EDITORIAL. LAMANZANAPODRIDA. POR Primitivo Fajardo

EDITORIAL podrida La manzana

COMObuena manchega, mi abuela materna era niña puñetera. Pespunteaba su vocabulario con puntadas del refranero que usaba con habilidad y certera puntería, como la espada del matador. Era infalible. Hasta la bola. De haber vivido hoy, le hubiera dicho a Sanchinflas: “Eres más tonto que alto”. Y además: “Eres más tonto que hecho de encargo”. Tampoco le faltaba un contra-refrán para sustentar los anteriores. Sobre la patología mental del presidente del Gobierno habría sentenciado: “Ningún tonto tira cantos a su tejado”. Cuatro años se han cumplido con un tonto en el poder dilapidando la techumbre de nuestra casa común. Este macarra narcisista, mentiroso, egoísta y desnortado, al que ya había echado su grey por tramposo, no ha parado de lanzar piedras desde que nos alcanzó la desgracia aupándole al asiento del Falcon –una pena que no sea eyectable–.

Con la falsificación de su tesis doctoral y una artera moción de censura perpetrada al alimón con los siniestros enemigos del Estado a base de mentiras y engaños, llegó el chulángano al poder desalojando de su concha al inerte Berberecho, otro incompetente carente de sensibilidad.

Haciendo justo lo contrario de lo que pregonaba, a Sanchinflas vino la suerte a acurrucarle el mismo día que se nos echó la pandemia encima y le otorgó plenos poderes y la facultad de Freddy Krueger para descojonar el país a su antojo y recortarnos con la motosierra de sus caprichos los derechos y libertades. El dictadorcito se ha empleado a fondo en darnos por retambufa día sí y día también cercenando el Estado del Bienestar, aumentando la brecha de la desi gualdad y desmembrando a la sufrida clase media, que hoy sufre más que nunca gracias a este fariseo cortito de mollera que ha patrimonializado el poder para asegurase el futuro –el suyo, solo el suyo– con una sacudida socio-político-económica de planteamientos absurdos e iniciativas radicales que nos tiene absortos, sin blanca y temblando al paisanaje con la subida de impuestos, la energía y el coste de la vida. Este irresponsable nos ha hipotecado la cartera a los españolitos para décadas. La puntilla ha sido la inflación, y la guinda poner a España a los pies de los caballos argelinos dejándonos descompuestos y sin gas por agraciar al morito sátrapa regalándole el Sahara a cuenta del espionaje del móvil y vaya usted a saber qué otras miserias.

Recopilar las chaladuras de este mentecato y sus políticas del progresismo regresivo nos llevaría a escribir una obra monumental. Porque hay que ver la que ha montado en tan poco tiempo el inmoral con su gobierno de coalición con perroflautas, pistoleros, rufianes y excarcelados del tres por ciento y más. Comete atropellos como si no lo fueran y lo hace con absoluta tranquilidad de conciencia, convencido del beneplácito del pueblo al que traiciona continuamente, que ya le ha demostrado en la calle el cariño que le tiene.

Sanchinflas produce antipatía en millones de españoles porque en una legislatura ha oficializado lo peor del bipartidismo desde la Transición. Dejando al margen su nefasta gestión de la pandemia –140000 muertos–, de los fondos europeos y de otros menesteres, España es el único país del mundo donde la justicia protege a los okupas, a los delincuentes y asesinos y deja tiradas a las víctimas. El único donde se prohíbe a los niños estudiar en español, donde se subvenciona a toda persona, organización o partido que atente contra la unidad nacional, donde se indulta a golpistas que juran volver a reincidir, donde se ofrece impunidad para saltarse las leyes constitucionales, donde se homenajea a los asesinos de políticos, policías y militares, donde las violaciones de los inmigrantes se ocultan para no estigmatizarlos, donde es legal ina Sanchinflas vino la sultar a la jefatura y a los símbolos del Estado, donde los ministros se afanan ensuerte a acurrucarle perpetrar planes para jorobar al contri-el mismo día que nos buyente. ¿Pero qué tipo de anomalías suechó la pandemia fre un sujeto que permite y fomenta esto? encima y le otorgó ¿Cuánto daño puede hacer un tonto a las plenos poderes y la tres solo por sentirse un napoleoncito? facultad de ejercer de Freddy Krueger. Esta termitano estaría en el poder si una masa cretinizada no le riera las gracias, por ideología perruna o porque les pagan por ello, tal que los míticos barones socialistas, sacristanes degradados a monaguillos corifeos del señor obispo monclovita, que se van a quedar sin empleo por cobardes porque les va a llevar a la ruina haciendo papilla el partido del que se considera dueño y señor, como ha pasado en Francia e Italia. Más allá del socialismo oportunista, irracional y cleptómano que simboliza el psicópata del Falcon, lo que hace falta en este país es una política transformadora que vaya más allá de la mera estrategia ocasional, sectaria y manipuladora de un Gobierno demagogo como el actual que retuerce la realidad o la oculta en beneficio propio. Una política que anteponga el interés ciudadano al del gobernante y su banda mafiosa. España necesita reformas económicas estructurales y un liderazgo que asuma como mandato el compromiso con el rearme institucional y la centralidad política, la moralidad de la vida pública, el fortalecimiento de la sociedad civil y el respeto a los ciudadanos, a las instituciones y a la división de poderes. En definitiva, la recuperación del vigor democrático perdido. Necesitamos un presidente del Gobierno que no sea un tonto ni un héroe sino un gestor razonable. Un tío, tía, tíe bien plantado que no grite ni amenace ni mienta, que no eche la culpa de sus derrotas al primero que pille. Una persona normal, decentita, con arrestos y sentido común. Y que nos deje en paz. Seguro estoy de que esta quimera es posible. Sanchinflas tiene los días contados y yo no veo el momento de librarnos de semejante sinvergüenza. Que, ojo, aún puede hacernos mucho daño. De Primitivo Fajardo su carácter nocivo mi abuela hubiera sentenciado: fajardo@opmachinery.com “Una manzana mala pudre una tonelada”. •