El Salvador

La Administración de El Salvador, tras el colapso que en los hábitos de comunicación de las

estadísticas policiales sufrió en enero 2020, no ha reconducido una política de comunicación que

se mostraba muy efectiva para cumplir con dos objetivos esenciales: la

lucha contra la

delincuencia por medio de la información y la transparencia deseable en cualquier administración

pública 1 .

A pesar de esta falta de información en detalle, sabemos que han descendido los niveles de

delincuencia. Ha descendido el número de homicidios y eso significa, lógicamente, que la

estrategia contra el crimen organizado, extendido en la totalidad del país, está funcionando. A

esta afirmación sólo debemos añadir dos observaciones relevantes, por un lado, la falta de una

información completa de la que sabemos disponen las autoridades, porque vinieron ofreciéndola

hasta diciembre 2019, y la sospecha que circula en el país de que este descenso de homicidios

se deba a un pacto entre el gobierno y las maras del que ya hablamos en el comentario político.

No obstante el descenso de incidentes criminales, el Departamento de Estado de los EE.UU.

clasificó al país en el nivel 4, el más peligroso. Es cierto que el primer motivo es el de prevención

de contagio de Covid-19, pero el aviso siempre recuerda los riesgos de seguridad del país,

alertando de que son habituales en el país los homicidios, asaltos, violaciones y los robos a mano

armada, así como la extensión de las actividades de las maras 2 .

La experiencia en El Salvador de pasados pactos y treguas frustradas hace que la población

piense que el comportamiento de las maras ahora sea similar al que han tenido en otras

ocasiones, en otros tiempos de treguas ya conocidos, en que la violencia no se manifestaba, pero

se sentía de un modo latente en las actividades diarias.

Una noticia relacionada con la estrategia de seguridad contra las maras y las relaciones del

gobierno salvadoreño con los EE.UU. que nos hace recapacitar sobre cuál será el final de las

1 Sociedad Interamericana de Prensa condena amenazas y restricciones del gobierno Bukele contra la prensa (El Salvador.com, SAL) 2 El Salvador Travel Advisory (Departamento de Estado, EE.UU) 19

maras fue el comunicado del Departamento de Justicia de los EE.UU. sobre la acusación de

terrorismo a un miembro de la mara Salvatrucha 1 . Podría dar la impresión de que los EE.UU.

quieren implicarse en la lucha contra el crimen organizado de las maras en El Salvador. Se venía

hablando de esta posibilidad, que las maras fueran declaradas organizaciones terroristas, desde

hace unos años, para, de este modo, involucrar a la comunidad internacional en el combate

contra las maras. Sin embargo, de acuerdo con el análisis de InSight Crime 2 , esta declaración nace

con vocación de olvido al no tener demasiado sustento legal. Especula el analista que la acusación

no es más que un instrumento de propaganda política de cara a las elecciones presidenciales en

los EE.UU.

El descenso de homicidios no ha sido un cese total. Se han registrado actos violentos

derivados en homicidios y relacionados con las maras como ajustes de cuentas internos o simples

demostraciones de fuerza 3 , 4 . Más preocupantes son algunos enfrentamientos de los que ya

hemos tratado anteriormente entre policías y mareros que, en muchas ocasiones, terminan con

víctimas mortales. Se han investigado desde organismos externos e internos y las conclusiones

van desde que se producen en el país ejecuciones extrajudiciales, hasta acusaciones de uso

excesivo de la fuerza por parte de las autoridades 5 . Estos enfrentamientos son un hecho y muchos

miembros de las fuerzas de seguridad han perdido la vida en esta lucha. Si bien es cierto que

hay que hacer un uso medido de la fuerza atendiendo a las exigencias de una sociedad avanzada

y democrática, también hay que realizar investigaciones exhaustivas que puedan determinar, sin

margen de duda, cuándo se han producido

seguridad.

acciones ilícitas por parte de las fuerzas de

Finalmente, es preciso hacer una alerta directa ante un riesgo que está creciendo día a día en

todo Centroamérica y, concretamente, en El Salvador como consecuencia de la implacable crisis

económica que asola a la región junto a la crisis de salud 6 . La pérdida de empleo y

recursos

1 Departamento de justicia anuncia operación contra líderes clave de grupo criminal MS-13 (US Embassy in El Salvador, SAL) 2 Nueva acusación de EE.UU. contra la MS13 es más alarde político que acción antiterrorista (InSight Crime, Colombia) 3 Localizan cadáver envuelto en una sábana en Soyapango (La Prensa Gráfica, SAL) 4 Reportan triple homicidio en Santiago Nonualco (La Prensa Gráfica, SAL) 5 El Salvador mantiene patrón de ejecuciones pese a cambio de Gobierno (Forbes Centroamérica) 6 El Salvador, el país centroamericano más afectado por la pandemia (Forbes Centroamérica) 20

económicos en general empujarán a gran parte de la población a niveles de pobreza inferiores a

los que posiblemente ya se encontraba. Los efectos de esta crisis harán que las diferencias

económicas en la sociedad se amplíen provocando más desigualdad social, carestía y necesidad

perentoria de ingresos para una buena parte de una población ya castigada económicamente.

Desde el punto de vista de la seguridad, esto se traduce en un incremento de los delitos

contra la propiedad en forma de robos, hurtos, asaltos, invasiones, etc. Los periodos de

cuarentena han agitado la banderola de salida. Han sido el símbolo del comienzo de la crisis.

Recordemos que un elevado porcentaje de la población salvadoreña trabaja en el

sector

informal. La paralización de esta economía sin registros públicos significa una pérdida total de

ingresos o de una posible asistencia social para las personas a ella dedicadas.

Ya se han registrado en todos los departamentos incidentes que no eran tan frecuentes hace

unos meses, como robos o hurtos en comercios 1 o a transportes de distribución 2 ,

robos y

asaltos en las vías públicas y en viviendas 3 , 4 . Objetivos prioritarios de este tipo de delincuencia

son los transportistas de bienes de uso común, como alimentos u otro tipo de productos de fácil

mercadeo 5 .

Es necesario en cualquier actividad comercial, en instalaciones, almacenaje y transporte, y

muy recomendable en viviendas, extremar las medidas de seguridad,

revisar los

procedimientos de prevención ante el crecimiento del riesgo de robo, hurto e invasiones.

1 Detenido por robar en mercado (La Prensa Gráfica, SAL) 2 Denuncian alza de hurtos y robos (La Prensa Gráfica, SAL) 3 Reportan robos en colonia Río Grande, San Miguel (La Prensa Gráfica, SAL) 4 Capturan en Ahuachapán a banda de asaltantes que se hacían pasar por empleados de una compañía eléctrica (La Prensa Gráfica, SAL) 5 Los acusan de robo de mercadería (La Prensa Gráfica, SAL) 21