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Suárez Zabala, Leticia El contacto lingüístico en el centro de Asturias: ¿cambio de código o hibridación?
b. [ SC shénme i [ SF nĭ măi-le h i ]] (FL)
Llegados a este punto, surge la pregunta de por qué en chino los elementos interrogativos no se mueven en la sintaxis. En el siguiente subapartado veremos la respuesta que se ha dado a esta pregunta.
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2.4. Partículas interrogativas
En el subapartado 1.1 hemos indicado que en chino se añade la partícula interrogativa ma al final de las oraciones declarativas para convertirlas en oraciones interrogativas de sí o no, como en el ejemplo de (4a), lo cual no quiere decir que en las interrogativas de sí o no la partícula interrogativa ma sea obligatoria, ya que, si no aparece esta partícula, se usa una entonación ligeramente ascendente para distinguir las oraciones interrogativas de sí o no de las oraciones declarativas.
En japonés, existe una partícula obligatoria (no) que se usa tanto en las interrogativas totales (31a) como en las interrogativas parciales (31b). Como sabemos, el japonés, como el chino, es una lengua con los elementos interrogativos in situ.
(31) a. gakko-oni ik-u no? 9
escuela-a ir-PRES PART ‘¿Vas a la escuela?’ b. doko-ni ki-u no? dónde-a ir-PRES PART ‘¿Adónde vas?’
Al igual que el japonés, en chino, además de la partícula interrogativa ma, también existe la partícula ne, que se puede utilizar en las interrogativas parciales:
(32) Hufei măi-le shénme (ne) 10
Hufei comprar-PERF qué PART ‘¿Qué ha comprado Hufei?’
A la vista de estos datos, Cheng (1991) y Cheng y Rooryck (2000) relacionan el que existan partículas interrogativas en las oraciones interrogativas parciales en lenguas como el japonés y el chino con que los elementos interrogativos permanezcan in situ. Cheng y Rooryck (2000)
9 Los ejemplos del japonés de (31a) y (31b) están tomados de Cheng y Rooryck (2000: 24). 10 El ejemplo de (32) es de Cheng y Rooryck (2000: 3). Como indica este ejemplo, la partícula ne es opcional en las oraciones interrogativas parciales del chino. Cheng y Rooryck (2000) proponen que las partículas interrogativas de lenguas como el chino pueden ser expresas (en este caso, ne) o tácitas (partículas nulas).