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Asesinato del embajador ruso en Turquía

www.mas.org.ar - masarg@mas.org.ar - Año XV - Nº 410 - 22/12/16 - $15 - Precio solidario $100


P OLÍTICA N ACIONAL Año XV - Nº 410 - 22/12/16

2 Socialismo o Barbarie

La Izquierda al Frente por el Socialismo XV ANIVERSARIO DEL ARGENTINAZO

se estrenó en Plaza de Mayo

U

na cuestión de alto valor simbólico y político ocurrió en la reciente marcha de Congreso a Plazo de Mayo el martes pasado: el estreno del nuevo frente electoral entre nuestro partido y el MST justamente en el 15° aniversario de la rebelión popular.

La movilización y acto en la Plaza dieron lugar a una intensa discusión entre los convocantes. Básicamente: el FIT y nuestro nuevo frente. Por nuestra parte, dado el peso del aniversario, opinábamos que correspondía hacer un acto más político; final-

mente se acordó un formato dándoles más peso a los dirigentes sindicales independientes; por nuestro partido tenemos el orgullo de decir que fue orador Roberto Álvarez, secretario general de la comisión interna de la Pilkintong. De todas maneras, la naturaleza política de la fecha se vio reflejada en la circunstancia de sus convocantes: los dos frentes de la izquierda que existen en nuestro país. Es ese el contexto que expresó tanto la presentación en sociedad mediante una hermosa columna de la Izquierda al Frente por el socialismo como las tensiones que se vivieron en la Plaza de Mayo, sobre todo con el Partido Obrero. Es que a los integrantes del FIT les cuesta reconocer su entera responsabilidad en esta división; el haber actuado como si nadie más existiera, el haber sido por tres elecciones consecutivas gendarmes de la ley proscriptiva en el seno de la izquierda. Ahora la cosa ya está; se deberá hacer la experiencia en las próximas elecciones y ver qué sale de ese resultado. La Izquierda al Frente por el socialismo está dando sus primeros pasos; se debe avanzar con “pies de plomo”:

defender el programa y el manifiesto político tan progresivos que acordamos. Un frente de estricta independencia política de los trabajadores que viene transitando sus primeros meses de manera fraterna, respetando los acuerdos y que deberá ir verificando en la lucha de clases concreta en qué medida la experiencia se desarrollará; no conviene anticiparse a la experiencia misma. De ahí que estemos felices de esta primera exitosa intervención común en la marcha a la Plaza de Mayo, donde la IFS fue, evidentemente, una de sus columnas principales, lo mismo que en otras partes del país como Córdoba, el Comahue, etcétera. Paso a paso, verificando acuerdos políticos y en la lucha de clases, haciendo la experiencia, pasando, claro está, por la prueba electoral, se podrán ir viendo los alcances del frente mismo, sus potencialidades. Por ahora se trata que toda la militancia de la Izquierda al Frente por el socialismo festejemos este primer éxito: haber hecho nuestra primera acción común en el aniversario de la rebelión popular, nada menos. J.L.R.

Macri busca privatizar la investigación ANTE EL RECORTE EN EL CONICET

MANUELA CASTAÑEIRA

A

nte el recorte del 60% de los puestos para el ingreso a la Carrera de Investigación del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), junto con un grupo de compañeros fuimos a llevar nuestra solidaridad en la toma del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva para apoyarlos en su lucha. Desde el Nuevo MAS repudiamos este ajuste aberrante a la producción de conocimiento por parte del gobierno nacional y el ministro Lino Barañao. Más de 500 investigadores que habían aprobado las dos instancias de evaluación para el ingreso a la Carrera de Investigación fueron luego expulsa-

dos por el recorte presupuestario. Se trata de jóvenes becarios que han obtenido su Doctorado y vienen dedicando 5, 7 o más años a la investigación en distintas disciplinas y que hoy se les niega la continuidad de sus puestos de trabajo y su producción científica. Este recorte es parte de una política privatista global del macrismo: comenzó con el ajuste presupuestario a las Universidades Nacionales y el cuestionamiento de la educación como un derecho; ahora sigue negando el derecho a la investigación y la producción científicas. Quiere robarle el futuro a la juventud y con ello a la sociedad. Macri busca privatizar el conocimiento y la investigación, ya que si se va reduciendo el ingreso a la Carrera, quienes quieran investigar en Argentina tendrán que hacerlo para las empresas según los

intereses del mercado. Sumado a esto, denunciamos que el gobierno destinó miles de millones de dólares para el pago a los fondos buitre, eliminó retenciones para la exportación de granos, eliminó impuestos a bienes suntuarios y ganancias personales. Pero cuando llega la hora de la educación y la investigación dice que “no hay plata”. Por eso es más que justificada la bronca y la masiva toma que se está llevando adelante. Vamos a seguir apoyando la toma y las distintas medidas de lucha que impulsen los becarios, estudiantes e investigadores. Las asambleas vienen siendo masivas y reflejan en sus debates mucha preocupación por la estabilidad laboral y el futuro de la ciencia y la investigación en Argentina.

Editorial JOSÉ LUIS ROJO

“Dada la enorme percepción negativa de Trump en América Latina, sería muy imprudente desde un punto de vista político, que un presidente de la región busque un acercamiento” (La Nación, 19/12/16).

L

a imagen de tranquilidad con la que se transitarán los últimos días del año podría llevar a engaño a más de uno. El final del 2016 no será con saqueos, ni se vivirán en medio de una crisis social generalizada. El país está en recesión y los precios no paran de aumentar. Pero no se está viviendo un hundimiento económico como en otras oportunidades, esto independientemente que el nivel de vida ha descendido a ojos vista durante los últimos doce meses. En este contexto, el grueso de la población trabajadora está procesando –todavía lentamente- su experiencia con Macri. Por lo demás, la flor y nata del empresariado mantiene a rajatabla su apoyo al macrismo, y la CGT aparece más preocupada por la gobernabilidad que por los intereses de la clase obrera, todos factores que han posibilitado que Cambiemos llegue a finales del año con la coyuntura controlada. El argumento de este editorial es, sin embargo, que la calma de finales del 2016 no es el espejo en el cual podrá mirarse un 2017, que se adelanta movido. En este editorial nos dedicaremos a desarrollar algunas razones para este pronóstico. DAR POR UN LADO LO QUE SE SACA POR EL OTRO

La palabra que más se repitió en la renegociación del Impuesto a las Ganancias fue “gobernabilidad”. Luego de que todos los actores reconocieran la “torpeza” del gobierno al presentar sin necesidad en sesiones extraordinarias (donde se tratan exclusivamente los proyectos oficialistas) una ley de Ganancias que no iba a contar con apoyo en las Cámaras, al cierre de esta edición se está votando finalmente un proyecto consensuado. El gobierno pagó con una derrota en Diputados la torpeza de este paso en falso; lo salvó el hecho que posteriormente saliera en masa el empresariado a respaldarlo: hubo pánico que se terminara aprobando una ley que, a pesar de sus límites (no eliminaba el impuesto al trabajo), fuera en sentido contrario del ajuste que toda la patronal le está pidiendo profundizar a Macri. Ser “generosos” en materia del mínimo no imponible, habilitar el cobro de nuevos impuestos recientemente derogados, hubiera constituido una pésima señal en un sentido opuesto al nuevo ajuste que deberá implementar, más temprano que tarde, el gobierno (sobre todo cuando el contexto internacional parece deteriorarse de manera acelerada). De ahí que, rápidamente, hayan comenzado a actuar los “mecanismos institucionales” haciendo “control de daños” y buscando abrir una negociación que diera por tierra el proyecto originado en Diputados, reemplazándolo por uno mucho más moderado en Senadores. La primera ficha la movió Pichetto (presidente del bloque del Frente para la Victoria en la Cámara alta) dándole al gobierno una semana para arreglar el des-


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Prepararse para un 2017 movido

aguisado. Conseguido este tiempo suplementario, el gobierno giró sobre sus pasos y fue a golpear la puerta a donde tendría que haber ido desde el comienzo: la CGT. Quizás a algunos les haya parecido sorprendente que la CGT no dijera esta boca es mía cuando el tratamiento del proyecto opositor en Diputados (que si bien no eliminaba este impuesto, subía de manera considerable el piso para comenzar a pagarlo). Pero no, no dijo una palabra; y esto por razones bien fundadas: la CGT temió que el gobierno vetara la posible ley, lo que hubiera dejado en evidencia su rol traidor a lo largo de todo el año, porque, veto y todo, de ninguna manera estaba dispuesta a convocar a una medida de fuerza en la agonía del año. Pues bien: la renegociación con la CGT no tuvo contratiempo alguno. La Confederación del Transporte (encabezada por uno de los miembros de la troika que conducen la central, Schmidt), realizó una medida de fuerza en la mañana del lunes 19; una medida contundente pero limitada en su duración que, en el fondo, fue sólo para posar de combativos porque se esperaba que el gobierno permitiera que las horas extras en el transporte estuvieran exentas de pagar Ganancias. Acordado un nuevo proyecto de ley con la CGT (y con la mayoría de los senadores del PJ), estuvo también esa bochornosa reunión a puertas cerradas en la casa de Massa –sushi mediante, escandalosamente borrado de la foto que extraoficialmente se hizo circular- donde hubo “fumata blanca” alrededor de lo acordado con los líderes cegetistas. Ocurre que a Massa, luego de votar con los K el proyecto opositor, le agarró vértigo exactamente por el costado que le marcó Macri: su débil credibilidad frente “a los que mandan” (los empresarios), credibilidad que se construye haciendo años de buena letra con la patronal y no con avivadas electoralistas… El proyecto que se acordó, finalmente, sólo le costará al gobierno unos

300 millones de dólares más que el original (una cifra exigua). Es verdad que sube en algo los pisos respecto del proyecto enviado inicialmente, sobre todo en el caso de los casados con dos hijos. Pero lo que Macri “concede” por un lado, lo quita por el toro: para contrapesar la suba del mínimo no imponible se volvieron a aumentar las escalas (el porcentaje de impuesto que se pagará sobre el excedente sobre los mínimos), con lo cual la ecuación económica quedará exactamente en el mismo lugar (ver nota en esta misma edición). La moraleja del caso es que la patronal no quiere, bajo ningún concepto, que el gobierno se desestabilice. Ha pasado sólo un año de mandato y sigue unificada en sostenerlo, lo que se entiende cuando se comprende que el de Macri es un gobierno directo de los negocios. NO SERÁ UN AÑO PURAMENTE ELECTORAL Esto nos lleva a las previsiones para el año que comienza. Como señalamos al comienzo de este editorial, la calma que se observa en este final del 2016 no será el rasgo que domine el año que viene. Las amenazas vendrán desde varios frentes. Primero, los elementos de imprevisibilidad global que vendrán con la asunción de Donald Trump a la presidencia de los Estados Unidos (asunción que ocurrirá el 20 de enero). Sectores del gobierno macrista (Malcorra a la cabeza) manifestaron por lo bajo que, quizás, Trump vaya a hacer la “gran Menem”: declaraciones de campaña para un lado, y medidas de gobierno para el otro… Pero ni el mundo de hoy es el de comienzos de los años 90 –pleno apogeo del neoliberalismo en el que se apoyó Menem-, ni las consecuencias de las acciones de un presidente yanqui se pueden siquiera comparar con las de un país prácticamente insignificante (desde el punto de vista internacional) como el nuestro: “El triunfo electoral de Trump es significativo también porque forma parte de una tendencia global hacia el ultrana-

cionalismo, el proteccionismo y el rechazo al orden liberal occidental vigente desde el fin de la Segunda Guerra Mundial” (La Nación, 19/12/16). Existe también consenso mayoritario en que Trump no traerá beneficios para Latinoamérica: el dólar se va a fortalecer (¡multiplicando las presiones para una nueva devaluación del peso!), las tasas de interés van a aumentar en el norte del mundo dificultando el acceso al crédito internacional, a lo que se pueda desde ya sumar la eventual dificultad para acceder a sus mercados. Trump plantea problemas políticos, geopolíticos y económicos muy difíciles de anticipar; problemas globales en un mundo que, para colmo, está convulsionándose cada vez más. Pero al “efecto Trump” se le viene a sumar la mediocridad general de la economía mundial, incluyendo en esto la desaceleración del crecimiento chino y, por añadidura, algo de impacto directo en nuestro país: la crisis económica y política en Brasil. Se habla, por ejemplo, que el mercado automotriz brasilero podría reactivarse recién a finales del 2017, y eso si la situación política se estabiliza. Temer cuenta con una popularidad bajísima; para colmo, está siendo golpeado -cada vez más cerca- por acusaciones de corrupción. Sin embargo, todavía es difícil dar un pronóstico certero sobre su continuidad (se llegó a hablar estos días de que podría renunciar, algo que no parece lo más probable); esto debido a que de todos modos su “blindaje” parlamentario es mayor que el del presidente argentino: de momento goza de mayoría en ambas Cámaras. Por otra parte, las relaciones de fuerzas en Brasil para los de abajo, son claramente adversas: Brasil está inmerso –realmente- en una coyuntura reaccionaria. Esto es lo que le ha permitido a Temer aprobar un congelamiento del gasto estatal por 20 años y estar preparando ahora una ofensiva

para el 2017 alrededor de contrarreformas jubilatorias y laborales. Insistimos: es evidente que la situación política en Brasil es abiertamente reaccionaria, cosa que por ahora no se ha concretado en la Argentina: de ahí que Temer reprima duro y parejo. Algún día Macri deberá desafiar las relaciones de fuerzas si es que quiere llevar adelante, de manera consecuente, sus planes de ajuste y racionalización económica; y se verá cuál es el resultado de ese combate, algo que está abierto. La elección de la “línea del medio” entre el “populismo K” y el ajuste neoliberal ortodoxo significa, por ahora, una serie de concesiones a esas relaciones de fuerzas; concesiones que han tenido como consecuencia económica la supervivencia de un elevado déficit fiscal que, para ser financiado en el 2017, requerirá tomar deuda por otros 25 a 30.000 millones de dólares. El interrogante que aún no tiene respuesta es si Macri gozará de ese margen de maniobras; si podrá conseguir esa cantidad de crédito internacional sin caer, a corto plazo, en una nueva crisis de la deuda externa como otras que se vivieron en el país en las décadas anteriores. Si de la economía pasamos a la situación social, el nivel de conflictividad es aún bajo. Uno, porque todavía no les cae la ficha a los trabajadores sobre el verdadero carácter del gobierno de Macri, lo que se expresa en que conserve todavía un importante nivel de popularidad (algo en torno al 50%). Sin embargo, esa popularidad se ha ido lentamente deteriorando y lo seguirá haciendo en la medida que el salario siga cayendo (este año ya cayó el 5%), que los despidos aumenten y la pobreza se mantenga en los niveles altísimos en los que está (32% de la población); cuestiones que se esperaba pudieran moderarse en el 2017 con la caída de la inflación y la recuperación económica, supuestos ambos que no están asegurados.

CONSTRUYENDO LA IZQUIERDA AL FRENTE POR EL SOCIALISMO

De deteriorarse la situación económica, lo hará la social. Una cosa es “perdonar” a un gobierno en su primer año de gestión, otra muy distinta es cuando ya comienza su segundo año de mandato: a la población le empezarán a caer las fichas inevitablemente. En esas condiciones: ¿hasta cuándo podrá evitar la CGT convocar a un paro general? El 2017 podría presentarse como un año no puramente electoral (al menos, no en sus comienzos), lo que puede ayudar a agigantar las contradicciones verificándose un desarrollo mayor de las luchas que en 2016. Pero incluso entre los sectores políticos patronales, las cosas quizás no sean iguales a los últimos doce meses: acordar con el gobierno en un año no electoral es una cosa, otra muy distinta es cuando se acerca el momento de la votación. La combinación de todos estos elementos anticipa un 2017 movido. Aquí es donde se coloca, precisamente, la importancia enorme del lanzamiento de la Izquierda al Frente por el socialismo, que viene de realizar una hermosa columna el 20/12. No fue casual que su lanzamiento haya ocurrido en el 15° aniversario del Argentinazo; fue coherente con su declaración política y programa. Se trata de un frente electoral con el cual habrá que ir haciendo, paso a paso, la experiencia, y que deberá validarse en las elecciones. Sin embargo, eso no quiere decir que no pueda ensayar ir más lejos: sacar declaraciones políticas comunes, participar de manera conjunta en movilizaciones, incluso explorar si hay acuerdos en las luchas; todas cuestiones que no se pueden saber por anticipado: la experiencia lo dirá. Que la primera presentación del nuevo frente haya sido en el aniversario del Argentinazo, tiene un enorme valor. Se trató de una presentación exitosa realizando una columna militante del frente que entró con muchísima fuerza a la Plaza de Mayo (de igual forma se expresó en Córdoba, Neuquén y otras provincias). Las tareas que nos esperan en el 2017 son inmensas. Un año en el que habrá que jugarse entero en las elecciones para capitalizar una parte de la crisis de representación que se vive en amplios sectores desde la Izquierda al Frente por el socialismo, pero que también nos planteará intervenir en las luchas; luchas que si son de magnitud plantearán, precisamente, realizar la campaña electoral desde el terreno mismo de dichas peleas, lugar privilegiado donde deberemos construir las principales candidaturas del frente. Y un desafío, también, para dar un salto cualitativo en la construcción de nuestro partido; salto que ya venimos realizando pero que con el lanzamiento del nuevo frente nos coloca sobre un terreno completamente diferente. Como definiéramos en nuestro último Congreso partidario, una plataforma para jugarnos a transformar nuestro partido en uno de los partidos más fuertes de la izquierda argentina. ¡VAMOS CON TODO A CONCRETAR ESTOS OBJETIVOS EN EL 2017!


XV A NIVERSARIO 4 Socialismo o Barbarie

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DEL

A RGENTINAZO

“Para derrotar al gobierno necesitamos un nuevo Argentinazo con la clase obrera a la cabeza” ROBERTO ÁLVAREZ SEC. GRAL. COMISIÓN INTERNA PILKINGTON

B

uenas tardes compañeras y compañeros. En primer lugar, me quiero presentar: soy Roberto Álvarez, Secretario General de la comisión interna de la Pilkington, Lista Marrón del Vidrio, una fábrica que produce para las automotrices y donde trabajamos más 400 compañeros. El Argentinazo permitió que hoy estemos acá Nosotros hicimos nuestra experiencia de lucha al calor de la recuperación económica que se dio después del 2002. Las fábricas se volvieron a llenar y toda una nueva generación de compañeros empezamos a trabajar y a luchar. Empezamos a ver y a sentir que las patronales las quieren todas para ellos, que los secretarios generales de los sindicatos, con honrosas excepciones, son burócratas que también trabajan para ellos; que el Ministerio de Trabajo también es de ellos; y que, finalmente, los presidentes también son de ellos. O como el caso de Macri, ¡que es él uno de ellos directamente! Compañeros: a nosotros en 2009 nos echaron 33 compañeros por el “delito” de pedir un aumento de salario; después nos quisieron cambiar salario por despidos y dijimos que

NO: ¡que queríamos el salario y a todos adentro! Cortamos la Panamericana, como nos habían enseñado los compañeros de la Marrón de FATE en el 2007 y el 2008. Nos enfrentamos al sindicato y sus patotas, también como aprendimos de los compañeros del Neumático en su heroica lucha de esos años. Y empezamos a recuperar los viejos métodos de la clase obrera en base a asambleas y lucha. ¡Y hasta tuvimos que meternos adentro y ocupar la planta para enfrentar las tramposas conciliaciones obligatorias con todos afuera! Después, ante el peligro del desalojo, salimos y acampamos en los portones y no entró nadie. Fueron dos meses de lucha: de paro, de movilizaciones, de cortes. De todo hicimos y ganamos: ¡los 33 adentro y un aumento de sueldo! Una enseñanza que nos quedó es que cuando se lucha se rompen los tabúes, se rompen los prejuicios que nos meten en la cabeza las patronales y el gobierno. Y un gran ejemplo de lucha, que rescatamos a muerte, ¡es el los compañeros de Gestamp, con su heroica gesta del puente grúa, enfrentando a una de las burocracias más poderosas

del país, la del traidor Pignanelli, y recuperando los métodos históricos de lucha de nuestra clase! Pasó el tiempo y mantuvimos la organización del activismo y los compañeros entendieron que se venían tiempos duros y nos votaron para defender los salarios y los puestos de trabajo. Y seguimos organizándonos y peleando una perspectiva clasista para el gremio y para toda la clase obrera. Compañeros: este gobierno de ricos prometió “lluvia de inversiones” y lo que hay todos los días es lluvia de malas noticias. No hay semana que no haya una mala: la inflación no para, las paritarias son ya un triste recuerdo, las tarifas suben y los servicios siguen tan malos como antes; para colmo, Macri mintió descaradamente y el impuesto al salario seguirá. Compañeros, hay que derogar el impuesto al salario, el salario no es ganancia. Nosotros vendemos la fuerza de trabajo todos los días, en los tres turnos rotativos, 6x2, horario alemán, sin descanso compañeros: nuestro salario no es ganancia Esta situación exige la mayor unidad de acción para la lucha, y también exigir y trabajar para imponer un paro ge-

neral que derrote el plan de ajuste del gobierno; un paro general que este año, la dirección traidora de la CGT, se negó a convocar. Compañeros: para derrotar al gobierno y abrir una salida obrera y socialista, necesitamos un nuevo Argentinazo pero con la clase obrera ocupada a la cabeza: con sus asambleas, con democracia obrera, tomando

en sus manos todas la cuestiones, recuperando los métodos históricos de lucha como el paro, la ocupación y la huelga política de masas. Compañeros: ¡necesitamos un gobierno de los trabajadores y el socialismo y como obrero clasista militante del Nuevo MAS me comprometo a luchar por eso! Gracias a todos por escucharme.

En general ambos reivindicaron el Argentinazo, la rebelión popular del 2001, la necesidad de enfrentar y dar una lucha en las calles contra Macri, y que la constitución del frente es una potente herramienta para unificar a los trabajadores y abrir una perspectiva socialista a miles de jóvenes y trabajadores ante la vacancia política abierta. Podemos decir con orgullo que el debut en las calles de la Izquierda al Frente por el socialismo fue todo un éxito.

Luego de la movilización y el acto, el Nuevo MAS realizó un brindis de fin de año con una gran choripaneada, donde fueron invitados y concurrieron los referentes del MST, y las felicitaciones a la militancia, a los que se acercaron, a las compañeras de La Rioja, a todos los que le hicieron el aguante al frente y un llamado a redoblar esfuerzos para un año 2017 de grandes luchas que se avecinan.

20 de Diciembre en las calles con la Izquierda al Frente

CÓRDOBA

D

emás está decir que, como en todo el país, también Córdoba fue parte de la jornada nacional que fue convocada por organizaciones sindicales y la izquierda. Esta movilización tenía objetivos muy claros. En primer lugar, recordar las jornadas de rebelión popular del 19 y 20 de Diciembre del 2001 en las que se tiró abajo un gobierno hambreador y neoliberal, que antes de dejar el poder reprimió brutalmente, dejando en todo el país 39 luchadores asesinados. Este proceso sigue vigente hoy, y está presente en cada movilización. También salimos a las calles no sólo para conmemorar una fecha, sino para poner bien en alto la necesidad de parar el giro reaccionario de Macri y el ajuste que quiere imponer al conjunto de la población, a los trabajadores, jóvenes y mujeres que día a día se movilizan por sus derechos. Desde el Nuevo MAS Córdoba tomamos con todo este desafío de convocar a toda nuestra militancia y a trabajadores, estudiantes, docentes, compañeras del movimiento de mujeres, como así también a los vie-

jos compañeros que fueron parte constructiva de nuestro partido. Y este desafío fue cumplido con creces, ya que la columna de nuestro partido se llenó de jóvenes que fueron parte de la toma y luchas contra la reforma educativa que impulsa la actual gestión. De obreros industriales que compartieron toda esta movilización, numerosos docentes que se han movilizado y enfrentado a la burocracia de la UEPC, delegados y trabajadoras de Salud, como así también trabajadoras de delegaciones estatales, de los call centers, activistas de Las Rojas. Es decir, una numerosa presencia estructural y militante del Nuevo MAS que está a la altura de las otras corrientes de izquierda. Para el Nuevo MAS fue una cita de honor porque, junto al MST, en esta fecha se presentaba en las calles de Córdoba la Izquierda al Frente por el socialismo y juntos constituimos una columna que impactó por su cabecera con sus figuras marchando juntas, por su bandera del frente, por ambas batucadas, con sonido ejemplar, por su tamaño, por la fuerza militante, por la unidad, por la alegría compartida en la

movilización y en el accionar común que tuvimos durante toda la movilización. Fue hacer carne en los hechos la constitución del frente. La movilización y acto, a diferencia de Buenos Aires, fue organizado casi en su totalidad por los dos frentes de izquierda que hoy hay en la Argentina. Esta novedad, hasta hoy ausente, también se reflejó en el nerviosismo político de las corrientes integrantes del FIT, PO, PTS e IS, durante la movilización, las actitudes rupturistas y las provocaciones sin principios de los integrantes del FIT que impedían nuestra presencia y ubicación en el acto, demostraron objetivamente con métodos patoteriles para impedir la visibilidad de la Izquierda al Frente. Repudiando la actitud divisionista del FIT y habiendo culminado la movilización en Casa de Gobierno, hicimos nuestro propio acto, la reacción unitaria a las provocaciones también mostraron que nuestro frente está dispuesto a disputar y hacer respetar su espacio político. En el acto que realizamos habló el “Gato” Gómez por el MST y Eduardo Mulhall por el Nuevo MAS.

JOSÉ GÓMEZ


P OLÍTICA N ACIONAL

Conmemoramos el Argentinazo enfrentando el ajuste de Macri y levantando las banderas de la lucha de Zanón NEUQUÉN

Los Traidores

L

a CGT lo hizo de nuevo. Superándose cada día en las agachadas, Daer salió por los medios a festejar las “conquistas” producto de su negociación con el gobierno. Se olvidó que ese acuerdo es mucho peor para los trabajadores que el proyecto de ley aprobado en Diputados, que él mismo había votado, junto a Acuña, ambos massistas, otro de los integrantes del triunvirato de la CGT. Estos son los números a partir de los cuales se paga Ganancias, al momento de estar por votarse la nueva ley en el Senado, hoy miércoles. BRUTOS

Casado 2 Jubilado

ACTUAL

22.746

P. MACRI

26.000

30.000

APROB. DIP.

33.000

30.000

22.746

FINAL

27.900

44.000

26.000

37.000

60.000

30.000

En materia de deducciones y otras remuneraciones ACTUAL

Hijos

Hasta 24 años

Aguinaldo

Gravado

Cónyuge

A

CORRESPONSAL

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IMPUESTO A LAS GANANCIAS

Soltero

15 años de la rebelión popular del 2001, se realizó un acto en el puente que une Neuquén y Cipolletti. Desde el Nuevo MAS, fuimos convocantes a la jornada, firmando un documento común junto al resto de las organizaciones de izquierda en el que, además de reivindicar los métodos del 2001, impulsamos el apoyo a las luchas obreras y populares en curso, como la pelea de los trabajadores de Zanón, que exijen créditos para la renovación tecnológica para poder mantener la producción, en la perspectiva por la estatización de la fábrica bajo control obrero. O la pelea contra los ataques a los luchadores obreros y populares, como los delegados del cementerio de Cipolletti, despedidos injustamente por organizarse en su lugar de trabajo, que hoy se encuentran en una pelea por su reincorporación. Desde el Nuevo MAS nos hicimos presentes con una delegación de trabajadores, estudiantes y luchadores, junto al MST en la columna común de La Izquierda al Frente. Ahora la tarea es seguir apoyando las luchas en curso, fortaleciendo la unidad de los sectores combativos para poner en pie un polo que enfrente el ajuste y los ataques del gobierno nacional y los gobiernos provinciales.

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Alquileres

Deducible

P. MACRI

APROB. DIP.

Hasta 18 años Hasta 18 años No deducible Deducible

FINAL Hasta 18 años Deducible

Exento con suelGravado en cuodo hasta tas $64.000 Deducible con Deducible con No deducible No deducible tope tope Gravado

Exento sábado domingos y feriados. El resto paga en escala inferior

Hs extras y productivi- Gravado dad

Gravado

Exento

Patagonia Común

Común

Aumento deduc- Aumento deducciones 45% ciones 22%

Educación No deducible No deducible Deducible Viáticos

Gravado

Gravado

No deducible

Gravado parcial. Gravado parcial Mayor deducción en larga distancia

Clarín lo presenta como muy beneficioso para los trabajadores: “los más beneficiados, además de quienes dejan de pagar, serán quienes posean actualmente ingreso de bolsillo entre $ 35.000 y 50.000”. Y da como ejemplo un soltero con un sueldo neto de $ 30.000 que pasaría a pagar $ 414 contra los $ 2.234 que paga hoy; un casado con dos hijos, de $ 446 a $ 0, dada la actualización de las escalas. ¿Cuál es la trampa? Que las deducciones son para TODO 2017, y los sueldos son de HOY. Entonces la comparación REAL es para después de las paritarias. Además, como con toda letra chica, un trabajador que hoy deduce hijos entre 18/24 años, se encontrará que no los puede deducir más, con lo que puede guardar Clarín para el baño. Ni siquiera puede presentar la CGT como un avance parcial la actualización de mínimos y tablas, que la nueva ley hace por la actualización de los salarios, no por el índice de inflación, ya que el proyecto aprobado en Diputados contemplaba la misma actualización de los valores. Pero lo peor de todo se produce en la actualización de la ya famosa tabla de Machinea, congelada desde el 2000, que determina los % de impuesto a pagar. Consciente que la suba de los mínimos originales propuesta (15%) implicaba que cientos de miles de trabajadores empezarían a pagar, como nuevos contribuyentes, el gobierno fijó una escala reducida del 2% para esos casos en 2017: esto se lo tragó la negociación. Además, la escala original propuesta por Macri, y la votada en Diputados, establecía una mayor actualización que la “conquistada”

por nuestros negociadores: al nivel de $ 60.000 anuales, o sea $ 5.000 mensuales superando el mínimo, el proyecto macrista establecía una alícuota del 5% para 2017; después de la CGT, la alícuota es del 12%. TRAMOS

Anuales

ACTUAL

0-10.000 9%

MACRI

0-60.000 5%

OPOSICIÓN

Ídem

FINAL

0-20.000 5%

10.001 61.001 -91.000 Ídem 20.000 14% 10%

20.001-40.000 9%

30.001122.001Ídem 60.000 23% 182.000 20%

60.001-80.000 15%

20.00191.001Ídem 30.000 19% 122.000 15%

40.001-60.000 12%

Además, el proyecto original de Macri continuaba actualizando la tabla en 2018 y 2019: hasta $ 124.000 anuales ($ 12.000 mensuales por arriba de los mínimos); se hubiera pagado un 5% en 2018. Suponiendo una actualización de los salarios del 30% en 2017, gracias a la CGT, se pagará al 19%. Como las provincias dejarían de percibir $ 3.500 millones, Frigerio rápidamente arregló compensarlos con Aportes del Tesoro Nacional: se evaporaron así el impuesto a los plazos fijos y las retenciones a las mineras. Hasta el impuesto al dólar futuro cayó: sólo lo pagarán por única vez “quienes no hayan especulado”, o sea NADIE, ya que todos van a decir que lo hicieron para “cubrir posiciones”. Le salió tan barato este acuerdo al gobierno, que lo arregla con un impuesto adicional a las apuestas. IArAF1 en base a la actualización de 2017-2018-2019 de las alícuotas en el proyecto original de Macri, estimaba una menor recaudación del siguiente orden: 2017 $ 21.000 millones 2018 $ 46.000 millones 2019 $ 68.000 millones El gobierno, ocultando todos los datos, había estimado el costo de su proyecto original, para 2017 entre $ 27.000 millones y $ 30.000 millones, según el lugar y vocero, y que el costo adicional que le “arrancó” la CGT serían entre $ 5.000-$ 8.000 millones en 2017, según Quintana, $ 7.000 millones según Frigerio: como se ve, hay números para todos los gustos. Pero ahora nadie habla del costo para 2018-2019: nos encontramos entonces con la aparente paradoja que muy posiblemente en esos años Macri va a disminuir menos el impuesto que lo que había propuesto originalmente. En resumen: el proyecto del gobierno era horrible, porque aumentaba el número de trabajadores que pasaban a pagar, a pesar de reducir las alícuotas (el % de impuesto) y consagraba más de 2.000.000 de aportantes, pagando un poco menos. El proyecto de la oposición era mejor, porque subía más los mínimos, reducía el número de aportantes pero establecía un piso de aportantes de más de 650.000 trabajadores, los que pasaban a pagar más que antes. Y la ley, aunque finalmente tenga algunos cambios menores, a lo aquí analizado será MUY MALA: con respecto al proyecto de Macri, sube un poquito los mínimos, pero también las alícuotas, y por ende, lo que se va a pagar. Y con respecto a lo aprobado en Diputados es catastrófica: cedió muchísimo en TODOS los rubros y lo que van a pagar de menos algunos trabajadores, como en transporte, se compensa con lo que van a pagar de más otros: la guita siga saliendo del mismo sector social. Pero seamos justos, la CGT no estuvo sola: la abrumadora mayoría de gobernadores (tanto del PJ como del kirchnerismo) se opusieron al proyecto de Diputados. A punto de propinarle un duro golpe político al gobierno frenaron y se alinearon detrás de la sacrosanta gobernabilidad. SERGIO GURRIERI 1 Instituto Argentino de Análisis Fiscal, cuyo director es parte del equipo de Prat Gay.


P OLÍTICA N ACIONAL 6 Socialismo o Barbarie

Año XV - Nº 410 - 22/12/16

El blanqueo, la estafa del siglo NOTICIAS DE MACRILANDIA XXIX

En Argentina el 1% es el 0,3% - No eran los jubilados, estúpido, eran las elecciones 2017 - La irresistible seducción de lo negro - Cajas chinas y Matrioshkas financieras - El que habla la liga - La alergia al largo plazo del capitalista argentino - De los Panama Papers al Expediente Hamburgo - El blanqueo, todo un estilo de vida

T

ermina el año, y con él, se vence el plazo para la parte más importante del blanqueo lanzado por Macri. Recapitulemos brevemente las tres etapas: hasta el 31 de octubre se podía blanquear dinero en efectivo; hasta el 31 de diciembre, dinero en cuentas y bienes inmuebles (en ambos casos, con una multa del 10%); hasta el 31 de marzo, lo mismo pero con multa del 15% sobre lo declarado. El asunto tiene tantas trampas y mentiras que sólo nos dedicaremos a las más importantes. Pero antes de empezar, recordemos de cuánta gente estamos hablando: las cuentas especiales que abrieron bancos privados y públicos exclusivamente para el blanqueo no superan los 110.000 titulares. Hay 32 millones de adultos en el país. Los estafadores que le robaron plata al Estado en forma de evasión de impuestos, lavado de dinero o directamente operaciones delictivas no son ni siquiera el “1%” que denunciaba Occupy Wall Street. Son apenas el 0,3% del país. A esa gente le llega lo que bien puede calificarse, desde su punto de vista, como el regalo del siglo XXI. Y para todo el resto, es la mayor estafa en lo que va del siglo en este país. MENTIRA 1: “ESA PLATA VA PARA LOS JUBILADOS” Insostenible verso macrista. Por empezar, no ya un contador sino cualquier jefe/a de hogar sabe que no se puede sostener un gasto corriente con un ingreso por única vez. Y de eso se trata: el gobierno dice que con este ingreso de dinero por el blanqueo se va a financiará la “reparación histórica a los jubilados”. Dejemos de lado que en general esa “reparación” no supera los 500 pesos. Lo decisivo es que se promete recomponer pagos que se van a sostener en el tiempo (jubilaciones mensuales durante años) con un ingreso de dinero que termina en marzo. No, los verdaderos objetivos son dos: una amnistía financiera para toda la clase capitalista y los ricos argentinos, por un lado, y un ingreso de divisas que ayudarán a las arcas fiscales durante el año electoral 2017, por el otro. No hay nada más. MENTIRA 2: “LOS QUE FUGARON O EVADIERON LO HICIERON PORQUE EL KIRCHNERISMO LOS PERSEGUÍA CON REGULACIONES”

¡Por favor! La fuga de divisas, evasión de impuestos y blanqueo de dinero malhabido es la actividad principal de la

burguesía argentina desde hace décadas, y esas prácticas eran muy preexistentes al kirchnerismo. Si lo sabrán Macri y su familia, que armaron su primera offshore comprobada con sede en las Bahamas, Kagemusha SA, ya en 1981. ¿Quién los “perseguía” por ese entonces, la dictadura militar? ¿Justo a los Macri?

por hasta 27 de millones de dólares que se blanquearán en la segunda etapa. ¿Se entiende? Primero limpian la guita chica, y una vez blanqueado, con eso pagan la multa para limpiar la guita grande. ¡Genial!

MENTIRA 3: “CON EL BLANQUEO

Contra lo que muchos creen, la multa del blanqueo se paga en pesos, no en dólares. De modo que si se paga multa de 100.000 dólares, hay que pasar ese monto a pesos. ¿A qué cotización del dólar? ¿La del día de la operación? Pues no: como otro de los tantos regalitos PRO a sus amigos empresarios (y a sí mismos), el valor será el del 22 de julio de este año, es decir, 14,81 pesos. Lo cual significa dos cosas. Primera, que los delincuentes financieros pagarán una multa real del 9%, no del 10%. Y segunda, que justamente esa diferencia de cotización hizo que la mayoría de los ladrones burgueses de guante blanco y guita negra esperaran todo lo posible para entrar al blanqueo, a fin de especular lo más posible con la suba del dólar (y la diferencia a su favor). Claro que a veces la codicia rompe el saco: como casi todos hicieron lo mismo, el dólar paró de subir y se generó un efecto embudo: decía un mesadinerista que “prácticamente todo el movimiento de las cuentas en dólares está relacionado con el blanqueo”. A tal punto que obligó al Banco Central, por primera vez en cinco meses, a intervenir comprando dólares para evitar que el dólar cayera demasiado. Igual el curro ya está hecho.

SE TRANSPARENTAN LAS OPERACIONES FINANCIERAS DE AQUÍ EN ADELANTE”

Como habrán sospechado los lectores, esto es puro verso. Por empezar, el principal incentivo que tienen los delincuentes financieros argentinos (es decir, casi toda la clase empresaria local) no es una súbita vocación por la legalidad, y ni siquiera por ayudar a su gobierno que tanto los ayuda, sino la presión de los bancos internacionales. Si hasta bancos lavadores seriales como la JP Morgan, Credit Suisse y el HSBC están empujando a sus clientes a declarar sus cuentas bajo amenaza de cerrarlas. Es que soplan vientos malos para estos estafadores desde que hasta el propio establishment mundial entendió que es peligroso dejar que ande dando vueltas tanta guita negra. Pero en el caso argentino, vean ustedes, los malos hábitos se niegan a morir. El gobierno anuncia con bombos y platillos que el total del blanqueo (juntando todo y hasta marzo de 2017) llegaría a 60.000 millones de dólares. Pero eso es apenas el 15 o 20% de los activos de los ricachos argentinos fuera del circuito blanco, que se calculan en de 300.000 a 450.000 millones de dólares. En las finanzas internacionales, los paraísos fiscales tradicionales están en problemas, y plazas como Suiza, EEUU o Uruguay están bajo fuerte presión. Pero hay quienes no desesperan y ya piensan en plazas alternativas como Hong Kong, Singapur o Irán (Ámbito Financiero, 1-11-16). Y una práctica corriente es radicar sociedades en paraísos fiscales para que el dueño de la cuenta deje de ser una persona física. En esto también son especialistas los Macri (toda la familia). Más abajo veremos más sobre la “transparencia” PRO. ESTAFA 1: BLANQUEO CHICO PARA ENTRAR AL BLANQUEO GRANDE

Como dijimos, el tramo más jugoso del blanqueo es el que vence el 31 de diciembre, porque involucra cuentas y activos que son en general de mayor volumen que el dinero guardado en efectivo. Pero resulta que para entrar en ese blanqueo hay que pagar un multa del 10%... ¡y estos delincuentes no tienen suficiente plata en blanco para efectuar el pago! ¿Cómo hacen entonces? Pues blanqueo al cuadrado, o blanqueo en cajas chinas: primero blanquean la guita en efectivo que nunca tuvieron declarada (digamos, 3 millones de dólares, por los cuales pagan la multa del 10%). Pues bien, esa operación les deja, en nuestro ejemplo, 2,7 millones ya blanqueados… que se usarán para pagar la multa

ESTAFA 2: VALOR DÓLAR A MEDIDA

ESTAFA 3 ( Y MENTIRA 4): DE LA “TRANSPARENCIA” AL SECRETO DE ESTADO Esto va en las dos categorías, porque el gobierno tiene el descaro de hablar de “transparencia” cuando los nombres de los titulares de las cuentas, de los blanqueadores, de los millonarios que estafan al Estado y al país, van a ser un secreto guardado bajo siete llaves. Ningún periodista podrá publicar la lista (incluso en el articulado de la ley original que mandó el macrismo intentaron tipificar eso como delito). Ningún funcionario tiene autorizado revelar ningún nombre. Ningún banco puede hacer pública la información. A cualquiera que lo intente, el macrismo le dará peor trato que el que le dio EEUU a Edward Snowden por el caso Wikileaks. No es para menos: esta gente se quiere asegurar de que el “buen nombre y honor” de sus contribuyentes de campaña, sus amigos, sus parientes y ellos mismos quede a resguardo de revelaciones indiscretas. Así lo advirtió el propio titular de la AFIP, Alberto Abad. “Sólo el contribuyente y la AFIP. Nadie más. E incluso dentro del organismo, quien revise los datos de cualquier persona que ingresó al blanqueo quedará registrada”. Así como lo leen: Abad intimida a sus propios empleados para evitar cualquier filtración incómoda. Con esa normativa interna (y proceso de encriptación infor-

mático) de la AFIP, si algún dato del blanqueo (titular, monto, detalle de activos, etc.) se llega a hacer público, tanto la AFIP como la Justicia van a perseguir al funcionario o empleado que tuvo acceso a los datos. Terrorismo puro. Hay más: a los propios bancos primero les sugirieron que “no era necesario” que sus clientes que pretendieran sumarse al blanqueo presentaran declaración jurada de bienes e ingresos. Pero después directamente los amenazaron en resolución general de la AFIP: los bancos “deberán abstenerse” de pedir las declaraciones juradas. En una palabra: hasta los propios bancos tienen prohibido hacer preguntas a sus clientes sobre el origen del dinero que blanquean. ¡No sea cosa de que se echen atrás! De más está decir que todo esto es manifiestamente opuesto a las normas sobre blanqueo recomendadas internacionalmente.

LA “ VISIÓN ESTRATÉGICA” DEL LUMPENEMPRESARIADO ARGENTINO

A todo esto, el blanqueo incluso ofrece alternativas para no pagar la multa del 10%. Es el caso de invertir el dinero declarado en Fondos Comunes de Inversión, abiertos o cerrados, que (supuestamente) financiarían proyectos de infraestructura, inmobiliarios, pymes, economías regionales… la lista es tan larga y vaga que da para cualquier cosa, aunque siempre se habla de que esas inversiones estén vinculadas a la “economía real”. La condición molesta es que no se puede retirar el dinero por cinco años. Conociendo a la clase capitalista argentina, nos atrevemos a predecir que esta alternativa, aun con el atractivo de no pagar multa, será minoritaria. Cinco años para el empresariado argentino es casi la eternidad, y en el medio siempre se puede encontrar otro curro, otro funcionario sensible… u otro blanqueo. Debe ser por eso que el llamado “bono mágico”, que permitía blanquear dinero por el triple del valor declarado (otra genialidad del macrismo al servicio de sus amigotes). Es decir, uno invertía 1 millón de dólares en ese bono a 2023 y con eso quedaba autorizado a blanquear 3 millones. Pero como este bono obligaba a tener la guita inmovilizada por siete años, fue un fracaso. La moraleja es simple: para el empresario argentino, entre blanquear el triple de lo invertido y tener la guita quieta, no hay ni que pensarlo.

Sevel-Opalsen-Uruguay en los 90. Ni siquiera de las ya casi 30 firmas offshore que se han encontrado a nombre del clan Macri. Ahora una nueva investigación de la fiscalía de Hamburgo, basada en nuevos datos de los Panama Papers, derivó en más de 20 denuncias penales a instancias de la Procuraduría Antilavado de la Argentina. Se sospecha de Gianfranco y Mariano Macri, hermanos de Mauricio, y las denuncias se giraron directamente a la Procuración General de Gils Carbó, pasando por encima de la Unidad de Información Financiera (UIF), donde, desde que tomaron el mando los muchachos PRO, todas estas causas duermen el sueño de los justos. Las firmas sospechadas de lavado tienen sede en Panamá y Uruguay, siguiendo la pista de fondos depositados en Suiza. También aparecen un contador uruguayo vinculado a otras compañías creadas, según él, por pedido de Franco Macri, y, cómo no, alguien relacionado con la firma IECSA, del primo presidencial Angelo Calcaterra. Es un tal Garrone, beneficiario a su vez de una cuenta de una firma con dirección social en Uruguay y sede en las Islas Vírgenes Británicas. Obsérvese la proliferación de sedes fiscales con impecables antecedentes de transparencia financiera… Visto todo esto, ¿quién puede extrañarse de que Macri haya querido meter de contrabando y por decreto la autorización a parientes directos para que ingresen al blanqueo, pese a que en el Congreso (por una vez) se había logrado frenar al menos ese acto escandaloso de encubrimiento de corrupción? FRASE PROTUDA DE LA SEMANA: dejamos para el final un detalle de color, pero altamente representativo de todo: del gobierno, del blanqueo, de los blanqueadores, de los empresarios y hasta del daño cerebral de los publicistas argentinos. Se trata de un aviso de Ditecar, una agencia importadora de autos de alta gama ( Volvo, Jaguar, Land Rover… todo arriba de los 100.000 y hasta 300.000 dólares). Como una de las opciones del blanqueo es usar la plata para bienes registrables (casas y autos, por ejemplos), esta agencia apeló al auténtico espíritu del sorete argentino delincuente financiero. El texto del aviso dice así (sic, recontra sic, lo juramos): “Aprovechá el sinceramiento y date un lujo. Transformá tu capital en un estilo de vida”

MACRI PADRE, HIJOS Y HERMANOS DAN CÁTEDRA

De todos modos, tantas garantías de secreto como las mencionadas no pueden ser casualidad. Hay interesados directísimos en la discreción de toda esta menesunda. Porque si hay un grupo empresario y familia capitalista que puede dar clases de cómo enriquecerse con, contra y ahora desde el Estado, es el de los Macri. Ya no se trata sólo de la revelación original de los Panama Papers o de los negocios turbios

Y vaya que la convocatoria encontró eco. Fuentes del mercado de autos de lujo reconocen que casi el 30% de las ventas de de “autos premium” del segmento de 50.000 a 300.000 dólares se hicieron con dinero del blanqueo. Evadir, fugar, blanquear y, con el producto de todo eso, “darse lujos”. Todo un estilo de vida de nuestra clase capitalista y su gobierno, claro que sí. MARCELO YUNES


M OVIMIENTO O BRERO

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Socialismo o Barbarie 7

Paro total de 24 horas en FATE SAN FERNANDO

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esde el miércoles 21 de diciembre a las 14 se viene realizando un paro por 24 horas en la fábrica FATE. El detonante de esta medida es el reclamo del premio celular mal pagado (premio a la producción). Este reclamo viene acompañado por la bronca que hay frente a los despidos a cuentagotas que vienen sucediendo todas las semanas, junto a que todavía no hay ni noticias del bono de fin de año a solo dos días de Navidad, sumado a las sanciones injustificadas que aplica la patronal sobre algunos trabajadores. Todo esto mientras se sigue pagando el impuesto al salario. Esto es una verdadera provocación de la empresa que solo se puede responder con una medida de fuerza contundente como es el paro. La patronal de FATE lleva la política de ajuste directo al bolsillo de los trabajadores. Y lo hace en primer lugar con el “premio a la producción”, que hace que la fábrica se convierta literalmente en una

“carnicería”. No quedan líneas ni sectores que no tengan trabajadores “rotos” a causa de los ritmos inalcanzables de producción que impone la empresa. Una verdadera estafa y robo directo del salario. Desde el Nuevo MAS apoyamos y nos solidarizamos con los trabajadores del neumático en su justo reclamo. Por otro lado entendemos que solo con la unidad de todo el gremio se podrán conquistar todas las reivindicaciones. En este sentido, desde estas líneas opinamos que es hora de dar una respuesta de conjunto para pararle la mano a las provocaciones de las patronales del neumático. BASTA DE ROBARLES CON EL PREMIO CELULAR A LOS TRABAJADORES

BONO DE FIN DE AÑO YA BASTA DE DESPIDOS Y PERSECUCIONES ASAMBLEA GENERAL DE FÁBRICA PARA VOTAR UN PLAN DE LUCHA

LUCAS

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ESCRIBE JORGE AYALA DESDE LA PLANTA

n este momento estamos de paro en Fate. Hoy a las 14 horas, con el turno de la tarde, arrancó el paro que durará toda la noche y terminará mañana a las 14 con el turno mañana. En la fábrica no se mueve un alfiler, los trabajadores nos encontramos en nuestros respectivos sectores de descanso. La medida la dispuso la Seccional San Fernando ante la nueva provocación empresaria de pagar mal el “premio” celular. Cabe aclarar que hubo una mesa de diálogo con respecto a este tema, una audiencia en el Ministerio de Trabajo y luego reuniones en ámbito informal. Hasta ahora no dieron ninguna respuesta positiva para los trabajadores; es más, la empresa continúa con sus provocaciones, que se suman a los despidos a cuentagotas que estamos sufriendo, a las sanciones y suspensiones que sufren los compañeros armadores de diagonal por no llegar a la producción, y al no pago del bono de fin de año.

La empresa Fate, hace poco más de un mes, fue premiada por ser la mayor exportadora de cubiertas del país, dato para tener en cuenta a la hora de plantear reclamos económicos: ¡Fate no tiene escasez de dinero! Personalmente estoy de acuerdo con la medida de acción desarrollada, por el reclamo del nefasto “premio castigo” celular, pero no hay que dejar fuera del pliego las otras problemáticas. El ajuste lo realiza el gobierno de Macri afuera de las fábricas, pero dentro de la fábrica el ajuste tiene un nombre bien definido: productividad. La empresa quiere más cubiertas a menor costo, por eso sanciona a los que no llegan a la producción y está despidiendo a los compañeros “rotos”, y encima te paga un premio basura. Es por eso que en Fate estamos de paro contra el atropello de la empresa y su política antiobrera.

Derrotemos el ajuste macrista en Ciencia y Técnica

Rechacemos las paritarias de miseria de Vidal y UPCN Organicemos asambleas unificadas para luchar

CONICET TOMADO

l lunes 5 la gobernadora Vidal cerró la escandalosa paritaria de los y las estatales de la provincia de Buenos Aires. El acuerdo es una verdadera provocación a los trabajadores, una nueva arremetida de esta gobernadora negrera contra los trabajadores del Estado. El acuerdo es un aumento para lo que resta del año que no llega ni al 3% ,dejando el aumento anualizado por debajo del 20%, y un aumento para todo el 2017 del 18% en cuatro cuotas, lo que anualizado apenas llega a ser un aumento real del 12%! Es la traición más grande de los últimos tiempos, UPCN firmó que ¡perdamos más de un 20% de salario comparado con el 40% de inflación esperada para este año! También acordaron un “huesito” de un bono de un 10%, que para colmo no se aplica de manera diferencial según la condición de cada trabajador. La paritaria se anunció al mismo tiempo que el propio gobierno del PRO y la UCR reconocen que se espera una inflación para el año que viene de no menos del 19% (aunque varios analistas hablan que podría llegar al 22%), y se habla de una caída del salario real que ronda el 10% en general, pero que en nuestro caso llega al 20%! La paritaria de Vidal es una trampa para los y las estatales, busca reventar nuestros salarios, y que otro año más queden bien por debajo de la inflación general. Este 18% se reactualizaría en función de la variación del IPC (Índice de Precios al Consumidor), lo que significa una trampa: no queda atado al índice inflacionario que es el que mide realmente el costo de vida de las y los trabajadores.

l lunes 19 por la mañana, el Ministerio de Ciencia y Tecnología (MINCyT) fue ocupado por cientos de investigadores, becarios y estudiantes. La toma en sí misma es un escalón más en un proceso de lucha que lleva ya varias semanas frente a una situación que se ha hecho patente a lo largo de este año: el brutal ajuste que pretende aplicar el gobierno de Mauricio Macri contra la educación, la ciencia y demás áreas estratégicas para el desarrollo del país. En esta ocasión, el recorte que aplica y administra Cambiemos desde el MINCyT –dirigido por el nefasto ministro Lino Barañao, quien se mantuvo en el cargo tras el cambio de gobierno– pasa por encima de los puestos de trabajo de más de 500 investigadores, trabajadores de distintas áreas científicas. Asimismo, se profundizan las condiciones ultraprecarizadas que han sido características en el sector, incluso durante el kirchnerismo. El reclamo por el ingreso de todos los becarios con dictamen favorable se anuda con las reivindicaciones laborales históricas de los investigadores y los propios becarios. El recorte presupuestario forma parte de una política de recorte del gasto público de corte claramente neoliberal, que sólo puede tener como resultado una mayor subordinación del país a los grandes capitales trasnacionales que vienen a explotar mano de obra barata, formada con (escasos) recursos públicos. Así como decenas de miles nos pusimos de pie en la Marcha Nacional Educativa del 12 de mayo, hoy nos volvemos a encontrar

DECLARACIÓN DE LA LISTA GRIS CARLOS FUENTEALBA - ATE

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Con este acuerdo se congela el aumento para todo el año que viene, intentando cerrar toda posibilidad de renegociación y conflicto en un año electoral, decisivo para este gobierno. Pero también busca ser un techo para el resto de los trabajadores de la provincia, docentes y judiciales, quienes no fueron alcanzados en esta etapa. El acuerdo fue firmado por los traidores de UPCN, FEGEPBA, Salud Pública y SOEME, quienes hasta lo anunciaron como un triunfo por poder llegar a fin de año sin incertidumbre: lo único cierto es que el gobierno nos quiere reventar y esta manga de burócratas les dan la mano! Por su lado, tanto ATE como CICOP se negaron a firmar ese acuerdo de miseria, reconociendo que no había nada bueno para los trabajadores, pero sin organizar de verdad la pelea. Recordemos que durante todo el año el “Colo” Isasi se dedicó a hacer alarde de sus gestiones de oficina y de los amparos judiciales como una entrada a la reapertura de las paritarias… que nunca ocurrió! Hizo creer que la forma de enfrentar al gobierno era por los mecanismos administrativos, y que un fallo judicial iba a reemplazar la lucha de los y las trabajadoras en las calles. Las pocas medidas que se hicieron no fueron más que paros aislados, llegando al colmo de dividirnos entre trabajadores de la Provincia, Nacionales y de Ciudad, y con los trabajadores de otros gremios como los Judiciales y de Salud. El gobierno viene anunciando el ataque que prepara para los estatales hace meses: despidos y recorte de salarios. Pero ATE no preparó el terreno

para la lucha, y así nos enfrentamos a esta terrible embestida. Con su plan de “reorganizar la planta estatal” del gobierno “empresario” se preanuncian nuevos despidos. Y aunque la gobernadora Vidal se haya comprometido a pasar a 15 mil trabajadores a la planta permanente, habló de efectivizarlo en el transcurso de los próximos tres años, sin definir fechas concretas ni criterios, lo que significa la continuidad de la inestabilidad laboral. Esto es una traba más a la hora de pelear por salarios cuando sabemos que los despidos están a la orden del día, y los burócratas de los sindicatos, no están a la altura de las circunstancias. Necesitamos construir asambleas de base unificadas con todos y todas las trabajadoras, no importa de qué gremios sean y si están o no afiliados. Al plan de ajuste del macrismo sólo lo vamos a parar si peleamos en unidad en las calles, y para eso tenemos que empezar a organizarnos ya, exigiéndole a ATE, CICOP, AJB y todos los sindicatos, que convoquen a plenarios donde discutir un pliego común de reivindicaciones y un plan serio de lucha para enfrentar a este gobierno! RECHACEMOS EL ACUERDO VIDAL-UPCN! ASAMBLEAS UNIFICADAS PARA LUCHAR! REAPERTURAS DE PARITARIAS YA! SALARIO IGUAL A LA CANASTA FAMILIAR DE $25 MIL! PASE A PLANTA PERMANENTE! NI UN DESPIDO! DECLARACIÓN DE LA LISTA GRIS ATE CARLOS FUENTEALBA

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en la lucha para torcerle el brazo al gobierno ajustador. Asimismo, repudiamos las declaraciones y la actitud del funcionario Alan Temiño, quien se hizo presente en la toma del MINCyT para amedrentar y amenazar con el uso de la fuerza pública a esta justa y valiosa medida adoptada democráticamente. Y exigimos la renuncia del ministro Lino Barañao, correa de transmisión del ajuste macrista, quien sin solución de continuidad pasó de “lavar los platos”, supuestamente para defender a la ciencia del recorte, a ser el principal actor en su aplicación. Con una masividad que no se veía hace tiempo, al cierre de esta edición se refrendó la toma del Ministerio y se convoca a movilizar mañana, 22 de diciembre, a las 10, mientras se estará realizando una reunión entre funcionarios y representantes del activismo. Es necesario ejercer presión con la movilización para arrancarle al gobierno una respuesta a todos los reclamos, y preservar las instancias de organización conquistadas, como las asambleas, verdadero motor de esta lucha. Desde el ¡Ya Basta!, juventud del Nuevo MAS, nos solidarizamos y nos sentimos parte de la toma y de la lucha de los becarios e investigadores. ¡ABAJO EL AJUSTE DE MACRI! ¡PLENOS DERECHOS LABORALES Y CONVENIO COLECTIVO PARA TODOS LOS INVESTIGADORES!

¡NI UN DESPIDO, NI UN INVESTIGADOR AFUERA! ¡QUE SE VAYAN BARAÑAO, CECCATTO Y TODOS LOS AJUSTADORES! ¡YA BASTA! - NUEVO MAS


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BRASIL

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Nuevas acusaciones de corrupción pueden conducir a la caída del gob ANTONIO SOLER, SOCIALISMO O BARBARIE - TENDENCIA DEL PSOL

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principios de la semana pasada, el apartamiento de Renan Calheiros (PMDB-AL) de la presidencia del Senado desencadenó una crisis política e institucional que se resolvió de forma favorable a Calheiros y el gobierno, pero las nuevas denuncias de corrupción que involucran el financiamiento ilegal de la campaña y los favores a empresas contratistas ponen en tela de juicio, una vez más, no sólo el avance de la agenda reaccionaria, sino también la propia sustentación del gobierno de Temer. El lunes 5 de diciembre, Renan Calheiros (PMDB) fue destituido por una medida cautelar del ministro del Supremo Tribunal Federal (STF), Marco Aurélio Mello. Esta medida cautelar tiene su antecedente en la anterior decisión del Tribunal Supremo, que apartó a Eduardo Cunha de la presidencia de la Cámara de Representantes. Por lo tanto, la posición de Mello fue que Calheiros, al igual que Cunha, debe ser destituido porque el 1º de diciembre de este año fue acusado en un caso de malversación de fondos [1]. En medio de la decisión judicial para removerlo, el martes 6 de diciembre Calheiros escapó “como el diablo huye de la cruz” de un oficial de justicia para no ser notificado oficialmente. Además decidió, en colaboración con la Mesa Directiva del Senado, no acatar la orden judicial, argumentando que una decisión unilateral no podía apartar al presidente de otro poder, y esperaría la decisión del pleno de la STF. Para hacer esta historia aún más intrigante, el vicepresidente del Senado, Jorge Viana (PT-AC), y la dirección del PT fueron decisivos en la construcción del acuerdo entre los “tres poderes” para mantener a Calheiros en la presidencia del Senado. Viana llegó a declarar que si se mantenía la decisión de destitución, estaba dispuesto a renunciar a la presidencia del Senado, lo que haría que la presidencia cayera en manos de Romero Juca, uno de los principales organizadores del gobierno de Temer y de las contrarreformas.[2] Luego de un acuerdo que involucra a la presidencia del STF, al gobierno de Temer, al PMDB y al PT, el pleno del Tribunal Supremo, el miércoles 6 de diciembre, votó 6 contra 3 por la caída de la medida cautelar, reponiendo a Calheiros en la presidencia del Senado, pero de forma que esté imposibilitado de asumir la Presidencia de la Nación en caso de vacancia temporal o definitiva de ese cargo, pues su condición de acusado lo impediría. Este episodio pone de manifiesto una vez más que no hay independencia del Poder Judicial en relación al gobierno de Temer y la oligarquía política del Poder Legislativo, como nos quieren hacer creer. Hay innumerables ejemplos de que el

Poder Judicial está al servicio no sólo de la dominación burguesa en “sentido amplio” sino también de sus políticas reaccionarias inmediatas, como la PEC 55. El Tribunal Supremo no quiere abrir la posibilidad de hacer fracasar el voto en la segunda ronda del PEC este año. Para intentar poner fin a esta crisis, restablecer las relaciones armoniosas entre los poderes y devolver el favor al Poder Judicial, el primer gesto de Calheiros al volver al cargo fue retirar de la agenda de votación un proyecto de ley sobre el abuso de autoridad que tenía como meta inmediata contener las investigaciones de la Operación Lava Jato. LAS CONTRADICCIONES SE ACUMULAN Y PUEDEN DAR VUELTA EL JUEGO

Esta crisis político-institucional sirve para hacer una nueva calibración entre los poderes del Estado para que siga funcionando la ofensiva reaccionaria en marcha. Por lo tanto salieron circunstancialmente fortalecidos de la crisis Temer, Calheiros, la oligarquía política y todas las demás fuerzas que hoy son fundamentales para garantizar el voto de la PEC 55, medida táctica fundamental para hacer pasar las contrarreformas que se esperan para el próximo año. Pero esta demostración grotesca de que las principales instituciones del Estado están al servicio de un ataque directo a las condiciones básicas de vida de los trabajadores, profundiza la crisis. La crisis política ya se venia manifestando en la bajísima popularidad del gobierno, el crecimiento de la abstención electoral en los grandes centros urbanos, la crisis de la representación de los partidos tradicionales y la polarización política y social que gana las calles y se manifiesta en la radicalización de los discursos y las acciones. Hay una tendencia a que la votación de la PEC 55 en la segunda ronda en el Senado sea aprobada, ya que la relación de fuerzas todavía está marcada por la unidad burguesa en torno a esta medida, la traición de los aparatos sindicales y políticos, la movilización aún parcial de los trabajadores y la juventud y la fragmentación de la izquierda socialista. Sin embargo, las contradicciones se acumulan y pueden llevar a que este equilibrio de fuerzas se modifique en el próximo periodo. Como elementos contradictorios a la tendencia al avance de la agenda reaccionaria tenemos la profundización de la depresión económica, que posee un nivel de desempleo con potencial político explosivo; la crisis financiera de los Estados, que puede dar lugar a duros enfrentamientos entre los gobiernos y los funcionarios (el caso actual del Estado de Río de Janeiro es un ejemplo), y los destellos en la conciencia de las masas de que las contrarreformas

provocarán retrocesos históricos en sus condiciones de vida empiezan a movilizar a la clase obrera [3]. Más allá del crecimiento gradual de estos elementos de resistencia, estas últimas semanas hubo nuevas denuncias de corrupción que afectan directamente a Temer y todos los aliados. En tan sólo una de más de 70 nuevas denuncias acerca del esquema Odebrecht (empresa constructora más grande del país), Temer aparece directamente pidiendo una contribución financiera ilegal por valor de 10 millones de dólares al propietario de dicho contratista. Este nuevo hecho hace que se abra una nueva coyuntura política, en la que no sólo están en cuestión las contrarreformas, sino también el propio gobierno. En verdad, ya estamos en otra coyuntura política, pues la estrategia de la clase dominante es aprobar en lo inmediato la PEC 55 en el Senado para asegurar el avance de la agenda reaccionaria. Ya se instaló la idea de que Temer perdió totalmente su apoyo político y necesita ser reemplazado. De hecho, comienzan las especulaciones en torno a nombres de confianza de la burguesía que puedan asumir el gobierno a partir del próximo año en una votación indirecta en el Congreso.[4] SE NECESITA UNA POLÍTICA INDEPENDIENTE CONTRA LA CORRUPCIÓN

A pesar de que no sea el tema central de esta nota, es importante dejar constancia de un posicionamiento sobre el tema de la corrupción, ya que se ha convertido en un problema cada vez más importante para la lucha de clases y, en consecuencia, para la política de la izquierda socialista. Desde el comienzo del año pasado, esta cuestión se planteó en las manifestaciones de la derecha por el impeachment a Dilma. La clase dominante ha sabido, a través de los movimientos de la derecha, aprovecharse de la indignación popular contra la corrupción endémica para movilizar a la clase media y sectores del proletariado convencidos de que la solución a sus problemas se reduce a la lucha contra la corrupción. Que la clase dominante haga política para disputar una parte de la clase media y el proletariado no es nada nuevo. Es parte sustancial de la política burguesa transformar sus intereses particulares en intereses universales. La cuestión aquí es cómo la izquierda debe disputar con la derecha este tema, atrayendo a los trabajadores y jóvenes a la luchar contra la agenda reaccionaria que está pasando en el Congreso y por una salida política de los trabajadores a la situación. El debate en la izquierda acerca de cómo disputar con la derecha el tema de la corrupción demuestra que, por su impresionismo y falta de referencia clasista, un sector de la izquierda socialista ha desarrollado una variante oportunista para hacer frente a este problema.

Como la nueva derecha (MBL y Vem Pra Rua) puso como eje la revocación de Calheiros, surgió durante la semana pasada en el interior de la izquierda una discusión sobre la posibilidad de llevar a cabo actividades conjuntas. Esta, por ejemplo, fue la posición de la dirección del PSTU [5], que en una nota lamentó que las direcciones de estos movimientos no aceptaran la propuesta de realizar una movilización conjunta contra la corrupción el 4 de diciembre. Una posición similar tiene el MES [6]. Esta corriente parte de una apreciación correcta de la necesidad de disputar las masas que están en las calles contra la corrupción para fortalecer la lucha contra el gobierno, pero sin dejar claro que esto se hace manteniendo las fronteras políticas y organizativas de la independencia de clase. Así, terminaron orientando a su militancia a ser parte de los actos reaccionarios del 4 de diciembre. Está claro que la operación Lava Jato refleja fisuras entre el Poder Judicial, Legislativo y Ejecutivo, lo que no significa que para mantener la gobernabilidad, la maniobra palaciega reaccionaria y avanzar en la ofensiva contra los trabajadores no actúen de forma coordinada; fue justamente eso lo que ocurrió durante el proceso del impeachment. Por supuesto que esto no impide que se sigan produciendo hechos que exponen el carácter profundamente corrupto del Estado burgués, lo que agrava aún más la crisis política. Esto no quiere decir que no tengamos que mantener la más absoluta independencia política respecto de esa operación de la Justicia Federal. Nuestra agenda en relación con la lucha contra la corrupción tiene que tener un carácter completamente diferente del que presentan los fiscales federales, pues estos presentan, en medio de su paquete de “lucha contra la corrup-

ción”, medidas totalmente reaccionarias, como es el caso de la extinción de hábeas corpus, por ejemplo. No debemos depositar ninguna ilusión en la Justicia Federal; nuestro programa anticorrupción tiene que partir de identificar que la corrupción es inherente al sistema capitalista y debe combatirse con la expropiación de los bienes de los empresarios y políticos burgueses involucrados. Y no detenerse allí, sino responder a la creciente demanda de democracia mediante la exigencia de convocatoria a una Asamblea Constituyente soberana y democrática impuesta por la movilización de los trabajadores y la juventud. A partir de una orientación programática independiente podemos guiar la lucha contra la corrupción, pero de manera independiente en el programa, la organización y la dirección. El acto en contra de la corrupción del 4 de diciembre fue dirigido por la burguesía que apoya la agenda reaccionaria de Temer y defiende medidas antidemocráticas. Por lo que la izquierda necesita construir una agenda de lucha contra la corrupción dentro de su campo para atraer a los trabajadores y parte de la clase media sin mezclarse ni política ni organizativamente con la burguesía. LA NECESIDAD DE UN FRENTE DE IZQUIERDA SOCIALISTA La posición de Viana (PT) y la dirección de ese partido en el episodio de la medida cautelar que apartó a Calheiros de la presidencia del Senado deja claro que tiene un firme compromiso con la gobernabilidad burguesa, incluso si está al servicio de ataques históricos contra la clase obrera, como en el caso de PEC 55, el Bienestar de la contrarreforma, la contrarreforma laboral y otros.


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Ante el asesinato del embajador ruso TURQUÍA

bierno

Renunciar a aprovechar la crisis político-institucional del comienzo de la semana pasada para poner en cuestión la agenda reaccionaria que se está procesando en el Senado se transforma en un crimen político, una traición abierta a los sectores de la clase trabajadora y sectores de izquierda que todavía depositan expectativas en el PT. Los sectores que creían que después del impeachment ese partido podría cumplir algún papel progresivo en la lucha de clases, tienen en la posición de Viana y la dirección del PT un balde de agua fría y ningún motivo para permanecer en sus filas. Así que estamos frente a una situación que combina enormes desafíos y oportunidades para la izquierda socialista. El desafío se refiere a la necesidad imperiosa de crear un Frente de Izquierda Socialista independiente que pueda dar un combate contra la burocracia del PT y organizar la resistencia contra los ajustes reaccionarios de Temer [7]. Desafío que plantea la posibilidad de que ese frente dispute franjas masivas de los trabajadores y la juventud, posibilitando que la izquierda socialista se construya como un factor político concreto en la lucha de clases en los próximos años. CONTRA LA PEC 55, POR “FORA TEMER” Y POR ELECCIONES GENERALES YA

Los desafíos del próximo periodo son enormes, comenzando por la resistencia contra la votación en la segunda ronda del PEC 55. En este sentido, es criminal que ninguna de las principales centrales, empezando por la CUT, esté llamando a actos centralizados contra esta votación. También es escandaloso que el CSPConlutas, dirigido por el PSTU y otros sectores de la izquierda, no haya hecho o lla-

mado a un acto unificado con el Frente Povo Sem Miedo (FPSM) contra el PEC 55 para el día de su votación en la segunda ronda en el Senado. Esto en un nueva coyuntura política en la que el gobierno de Temer pende de un hilo y que los jóvenes y los trabajadores han dado ejemplos en todo el país de lo que es posible y quieren resistir. [8] Teniendo en cuenta esta disposición a luchar y las nuevas acusaciones de corrupción que ponen en cuestión directamente al gobierno, es posible pelear contra la votación de la PEC 55 y reavivar la movilización por “Fora Temer”. Movilización que no puede restringirse a una salida por la negativa, pues la burguesía tratará de resolverla a través de la elección indirecta en el Congreso de una figura bonapartista para seguir imponiendo las contrarreformas. Es necesario que, además de presentar la propuesta de “elecciones generales ya”, el conjunto de la izquierda pase a defender una política de los trabajadores para una crisis estructural que se profundiza cada vez más. En este sentido, no podemos restringirnos a una salida puntual, necesitamos una solución política más integral. Por eso defendemos la construcción de la movilización desde abajo por una Asamblea Constituyente democrática y soberana para resolver todos los problemas democráticos pendientes y refundar el país a partir de los intereses de los trabajadores, los jóvenes, las mujeres, los negros y todos los oprimidos. ¡FUERA TEMER! ¡NO A LA PEC 55! ¡NO A LA ¡PRISIÓN Y EXPROPIACIÓN DE TODOS LOS CORRUPTOS! ¡ELECCIONES GENERALES YA Y ASAMBLEA CONSTITUYENTE DEMOCRÁTICA IMPUESTA CON LA LUCHA!

CONTRARREFORMA PREVISIONAL!

[1] Calheiros fue acusado por la STF de peculado (los gastos de un hijo extramatrimonial fueron pagados por las contratistas). Vale la pena decir que ese es apenas uno de los siete procesos en los que está siendo investigado por la Policía Federal. [2] Esta traición abierta a la lucha contra el PEC 55 de un partido que dice ser la oposición, sólo puede entenderse dentro de un acuerdo más general de preservación de la gobernabilidad entre el PT y los demás partidos burgueses durante el proceso de impeachment a Dilma. Entre Calheiros, la dirección del PT y el Tribunal Supremo de juicio político, acordaron que la pérdida del mandato de Dilma no significase la pérdida de los derechos políticos, por ejemplo. De esta forma, renunciando a la presidencia del Senado, el PT, a expensas de los intereses de los trabajadores, mantuvo un acuerdo de gobernabilidad y le devolvió a Calheiros el favor concedido en ocasión del impeachment. [3] Miles de metalúrgicos de São Bernardo do Campo fueron a las calles el viernes 9 de diciembre contra la reforma previsional. [4] Esto es así porque para que se llame a una nueva elección presidencial, Temer tendría que renunciar antes del 31 de diciembre. [5] http://www.pstu.org.br/ [6] http://esquerdasocialista.com.br/ [7] Por supuesto, esto se hace exigiendo a la burocracia que organice la lucha y denunciando cuando no lo hace o cuando traiciona a los trabajadores y la juventud. [8] En Brasilia, el 29 de noviembre, más de 20.000 estudiantes y trabajadores hicieron un

acto radicalizado contra la PEC 55.

LUIS BERMÚDEZ

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l lunes 19 fue asesinado a los tiros en Turquía el embajador ruso en dicho país (Andrei Karlov), durante una muestra artística. El hecho tuvo un gran impacto internacional al realizarse la acción en medio de una actividad pública y con muchos periodistas. El ejecutor del asesinato fue un policía de las fuerzas especiales turcas, que era uno de los custodios asignados para el embajador. Su nombre era Mevlut Mert Altintas (de 22 años), y fue rápidamente abatido por las fuerzas de seguridad. Luego del atentado, el custodio pronunció un discurso frente a las cámaras explicando sus motivos. Señaló que se trataba de una venganza por el rol criminal jugado por Rusia en los bombardeos a Alepo, en Siria. Mencionó también la Jihad y su lealtad a Mahoma, el profeta del Islam. Se trata entonces de una acción terrorista clásica, del tipo de las que eran comunes durante parte del siglo XX (especialmente a principios de siglo). Aquí los objetivos eran figuras políticas altamente simbólicas, a diferencia del “terrorismo del siglo XXI” estilo ISIS y Al Qaeda, donde las víctimas son trabajadores y gente común y corriente. La tradición marxista rechaza el terrorismo individual sea cual sea su forma, ya que sustituye el accionar político de las masas por acciones de aparato y genera mejores condiciones para la represión y el aislamiento político. Aun así, existe una diferencia cualitativa entre el terrorismo “político” (especialmente cuando se realiza en nombre de causas populares progresivas y apunta a figuras detestadas por las masas) y el terrorismo indiscriminado contra población civil inocente, de contenido netamente reaccionario. En este sentido, cabe señalar que Rusia tiene una inmensa responsabilidad en la bárbara masacre de Alepo, donde una de las fuerzas aéreas más poderosas del mundo utilizó su enorme potencial destructivo contra la población civil, matando a miles de personas (incluidos niños) y dejando sin hogar y sin medios de vida a muchísimas más. En la declaración de la Corriente Internacional Socialismo o Barbarie publicada la semana pasada hemos caracterizado a Alepo como “la Guernica del siglo XXI”. Más allá del carácter reaccionario de los “rebeldes” que se encontraban ocupando Alepo del Este, de ningún modo pueden justificarse las masacres llevadas a cabo por Rusia y el régimen de Al Assad; en el medio estaban cientos de miles de habitantes.

Por otro lado, la reocupación de Alepo oriental por parte de las tropas de la dictadura no “liberó” la ciudad; cambió en todo caso el color de la bota opresora, restaurando las condiciones contra las cuales las masas se rebelaron en 2011-2012. Sólo una retirada completa de todas las facciones armadas reaccionarias puede conseguir la libertad de Alepo, sobre la base de la autodeterminación de sus trabajadores y sectores populares. Por eso no “lloramos” al reaccionario embajador ruso (cómplice de la masacre), aunque tampoco apoyamos el atentado. No solo por tratarse de una acción individual separada del movimiento de masas, sino porque su ejecutor no representaba una salida progresiva a la catástrofe de Siria. No está clara exactamente la pertenencia política del autor del atentado: el régimen de Erdogan acusa a la red del clérigo Gulen, pero sus acusaciones nunca son demasiado creíbles considerando la enorme cantidad de mentiras que fabrica contra todos sus opositores. La red de Gulen se convirtió en un chivo expiatorio para todo lo que Erdogan no puede resolver. En cuanto al sentido “práctico” del atentado, muy probablemente se trate de una acción destinada a enturbiar las relaciones entre Turquía y Rusia. Ambos vienen de enfrentarse durante años en la arena de la guerra civil siria. Sin embargo, cuando quedó claro que era imposible derrotar militarmente al régimen de Al Assad, Erdogan cambió su orientación política: se acercó entonces a una “salida pactada” con el régimen sirio. La “evacuación” de Alepo fue parte de estos acuerdos, y pavimentó el camino para una salida más general al conflicto. Pero especialmente, el primer gran acuerdo de colaboración que pudieron alcanzar es el del norte de Siria: allí Al Assad permitió el ingreso de las tropas turcas para ayudar a las brigadas islamistas locales a desalojar al Estado Islámico.

El verdadero objetivo de Turquía era cubrir la retirada del ISIS para que estos territorios no fueran ocupados por las milicias kurdas de las YPG-YPJ y sus aliados. Al régimen sirio le resultó conveniente “intercambiar” la franja norte de Siria por Alepo, mucho más importante estratégicamente como centro económico y demográfico. Por lo tanto, ambos, Erdogan y Assad, salieron ganando con su pacto, que podría ser la base para un acuerdo más general de salida al conflicto. Para ello ya comenzaron a reunirse los representantes de Rusia, Turquía e Irán, dando los primeros pasos en ese camino. Sin embargo, este acercamiento no resulta igualmente conveniente para todos los actores del conflicto sirio. Dentro del bando “rebelde”, una salida pactada perjudicaría especialmente a las tendencias más extremistas como Al Nusra (ahora renombrada “Jabat Fatah Al Sham”), que se nutre de un guerrerismo permanente y no tendría lugar en una estabilización política. En el plano internacional, no está claro qué es lo que podrían ganar con un acuerdo los países que hasta ahora eran aliados de Turquía, como Qatar y Arabia Saudita. Es muy posible que por lo menos uno de ambos salga perjudicado con los acuerdos, por lo cual pueden estar intentando generar provocaciones que los descarrilen. Esta es una de las hipótesis que podrían explicar el atentado contra el embajador ruso, aunque todavía no existen evidencias en ese sentido. En cualquier caso, una salida progresiva para los conflictos de Siria, Turquía y todo Medio Oriente exige el desarrollo de un movimiento obrero y popular independiente de todos los grandes aparatos burgueses y reaccionarios, sean islamistas (como Erdogan y los “rebeldes” sirios) o “laicos” como Al Assad. Solo derrotando a las dictaduras y a las tiranías, sean militares o religiosas, se puede cerrar paso a la barbarie en la que está sumida la región.


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Cómo pegarse un tiro en el pie

VENEZUELA: EL DISPARATADO INCIDENTE DE LOS BILLETES DE 100 BOLÍVARES EN MEDIO DE LA MÁS GRAVE CRISIS ECONÓMICA Y SOCIAL

RAFAEL SALINAS

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l presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, acaba de dar una lección al mundo de cómo pegarse un tiro en el pie, al cargar lo que había anunciado como un arma mortal contra la hiperinflación y la crisis económica que arrasa su país. De un día para el otro, sin dar un tiempo razonable para hacer un trueque, anunció sorpresivamente la desmonetización de los billetes de 100 bolívares, que eran los más usados. Éstos deberían cambiarse casi de inmediato –¡¡en 72 horas!!– por nuevos billetes de 500 o más bolívares, a tono con el nivel alcanzado por la hiperinflación. Sin embargo, había un pequeño problema. Buena parte de los nuevos billetes –impresos en Europa– no habían llegado a Venezuela, ni menos aún se había dado un tiempo razonable para cambiarlos por los viejos. Y los comercios, lógicamente, no aceptaban billetes de 100 bolívares ya declarados sin valor por el gobierno. Ante este “inconveniente”, el genial presidente Maduro halló la solución: que, por el momento, la gente pagara con sus tarjetas. Pero en Venezuela no mucho más del 50% tiene tarjetas bancarias. Y, como en todo el mundo, son los más pobres quienes no las poseen. La situación, desde hace tiempo, es de crisis, inflación y desabastecimiento brutal. Para los trabajadores y los más pobres, conseguir comida y otros productos de primera necesidad –por fuera del mercado negro– es una lucha de horas y horas de colas… Un martirio que además no garantiza que se pueda conseguir lo necesario. Y, en esa situación, se enteran de que no podían comprar nada aunque tuviesen el dinero en sus bolsillos… porque ese dinero

eran los viejos billetes de 100 Bs. que ya no tenían valor. Tampoco podían cambiarlos porque no había billetes nuevos disponibles. Y, además, el plazo para hacerlo se agotaba. ESTALLIDOS, SAQUEOS Y REPRESIÓN BRUTAL

Esto desató un verdadero estallido social en algunas de las ciudades y Estados más afectados, principalmente los alejados de la capital, como Ciudad Bolívar (en el Estado del mismo nombre) o Guasdalito, importante centro petrolero del Estado de Apure. La desesperación mezclada con la indignación desbordó finalmente el vaso. Miles de pobladores salieron a saquear e incendiar los negocios. Sólo en Ciudad Bolívar hubo más de 300 que fueron arrasados. En Guasdalito, el pueblo incendió las sucursales del Banco Bicentenario y el Banco de Venezuela que no sólo no les cambiaban los viejos billetes, sino que además se negaban a aceptarlos en depósito. Allí contestaban a la gente desesperada que venía a cambiar billetes, diciendo: “vayan a Caracas a que se los cambien”. La represión fue brutal, y con dos muertos y 250 detenidos. La represión se ha dirigido también específicamente contra militantes de izquierda, incluyendo algunos que estuvieron en las filas del chavismo largo tiempo. Tal es el caso del sociólogo Freiman Páez, hoy preso por denunciar desde una radio de Guasdalito el disparate del gobierno, y exigir que se extendiesen los plazos. Finalmente, cuando la tormenta iba haciéndose más y más grave, Maduro se vio obligado a dar marcha atrás. Dejó de lado el disparatado plazo de 72 horas para cambiar los billetes y lo extendió hasta fin de año. Esto calmó algo las aguas, aunque sigue siendo todavía un plazo

excesivamente corto para lo que se acostumbra en los cambios de papel moneda. Después de pegarse este tiro en el pie, Maduró dio explicaciones que lo retratan por completo. Atribuyó a operaciones del imperialismo tanto las demoras en el arribo de los nuevos billetes como la fuga al exterior de los viejos. ¿Pero si existió esa demora, por qué ordenó cambiar en 72 hs. la masa monetaria, cuando ni siquiera los bancos tenían los nuevos billetes? En verdad, con semejante conducción, Washington no necesita molestarse demasiado en hacer conspiraciones. Maduro y su equipo bastan y sobran para hundir a Venezuela. UNA CRISIS VERTIGINOSA Esta anécdota protagonizada por el gobierno de Maduro sería para reírse, si la situación desesperante de los trabajadores y los sectores populares venezolanos no fuese para llorar. No es un secreto para nadie que Venezuela atraviesa la crisis económica más grave de su historia. Y la responsabilidad cae sobre el chavismo. Detrás de los discursos sobre el “socialismo del siglo XXI”, ni Chávez ni menos aún sus sucesores cambiaron en lo más mínimo la peligrosa vulnerabilidad estructural de Venezuela como monoproductor de hidrocarburos. Bastó que sus precios se derrumbaran, para que el castillo de naipes se viniese abajo. Esto no es nuevo en la historia de Venezuela. Esos ciclos de bonanzas fenomenales… seguidos de descensos a los infiernos se han repetido varias veces. ¡Pero el chavismo (incluyendo, por supuesto a Maduro) fue absolutamente incapaz de aprender esas experiencias, que

el pueblo venezolano tuvo que pagar a precios terribles! Esto es tanto más asombroso, porque el chavismo le debe su existencia (e incluso su llegada al poder) a la anterior crisis. La bonanza petrolera de los años 70 acabó en un derrumbe que provocó un estallido social (el “Caracazo” de 1989), acabó con el régimen de la IV República y, finalmente, en 1999 abrió las puertas a Chávez y su V República. El chavismo no aprendió nada de esa (repetida) historia venezolana. También hizo oídos sordos a los alertas que venían desde el marxismo. Pero no se trató de una cuestión de “incomprensión” intelectual. La continuidad (ahora pintada de “rojo”) de ese papel en el marco del capitalismo mundial preparó la actual catástrofe… pero simultáneamente llenó los bolsillos de una nueva burguesía… y también de la antigua, antichavista. ¡Esos intereses se impusieron, porque el “socialismo del siglo XXI” no implicó ningún cambio en la clase dominante, sino de los sectores de ella que administraban el Estado! Para hacer frente preventivamente a ese peligro, era imprescindible una transformación realmente revolucionaria, realmente socialista: que el poder pasara a manos de la clase obrera y trabajadora. ¡Sólo ella podía tener interés en dejar de ser la “Venezuela saudita”! Sin embargo, aunque repetida en la historia de Venezuela, la presente crisis es la más grave que jamás haya sufrido. La crisis anterior, la del Caracazo, es casi una broma comparada con el drama social que se está viviendo. La inflación de este año –según el economista Manuel 1 Sutherland[ ]– oscilaría entre 800% y el 1.000%, la caída del PBI superaría el 15%.¡Todas estimaciones, porque el gobierno de Maduro ya no presenta datos creíbles. El año próximo se prevé aún peor. Mientras tanto, cifras oficiales estiman en 500 mil millones de dólares los depósitos de los burgueses venezolanos en el exterior… y en ese saqueo no hay ninguna pelea entre “escuálidos” o chavistas. ¡Todos ponen manos a la obra! ACUERDO DEL GOBIERNO CON LA OPOSICIÓN DE LA

MUD

Finalmente, dentro de este panorama económico-social catastrófico, hay que subrayar un hecho no muy comentado fuera de Venezuela. Es el pacto firmado el mes pasado entre el gobierno y el grueso de la oposición de derecha, a instancias del Vaticano.

Es la “Declaración conjunta Convivir en Paz”. La MUD (Mesa de la Unidad Democrática) –el frente opositor patronal encabezado por Henrique Capriles– viene de serios encontronazos con el gobierno… pero al final, las cosas no van muy lejos. El roce más serio con la MUD ha sido la maniobra fraudulenta con que el Consejo Nacional Electoral (CNE) anuló el pedido de millones de firmas exigiendo un referéndum sobre la continuidad de Maduro en la presidencia. Este es un derecho consagrado en la Constitución. Pero ahora la MUD sale firmando “Convivir en Paz” con Maduro… y, por supuesto, ambos reciben la bendición del papa Francisco… Aquí, se cruzan varios cables. La MUD espera que sea Maduro quien haga el “trabajo sucio” de hundir a los trabajadores y al pueblo en la miseria, para pagar las fenomenales deudas al capital financiero internacional. La permanencia de Maduro (y sus desastres a repetición) le podría garantizar, además, triunfos arrasadores en las elecciones próximas de gobernadores y parlamentarios de los Estados. Éstas se harían en el primer semestre del año. Por eso, a lo largo de la catástrofe social de este año, que culminó con la corrida de los billetes de 100 Bs., la MUD miró para otro lado. A su vez, a Maduro le conviene una “oposición” que no le ponga palos en la rueda, y se limite a hacer, de tanto en tanto, algún desfile preelectoral. NECESIDAD DE UNA ALTERNATIVA INDEPENDIENTE OBRERA Y POPULAR

Otra vez, según muchas encuestas, hay sectores crecientes, la mayoría provenientes del chavismo, que ya no quieren saber nada ni con el gobierno ni con sus actuales “convivientes”, los “opositores” de la MUD. Y tienen razón, porque evidentemente es imposible esperar algo positivo de ellos. Este fenómeno ya se ha bosquejado varias veces… pero luego se diluye políticamente ante la polarización (cada vez más vacía de contenido) entre el gobierno post-chavista y los opositores de la MUD. El gran desafío de los activistas obreros y juveniles, y la militancia de izquierda es levantar frente a ellos un polo que los enfrente por igual, y que atraiga a los sectores en ruptura. Notas: 1.- Manuel Sutherland, “Se derrochó la renta petrolera”, entrevista, La Razón, 19/12/2016.


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François Fillon: el Thatcher francés FRANCIA

ALE VINET SOB FRANCIA LAS PRIMARIAS DE « LOS REPUBLICANOS » YA ELIGIERON CANDIDATO PRESIDENCIAL

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l pasado 27 de noviembre, las primarias abiertas de la formación de derecha “Los Republicanos” consagraron como ganador a François Fillon, ex Primer Ministro de Nicolás Sarkozy, contra Alain Juppé, ex Primer Ministro de Chirac en los años 90. La primera vuelta, el 20 de noviembre, había marcado el ascenso fulgurante de François Fillon, que hasta algunas semanas antes aparecía como incapaz de competir contra Juppé y Sarkozy, y la eliminación de este último, obligándolo a retirarse (por el momento) de su carrera política. La primaria de “Los Republicanos” tiene una importancia central por dos aspectos. Primero, como termómetro del estado de ánimo de un sector importante de la sociedad francesa: la misma vio acudir a las urnas a más de 4 millones de electores, muy por encima de la primaria del Partido Socialista en 2011. Segundo, porque todos los sondeos indican que es el candidato de LR el que va a resultar victorioso en la próxima contienda presidencial, lo cual explica en gran parte el entusiasmo que la primaria suscitó en la población: en la misma parecía elegirse, casi de manera segura, el próximo presidente del país. Veamos entonces algunos elementos centrales de la primaria: las explicaciones y el significado de la victoria de Fillon, los rasgos principales de su programa, y las tareas que la victoria de Fillon plantea para los trabajadores y la izquierda. “DERECHA DURA” VS “DERECHA BLANDA”

El duelo Fillon-Juppé expresaba dos proyectos de la derecha con diferencias estratégicas importantes. Sin duda, ambos candidatos defendían una cura de austeridad importante (reducción del número de trabajadores estatales, aumento de la jornada laboral, reducción de los presupuestos del estado). Sin embargo, diferían en cuanto a la profundidad y el ritmo de esta sangría. Además, algunas divergencias estratégicas y sobre algunos puntos nodales de la situación actual los oponían. Alain Juppé construyó su imagen como aquella del candidato “apacible”. En efecto, se trata de un heredero político de Jacques Chirac (el diario conservador Le Figaro considera que la derrota de Juppé marca “el fin del chiraquismo”), una vertiente de la derecha tradicional más

proclive al dialogo social. Luego de Mayo del 68, sectores de la derecha decidieron hacer la apuesta de una política menos dura, que tomara más en cuenta la capacidad de resistencia de los trabajadores y el pueblo francés, en vez de intentar llevar adelante una política de tierra arrasada. El mismo Juppé vivió en carne propia las dificultades de avanzar sobre conquistas históricas de los trabajadores: fue su intento de reformar el régimen de jubilaciones del sector público el que desencadenó la gran huelga de 1995, que paralizó el país durante tres semanas y obligó al gobierno a retroceder. Por su parte, Fillon apareció como uno de los candidatos más duros de la primaria. Frente a la propuesta de Juppé de suprimir 200.000 puestos de trabajadores del estado, Fillon proponía suprimir 500.000. Frente a la idea de Juppé de permitir a las “negociaciones por empresa” decidir la duración de la semana laboral, con el límite de 39 horas, Fillon llevaba ese límite a 48 horas. Pero más allá de la diferencia de “graduación”, hay una diferencia más profunda: si Juppé era el candidato “apacible”, Fillon se presenta como el candidato que pretende “realizar una operación de corazón abierto sin anestesia”: no esconde su admiración por Thatcher, que pasó a la historia como aquella que descargó una ofensiva brutal sobre los trabajadores ingleses abriendo el largo ciclo de reacción neoliberal que caracterizó los años 80 y 90. LA BASE DE APOYO DE AMBOS CANDIDATOS

Esta divergencia se expresó también en el marco de alianzas que cada uno de los dos candidatos se proponía tejer, y de los apoyos que los mismos recibieron. De parte de Alain Juppé, su estrategia consistía en acercarse hacia el centro del arco político: su perspectiva era la de aliarse con los partidos centristas, y presentaba también un discurso más “suave” en torno a la cuestión de la “identidad”, con un discurso de “respeto de la diversidad”. Fillon, por su parte, representaba el ala más dura de la derecha, que coquetea con el Front National y defiende una posición más reaccionaria alrededor de la “identidad francesa”, de “asimilación” de los inmigrantes, de reconstrucción de la “historia nacional” en clave colonialista e imperialista. Una de las bases de apoyo centrales de François Fillon durante la campaña de las primarias fue el movimiento “Sens Commun” (Sentido Común), emanación política de los organizadores de las manifestaciones contra el matrimonio homosexual aprobado por el gobierno del PS en

2013. Fillon representa así a los sectores más conservadores, católicos (realizó puntajes fenomenales entre los católicos practicantes), con la promesa de impedir nuevos avances en este terreno e incluso de infligir retrocesos. En ese sentido, aunque no prevea la anulación de la ley de matrimonio homosexual (ya que “sería difícil ‘descasar’ a gente que ya está casada”), pretende impedir la adopción plena de hijos por parte de las parejas homosexuales, impedirles el acceso a la Procreación Medicamente Asistida, entre otros temas. A su vez, Fillon se apoyó sobre el desprestigio creciente de Nicolás Sarkozy. Logró presentarse como un candidato serio de la derecha dura, que no estaba manchado por todos los escándalos judiciales y de corrupción que vienen empañando la carrera política de Sarkozy desde que dejó la presidencia en 2012. Fillon no sólo logró aprovechar el desprestigio de Sarkozy (“Quién se imaginaría al General De Gaulle siendo juzgado?” declaró durante la primaria), sino que el propio Sarkozy declaró su apoyo inmediatamente a François Fillon luego de ser eliminado en la primera ronda de las primarias. UNA VUELTA DE TUERCA MÁS EN LA COYUNTURA REACCIONARIA

La victoria de François Fillon expresa que el electorado de derecha se ha inclinado finalmente por la alternativa más a la derecha, mas ultraliberal, mas ultraconservadora, mas “sanguinaria” contra los derechos de los trabajadores posibles. Se trata del “Thatcher francés”, que pretende infligir una derrota histórica a los trabajadores, atacando conquistas que datan de la salida de la segunda guerra mundial, como la Seguridad Social, además de lanzar una ofensiva reaccionaria contra las mujeres, las minorías sexuales, los inmigrantes; en fin, todo aquel que no sea un francés, blanco, de clase media, católico, heterosexual. La burguesía francesa se prepara para ir a la guerra y ya está constitu-

yendo su Estado Mayor: una serie de consejeros de Fillon sacados de las entrañas mismas del gran capital, encargados de poner en marcha esta carnicería contra los derechos sociales. A la guerra interior, entonces, contra los trabajadores y los sectores populares. Pero también a la guerra exterior: Fillon reivindica una visión profundamente imperialista de la política exterior francesa, y defiende la idea de un acercamiento con Rusia e incluso el apoyo al criminal de guerra Bashar Al-Assad (con la excusa de “combatir al Estado Islámico”) que en estos instantes está masacrando centenas de civiles para retomar el control de Alepo. En el marco del refuerzo de la derecha a nivel mundial, con la victoria de Trump en los Estados Unidos, Rajoy en España, Macri en Argentina, la burguesía francesa se juega a lanzar una ofensiva en toda la línea contra los trabajadores franceses, que vienen de sufrir una derrota de la movilización contra la reforma laboral antiobrera impulsada por el PS. El mismo Partido Socialista que, aún en crisis y descomposición profunda, parece aprovechar sus últimos meses de gobierno para seguir desplegándole una alfombra roja a la derecha: viene de aprobar la prolongación del “Estado de Emergencia” hasta julio de 2017, transformando ese supuesto “estado de emergencia” en el régimen político-represivo normal de la democracia burguesa francesa. PREPARAR LA RESISTENCIA SOCIAL Y POLÍTICA

Pero como los jóvenes que tomaron las calles en Estados Unidos (y en Paris!) para protestar contra la elección del reaccionario Trump, como los miles que gritaron “Fuera Temer!” en Brasil, en Francia también podemos preparar desde ahora la resistencia a la nueva ofensiva que prepara la burguesía. Nada nos condena a aceptar pasivamente el futuro de explotación y de opresión que nos depara este sistema: los meses de movilización contra la reforma laboral expre-

san la combatividad y la capacidad de organización de una nueva generación militante que no se va a dejar pisotear sin luchar y que sin dudas volverá a las calles ante los nuevos zarpazos de Fillon. En el plano político, ante la debilidad de la extrema izquierda, esta indignación se traduce ya sea en el voto por el Front National que propone falsas soluciones y que intenta dividir a los trabajadores con su discurso racista e islamófobo; ya sea en el voto a un Melenchón que se sueña como un “hombre providencial” que salvaría al pueblo francés y que tiñe cada vez más su discurso de un chauvinismo reaccionario; ya sea en una abstención que engendra la ilusión de que se podría combatir al podrido régimen de la democracia burguesa haciendo de cuenta que no existe, aunque millones de trabajadores y de jóvenes vayan de hecho a acudir a las urnas en 2017. Un elemento clave de la situación actual es, entonces, lograr desarrollar un canal de expresión de la bronca obrera y popular que sea verdaderamente anticapitalista y revolucionario. Una campaña del NPA claramente de ruptura con el sistema actual, con una delimitación estratégica (y no sólo coyuntural o parcial) con los reformistas, que reivindique el derecho de los trabajadores a hacer escuchar su voz en el terreno electoral defendiendo una política revolucionaria, anticapitalista y socialista, podría contribuir significativamente a orientar la crisis de legitimidad que atraviesa a los partidos tradicionales hacia una alternativa independiente. Es el sentido de la candidatura de nuestro compañero Philippe Poutou a las elecciones presidenciales de 2017, que se propone darle expresión a todos aquellos que tomaron las calles en 2016 contra la reforma laboral del PS, a todos aquellos que combatirán los nuevos ataques del gobierno que vendrá, a todos aquellos que quieren luchar por una sociedad sin explotación ni opresión.


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A pesar de la derrota, jornada histórica del movimiento estudiantil cordobés UNIVERSIDAD DE CÓRDOBA: SE APROBÓ LA CONTRARREFORMA DE JURI

Q

ueremos comenzar este balance señalando que la enorme jornada de lucha estudiantil del 15 de diciembre, lamentablemente saldada con derrota, coincidió con el sexto aniversario de la movilización reprimida junto a la aprobación de la Ley Educativa Provincial 8113, privatista y clerical, de Schiaretti, terminando así el Estudiantazo del 2010. La jornada de lucha de ayer fue la culminación de un proceso gestado durante varios meses, cuyos puntos más altos fueron ella misma y la toma del Pabellón Argentina en noviembre. BREVE CRONOLOGÍA DE UNA LUCHA DE ALCANCES NACIONALES

Se puede remontar el origen de esta pelea a la asunción del rector morado-radical-macrista Hugo Juri al frente de la UNC este año. Desde ese preciso momento comenzó a gestarse la aplicación de reformas que son la versión universitaria de la política macrista. Los cambios constaban de dos ejes: una contrarreforma política y una académica. El aspecto político: la implementación de un nuevo método para elegir rector y decanos, la “elección directa” ponderada por claustros con un 50% para el claustro docente (hoy se elige de forma indirecta, a través de los consejos Superior y Directivo respectivamente, con prácticamente la misma ponderación) y de la integración del “Consejo Social Consultivo” al Consejo Superior con voz y voto. Esto implicaba integrar de forma directa y sin disimulo a empresarios, burócratas sindicales y personajes de la misma laya a las decisiones más importantes de la UNC. Señalemos que las “ponderaciones” han estado al servicio de perpetuar en el poder a una pequeña camarilla que ha sido la garante de la aplicación de las políticas privatistas y mercantilizadoras en las universidades del país. La reforma académica consta de la aplicación de diversas medidas pro empresariales: la del “compromiso social estudiantil” (propuesta por los mercenarios de la Franja Morada), que obliga a los estudiantes a trabajar gratuitamente para empresarios para poder recibirse, y la del “sistema de créditos”, que les pone un puntaje a todas las materias y según dicho puntaje puede recibirse cada estudiante. Pasando los meses, a pesar de que se anunciaba el avance de las contrarreformas, parecía no volar ni una mosca. La Bisagra (agrupación K, conducción de 7 centros de estudiantes) y La Mella no decían ni una palabra al respecto. Es su entera responsabilidad, siendo ellos las principales conducciones estudiantiles, que esta lucha

se haya desarrollado recién en las últimas semanas de clases. Sobre todo La Bisagra apostó hasta el final a poder negociar en la propia Asamblea Universitaria con Juri una salida a la “reforma política” en la que ellos pudieran volver a aspirar al rectorado. Buscaban incluir una ponderación por facultades (“doble ponderación” actualmente vigente en el Superior y en la Asamblea Universitaria) en la que las facultades donde ellos son mayoría (Filo, Artes, FAMAF, Psicología, etc.) no quedaran desdibujadas frente a las más grandes, históricamente gestionadas por radicales (Médicas, Derecho, Económicas). Bajo ningún punto de vista se les ocurrió cuestionar el régimen de camarillas como tal (tampoco a la “izquierda popular” de La Mella). Paradójicamente, el mismo año en que pierden el Rectorado triunfa en la Federación Universitaria de Córdoba un frente entre La Bisagra, La Mella y Sur. Este hecho casi coincide con el giro político de las dos primeras. En octubre fueron las primeras movilizaciones unificadas entre ellos y la izquierda. Las negociaciones habían fracasado. Juri estaba dispuesto a avanzar sin ningún tipo de discusión con ellos para garantizarse el rectorado. La Asamblea Universitaria que aplicaría las reformas ya tenía fecha para el 19 de noviembre en el Pabellón Argentina: el Pabellón fue tomado y la Asamblea de la gestión quedó trunca. Ese día se cometió un grave error. Se había logrado imponerle a Juri una “mesa de diálogo” además de la suspensión de la Asamblea. Apostando nuevamente a la negociación por arriba, La Mella y La Bisagra lograron hacer votar en una importante Asamblea interclaustros el levantamiento de la toma y una “mesa de diálogo” compuesta sólo por ellos, con 500 votos contra 300 de toda la izquierda (menos el FIT) y decenas de independientes. Finalmente, la política del “diálogo” sin medida de fuerza fue un fracaso. Juri no cedió nada y convocó a una nueva sesión de la Asamblea Universitaria para el 15 de diciembre. LA

POLÍTICA DE LA

UNIDAD

DE ACCIÓN

PUESTA A PRUEBA

Cuando asumió Macri, desde el Nuevo MAS adoptamos la definición de que el giro en la situación nacional imponía un giro en la táctica política. Había asumido un nuevo gobierno que pretendía cerrar la etapa abierta con la rebelión popular del 2001 de una vez y para siempre, tarea que el kirchnerismo no pudo terminar. Ante cada ataque del gobierno se nos impone la unidad de acción con todo aquel que quiera enfrentarlo, incluidas las

organizaciones kirchneristas, burocráticas, etc. Es un grave error depositar expectativas en que estas organizaciones vayan hasta el final, por supuesto. Más aún lo sería darles algún tipo de apoyo político, siendo el kirchnerismo (o el ex kirchnerismo en desbandada) y las burocracias sindicales claros cómplices de la “gobernabilidad” macrista. Pero esto no se contradice con la necesidad de golpear juntos. Es una imposición de la realidad. Asimilar verbalmente una orientación de unidad de acción con un apoyo político a las organizaciones con las que se hace dicha unidad es sólo confundir a propios y ajenos. Esta confusión sobre nuestra política, deliberadamente difundida por el PO, sólo puede servir para debilitarse a uno mismo. Para ellos (según convenga, por supuesto), unidad de acción y apoyo político son una sola y misma cosa. La táctica de la unidad de acción se trata de fortalecer las luchas con la participación de diversas corrientes, a la vez que se intenta socavar las bases y puntos de apoyo de las direcciones oportunistas demostrando su inconsecuencia, enfrentando cada traición y mostrando sus compromisos con la “gobernabilidad” capitalista. Esta política fue enfrentada por el FIT todo este año, sobre todo el PO. El más importante polo de referencia de izquierda alternativo a La Bisagra y La Mella (que actuaron como una misma cosa) en esta lucha fue nuestro frente La Trinchera, surgido en las elecciones de junio y compuesto por el Nuevo MAS, el FIT, CAUCE, otras agrupaciones locales y muchos compañeros independientes. Podemos decir con toda seguridad que lograr instalar el frente como referencia fue una batalla contra la política sectaria y autorreferencial del FIT. Sobre todo, en este caso, del PTS. Frente a la primera medida de lucha que frenó a Juri y sumó a cientos de nuevos compañeros a la lucha: evitar la sesión del 19 de noviembre, los compañeros propusieron a La Trinchera… no participar. Aunque suene ridículo, así fue. Su argumento fue aún más desopilante. Planteaban que los medios sólo reflejarían la participación de los K, entonces había que marginarse de las medidas de lucha reales y hacer un corte de calle marginal de la izquierda en soledad mientras quienes evitaban de forma efectiva la sesión serían La Bisagra y La Mella. Semejante orientación sólo hubiera servido para arrojarse dinamita a los propios pies y aislarse del movimiento estudiantil. Afortunadamente, quedaron en minoría. Sin embargo, esta polémica fue una constante en todo el proceso con todas las organizaciones del FIT.

Cuando se tomó el Pabellón Argentina, los compañeros proponían a La Trinchera un comunicado que planteaba que la toma era para imponer “los intereses de La Bisagra”. Nuestra posición (junto a los compañeros de CAUCE, los independientes y otras agrupaciones) fue que había que llenar de estudiantes la toma, que era imperioso exigir la realización de Asambleas, etc. Esta política fue la que nos permitió dar una pelea en la Asamblea del 19 de noviembre para mantener la toma algunos días hasta afianzar el triunfo. El presidente de la FUBA, en una nota recientemente difundida por el PO, festeja que ese día La Trinchera agrupó a unos 300 compañeros con sus mociones. Se olvida de contar que no había ni una organización del FIT presente, todos ellos sin excepción estaban en su acto de Atlanta. Debería el compañero, en todo caso, felicitar a las organizaciones e independientes que sí estábamos ahí dando pelea. UNA GRAN JORNADA DE LUCHA El 15 de diciembre sufrimos una derrota. La Asamblea Universitaria logró sesionar. Sin embargo, el saldo es mucho más rico y complejo. Veamos por qué. La primera convocatoria fue en el campo escuela de Agronomía, a 25 km de Córdoba Capital. Dos días antes la gestión anunciaba dos nuevas sedes, el Complejo Ferial y el Hospital de Clínicas. Esta maniobra fue gestada frente a la voluntad del movimiento estudiantil, que se preparaba para evitar la asamblea. Con una convocatoria a las 8 en el campo escuela, otra 9.30 en Ferial y otra a las 11 en el Clínicas pretendían dispersar las fuerzas estudiantiles para así garantizar la sesión. Sin embargo, se logró hacer un inmenso despliegue organizativo que logró garantizar delegaciones de varios cientos de compañeros en cada uno de los lugares de la posible sesión. Éste fue preparado en la llamada “Coordinadora en defensa de la educación pública”. Diremos algunas palabras sobre ella. Surgió de una moción en una asamblea para supuestamente aplicar los mandatos de base y estaba compuesta por las organizaciones que participaban de la lucha junto a compañeros independientes. Sin embargo, fue terreno de diversas maniobras burocráticas por parte de La Bisagra y La Mella, que desconocieron mandatos de asamblea y acuerdos hechos en la Coordinadora misma. Nuestra política fue participar de ella para disputar su orientación y asegurar la participación de la izquierda en cada medida realizada. Consideramos que fue un acierto hacer esto, pues

así logramos ser parte activa de la organización del 15 de diciembre a pesar de ser víctimas reiteradas veces de diversas maniobras y aparateadas. Claramente, no fue esta la posición del FIT, que se tuvo que sumar sobre el final para no quedar completamente marginado. El día definitorio fue una enorme novedad para todo el movimiento estudiantil. Hasta ahora, jamás se había realizado una Asamblea Universitaria hecha a kilómetros y fuera de los días de clase. ¡Enorme antecedente! El mismo 15, cientos de compañeros se juntaron a las 3 de la mañana en el Pabellón Argentina para desde ahí distribuir fuerzas en los diversos puntos de la posible sesión. La primera parada fue en el campo escuela, donde a pesar de la presencia de la policía, la Franja y sus patotas alquiladas, nada pudieron hacer. Habíamos llegado allí en una caravana de unos 50 autos. Cuando fue evidente que allí no sesionarían, las fuerzas fueron volcadas al Complejo Ferial, enorme terreno muy difícil de cubrir en su totalidad. En ese lugar se dieron algunas de las imágenes más impactantes del día. Había cordones de compañeros en cada uno de los accesos, enfrentados a los cordones de un importante operativo policial. Uno de ellos frente a un cordón policial con perros y caballería, tenía varios cientos de metros de largo. Allí, a fuerza de imposición policial, lograron sesionar. Después de eso, nuevamente de a muchos cientos, hicimos un corte y acto en Colón y Gral. Paz, importante centro neurálgico de Córdoba. Las consecuencias de la derrota aún están por verse, pues el saldo es contradictorio. Dependerá de un conjunto de factores. Posiblemente la primera consecuencia será cierta dispersión y desmoralización, más teniendo en cuenta que entramos en período vacacional y muchos compañeros sacarán conclusiones de forma individual, aislados del resto. Sin embargo, la pelea contra Juri y el macrismo en general tendrá nuevos capítulos el año que viene y dependerá de su evolución, de su relación con la situación universitaria, las posibilidades de desarrollo del movimiento estudiantil en el mediano plazo. Hay algo que es seguro. Esta lucha ha quedado grabada a fuego en la conciencia de cientos de estudiantes que hicieron sus primeras armas en ella y este caudal potencial puede ser importante en un futuro cercano. ¡YA BASTA!-NUEVO MAS UNIVERSIDAD NACIONAL DE CÓRDOBA


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Socialismo o Barbarie 13

Trabajo, valor y proteccionismo socialista ECONOMIA DE TRANSICIÓN

El Nuevo MAS se caracteriza entre las corrientes del trotskismo en general (y particularmente del latinoamericano) por haber desarrollado un profundo balance de las experiencias revolucionarias del siglo pasado, producto del cual hemos sacado fructíferas conclusiones que hacen no solo al proyecto estratégico revolucionario de nuestra Corriente SOB, sino también a nuestro quehacer cotidiano en todos los frentes donde intervenimos. Este rico corpus de elaboraciones (en constante desarrollo) fue publicado durante estos últimos 15 años en las páginas de la revista internacional Socialismo o Barbarie. En esta oportunidad reeditamos un fragmento del texto de Roberto Sáenz “La dialéctica de la transición socialista” publicado en el n° 25 de nuestra revista. En donde se analizan tanto las condiciones de la economía de transición al socialismo como las bases materiales en que se apoyó (y en el caso de Cuba todavía se apoyan) las capas burocráticas para ejercer su control sobre la clase obrera y vivir a costa de esta. Invitamos a todos los luchadores obreros y estudiantes, y especialmente a toda la joven militancia de nuestro partido, a leer y estudiar estos textos. La clase obrera durante el siglo XX ha desarrollado una riquísima experiencia de lucha, ese es su legado para las generaciones siguientes. Es nuestro deber recoger sus enseñanzas y proyectarlas de cara a la lucha por el la revolución, el gobierno de los trabajadores y el socialismo en el siglo XXI.

ROBERTO SÁENZ EL SOBREPRODUCTO SOCIAL COMO PLUSVALÍA ESTATIZADA

“[Es necesario] garantizar en la producción de bienes y servicios un crecimiento de la productividad del trabajo que supere el crecimiento del ingreso medio de los trabajadores” (punto 42 del Proyecto de Lineamientos del VI Congreso del PC de Cuba).

C

itamos este revelador criterio para presentar la problemática de los mecanismos de explotación del trabajo en las sociedades poscapitalistas burocratizadas. En el caso de la reforma procapitalista que está impulsando hoy el castrismo, aumentar la productividad del trabajo por encima de los ingresos de los trabajadores da lugar a un sobreproducto social que, al ser apropiado unilateralmente por la burocracia castrista, no es otra cosa que una explotación del trabajo por apropiación de plusvalía estatizada. Uno de los principales estudiosos de las experiencias de la transición socialista en la segunda mitad del siglo XX fue el sociólogo francés Pierre Naville. El ángulo de mira de todo su estudio respecto de la evolución de la ex URSS se basaba en las profundas implicancias de la subsistencia de la fuerza de trabajo como mercancía, puesto que “más que su naturaleza, es la forma de la determinación del salario lo que diferencia el socialismo de Estado del capitalismo” (Le nouveau Léviathan, 2, p. 209). Pocos trotskistas después de la posguerra se detuvieron a reflexionar sobre las implicancias de esta circunstancia. Era imposible dejar de ver en todas las experiencias de la transición (o transición frustrada) la realidad del

intercambio de la fuerza de trabajo por un salario, sea directo o indirecto. Prácticamente en ningún momento de la experiencia soviética el trabajo se dejó de intercambiar por un salario como retribución monetaria. Si en algún momento del “comunismo de guerra” se llegó a especular con sustituirlo por bonos de trabajo, muy pronto se llegó a la conclusión que esto era una utopía irrealizable. Sucede que el intercambio de productos por simples bonos de producción que certifiquen la realización de un trabajo o actividad útil requiere un desarrollo de fuerzas productivas universales, cosa que nunca llegó a plantearse en la ex URSS, y menos aún en las demás experiencias no capitalistas del siglo pasado. El hecho cierto es que, en las condiciones de las experiencias de la transición del siglo pasado, la principal categoría de la crítica de la economía política, la fuerza de trabajo como mercancía creadora de valor y la piedra angular de todo el sistema marxiano, no podía dejar de subsistir en el centro mismo del mecanismo de toda la economía. Su continuidad en las sociedades de transición se debe, en primer lugar, a la subsistencia del mercado mundial capitalista, que debe ser analizado como una totalidad marcada por la unidad de principios y de leyes que atañen globalmente al conjunto de sus relaciones sociales. Radicalmente en contra de los postulados “dualistas” o “pluralistas”, Naville insiste en que por todo un período histórico, en los países donde sea expropiado el capitalismo la ley del valor seguirá estando, hasta cierto punto al menos, en la base o infraestructura de la economía de transición. En un contexto marcado por la presión del mercado mundial y el relativo atraso de las fuerzas productivas nacionales, la fuerza de trabajo sigue necesariamente asumiendo la forma de mercancía. Y si subsiste el trabajo asalariado, su producto no puede ser otro

que valor más plusvalor, trabajo necesario y trabajo excedente a ser apropiado por alguien: c + v + pv. En consecuencia, Naville coloca en el centro de su edificio teóricointerpretativo el hecho que en la ex URSS la fuerza de trabajo se sigue intercambiando por un salario. El trabajo asalariado necesariamente permanece en la base de las relaciones económicas de las sociedades de transición o de transición abortada, lo que da lugar en este último caso al relanzamiento de mecanismos de explotación del trabajo. Estas relaciones se expresan bajo la forma de relaciones de “explotación mutua” o “autoexplotación”, ya que, a diferencia de los que afirmaba Preobrajensky en La nueva economía, la clase obrera sí puede (en verdad, debe) “explotar” su propio trabajo de manera análoga a las cooperativas bajo el capitalismo. Trotsky, en el capítulo IX de La revolución traicionada, utiliza prácticamente la misma figura al considerar a todos los trabajadores como accionistas de la misma “empresa”, el Estado. El caso de las cooperativas es análogo: se trata de accionistas que explotan su propio trabajo. Veamos primero lo que decía Preobrajensky: “Permítasenos balancear todos los pro y contras y decidir cuál término es más correcto usar en relación al fondo de sobreproducto que es depositado en la economía estatizada luego de que las necesidades de consumo de los trabajadores de la industria estatizada han sido satisfechas. ¿Plustrabajo o plusvalía? Personalmente, considero que el término plustrabajo es más correcto, en la medida en que es cuestión de caracterizar no sólo lo que existe, sino también la tendencia de desarrollo” (La nueva economía, p. 194). Pero, como observa Naville, la evidencia histórica fue que estas “tendencias” emancipadoras no se desarrollaron y que las necesidades de

consumo de los trabajadores nunca fueron realmente satisfechas. Naville agrega que el mecanismo de las cooperativas bajo la propiedad estatizada puede tender a la completa disolución de toda relación de explotación, en la medida en que se dé un desarrollo efectivo de las fuerzas productivas y que el sobreproducto social realmente sea reapropiado por los trabajadores. Pero en las condiciones concretas de la ex URSS, donde de manera sistemática se afirmó una burocracia por encima de la clase obrera, sobre la base de una economía todavía apoyada en la producción de valor y plusvalor, lo que ocurre es un recomienzo de la explotación del trabajo: “El poder de los dirigentes del Estado-partido sobre la asignación de los recursos facilita la desviación de una parte de estos recursos en beneficio del propio estrato dirigente, y éstos y otros tipos de privilegios y desigualdades se ocultan y nunca se discuten públicamente” (A. Nove, cit., p. 172). La apropiación de plusvalía estatizada por parte de la burocracia fue puesta al servicio de mecanismos de acumulación burocrática y no de una evolución en un sentido socialista auténtico, como veremos en detalle más abajo. Naville señala que, comprensiblemente para su época, Preobrajensky prefería llamar al sobreproducto social plustrabajo y no plusvalía, no tanto en función de las condiciones existentes sino de las futuras. Pero lo decisivo aquí es que al no confirmarse esas perspectivas emancipadoras, sino en cambio producirse la apropiación del trabajo no pagado por una burocracia sobre la base de una producción fundada en el valor, no cabe más que llamar a esta apropiación plusvalía estatizada y apropiada burocráticamente. Toda otra denominación sería embellecer y mistificar las relaciones reales, como hizo el stalinismo… y tantos “trotskistas” en la segunda posguerra.1

En realidad, Naville no hace más que seguir a Trotsky cuando postula la categoría de plusvalía estatizada. En efecto, el revolucionario ruso hace referencia a ella al polemizar con Stalin acerca del carácter de los productos del campo: “Dejemos establecido que en la URSS la renta absoluta no fue abolida sino estatizada, que no es lo mismo (…) Todas las pautas económicas, incluida la renta absoluta, se reducen al trabajo humano (…) En la URSS, el dueño de la tierra es el Estado. Eso lo convierte en titular de la renta de la tierra. En cuanto a la liquidación real de la renta absoluta, podremos hablar de ello una vez que se haya socializado la tierra de todo el planeta, es decir, una vez que haya triunfado la revolución mundial. Pero dentro de las fronteras nacionales, dicho sea sin el menor ánimo de insultar a Stalin, no sólo no se puede construir el socialismo sino que ni siquiera se puede abolir la renta absoluta” (León Trotsky, “Stalin como teórico”, 15-7-1930, en Escritos, I, 4, Bogotá, Pluma, 1977). Criterio revelador que se puede y se 1 Decía Moreno que “hay una cita muy fuerte de Trotsky a favor de que sí, que hay plusvalía. Mandel y otros opinan que no, que lo que hay es plustrabajo (…) Eso depende de cómo definamos la plusvalía. Si plusvalía es toda expresión de plustrabajo que se vende, entonces Trotsky tiene razón cuando habla de que hay plusvalía. Hay otros –Mandel– que opinan que plusvalía es la expresión histórica de la forma de apropiarse por parte de los capitalistas del plustrabajo. Si aceptamos esta definición –que yo acepto (…)–, no hay plusvalía si no hay capitalismo (…) Pero si consideramos que plusvalía es todo plustrabajo (aunque no haya clase capitalista)… todo plustrabajo que se vende, que se realiza… es decir, que va a la mercancía, entonces hay plusvalía en la URSS” (selección de citas para el Seminario sobre transición). Moreno plantea aquí bien el problema, aunque conceptualmente quedaba preso de una apreciación históricamente demasiado estrecha de la continuidad de la ley del valor.


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debe aplicar al trabajo asalariado y a la plusvalía en las sociedades de transición abortada. Cabe en este contexto la crítica al fetichismo estalinista del “trabajo puro”. El trabajo asalariado no puede ser considerado como una categoría meramente “técnica”, ni siquiera en las sociedades de transición auténtica: sigue siendo una categoría social. Considerarlo de modo puramente técnico, como sugería Bujarin, sólo enmascara las imposiciones reales y la apropiación burocrática de la plusvalía estatizada o sobreproducto social: “El Código de Trabajo soviético de 1922 confió a los sindicatos la tarea de defender los intereses de los obreros para la conclusión de contratos colectivos, especialmente en materia de fijación de salarios. Esta legislación no resultaba solamente de las exigencias del pasaje a la NEP. Se extendía expresamente a la industria de Estado, al sector plenamente socializado (…) A la teoría del salario de 1922, que implica un cambio negociado, la reemplazó en la práctica el principio de una asignación salarial por las oficinas de planificación y, en teoría, la idea de que el salario no resulta de un cambio, sino de una simple distribución de beneficios sociales” (P. Naville, cit.). Una formulación fetichista del mismo tipo es la que aparece en el documento de apoyo de la central sindical cubana (CTC) a las reformas procapitalistas y antiobreras que está impulsando el PC cubano: “Un asunto de singular importancia lo constituye el salario. Hay que revitalizar el principio de distribución socialista, de pagar a cada cual según la cantidad y calidad del trabajo aportado. Los sistemas de pagos por resultado, aplicados en centros con plantillas mejor ajustadas, continuarán siendo la vía para elevar la productividad y, como consecuencia de ello, el ingreso de los trabajadores” (“Pronunciamiento de los sindicatos cubanos ante los caminos económicos”, Secretariado Nacional CTC, 13-9-10). En el mismo sentido se insiste en los “Lineamientos” del PC cubano: “[impulsar] la ley de distribución socialista: de cada cual según su capacidad, a cada cual según su trabajo”. Aquí, de más está decirlo, no hay ningún “principio socialista” (otra prostitución del concepto), sino simplemente los habituales métodos capitalistas por los cuales el salario “aumenta”… con el aumento de la explotación. Volviendo a nuestro argumento, la mirada “técnica” del salario no resiste el menor análisis, y refleja la idea de que las categorías marxistas ya no tendrían ninguna utilidad en la comprensión de las sociedades de transición, que tendrían categorías y leyes “propias”. Como resumía Nahuel Moreno respecto de Naville: “[En la URSS] hay explotación mutua, ésa es la palabra. Él descubre en Marx una cita que habla de explotación mutua. Es muy interesante el libro de Naville. Acepta la caracterización de Trotsky, pero avanza más. Le da enorme importancia a que haya asalariados, que haya el problema del trabajo; habla de fetichismo. Naville acepta el criterio de Trotsky de que [la URSS] viene a ser como una

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sociedad anónima. Pero avanza más, a que más que una sociedad anónima es como si fuera una cooperativa, o un conjunto de cooperativas. (…) Naville, nos da la impresión, quizá tiene razón; avanza dentro de la propia línea de Trotsky –porque él acepta lo de Trotsky–; es más rico, en el sentido de que quizá es así lo de explotación mutua. Porque en la URSS, estudiándola concretamente, todo el mundo se tira a joder contra todo el mundo. Es una cosa infernal. Todo el mundo tira a joderse. Una fábrica a la otra, dentro de la fábrica, un obrero al otro; es algo generalizado” (Escuela de cuadros 1985). Y agregaba: “Trotsky dice que el grave problema es que las normas de distribución son burguesas. Y Naville dice: ‘Ésa no es la madre del borrego; ése es el borrego. La madre del borrego está en la producción, está dentro de la fábrica‘. El problema es que se paga salario y que se selecciona el personal. Lo selecciona un jefe de personal… Es decir, en la producción, en la fábrica, hay todas las normas burguesas

Mandel fue campeón de una visión que fragmentaba la totalidad mundial. Seguía en esto al propio Stalin, que en 1951 afirmará la existencia de “dos mercados mundiales”: “Una consecuencia económica de la existencia de dos campos opuestos ha sido la disgregación del mercado mundial único y omnímodo; tenemos hoy la existencia paralela de dos mercados mundiales, opuestos también el uno al otro” (J. Stalin, cit.). Esto no era más que una apología de la economía burocrática de la ex URSS, aunque solapadamente se pretendía comenzar a abrir el terreno para elementos de “socialismo de mercado”, como cuando Stalin reconocía, en contradicción con lo sostenido en los 30, cierta subsistencia de la ley del valor en la ex URSS. Pierre Naville estuvo entre los que salieron al paso de este tipo de bravuconadas con mayor lucidez, cuando dirigentes de la IV Internacional como Michel Pablo o Mandel creyeron a pie juntillas este disparate. No había ni podía haber dos merca-

mundo no era ni podía ser dual en sus principios, y las leyes de la totalidad que rigen la economía mundial no pueden ser otras que la ley del valor internacional. La poderosa realidad del mercado mundial presionaba de múltiples modos sobre la economía nacional de la ex URSS (o del mercado común “socialista” COMECON en la segunda posguerra), por cuanto la medida de la productividad mundial la da necesariamente la economía capitalista, cuyo desarrollo de las fuerzas productivas es mayor. Por esto mismo, la medida del valor, del trabajo socialmente necesario incorporado a los productos, en un momento dado y con un nivel determinado de desarrollo de la productividad del trabajo, es una media mundial marcada por las economías más desarrolladas. Es precisamente esta presión de la economía mundial, y la unidad de sus leyes fundamentales, la que explica por qué la economía de transición se ve obligada a erigir mecanismos de proteccionismo socialista. Esto es,

“El hecho cierto es que, en las condiciones de las experiencias de la transición del siglo pasado, la principal categoría de la crítica de la economía política, la fuerza de trabajo como mercancía creadora de valor y la piedra angular de todo el sistema marxiano, no podía dejar de subsistir en el centro mismo del mecanismo de toda la economía.” de trabajo. Y de esto se apropia el Estado y no los capitalistas. De esa contradicción, que se hace trabajar a los obreros como si fueran una empresa capitalista común, y al mismo tiempo se apropia la plusvalía el Estado, de ahí surge que el consumo sea burgués (… ) y que la planificación sea burocrática” (selección de citas para el Seminario sobre Transición).2 En síntesis: en la transición subsiste, y no puede dejar de subsistir, la connotación social del trabajo: las inverosímiles apelaciones al trabajo “puro” en la ex URSS sólo cumplieron el papel de fetiche fundador del Estado “socialista” estaliniano. Lamentablemente, infinidad de idiotas útiles en la izquierda han creído esta fanfarronada. LA SUBSISTENCIA DEL MERCADO MUNDIAL Y EL PROTECCIONISMO SOCIALISTA

Otra cuestión central de la transición es la subsistencia del mercado mundial.3 En la segunda posguerra, 2 Justo es reconocer que en estos seminarios de los 80 en el viejo MAS, Moreno expresaba una gran sensibilidad por los problemas de la ex URSS, al tiempo que amplitud teórica y pedagogía para explicar los problemas, más allá de que su pensamiento mantuviera una forma fragmentaria. No hay que olvidar que se trata de intervenciones orales, no textos. El único trabajo escrito a fines de los 70 sobre los problemas de la transición, La dictadura revolucionaria del proletariado, hacía afirmaciones casi diametralmente opuestas, que hemos criticado en otros trabajos.

dos mundiales; como señalara Trotsky, el mercado mundial era (y sigue siendo) una totalidad a la cual se encuentran subordinadas todas las economías nacionales, sean capitalistas o de transición: “El marxismo parte del concepto de la economía mundial no como una amalgama de partículas nacionales, sino como una potente realidad con vida propia, creada por la división internacional del trabajo y el mercado mundial, que impera en los tiempos que corren sobre los mercados nacionales (…). Proponerse la edificación de una sociedad socialista nacional y cerrada equivaldría, a pesar de todos los éxitos temporales, a retrotraer las fuerzas productivas, deteniendo incluso la marcha del capitalismo (…). Pero los rasgos específicos de la economía nacional, por grandes que sean, forman parte integrante, en proporción cada día mayor, de una realidad superior que se llama economía mundial (…). La ley a la que aludimos (…) lejos de sustituir o anular las leyes de la economía mundial, está supeditada a ellas” (L. Trotsky, La revolución permanente, pp. 7 y 11).4 El 3 En El porvenir del socialismo, Claudio Katz comete el serio error de dar demasiado poca importancia a la subsistencia del mercando mundial a la hora de explicar la permanencia de las categorías mercantiles en la transición. 4 Preobrajensky tenía una visión algo distinta a la señalada, más impresionista. Porque aun dando cuenta de las evidentes tendencias monopólicas presentes en la economía mundial, tendía sin embargo a perder de vista la subsistencia de la ley del

quebrar hasta cierto punto el imperio de la ley del valor en el mercado interior de la economía no capitalista de que se trate, so pena de ser barrida por la competencia internacional: “La economía planificada del período de transición, si bien se basa en la ley del valor, la viola a cada paso y fija relaciones de intercambio desigual entre las distintas ramas de la economía y, en primer término, entre la industria y la agricultura. La palanca decisiva de la acumulación forzosa y la distribución planificada es el presupuesto gubernamental. El papel de éste, con su desarrollo inevitable, se acrecentará. La financiación crediticia regula las relaciones entre la acumulación obligatoria del presupuesto y los procesos del mercado, en la medida en que éstos mantengan la primacía. Ni la financiación presupuestaria ni la financiación crediticia planificada o semiplanificada, que aseguran la ampliación de la reproducción en la URSS, pueden englobarse de ninguna manera en las fórmulas del segundo tomo [de El capital]. Porque toda la fuerza de estas fórmulas reside en el hecho de que pasan valor como regulador económico internacional: “El desarrollo de estas tendencias [monopólicas] acarrea inevitablemente, pese a la existencia formal de la libre competencia, la limitación y transformación ulteriores de la acción de la ley del valor, no ya en el interior de las economías nacionales aisladas, que poseen un alto nivel de desarrollo de los monopolios, sino en la arena de la economía mundial entera. En esto reside la particularidad de la economía de posguerra” (La nueva economía).

por alto los presupuestos, tarifas y planes y, en general, todas las formas de injerencia planificada del Estado, y resaltan la necesaria legitimidad inherente al juego de las fuerzas ciegas del mercado, disciplinado por la ley del valor. Si se ‘libera‘ al mercado interno soviético y se aboliera el monopolio del comercio exterior, el intercambio entre la ciudad y la aldea se volvería incomparablemente más igualitario, y la acumulación en la aldea –acumulación del kulak o del granjero capitalista– seguiría su curso; resultaría evidente entonces que las fórmulas de Marx se aplican también a la agricultura [soviética]. En esa senda, Rusia no tardaría en transformarse en una colonia sobre la que se apoyaría el desarrollo industrial de otros países” (L. Trotsky, “Stalin como teórico”, cit.). La necesidad misma de levantar barreras de protección sólo ilustra la circunstancia de que el inevitable parámetro internacional sigue siendo la ley del valor del mercado mundial. Y ésta no puede dejar de ser el patrón de medida o de comparación para la economía de transición, aun cuando ésta se ve obligada a violar esta misma referencia en aras de la acumulación socialista. A este respecto, es ilustrativa la referencia de Alec Nove a los criterios que regían al interior del COMECON: “Un estudio prolongado no ha logrado proponer ningún tipo de ‘precios de mercado socialistas‘, y la solución ha sido basar las transacciones en precios de mercado capitalista como único criterio objetivo. Para nivelar las fluctuaciones se ha acudido a la práctica de emplear la media de ‘precios del mercado mundial capitalista’ en los años anteriores. Se puede citar en este contexto una observación que me hizo un economista checo: ‘Cuando llegue la revolución mundial, tendremos que conservar un país capitalista por lo menos. De otro modo no sabremos a qué precios comerciar‘” (A. Nove, cit., p. 167). En el mismo sentido, el economista cubano Ernesto Molina señala: “Mientras el mercado mundial capitalista exista, los precios deben reflejar los precios del mercado mundial. Cuba es una economía pequeña y abierta en un mundo capitalista turbulento. Siempre hemos tenido que importar bienes y debemos mantener nuestras fuerzas armadas para la defensa. Tenemos algunas grandes tareas a las que hacer frente; por ejemplo, en el ámbito de la vivienda. Algunos de los problemas pueden resolverse dentro de Cuba. Otros están fuera de nuestro control, en el mercado mundial” (en Alan Woods, “Intelectuales comunistas…”, 24-11-10). Lo mismo repetía Naville: “Si la URSS puede imponer en su comercio internacional distorsiones a la ley del valor, esto es imposible para Polonia, China o Yugoslavia en sus relaciones con el mercado capitalista. (…) El comercio exterior internacional coloca todos los problemas de la comparación sobre la base del mercado mundial de los valores producidos, es decir, de las productividades marginales. Y coloca también el problema de los costos y de los precios del mercado interior nacional, por-


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que constituye el elemento de comparación” (cit., p. 238). Análogamente, los “Linea-mientos” del PC cubano, más allá de su carácter procapitalista, se preocupan por establecer que “el sistema de precios deberá ser objeto de una revisión integral que posibilite medir correctamente los hechos económicos”, al tiempo que establece que uno de los puntos de referencia para los mismos serán “los precios del comercio exterior” (puntos 61 y 63). La pérdida de referencia con los precios del mercado mundial llevó a distorsiones e irracionalidades tremendas, al punto que dentro mismo del COMECON se debió apelar a los precios imperantes en el mercado capitalista mundial para la realización de estos intercambios. Por otra parte, es imposible que una economía de transición corte sus vínculos con el mercado mundial. Trotsky insistía en que la prédica de la “autarquía” era otra de las utopías reaccionarias del stalinismo que hacía un todo orgánico con la perspectiva del socialismo en un solo país: “Las grandes y pequeñas desproporciones de la economía planificada implican la necesidad de recurrir al mercado mundial (...) la aparición de nuevas exigencias y desproporciones (...) amplían la necesidad de un enlace con la economía mundial. El programa ‘de independencia‘, es decir, del carácter de una economía soviética bastándose a sí misma, revela cada vez más su carácter reaccionario y utópico. La autarquía es el ideal de Hitler, y no el de Marx y Lenin” (El fracaso del Plan Quinquenal, pp. 37-38). En el fondo, la unidad del mercado mundial y la subordinación a éste de la economía de la transición es la principal explicación de la subsistencia de las categorías de la economía política en la transición. Se trata de un hecho al cual de ninguna manera hay que adaptarse pasivamente, pero que no puede ser eliminado de manera administrativa o voluntarista. Tiene estratégicamente una sola solución: la extensión internacional de la revolución socialista y el desarrollo de fuerzas productivas universales. Si las relaciones entre naciones, en el contexto del mercado mundial, son de competencia, no de explotación, pero sí de dependencia, de extracción del plusvalor por parte del capital más fuerte y de transferencia por parte del más débil, ello no se opone sino que se articula perfectamente a la explotación de una clase sobre otra, del capital sobre el trabajo. En este segundo caso no hay transferencia de plusvalor, sino apropiación de éste. Pero el plusvalor apropiado por el capital en la relación vertical capital-trabajo (explotación) es la fuente de la transferencia

de un capital débil hacia el más fuerte en el nivel horizontal (competencia y/o dependencia). Éstas son las relaciones que rigen el mercado mundial dominado por la ley del valor, mecanismo que explicaba muy bien Henryk Grossmann en La ley de la acumulación y el derrumbe del sistema capitalista (1929). Mutatis mutandis, esto se aplica a las relaciones entre el mercado mundial capitalista y una economía de transición al socialismo (o no capitalista), en caso de que la ley del valor internacional imperara sin trabas. Precisamente por esto, la economía de transición debe en cierto modo quebrar este imperio, so pena de sucumbir. Y el mecanismo clave para esta ruptura es el llamado proteccionismo socialista: sin él, la economía de transición, más atrasada que el promedio mundial, sería barrida por la competencia capitalista. Digamos de paso que esto mismo vale incluso para los programas del nacionalismo burgués característicos de la segunda mitad del siglo pasado, que han incluido siempre formas de protección de la economía nacional respecto de la mundial como mecanismo indispensable para alentar algún grado de industrialización del país atrasado en cuestión. En el otro extremo está el libre imperio de la ley del valor internacional. El libre comercio, en vez de negar las desigualdades entre naciones, las agudiza como producto de la desigualdad de desarrollo de las fuerzas

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productivas de cada una de ellas. Las ventajas absolutas de los países capitalistas adelantados sobre los subdesarrollados (o no capitalistas en países atrasados) no se reducirán en una supuesta “ventaja comparativa para todos”, aun si cada uno se dedica a aquella producción en la cual es más “competitivo”. Fue lo que ocurrió al interior del “bloque socialista” cuando la ex URSS convenció a Cuba de dedicarse al monocultivo de azúcar; un paso estratégicamente desastroso para la isla, que explica muchos de los problemas que tiene hasta hoy. En efecto, el libre comercio sólo asegura que los países capitalistas avanzados dominen el intercambio internacional y que los países menos desarrollados (capitalistas o no) terminen con un déficit crónico y una deuda también crónica, debido sencillamente a la transferencia del valor que opera desde los capitales más débiles a los más fuertes en el mercado mundial. Preobrajensky hizo una muy justa apreciación al respecto: sin algún tipo de proteccionismo socialista (término acuñado por Trotsky) que limite el imperio de la ley del valor internacional sobre la economía nacional no capitalista, no se puede siquiera empezar a pensar en una economía de la transición, al menos en los países atrasados. Sin barreras proteccionistas no hay posibilidad de acortar la brecha con los países con más desarrollo de las fuerzas productivas, no puede haber verdadera acumulación a escala ampliada ni desarrollo global de las

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ramas productivas. Es imperativo poner límites al imperio de la ley del valor, a las mercancías más baratas de los países más competitivos del mercado mundial, en los cuales cada unidad de producto tiene menos trabajo humano incorporado. Porque si la economía de la transición se ajusta a la ley del valor, no le quedaría otra que producir aquello para lo que sólo tiene “ventajas comparativas” por dotación de la naturaleza, y comprar bienes de capital a los países desarrollados (y bienes de consumo a China). En Marx las cosas se plantean exactamente en este nivel: lo que impide una “competencia perfecta” es la existencia del monopolio del comercio exterior como hecho político, extraeconómico. Por supuesto, todo proteccionismo tiene límites; en última instancia, lo que decide las cosas es, junto con la imprescindible extensión la revolución mundial, el grado de desarrollo de las fuerzas productivas. Los mecanismos del proteccionismo socialista permiten, hasta cierto punto, desconectar los precios del mercado interno de los internacionales, mediando entre los espacios nacionales de valor y el espacio mundial. Pero esta desconexión nunca puede ser absoluta ni prolongarse indefinidamente: a largo plazo, inevitablemente, termina imponiéndose la ley de valor-trabajo operante a escala mundial. Sin cuestionamiento político global al orden capitalista mundial, no hay artilugio económico que salve la transición.

A este respecto, es ilustrativo que en los años 80, en plena crisis de estancamiento de la URSS y ante la necesidad de aumentar sustancialmente sus intercambios con el mercado mundial, sus exportaciones competitivas fueran las commodities: petróleo, gas natural, metales y otras materias primas, que llegaron a representar el 90% de las exportaciones soviéticas a las naciones capitalistas. Es una ilusión pensar que los precios puedan ser fijados arbitrariamente por el poder político por su pura voluntad. Ni siquiera el régimen estalinista en la década del 30 (con una economía casi totalmente estatizada y poderosos organismos de planificación burocrática) fue capaz de “dominar” la ley del valor mundial. En ausencia de condiciones económico-sociales para la desaparición del mercado, éste no puede ser eliminado por decreto. En síntesis, las políticas cambiarias, arancelarias e impositivas modifican los precios en el espacio de la economía de la transición, de manera que éstos divergen con respecto al precio establecido en el mercado mundial. Pero esta circunstancia no puede anular la ley del valor: sólo puede hacer que opere en el espacio nacional bajo formas particulares. No puede ser “anulada” a voluntad mediante mecanismos administrativos del Estado, operen o no bajo la perspectiva de la utopía reaccionaria del “socialismo en un solo país”.

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urante los últimos días, el mundo entero ha asistido horrorizado a la Guernica del Siglo XXI: la ofensiva lanzada por el dictador Bashar Al-Assad, con el apoyo del imperialismo ruso y de milicias terrestres iraníes y de Hezbollah contra la ciudad de Alepo, controlada hasta hace unas semanas en casi el 50% por fuerzas de oposición. Siria se ha convertido desde el inicio del conflicto en el coto de caza de los diferentes imperialismos, que pelean una “guerra por intermediarios”, financiando diferentes grupos armados, o interviniendo de manera directa.

Es el caso del imperialismo ruso, actor central de la carnicería que se está desarrollando en este momento, constituyendo un punto de apoyo militar y político esencial del asesino Bashar AlAssad. Pero también es el caso, aunque éste no haya intervenido de manera directa, del imperialismo estadounidense: el mismo planteó un apoyo acrítico a los grupos “rebeldes” y dio luz verde a sus aliados regionales para que les suministraran armas y financiamiento, generando el caldo de cultivo del integrismo reaccionario. Por otra parte, si no intervino de manera directa militarmente, no es por “buena voluntad”, sino porque viene sufriendo un desgaste continuo a causa del fracaso de sus últimas aventuras militares en Medio Oriente, y porque teme a los posibles resultados de un colapso del Estado sirio.

La ofensiva militar de las últimas semanas ha consistido en una política de tierra arrasada, con bombardeos cotidianos, apuntando contra objetivos civiles como hospitales, que terminaron de destruir una ciudad que se encuentra bajo asedio desde que las movilizaciones democráticas de 2012 se opusieran al gobierno de Al-Assad (amén de que este carácter progresivo se diluyó con el paso del tiempo a favor de fuerzas reaccionarias o ligadas a las potencias regionales). Sobre la base de la destrucción sistemática de la ciudad, el régimen de AlAssad, con el apoyo del imperialismo ruso y de sus aliados regionales, viene de lanzar una ofensiva con la que ha retomado el control de la totalidad de la misma, dando un salto cualitativo en el nivel de barbarie. Decenas de miles de civiles se encuentran bloqueados en esta trampa mortal, sin comida, sin techo, sin ningún refugio, hacinadas en la ínfima porción de territorio controlada por los “rebeldes” (100.000 personas en tan solo 5 km2). Hay múltiples testimonios de ejecuciones sumarias por parte del régimen. Las calles están repletas de cadáveres que la intensidad de los combates (o más precisamente, de las masacres) de los últimos días han impedido evacuar. El criminal de guerra Bashar Al-Assad intenta así reconstruir su dictadura sobre la base de ríos de sangre. Al mismo tiempo, no se puede dejar de resaltar el hecho de que los “rebel-

des” de Alepo (no nos referimos a los miles de civiles encerrados en esta ratonera y que no tienen ninguna voz en el conflicto) están compuestos de corrientes igual de reaccionarias que la de Bashar Al-Assad. En efecto, las protestas de 2012 tenían un carácter enormemente progresivo, democrático, laico, por los derechos sociales y contra el flagelo de la crisis económica iniciada en 2008. Pero la brutal represión del régimen de Bashar, la subsiguiente militarización del conflicto y le entrada en escena de potencias regionales como Turquía, Arabia Saudita o Qatar (con el visto bueno del imperialismo estadounidense), fueron minando el carácter progresivo de la oposición. Así, fueron tomando un rol cada vez más preponderante (que hoy ha devenido claramente mayoritario), las corrientes islamistas integristas y ultra-reaccionarias, que defienden un modelo de sociedad totalitario, basado en la opresión de las mujeres, de las minorías sexuales y religiosas. Así, una vez aplastada por Bashar la revuelta democrática, la guerra civil siria pasó a ser el terreno de disputa de intereses reaccionarios y ligados a las potencias regionales, donde cada grupo armado pasó a ser financiado por tal o cual potencia, a funcionar sobre la base de exacciones contra la población local, del empleo de mercenarios de guerra, sin ningún lazo con ningún organismo de masas, sindical, asociativo o político.

En esta situación, los grandes ausentes son las masas y el pueblo sirios. Los mismos se han visto envueltos en una espiral de violencia entre diferentes intereses imperialistas, donde cada opción es peor que la otra. Toda voz independiente ha sido ahogada bajo las bombas y las metrallas, ya sean del bando de Bashar o del bando “rebelde” que combate a experiencias democráticas como las del pueblo kurdo. Ninguna de las alternativas en escena pueden representar una salida progresiva para el pueblo sirio: la única salida es la propia auto-determinación democrática de las masas sirias, de manera independiente de todos los sectores reaccionarios en disputa. Hay que pelear por una Alepo verdaderamente libre, tanto del dictador Bashar Al-Assad como de los djihadistas, tanto de los perros guardianes de los intereses rusos, iraníes o libaneses que combaten junto a Bashar, como de los peones de Turquía, Arabia Saudita o Qatar que financian y dirigen al bando “rebelde”. Solo una Alepo verdaderamente liberada, en las manos de las masas sirias, podrán resolver las necesidades acuciantes de la población y salir del infierno de la guerra civil siria. Esta fue la perspectiva que la Primavera Árabe inauguró: la movilización masiva por abajo de los trabajadores y los sectores populares, que derribó regímenes sanguinarios encastrados en el poder desde hacía décadas, como el de Ben Ali en Túnez, Mubarak en Egipto

y que hizo trastabillar al dictador AlAssad. Si la Primavera Árabe generó una ola mundial de simpatía entre los sectores populares y llegó a irradiar al otro lado del Mediterráneo (como en el caso de los Indignados españoles), fue precisamente porque expresaba reivindicaciones y métodos profundamente progresivos, emancipatorios. Esta es la razón por la cual las fuerzas mancomunadas del imperialismo, de las dictaduras regionales, de las corrientes integristas reaccionarias se abatieron sobre ella para liquidarla. Pero las fuerzas profundas que se levantaron durante la Primera Árabe volverán sin duda a levantar cabeza, para echar por los aires a toda la podredumbre que se alió contra ellas. La catástrofe de Alepo, la Guernica del siglo XXI, demuestra con toda crudeza el grado de descomposición y de barbarie al que se dirige el capitalismo en crisis. No se trata de una “excepción”, de un “caso extremo”: se trata del verdadero rostro de un sistema en putrefacción, donde las peleas inter-imperialistas por el reparto del mundo se volverán cada vez más directas y violentas. La perspectiva que se reabre es clara: revolución socialista o más barbarie capitalista. ¡FUERA TODAS LAS TROPAS Y LAS MILICIAS DE ALEPO! ¡POR UNA ALEPO LIBRE, EN MANOS DE LAS MASAS SIRIAS AUTODETERMINADAS!


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