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Eclipse parcial de Luna
from Si Muove 17
by PlanetarioBA
16 de julio de 2019 TEMPORADA DE ECLIPSES
Dos semanas después del eclipse total de Sol del 2 de julio se produjo un eclipse parcial de Luna. No es casualidad que esto ocurra; algunas veces se da así, y en otras, podemos tener un eclipse de Luna y, dos semanas después, un eclipse de Sol. Aunque, como muchas veces ocurre, no siempre estamos en el mejor lugar para observar ambos fenómenos.
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Para que se dé un eclipse de Sol tiene que haber Luna nueva; y para que haya un eclipse de Luna, tiene que haber Luna llena. Pero no siempre que hay Luna nueva ocurre un eclipse de Sol; y no siempre que hay Luna llena hay un eclipse de Luna. Para que haya eclipses se tienen que dar ciertas condiciones, en algunos puntos, similares a las que ya explicamos en el caso del tránsito de Mercurio. La órbita de la Luna alrededor de la Tierra está inclinada casi 6° con respecto al plano de la órbita de la Tierra alrededor del Sol. Eso hace que la mayoría de las veces en las que hay Luna nueva, visto desde la Tierra, nuestro satélite pase un poco por “encima” o un poco por “debajo” de la posición del Sol, sin provocar un eclipse. Asimismo, la mayoría de las veces en las que hay Luna llena, nuestro satélite pasa un poco por “encima” o un poco por “debajo” del cono de sombra terrestre. El pasado 16 de julio se dio un eclipse parcial, en el que la Luna no ingresó por completo en el cono de sombra de la Tierra, sino en un 65% de su diámetro, y además, desde Buenos Aires y alrededores el fenómeno comenzó con la Luna aún por debajo del horizonte. A las 17:55 asomó la Luna sobre el horizonte este-sudeste, al mismo tiempo que el Sol se ocultaba por el lado opuesto, casi una hora después de que había empezado la etapa de parcialidad del eclipse. Muy cerca de la Luna estaba el planeta Saturno, ambos en la constelación de Sagitario. Debido a la baja posición de la Luna, había que buscar un lugar con el horizonte este despejado de obstáculos. Fue muy curioso ver salir la Luna, con los colores típicos con los que se tiñe debido a la refracción atmosférica de la luz; colores que no estaban afectados por el eclipse, sino que ocurren cada vez que la Luna asoma sobre el horizonte y que varían según la hora,
Mariano Ribas
la luminosidad y la turbulencia atmosférica. A las 18:31 se dio el máximo, con la Luna oculta en un 65% por la sombra terrestre. El fenómeno finalizó a las 19:59, y luego quedó sólo la etapa penumbral, sin demasiada relevancia. El próximo eclipse lunar no ocurrirá hasta 2020, aunque los cuatro que se producirán ese año sólo serán eclipses penumbrales, que son mucho más débiles que los eclipses parciales o totales. No habrá otro eclipse lunar total hasta mayo de 2021, que será visible desde nuestro país parcialmente cerca del amanecer. El próximo visible por completo desde aquí será el 16 de mayo de 2022. n