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Una labor, un personaje...

condimentos y frutos secos, viajando primero en micro y bus, luego con los ahorros adquirir un “autito”, llegando después a ser dueño de un camión, labor a la que luego se sumó su esposa.

Y es en esos viajes que realizaba, mientras ella cerraba negocios, que sacaba su cuaderno y se dedicaba a escribir poemas, registraba lo que veía y la vez, recordaba su niñez: todo esto lo plasmaba en el papel.

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SUS DOS OBRAS LITERARIAS

Don Juan trabajó hasta los 80 años. En el 2015, fallece su esposa, y es en ese momento, que, como una forma de escape, vuelve a retomar la escritura, recordando a su amada. Es su yerno, Mauricio, que el 2019, al enterarse de los escritos de su suegro, lo anima a publicar algo, por lo cual lo ayuda económicamente, dando a luz su primer libro de poemas y cuentos, titulado “Las Mentiras ciertas del Lilo”. “Ahí me di cuenta de que nunca es tarde para hacer lo que uno se propone en la vida. Siempre me gustó escribir, y editar mi primer libro, en esta etapa de mi vida, fue algo emocionante”, señala don Juan. Pero no se detuvo ahí, pues ingresó luego a un taller de literatura de la municipalidad, puliendo sus habilidades narrativas, y este 2023, apoyado por la Corporación Cultural de Puente Alto, recientemente ya tiene en sus manos su segundo libro, a sus 90 años, el que se lanzará oficialmente este próximo 8 de junio en la Casa de la Cultura Juan Estay: “El Porteño con cinco nombres”, en la que narra sus historias bajo los distintos seudónimos con los que fue conocido en su vida.

En la presentación de su nueva obra, espera que los vecinos y vecinas puedan acompañarlo en ese día tan especial para él.

Como un “puentealtino por adopción” se define don Juan Marengo Villalón, quien llegó a la comuna a vivir junto a una de sus hijas y su yerno hace ya unos 5 años. Oriundo de Valparaíso, hoy, a los 90 años, acaba de publicar su segundo libro, una autobiografía que narra su vida desde sus primeros años en el Puerto Principal hasta el matrimonio con su esposa, ya radicado en la capital.

“Tuve una infancia bien humilde, por muchos años no pude ir al colegio, y me acuerdo de que a los 9 años le comenté a mi padre que no quería ser más pobre, por lo que me dijo que trabajara, y así es como mi primer empleo fue de colero en una fábrica de muebles”, recuerda don Juan, quien de niño ya iba documentando en en su mente todo lo vivido hasta ese momento.

Dice que soñaba por esos tiempos en viajar a Santiago, donde el “tío rico”, hermano de su madre, que tenía unas bodegas en la Vega Central. Es así como a los 15 años llegan a buscarlo, comenzando de esta forma a trabajar en La Vega y a la vez, cursa sus estudios: un esfuerzo doble que le pasó la cuenta con el tiempo, pues el cansancio dice era abrumador, tomándose un respiro en cierta forma cuando ingresa al Servicio Militar en el Regimiento de Buin, donde dice “lo pasó muy bien”, pues fue “una pausa” en su ajetreada vida hasta la fecha.

Es así como continuó posteriormente trabajando con su tío, e ingresa a la vez a estudiar canto lírico, pues afirma que el arte “siempre le atrajo”, llegando a integrar un coro, donde él era barítono, presentándose incluso en el Teatro Municipal. Fue por esos mismos años, y en esta actividad, que conoció a quien sería su futura esposa, de quien se enamoró perdidamente y tuvo con ella 4 hijos.

Cuenta que su señora tenía por esos años una pequeña empresa de plásticos, y que él luego se independizó y se dedicó a ser comerciante, siendo proveedor de negocios y locales tanto de Santiago como de regiones, con venta de productos como

TALLER LITERARIO «LA ROCA»

Dirección: Magdalena Medina Arenas

UNA CANA EN UN MOMENTO DE MI VIDA

¡Arre caballito! ¡Arre caballito! ¡Arre caballito!

Mi hijo de casi 3 años encima de mi espalda gritaba a todo pulmón y saltando encima, como un jinete experto... Y yo corcoveando y relinchando para que realmente se sintiera real y mi hijo felízzzzzzzzzz.

De pronto silencio y quietud de mi hijo...yo seguía como un caballo y me quedé quieta de un momento a otro.... ¿Hijo que pasa? ¿Estás bien?

¡¡¡Mamáaaaaaaaaaaaaaaaaa!! ¡Mamáaaaaa Yo ¿Qué te pasóooooooooooooooo hijo?

Pensando que mi hijo se había lastimado con mis corcoveos, rápidamente lo saqué de mi espalda y lo miré y toqué por todos lados. ¿Te golpeaste, qué pasa?

Mamá te estás poniendo viejita, me dice con la voz más triste que habían escuchado mis oídos. Yo no entendía nada.¿Viejita yo? Me falta mucho hijo. Cuéntame, ¿qué pasó mientras jugábamos? Mami tienes un pelo blanco ahí arriba, en la cabeza del caballo...

Han pasado los años y mi hijo hoy con 23 años, le encontré una cana en su cabeza, le cuento y me contesta.....Mami, de tal palo tal astilla.

El Rinc N Del Papill N

ESTUVE MALITO, PERO ESTOY MEJOR

Somos seres humanos, no máquinas, los cuerpos se cansan y se enferman y es lo que esta vez me tocó a mí.

Como todos los años una pequeña dolencia me lleva al hospital y de ahí rumbo a mi triste hogar a luchar en mi lecho de enfermo, contra la gripe, la que me atacó muy fuerte; tuve que luchar, tomando remedios recetados por los médicos y profesionales de la salud.

Pero en mi lecho de enfermo tuve que vivir y enfrentar a la triste realidad de comprobar una vez más, que en la cárcel y en el hospital se pierden los verdaderos amigos, por ahora solo destacar la presencia y gran preocupación de nuestro querido periódico “Puente Alto al Día”, con su director y amigo Víctor Hugo Rojas, quien una vez más estuvo junto al guerrero herido. Una vez más, gracias de corazón querido amigo, ojalá los verdaderos amigos fueran así, para que nuestro país vuelva a vivir con amor y no con tanta maldad y violencia.

En esta nueva y difícil oportunidad, en mi lecho de enfermo, tuve mucho tiempo para pensar en toda mi querida familia, los que están en el cielo y las que están conmigo, las penas y gran tristeza de tener a uno de mis hijos, Juan Luis Hernández. en prisión. Pero, es hombre como yo, no llora, no grita, solo cumple su condena junto a sus amigos que son sus fieles compañeros de este largo y triste encierro.

Pensar también en nuestra querida población que ya cumple el siglo de vida y todavía no llega la justicia que tanto merece, una población de verdad con viviendas solidas y verdaderas, para terminar, viviendo en forma digna y como seres humanos.

Nuestro noble alcalde Germán Codina y sus verdaderos guerreros sociales, hoy tienen la palabra, y la agradecemos de corazón.

EXTRACTO

Ante Juzgado de Policía Local de Melipilla, ubicado en calle Merced N° 905, Rol 2.349-2018-2, caratulados “Gustavo Andrés Pizarro Abarca y otro con Víctor Manuel Pinto Pozo”, se rematará el próximo 23 de junio de 2023, a las 12:00 horas, inmueble ubicado en la comuna de Puente Alto, calle Luis Emilio Recabaren N° 0560, que corresponde al sitio N° 16 de la manzana P, y tiene una superficie aproximada de doscientos diez como cero seis metros cuadrados, que deslinda: AL NORTE, Juan Madrid Ibarra, sitio quince, Manzana P, en veinte metros separado por cerco; AL ESTE, Sucesión Avelina Contreras, sitio ocho manzana P, en diez coma treinta metros separados por cerco; AL SUR, Luis Valdivia Morales, sitio diecisiete, manzana P, en veintiuno como diez metros separados por cerco; AL OESTE, calle Luis Emilio Recabarren, en diez coma cincuenta metros. El inmueble se encuentra inscrito a fojas 5959 vuelta número 8113 del Registro de Propiedad del Conservador de Bienes Raíces de Puente Alto, correspondiente al año mil novecientos noventa y cuatro.- Por el mínimo de $ 39.526.206.- que corresponde al avalúo fiscal del inmueble Rol S.I.I. 777-011, comuna Puente Alto; El precio se pagará en dinero en efectivo y al contado, dentro del quinto día siguiente a la subasta; los interesados deberán presentar dinero en efectivo o comprobante de depósito en cuenta contable transitoria en la Tesorería de Municipal de Melipilla, por el equivalente al diez por ciento del mínimo fijado para la subasta. Demás bases y antecedentes en la Secretaría del Tribunal. La Secretaría.

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