1
2
3
4
12
#01.REFLEXIONES
Planes para proyectos públicos.
Jacobo Pallarés
#02.INESTABLES POR LA EDUCACIÓN
I trobada de teatre en l’educació a espacio inestable.
Rafa Palomares
#03.TEXTO
Prólogo.
Texto
36
#04.MIRADAS DESDE LA GESTIÓN CULTURAL
Jaume Pérez
Arturo Sánchez Velasco
Proyecto Europeo: Viajando
Biblioteca de Gandia
Proyecto Europeo: <25
La Rambleta
Ambigú y leben fährt weiter – life rides
Franzisca Muche
5
#05.DANZA
Festivales
Mercedes L. Caballero
Hola, soy Coreógrafo/a.
Gustavo Ramírez Sansato
.
47
#06.PERIFERIAS
Las artes escénicas crecen
52
#07.PROCESOS CREATIVOS
Proceso creativo sobre Qualsevol
61
#08.AQUÍ Y AHORA
Julio Castro Jiménez
Tatiana Clavel y Santi de la Fuente
Proceso creativo sobre ¿Y si hablaran de nosotr@s?
Miguel Martínez
Cabanyal Íntim 2014
Maribel Bayona
Traversée 2013
Irene Sadovska
46
DANZA Benjamin Millepie La dance project
Arranca esta nueva sección en la Revista Red Escénica, dedicada a la creación dancística contemporánea, con la mirada puesta en la Bienal de la Danza Lyon, foco del momento para últimas propuestas. Del 10 al 30 de septiembre, un buen puñado de compañías se darán cita en la ciudad francesa bajo el paraguas de esta muestra internacional, referencial en el mundo de la danza desde hace años y aquí desvelaremos algunas de ellas. Junto a este tema de actualidad, inauguramos también un espacio dedicado de manera directa y personal a los creadores del país. Bajo el título de “Hola, soy coreógrafo/a”, se invitará a los protagonistas de la danza nacional a contar, en primera persona, por qué hacen lo que hacen y qué les mueve para llevarlo a cabo. El creador valenciano Gustavo Ramírez Sansano inaugura la sección.
47
LYON, FOCO DANCÍSTICO Desde hace más de tres décadas, la ciudad de Lyon se convierte durante tres semanas en foco internacional para la danza a través de su Bienal que viene congregando a los creadores y espectáculos del momento. En su próxima edición, la número dieciséis, la cita en la ciudad francesa será del 10 al 30 de septiembre. Diversidad. Mixtura. Contaminación. Tres palabras y conceptos sobre los que girará especialmente esta próxima edición de la Bienal de la Danza de Lyon, que cumple dieciséis ediciones y, nuevamente, una de las máximas de este encuentro internacional con la danza que se alza imprescindible en el mapa escénico mundial: la de recoger un sentir relacionado con la actualidad creativa. Ha sido siempre reputado escaparate de lo que sucede en torno a esta disciplina casi en cualquier rincón del planeta. Y desde que en 1984, la bienal arrancara bajo iniciativa de Guy Darmet, hombre de la danza en Francia que la dirigió hasta 2011, este encuentro ha presidido carteleras dancísticas. Por la congregación de grandes nombres de casi todos los continentes. Por el eclecticismo que ha presidido su línea de programación, siempre en torno a la creación más actual (hasta la edición de 2006, un criterio diseñado en torno a lo geográfico). No será una excepción la próxima edición que se celebrará del 10 al 30 de septiembre. Y bajo la dirección de la bailarina y coreógrafa Dominque Hervieu, al mando artístico de la bienal desde hace dos ediciones, este macro festival de danza ofrece una cartelera de vértigo, que además cumplirá los tres ejes sobre los que parece estar articulada esta muestra: consagrados, jóvenes y público. A la audiencia la tiene muy en cuenta la Bienal y sus ya célebres encuentros entre creadores y espectadores, corroboran el interés que ha venido profesando en la importancia de la creación de nuevo público para la danza. Por su parte, el ya familiarizado con asuntos dancísticos, encontrará en Lyon un lugar para ponerse al día con lo más puntero. En este sentido, son muchos los trabajos que destacan en esta nueva entrega. Uno de ellos, John, obra más reciente del colectivo británico DV8 Physical Theatre, asoma imponente. Tras su estreno el pasado mes de agosto en el festival Impulstanz de Viena, este nuevo trabajo de Lloyd Newson y esta nueva vuelta de
tuerca al ser humano como individuo y ente social, se presenta como uno de los reclamos más suculentos de la muestra. Compiten en expectación y renombre, la presencia del Ballet de la Ópera de Lyón, Jan Fabre, Maguy Marin, Robyn Orlin, William Forsythe, Mourad Merzouki y Benjamin Millepied, nuevo director del Ballet de la Ópera de Paris que visita Lyon con su propia agrupación, L.A Dance Company. Habrá presencia española en la edición número dieciséis de la Bienal de Lyon. La encargada, Rocío Molina que presentará dos trabajos: Afectos, estrenado en 2012 en el Mercat de les Flors de Barcelona y Bosque Ardora, espectáculo que se estrenará en esta muestra y que poco después visitará la Bienal de Flamenco de Sevilla. Un montaje para tres bailarines y seis músicos en el que la joven creadora andaluza, Premio Nacional de Danza 2010, se pregunta por la relación entre humanos y animales, y sobre ella disertará a través del flamenco evolucionado que trabaja. “¿Dónde está el flamenco? Donde yo quiero”, reflexiona Molina en el texto con el que presenta esta nueva creación. El gran desfile que congrega a miles de participantes entre profesionales, amateurs y simpatizantes de la danza; el festival Off, que reunirá un buen puñado de creaciones emergentes y el Focus Danse, una plataforma para profesionales enfocada en el encuentro y la difusión de la danza, que cumple ahora su cuarta edición, completan el perfil de esta regia cita con la creación dancística actual e internacional. http://www.biennaledeladanse.com
Mercedes L. Caballero
48
HOLA, SOY COREÓGRAFO/A
Gustavo Ramírez Sansano
Hola, soy coreógrafo y a lo largo de los últimos veinte años he creado aproximadamente unas cuarenta coreografías. Para mí, la creación supone jugar y modificar tu entorno más inmediato, y creo también que de alguna manera me dedico a la coreografía porque, como me dicen algunos amigos, “vivo una realidad paralela”... esto no sé si en positivo o negativo... Lo que sí es verdad es que en mi cabeza, casi todo lo que pasa ante mis ojos tiene un ritmo, un peso específico, un lugar concreto desde el que actúa y está sincronizado con lo que lo rodea... Y estoy hablando de la vida cotidiana. Creo que después de dedicarme enteramente a la creación, hay tics que me van a perseguir siempre, extrapolando aspectos estrictamente coreográficos al día a día. Creo que eso es lo que me aporta la creación dancística: una óptica desde la que aproximarse al mundo circundante. En mis inicios como bailarín, tenía la sensación de que un aula de danza era un lugar seguro, un lugar donde todo estaba en su sitio. Un lugar donde sabías cómo actuar y lo que se esperaba exactamente de tí . De algun forma, al entrar en el ámbito coreográfico, siento algo parecido. Encuentro que el espacio del creador es un espacio donde todo puede cuestionarse sin cortapisas, donde hay “bula” para afrontar casi cualquier tema, desde la óptica que quieras. El “velo” del arte, o de la interpretación artística más bien, nos puede dar carta blanca casi para cualquier planteamiento. Y esta li-
bertad es imprescindible para el creador, para probar, para equivocarte, para ir más allá, para aventurarte en terrenos desconocidos, e ir creciendo a medida que lo hace la coreografía. Claro que no siempre el proceso creativo es como uno quisiera. En ocasiones, cuando coreografías para otras compañías, hay imperativos que están por encima de lo que sería apropiado o idóneo para la creación: tiempos que se recortan cada vez más, intérpretes completamente desconocidos para tí, nuevos equipos de trabajo... Cada proceso en este sentido supone un aprendizaje, y en estos casos, según mi experiencia, lo mejor (o lo que a mí me funciona) es tener siempre una idea desde la que partir, una cierta dramaturgia que en un momento dado vaya a proporcionar el empaque que la pieza necesita. Un argumento, una historia sencilla, la relación establecida entre los personajes es más que suficiente como detonante de una nueva pieza. Estas ideas, en mi caso, siguen casi siempre la misma dinámica: recojo ingredientes de diferentes situaciones de la vida. Y aparecen poco a poco, en diferentes situaciones y tiempos y de alguna menara llega un día donde esos ingredientes, que igual no parecian conectados, se conectan entre sí y ese es el punto de partida para el siguiente trabajo. Mi última creación para Proyecto Titoyaya es La Metamorfosis de Kafka, que tuvo su estreno mundial en el festival d’Estiu de Sagunt, el pasado 5 de agosto. En este caso particular, el proceso ha especial para mí porque por primera vez, en lugar de iniciarlo de la forma habitual, lo he hecho desde el punto de vista de un director teatral, para después incluir la danza dentro de esta macroestructura coreográfica en la que me he encontrado inmerso. Ha sido un reto para mí, y es aquí, en casa, cuando uno puede permitirse el lujo de realizar experimentos, que de otra manera no te atreves a llevar adelante en tu faceta como freelance. Proyecto Titoyaya ha sido desde el inicio una plataforma donde crear desde un punto de vista totalmente libre y sin prejuicios, dando soporte a múltiples formas de entender el hecho creativo y cuestionarlo, y en ese punto es donde nos encontramos actuamente.
Texto: Gustavo Ramírez Sansano. Bailarín y coreógrafo. Director de la compañía Proyecto Titoyaya http://www.titoyaya. com/. Coordinación: Mercedes L. Caballero
69
70