Los anti-derechos atacan los Derechos Humanos Los grupos anti-derechos han esbozado argumentos incoherentes y poco serios, desde los que se ataca arbitrariamente posiciones democráticas y los derechos de las personas. Parecen estar en contra de la igualdad, de los derechos humanos, de la libertad, de los valores principales de la democracia. Así, plantean ideas como:
• En América latina no hay sobrepoblación, sino más bien despoblamiento. • Los Objetivos del Milenio de las Naciones Unidas son una farsa y hay que abolirlos.
• El matrimonio entre personas del mismo sexo representa el fin de la civilización. Son frases descabelladas que contienen ideas con contenidos discriminatorios, siendo recurrentes en estos grupos y personas, sobre todo en organizaciones como el PRI (Population Research Institute), HLI (Human Life International) y su versión latinoamericana VHI (Vida Humana Internacional). Veamos esto en sus propias palabras que, aunque suenen disparatadas, son argumentos que se asumen como contundentes:
Dicen que en América Latina no hay sobrepoblación “Defender a las personas, disipar el mito de la sobrepoblación (…); fortalecer actitudes a favor de los nacimientos y de la familia a nivel mundial, defendiendo la institución familiar y a los niños en toda ocasión; detener la exportación del aborto, la anticoncepción y la esterilización del gobierno norteamericano con la excusa del control poblacional”1.
• Las campañas contra la violencia hacia las mujeres son un engaño para introducir la agenda de derechos sexuales. • La protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático son una conspiración para despoblar el continente y parte de una agenda oculta de quienes están en favor de los derechos sexuales y reproductivos. 1
http://www.lapop.org/content/view/69/17/)
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Dicen que los Objetivos del Milenio son parte de una conspiración para diezmar la población mundial “Los líderes del gobierno, activistas de los derechos de las mujeres e importantes organizaciones de control de población, tales como el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA), Fondo de Desarrollo de las Naciones Unidas para la Mujer (UNIFEM), Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) y la Organización Mundial de la Salud (OMS), se reunirán en New York (…). Su objetivo principal: será duplicar el gasto actual “en programas de planificación familiar y salud materna en los países en vías de desarrollo.” Si tienen alguna duda sobre su agenda, permítame explicarme. En la actualidad, la comunidad internacional gasta alrededor de doce mil millones al año en anticonceptivos, preservativos, esterilizaciones y abortos con el objetivo de sacrificar las ya reducidas poblaciones de los países en vías de desarrollo”.2
abolir el uso de los métodos anticonceptivos, limitar la planificación familiar y la educación sexual; ¿eso es coherente?, ¿son argumentos y elementos que ayuden al progreso de los derechos de las personas? Evidentemente no. Pero esto no es todo:
Dicen que el “cambio climático” es una mentira, parte de la conspiración desde los derechos sexuales y reproductivos. “Control de la población para prevenir el cambio climático ¡Miles de millones, no menos! Si “miles de millones de vidas” están en riesgo. (…)¿Pero a qué se refieren precisamente? ¿De una versión aerotransportada del VIH/SIDA? ¿De una nueva cepa de gripe aviar más virulenta? ¿De una arma biológica mortal que de alguna manera escapó del laboratorio? (…) Mas bien, el riesgo de nuestras vidas al que hacen referencia vendría de… un posible incremento en la temperatura promedio de la superficie de la tierra de dos grados centígrados para el año 2100. (…) No se atrevan a soltar la carcajada. (…). Por mi parte, no estoy asustado por la idea de que un poco de calor podría llegar a esas congeladas tierras del norte. Tampoco estoy muy seguro que sus esparcidos pobladores se opondrán a un descanso del frío que congela hasta los huesos.3
Entonces, más allá de todas las pruebas innegables de incremento exponencial de la población en nuestros países, de las enormes tasas de embarazo adolescente, de embarazos no planificados, se pretende indicar que la población disminuye. Con esto pretenden 2
http://www.lapop.org/content/view/318/24/)
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http://www.lapop.org/content/view/302/24/
Dicen que la ecología es una moda que busca diezmar la población “Ecologismo, sentimiento de culpa y control poblacional. Este alarmante ataque a la vida y a la familia es sólo un ejemplo del accionar de esta conocida moda ecologista. Durante las décadas pasadas, las organizaciones ecologistas adoptaron radicalmente una postura anti-natalista (…) promueven sin rodeos la anticuada y refutada mentalidad de “explosión demográfica”. […] ¿Por qué los ecologistas promueven el control poblacional tan marcadamente? En parte, es una de las amenazas de los ecologistas radicales de los sesenta. La cómica tesis de la “explosión demográfica” vive aún en la mente de estos antiguos activistas, quienes permanecen esclavos del día del juicio final (…). Permanecen inconscientes ante los incontables estudios demográficos que han probado que esos temores son totalmente infundados. (…) Señores ecologistas, “sálvense” a ustedes mismos. Los demás estamos bien y hacemos lo correcto”.4
piración que busca diezmar la población y que la protección de la ecología es parte de esa estrategia (por descabellada que parezca esta idea). En sus imaginarios, ¡todo sería una confabulación del movimiento de derechos sexuales y reproductivos para que el mundo se quede sin gente! Sus ideas continúan con otras frases son incoherentes:
Dicen que la CEDAW (Convención para la eliminación de toda forma de Discriminación contra la mujer) es para odiar la maternidad. “Hay una pelea contra una tenebrosa amenaza internacional que podría ser incluso tan importante, si no más, que la lucha en esos otros asuntos. Lo es aunque sea poca la gente que haya escuchado de CEDAW. […] Pomposamente llamada CEDAW, la Convención para la Eliminación de Toda forma de Discriminación Contra la Mujer, suena a primera impresión como algo no malo, tan sólo torpe y utópico. […] Los mafiosos del CEDAW no sólo aman el aborto, ellos odian la maternidad en principio, constantemente dicen a los países que implementen propagandas en los programas del nivel pre-escolar para forzar a los niños y niñas a pensar que hombres y mujeres son lo mismo”.5
Así, ni siquiera los defensores del medio ambiente y de la ecología, del cuidado de la naturaleza se salvan de estos ataques. Se indica que hay una cons4
http://www.lapop.org/content/view/160/24/
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http://www.lapop.org/content/view/105/24/
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Dicen que el matrimonio homosexual será el fin de la civilización “El matrimonio homosexual y el fin de la civilización cristiana. (…) Cuando al padre Paul Marx le preguntaron qué opinaba acerca de los esfuerzos por legalizar las “uniones” entre personas del mismo sexo, con su característico estilo directo, el fundador de HLI respondió: “si lo logran, será el fin”. (…) en un sentido profético, se dio cuenta de que una sociedad no puede sobrevivir la perversa manipulación de la estructura misma de la realidad que dios nos ha revelado, de la cual un elemento fundamental es la institución del matrimonio. El día que dejemos que ello ocurra, “será el fin”. […] la historia nos muestra fehacientemente a muchas sociedades, como la antigua Grecia, cuya rápida decadencia estuvo precedida por la proliferación del estilo de vida homosexual y su aceptación pública”.6
Es claro que estas ideas no provienen ni de estudios serios ni de pruebas científicas. Provienen muchas veces de prejuicios sostenidos en posiciones anti-derechos, que no entienden la igualdad de las personas ni que los derechos son para todos. ¿Cómo pueden estas ideas ser compatibles con la defensa de los derechos humanos? Pues para el sentido común y para el análisis erudito, de ninguna manera. Por el contrario, es evidente que estos grupos atacan los derechos humanos y vulneran la base de la democracia: la igualdad de las personas.
Av. José Pardo 601, Oficina 604, Miraflores, Lima 18, Perú. Teléfono: (511) 447-8668 / Fax: (511) 243-0460. www.promsex.org 6
http://www.vidahumana.org/news/27agosto2010.html#1
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