II Concurso de Fotografía Social “Con otra mirada”
Expuesta en la Cueva de Medrano del 31 de Marzo al 9 de Abril de 2017
2 Editorial “El Señor dijo a Moisés: He visto la aflicción de mi pueblo en Egipto, he oído el clamor que le arrancan sus opresores y conozco sus angus$as” (Ex 3,7)
Por segundo año consecutivo, Cáritas Parroquial de Argamasilla de Alba lanza el Concurso de Fotografía Social “Con otra mirada” (2017fs.com), con el objetivo de suscitar la reflexión sobre la realidad social en la que estamos inmersos y de sensibilizarnos ante los valores y contravalores que están presentes en nuestro entorno. Una iniciativa que nos anima a salir de nuestro individualismo y a mirar a la sociedad como una gran familia en la que los problemas y las alegrías de unos y otros repercuten, queramos o no, en todos los demás. Nos invita a mirar con profundidad a la realidad para vencer la crítica fácil e interesada y, así, dejar paso a una mirada solidaria que no juzga sino que invita a unir nuestras manos y nuestros corazones para construir una sociedad más justa y fraterna. Las imágenes expuestas hablan, principalmente, de desigualdad, de exclusión, de una pobre conciencia ecológica, de problemas laborales, de diferencias culturales y de voluntariado. Cáritas nos invita a reflexionar sobre todas ellas y muy especialmente sobre aquellas que abren una ventana de esperanza a nuestro mundo gracias a la acción desinteresada de hombres y mujeres que donan su tiempo, sus bienes y sus conocimientos al servicio de los demás. Nos son “super-hombres”, son personas que han priorizado la proximidad al otro por encima de otras maneras de emplear el tiempo libre. Personas que aportan su grano de arena a la construcción de una sociedad más humana. ¿Te animas? Cáritas Parroquial te abre sus puertas. Agradecemos sinceramente la participación de todos los que nos han hecho llegar sus fotografías y animamos a que en próximas ediciones el número de participantes vaya en aumento.
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Autor: Sergio Rubio Ocaña Título: Azul, escalera, personas Comentario del autor: Unas escaleras, unos suben y otros no, con diferentes vidas, las dos de azul, las dos personas… La vida no es igual para todos, a veces es difícil y dura, es por ello que hemos de trabajar para que algunos se muevan del escalón en el que tropezaron. Doctrina Social de la Iglesia: Hoy tenemos que decir «no a una economía de la exclusión y la inequidad». Esa economía mata... Hoy todo entra dentro del juego de la compe vidad y de la ley del más fuerte, donde el poderoso se come al más débil. Como consecuencia de esta situación, grandes masas de la población se ven excluidas y marginadas: sin trabajo, sin horizontes, sin salida… Hemos dado inicio a la cultura del «descarte» (Papa Francisco, “Evangelii Gadium”, nº 53)
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Autor: José Díaz-Pintado Hilario Título:
Dentro - fuera
Comentario del autor: A veces el derecho a una vivienda digna se ve sólo a través de un escaparate. Doctrina Social de la Iglesia: “Es necesario que la legislación recoja de manera concreta y determinada los derechos básicos económicos y sociales de todos los ciudadanos contemplados en nuestra Cons tución, de manera que puedan ser exigibles en derecho… La administración pública, tanto estatal como autonómica… debe ante todo garan zar una cobertura que permita vivir a todos los ciudadanos de acuerdo con su dignidad humana y de miembros de nuestra sociedad, cuidando par cularmente a aquellos que se ven amenazados por la indigencia, la marginación o la miseria, por cualquier causa o circunstancia”. (Conferencia Episcopal Española, “La Iglesia y los pobres”, nº 78-79)
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Autora: Amparo Valverde Aparicio Título: Colgados Comentario del autor: Sueños, ilusiones, rutinas, sustento, estabilidad… todo queda colgado cuando un despido, un ERE, un cierre llega a la vida de las personas… Así sucede en muchos lugares y por desgracia también sucedió así en la localidad. Los trabajadores estamos colgados por la legislación laboral; pero el sol siempre sale. Doctrina Social de la Iglesia: “Una sociedad donde el derecho al trabajo sea anulado o sistemá camente negado y donde las medidas de polí ca económica no permitan a los trabajadores alcanzar niveles sa sfactorios de ocupación, no puede conseguir su legi mación é ca ni la justa paz social”. (San Juan Pablo II, “Centesimus annus”, 43) “El trabajo es una necesidad, parte del sen do de la vida en esta erra, camino de maduración, de desarrollo humano…” (Papa Francisco, “Laudato Si”, 128)
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Autor: Sergio Rubio Ocaña Título: Voluntarios, el emblema no importa Comentario del autor: Me gustaría simbolizar la importancia que tiene el voluntariado de cualquier organización cuyo fin sea ayudar a las personas. Deseo remarcar la trascendencia de la colaboración; colaborar entre todos para ayudar a mejorar la calidad de vida de aquellos que tienen problemas, o sufren una necesidad. Doctrina Social de la Iglesia: La caridad en la verdad pone al hombre ante la sorprendente experiencia del don. La gratuidad está en su vida de muchas maneras, aunque frecuentemente pasa desapercibida debido a una visión de la existencia que antepone a todo la produc vidad y la u lidad. El ser humano está hecho para el don, el cual manifiesta y desarrolla su dimensión trascendente. (Papa Benedicto XVI, “Caritas in veritate, nº 34)
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Autor: Adrián Rubio Ocaña Título: Se torció la ruta Comentario del autor: Una ruta creada para el disfrute de los paisajes del Quijote, que al final que queda en una ruta torcida, con basura en la margen del camino. Incluso se deja ver en los postes que la señalizan, que indican el deterioro de éste. Doctrina Social de la Iglesia: “La formación de una cultura capaz de enriquecer al ser humano requiere un empeño pleno de la persona, que despliega en ella toda su crea vidad, su inteligencia, su conocimiento del mundo y de los hombres, y ahí emplea, además, su capacidad de autodominio, de sacrificio personal, de solidaridad y de disponibilidad para promover el bien común”. (San Juan Pablo II, Discurso ante la UNESCO, 1980)
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Autor: Sergio Rubio Ocaña Título: La salud no es solo física Comentario del autor: Cuando se trata a una persona, no solo se valora su exterior, lo anatómico y fisiológico. Las personas se abordan desde todos los ámbitos y realizar los cuidados espirituales es igual de importante que todo lo demás. Doctrina Social de la Iglesia: El verdadero desarrollo, según las exigencias propias del ser humano, hombre o mujer, niño, adulto o anciano, implica sobre todo por parte de cuantos intervienen ac vamente en ese proceso y son sus responsables, una viva conciencia del valor de los derechos de todos y de cada uno, así como de la necesidad de respetar el derecho de cada uno a la u lización plena de los beneficios ofrecidos por la ciencia y la técnica. En el orden interno de cada Nación, es muy importante que sean respetados todos los derechos: especialmente el derecho a la vida en todas las fases de la existencia; los derechos de la familia, como comunidad social básica o « célula de la sociedad »; la jus cia en las relaciones laborales; los derechos concernientes a la vida de la comunidad polí ca en cuanto tal, así como los basados en la vocación trascendente del ser humano, empezando por el derecho a la libertad de profesar y prac car el propio credo religioso. (San Juan Pablo II, “Sollicitudo rei sociales”, nº 33)
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Autora: Liliana Malant Título: Dos realidades Comentario del autor: La escena: tres trabajadores municipales limpiando el espacio público. La mujer barre y un par de compañeros de pie a su lado conversando. A partir de ahí, algunas reflexiones:¿Ganará el mismo sueldo? ¿Qué carga de trabajo le espera al llegar a su casa? ¿Qué posibilidades de trabajo hay en su futuro? Doctrina Social de la Iglesia: “Es innegable el aporte de la mujer en todas las áreas del quehacer humano, empezando por la familia. Pero con sólo reconocerlo… ¿Es suficiente?. Hemos hecho muy poco por las mujeres que se encuentran en situaciones muy duras, despreciadas, marginadas e incluso reducidas a esclavitud. Debemos condenar la violencia sexual que sufren y eliminar los obstáculos que impiden su plena inserción en la vida social, polí ca y económica”. (Papa Francisco, 6 de mayo de 2016)
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Autor: José Díaz-Pintado Hilario Título: Lo que suena en la calle Comentario del autor: La calle trasmite mensajes a través de todos los sentidos. Doctrina Social de la Iglesia: “Para que el Evangelio llegue a influir de verdad sobre nosotros es necesario tener en cuenta las circunstancias concretas en que vivimos. No podemos vivir como cris anos sin responder con verdad y hones dad a las circunstancias reales de nuestra vida. Los cris anos somos plenamente miembros de la sociedad en que vivimos y llevamos dentro la sensibilidad del momento presente” (Conferencia Episcopal Española, “Católicos en la vida pública” nº 9, 1986) “Hoy que las redes y los instrumentos de la comunicación humana han alcanzado desarrollos inauditos, sen mos el desaHo de descubrir y transmi r la mís ca de vivir juntos, de mezclarnos, de encontrarnos, de tomarnos de los brazos, de apoyarnos, de par cipar de esa manera algo caó ca que puede conver rse en una verdadera experiencia de fraternidad, en una caravana solidaria, en una santa peregrinación. De este modo, las mayores posibilidades de comunicación se traducirán en más posibilidades de encuentro y de solidaridad entre todos”. (Papa Francisco, “Evangelii Gaudium” nº 87, 2013)
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Autor: José Díaz-Pintado Hilario Título: Malabarismos de la vida Comentario del autor: Ganarse la vida no siempre es fácil. A veces, incluso, para ganársela hay que jugársela. Doctrina Social de la Iglesia: “Dejar de inver r en las personas para obtener un mayor rédito inmediato es muy mal negocio para la sociedad” (Papa Francisco, “Lauda o Si” nº 128) “El estar sin trabajo durante mucho empo, o la dependencia prolongada de la asistencia pública o privada, mina la libertad y la crea vidad de la persona y sus relaciones familiares y sociales, con graves daños en el plano psicológico y espiritual” (Papa Benedicto XVI, “Cáritas in Veritate” nº 25) “El trabajo de ninguna manera puede considerarse como una mercancía cualquiera, porque procede directamente de la persona humana. Para la gran mayoría de los hombres, el trabajo es, en efecto, la única fuente de su decoroso sustento. Por esto no puede determinar su retribución la mera prác ca del mercado, sino que han de fijarla las leyes de la jus cia y de la equidad” (Papa Juan XXIII, “Mater et Magistra”, nº 18, 1961).
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Autor: Mª Teresa Moya Díaz-Pintado Título: Tan cerca y tan lejos Comentario del autor: Aquí los niños viven estresados, corriendo, colegio, actividades,…. y su diversión son sus tablets y móviles. Al otro lado del Estrecho, tan cerca, sin prisas ni tecnologías, se entretenían acercándose a ver cruzar a los turistas. Nos miraban con curiosidad, como si fuéramos de otro mundo. Doctrina Social de la Iglesia: “El desarrollo no debe ser entendido de manera exclusivamente económica, sino bajo una dimensión humana integral. No se trata solamente de elevar a todos los pueblos al nivel del que gozan hoy los países más ricos, sino de fundar sobre el trabajo solidario una vida más digna, hacer crecer efec vamente la dignidad y la crea vidad de toda persona, su capacidad de responder a la propia vocación y, por tanto, a la llamada de Dios. El culminante del desarrollo conlleva el ejercicio del derecho-deber de buscar a Dios, conocerlo y vivir según tal conocimiento” (Papa Juan Pablo II, “Centesimus Annus” nº 29, 1991)
13 Autor: Adrián Rubio Ocaña Título: Paseo por ¿el campo? Comentario del autor: Caminando por el campo, se ve el poco civismo de nuestras gentes, muchas veces nos tenemos que preguntar si en realidad es un paseo por el campo, o estamos entrando en un vertedero. Nos lleva a reflexionar ¿Nos falta conciencia ecológica? ¿Algún día nos daremos cuenta del daño causado?
Doctrina Social de la Iglesia: “No somos Dios. La erra nos precede y nos ha sido dada… Cada comunidad puede tomar de la bondad de la erra lo que necesita para su supervivencia, pero también ene el deber de protegerla y de garan zar la con nuidad de su fer lidad para las generaciones futuras”. “No hay dos crisis separadas, una ambiental y otra social, sino una sola y compleja crisis socio-ambiental. Las líneas para la solución requieren una aproximación integral para comba r la pobreza, para devolver la dignidad a los excluidos y simultáneamente para cuidar la naturaleza” (Papa Francisco, Laudato Si, nº 67 y 139 )
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1.- La DSI es un patrimonio de enseñanzas que se organizan sistemá$camente: es un cuerpo de enseñanza elaborada en el seno de la Iglesia, como respuesta histórica a los problemas económicos y sociales. Esta enseñanza se presenta en documentos de diverso rango: encíclicas, exhortaciones apostólicas, radiomensajes, cartas apostólicas, pastorales. Este patrimonio eclesial de pensamiento y acción se ha ido organizando y reorganizando en los úl mos años, a par r de la Encíclica Rerum Novarum de León XIII (1891), bajo el nombre de “Enseñanza Social” o “Doctrina Social de la Iglesia”, como un conjunto de principios de reflexión de valoración permanente , criterios de juicio y orientaciones para la acción. 2.- La DSI abarca todos los campos en los que se desarrolla la convivencia humana, se ex ende obje vamente al entero panorama de las realidades temporales que configuran y condicionan la vida de la persona humana dentro de la sociedad. 3.- La DSI hunde sus raíces en la misma Historia de Salvación. Los cris anos/ as, que hoy asumen su compromiso social como consecuencia de su fe, saben que la prác ca social pertenece de manera inseparable a la Historia del Pueblo de Dios; ene sus raíces en la Palabra de Dios, en la predicación del Reino de Jesús, en la experiencia y tes monio de las primeras comunidades cris anas. 4.- La DSI $ene su fundamento en la dignidad de la persona humana, haciendo opción preferente por el pobre (SRS 42) La misión de Jesús y el ejemplo de su vida han dejado claro su compromiso con la dignidad y los derechos de la persona humana, las necesidades de los más débiles, los más necesitados, las víc mas de la injus cia.
15 5.- La DSI $ene un carácter dinámico e histórico. Esta exigencia del Reino y del seguimiento de Jesús se convierte en experiencia acumulada a lo largo de la historia, y muestra los diversos modos que ene la comunidad para ir descubriendo cómo unir la fe y el compromiso social (OA 42) 6.- La DSI es parte esencial de la evangelización. El mensaje social de la Iglesia sólo se hará creíble por el tes monio de las obras (St.2,14-18) (CA 57); enseñarlo es parte esencial de la fe y de a misión evangelizadora de la Iglesia (SRS 41). 7.- La DSI es especialmente para los católicos/as, aunque no sólo. A través de ella la Iglesia cumple su misión de ayudar a sus bau zados y a los/as que no siendo Doctrina Social de la Iglesia 6 católicos/as se iden fican sin sus enseñanzas sociales, a iluminar los problemas sociales, económicos, polí cos y culturales de cada época, en orden a transformarlos a la luz del Evangelio. 8.- La DSI más que una teoría se orienta a la acción. El mensaje social del Evangelio no debe considerarse como una teoría sino, por encima de todo, un fundamento y esPmulo para la acción (CA 57). Aunque es una disciplina académica, principalmente se orienta a la vida, está hecha para prac carla. Así lo han entendido, en el curso de los siglos, los hombres y mujeres de todas las clases sociales comprome dos individualmente y en organizaciones en diversas acciones a favor de los marginados/as (CA 49). 9.- La DSI orienta la vocación de cada uno/a en la lucha por la jus$cia. No se queda en el enunciado de principios o en la interpretación de la sociedad sino que su fin es orientar la conducta de las personas como consecuencia del compromiso por la jus cia, según la función, vocación y circunstancias de cada persona (SRS 41h).
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Patrocina: Parroquia de San Juan Bautista Argamasilla de Alba
Nuestro agradecimiento a: Exmo. Ayuntmiento de Argamasilla de Alba