Proyectil surge, para cada uno de sus integrantes, como un equipo de trabajo en el cual apoyarse para proponer y concretar acciones en torno a la producción y circulación de arte y a la gestión cultural, y como dispositivo desde el cual preguntar/cuestionar/indagar.
Proyectil
lugar
de
encuentro,
de
propone
intercambio
y
un
de
ensayo; partir
de
algunas
imágenes
otras
un
pixeladas
poco
más
y
de
definidas;
idear/diagramar experiencias/situaciones en intentar
llegar
o
relación no,
a
al
arte;
acuerdos
incierto
de
final.
Proyectil es un grupo de jóvenes artistas-gestores de Tucumán integrado
por Pablo Díaz Lescano, Rocío Valdivieso y Solana Cajal. Funciona desde fines de 2016. Es un proyecto que se propone fomentar la producción y circulación de arte de contenido político, y discursar como tucumanos sobre el territorio propio, su historia y los procesos sociales que lxs atraviesan. Trabaja ocupando diversos espacios de forma temporal, dándole al contexto un papel fundamental a la hora de crear obra.
Es un dispositivo dinámico, orgánico y flexible.
Objetivos generales .Generar espacios de encuentro y dialogo entre diversos actores de la escena tucumana. .Producir vínculos con los actores culturales de otras escenas de nuestro país. .Promover la producción de obra a partir de estos encuentros. .Visibilizar la obra de artistas jóvenes, con criterio curatorial y de posicionamiento.
.Generar un andamiaje de capital humano, y económico que permita la perpetuidad del proyecto a largo plazo.
(S/T) SENSACIÓN TERMICA
marzo 2016
S/T (Sensación Térmica) fue una muestra que realizamos en nuestro papel de productores junto con otros compañeros a fines del año pasado. Fue una experiencia de ensayos, donde tratamos de metaforizar sobre la yuxtaposicion de dos realidades sociales críticas en la historia reciente de nuestro pais: Diciembre del 2001 y diciembre de 2015. La metáfora era armada alrededor de la idea del “calor tucumano”, y la
presencia permanente de la idea de caos latente o potencial. La muestra inauguró en La Sala; un espacio autogestionado que consiste en un cuarto de chapa ondulada, una casilla de herramientas by design en el patio de un hostel en Barrio Sur de San Miguel de Tucumán. Los artistas eran estudiantes o recientes egresados de la cátedra de Taller C de la Facultad de Artes de la U.N.T.: Adrián Sosa, Rocío Valdivieso, Pablo Díaz Lescano, Maximiliano Castro, Solana Cajal y Matías Zelarayán. Adrián Sosa
Calor ¿La o El? Cuando a la temperatura se le añade una alta humedad, la transpiración es el principal medio para disipar el calor corporal. La humedad ambiental alta dificulta la vaporación del sudor, por lo que la sensación de calor se incrementa, el ruido de las chapas inicia cuando comienza a levantarse los primeros vapores. esos , los que escapan de nuestra percepción. el ventilador revela una obsolescencia que algunos miran con incredulidad. Bien Pablo Díaz Lescano
podría ser a estas alturas, un fósil exhibido con orgullo en el museo de todas las cosas que hemos creado (con entusiasmo) y abandonado (sin mayor repaso) La reverberación del sol que llena los lugares trasforma el realismo pedestre en mágico. lo mas fuerte y vivo de una acción.
Rocío Valdivieso
Solana Cajal
Matías Zelarayán
Maximiliano Castro
Coche de la linea 18 incendiado sobre la Av. Independencia | 07.11.17
EL SONIDO QUE ILUMINA
marzo 2017
El sonido que ilumina fue la primera experiencia de gestión de Proyectil. Ésta acción consistió en una propuesta de activación de la Casa Coronel; un sitio de memoria, ubicado en Chacabuco 476, en Barrio Sur, San Miguel de Tucumán. Casa Coronel, fue el hogar de Marta Coronel y de su padre, Rolando, quienes fueron secuestrados en mayo de 1977; de Marta se supo que murió en el campo de concentración que funcionaba en la Jefatura Central de Policía, de Rolando
no se supo nada después de su secuestro. La casa fue ocupada por uno de los secuestradores de la familia y recuperada casi treinta años después. Desde el año 2003, este edificio está a cargo de la Secretaría de Derechos Humanos del Gobierno de Tucumán y, si bien, está abierto al público de lunes a viernes por las mañanas, desde hace años no se aprovecha el lugar como plataforma de actividades de ningún tipo.
Rocío Valdivieso
A partir de ello, e interpelados por el (des)conocimiento/el ánimo de conocer la historia por la que nos vemos atravesados, nos pararnos en esa casa como partida. Convocamos a Andrea Fernández, una artista y comunicadora tucumana que ha trabajado anteriormente en el área, desempañando funciones en la Biblioteca de Santa Lucía, pueblo que se vio devastado con el cierre de los ingenios tucumanos en el ‘66, y base de la guerrilla durante el Operativo Independencia Rocío Valdivieso
Andrea convocó a un grupo diverso que no sólo incluía artistas, sino también actores e investigadores, entre los que se encontraba Daniela Domínguez, tucumana estudiante de antropología en la UNC, que compartió con el grupo material correspondiente a su investigación y su archivo de relatos de habitantes de Santa Lucía, los cuales expresaban sus vivencias durante el cierre de los ingenios, la guerrilla y el posterior periodo del llamado “Proceso de Reorganización Nacional”. Solana Cajal
La sinestesia de la memoria (reseña de El Sonido Que Ilumina) ¿Cuán potente debería ser un sonido para sobrepasar su capacidad de ser oído? ¿O cuán extraño? La bomba nuclear que el ejército estadounidense lanzó sobre la ciudad de Hiroshima en 1945 dejó marcadas “sombras radioactivas” de personas y objetos sobre el asfalto y paredes, estampas directas de una luz destructora que sobrepasó los límites de la tecnología conocidos hasta entonces. “El sonido que ilumina” es resultado de la primera experiencia de trabajo de Proyectil, Solana Cajal
un reciente grupo de gestión en la escena de las artes visuales de Tucumán; por sí sólo, el título es un anzuelo y una invitación al autoengaño ¿Acaso existe un sonido tal que sea capaz de iluminar? La iluminación, invita el título a pensar, sería más bien figurada; podría ser el término elegido para atribuirse algún un carácter de poético. Pero es un buen anzuelo. El lugar elegido para desplegar esta maniobra artística fue la Casa Coronel, Pablo Díaz Lescano
un espacio dedicado a la Memoria que depende de la Secretaría de Derechos Humanos de la Gobernación, y el día, el 22 de marzo de 2017. A la noche, el pasillo de entrada de la Casa esperaba al visitante con un lienzo sobre el piso que tenía pintada la misma imagen del catálogo de la muestra, una fotografía que mostraba trabajadores del ingenio San José en una protesta. El dato de la imagen no es tan claro al inicio, entre el Pablo Díaz Lescano
gentío y el movimiento apenas se puede entender que hay un lienzo tendido en el piso, que prácticamente obliga al espectador a pisarlo. La acción sumamente común de caminar se volvía para el visitante en transgresora, casi violenta, porque no tenía otra posibilidad más que pasar por encima de aquella escena. La lucha social pisoteada por el presente, el pasado desdibujándose por debajo de las pisadas. Antonella Aparicio
Paulo Burgos
La primera sala esperaba con un video proyectado sobre una esquina, un pequeño plato con melaza en la esquina opuesta, una frase recogida de una fuente histórica y un sector descascarado de pared que por la oscuridad y la ubicación corría peligro de ser ignorado. La pared, ya parte de una obra, evidenciaba diferentes capas de pintura develadas por un raspado compulsivo del revoque, el cual se detuvo cuando apareció el primer color que esa pared tuvo alguna vez. La superposición
de momentos y de acciones. La superposición y el olvido. La pregunta y la recuperación. La siguiente sala también se había convertido en obra. Una gran lona verde claramente usada cubría enteramente una pared, extendiéndose brevemente por el piso, puesta pero acomodada, como disimulando su enorme tamaño. Otra pared era re-cubierta por un color rojo, en un movimiento reverso al de la primera sala simulaba la forma resultante del
Esteban Zelarayán
raspado, mientras que a la par un marco de un tono gris medio se extendía desde el techo hasta el piso señalando las tenues marcas de hojas A4 que el tiempo o algún otro fenómeno dejó grabadas sobre el blanco de la pintura propia del lugar. Cruzando una galería un video de tipo documental reitera no sólo la temática sino el verde de los cañaverales del primer video, de la lona, los recuerdos, las ruinas, el pasado. Una suerte de invasión respetuosa; Javier Juárez
el arte tomando la Casa en un acto poético a la vez que político, porque las frases, las imágenes, las proclamas, los gestos sobre el lugar, el día y las intenciones son categóricamente políticas, pero en su intento –y en su consecución- por ser arte se confunden con otras cosas que les exceden y sobrepasan. El pasado por fuera del límite del tiempo en el acto de estar y recordar. Romina Rosciano Fantino. Tucumán, abril de 2017
Sonia Ruiz
Cierre de EL SONIDO QUE ILUMINA
abril 2017
Sonia Ruiz
EL proyecto concluyó con la reapertura de la casa, pero con las obras levantadas. Lo único expuesto era el resto de la obra de Sonia Ruiz. Una replica de una foto de obreros de Santa Lucía protestando ante el cierre de los ingenios, hecho con carbonilla sobre lienzo crudo. La tela estuvo dispuesta durante la inauguración sobre el piso de la entrada de la casa, para que la gente la pise al entrar, lo que fue produciendo la desaparición del dibujo
Anexado a esto se armó un conversatorio entre los artistas y el publico, donde se planteó la necesidad de un Museo de la Memoria en Tucumán. Además se proyectaron cortos con temática de derechos humanos producidos por realizadores audiovisuales de Tucumán.
MERCADO DE ARTE CONTEMPORANEO EN CORDOBA
feria americana en el Estadio Monumental Jose Fierro
agosto 2017
El cese de las importaciones de ropa usada/donada por los países del norte para la reventa y la prohibición de ferias americanas ambulantes ha dejado sin fuente de trabajo a un sector conformado en gran parte por migrantes de países latinoamericanos vecinos. Proyectil se dispone reflexionar sobre esta situación, generando un paralelismo con distintas situaciones del mercado del arte. Nuestro proyecto incluye la compra del resto sin vender de los distintos
comerciantes de las ferias americanas, para posteriormente estampar mediante serigrafía dibujos de distintos artistas tucumanos que comparten estas acepciones sobre la problemática con nosotros. La ropa (¿la obra?) va a estar dispuesta sobre mesones en el stand, del mismo modo que en las ferias, y va a poder ser adquirida por el publico a un costo similar al que estaría en las mismas; planteándole al espectador la posibilidad de reflexionar sobre el arte, el mercado y sus diversos factores (la noción de autoría, el precio, la producción en serie, la autenticidad, etc.)
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