Revista CincoW #48

Page 1

47 AÑO XVI Nº 48 JULIO DE 2018 OCTUBRE

EDICIÓN ESPECIAL EL QUÉ, DÓNDE, CUÁNDO, QUIÉN Y POR QUÉ DE LA INFORMACIÓN

10:30 AM

100%

Acá

hay algo

más

> deslizar para desbloquear

Descargá la app Wikitude:

En el campo de búsqueda escribí “CincoW”. Enfocá en las páginas donde veas el logo.

Nueva ley Investigación

Educación Informe especial

Menos chicos Métricas e para adopción información

Alumnos Consumo al poder de medios

Se prioriza la revinculación Cómo los contenidos condicionan denegocio los niños familias el decon lassus noticias. de origen. (Páginas 10 y 11) (Páginas 2 y 3)

La era digital propicia Nuevos líderes de opinión educativas de etécnicas identidad colectiva. vanguardia. (Páginas 4 y 5) (Páginas 4 y 5)


EDICIÓN ESPECIAL

Valores y vocación por comunicar Dra. Liliana Pantano Decana de la Facultad de Ciencias Sociales

C

onocer cómo se estudia Comunicación en la UCA supone familiarizarse primero con algunos datos de la Facultad de Ciencias Sociales en la que se cursan sus carreras. Y descubrir que está compuesta por 1850 alumnos y aproximadamente 350 docentes, que se distribuyen en los niveles de grado y de posgrado; que hay más alumnas mujeres que alumnos varones, particularmente en alguna carrera (Publicidad, por ej.); que la matrícula se ha mantenido en crecimiento en los últimos años lo que la ha convertido en una de las Facultades más pobladas de la Universidad y que los estudiantes se reparten en Educación, Historia, Ciencias Políticas, Relaciones Internacionales, Sociología y… Comunicación. Y que la Facultad cuenta, además, con una Escuela de Política y Gobierno (a cargo de la extensión universitaria) y con un Laboratorio de Medios -Media Lab- (con un centro de Radio y Televisión). En ese ámbito universitario, alimentado por la interdisciplina y la exigencia académica de grado y posgrado, se desenvuelven cerca de 750 estudiantes (40 % del total) , inscriptos en las Carreras de Comunicación Publicitaria e Institucional, Comunicación Periodística y Comunicación Digital e Interactiva y que, luego, pueden seguir formándose en la Maestría de Comunicación Audiovisual (MACA). Se trata de carreras con orientación altamente profesional, con elevada participación en los medios y con una larga lista de premios recibidos por equipos de alumnos y docentes que confirman una tradición de trabajo colaborativo, de originalidad y de creatividad. Los alumnos de Comunicación de la UCA si bien transitan los procesos de enseñanza y de aprendizaje propios de sus planes de estudio, fundamentalmente, son movidos por la curiosidad de pre-

guntar por lo que pasa en el mundo, promover el bien común en instituciones de todo tipo o difundir sus relatos y opiniones con las nuevas herramientas digitales. Las técnicas de comunicación están regadas por la tecnología y los alumnos de comunicación de la UCA no quedan a la zaga de estudiantes de ninguna otra universidad. Sí tienen una marca diferencial, una alta empleabilidad con que son distinguidos nuestros graduados por su formación y destrezas, que posicionan a la UCA entre las primeras en esta categoría dentro del índice QS. Y esa marca diferencial tiene que ver con los valores, con la vocación por comunicar la verdad dentro de un marco ético y con una mirada comprometida con el bien y la búsqueda del reconocimiento de la dignidad humana. Ser alumno de Comunicación en la UCA, desde un punto de vista trascendente es habitar “una casa común” (Laudato Si), entender y aprender a apreciar tanto al mundo natural como al mundo humano que lo habita, comprometiéndose con su cuidado, creciendo en conocimiento, pero también en respeto por el otro y en solidaridad. Ser alumno de Comunicación en la UCA, desde un punto de vista sencillo y cotidiano es cruzarse en los pasillos, en los bares de la universidad y en las calles aledañas con profesores y alumnos de distintas carreras que tienen objetivos diversos; es poder asistir a conferencias y exposiciones de profesionales destacados que traen su visión del mundo y de sus quehaceres, participar de programas digitales armados con distintos dispositivos, tener experiencias de radio o televisión; en suma, gestionar un mundo multimedial que enamora y desafía. Es, de una u otra manera, sentirse acompañado y orientado -no determinadopara descubrir y alimentar la propia vocación, esa parte hermosa de la vida que nos hace felices al convertirnos en lo que realmente sentimos que somos, a través del interés por comunicar y el compromiso de servir.

CincoW es una publicación de distribución gratuita editada por Departamento de Ciencias de la Comunicación y Periodismo de la Facultad de Ciencias Sociales de la UCA, realizada por sus alumnos. Director de la Carrera de Periodismo: Hernán Cappiello. Coordinación General: Gabriela Granata. Diseño y diagramación: Ricardo Gabriel Díaz. Agradecimiento a los profesores Susana Crosa y Miguel Massenio, a la agencia Magma, la productora Tehuelche y el canal Crónica HD Idea de contenidos digitales: Soledad Arreguez Manozzo Producción de Contenidos Digitales: Rafael Clariana Infografia: Camila Genovesi y Paulina Iribarne Diseño de tapa: Luis Casanovas y Juan Manuel González Herra. Impresión: Ricardi Impresos

Seguinos en puntoconvergente.uca.edu.ar OCTUBRE 2018 | 2 |

El impacto de los modelos de negocios sobre la producción de contenidos periodísticos Una investigación realizada entre julio y agosto en la Licenciatura de Comunicación Periodística de la UCA aborda el debate sobre los contenidos y cómo están condicionados por la preferencia de las audiencias. ¿Quién define lo que se debe publicar?

Mg. Jorge Liotti

Y

a lleva más de veinte años el largo proceso de transformación de los medios gráficos como consecuencia de la expansión de la actividad digital. Entre sus múltiples implicancias hubo una vertiente que fue de las que más impactó en el desarrollo de la actividad periodística: la correlación entre un modelo de negocio que sea sustentable para el nuevo entorno y su efecto en el tipo de contenidos periodísticos a producir. Hubo en líneas generales dos esquemas, con innumerables variables intermedias (incluyendo el modelo de fundrising, que prosperó en algunos países desarrollados): uno abierto, con acceso a los contenidos periodísticos irrestricto basado en la sustentabilidad comercial que aporta la publicidad; y otro cerrado con acceso reducido a los contenidos apoyado en el ingreso generado por las suscripciones. El primero promovió una serie de contenidos muy voluminoso, pero también efímero, en búsqueda de una masividad de audiencias que atrajera a los anunciantes. Se pensó que se reemplazarían los antiguos ingresos de precio de tapa y publicidad impresa por el flujo que aportaría una publicidad digital atraída por la gran cantidad de usuarios que se mudaron a la web. Sin embargo, con el correr de los años la publicidad no despegó y nunca llegó a superar el 15% de los ingresos totales de las compañías que apostaron por este esquema. No sólo atentó contra ese modelo la falta de tradición de pago por noticias en la web sino también el estilo invasivo de la mayoría de las publicidades digitales y la falta de una estrategia más segmentada, no tan atada al viejo modelo generalista “one add fit all”. Pero fundamentalmente influyó la aspiradora de avisos que son Google y Facebook, que concentran a nivel mundial entre el 70 y el 80% de la publicidad. Su base de datos customizada y su conocimiento milimétrico de sus audiencias se transformaron en herramientas mucho más eficaces para los anunciantes a la hora de pautar. En consecuencia, en los últimos años se generalizó el esquema de muros de pagos de distinto tipo, que en los hechos implicó mutar la apuesta

comercial del ingreso publicitario al ingreso por suscripciones o pago por contenido. Esto derivó en un nuevo replanteo sobre el tipo de material periodístico a producir, ya que el usuario sólo está dispuesto a pagar por un servicio diferencial, que se eleve por sobre las noticias a las que puede acceder libremente en otros sitios. Al mismo tiempo, el modo de medir el impacto varió del simple seguimiento del clickeo a monitoreos más sofisticados de métricas que incluyeran el nivel de satisfacción de las audiencias. El modelo por suscripción tiene ejemplos notables de éxito no sólo en casos emblemáticos de diarios de Estados Unidos, como el The New York Times y el Washington Post, sino también en los países escandinavos, pioneros en la materia, o incluso en mercados más cercanos, como Brasil, donde los principales diarios cobran por suscripción, o en México, donde el periódico Reforma fue uno de los primeros en adoptar el mecanismo de pago. En la Argentina el desarrollo de un mercado por suscripción luce incipiente entre los principales actores, con Clarin y La Nacion lanzados desde hace un año al cobro por contenidos, e Infobae aún con un modelo gratuito. Pero como el esquema no está totalmente desarrollado y el muro de pago no es todavía totalmente sustentable, se abrió un largo período de transición, en donde hay etapas más restrictivas para el acceso a los contenidos (posibilidad de leer menos notas hasta chocar con el muro de pago) y otros más flexibles. Esta transición obliga a tener en cuenta algunos condicionantes que han impactado fuertemente en las dinámicas de producción de contenidos. En primer lugar, la fuerte disputa por el control de la agenda pública. La mayor capacidad de las audiencias de elaborar sus propias dietas informativas puso en el centro de discusión el proceso de toma de decisiones periodístico que gira en torno de un dilema central: ¿Quién define lo que se debe publicar, el interés del público o el criterio profesional? Según un reciente estudio global del Reuters Institute Digital News Report, realizado en 37 países, un 54% de las audiencias prefieren informarse a partir de la selección realizada por algoritmos que priorizan las preferencias de las audiencias, y un 44% por decisiones editoriales. Sin embargo, hay una distinción para hacer. Si el modelo de acceso a contenidos es abierto y gratuito, la incidencia de la audiencia es decisiva. Hay


EDICIÓN ESPECIAL

que producir las notas que son más demandadas porque el objetivo es claramente la masividad. Pero en el caso de los esquemas cerrados, podría ser más equilibrado. Una diagonal interesante es la que ha explorado el diario sueco Svenska Dagbladet, que utiliza un doble sistema. Por un lado, las métricas tradicionales; y por el otro, un editor le asigna a cada historia una calificación que varía del 1 al 5 en función del valor noticioso que considera que tiene la pieza. De este modo le añade a la jerarquización que automáticamente realiza el algoritmo una opinión editorial que evalúa la relevancia informativa del contenido. Asumiendo que cualquier modelo exitoso en la era digital debe tomar en cuenta las preferencias de las audiencias, un interrogante clave pasa por encontrar una respuesta que no anule el rol social de los medios y su aporte al sistema democrático, toda vez que en líneas generales las preferencias de consumo masivo están acechadas por dos fuerzas intensas: la primera, la tendencia al entretenimiento; la otra, la tendencia a la polarización. Y esto inevitablemente genera una tensión: ¿Cómo adaptar los contenidos de mayor valor informativo a los intereses de la audiencia, y viceversa? Y en todo caso, ¿vale la pena acercarlos o la división de modelos de negocios también marca una división en el tipo de contenidos?

selectivo. Cuando se clasifican las notas entre breaking news (noticia de irrupción abrupta), noticias commodities (no son exclusivas, pueden estar en otros portales), valor agregado (nota propia del medio, análisis, enfoques, etc.) y producción especial (material que requirió en su elaboración una investigación o una apuesta visual más desarrollada), la distinción es más clara. Por ejemplo, en términos de valor agregado y producción especial, que serían las categorías propicias para los que apuntan a la suscripción, Clarin sube a diario 19,2 notas en la primera categoría y 1,3 en la segunda; mientras que La Nacion publica 10,8 y 0,8, respectivamente. Infobae, en tanto, aporta 2,3 y 2,7 en esos ítems. Es

Preguntas incómodas En el medio de esta discusión, en los últimos tiempos emergieron algunos interrogantes provocativos en torno de cómo administrar esa tensión. Uno de ellos los aportó el periodista iranícanadiense Hossein Derakhshan, quien en el artículo “Face it, you just don´t care about the news anymore”, publicado en el sitio Medium, planteó la decadencia del concepto de noticia. “La noticia es una forma literaria estandarizada de no ficción y solo una de las variadas formas de producción periodística. La noticia en este formato fue inventada más de 200 años atrás en respuesta a condiciones culturales y sociales específicas y fue fogoneada por una nueva tecnología llamada telégrafo. Hoy, casi

Contenidos en sitios web por día clasif icados por categoría y cantidad.

La situación en la Argentina En la Argentina esa brecha todavía no es tan nítida. Según una investigación realizada entre julio y agosto de este año en la Licenciatura de Comunicación Periodística de la UCA no existe una distinción clara en la tipología de los contenidos entre los tres principales sitios de noticias, Clarin, La Nacion e Infobae, a pesar de que los dos primeros ya instrumentaron un esquema de suscripción y el último sigue siendo de acceso libre. El relevamiento fue realizado en la franja horaria de mayor audiencia y sobre los lugares preferenciales de cada homepage destinados a información del día. Allí se nota que Clarin tiene un mayor volumen de contenidos, con 38,9 notas subidas por día, mientras que La Nacion produce 31,3 notas diarias e Infobae 20. Es decir que los diarios de sitios pagos tienden a producir mayor volumen, pese a tener un modelo que apunta a ser más

decir que hay una diferencia clara. En las categorías commodity y breaking news, las distinciones son menos claras. Clarin produce 19,2 notas en el primer rubro y 0,8 en el segundo; La Nacion 19,4 en uno y 0,3 en el otro; mientras que Infobae publica 14,3 en el primero y 0,5 en el segundo. Una rápida mirada nos lleva a concluir que en este aspecto los dos sitios pagos tienen más contenidos commodity que el que es gratuito. En definitiva, en los tres principales sitios de noticias del país no hay una clara correlación entre modelos de negocios y tipos de contenidos, lo cual plasma las dificultades para definir prioridades.

todas esas condiciones culturales han cambiado. Entonces, ¿la noticia está todavía funcionando como debería?” El diagnóstico coincide con la mayoría de las métricas digitales que muestran un desgaste de las noticias puras y duras, y una prevalencia de los contenidos de contenido humano y carga emotiva; de profundidad, como notas de análisis y de contexto; o formatos alternativos como entrevistas o crónicas de relato. Otro pilar fundamental de los medios tradicionales que también ha sido puesto en duda tiene que ver con el valor de la neutralidad. Un trabajo de este año de la Knight Foundation y Gallup sobre las audiencias de Estados Unidos muestra que a pesar del creciente temor por los fake news una mayoría opta

En Argentina, el muro de pago no es todavía totalmente sustentable y se abrió un período de transición con etapas restrictivas para el acceso a los contenidos.

por consumir contenidos noticiosos de las redes sociales y compartir noticias alineadas a su punto de vista (64%). Es decir, prefiere pagar un costo en términos de calidad informativa con tal de no exponerse a visiones que no comparte o le exigen replanteos incómodos. En el libro “The Journalistic Connection” que acaban de publicar los periodistas daneses Per Westergaard y Soren Schultz plantean esta cuestión sin eufemismos. Entre las conclusiones que sacan tras un recorrido por 54 redacciones de 9 países distintos, los autores señalan: “Muchas organizaciones informativas están trabajando intensamente en definir sus propios perfiles e identidades, desafiando el dogma de la neutralidad y alejándose del ideal de noticias ómnibus para audiencias masivas”. Vinculado con este aspecto, los autores resaltan también la necesidad de consolidar nichos de audiencia y dejar una postura generalista. Otra cuestión tiene que ver con el ritmo de renovación de contenidos y el valor del breaking news. En la Argentina hay una tendencia fuertemente arraigada de competir por la inmediatez, independientemente del tipo de contenido, dinámica que no tiene correlato en mercados muy desarrollados, tanto en modelos gratuitos, como en España, o en modelos pagos, como Estados Unidos. En el estudio anteriormente mencionado se analizó el tiempo de duración de cada publicación y el resultado es sorprendente, ya que por ejemplo Clarin deja en su homepage 1,42 hora de promedio cada nota commodity y 1,32 hora una de valor agregado. La Nacion no difiere demasiado: le asigna 1,44 hora a la primera de esas categorías y 1,49 a la segunda. Curiosamente es Infobae el que le asigna proporcionalmente menos valor al commodity (1,36 hora promedio) que al valor agregado (1,55 hora promedio). En definitiva, hay todavía un largo camino por recorrer en materia de análisis y evaluación sobre el impacto de los modelos de negocio en la producción de contenidos periodísticos, especialmente porque el largo período de transición actual amenaza con ser más largo y sinuoso que el que se previó originalmente. Investigación: Martina Ibarra, Carolina Del Valle, Catalina Parpagnoli, Luna Rosato, Guadalupe García Llorente, Agustina Parise. Coordinación: Carla Melicci.

OCTUBRE 2018 | 3 |


EDICIÓN ESPECIAL

¿Las audiencias toman el control? Las audiencias defines sus preferencias en un espacio complejo. Cómo operan los contextos sociales que determinan el uso y las preferencias.

Malena Martos Felipa Recalt Tamara Zárate Coordinación de Investigación: Paula Marzulli

U

na suerte de tensión se produce entre el poder que poseen las audiencias al momento de seleccionar y consumir información y entretenimiento y la oferta que hacen los medios de comunicación de contenidos. En tanto que el público satisface sus necesidades de consumo de productos culturales y construye significados para desarrollar su vida cotidiana, los medios crean una oferta en muchos casos atendiendo a sus gustos personales. Entonces, ¿qué es lo que las audiencias buscan en los medios masivos de comunicación (MMC)? Teniendo en cuenta que ante los medios de comunicación las personas cuentan con la capacidad de crear sentido donde, los líderes de opinión, grupos de socialización primaria y secundaria, experiencias personales y demás factores intervienen al momento de decidir qué consumir, se plantea un espacio de cierta complejidad y múltiples factores. El presente estudio intenta aproximarse a reconocer qué buscan las audiencias de los medios de comunicación, en qué medida satisfacen sus necesidades y qué uso hacen de estos. Desde esta perspectiva se pretende integrar los factores psicológicos y sociales que hacen que la persona construya su realidad social y la función que cumplen los medios en su entorno. Si bien se parte de la base de que los medios tienen poder porque son ellos los que se encargan de brindar información, es necesario destacar que esta licencia no es absoluta porque colisiona en un punto en el que las audiencias poseen elementos para decodificar esos mensajes y darles un sentido que puede ser diferente al planteado por los medios. El estudio partió de la siguiente hipótesis: “¿En qué medida el contexto, el momento del día y las actividades que las personas realizan en su vida cotidiana influyen en el consumo que las personas hacen de los medios?”. El objetivo principal de esta a primera etapa exploratoria de la investigación fue el de indagar en el consumo de medios que tienen las personas a lo largo del día. Se consideró como factor fundamental el contexto en que los individuos se encuentran insertos, que va a determinar de alguna manera qué es lo que van a consumir y de qué

OCTUBRE 2018 | 4 |

El tr anspor te público es un despliegue de usos del celular par a cont ac tos sociales, información y entretenimiento

manera lo harán, teniendo en cuenta que hoy en día la portabilidad de aparatos tecnológicos permite tener acceso al contenido que uno desee cuándo, cómo y dónde quiera. Como objetivos secundarios se plantearon: • Caracterizar los principales motivos por los cuales las personas se exponen a los medios de acuerdo con las funciones que estos cumplen. Los principales motivos: obtener contenido, como información o entretenimiento; experiencia en el proceso de uso, como el contacto con la tecnología, y establecer vínculos sociales o mantenerlos. • Determinar el uso que se realiza de los medios: dónde lo uso, tiempo y finalidad. • Reconocer el grado de satisfacción: relación entre el motivo de uso y el grado de satisfacción alcanzado. • Indagar de qué manera el entorno social influye al momento del consumo: reconocimiento de líderes, influencia de grupos primarios (familia, pareja y amigos) y grupos secundarios (instituciones). Descubrir cómo median los líderes de opinión entre el contenido informativo y las elecciones que las personas hacen y de qué manera el contacto interpersonal (cara a

cara) influencia en el momento de la decisión. El marco de referencia que guió este trabajo puso en diálogo las Teorías de la investigación denominada Comunicación Americana y las Teorías Críticas Latinoamericanas. Por el lado de las primeras, sirvieron como referencia las Teoría de los Efectos Limitados de los medios, en especial, la Teoría de los Usos y Gratificaciones, que pertenece a la segunda generación de los efectos limitados de corte sociológico y es una filiación del Funcionalismo; y dentro

de las Teorías de los Efectos Limitados de los medios a largo plazo, la Teoría de la dependencia del sistema de medios. Del mismo modo, aunque ahora desde la cosmovisión de la Teoría Crítica, también contribuyeron a iluminar el proyecto los Estudios Culturales Latinoamericanos. Para recolectar datos se realizaron dos grupos motivacionales de jóvenes de ambos sexos de 20 a 30 años en el mes de mayo del corriente año. Entre ellos se exploró sobre el uso que hacían de los medios de comunicación

Cuadro de consumo diario de medios Los integrantes de los grupos motivacionales manifestaron consumir los siguientes medios de comunicación de acuerdo al momento del día:

Consumo de medios según el momento del día. Alumnos de comunicación publicitaria de 19 y 30 años, año 2018.


EDICIÓN ESPECIAL y la experiencia que les genera en el contexto de su vida cotidiana. De esta manera, se partió de la definición de consumo propuesta por García Canclini (1995) como aquel: “conjunto de procesos socioculturales en los que se realiza la apropiación y uso de los productos, sean estos bienes o servicios”. Los participantes de los grupos manifestaron utilizar en mayor medida: Instagram, Twitter, Facebook, Google, la radio, la televisión, Youtube, Netflix, WhatsApp, portales de noticias y los diarios digitales. Estos medios, a excepción de la radio y la tv, son elegidos por los participantes según sus gustos e intereses con el objetivo de satisfacer una necesidad o meta, tal y como expresa la Teoría de Usos y gratificaciones (Katz, Blumler y Gurevitch, 1985) donde los receptores son selectores activos del contenido que deciden consumir y de los fines que tendrán esos contenidos. “Consumo Netflix para entretenerme”, en tanto que los diarios online, los portales de noticias o twitter eran un “termómetro social”., señalan Los procesos de socialización primaria, las influencias de sus grupos familiares y los modos de crianza recibidos determinan de alguna manera el consumo de los medios de comunicación y su elección (Joseph T. Klapper,1960). “Mi papá es el que me cuenta las noticias del día, me dice los que está sucediendo”. “ Si me quiero enterar de lo que sucede me lo pasan por WhatsApp”, (en referencia a lo que dicen sus amigos o su grupo de contacto). Los participantes de los grupos motivacionales reconocieron como “nuevos líderes de opinión” aquellas personas capaces de influir sobre las audiencias y en el consumo de los contenidos mediáticos (Lazarsfeld, 1953). En tiempos modernos los influencers y los youtubers vienen a interpretar a estos líderes con cierto poder de convencimiento sobre todo en la franja etaria que abarca la adolescencia siendo este un público más permeable. Estos nuevos líderes gestionan la agenda de temas que se tratarán, en un tiempo reducido, en las redes sociales y en las conversaciones sociales dentro de la comunidad mencionada y suelen generar contenido viral. Tienen credibilidad si se manifiestan sobre tópicos que el usuario entiende por correspondientes a su trabajo o que el/la líder maneje el campo al que se refiere, aún así, los entrevistados manifestaron reconocer que el trabajo de estos influencers dentro de las redes sociales o en la plataforma YouTube es parte de un negocio y ,por ende, entra dentro de las lógicas del mercado. Por lo que bajo este paradigma, estos líderes pierden espontaneidad y dejan de ser fuente de entretenimiento y diversión. Las críticas también emanan del hecho de que los líderes de opinión se sumergen en ámbitos diferentes, como por ejemplo, la literatura, sin una preparación previa adecuada o con poco entendimiento explícito (para la audiencia) sobre el área nueva, en palabras de Manuel sobre el libro de Magalí Tajes, una influencer o instagrammer argentina: “yo lo abrí porque es best seller y realmente son

libros estereotipados para un público adolescente que te lo posiciona como tendencia, además salió como una moda en Instagram que abrías el libro en cualquier página, porque son todas iguales con frases, y sacar una foto y decir ‘mira lo que estoy haciendo’, es como una moda”. Otro de los aspectos relevados en el estudio guarda relación con las características que poseen los medios por ellos consumidos. De tal manera cada medio quedó personificado a través de la experiencia de uso que les daban estos jóvenes.

A partir de este análisis determinamos la relevancia que el sujeto tiene al apropiarse del consumo que se hace de los medios y cómo se logra atribuir conceptos propios y diferenciadores a cada medio. (Guillermo Sunkel, 2004 ). En este sentido el público deja de ser un receptor pasivo para convertirse en un conjunto de personas capaces de crear sentido por sí mismas. En una suerte de resignificación del consumo como el espacio de comunicación entre individuos, con elementos que se ponen en juego y llevan a la simbolización

La pregunta clave es en qué medida el contexto, el momento del día y las actividades que las personas realizan en su vida cotidiana influyen en el consumo que las personas hacen de los medios.

y a la formación de identidad, colectiva e individual. Es similar a lo que ocurre cuando los participantes se refieren a la radio como “la que está de fondo” o a la televisión como “la que hace de telón”, sin saberlo, los hábitos de creación de sentido operan sobre ellos y les permiten también a su vez construir sus sistemas de gustos y priorizar el valor de uso que destinan a cada uno de esos aparatos. En síntesis, las audiencias, como nunca antes se vio en la historia del consumo de los medios, reconfiguran su relación con los medios de comunicación en forma constante y dinámica. No existe un abordaje teórico único para realizar una lectura adecuada del consumo de los medios de comunicación y de la relación que establecen con sus audiencias. Es propósito de este grupo de estudio profundizar esta línea de investigación.

OCTUBRE 2018 | 5 |


EDICIÓN ESPECIAL

Fake news, corrección de errores y fuentes alternativas La viralización de información sin chequeo expone al periodismo a revisar sus prácticas de publicación. La utilización política y los nuevos desafíos

Dr. Mariano Ure Profesor titular de Ética Periodística. UCA

L

a circulación de noticias falsas no es un tema nuevo. La manipulación y el engaño acompañan desde siempre la comunicación humana. Lo que hoy nos preocupa es el alto poder de influencia de informaciones deliberadamente distorsionadas. Gracias a las redes sociales, las fake news se viralizan sin fronteras, creando un ambiente de desconfianza hacia el periodismo. Analizar la desinformación desde el punto de vista ético nos lleva a cierto lugar común. El periodismo profesional se define por la búsqueda de la verdad a través de la investigación y la documentación. El servicio periodístico consiste en ofrecer datos e informaciones completas y precisas, para que los ciudadanos puedan tomar decisiones autónomas e integrarse a la sociedad. Esto se sabe. Sin embargo, hay por lo menos dos problemas que merecen atención: la utilización política del fenómeno y la atribución de responsabilidades a terceros. El primer caso recuerda la retórica antagonista de Donald Trump frente a noticias publicadas por prestigiosos medios de comunicación norteamericanos. Para Trump, los medios actúan como partidos de oposición que publican fake news para criticar y desgastar su mandato. Es la misma postura que ya observamos en gobiernos populistas latinoamericanos en su pelea contra los medios dominantes. Esta modalidad de defensa de su propia administración apunta a erosionar la credibilidad de los medios. Se entiende la lógica detrás de ello: si los medios tienen intenciones espurias es

Facebook tuvo problemas con la filtración de datos y la difusión de información falsa que lo llevó a generar nuevas políticas de control de contenidos.

legítimo desacreditarlos. Se trata de que muchas veces difundamos datos un ataque explícito a la prensa, pero que se chequean con posterioridad. Se sin violar las normativas que protegen puede incluso citar la fuente, pero en su libre ejercicio. todo caso el daño de la desinformación El desenmascaramiento de intense amplifica. ciones políticas detrás de las noticias El efecto de viralización de la infores necesario. Las dificultades comienmación resulta engañoso. “Si muchos zan cuando un gobierno hace política lo dicen y replican debe ser cierto” es contra los medios por su posición ediun criterio de verdad aparente que, de torial o por sus investigaciones sobre el no mediar prácticas serias de chequeo, desempeño de los funcionarios. Como expone al periodista a convertirse en señala el especialista en periodismo vehículo de intereses ajenos. Aunque Wolfang Donsbach, el rol de los medios el precio sea la demora en la publicainformativos es ción, las audienofrecer una base cias tienen derede conocimien- Las audiencias tienen derecho cho a acceder a to común a la una información a información precisa, aunque sociedad, para precisa. lograr un gra- el precio sea la demora en la Lo fake aplicado do de cohesión a las noticias susuficiente que publicación pone un engaño permita su desaintencional, pero rrollo. En la medida en que un sistema también puede extenderse a aquellas periodístico pieda credibilidad, no poque no cumplen con la promesa de didrá esperarse otra cosa más que mayor fundir una información de calidad. El fragmentación y carencia de recursos art. 2 del Código de Ética del Foro de para la participación ciudadana. Periodismo Argentino afirma que “la El segundo problema aparece cuandistorsión deliberada jamás está perdo el periodismo evita asumir las resmitida”. ¿Se puede aceptar entonces la ponsabilidades de la penetración de las distorsión involuntaria? Lejos de prenoticias falsas, aun cuando no las haya tender justificar los errores, el espíritu producido, y cuando no reconoce sus del código pretende promover la conpropios errores. Sabemos que el priciencia de que son frecuentes. mer deber del periodista profesional Como en cualquier otra profesión, es chequear la información antes de los periodistas (también los profesores publicarla. Sin embargo, la exigencia de periodismo) nos equivocamos. Por de la hiper inmediatez en el competitifalta de recursos, apresuramiento, desvo mercado digital de la atención hace conocimiento, etc. Por eso, a la respon-

sabilidad del chequeo se agrega la de la corrección. El reconocimiento abierto del error ante las audiencias tiene una doble ventaja: se ofrece una nueva versión, adecuada a los hechos, y reestablece la confianza. Si el periodista me advierte que cometió un error, puedo volver a creer en él. En estos casos el valor de la honestidad se coloca por encima del valor de la verdad. Las ediciones digitales y los perfiles en redes sociales permiten editar o incluso borrar publicaciones. Pero en lugar de ocultar el error es preferible mencionarlo. El New York Times es un buen ejemplo de este compromiso. Estimula a los lectores a que envíen correos con comentarios sobre eventuales errores, y luego publica las correcciones. Para evitar que el error se mantenga, edita la noticia y aclara hacia el final que “una versión anterior de este artículo mencionó incorrectamente…”. El tercer elemento para disminuir el efecto de las fakesnews y su uso político contra los medios está en manos de las audiencias. Además de un protocolo exigente de chequeo de la información y de una honesta gestión de los errores en los medios, es clave que el lector se esfuerce por mantener una actitud crítica frente a las noticias, y que adquiera el hábito de consultar fuentes alternativas, en especial en aquellas situaciones en las que necesita apoyarse en información para tomar alguna decisión relevante para el desarrollo de su vida personal o social.

Los estudiantes y los desafíos de la profesión

Dale play ▶

Angelez Ayerza

OCTUBRE 2018 | 6 |

Lucas Ghioldi

Delfina Arambillet

Diego Flores


EDICIÓN ESPECIAL

La realidad, el desierto y el periodismo La utilización de tecnología que altera perfiles públicos, discursos y hechos pone en juego el concepto de “realidad”. Pero en paralelo, avanza el desarrollo de software para reconocer si las imágenes y los videos fueron modificado.

Dr. Christian Schwarz ¿Estoy seguro? Un hombre de buen sentido, ¿creería lo que oí ayer noche, lo que imagino saber? ¿Me aconsejaría olvidar la pesadilla de ver en todo una máquina organizada para capturarme? Y si fuera una máquina para capturarme, ¿por qué tan compleja? ¿Por qué no detenerme, directamente? ¿No sería una locura esta laboriosa representación? Nuestros hábitos suponen una manera de suceder las cosas, una vaga coherencia del mundo. Ahora la realidad se me propone cambiada, irreal. La invención de Morel, Adolfo Bioy Casares.

E

l periodismo y los medios de comunicación están en una etapa de mutaciones de peso. Han perdido el monopolio en la difusión de lo que acaece. Esto no es novedad. Sí que el impacto de estos cambios ya están en el centro del debate acerca de lo público. No solamente estamos en tiempos de fake news. Esto sería solamente una cuestión propia de la actividad del periodismo. En todo caso, las fake news a partir de esta incidencia en la actividad periodística tendrían impacto a posteriori sobre sobre la sociedad civil y el sistema político.

¿Cómo saber hoy que aquello que vemos en televisiòn, en una pantalla o en un diario de papel es cierto, si podemos crear los acontecimientos a voluntad? A lo largo de la historia ha sido muy común tergiversar y falsear acontecimientos para así influenciar o manipular a sectores de la sociedad. Como bien sostiene Paolo Mancini, los principios profesionales de la escuela norteamericana de la posguerra que solidificaron conceptos como gatekeeper o watchdog bien podrían haber sido una moda pa-

El investigador Supasorn Suwajanakorn mostr ó los mecanismos par a inter venir sobre la imagen de una per sona e inser t ar un discur so que nunca hizo.

sajera . La gran transformación en vez está dada - otra vez - por la tecnología. El impacto de lo que ésta genera va más allá del uso de bots, la existencia de perfiles apócrifos en Twitter o la eventual apropiación y venta de datos privados por Facebook. Está en juego el concepto mismo de aquello que convencionalmente solemos llamar realidad. El investigador Supasorn Suwajanakorn mostró este año en una charla en el espacio TED cómo su equipo de trabajo había diseñado un software que permite representar como una persona emite una afirmación que nunca realizó . Empieza su charla dando cuatro versiones de un supuesto discurso de Barack Obama que jamás tuvo lugar . Ninguno de los asistentes a la presentación, así como los que vimos el video en YouTube por primera vez, estuvimos en condiciones de reconocer esto. El ejemplo no es menor. Hoy, mediante tecnología al alcance de cualquiera podemos crear representaciones de situaciones y sucesos que jamás acontecieron con un grado de verosimilitud asombrosa. Un simple smartphone o una notebook ya nos permiten intervenir hechos y modificarlos como se nos plazca. Con el “bienvenidos al desierto de lo real” en la película Matrix - de los por entonces hermanos Wachowski - Morpheus ilumina a Neo que aquello que suponemos como real no lo es. Es el retorno al Platón original, donde lo sensi-

ble es engañoso y la realidad está en el plano de las ideas, de los conceptos. ¿Cómo saber hoy que aquello que vemos en la televisión, en una pantalla, en un diario sobre papel es cierto si podemos crear los acontecimientos a voluntad? Supasorn Suwajanakorn anuncia en la misma charla TED que así como puede recrear ficcionalmente discursos de mandatarios o de actores de Hollywood ha diseñado otro software que permite reconocer y denunciar este tipo de manipulación. Un software se encargaría así de controlar a otro. Quis custodiet ipsos custodes?¿Quién custodia a los custodios? ¿Entramos a una era de inmanencia donde softwares, algoritmos y otros productos de la in-

teligencia artificial se controlan entre sí? ¿Dejaremos que haya un equilibrio de pesos y contrapesos - checks and balances – donde los dispositivos creados a partir de la inteligencia artificial se controlen entre sí y los humanos pasar a ser espectadores cuando no dominados por ellos? Quien ha visto películas como Solaris, Odisea 2001 o Blade Runner esto no sonaría como algo ajeno. Es aquí donde el periodismo y los medios de comunicación tienen la puerta abierta para recuperar parte del protagonismo perdido. Ambos debieran trabajar en recuperar credibilidad. Son los actores que pueden estimular la capacidad crítica de los públicos y así denunciar los intentos de manipulación que fluyen en la sociedad. De asumir este rol, el periodismo y los medios de comunicación no podrían ejercer su actividad sin incurrir en aquello que se denomina Media Literacy. No hay una traducción satisfactoria al castellano. Alfabetización en medios, educación sobre medios, educación mediática son algunos de los términos que suelen utilizarse. El supuesto es promover una perspectiva crítica hacia la propia actividad que desarrollan. Sería algo así como desarrollar la capacidad de cuestionarse o incluso de reírse de uno mismo. Algo que no es sencillo. Debiera ser de crucial prioridad en estos tiempos de alta volatilidad para que el periodismo persevere en ser una actividad humana que impida que el mundo no sea tan feliz y la humanidad no sea tan bella como se pretenda imponer.

Un detalle del software que muestra cómo el discurso puede ponerse en boca de cualquiera, con gestos propios

Los estudiantes y los desafíos de la profesión

Dale play ▶

Alanis Buchanan

Milton Rivera

Gabriela Hernández

Belen Galindo

OCTUBRE 2018 | 7 |


EDICIÓN ESPECIAL

La realidad reversible y el nuevo viejo oficio del periodista

Lic. Hernán Cappiello Director del Departamento de Ciencias de la Comunicación y Periodismo

L

os tiempos de realidad reversible, donde todo es de un modo y al mismo puede ser lo contario, ponen en crisis uno de los mandamientos de la profesión periodística: “just the facts”. Ahora está en juego la verdad. Si la discusión se hace imposible porque están en duda los hechos sobre los que se da la controversia, desaparece la idea de un debate genuino como el que permiten los medios para cumplir con su función social de fortalecer el sistema democrático. No alcanzan las evidencias palpables de que las cosa son de un modo cuando importa más controvertir esa realidad para dar una batalla en el campo discursivo que la verificación de lo que acontece. Solo la información cierta y libre permitirá a la ciudadanía tomar mejores decisiones. Comparten el mismo parámetro de credibilidad hechos que viralizan redes sociales, disfrazados de noticias, pero fabricados por usinas de fake news (pagadas por la política o grupos de poder) que los títulos de los principales medios que generan contenidos mediante la aplicación de criterios profesionales y protocolos de verificación de datos. La información es confiable según quien la comparte y no importa tanto su origen. Las fake news no son errores, son noticias falsas construidas adrede y distribuidas por medios sociales y tradicionales con un objetivo político o económico para incidir en las audiencias. En este escenario donde conviven la audiencia, los periodistas y los medios, irrumpieron de manera estelar Google y Facebook, con sus algoritmos de selección y distribución de contenidos, sin distinguir la veracidad de la información que multiplican. Las audiencias acceden a la información mayoritariamente a través de las redes sociales donde nadan en el mismo océano de incertidumbre contenidos verificados y otros falsos, sin etiquetas que los diferencien ni responsables. Jhon Dinges, profesor de la Universidad de Columbia y ex periodista del New York Times nos advierte que “el fenómeno de fake news ocurre en la intersección de los medios tradicionales con los medios sociales”. Un reciente estudio realizado por la Knight Foundation concluye que la falta de confianza en los medios es común entre los jóvenes de todo el espectro político. Se muestran muy escépticos

OCTUBRE 2018 | 8 |

con las noticias que consumen, además de preocupados por la falta de rigor o el sesgo de las fuentes informativas utilizada. Lo que se verifica en Estados Unidos me animo a decir que se repite en Argentina, tanto en lo que respecta a las jóvenes audiencias como al sesgo de las fuentes de información que usan. Aquí, en cualquier plataforma, es donde los periodistas tenemos un nuevo/viejo rol determinante: convertirnos en celosos verificadores de los datos que dominan el debate público para asegurarnos de que se produzca sobre bases ciertas. Por eso el “descubrimiento” de los jóvenes medios nativos digitales y de los medios tradicionales que buscan pelear en el disruptivo mundo digital es la investigación periodística. Volver a las fuentes. El periodismo de investigación, de monitoreo y fiscalización de los abusos de poder del Estado y de los poderes fácticos es la función periodismo imprescindible e irremplazable. Solo el periodista profesional, capacitado, bien pagado, que trabaja con criterio de verificación puede cumplir esta tarea y no los viralizadores de contenidos en redes sociales. El otro salvavidas que permitirá a la verdad seguir a flote es la alfabetización mediática, incorporando a las curriculas contenidos vinculados con la lectura crítica de los medios tradicionales y las redes sociales. Para que “just the facts” no sea solo la leyenda de un imán que venden en el Newseum en Washingtoin, para pegar en la heladera sino el regreso del principio rector del periodismo profesional.

La comunicación institucional y de marca ya no será igual: chatbots

Mg. Gustavo Manzi Director del Departamento de Comunicación Publicitaria e Institucional

L

os bots son programas de inteligencia artificial que pueden realizar una serie de tareas sin la ayuda de un ser humano, por ejemplo, simular una conversación con una persona y desarrollar mensajes con clientes o públicos internos y externos de una institución. Los mensajes que recibimos a diario requieren una respuesta, en algunos casos cientos o miles de respuestas que poseen características similares. Para estos casos, los chatbots permiten optimizar los tipos y tiempos de respuesta, reduciendo costos operativos. En el último año, y durante 2018, según información que puede obtenerse en Google Trends, el uso de esta herramienta ha mostrado un crecimiento sostenido: solo en Facebook Messenger existen más de 100.000 chatbots en uso para brindar información sobre productos y que permiten incrementar

rendimientos operativos de las empresas que lo utilizan. Los costos serían una buena justificación de la utilización de chatbots en lugar de recursos humanos. Otro motivo es la eficacia: respuestas similares ante requerimientos similares, tiempos óptimos de respuesta, medición y seguimiento “en línea” de las conversaciones. El problema sería desarrollar capacidades de inteligencia artificial que permitan generar respuestas que no sean detectadas como originarias de un robot, hasta que los públicos acepten que una máquina puede ser tan buena como un ser humano. O, si tomamos el caso de Microsoft, que en el aprendizaje continuo se generen los controles adecuados para evitar que inputs poco adecuados lleven a respuestas que perjudiquen la imagen de empresa o de marca. Los profesionales de comunicación tendrán que ser capaces de reconocer el cambio y ser parte de él: conociendo las innovaciones, desarrollando las investigaciones que detecten los cambios sociales y tecnológicos, generando los contenidos que los chatbots brindarán e implementando las adecuaciones o innovaciones que se requieran a futuro para que las respuestas siempre impacten de manera positiva.

cias Sociales n e i C e tad d l u c Fa

Carreras de Grado Licenciatura en Ciencias Políticas Licenciatura en Comunicación Digital e Interactiva Licenciatura en Comunicación Periodística Licenciatura en Comunicación Publicitaria e Institucional Licenciatura en Historia Licenciatura en Relaciones Internacionales Profesorado Universitario en Educación Inicial Profesorado Universitario en Educación Primaria Profesorado en Historia Profesorado Superior

Carreras de Posgrado Doctorado en Ciencias Políticas Doctorado en Historia Doctorado en Sociología Maestría en Comunicación Audiovisual Maestría en Sociología Especialización en Estudios Sociales de la Discapacidad Curso de Posgrado en Comunicación Política e Institucional Curso de Posgrado en Gestión en Asuntos corporativos Curso de Posgrado en Inteligencia Estratégica Curso de Posgrado en Recursos Naturales Estratégicos, Geopolítica y Desarrollo en América Latina


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.