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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL ECUADOR SEDE SANTO DOMINGO
Dirección Académica – Escuela de Enfermería
CONOCIMIENTOS DEL PROFESIONAL DE SALUD DEL SUBCENTRO AUGUSTO EGAS, ACERCA DE LA ATENCIÓN A PACIENTES CON VIH Trabajo de Titulación previo a la obtención del título de Licenciada en Enfermería.
Línea de Investigación: Salud y grupos vulnerables.
Autora: GÉNESIS DAYANA TORRES GARCÍA Director: Mg. SANTIAGO PAÚL BRAVO SÁNCHEZ
Santo Domingo – Ecuador Septiembre, 2020
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PONTIFICIA UNIVERSIDAD CATÓLICA DEL ECUADOR SEDE SANTO DOMINGO
Dirección Académica – Escuela de Enfermería
HOJA DE APROBACIÓN CONOCIMIENTOS DEL PROFESIONAL DE SALUD DEL SUBCENTRO AUGUSTO EGAS ACERCA DE LA ATENCIÓN A PACIENTES CON VIH
Línea de Investigación: Salud y grupos vulnerables. Autora: GÉNESIS DAYANA TORRES GARCÍA
Santiago Paúl Bravo Sánchez, Mg. DIRECTOR DE TRABAJO DE TITULACIÓN Melynn Grace Parcon, Mg. CALIFICADORA Ana Lucila Moscoso Mateus , Mg. CALIFICADORA Carlos Vicente Galarza Macancela, Mg. DIRECTOR DE GRADO PUCE-DS
Santo Domingo – Ecuador Septiembre, 2020
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DECLARACIÓN DE AUTENTICIDAD Y RESPONSABILIDAD Yo, Génesis Dayana Torres García portadora de la cédula de ciudadanía No. 172346879-7 declaro que los resultados obtenidos en la investigación que presento como informe final, previo la obtención del Grado de Licenciada en enfermería son absolutamente originales, auténticos y personales. En tal virtud, declaro que el contenido, las conclusiones y los efectos legales y académicos que se desprenden del trabajo propuesto de investigación y luego de la redacción de este documento son y será de mi sola y exclusiva responsabilidad legal y académica. Igualmente declaro que todo resultado académico que se desprenda de esta investigación y que se difunda tendrá como filiación la Pontificia Universidad Católica del Ecuador, Sede Santo Domingo, reconociendo en las autorías al director del Trabajo de Titulación y demás profesores que amerita.
Génesis Dayana Torres García CC. 172346879-7
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INFORME DE TRABAJO DE TITULACIÓN ESCRITO DE GRADO Fernando Lara Lara, PhD Dirección de Investigación y Postgrados Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Santo Domingo.De mi consideración,
Por medio del presente informe en calidad del director del trabajo de titulación de Grado de la Escuela Enfermería, titulado: Conocimientos del profesional de salud del Subcentro Augusto Egas acerca de la atención a paciente con VIH, realizado por la estudiante : Génesis Dayana Torres García con cédula: Nº 172346879-7, previo a la obtención del título de Licenciada en Enfermería, informo que el presente trabajo de titulación escrito se encuentra finalizado conforme a la guía y el formato de la Sede vigente.
Santo Domingo, 11/09/2020. Atentamente,
Santiago Paúl Bravo Sánchez Profesor Auxiliar I
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RESUMEN Introducción: El conocimiento del personal de salud del Subcentro Augusto Egas sobre la atención a pacientes con VIH es importante porque se encuentran en contacto con estos y su preparación para enfrentar esta patología debe dejar de lado los prejuicios sociales que existen entorno a estas personas. Metodología: Esta investigación se realizó desde el enfoque cuantitativo al personal del Subcentro Augusto Egas para conocer su percepción sobre VIH con una muestra de 46 profesionales. Se aplicó una encuesta estructurada por 20 items distribuidos en 3 dimensiones: conocimiento teórico, práctico y capacitación acerca de la enfermedad. Los datos se analizaron con el software IBM SPSS Versión 22 a través de tablas de frecuencia. Resultados: los datos reflejaron que el 80.4% de los encuestados siguen los protocolos de bioseguridad y protocolos asignados sin discriminación al momento de atender a los pacientes con VIH, el 97.8% ha recibido capacitaciones con lo que respecta a esta patología. Discusión: de las diferentes investigaciones encontradas se ha notado el cambio que existe con respecto a esta patología, con el paso del tiempo han disminuido los prejuicios y se les ha brindado una mejor atención siendo capaces de llevar un tratamiento y poder detener el progreso agresivo de esta enfermedad. Conclusiones: los conocimientos del personal de salud son altos, demostrando la buena práctica médica que existe en el Subcentro de salud brindando atenciones de calidad sin ningún tipo de discriminación a los pacientes inmunodeficientes y respetando los derechos de esta manera se desempeñan oportunamente y enfrentan esta enfermedad.
Palabras clave: Personal de salud; Conocimientos; Atención; Prejuicio; VIH
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ABSTRACT Introduction: The knowledge of the health personnel of the Augusto Egas Sub-center on the care of patients with HIV is important because they are in contact with them and their preparation to face this pathology must leave aside the social prejudices that exist around these people. Methodology: This research was carried out from the quantitative approach to the staff of the Augusto Egas Sub-Center to find out their perception of HIV with a sample of 46 professionals. A structured survey by 20 items distributed in 3 dimensions was applied: theoretical, practical knowledge and training about the disease. The data was analyzed with IBM SPSS Version 22 software through frequency tables. Results: the data reflected that 80.4% of the respondents follow biosafety protocols and assigned protocols without discrimination when treating patients with HIV, 97.8% have received training regarding this pathology. Discussion: from the different investigations found, the change that exists with respect to this pathology has been noted, with the passage of time, prejudices have decreased and better care has been provided, being able to carry out treatment and be able to stop the aggressive progress of this sickness. Conclusions: the knowledge of personnel health is high, demonstrating the good medical practice that exists in the Health Sub-center, providing quality care without any type of discrimination to immunodeficient patients and respecting their rights in this way, they perform timely and face this disease.
Keywords: Health personnel; Knowledge; Attention; Prejudice; HIV
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ÍNDICE DE CONTENIDOS 1.
INTRODUCCIÓN .............................................................................................. 1
2.
REVISIÓN LITERARIA .................................................................................. 4
3.
MÉTODOLOGÍA ............................................................................................ 13
3.1.
Enfoque, diseño y tipo de investigación ............................................................ 13
3.2.
Población y muestra ........................................................................................... 13
3.3.
Técnicas de recogida de datos ............................................................................ 13
3.4.
Operacionalización de las variables o categorías ............................................... 14
3.5.
Técnicas de análisis de datos.............................................................................. 15
4.
RESULTADOS ................................................................................................. 16
5.
DISCUSIÓN ...................................................................................................... 26
6.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES ............................................. 28
7.
REFERENCIAS ............................................................................................... 29
8.
ANEXOS ........................................................................................................... 32
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1.
INTRODUCCIÓN
El conocimiento sobre la atención de pacientes con el Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH) en el personal de salud ha evolucionado a lo largo del tiempo y ha atravesado diversos estadios que se han condicionado por múltiples razones (Fleitas, 2017). Entre estas se encuentra la estigmatización histórica de la enfermedad, su asociación con las prácticas homosexuales y las connotaciones morales hacia el enfermo. Sin embargo, estos prejuicios no han detenido el avance en los tratamientos antirretroviral y han dado mayor esperanza y calidad de vida a las personas que padezcan de esta infección (Mascort, 2020; Herrera, 2008). La calidad en el servicio del sistema de salud está relacionada con el nivel de conocimiento del personal de salud, particularmente en sujetos con enfermedades que tienen un estigma social como el VIH. Esta problemática se ha abordado desde distintos puntos de análisis desde la evaluación del sistema de salud hasta las estrategias educativas aplicadas al mejoramiento de la atención de personas con esta condición (Cedeño, 2014; Santana, 2013). El nivel de conocimiento del personal de salud se ha abordado ampliamente en el sistema público (MSP, 2018; OMS, 2017; ONUSIDA, 2015) y no tanto en el privado (CEMSIDA, 2017). Para la medición del nivel de conocimiento se han empleado diversos instrumentos como entrevistas a profundidad (Muñoz, 2018; Ramírez, 2020), percepción a través de la escala de Likert (Brito, 2019; Dueñas, 2019; Cedeño, 2020), e instrumentos estandarizados de ministerios (MSP, 2018). La posición del personal de salud ante un paciente con VIH es brindar información y educación oportuna para limitar el avance del virus además de brindar apoyo psicosocial (Escobar, 2017), así que se entenderá como actitud a la suma total de inclinaciones, sentimientos y prejuicios ( Muñoz, 2018), un conocimiento amplio acerca de la enfermedad, la experiencia en el tratamiento antirretroviral y una mejor sobrevida de dichos pacientes está más relacionada con una actitud positiva hacia esta enfermedad (Palencia, 2018). En Latinoamérica existen diversos estudios con respecto a la atención del paciente inmunodeficiente, donde se ve que el personal se enfrenta a una enfermedad muy estigmatizada la cual se les plantea como un reto (Sánchez, 2019; Villatoro 2019) sin embargo, se ha logrado derribar la barrera que existen entre el personal de salud y los pacientes y así lograr que este obtenga una atención digna y de calidad (Sánchez, 2018).
2 En Ecuador los primeros casos se detectaron en 1984, no obstante, en el año 2018 se notificaron 4.077 casos de VIH, y en un análisis geográfico de las provincias, se encuentra al Guayas con 27,99% de casos siendo esta la mayor cantidad seguida por pichincha con un 21,54%, a lo que respecta en Santo Domingo este se encuentra en octavo lugar con un 4,73% de contagiados (MSP, 2018). El rol que cumple el personal de salud es de vital importancia ya que al tener amplios conocimientos de esta enfermedad pueden brindar atención integral, prevención, detección de la misma, educación y reducir conductas de riesgo, en el contexto de Ecuador actualmente hay muy pocos estudios realizados de este tipo ni con respecto al conocimiento, atención y estigma por parte del personal encargado de la atención de estos pacientes (Muñoz, 2018), sin embargo en los que se encontraron demostraron que aún existe recelo por parte del personal de salud al entrar en contacto con pacientes con el virus del VIH en especial los más jóvenes demostrando que mientras más se conozca acerca de la enfermedad existen menos prejuicios (Egas, 2019). El estudio está enfocado en analizar los conocimientos acerca de la atención a pacientes con VIH en el personal de salud del Subcentro Augusto Egas, evidenciado así si estos cumplen con las normas, atención y protocolos respectivos tanto de los profesionales como el de los usuarios que atienden a diario con esta infección sin olvidar que la atención brindada debe ser de calidad y oportuna a toda la población satisfaciendo así sus necesidades en el ámbito de salud y respetando su derecho a la privacidad y no discriminación por dicha enfermedad. Esta investigación está realizada con base en los lineamientos de investigación pertenecientes a la PUCESD, que es la salud y grupos vulnerables, con el fin de infundir la buena salud incentivando a los profesionales sanitarios a mantenerse actualizados con respecto al VIH. Con lo que respecta al plan nacional de desarrollo 2017-2021 toda una vida, en relación al primer eje del Plan “derecho para todos durante toda la vida” Garantizar una vida digna con oportunidades igualitarias para todos. Por ello, mejorar la calidad de vida de la población ya que es un proceso multidimensional y complejo para las personas. Finalmente, tercer eje “más sociedad, mejor estado” promueve a la ciudadanía a consolidar una ética social basándose en la solidaridad y transparencia incluyendo servicios de calidad y calidez (Secretaria Nacional de Planificación y Desarrollo [SEMPLADES], 2017-2021). Se toma en cuenta esta patología por su impacto a nivel mundial ya que es un padecimiento que afecta a muchas personas al ser una enfermedad sin distinción de sexo, edad
3 o condición social, siendo este uno de los problemas prioritarios el área de la salud pública, se pretende conocer cuál es la actitud del personal de salud que se encuentra en contacto con pacientes inmunodeprimidos (Santiago, 2017), los conocimientos básicos acerca de esta enfermedad y si realizan capacitaciones para actualizarse sobre el VIH, con la finalidad de brindar información oportuna y así poder disminuir el estigma que existe en el personal para que estos no solo mejoren la calidad de sus cuidados si no también mejoren las condiciones de vida de los pacientes (Santana, 2013). Para la consecución de esta investigación se planteó la siguiente pregunta de investigación: ¿Cuál es el conocimiento del personal de salud referente a la atención en pacientes con VIH del Subcentro Augusto Egas? Además, se formularon 3 preguntas directrices: ¿Cuáles es la realidad social del personal de salud que atienden a pacientes con VIH del Subcentro Augusto Egas? ¿Cuáles son los procedimientos teóricos y prácticos sobre el VIH en el personal de salud que atiende a pacientes con esta patología? ¿Cuál es la formación y capacitación laboral que recibe el personal de salud para la atención a pacientes con VIH? Es por ello que se formuló el siguiente objetivo general Determinar el conocimiento del personal de salud referente a la atención en pacientes con VIH del Subcentro Augusto Egas. Y como objetivos específicos: Identificar la realidad social del personal de salud que atienden a pacientes con VIH del Subcentro Augusto Egas. Conocer los procedimientos teóricos y prácticos aplicados por el personal de salud sobre el manejo de pacientes con VIH. Describir la formación y capación laboral que recibe el personal de salud para la atención a pacientes con VIH.
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2.
REVISIÓN LITERARIA
Los profesionales de salud, tienen la responsabilidad y el compromiso de brindar a todos los usuarios una atención de calidad, sin importar diagnóstico las personas que viven con VIH buscan y esperan recibir cuidados de primer nivel (Cedeño, 2014). El VIH continúa siendo afectado por la estigmatización al igual que las patologías mentales y la discapacidad. Se asocia con estereotipos sociales, tanto positivos como negativos hacia un individuo, dejamos de verlo como una persona total y corriente para reducirlo a un ser aficionado y menospreciado. Los trabajadores de la salud tienen la responsabilidad y el compromiso de dar a todos los usuarios atención de buena calidad, sin importar su raza, religión, sexo, orientación sexual, diagnóstico y/o pronóstico, sin embargo, en los servicios de salud, donde las personas que viven con VIH buscan y esperan recibir atención y cuidados, comúnmente enfrentan problemas de estigma y discriminación (Dueñas, 2019). Una actitud es una disposición mental y neurológica, que se organiza a partir de la experiencia y que ejerce una influencia directriz o dinámica sobre las reacciones del individuo respecto de todos los objetos y a todas las situaciones que les corresponden (Acosta, 2006). Se puede definir una actitud como la tendencia o predisposición aprendida, más o menos generalizada y de tono afectivo, a responder de un modo bastante persistente y característico, por lo común positiva o negativamente (a favor o en contra), con referencia a una situación, idea, valor, objeto o clase de objetos materiales, o a una persona o grupo de personas. La actitud es nuestra respuesta emocional y mental a las circunstancias de la vida. (Muñoz, 2018). El conocimiento sobre la infección por VIH juega un papel importante en la promoción de salud y prevención de la enfermedad, debido a que un concepto o idea errónea sobre aspectos de la infección genera comportamientos de riesgo por parte de la población, principalmente de la población joven; el desconocimiento genera carencia de atención y la estigmatización de las personas infectadas, y de esta manera la discriminación asociada al VIH estimula la propagación de la misma debido a que el miedo al rechazo social fomenta la ocultación de la infección y esta ocultación dificulta el diagnóstico y el tratamiento, haciendo además que, en muchas ocasiones, continúen las prácticas de riesgo (Press, 2016).
5 Según Peter Piot, miembro fundador del comité ejecutivo del Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH (ONUSIDA) habla acerca de que la epidemia del sida aún no está superada y que sigue siendo una de las mayores amenazas para la salud mundial en nuestro tiempo (OMS, 2018). Siendo así que Enfermería debe proporcionar a estos usuarios cuidados de alta calidad e información oportuna poniendo de esta manera a prueba sus propios sistemas de valores, actitudes, conocimientos y percepciones acerca del VIH, pues la naturaleza del cuidado de enfermería aspira al respeto entre los seres humanos, teniendo en cuenta que la educación es una de las más grandes herramientas que se ha ido utilizando con disciplina a lo largo del tiempo, ayudando al área de salud a reducir las carencias de información que muchas personas tenían acerca de la enfermedad del VIH (Ramírez, 2020). Utilizando un conjunto amplio de conocimientos, para dar solución a un sin fin de dificultades o enfermedades oportunistas que pueden llegar aparecer con la detección de esta patología y poder conllevar acciones a realizar para solucionar tales complicaciones (Lamotte, 2014). Por lo cual uno de los principales problemas radica en que hay muchas personas que, por diversos motivos, no son capaces de tratar este tema con los profesionales y seguramente, la información que reciben del exterior no sea la adecuada. Es por ello que los profesionales deben tener habilidades y recursos adecuados para llegar a tratar este tema como cualquier otro sin ningún tipo de rechazo o discriminación hacia este tipo de pacientes (Tito, 2013; Villatoro, 2019). La asistencia a pacientes seropositivos origina elevados niveles de estrés y preocupación por la posibilidad de contraer el VIH, aunque esto funciona como un factor de protección frente a la infección. Observar el aprecio del paciente por el cuidado recibido y la satisfacción de saber que se han proporcionado cuidados de alta calidad a los usuarios origina una repercusión positiva en los profesionales de la salud. Las actitudes de enfermeros dirigidas hacia pacientes con VIH han experimentado una ligera mejoría durante los últimos años debido a la empatía, conocimientos y actitudes acerca de la educación previa en VIH y experiencia en el cuidado de seropositivos (Santana, 2013). Aquellos que utilizamos en nuestra vida cotidiana, y nos permite acceder en el mundo que nos rodea de forma inmediata a través de la experiencia (Cedeño, 2014). Estableciendo métodos dirigidos al personal de enfermería se aplicarían la relación al paciente VIH teniendo en cuenta: características personales y laborales, prueba de actitudes y prueba de conocimientos, evaluando así si el personal tiene los conocimientos necesarios ya sean
6 generales o específicos para que no existan riesgos biológicos del personal de salud merecen especial atención, por la diversidad de agentes etiológicos presentes en el microclima laboral. Agentes como bacterias, virus, hongos y priones pueden ocasionar enfermedades profesionales que en gran medida son prevenibles. El riesgo de contagio por VIH debe ser especialmente considerado en el personal de enfermería, que continuamente tiene exposición a sangre y otros fluidos que contienen a este agente. Por lo anterior es importante que el personal de enfermería conozca los mecanismos de contagio del VIH y cumplan cabalmente las normas de bioseguridad establecidas (Brito, 2019). Este conocimiento, no tiene orígenes claros y corresponde al patrimonio que ha sido heredado y trasmitido a través de generaciones. Se aprende y se aplica, a la solución de problemas, sin cuestionar el procedimiento realizado (Herrera, 2008). Los conocimientos se refieren a lo que se sabe con seguridad que corresponde notoriamente a la realidad. También se dice del proceso de percepción y de pensamiento que nos da el conocimiento de cosas. Conocer algo es siempre referir lo que era desconocido a algo conocido. Por último, la percepción es definida como la entrada en la conciencia de una impresión sensorial llegada previamente a los centros nerviosos. La percepción social, específicamente, es la percepción de las relaciones interhumanas (Villatoro, 2019). Llevando a tener unos sistemas de ideas organizadas, coherentemente y por incluir todo conocimiento parcial, en un conjunto cada vez más amplio. Dando a conocer la definición de bioética dada por la enciclopedia, que la cataloga como el estudio sistemático de la conducta humana en el ámbito de las ciencias de la vida y del cuidado de la salud, examinada a la luz de los valores y de los principios morales. El objeto material de esta es el proceder de las personas ante la vida. Ahora bien, el actuar humano puede ser reconducido al saber y al obrar estrictamente entendidos (uso del saber), resultando en el respeto por los derechos y preservando la vida de los pacientes (Fleitas, 2018). El conocimiento de divulgación se trasmite a través de revistas o libros de difusión y se expone después de que ha sido sometido a una crítica de las teorías expuestas; cuando ha sido calificado por su aporte a las ciencias y al conocimiento científico (Palencia, 2018). La obligación del médico a la confidencialidad constituye un pilar en la relación médico paciente. La intimidad es un valor ético y jurídico amparado por la Constitución Nacional y en medicina es donde adquiere máxima sensibilidad. Se ha reconocido la importancia del secreto médico
7 para estimular al paciente a hablar con entera libertad y para eso es necesario asegurarle que su información no será revelada sin su consentimiento (Escobar, 2017). En el Instituto de Investigación del Sida IrsiCaixa presenta, conjuntamente con la Obra Social "la Caixa", un programa de divulgación científica y prevención del sida dirigido a estudiantes de secundaria que tiene como objetivo difundir los conceptos básicos en torno al VIH, así como la investigación en este campo, para fomentar tanto la prevención de la enfermedad como nuevas vocaciones científicas (Press, 2016).
La actitud como estado psicológico interno constituye la mayor dificultad para su estudio y determinación de manera directa, sin embargo, existe consenso en considerar su estructura de dimensión múltiple como vía mediante la cual se manifiestan sus componentes expresados en respuestas de tipo cognitivo, afectivo y conativo. La coexistencia de estos tres tipos de respuestas como vías de expresión de un único estado interno (la actitud), explica la complejidad de dicho estado (Mascort, 2020; Palencia, 2018). Los componentes que condicionan la actitud del personal de salud frente a los pacientes de VIH son: cognitivos, incluyen el dominio de hechos, opiniones, creencias, pensamientos, valores, conocimientos y expectativas (especialmente de carácter evaluativo) acerca del objeto de la actitud. Destaca en ellos, el valor que representa para el individuo el objeto o situación; afectivos, son aquellos procesos que avalan o contradicen las bases de nuestras creencias, expresados en sentimientos evaluativos y preferencias, estados de ánimo y las emociones que se evidencian (física y/o emocionalmente) ante el objeto de la actitud (tenso, ansioso, feliz, preocupado, dedicado, apenado), y conativos, muestran las evidencias de actuación a favor o en contra del objeto o situación de la conducta-actitud. Cabe destacar que éste es un componente de gran importancia en el estudio de las actitudes que incluye además la consideración de las intenciones de conducta y no sólo las conductas propiamente dichas (Villatoro, 2019). Todos tenemos determinadas actitudes ante los objetos que conocemos, y formamos actitudes nuevas ante los objetos que para nosotros son también nuevos. Una vez formada, es muy difícil que se modifique una actitud, ello depende en gran medida del hecho de que muchas creencias, convicciones y juicios se remiten a la familia de origen. En efecto, las actitudes pueden haberse formado desde los primeros años de vida y haberse reforzado después. Otras
8 actitudes se aprenden de la sociedad, como es el caso de la actitud negativa ante el robo y el homicidio; por último, otros dependen directamente del individuo (Mascort, 2020). Hoy en día escuchamos con frecuencia que algunos centros de salud se diferencian de otros, a través de una atención adecuada al paciente, mucha gente lo llama excelencia en el servicio, o simplemente, buen servicio. Resulta obvio, para que los pacientes se formen una opinión positiva, se debe satisfacer sobradamente todas sus necesidades y expectativas, es lo que se ha dado en llamar servicio excelente (Cedeño y Marmolejo, 2014) Por tanto, si satisfacer las expectativas de los usuarios es tan importante como se ha dicho, entonces es necesario disponer de datos específicos sobre los pacientes, que contengan aspectos relacionados con sus necesidades, con los atributos en los que se fijan para determinar el nivel de calidad conseguido, se está convirtiendo en nuestros días en un requisito imprescindible para competir en todas las instituciones de salud ya sean públicas o privadas, ya que las implicaciones tienen en cuenta los resultados, tanto a corto como a largo plazo. De esta forma, la calidad del servicio se convierte en un elemento estratégico que confiere una ventaja diferenciadora y perdurable (Acosta, 2006; Cedeño y Marmolejo, 2014). Un servicio es una actividad o conjunto de actividades, de naturaleza casi siempre intangible, que se realiza a través de la interacción entre el paciente y el servidor público y/o instalaciones físicas de servicio, con el objeto de satisfacer un deseo o necesidad (Gerardo, 2018), La calidad de los servicios depende de las actitudes de todo el personal que labora en el Hospital de Quevedo. El servicio es en esencia, el deseo y convicción de ayudar a otra persona en la solución de un problema o en la satisfacción de una necesidad. El personal en todos los niveles y áreas debe ser consciente de que el éxito de las relaciones entre la Institución y cada uno de los pacientes depende de las actitudes y conductas que observen en la atención de sus demandas (Cedeño y Marmolejo, 2014). La trascendencia biopsicosocial del diagnóstico del VIH exige del profesional de la salud en su correspondiente nivel de atención, manejar con solvencia los aspectos científicotécnicos, así como éticos sociales, los cuales deben ser considerados en la evaluación de toda persona antes, durante y después del tratamiento. La persona con VIH se enfrenta con muchos problemas: primero, el estigma social que confronta el individuo afectado; segundo, el sufrimiento y el dolor, y tercero, el temor a la muerte (Egas, 2019).
9 Al atender a estas personas es principio fundamental reconocer la insuficiencia y la limitación propia de la ciencia para esta enfermedad, respetar las necesidades sociales, culturales, psicológicas etc. de los enfermos entendiéndolo como nuestro semejante, enfrentando un problema común, respetar la condición humana, la propia autonomía y la vida y la muerte humana. Es esencial establecer una buena relación médico-paciente desde un comienzo a fin de optimizar la asistencia que se ofrece (OMS 2016; OPS 2015; PRONASIDA, 2015). Los profesionales deben tener en cuenta los siguientes derechos de los pacientes para su tratamiento. Derechos humanos, que basan sus principios morales y legales como: derecho a ser tratado como un ser humano: todo usuario debe ser atendido con el debido respeto y consideración, independiente de su edad, sexo, condición social, credo político o religioso, raza o nacionalidad; derecho a tener acceso a toda la información acerca de su estado de salud: el paciente debe tener acceso a una información completa, detallada y actualizada sobre su diagnóstico, tratamiento y pronóstico, así como las posibles consecuencias negativas o efectos adversos que podrían ocurrir por el procedimiento escogido en cualquier momento que él lo solicite, todo esto en un lenguaje simple y de fácil comprensión. Si fuese un niño, o una persona con problemas mentales o cuyo estado de salud está muy deteriorado como para que esté totalmente lúcido para tomar decisiones, entonces esta información debe ser suministrada a los familiares o personas responsables. El médico debe tener siempre presente que el usuario tiene todo el derecho a recibir información completa antes de dar su consentimiento para aceptar el tratamiento propuesto u otra recomendación. La comunicación de la verdad debe ir precedida por una evaluación clínica objetiva (OMS, MSP y OPS, 2017). Son medidas preventivas que se efectúan en las casas de salud para proteger la salud tanto como del proveedor como del paciente, disminuyendo el riesgo de transmisión de microorganismos, los cuales están presentes en mayor cantidad en el área hospitalaria. El personal de enfermería está expuesto a varios factores de riesgo, ya que es una disciplina enfocada al cuidado del paciente, teniendo en cuenta el contacto directo con los mismos ya sea sangre, fluidos corporales, secreciones o tejidos y manipulación de instrumental contaminado, todo esto es potencialmente infeccioso (Villatoro, 2019). Hay una alta probabilidad de accidentes por riesgo biológico en las prácticas clínicas, puede estar determinado por la falta de habilidad y de destreza exponiendo así al personal a adquirir enfermedades infecciosas importantes, como el VIH, la Hepatitis B y C, entre otras.
10 Siendo así que es importante que el personal de enfermería conozca y utilice las normas de bioseguridad, siendo así que al usarlas realiza una doble protección tanto el o la profesional como el paciente, con el fin de resguardar la integridad física, cumpliendo con los objetivos de las prácticas clínicas con el menor número de riesgos. La aplicación de las normas de bioseguridad debe involucrar a todos los pacientes de cada uno de los servicios, independientemente de conocer o no su serología. Las barreras de protección como los guantes permiten evitar la exposición directa con la sangre y otros fluidos orgánicos que son contaminantes (Campillay, 2019; Ramírez, 2020). Es una exigencia que deviene del desarrollo social y que como tendencia es deseable porque garantiza mayor calidad en el desempeño profesional. Es el resultado de un proceso de formación continua que exige no solo una elevada preparación teórica en las disciplinas y asignaturas que imparte, sino también en las cuestiones de la Didáctica de la Educación Superior, que le permitan elevar la calidad en el proceso de enseñanza-aprendizaje universitario (Huera, 2019). La formación en el contexto laboral profesionaliza al estudiante al contribuir a desarrollar en éste el conocimiento, las habilidades, destrezas, actitudes y valores que están presentes, hoy día, en la profesión médica. Pero también puede desprofesionalizar, ya que existe una dificultad para plantear prácticas educativas en todos y en cada uno de los contextos asistenciales en los que los residentes se forman. La presión asistencial y otros factores ligados a la organización sanitaria y su gestión en ocasiones interfieren en la interacción entre tutores/facultativos y estudiantes. Este clima lleva, en ocasiones, a que tutores y facultativos olviden que son docentes y que los estudiantes son profesionales en formación (Acosta, 2006). El VIH infecta a las células del sistema inmunitario, alterando o anulando su función. La infección produce un deterioro progresivo del sistema inmunitario, con la consiguiente "inmunodeficiencia". Se considera que el sistema inmunitario es deficiente cuando deja de poder cumplir su función de lucha contra las infecciones y enfermedades. El Sida es un término que se aplica a los estadios más avanzados de la infección del virus y se define por la presencia de alguna de las más de 20 infecciones oportunistas o de cánceres relacionados con el VIH (Brito, 2019). Esta patología puede transmitirse por las relaciones sexuales vaginales, anales u orales con una persona infectada, la transfusión de sangre contaminada o el uso compartido de agujas,
11 jeringuillas u otros instrumentos punzantes. Asimismo, puede transmitirse de la madre al hijo durante el embarazo, el parto y la lactancia (OMS, 2020). Un individuo infectado por este virus tarda de 3-6 meses hasta que desarrolla anticuerpos; ya que el llamado periodo de ventana. Es decir que dicha fase de tiempo puede variar considerablemente de unos individuos a otros. La mayoría de las personas infectadas por el VIH, si no reciben tratamiento, desarrollan síntomas de enfermedades relacionadas con la enfermedad a los 5 o 10 años, pero el ciclo de tiempo que transcurre desde que la persona se infecta por el virus hasta que se diagnostica como sida puede ser de 10 a 15 años, a veces incluso mayor (Brito, 2019). Diagnóstico Durante las 4 a 8 semanas siguientes a la exposición al VIH, la prueba es negativa porque el sistema inmunológico aún no ha desarrollado anticuerpos frente al virus. En general, las distintas pruebas de laboratorio que se utilizan para detectar la infección por el virus de la inmunodeficiencia humana pueden clasificarse en directas e indirectas, según si se intenta demostrar la presencia del virus o de sus constituyentes (proteínas y ácidos nucleicos) o bien la respuesta inmunitaria (humoral o celular) por parte del 22 huésped. Pero las pruebas más utilizadas por los laboratorios para determinar la presencia del SIDA es la prueba de ELISA y la de Western Blot, mediante estos métodos se puede afirmar con toda certeza si el paciente es portador del virus VIH/SIDA/TBC (Cedeño, 2014). Existen enfermedades oportunistas, se las llama de esta manera debido a que estos pacientes se encuentran con un sistema inmunológico que no se puede defender ni proteger al organismo, siendo que este sea vulnerable ante otras enfermedades tanto así que los enfermos con SIDA no fallecen debido a la infección por el propio virus, sino como consecuencia de la aparición de diversos agentes infecciosos que están presentes de forma habitual en el medio ambiente y que en circunstancias normales no provocan enfermedad como por ejemplo la tuberculosis, la neumonía, infecciones provocadas por bacterias del tracto gastrointestinal también pueden cursar con diarrea, pérdida de peso, anemia, anorexia, fiebre y de algún tipo de tumor (Fleitas, 2018). La infección por el VIH y el diagnóstico del sida aun constituyen unos de los mayores problemas de salud pública en el mundo. De ahí que su vigilancia epidemiológica tenga gran prioridad. El objetivo de la vigilancia es cuantificar la magnitud de la epidemia y definir las características de la población afectada, en particular en relación con las formas de contagio del virus. Los distintos factores sociodemográficos, culturales, económicos y políticos de cada zona determinan la diferente evolución de la epidemia en las distintas áreas geográficas del
12 planeta. La epidemia ha ido creciendo exponencialmente en muchos países, así como extendiéndose a todas las áreas del planeta que inicialmente no se habían visto afectadas, y hoy puede hablarse de pandemia del VIH. En los países más afectados ya se han producido descensos importantes en la esperanza de vida por esta causa (Huera, 2019; Lamotte, 2014). Actualmente, a pesar del incremento del número de casos en todo el mundo, ciertos países muestran una estabilidad como resultado de las campañas educativas y el trabajo de promoción en la prevención del VIH. La cantidad de hombres infectados es mayor que la de mujeres, pero estas se mantienen con un aumento progresivo. El comportamiento sexual y el de número de casos por uso de drogas endovenosas, se mantiene con un incremento en todos los países. De forma general, el número de ingresos hospitalarios por complicaciones asociadas y la mortalidad por sida han disminuido como consecuencia del progreso del tratamiento antirretroviral y el uso más racional de la quimioprofilaxis de las infecciones oportunistas que más incidencia tienen en estos pacientes (Muñoz, 2018). La única forma de saber si una persona tiene o no el virus es analizando su sangre y su posterior diagnóstico. Las pruebas de descarte o pruebas rápidas, son utilizadas por tener una alta sensibilidad y especificidad. Pero el resultado obtenido con estas pruebas no es concluyente (Fleitas, 2018). El Tratamiento Antirretroviral de Gran Actividad (TARGA) es un tratamiento que brinda el Ministerio de Salud (MSP) SITIO como una de las mejores estrategias costo efectivas para los pacientes con VIH-SIDA, debido a que reduce la mortalidad, las hospitalizaciones, la incidencia de infecciones oportunistas y el cáncer, promoviendo así el uso de servicios de salud y mejora en la calidad de vida (Lamotte, 2014). Actualmente, se considera que el tratamiento más eficaz para luchar contra el VIH es la combinación de tres medicamentos, dos análogos de los nucleótidos (inhibidores de la transcriptasa inversa) y un inhibidor de la proteasa. Aunque estas combinaciones pueden dar lugar a importantes efectos secundarios, cuando se usan con precaución es posible reducir los niveles del virus en sangre (carga 24 viral) hasta cifras prácticamente indetectables. La carga viral debe determinarse de forma periódica entre 1 y 6 meses. En la actualidad se está llevando a cabo ensayos clínicos de terapia intermitente con resultados esperanzadores (Dueñas, 2019; Herrera, 2008).
13
3. 3.1.
MÉTODOLOGÍA
Enfoque, diseño y tipo de investigación El enfoque de la presente investigación es cuantitativo ya que involucra un proceso de
estudio numérico los mimos que tienen fundamentos estadísticos, con el fin de obtener información específica del tema en discusión por medio de encuestas las cuales analizarán e interpretarán de manera estadística, por medio de sus respectivas tabulaciones, con el objetivo de establecer los conocimientos en la atención a pacientes con VIH (Hernández, 2014). El diseño que será empleado en el estudio es tipo no experimental, transversal ya que las variables no se manipulan intencionalmente, y se limitará a la observación de los fenómenos tal y como son en su ambiente natural basándose en datos literarios (Hernández, 2014). La investigación descriptiva permitirá analizar el conocimiento acerca de la atención del personal de salud con los pacientes que presenten VIH. Buscando especificar propiedades, características y perfiles de las personas, mediante estas realizar un diagnóstico e identificar la atención brindada por parte del personal de salud; correlacionando las variables, es decir si el conocimiento está ligado al accionar de los profesionales.
3.2.
Población y muestra El grupo de estudio está conformado por profesionales de medicina, enfermería y
auxiliares de enfermería en las distintas áreas del Subcentro Augusto Egas, el cual utilizó una muestra de 46 profesionales de las distintas áreas del subcentro. De tal manera que, la investigación permitirá describir y analizar el conocimiento acerca de la atención a pacientes con VIH. (Sampieri, Fernandez y Baptista, 2010).
3.3.
Técnicas de recogida de datos Para la recolección de datos se solicitó un permiso a la institución donde se realizó el
estudio (ver anexo 3) realizando encuestas personales al personal de salud el cual contó con su consentimiento informado (ver anexo 4). Para determinar el conocimiento acerca de la atención a pacientes con VIH, se realizó un cuestionario que fue previamente validado por 3 expertos que colaboraron con la examinación del cuestionario, dos profesionales de la Pontificia Universidad Católica del Ecuador Sede Santo Domingo (ver anexo 5 y 6) y un
14 médico especialista del Hospital General del IESS (ver anexo 7). Se recolecto la información de forma personal e individual en un tiempo estimado de 30 minutos para poder completar el cuestionario planteado, más adelante se reunió los instrumentos de recolección de datos siendo verificada que estas hayan sido respondidas (ver anexo 8). La encuesta se estructuró de tres partes: la primera, se enfocó en recolectar datos de la realidad social del personal de salud la cual está conformada por 5 ítems; la segunda, estará constituida por preguntas de conocimiento teórico respecto al VIH, y la tercera, por conocimiento práctico en la atención y por último la realización de capacitaciones, de la escala de actitud ante el SIDA para enfermería (EASE) validada por Tomás-Sábado en el año 2003, se utilizó la EASE en una escala tipo Likert.
3.4.
Operacionalización de las variables o categorías
Tabla 1 Matriz de operalización de las variables sobre la actitud y conocimiento del personal de salud del Subcentro de Salud Augusto Egas
Variables dependiente
Dimensión/es operacional
Indicadores
Importancia del lavado de mano
Bioseguridad
Uso de barreras
Medios de eliminación de material contaminado
Conocimiento
VIH/SIDA por parte del de
Rutas de trasmisión
Vigilancia epidemiológica
Consentimiento informado
Toma de muestra
Prueba de identidad
práctico
en atención al paciente con
personal
salud
Subcentro Augusto Egas
del
Procedimental
15
Variables
Dimensión/es operacional
Indicadores
independiente
Sociodemográficas
Edad del personal
Género del profesional
Grado académico
Comunicadora
Empatía
Facilitadora
Colaboradora
Confidencialidad
Respeto
Tolerancia
Justicia
Equidad
Honestidad
Atención a pacientes con VIH por parte del personal de salud del Centro Augusto Egas
Habilidades
Valores
3.5.
Técnicas de análisis de datos Para lo que corresponde al procedimiento y análisis de información que será recolectada
por encuesta, se utilizará el programa IBM SPSS Statistics for Microsoft Office Professional Plus 2013, Versión 1.5, que es una técnica de análisis completo, donde se procede a elaborar una base de datos la cual será analizada respectivamente con los resultados que se describan a través del análisis estadístico el cual describirá y arrojará datos de frecuencia y porcentaje los que serán agregados en tablas de contingencia, las cuales serán diseñadas en el software Microsoft Office Excel 2013, Versión 1.5, llevando así a la presentación de datos.
16
4.
RESULTADOS
Se entrevistó a 46 profesionales de la salud del Subcentro Augusto Egas, de los cuales el 48.3% que representa la mayoría y estuvo conformado por profesionales que promedian una edad de más de 31 años seguido del 38,3%, con profesionales de entre 26 a 30 años y finalmente el 13,3%, con profesionales de entre 20 a 25 años (ver tabla 1). Tabla 1 Edad del profesional de salud Intervalos
Frecuencia Porcentaje
20-25
8
13,3
26-30
13
38,3
31-en adelante
25
48,3
Total
46
100,0
Por otro lado, y en cuanto al género del personal encuestado, se pudo determinar que, el 63,3 por ciento que representa la mayoría de la población es de género femenino sin embargo el 36,7%; es decir la minoría ese género masculino (ver tabla 2). Tabla 2 Género del personal encuestado Ítems
Frecuencia Porcentaje
Femenino
29
63,3
Masculino
17
36,7
Total
46
100,0
En cuanto al grado académico del encuestado se pudo obtener que la mayoría de la población con un porcentaje del 43,3% mencionaron que son licenciadas de enfermería, seguidas del 28,3% el cual los cuales mencionaron que posee un título de médico general por otro lado el 18,3% tiene un título de auxiliar en enfermería y finalmente la minoría que está representado por el 10% es un médico especialista (ver tabla 3).
17 Tabla 3 Grado académico del encuestado Grado académico
Frecuencia Porcentaje
Lic. Enfermería
24
43,3
Auxiliar de enfermería
9
18,3
Médico general
10
28,3
Médico especialista
3
10,0
Total
46
100,0
También se pudo conocer el tiempo de servicio de los profesionales en esta área con lo cual se determinó que el 47,8% es decir la mayoría de la población tiene un tiempo de entre 6 a 10 años de servicio en esta institución de salud seguido del 37% quienes mencionaron que tienen hasta 5 años de servicio sin embargo el 10,9% manifestaron que tienen un servicio de entre 10 a 20 años en esta institución y finalmente el 4,3% afirmó que tiene más de 21años prestando sus servicios en esta institución de salud (ver tabla 4 ). Tabla 4 Tiempo de servicio como profesional Años de servicio
Frecuencia Porcentaje
Hasta 5 años
17
37,0
De 6 a 10 años
22
47,8
De 11 a 20 años
5
10,9
De 21 a más años
2
4,3
Total
46
100,0
Finalmente, se pudo conocer el área en la que desempeña cada uno de los profesionales de la salud, obteniendo así que, la mayor cantidad de la población que representaron el 30,4% mencionaron que pertenecen al área de emergencia seguido de 28,3% quienes representan a consulta externa, mientras que el 15,2% es del área de obstetricia, seguido del 13% que pertenecen al área de preparación; mientras que el 4,3% pertenecen al laboratorio y el 6,5 al área de vacunas finalmente el 2,2% siendo la minoría que pertenecen al área de control de ITS (ver tabla 5 ).
18 Tabla 5 Área en la que desempeña su trabajo Área de trabajo
Frecuencia Porcentaje
Emergencia
14
30,4
consulta externa
13
28,3
Laboratorio
2
4,3
Vacunas
3
6,5
Obstetricia
7
15,2
Preparación
6
13,0
control de ITS
1
2,2
Total
46
100,0
Con la finalidad de medir el nivel de conocimientos de estos profesionales se optó por desarrollar 5 preguntas de las cuales se pudo obtener que en relación a, qué es imprescindible para preservar la bioseguridad se pudo determinar que el 80,4% es decir la mayoría de la población mencionó qué es necesario tomar en cuenta todas las opciones que se presentaron para esta pregunta; cómo son tomar las medidas de prevención, seguir el protocolo asignado, buenas prácticas y tener identificación de la enfermedad del paciente; sin embargo el 13% manifestó que sólo es necesario tomar las medidas de prevención y finalmente el 6,5% es decir la minoría dijo que hay que seguir los protocolos asignados (ver tabla 6). Tabla 6 Para preservar la bioseguridad es imprescindible Importancia
Frecuencia Porcentaje
Tomar medidas de prevención
6
13,0
Seguir protocolos asignados
3
6,5
Buenas practicas
0
0
Tener identificación de la enfermedad del
0
0
paciente Todas las anteriores
37
Ninguna
0
Total
46
80,4 0 100,0
19 En lo concerniente a cuál es la mejor medida de bioseguridad se pudo determinar que el 97,8% que representa a la mayoría de la población afirmó que se debe tomar en cuenta la asepsia, desinfección, lavado de manos, limpieza, y autoprotección; sin embargo, la minoría que estuvo representado por el 2,2% afirmó que sólo se debe lavar las manos (ver tabla 7). Tabla 7 Cuál cree usted que es la mejor medida de bioseguridad Medidas
Frecuencia Porcentaje
Asepsia
0
0
Desinfección
0
0
lavado de manos
1
2,2
limpieza
0
0
Autoprotección
0
0
todas las anteriores
45
Ninguna
0
Total
46
97,8 0 100,0
Por otro lado se puede apreciar lo que el personal de salud nos dice acerca de que si cree que el VIH es un problema de todos en la comunidad, donde se pudo determinar que el 97,8% mencionó que sí, y una minoría de sólo el 2,2% nos respondió que no (ver tabla 8). Tabla 8 Cree usted que el VIH es un problema de todos en la comunidad Problemática
Frecuencia
Porcentaje
Si
45
97,8
No
1
2,2
Total
46
100,0
A lo que respecta en cuanto a cómo se debe manejar el material quirúrgico utilizado en un paciente inmunodeficiente, se ha determinado que el 65,2% afirma que se lo debe poner en solución desinfectante y esterilizar. Sin embargo, el 23,9% mencionó que debe esterilizarse en autoclave, seguido del 8,7% quienes mencionaron que se debe desechar y finalmente sólo el 2,2% mencionó que se lo debe flamear (ver tabla 9).
20 Tabla 9 El material quirúrgico utilizado en un paciente con VIH (porta agujas, pinzas, tijeras) deberá Material quirúrgico
Frecuencia
Porcentaje
Esterilizarse en autoclave
11
Fregarlo con detergente
0
0
Flamearlo
1
2,2
Ponerlo en solución desinfectante y esterilizar
30
65,2
Desecharlo
4
8,7
Colocarlo en recipientes impermeables
0
0
Ninguna
0
0
Total
46
23,9
100,0
En cuanto a cuál es el procedimiento que se debe seguir con el material de desecho que se utiliza con pacientes con VIH como pueden ser, algodón, gasa o papel con lo que se pudo determinar que el 82,6% mencionó que se los debe colocar en el cesto de desechos infeccioso; seguido en el 10,9% quienes mencionaron que se los debe poner en un lugar visible una etiqueta informando los posibles residuos específicos que contiene, seguido del 4,3% quién le dijeron que se debe identificar y envasar los desechos generados y finalmente sólo el 2,2% afirmó que se los debe incinerar (ver tabla 10 ). Tabla 10 El material de desecho utilizado con un paciente con VIH (algodón, gasa, papel) deberá Material desechable
Frecuencia
Porcentaje
Identificación y envasado de los desechos generados
2
4,3
Incinerarse
1
2,2
Colocarlo en el cesto de desechos infecciosos
38
82,6
Poner en un lugar visible una etiqueta informando los
5
10,9
Ninguno
0
0
Total
46
posibles residuos específicos que contienen
100,0
21 Para poder precisar el conocimiento práctico se desarrollaron 5 preguntas; con lo que se pudo decidir que en relación a la práctica de atención médica todos los profesionales que trabajan en esta institución de salud han llegado a prestar sus servicios asistiendo a pacientes con VIH positivo (ver tabla 11). Tabla 11 En su práctica médica Ud. ha asistido a un paciente con VIH positivo Asistencia
Frecuencia
Si
46
No
0
Total
46
Porcentaje 100,00 0 100,00
Estableciendo la reacción que estos profesionales obtuvieron durante su experiencia, al atender a pacientes con VIH por lo que, el 58,7% respondió que tuvo una reacción de amabilidad, mientras que el 26,1% nos comentó que tuvo compasión, seguido de un 13% quienes comentaron haber sentido nerviosismo al encontrarse con estos usuarios, y finalmente el 2,2% respondió que tuvo curiosidad (ver tabla 12). Tabla 12 Si la respuesta anterior fue SI conteste la siguiente pregunta: ¿qué reacción le produjo? Sensación a la atención
Frecuencia
Porcentaje
Rechazo inmediato
0
0
Ansiedad
0
0
Hostilidad
0
0
Curiosidad
1
2,2
Compasión
12
26,1
Amabilidad
27
58,7
Nerviosismo
6
13,0
Total
46
100,0
En lo concerniente a si existen disponibilidad de suministros para el lavado de manos se puedo determinar que el 82,6% ha mencionado que sí existe el alcohol gel como principal avituallamiento en el centro de salud. Sin embargo, el 17,4% alegó que existe jabón bactericida (ver tabla 13).
22 Tabla 13 Existe disponibilidad de suministros para el lavado de manos tales como Suministros
Frecuencia
Porcentaje
Agua corriente
0
0
Jabón bactericida
8
17,4
Toallas de papel
0
0
Gel alcohol
38
82,6
Total
46
100,0
En cuanto, a así los encuestados como personal de salud se preocupan por el confort y privacidad de los pacientes con VIH, se obtuvo que el 84,8% siempre mantienen el bienestar de estos usuarios; mientras que el 15,2% comentó que a veces prestan la comodidad hacia estos enfermos (ver tabla 14). Tabla 14 Usted como personal de salud, se preocupa por el confort y privacidad acerca del paciente con VIH Confort
Frecuencia
Porcentaje
Siempre
39
84,8
A veces
7
15,2
Rara vez
0
0
Nunca
0
0
Total
46
100,0
En cuanto a si sentirían inconformidad al realizar una exploración física a un paciente VIH positivo; se obtuvo que el 82,6% respondió que no. Sin embargo, el 4,3% afirmaron que sí han llegado a sentirse incomodos al momento estar con estos pacientes, mientras que el 13% da una respuesta a que tal vez sintieron inquietud (ver tabla 15).
23 Tabla 15 ¿Sentiría incomodidad al realizar una exploración física a un paciente VIH positivo? Exploración física
Frecuencia
Porcentaje
Si
2
4,3
No
38
82,6
tal vez
6
13,0
Total
46
100,0
Para tener conocimiento en cuanto a las capacitaciones del personal, se pudo conocer que la mayor cantidad de la población afirmó que si recibió capacitación, la misma que estuvo representada por el 97,8% siendo seguida por un 2,2% que mencionó que no ha realizado algún tipo de capacitación acerca del VIH (ver tabla 16). Tabla 16 ¿Ha recibido alguna capacitación acerca del VIH?; si la respuesta es positiva responda la pregunta 4.2 y 4.3 caso contrario diríjase a la pregunta 4.4 Capacitación recibida
Frecuencia
Porcentaje
Si
45
97,8
No
1
2,2
Total
46
100,0
A lo que respecta qué tipo de capacitaciones fue la que recibió, se pudo determinar que el 52,2% que representan la mayoría mencionaron que obtuvieron una capacitación en el trabajo seguido del 17,4% quienes mencionaron que obtuvieron capacitación para el trabajo; no obstante, el 13% manifestó que tuvieron capacitación por campaña seguido del 10,9% quienes mencionaron que tuvieron capacitación por medios propios y finalmente el 6,5% afirmó que fue una capacitación de inducción (ver tabla 17).
24 Tabla 17 ¿Por parte de quién recibió la capacitación? Recibe capacitación
Frecuencia
Porcentaje
Capacitación para el trabajo
8
17,4
Capacitación en el trabajo
24
52,2
Capacitación de inducción
3
6,5
Capacitación por campaña
6
13,0
Capacitación por medios propios
5
10,9
Total
46
100,0
En lo concerniente a cuánto tiempo se recibió la capacitación acerca del VIH/SIDA, se pudo obtener como resultado que el 95,7% ha mencionado que se capacita anualmente es decir cada año, mientras que el 4,3% mencionó que se prepara semestralmente, es decir cada 6 meses (ver tabla 18) Tabla18 ¿Cada cuánto tiempo recibe o se capacita acerca de la enfermedad del VIH/SIDA? Tiempo de capacitación
Frecuencia
Porcentaje
Cada mes
0
0
Cada 6 meses
2
4,3
cada año
44
95,7
Total
46
100,0
En cuanto a si les gustaría recibir capacitación acerca del VIH/SIDA, se pudo determinar que el 100% es decir toda la población mencionó que sí estarían dispuestos a ser capacitados con respecto al tema de esta enfermedad (ver tabla 19). Tabla 19 ¿Le gustaría recibir algún tipo de capacitación acerca del VIH/SIDA? Capacitarse actualmente
Frecuencia
Si
46
No
0
Total
46
Porcentaje 100,00 0 100,00
25 Por otro lado y en cuanto a si es de su interés esta temática para ser capacitado, con lo que se determinó que el 71,72% manifestó que tiene interés por temas de VIH; sin embargo, el 28,3% mencionaron que tienen poco interés por estos temas del VIH (ver tabla 20). Tabla 20 ¿Qué tema es el que más le gustaría conocer o ser capacitado? Temas de interés
Frecuencia
Porcentaje
Interés en temas de VIH
33
71,7
poco interés en temas de VIH
13
28,3
Total
46
100,0
26
5.
DISCUSIÓN
La atención de las personas VIH positivas no es de mayor complejidad o distinta a la requerida por los sujetos VIH negativos debido a que, el protocolo de control de infecciones rige para todo paciente que recibe atención clínica. No obstante, y para el caso de las personas positivas, el tratamiento oportuno que se brinde sirve para prevenir infecciones relacionadas con mayor énfasis en las que guardan relación con la sobrecarga del sistema inmunológico (Dueñas, 2019). Determinando que el personal que labora para este subcentro de salud, presentan una amplia experiencia acerca del virus del VIH a pesar que se desempeñan en distintas áreas del centro de salud, y también tomando en cuenta que ofrece una área específica para los pacientes con esta patología, a diferencia del estudio realizado por (Cedeño, 2014; Mascort, 2020); donde se mencionó sobre el nivel de conocimiento en la atención a pacientes con inmunodeprimidas realizada a estudiantes y docentes, donde se encontró que los estudiantes tenían poco conocimiento acerca de la atención a pacientes inmunodeprimidos mientras que los docentes encuestados se encuentran en un nivel bueno de conocimientos en la atención a pacientes con VIH, y que solo una parte de los docentes tiene un bajo conocimiento acerca del tema, dándonos a conocer que, de los estudiantes, la mayoría presentaron un bajo nivel de conocimiento acerca de la atención a pacientes inmunodeprimidos y por otro lado los educadores con mayor porcentaje son los que tienen un alto nivel de conocimiento en tema. En lo que respecta a la atención a pacientes con VIH, el personal demostró que su conocimiento teórico acerca de las medidas a tomar sobre la bioseguridad es imprescindibles para preservar el autocuidado y demostrando que esta enfermedad es una problemática de todos en la comunidad. Sin embargo, un mínimo porcentaje de los profesionales no estuvo de acuerdo con que sea así. Por otro lado, en el estudio realizado por (Egas, 2019; Escobar, 2017) donde se menciona acerca de la calidad del cuidado enfermero con respecto a los pacientes que padecen esta patología, las cuales tienen educación superior de tercer nivel, presentando experiencia laboral superior mayor a los 5 años siendo estas las que tienen cuidado directo hacia estos pacientes, la función que desempeña el personal de enfermería es correspondiente a la formación continua como profesionales. En cuanto al desarrollo del presente estudio, se pudo verificar que el personal ha recibido capacitación anualmente, acerca del virus de VIH siendo estos capacitados en el
27 trabajo en el cual se encuentran desempeñados, y la mayor parte del personal presento interés acerca del tema con relación a esta enfermedad. Sin embargo, los que han recibido ya estas capacitaciones demostraron poco interés al momento de realizar una aportación de algún tema en específico del cual ser capacitado. Ante esto, es imprescindible mencionar el estudio realizado por (Campillay, 2019; Ramirez, 2020), donde manifiesta la importancia de las capacitaciones acerca del cuidado a pacientes con VIH/ SIDA, así como lo imprescindible de tener conocimientos teóricos y prácticos sobre el cuidado a estos pacientes, ejecutando normas y protocolos; así como es la formación psicológica y emocional del enfermero/a que se encuentra al cuidando de estos pacientes, realizando actividades en la atención donde demuestra la consideración y respeto en la práctica profesional, en lo que respecta en las actividades del profesional que se encuentre al cuidado de estos pacientes cumpliendo con las normas de bioseguridad. Finalmente, mencionar el gran aporte que conllevo en el desarrollo de este proyecto, puesto que al haberse podido cumplir con los objetivos del mismo, se demuestran varios punto de interés para esta temática en el subcentro de salud, puesto que se determinó el nivel de experiencia con el que cuentan los profesionales de salud, así como de la importancia de tener conocimientos en cuanto al manejo de los pacientes con VIH positivo, por lo que se puede concluir que este proyecto fue positivo para la sociedad y pudo obtener resultados estaditos de suma importancia, entre otros aspectos fiables y favorables.
28
6.
CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
Se llegó a la conclusión de que el personal de salud que labora en el Subcentro de salud Augusto Egas presenta conocimientos adecuados acerca de la infección por VIH ya sea por la experiencia en el desarrollo laboral y mostrando una actitud positiva frente a pacientes que han sido diagnosticados por esta patología enfrentándose a esta de manera adecuada y siendo éticos con los usuarios que lleguen a recibir de la atención de cada profesional que desempeña en las distintas áreas de la institución, sin prejuicios o estándares de discriminación no obstante los profesionales que poseen conocimientos correctos, actitudes positivas y autoeficacia al tratar la infección por VIH, es preciso fortalecer estrategias que refuercen algunos conceptos y comportamientos favorables frente al virus siendo esto necesario para las intervenciones dirigidas a la población que accede a los servicios que presta el personal de salud, con la finalidad de propiciar actitudes y capacidades en el autocuidado de la comunidad, llevando a cabo los protocolos estandarizados de bioseguridad con todos los pacientes tomando las medidas de prevención y manteniendo así la buena práctica médica. Tomando en cuenta la realidad social del personal ya que la mayor parte son personas de 31 años estos mantienen conocimientos avanzados, por todos los cambios que se han dado desde el brote del virus y las estimas que existieron en el pasado ahora no presentan prejuicios hacia los pacientes immunodeficientes demostrando que su profesionalismo y educación a la hora de prestar sus servicios. Brindan información adecuada gracias a la preparación que tienen y las atenciones que estos han facilitado en tanto que su desempeño como profesionales de salud en conjunto a cada una de las áreas donde atienden a los pacientes, ya que toman acciones que promueven a la práctica, seguridad, atención oportuna, derechos de los pacientes y expresando su disposición al conocer mucho más sobre el virus del VIH reconociendo la gravedad de esta enfermedad incurable y mortal, demostrando de esta manera que no solo les brindan capacitaciones en el centro de salud donde se desempeñas si no que a la vez también han realizado capacitación de manera privada demostrando el avance que hay como sociedad en lo que respecta a la atención de calidad sin prejuicios o discriminaciones manteniendo la ética como profesionales de salud. Recomendando el continuar con capacitaciones al personal que es admitido en el Subcentro no solo con el personal médico, enfermero y auxiliar si no también estudiantes que se desempeñan en la institución y se encuentran en contacto con los pacientes que presenten esta enfermedad.
29
7.
REFERENCIAS
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32
8.
ANEXOS
Anexo 1. Cronograma
N.ACT.
CRONOGRAMA
1
Desarrollo del Plan
2
Ejecución del Proyecto
3
Elaboración del marco teórico
4
Aplicación de instrumentos
5
Elaboración de la propuesta de intervención
6
Constatación de los resultados
7
Elaboración del informe final de tesis
8
Disertación del grado
ABR MAY
JUN JUL AGO
SEP
OCT
NOV
DIC
33 Anexo 1. Tabla de recursos
Recursos
Valor total
Valor unitario
Cantidad
USD
GASTOS Humano Estudiantes*
1
0
Costos Operacionales (materiales)** hojas
1500
0,08
120
750
0,05
37,5
Carpetas
4
0,35
1,4
Transporte
5
0,4
2
10
3
30
Anillados de borradores
6
2
12
Inversiones (tecnológicos)** Cartuchos Tinta
5
15
75
Pen drive
1
6
6
3
20
60
10
Copias
Comida
Gestión (mes)** Internet
Reproducción de escritos º Informe Final (Anillado)
2
5
Cd´s
4
0,5
Subtotal Imprevistos 5% TOTAL:
2 355,9 17,80 373,70
34 Anexo 3. Permiso del distrito de salud
35 Anexo 4: Modelo de encuesta aplicada a los sujetos que forman parte de la muestra
36 Anexo 5: Validaciรณn del instrumento de colecta de informaciรณn por parte de expertos: sujeto 1
37
38
39 Anexo 6: Validaciรณn del instrumento de colecta de informaciรณn por parte de expertos: sujeto 2
40
41
42 Anexo 7: Validaciรณn del instrumento de colecta de informaciรณn por parte de expertos: sujeto 3
43
44
45 Anexo 8: Registro fotogrรกfico sobre el proceso de recolecciรณn de informaciรณn