Versión de leyendas, cuentos y personajes mitológicos

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RÓMULO Y REMO Hace muchísimos años Zeus quería matar a dos niños gemelos que se llamaban Rómulo y Remo. Entonces se escondieron en el monte y fueron amamantados por una loba y cuando fueron grandes se encontraron con un sacerdote que tenía que elegir a Rómulo o Remo como rey de Roma. Pero como los dos eran iguales el sacerdote decidió hacer unas pruebas para ver quién sería el rey. El sacerdote cogió dos bueyes de 500 kg y les dijo que los llevaran hasta donde pudieran. Rómulo cogió una zanahoria y lo llevó, el sacerdote dijo:”100m”. Remo cogió comida y lo llevó hasta 100 m también. La siguiente prueba era de mantener un huevo de pie. Rómulo lo cascó y lo puso de pie y Remo igual. El sacerdote no sabía lo que hacer y les dijo: subíos en una de las siete colinas a ver quién ve más buitres. En esa prueba ganó Rómulo y como Remo no quiso aceptarlo, lucharon y al final fue Rómulo el rey de Roma.

Escrito por Alejandro Carrasco y Juan José.


HIDRAPEGASO Es un animal que vive en el interior de los volcanes. Come toda clase de seres vivos, como personas o como peces. Mide 300m y come 30 veces al día. Tiene escamas es de color rojo y negro se relaciona nada más que con los lagartos fuera del agua. Es mitad Pegaso y mitad Hidra y tiene lengua de serpiente.

Escrito por Juan José y Alejandro Carrasco.


JÚPITER EL REY DE LOS CIELOS Urano se casó con la reina de la Tierra, Gea, y tuvieron muchos hijos y uno de ellos fue Saturno. Como no quería que le destronaran los escondió dentro de la Tierra. Pero Saturno quería ser grande y cuando fue rey tuvo 365 hijos pero Saturno lo devoraba uno a uno cada día para no dejar nunca de ser rey, por eso el año tiene 365 días. Pero Cibeles, la esposa de Saturno, pudo esconder a un hijo, Júpiter y se hizo mayor. Al final Júpiter fue el rey de los cielos. Escrito por Juan Miguel y Víctor.

Cuadro de Goya llamado “Saturno devorando a sus hijos”


LA FRAGUA DE VULCANO

Una leyenda cuenta que Júpiter, el rey de los cielos, tenía muchos hijos. Uno era Vulcano, era muy feo y por ese motivo lo mandaron bajo la Tierra a trabajar el metal. Allí sufría día a día y mientras, su familia disfrutando como si fuera el último. Zeus, el Dios del Olimpo, Júpiter, el Dios de los cielos y Venus, la Diosa del amor se lo pasaban muy bien. Entonces Vulcano se enfadó y lanzó el metal fundido que expulsaba como lava por los volcanes. Escrito por Alejandro Mora y Eva.

Cuadro de “La fragua de Vulcano” de Velázquez


LA COBRA EGIPCIA

Una vez un ejército de Roma atacó a Egipto. El capitán del ejército romano u se llamaba Marco Antonio, que se enamoró de Cleopatra que fue una reina muy importante de Egipto, y Cleopatra también se enamoró de Marco Antonio. Entonces Marco Antonio murió y Cleopatra quiso morir también. Le ordenó a sus criadas que le buscaran una cobra egipcia. Cuando regresaron las criadas le trajeron un cofre con ella dentro y la cogió e hizo que le mordiera. Y como era muy venenosa se murió. Escrito por Cinta Rocío y José Luis


LA HISTORIA DE ÍCARO Érase una vez un niño llamado Ícaro. Su padre y él estaban en la cárcel y todos los días veían por la ventana los barcos llegar de la mar. Querían salir de allí pero no podían. En la ventana de la cárcel encontraron un nido de abejas. Con la cera se hicieron unas alas de cera y salieron a volar por el aire. Ícaro se acercaba mucho al sol y el padre le dijo: “no te acerques al sol mucho porque las alas no lo van a resistir”. Pero Ícaro subía, subía y subía y las alas se derritieron y cayó al mar. El padre le dijo: “¿ves lo que te ha pasado hijo?” Desde aquel momento vivieron felices.

Escrito por Sofía y Vicente.


LAS ASAMBLEÍSTAS Érase una vez en un país muy lejano llamado Grecia, en su capital Atenas, vivían ciudadanos con una vida muy distinta. Los hombres solo tenían que levantarse a las seis de la mañana e ir al ágora donde discutían y luego votaban, mientras que las mujeres se quedaban en casa. Pero eso no significaba que las mujeres hicieran menos trabajo, no, no, hacían muchas cosas más: lavaban, fregaban, limpiaban etc... Y no le daban recompensa mientras que a los hombres por votar le daban una moneda de oro a cada uno. Y no era solo eso, sino que las mujeres se preguntaban ¿por qué solo votan ellos? Entonces una dijo “se me ha ocurrido un plan, ya que estamos en el mercado vamos a comprar un brevaje para que se pongan malos y nosotras con las vacas y los borregos nos disfrazaremos de hombres y votamos. ¡Qué buena idea!- dijo otra. Al siguiente día las mujeres les echaron en la comida el brebaje. Se pusieron malos y no pudieron ir al ágora. Las mujeres disfrazadas de hombre votaron que las mujeres también tenían que votar. Y a partir de entonces ya votaban juntos. Moraleja: Los sexos tienen los mismos derechos. Escrito por Rubén, Lucía y Deyna.


Ă gora


LA VIEJA DE CARCASONA En Carcasona había una muralla. En aquella montaña había unos invasores que querían conquistar Carcasona. Y año tras año fueron quedándose sin comida hasta que hicieron una reunión y una viejecita dijo:”¿tenéis una vaca?” Y dijeron que sí. “Entonces voy a ir con un carro casa por casa y me vais a dar un kilo de trigo cada uno”- dijo la viejecita. Fue casa por casa con el trigo y con él fueron alimentando a la vaca que se puso gorda, muy gorda. Entonces abrieron la puerta de la muralla para que la vaca se escapara y fue a la montaña abajo. Cuando los invasores vieron que la vaca estaba muy gorda los invasores supusieron que tenían mucha comida, y se fueron. Y a la viejecita la nombraron reina. Escrito por Patricia y Pablo

Castillo de Carcasona


VIAJE AL CENTRO DE LA TIERRA Había una vez dos niños y una niña. La niña se llamaba María y los dos niños Peter y Carlos. Eran muy listos, pero se preguntaban por qué debajo de la Tierra había agua. Un día caminando por la calle encontraron a una niña que era ciega. Se presentaron y ella también. Se llamaba Carla. Le preguntaron que si sabía por qué había agua debajo de la tierra. No, eso es lo que yo me pregunto- contestó ella.. Entonces decidieron ir al centro de la tierra. ¿Sabes cómo? Con una nave que no volaba pero tenía un pincho que giraba, de hierro.Y así cavaron hasta que llegaron. Pero da la casualidad de que estaba todo oscuro. Y dijo una voz: “soy el agua”.Carlos le preguntó: “¿cómo llegáis hasta aquí?”. “Al llover la tierra nos absorbe, pero todas las gotitas llegamos al mar”contestó una. Y ahora ¿cómo volvemos?- se preguntaron. Pero el agua les dio un impulso y salieron por un géiser. Escrito por Samuel y Antonio.


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