Palabras del Presidente de la República, José Mujica, en la audición radial por M24, correspondiente al 23 de mayo de 2013. Amigos, es un gusto saludarlos a través de este espacio. Hoy, a través de una audición grabada antes de partir en un viaje estresante que ineludiblemente tenemos que hacer. Es útil recordar que en el mundo de hoy existen muchas formas de comunicación pero ninguna tiene el valor de la comunicación directa, y esto importa, y mucho, en la lucha por los intereses de un país. Sabemos que cuando salga este espacio estaremos volando, no sabemos por dónde, rumbo a China, potencia hoy seguramente muy distinta a la que conocimos en la década del 60. País continente, primer comprador de cada uno de los países que componen nuestro MERCOSUR y con una gravitante presencia compradora en esta nuestra América del Sur. Para dar una idea, simplemente una idea, anunciemos que China ha convocado, para el mes de junio, a un circuito de reuniones plenarias a todos los ministros de Agricultura de América Latina. Y esto da una idea que va a poner sobre el tapete una agenda del quehacer agrario. Está hablando a las claras de cómo nos ve hoy y cómo nos ve hacia el futuro, acorde con sus necesidades, este país continental. Existen, desde el punto de vista uruguayo, un conjunto de cosas inmediatas, concretas. La reconstrucción ferroviaria, los trabajos para llevar adelante el puerto de aguas profundas, la expansión de la generación eólica y fotovoltaica, el apoyo a la Universidad Tecnológica, a las investigaciones del INIA en Uruguay, a la eventual participación en inversiones que permitan desarrollar ramas complementarias con Brasil. Uruguay puede ser una puerta de entrada de tecnología mixta para vender en Brasil, etcétera. Son infinitas las cadenas de cosas que tenemos que discutir pero por las cuales debemos de luchar. Esta agenda es una puerta de entrada y se irá ramificando en una serie de agendas parciales, a veces con empresas, empresas chinas, empresas mixtas, a veces con consorcios y naturalmente intentaremos que estén presentes los intereses del comercio uruguayo. Dentro de poco el MERCOSUR tendrá que discutir inequívocamente el rumbo, con quién suscribe acuerdos y hasta dónde llegan esos acuerdos. Arriba de la mesa global del MERCOSUR va a estar el resultado de las discusiones con Europa y con otras latitudes. Obviamente también va a estar la presencia inequívoca de la República Popular China y de otros países asiáticos. El mundo de hoy se está pergeñando en gigantescas unidades que serán buenas o regulares, está fuera de nuestra voluntad cuestionar esta evolución que en el fondo responde a la transformación de las fuerzas productivas del universo. Estamos caminando hacia una civilización donde cada vez las relaciones con el mundo se estrechan, son francamente ineludibles, mucho más para un pequeño país. Pero así y todo hay que tener muy claro estas cosas, hay que tener muy claras estas transformaciones y tratar en lo posible de gobernar
nuestras propias decisiones y que no se nos impongan las decisiones como imperio inevitable de los hechos. A la vuelta informaremos con claridad a nuestra nación. Quedemos allí por esta. Habría mucho más que hablar.