orden a nuestra vida, partiendo de los valores más altos, podemos disfrutar de todo y nada sobra, nada daña, todo suma.
LA FAMILIA CATÓLICA MODERNA
Por: Silvia del Valle @SilviaMdelValle @smflorycanto
Por eso debemos
establecer tiempos para
jugar con nuestros hijos, a pesar del cansancio y de las preocupaciones
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cotidianas.
l juego es muy importante en la vida y desarrollo de nuestros hijos. Es una actividad vital por medio de la cual van aprendiendo poco a poco y adquiriendo madurez motora y psicológica ademas de que fomentamos valores y virtudes por medio de el. Desde bebés, nuestros hijos comienzan a jugar con sus manitas, cuando se las descubren y luego con sus pies; y así con cada parte del cuerpo que se van conociendo. Esto lo hacen para sentírsela y para aprender a ubicarla y cómo funciona. Conforme crecen comienzan a jugar con las cosas que les ponemos en la mano, aprenden que color tiene, aunque no sepan como se llama ese color, aprenden si es grande o pequeño, aprenden que se puede caer y muchas veces nos incluyen en su juego dejando caer los objetos para que nosotros se los regresemos, etc. El juego forma parte de la infancia de nuestros hijos y conforme crecen se vuelve más y mas sofisticado hasta llegar a los deportes, que ya implican una disciplina y un compromiso. Por lo mismo, debemos cuidar a los que juegan, porque aprenden del juego, y si los juegos son violentos, tramposos, ilegales o indignos, estarán aprendiendo esos valores y luego los llevarán a la vida, convirtiéndose en personas incómodas para la sociedad, por no decir nocivas. Por eso es super importante que dejemos jugar a nuestros hijos y no los llenemos de actividades y tareas pesadas, así que aquí te dejo mis 5Tips para aprovechar el tiempo de nuestros hijos jugando. PRIMERO. Mientras son pequeños, el juego didáctico es lo más importante. Los tiempos de los bebés
son muy diferentes a los nuestros. Tiene ciclos cortos y repetitivos. Es muy importante establecer rutinas claras que incluyan el juego como parte del desarrollo y la estimulación. Si nuestro hijo ya es capaz de mantener varias horas despierto, podemos comenzar a jugar con el para que sienta sus partes del cuerpo. Podemos también ponerlo frente a estímulos de color y de movimiento para que comience a localizar su atención. Conforme crezca podemos irle dado pequeños juguetes adecuados a su edad para que los vaya adoptando y le ayuden a su desarrollo psicomotor. Para nuestros hijos preescolares, es necesario tener material didáctico como cubos grandes, piezas de lego grandes, rompecabezas de piezas grandes y de plástico o madera, pelotas, muñecos, etc. ya que sus manos son aun torpes y necesitan las piezas tener un tamaño adecuado para ellas. Poco a poco y dependiendo de sus gustos, podemos conseguirles juguetes de plástico, de tamaño mediano a grande para que puedan manipularlos adecuadamente. Son recomendables figuras tiernas, o por lo menos no agresivas ya que la conciencia de nuestros hijos se está formando y es bueno presentarle modelos sanos. Cuando nuestros hijos crecen, podemos ademas agregar algunas aplicaciones didácticas que ayuden a
reafirmar los conocimientos jugando y que además les sirva de esparcimiento como los son el basta, completar palabras o el propio calculo mental. Todo esto siempre con nuestra supervisión y con los cuidados que requiere. SEGUNDO. Conforme crecen, establece un horario de juego. Es importante establecer tiempos de juego y directrices para que nuestros hijos vayan estableciendo rutinas desde pequeños y cuando crezcan sepan que hay tiempo para jugar y tiempo para hacer los deberes y que el sano equilibrio entre ellos nos da estabilidad y tranquilidad. TERCERO. Evita los juegos violentos o agresivos. Es de vital importancia que nuestros hijos permanezcan lejos de los juguetes o juegos agresivos el mayor tiempo posible ya que la conciencia se les está formando y aun no tienen muy claro lo que está bien de lo que está mal y si nosotros les presentamos estos patrones de comportamiento o instrumentos de juego violentos como algo bueno o algo cercano, se les formará el concepto de que son buenos y que los pueden usar en el momento que deseen, al fin son un juego y les genera bienestar o placer. Tengamos cuidado de que acercamos a nuestros hijos. CUARTO. Existen apps de juegos didácticos que nos pueden ayudar.
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Debemos tener cuidado de no acostumbrar tampoco a nuestros hijos al uso de los aparatos electrónicos desde pequeños, pero si ya están en edad de usarlos, existen apps y herramientas que nos pueden ser de ayuda. Por eso debemos darnos una vuelta por las tiendas de aplicaciones y ver cuales son adecuadas para la edad y madurez de cada uno de nuestros hijos. Y no solo eso, debemos darnos el tiempo de revisarla y de probarla para que podamos orientarlos en el uso de ellas. Y QUINTO. Nosotros debemos estar incluidos en sus juegos. El mejor elemento para que un juego sea exitoso o sea el mejor de todos es que nosotros, sus papás, estemos incluidos. Por eso debemos establecer tiempos para jugar con nuestros hijos, a pesar del cansancio y de las preocupaciones cotidianas. Si establecemos tiempos fijos para convivir y jugar con ellos, estaremos entablando y fortaleciendo vínculos con nuestros hijos, además de abrir canales de comunicación que después nos serán de gran utilidad. Yo creo que como papás y mamás, lo que más buscamos es la felicidad y el bienestar de nuestros hijos, por eso estamos dispuestos a hacer un esfuerzo extra para regalarles a nuestros hijos nuestro tiempo de calidad para jugar y convivir con ellos.
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ara gloria de Dios, la obra de la Nueva Catedral sigue adelante. Actualmente, quien transite por la avenida Torres Landa o por el Sauz, podrá apreciar las cuatro estructuras en forma de triángulo que hasta este momento se han levantado, pero que ya permiten visualizar como será en el futuro, la construcción terminada.
Los cuatro pares de columnas se han colado en el terreno de la Nueva Catedral, pues su inmenso tamaño no permitía trasladarlas desde otro lugar de la República.
Vista de la estructura desde el punto donde estará el espacio para el Atrio de la Familia. La entrada principal se encuentra sobre la avenida el Sauz.
Es importante destacar que los fondos que se están utilizando han sido donados por miles de bienhechores que, generosamente, están apoyando la obra, ya sea mediante alcancías, losas, sorteos, células o donativos personales, y como son específicamente para la Nueva Catedral, por eso, no pueden ni deben destinarse para otra actividad.
actual tiene ideales y valores firmes y que no vamos a dejar que las ideologías nos influyan para defender lo indefendible, y que por el contrario damos testimonio con nuestras vidas, sin necesidad de imponerle nada a nadie, simplemente demostrándolo en nuestro día a día.
Por Silvia Elisa García del Valle
Es muy padre ver como muchísimos jóvenes cambian sus fotos de perfil en Facebook para ponerle el marco a favor de la vida o cómo se ha logrado tener hashtags Pro Vida en tendencia en Twitter.
hombre y mujer) que da como fruto la vida de nuevos seres humanos. No podemos decir que no queremos hijos porque queremos disfrutar la vida o porque no queremos sufrir, pero al mismo tiempo que somos pro vida.
Y esto es algo que debería darnos Además, ser pro vida es no estar de esperanza, por todo lo que significa... acuerdo con la violencia que atenta contra la vida de tantas personas. ...pero, como jóvenes, ¿sabemos verdaderamente qué significa ser Pro Un joven pro vida también tiene paciencia con los adultos mayores y vida, o estar a favor de la vida? no está de acuerdo con métodos como Porque no es solo una moda, y la eutanasia, porque sabe que toda tampoco es solamente estar en contra vida es sagrada, tanto la de los bebés, como la de los niños, los jóvenes, los del aborto. adultos, los hombres, las mujeres, los Claro que este es un punto esencial, adultos mayores... ¡cualquier vida! pues actualmente la vida de los bebés antes de nacer está muy Por eso, ver jóvenes que son atacada y, como ellos no pueden verdaderamente pro vida debe defenderse solos, es muy valioso llenarnos de esperanza, tanto a que como jóvenes los defendamos y nosotros como jóvenes, como al resto demos testimonio de que nosotros no de la sociedad católica, pues quiere estamos de acuerdo con las prácticas decir que aún habemos jóvenes con estos valores, a diferencia de lo que el que atentan contra su vida. mundo cree. Ser pro vida además es estar a favor del matrimonio (como Dios lo creo, Demos testimonio de que la juventud
¿Qué opinas? ¿Tú eres un joven o una joven pro vida? ¡Recuerda! El testimonio se da en todo momento, tanto en las redes sociales como, sobre todo, fuera de ellas. ¡Que todo sea para la máxima gloria de Dios!
No dejemos nada para después te, sin embargo, muchos de los buenos propósitos que nos habíamos fijado a principios de año se han postergado i n d e - finidamente, por enésima vez. Creía- mos que era por falta de tiempo que no podíamos cumplir con lo prometido, pero, ahora que lo tenemos, nos hemos desengañado nosotros mismos. ¿Por qué nos cuesta tanto trabajo vencernos y actuar para combatir nuestros vicios, o peor aún, para cumplir nuestros sueños y objetivos? Creo que puede ser porque no estamos acostumbrados a fijarnos metas. Imaginamos que la vida nos premiará con lo que merecemos, sin esfuerzo alguno, que quizá, por intervención divina, cambiarán las cosas y que obtendremos todo lo que anhelamos con sólo desearlo. Y estamos tan convencidos de ello, que preferimos dejar de pensar en lo que nos puede sacar de nuestra zona de confort y volver a soñar despiertos, aunque, muy en el fondo, sabemos
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stamos imbuidos en un mundo de contradicciones, por un lado, todo parece haberse detenido desde que comenzó la pandemia en nuestro país. Muchas situaciones han cambiado desde entonces, como la prisa que teníamos por llegar a todos lados. Ahora, con la restricción que tenemos para salir debido a la posibilidad de contagio, hemos tenido que prescindir de actividades usuales y cotidianas como ir a trabajar o a estudiar. Nos hemos visto obligados a bajar el ritmo de vida y mantenernos en resguardo en nuestra casa, concretando nuestras salidas para actividades indispensables como comprar comida, y, en algunos casos acudir a trabajar.
cursos, sin embargo para un elevado número de individuos ha significado dar un gran salto desde el escaso o nulo uso de las tecnologías hasta convertirse en usuarios habituales.
Por otra parte, nos hemos visto forzados también a adentrarnos en el uso del internet para mantenernos en comunicación, muchos afortunados, para continuar con su trabajo en casa, los estudiantes de todos los niveles para concluir el ciclo escolar, situación sumamente difícil para las comunidades rurales y personas de escasos re-
A pesar de este fenómeno, creo que aún no hemos superado una actitud a la cual está encadenada una gran parte de la humanidad: la procrastinación, como se dice actualmente, o para que nos quede más claro el término, dejar todo para después.
Pero, más allá de esta situación, que todos esperamos, pase pronto, nos hemos dado cuenta de que extrañamos el contacto físico con la gente, querida o desconocida, lo cual se nota inmediatamente en el número de personas que comienzan a acudir a los sitios públicos que están abriendo poco a poco, y, aunque aún está restringido el acceso para algunas personas, cada día es más frecuente observar a familias enteras en la calle.
Tenemos más tiempo libre, ciertamen-
que la única manera de obtener lo que queremos será con mucho esfuerzo y tenacidad. Así pues, tristemente, el que espera que la ayuda le venga sola, se llevará una gran decepción. De la misma manera, si dejamos para después hasta lo más importante, pronto se nos irá la vida, y cuando volteemos para echar un vistazo hacia atrás, lo único que podremos ver será una vida desperdiciada, relaciones olvidadas y compromisos echados a la basura por desidia. No permitamos que esto suceda, fijémonos metas, organicemos nuestro tiempo, cumplamos nuestros compromisos, cultivemos nuestras relaciones interpersonales y pongamos a trabajar los dones que poseemos para mejorar nuestra vida cada vez más. Recordemos que todo lo que hagamos o dejemos de hacer, marcarán nuestro camino y dejará huella en todos los que conviven con nosotros, sobre todo los más pequeños para quienes somos ejemplo a seguir. Que tengan una excelente semana.
“Lava de todo mi delito, Señor, limpia mi pecado”. Antiguamente, fue un gesto práctico porque el sacerdote recogía las ofrendas que presentaban los fieles. Sin embargo, el simbolismo sigue siendo actual, significa el sentimiento espontáneo que siente el corazón humano de purificarse antes de tocar las cosas santas o sagradas.
En nuestra catequesis anterior vimos: El OFRECIMIENTO DE LOS DONES. Ahora veremos: EL LAVATORIO DE LAS MANOS Y LA INVITACIÓN A ORAR Luego que el sacerdote recibe los dones que la comunidad presenta y los prepara en el Altar, se lava las manos, de pie a un lado del Altar. “Con este rito se expresa el deseo de purificación interior” (IGMR 76). Así lo denotan las palabras de la oración que el sacerdote pronuncia en secreto al lavarse las manos:
Luego, el Sacerdote, regresa al centro del altar y con los brazos abiertos hace una invitación a la asamblea, para que se una en oración y ofrezca a Dios el sacrificio de la Eucaristía, que es de todos los presentes y de toda la Iglesia. Al momento de recibir esta invitación la comunidad ya debe de estar de pie. El Sacerdote invita a la Oración con esta o parecidas palabras: “Oren, hermanos, para que este sacrificio mío y de ustedes, sea agradable a Dios, Padre todopoderoso”. Y la asamblea responde: “El Señor reciba de tus manos este sacrificio, para alabanza y gloria de su nombre, para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia”.
Por: Mtra. María Cecilia del Carmen Balderas Almanza
Esto nos indica nuestra interconexión con la vulnerabilidad; y para poder ganarnos el cielo, es nuestra tarea lograrlo, aceptando nuestra condición de vivir entre el deleite y el dolor.
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in duda una de las cualidades del matrimonio es el disfrute, este atributo bien entendido lleva implícito vivirlo con virtudes humanas, para acrecentarlo en pareja, y esparcirlo al medio con el que interactuemos, independientemente de las circunstancias que la vida nos presente. El matrimonio considerado como la íntima unión co creadora de la vida y del amor conyugal, establecida sobre la alianza de los cónyuges sobre su consentimiento irrevocable, tiene como mencioné la cualidad, el disfrutar, y para ampliar su significado en el diccionario, encuentro que es la acción de disfrutar, añade, "a nadie puede excluírsele de su disfrute; en esa búsqueda de lo contemporáneo, en la visión sobre el presente, que es en donde está la posibilidad de disfrute" , sus sinónimos: goce, posesión, placer, deleite, deleitación. Por lo que, en el día a día de la vida conyugal, está su mera ocasión y fortuna, en el aquí y en el ahora. Como pareja podemos gozar de la compañía del otro, el poseernos en cuerpo y alma,” ya no siendo dos, si no uno”. (Mt. 19. 6-8) ordenando el placer en la unión íntima, el deleite al disfrutar de un platillo favorito al celebrar una fecha especial, la deleitación de ver los logros cumplidos, y así podríamos continuar describiendo tantas situaciones en las que una
pareja puede generar felicidad en su vida, como nos indica el evangelista San Juan 10, 10 de la misión de Jesús, “He venido a darles vida y vida en abundancia”. Sin embargo, nuestra vida no es estar en un continuo deleite, por ejemplo, el deber cumplido en toda relación de pareja, no está exento de pasar esfuerzos, tribulaciones, etc. eso se llamaría cielo, para esto nos enseña San Lucas (9, 23-26) con la petición que nos hace Jesús, "Si alguno quiere venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz de cada día, y sígame”. Ambas citas nos invitan a aceptar el plan Divino de la vida, con oportunidades tanto positivas como con sus infortunios, es así también que podemos experimentar los antónimos de la palabra disfrutar, como es dolor, malestar, disgusto. El dolor humano es un misterio, difícil de conceptualizar, este tema nos acompañará todos nuestros días. Esto indica que la armonía estará frecuentemente interrumpida. La antropología considera el dolor como parte de objeto de estudio, ya que pertenece a la experiencia humana en su parte integral. Para ello podemos ilustrarnos de la Carta Apostólica que San Juan Pablo II Salvifici Doloris, explica que el dolor es “un tema universal que acompaña al hombre a lo largo y ancho de la geografía. En cierto sentido coexiste con él en el mundo y por ello hay que volver sobre él constantemente”
En este tiempo en el que el confinamiento nos pone frente a esta fragilidad, que lejos de experimentar la vida inclinada a disfrutarla, como generalmente estábamos acostumbrados, probablemente estemos probando más bien padecimientos e incertidumbre provocando angustia, miedo, preocupación, etc. Ante esta nueva normalidad, ¿será posible tener en nuestras manos alguna alternativa y proyectar hacia lo positivo, a pesar del panorama mundial? La respuesta es, si, es posible. Una opción se encuentra en la publicación de la Doctora en Psicología Social Sonja Lyobunirsky, formada en la Universidad de Harvard, en su obra titulada “Los cómos de la felicidad” (2007) en el que comparte sus experiencias basadas en evidencias científicas que pueden ayudar a las personas a aumentar su nivel de felicidad. Enseña que nuestra felicidad está bajo un 50% pre determinado por nuestra genética, otro 10’% lo deciden las circunstancias y situaciones de la vida y que tenemos un 40% que está sujeto a cierto control de nosotros, que tenemos la posibilidad de manipularlo por nuestras acciones y pensamientos. Con lo anterior, asumimos que tenemos un 40% a nuestro favor, con la posibilidad de modificar o bien, adaptarnos a ese 60%. Viktor Frankl, neurólogo psiquiatra y teólogo austriaco, que sobrevivió de 1942 a 1945 en varios campos de concentración nazis, en Auschwitz y Dachau, creador de la Logoterapia y de varios ejemplares con tópicos relacionados a las maneras de transformar una realidad adversa, comparte en su primer escrito “El hombre en busca de sentido” (1946), se encuentra una frase inspiradora que es el eje del mismo. “Si tienes en tu vida un ¿PARA QUÉ?, puedes soportar cualquier CÓMO”. El francés Boris Cyrulinc especialista en la rama de la Etología, que trata sobre el comportamiento de los seres humanos, acuñó la frase sobre la resiliencia “el dolor es inevitable, el sufrimiento es una decisión”. Con ambas propuestas e ideas de referencias a nivel mundial, nos exhortan por un lado a establecer metas y estar decididos a sortear las faenas
para lograrlo, podrán ser superadas por la motivación de conquistarlo y por otro lado que de nuestras acciones y pensamientos podremos transformar el dolor que esto nos cause, para así evitar el sufrimiento, si el dolor es inherente al ser humano, por ende, su capacidad para afrontar la adversidad está inseparable. Son momentos de recordar una parte de las promesas matrimoniales, “Estaré contigo en lo próspero y en lo adverso”, renovando la alianza, el pacto Sagrado de estar fortalecidos por este Sacramento. Pero personalmente quiero resaltar la estructura del ser humano en sus ejes biopsicosocial y espiritual, en la que encierra el bagaje humano con el que puede hacer realidad todo lo anterior expuesto. Y ahora me enfoco al establecimiento de metas en pareja, a las acciones para procurar que la balanza, aunque con el estrés cotidiano, se incline al bienestar de ambos. Generalmente como matrimonio se establecen metas preconcebidas, enfocadas, por ejemplo, a engendrar hijos sanos e inteligentes, a la mejor manera de generar una economía creciente, conquistar el empleo o negocio de ensueño, tener la mejor figura y obtener los mejores bienes materiales; pero ¿qué sucede cuando lo anterior o no se conquista? o al adquirirlo se dan cuenta que no son felices, ¿aunque no haya desfallecido la motivación y el esfuerzo? La respuesta es que sus metas estaban planteadas de manera equivocada. Pero si, por el contrario, tomamos en cuenta nuestra escencia como seres humanos de ser buenos, bellos y verdaderos y se implantan metas primeramente bajo esta perspectiva humanitaria, los resultados serán totalmente diferentes.
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La propuesta es, fincar metas primordialmente en ser virtuosos, como el ser generosos, pacientes, agradecidos, justos, templados, con fortaleza, sentir la necesidad de otorgar el perdón, el respeto, etc. Con esta autoconcepción, los esposos, están ya preparados para establecer las metas con gran soporte, pongo ejemplos, si por genética, nace un hijo con cierta limitante, los padres le darán toda su capacidad virtuosa para hacer de ese miembro de la familia un ser feliz, por el lado de la economía, si se piensa en cómo generarla, los medios serán de manera honesta, si fundan una empresa, estará pensada con justicia para el bien común, si es empleado, será un trabajador honesto, responsable y agradecido, si me enfoco a la necesidad del ser humano de mantenerse sanos física y espiritualmente practicarán la prudencia, la templanza y fortaleza, sin hedonismos Bajo este tinte lo que llegue de adverso en todos estos escenarios, será bien afrontado y llevadero, lejos de ser objetivos egoístas. Como propuesta para adiestrar los pensamientos durante los esfuerzos que se requieran para lograr las metas, o bien para lograr la adaptación a los eventos circunstanciales, invito a recurrir a la psique, a su consciencia, es como entrar en un círculo en el que educan a los cinco sentidos para enfocarse y no desanimarse, ser resilientes, dar una correcta interpretación, con correcto control de emociones y sentimientos. Ya logrando estos tres pasos, puedes fácilmente entrar a la razón, en donde se encuentran cuatro poderosos motores, memoria, entendimiento, voluntad y creatividad, es aquí donde dan un boom a su inteligencia, dan vuelo a la imaginación, a la intuición, creando innovaciones, alternativas, etc. su parte física, se los agradecerá, porque precisamente sus neurotransmisores se fortalecerán dando un golpe a la ansiedad, desamino, mal humor, incertidumbre, etc. La parte cognitiva de entrar a la razón también requiere habilidad y orden, de analizar ¿qué es lo que vamos a afrontar? ¿cuáles son los obstáculos? ¿Cuáles son sus recursos? Reconocer ¿Cuáles son sus cualidades y capacidades? La propuesta es desencadenar esa máquina perfecta diseñada para trabajar sus ejes biopsicosocial y espiritual, hacia un círculo virtuoso, permite que la alianza conyugal sea más rica, más consistente, más humana. Es favorecer nuestra parte emotiva y cognitiva. Al llegar a esta posición, la pareja ya está lista para entrar al eje más sublime
del ser humano que se convierte en un arte, me refiero a la oración, es saber que estarán los cónyuges “a solas con alguien que les ama”, como lo decía Santa Teresa de Ávila. Es entrar en una conexión espiritual con quien todo lo sabe y todo lo puede, con quien les puede dar las respuestas a cómo o qué hacer con esos obstáculos, fluirán la lluvia de ideas, estrategias, propuestas innovadoras, etc. puede ser a través de una cita bíblica, de alguien quien te comparte una experiencia que les ayuda, es decir, el Espíritu Santo iluminará sus mentes. “Donde dos o más se reúnen en mi nombre ahí estaré yo” (Mt, 18,20)., y con fe pedir lo que necesiten en su nombre que Él se los concederá (Jn, 14, 13). Otro de los deleites del matrimonio es el esparcimiento y la convivencia, con la pareja, la familia y en estos momentos, que buena oportunidad para disfrutarlo en sensibilizar los sentidos a las artes, escuchar música, cantar, practicar pasos de baile, montar obras de teatro, lectura, escribir poesía, pintura, artes plásticas, actividades deportivas, cocinar, hacer memorias del pasado, películas con mensajes de resiliencia, una que el Papa San Juan Pablo recomendaba era “La vida es Bella”, etc. Realizar labores de casa como limpieza, pintura, jardinería, etc. haciendo una agenda y orden del día. Llamar a parientes o amigos sobre todo aquellos que saben están solos y ofrecer ayuda o simplemente escuchar. Todas las actividades propuestas se pueden repartir entre cada uno de los miembros de la familia, según sus edades y cualidades; si dentro de la familia viven abuelitos, incluirlos de acuerdo a sus capacidades. http:// festivalinternacionaldecinecatolico. com/ www.elpoderenmismanos.com Una buena alternativa de estar fuera del contacto con la tecnología, son los juegos de mesa, juego de adivinanzas, concursos de datos históricos, etc., para fomentar las habilidades, destrezas y de agilidad mental. Para cerrar las propuestas a nivel integral, es importante vigilar la alimentación balanceada, cumplir con las horas de sueño y el ejercicio físico diario. Con todo lo anterior, estoy segura de que las parejas y las familias, de manera ordenada y responsable, estarán listas para iniciar un nuevo desarrollo con adaptación y hacer de esta nueva normalidad, una nueva cultura, evitando así una crisis humana, sino por el contrario se aumente su grandeza y dignidad, transformando las circunstancias del presente,
reafirmando la otra parte de las promesas matrimoniales “En la salud y en la enfermedad, amarte y respetarte todos los días de mi vida”. En conclusión, reafirmo que el matrimonio es para disfrutarlo si decidimos visualizar nuestra realidad humana, así como si fueran las olas del mar con su flujo y su reflujo, como el día y la noche con sus luz y obscuridad, como la vida con ritmos de altas y bajas y así dentro de este panorama poder cumplir con la única deuda que tenemos con nosotros mismos de hacemos felices y a quienes nos rodean. Hago mención de las palabras que dirigió el Papa Francisco, en su Mensaje Urbi et Orbit del momento extraordinario de oración en tiempos de pandemia, el 27 de marzo de este año “¿Por qué tenéis miedo?”. ¡TE INVITAMOS A SER PARTE DEL ÁREA DE ACOMPAÑAMIENTO A MATRIMONIOS JÓVENES DE 0-5 DE CELAYA, A FORMARTE Y ACOMPAÑAR A MATRIMONIOS
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más importantes. Poder sacrificar el presente como los mártires por El voto de castidad hace del el Reino de los Cielos, es una gran sacerdote, no solamente un hombre señal para todo el mundo. libre de las cargas inherentes a la vida de familia, sino también un Es por estas razones y muchas signo impactante para el mundo, otras, que la Iglesia no modifica la de los valores trascendentales del ley del celibato sacerdotal. Aunque Reino de Dios. El que un hombre muchos jóvenes no opten por el renuncie a una cosa tan de acuerdo sacerdocio debido precisamente con la naturaleza humana, como es al reto que representa dicho voto, formar una familia, supone un acto aunque haya de vez en cuando, de fe formidable en la Vida Eterna por desgracia, escándalos debidos de la Gloria. El sacerdote es una a la debilidad humana, el celibato vigente en la flecha que apunta hacia el más permanecerá allá y nos dice que las realidades legislación eclesiástica aunque no temporales, por legítimas que sean, sea mandamiento Divino. no son las definitivas, no son las el futuro ser fiel a su promesa.
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4. Equilibrio emocional El ministerio sacerdotal y la vida misma en el seminario, van a someter al candidato a duras pruebas y presiones. Es por eso que se requiere de una estabilidad bien cimentada. Las personas frágiles, volubles, en extremo emotivas, desequilibradas, no son aptas para el sacerdocio y tal vez ni para el matrimonio. Cuando se tiene sobre los hombros la responsabilidad de una parroquia o la dirección de una escuela, cuando los problemas de la gente llegan por todos lados, cuando hasta las tentaciones acechan, es necesario poseer una ecuanimidad y un dominio de sí a toda prueba. Una persona sin esas cualidades será un problema permanente tanto en el seminario como ya en la vida ministerial. 5. Vida de castidad Relacionada con la estabilidad emocional viene la capacidad de vivir en castidad perfecta. Desde el siglo IV (386) el Papa Siricio hizo ley Eclesiástica lo que ya se venía practicando desde mucho antes: el celibato sacerdotal. Muchos cristianos, siguiendo el ejemplo de San Pablo, permanecían en
el celibato para poder dedicarse completamente al servicio de Dios (I Cor.7,32-35). En un mundo sexualizado al máximo, en donde se concede un valor absurdo e indiscutible a la actividad sexual, sea del tipo que sea, el voto de castidad parece una locura incomprensible. El mismo Señor Jesús apuntó tanto la grandeza de la castidad "por el Reino de Dios", como la incomprensión del mundo hacia esa actitud (Mt. 19,12). Muy en contra de lo que nos bombardean los medios masivos de comunicación, la obligación de la castidad es absoluta para los solteros ("No fornicarás") y aún los casados deben comportarse dentro de su matrimonio según la ley de Dios en lo que podemos llamar "castidad matrimonial". El candidato al sacerdocio es invitado a continuar viviendo la castidad del célibe cristiano, permanentemente, por el Reino de los Cielos. Si ya desde joven ha comprobado tristemente que no le es posible la continencia, debe antes de atreverse a emitir el voto de castidad, comprobar que ha superado esa debilidad y puede en
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Fuente: Vatican.va
C
uando Edith Stein, la última de once hermanos, nació en Breslau el 12 de octubre de 1891. El padre, comerciante de maderas, murió cuando Edith no había cumplido aún dos años. La madre, una mujer muy religiosa, solícita y voluntariosa, una persona verdaderamente admirable, al quedarse sola, debió hacer frente tanto al cuidado de la familia como a la gestión de la gran hacienda familiar; pero no consiguió mantener en los hijos una fe viva. Edith perdió la fe en Dios. "Con plena conciencia y por libre elección dejé de rezar". Obtuvo brillantemente la reválida en 1911 y comenzó a estudiar germanística e historia en la Universidad de Breslau, más para tener una base de sustento en el futuro que por auténtica pasión. Su verdadero interés era la filosofía. Le interesaban también los problemas de la mujer. Entró a formar parte de la organización "Asociación Prusiana para el Derecho Femenino al Voto". Más tarde escribía: " como bachiller y joven estudiante, fui una feminista radical. Perdí después el interés por este asunto. Ahora voy en busca de soluciones puramente objetivas". En 1913, la estudiante Edith Stein se fue a Gottinga para asistir a las clases universitarias de Edmund Husserl, de quien llegó a ser discípula y asistente, consiguiendo con él el doctorado. En Gottinga Edith Stein se encontró también con el filósofo Max Scheler y este encuentro atrajo su atención sobre el catolicismo. Al estallar la primera guerra mundial escribía: "ahora ya no tengo una vida propia". Siguió un curso de enfermería y prestó servicio en un hospital militar austríaco. Fueron tiempos difíciles para ella. Atendía a los ingresados en la
sección de enfermos de tifus y prestaba servicio en el quirófano, viendo morir a hombres en la flor de su juventud. Al cerrar el hospital militar en 1916, siguió a Husserl a Friburgo en Brisgovia, donde obtuvo el doctorado "summa cum laude" con una tesis "Sobre el problema de la empatía ". Por aquel tiempo le ocurrió un hecho importante: observó cómo una aldeana entraba en la Catedral de Frankfurt con la cesta de la compra, quedándose un rato para rezar. "Esto fue para mí algo completamente nuevo. En las sinagogas y en las iglesias protestantes que he frecuentado los creyentes acuden a las funciones. Aquí, sin embargo, una persona entró en la iglesia desierta, como si fuera a conversar en la intimidad. No he podido olvidar lo ocurrido". Edith Stein tenía gran amistad con el asistente de Husserl en Gottinga, Adolf Reinach y su esposa. Adolf Reinach muere en Flandes en noviembre de 1917. Edith va a Gottinga. Los Reinach se habían convertido al Evangelio. Edith tenía cierta renuencia ante el encuentro con la joven viuda. Con gran sorpresa encontró una creyente. "Este ha sido mi primer encuentro con la cruz y con la fuerza divina que transmite a sus portadores... Fue el momento en que se desmoronó mi irreligiosidad y brilló Cristo". Más tarde escribirá: "lo que no estaba en mis planes estaba en los planes de Dios. . En el verano de 1921 fue durante unas semanas a Bergzabern (Palatinado), a la finca de la Señora Hedwig ConradMartius, una discípula de Husserl. Esta señora, junto con su esposo, se había convertido al Evangelio. Una tarde Edith encontró en la biblioteca la autobiografía de Teresa de Ávila. La leyó durante toda
la noche. "Cuando cerré el libro, me dije: las gentes judías. La Madre Superiora esta es la verdad". de las Carmelitas de Colonia hace todo lo posible para llevar al extranjero a En enero de 1922 Edith Stein se bautizó. Sor Teresa Benedicta de la Cruz. La Era el día de la Circuncisión de Jesús, noche de fin de año de 1938 cruza la acogida de Jesús en la estirpe de la frontera de los Países Bajos y la Abraham. Estaba erguida ante la fuente llevan al monasterio de Carmelitas bautismal, vestida con el blanco manto de Echt, en Holanda. Escribirá a toda nupcial de Hedwig Conrad-Martius, prisa su ensayo sobre Juan de la Cruz, que hizo de madrina. "Había dejado de el místico doctor de la Iglesia, con practicar mi religión hebrea y me sentía ocasión del cuatrocientos aniversario nuevamente hebrea solamente tras mi de su nacimiento, 1542-1942. retorno a Dios". Ahora tendrá siempre conciencia, y no sólo intelectualmente, El 2 de agosto de 1942 llega la sino de manera tangible, de pertenecer Gestapo. Edith Stein se encuentra a la estirpe de Cristo. En la fiesta de la en la capilla con las otras Hermanas. Candelaria, una fiesta cuyo origen se En cinco minutos debe presentarse, remonta también al Antiguo Testamento, junto con su hermana Rosa, que se fue confirmada por el Obispo de Espira había bautizado en la Iglesia Católica en su capilla privada. Después de su y prestaba servicio en las Carmelitas conversión, lo primero que hizo fue de Echt. Las últimas palabras de volver a Breslau. "Mamá, soy católica". Edith Stein que se oyen en Echt están Las dos lloraron. Hedwig Conrad- dirigidas a Rosa: "Ven, vayamos, por Martius escribió: "mira, dos israelitas y nuestro pueblo". en ninguna de ellas hay engaño" (cf. Jn 1, 47). Junto con otros muchos otros judíos convertidos al cristianismo, las dos En 1933 se presenta a la Madre Priora mujeres son llevadas al campo de del Monasterio de Carmelitas de Colonia. concentración de Westerbork. Se Una vez más Edith fue a Breslau para trataba de una venganza contra el despedirse de su madre y de la familia. comunicado de protesta de los obispos Cada semana escribirá después una católicos de los Países Bajos por las carta a su madre. No recibirá respuesta. deportaciones de los judíos. "Jamás Su hermana Rosa le mandará noticias había pensado que los seres humanos de casa. pudieran llegar a ser así, y tampoco El 14 de octubre Edith Stein entra en podía pensar que mis hermanas y el monasterio de las Carmelitas de hermanos debieran sufrir así... cada Colonia. En 1934, el 14 de abril, tuvo hora rezo por ellos. ¿Oirá Dios mi lugar la ceremonia de toma de hábito. oración? En todo caso, oye ciertamente El Archiabad de Beuron celebró la sus lamentos". misa. Desde aquel momento Edith Stein llevará el nombre de Sor Teresa Al amanecer del 7 de agosto sale Benedicta de la Cruz. una expedición de 987 judíos hacia ". Auschwitz. El 9 de agosto Sor Teresa El 9 de noviembre de 1938 se puso de Benedicta de la Cruz, junto con su manifiesto ante todo el mundo el odio hermana Rosa y muchos otros de su que tenían los nazis a los judíos. Arden pueblo, murió en las cámaras de gas las sinagogas, se siembra el terror entre de Auschwitz.
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