Poetas sin Fronteras Carta a los Reyes Magos
ENERO 2019
AĂąo 6 Ejemplar 59
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Los más pequeños de la casa preparan ansiosos la carta a los Reyes Magos. Desean muchas cosas, escriben una hoja cargada de ilusiones. Sueños que prosperan a tener o recibir algo bonito. Aunque a veces la inocencia ya no la tengan, por la picardía que asumen en estos tiempos que vivimos. El entusiasmo sigue igual, las fantasías se convierten en magia, mientras las estrellas alumbran con sus reflejos la Noche de Reyes. Así mismo a los niños les brota por dentro ese deseo de escribirles prometiendo portarse bien y hacer buena letra, vistiendo con aspiración profunda de amor esperando esa noche para celebrar La Epifanía.
Maruca Rodini. Río Tercero Cba. Argentina.
Queridos Reyes Magos: Este 2019 vuelvo a escribirles para recordarles mis pedidos, que como todo mundo se pide por la paz, amor ect,ect..pero yo quiero algo muy especial, y es que cuando el 6 de Enero pasen por acá por Puerto Rico, que sé que estaré durmiendo, me dejen sentir el aroma de mi querida Madre, que pueda disfrutar de sus abrazos y besos, al igual que los de mi Padre, sería el mejor regalo del que podría disfrutar en lo que me queda de vida, Cuando se es chiquito,los Reyes Magos están en nuestro corazón, ya de adultos los llevamos en el recuerdo, pero siempre mantengamos esta bella ilusión .Así que espero mi regalito, hasta el Domingo ,Chao.... Lourdes Lagardery Puerto Rico.
Carta a los Reyes Magos Lucila Reyes González México Querido Reyes Magos: Este seis de enero yo solo les quiero pedir: que mi pueblo sea muy feliz, que tenga: salud, amor y dinero, también pedirles quiero y que aprenda a soñar a sus sueños realizar y si fuera posible, a realizar lo imposible y juntos todos trabajar. Es mi sueño para este año que el oro sirva para pan, y para que todos coman; que a nadie se le hagan daño, el mundo se llene de amor que nunca le causen dolor, y que las personas buenas jamás sufran de penas, eso les quiero pedir, porque nadie merece sufrir.
Mucho les voy a agradecer Que den fé y amor al mundo, Y que este sentimiento profundo Llegue a a cada ser, Y que pueda acontecer, Que ya no haya vagabundos Que encuentren su lugar, Que la estrella las almas ilumine, Y cualquier rencor u odio elimine, Y encuentren la felicidad. Eso les pido queridos Reyes, Que haya paz y amor en todos lados Que ya no haya seres olvidados, Que todos sigan las leyes, que salud les manden a montones, también bienestar y alegría, que sean felices en armonía, con amor en sus corazones, que nos llenen de bendiciones este 6 de enero y todos los días.
HOY ENTENDÍ LOS 3 REGALOS. Santa Velia Flores B. Sabinas, Coahuila. Hay ciertos momentos, en los cuales hojeo mi libro de vida hacia atrás. Volviendo a vivir los deleites de la infancia, y a la vez buscando que pude haber hecho diferente y actuar hoy. Recaigo en la magia de ellos, esos tres caballeros cargados de oro, incienso y mirra, y hoy...en mi edad adulta busco cual era el mensaje que ellos traían junto con sus regalos. EL ORO, era un regalo material digno de dar a los reyes, confiando que el rey nacido haría todo lo posible para que sus enseñanzas y reino de paz, amor y justicia, llegará a todos los confines de la tierra. EL INCIENSO, regalo para los dioses, por eso fueron a ofrendárselo a Jesús, con este acto ellos dejaban sentado que Jesús es Dios. LA MIRRA, este material era usado para untar y embalsamar a los cuerpos fallecidos, así ellos, los magos, indicaban que Jesús además de Dios es hombre y que moriría por todos nosotros.
Lo que los reyes magos ofrecieron a nuestro niño Jesús, iba destinado a todos nosotros también. Hoy evoco a mi niña interior que en comunión con el ser adulto del presente, se regocijan al saber los maravillosos regalos que los reyes magos nos dejaron: ABUNDANCIA, ESPIRITUALIDAD Y HUMANIDAD. Tres regalos que nos pertenecerán por siempre bajo la luz del niño Jesús. Ahora toca buscar, conservar y compartir esos regalos para así hacer sonreír al niño Jesús.
Epístola a los Reyes Isidoro A. Gómez Montenegro. México Todos los que estudian y escuchan son bronce sonoro o címbalo resonante, les faltó el sentido de inteligencia de las cosas, el significado por su sonido, todas las letras desde el Aleph están distinguidas por piezas triangulares hasta el Thau, son distinguidas por su disposición. Jesús de Nazareth Al alumbrarme el calor de las estrellas lucernas de la noche, escribo ésta epístola a sabios astrólogos alquimistas que guiados por la Estrella de Belén llevaron sus ofrendas al mesías, al Eterno Rey de Reyes, Re conductor de la vida, de la paz, el amor, el bien y cuya misericordia y humildad es infinita. Llevaron ofrendas: oro significado de monedas, incienso y mirra para aromar las ceremonias religiosas del mesías, la luz de la memoria no desdeña recuerdos, en ésta frágil vida y evanescente infancia, hice una que otra carta a los Reyes Magos o astrólogos, veo la luna sombre paredes mientras la vigilia ahoga en espacio sordo los reglones y la velada espera el sueño cual duermevela. No aparecía lo que pedía en mi carta, pero siempre hubo algo para llenarme de dicha cerca del árbol de navidad, entre botas simuladas de algodón, hace años apenas si colocamos un árbol, hemos escuchado el sonido del viento, la caída de las hojas, el color de la humedad y penetramos cada vez al color del cielo más cercano en este solsticio de invierno.
Mi memoria se ha vuelto desleal, se ha retrotraído y recuerda los años, salidas de Reyes con mis hijos, hoy hemos comprado algo para los nietos anticipadamente, a quienes he bendecido desde la cena de navidad, el río navegado por nuestros ancestros no rompe la memoria del pasado, tomo sus manos generosas y valoro la vida con quietud y paz de que alienta a continuar y valorar el amor de la familia y el hermoso préstamo de estar con el alma erguida, el soplo de vida en días astrales, mirar al cielo antes de lo apenas visible, del jardín, escasas flores, chumberas, unchielas, siempre hay algo para mirar en la atmosfera interminable, petrificado día cristaliza el sol, espacio de tiempo, tarde enarbolada vestida de mil ecos, entra la noche, escribo deseos y peticiones con llanto sólido y temblorosa luz de una lámpara votiva, espejo de la memoria, hombre niño de 63 años, en mis pensamientos dormían afanes los colocaba priorizando. Queridos Reyes Magos: Necesito un poco más de tiempo, solo un poco para observar los pasos de Mateo el más pequeño de mis nietos, entre huellas colgadas en rejas y ventanas esta nuestro amor América, Dios permita seas libre de esa enfermedad, limpia, sana, para seguir viajando a lejanos horizontes, enfrentando tormentas, vicisitudes del acontecer lontano, no importan las cosas materiales que Nuestro Padre Celestial sane nuestras heridas, mi fistula, no importa que no vaya a Colombia, pero podamos sostenernos uno al otro en apoyo, en consuno moral por esos ríos, agua lluvia, son palomas de incansable vuelo de los abuelos
para los nietos mayores Camila, mi Marenka y Joyce la campeona de básquet, Bryan, él ya es un joven y trabaja, Brandon más pequeño pero es estudioso. Por las calles los días se volvieron adultos y profesionistas algunos de mis hijos, otros no pudieron, todos llenos de gratitud hacia la vida y yo agradecido de poder haberlos visto crecer, tal vez si no cumplí mis sueños fue disposición divina, en alguna revista o libro me han llamado el aldeano universal o el poeta torrentero, gotean innumerables recuerdos, vomita el tiempo su fluir, en mi boca florece una sonrisa. Que cuando Dios me haga suyo esté preparado, abrace la fugaz eternidad cósmica, lleve tu nombre irreversible América grabado en mi pecho de cristal, cual lluvia de estrellas con el arrebol de tu sonrisa y mi citara viajera, olvidaba mi pluma de tinta inacabable y la divina luz que irradia siempre en las horas, en la luz floreciente de seres de luz y en cada ablución de lluvia amable, en cada explosión de amor me renuévame en el agua de tus ríos Amado Padre Celestial Arquitecto del Universo. No sé si he pedido mucho Reyes Magos, porque mar no significa morir sino el placer de navegar cual fluye la vida o andar por galería de ecos. P.D. Llegar hasta donde no he podido, penetrar esa orden o meta que me diera mi abuelo, hasta las raíces de mi espíritu.
“EL 4˚” “Ellos regalaron incienso, mirra y oro, el niño DIOS nos regaló paz y amor a todo el mundo” JMA
Había llegado tarde a casa, cansada ansiaba un baño de agua tibia para relajarse de la dura rutina del trabajo. Luz María se cercioró que puertas y ventanas estuvieran debidamente cerradas. Al dirigirse a su recámara notó la claridad que escapaba por la parte inferior del cuarto del mas pequeño de sus hijos. Con mucha delicadeza tocó a la puerta, esperó un momento para después entrar. —Hola hijo, buenas noches ¿Despierto tan tarde? —Buenas noches mamá —contestó el pequeño Ramón —terminé de leer una historia muy interesante. No la conocía ¿Quieres que te la cuente? Olvidando su cansancio se sentó al borde de la cama del niño y se dispuso a escucharlo. No tenía corazón para negarse a complacer al mas pequeño de sus hijos. Él era un caso poco frecuente ya que a pesar de su corta edad tenía inclinación temprana a la literatura y las expresiones artísticas. —Leí la historia de “Artabán” ¿Habías oído hablar de él mamá? —No mi amor —con toda sinceridad contestó Luz —dime hijo ¿Cuál es su historia? —Te contaré. Artabán era un hombre sabio que salió en busca del Niño DIOS siguiendo la estrella de Belén al mismo tiempo que los Reyes Magos que conocemos, pero ¿Qué crees? Se perdió en el camino. Él al igual que Melchor, Gaspar y Baltazar cargaba una alforja en donde llevaba consigo tres regalos para ofrecerle al niño Jesús,
un rubí tan rojo y puro como la sangre, un jade listado en blanco precioso y un brillante tan grande como su puño. En su travesía se encontró con un anciano enfermo del que nadie quería hacerse cargo y sin pensarlo dos veces ofreció el rubí a una familia para que le brindaran ayuda y compañía al pobre anciano. El haberse quedado a ayudar al hombre retrasó su andar y cuando llegó al pesebre en donde había nacido el niño DIOS no lo encontró, pues sus padres se lo habían llevado de ahí para protegerlo de las ordenes de Herodes quien había decretado la matanza de niños inocentes. La familia había huido hacia Egipto. Triste por no haber llegado a tiempo decidió seguir su búsqueda. La luz de la lámpara iluminaba la carita del niño quien emocionado siguió su relato. Al seguir su camino —prosiguió Ramoncito —quiso la suerte que Artabán se topara con los militares Romanos que cumplían las órdenes de Herodes. Uno de ellos tenía a un bebe colgado de una de sus piernas y estaba presto a degollarlo. De nueva cuenta el gran corazón de Artabán se apiadó del inocente. Acercándose al militar le ofreció el precioso jade que cargaba en su bolso, el codicioso soldado aceptó su oferta y liberó al niño entregándolo a la afligida madre, sin embargo, sorprendido en esa actitud fue acusado y obligado a cumplir una sentencia de treinta y tres años en prisión en las cárceles del imperio Romano. Cumplida su sentencia salió para seguir su camino. Sin dejar de ayudar al prójimo siguió su ruta hasta llegar al Gólgota, en donde alarmado escuchó hablar a la muchedumbre de la inminente crucifixión de un hombre que decían era el Mesías, el hombre enviado por DIOS para salvar al mundo.
Atrapado entre la multitud que seguía al redentor quien cargaba una pesada cruz de madera fue testigo de otro hecho injusto. Dos hombres de aspecto vil llevaban a rastras a una bella joven quien se resistía con todas sus fuerzas a ser conducida a una plaza cercana en donde sería vendida como esclava para pagar una deuda de su padre. Sin pensarlo dos veces se acercó a ellos ofreciéndoles el gran diamante a cambio de la libertad de la mujer a lo que de inmediato accedieron. De prisa llevó a la joven a la seguridad de su casa. Exhausto emprendió el regreso al monte solo para ser sorprendido por un gran terremoto. Buscó la seguridad junto a la pared de una vieja casa recargándose en ella, con tan mala suerte que una gran piedra cayó del techo sobre su cabeza dejándolo moribundo. Agonizando Artabán en voz alta ofreció disculpas por no haber podido cumplir su misión: Adorar al Mesías y entregar los regalos prometidos. Una voz imponente se escuchó en el lugar: —“Todo lo que hiciste por los demás, lo has hecho por mí. Hoy estarás conmigo en el reino de los cielos” —tomando de la mano a Artabán el Rey de Reyes lo llevó consigo… Ramón al terminar su relato guardo silencio. Luz María por su parte dejó que las lágrimas corrieran libremente por su rostro. Sin limpiar su cara se levantó del borde de la cama para fundirse en un cálido abrazo con su pequeño hijo… Fin Diógenes Escritor “Artabán” es un personaje protagonista del cuento navideño “THE OTHER WISE MAN” (“EL OTRO REY MAGO”) escrito en 1896 por Henry van Dyke (1852-1933) teólogo presbiteriano estadounidense.
Queridos Reyes Magos: Hoy 4 de enero, es el día del periodista; aproximadamente 20 años atrás decidí dejar atrás la comunicación y abrazar la docencia, y lo menciono porque mi primer deseo tiene que ver con los comunicólogos y porque los regalos que quiero no son materiales, son valores. Que se esclarezcan los asesinatos a compañeros periodistas; el destino quiso que le diera clases a los hijos de algunos compañeros, y haber presenciado el dolor, la horfandad, las consecuencias incluso en la vocación de estos jóvenes, me brindo la certeza de que los asesinados no pertenecen a una gráfica, así que el regalo que pido, en este caso es " justicia" Un regalo más difícil, es la segunda petición; les explico: la noche del 30 de diciembre fue difícil, pues me enteré del asesinato a una ex alumna, de quién me atrevo a decir su nombre porque no puedo aceptar que sea la número 19, Mónica Chazaro, quién egreso de psicología y fue también mi compañera de trabajo; aún conservo algunos pares de aretes que le compré en su época de estudiante; al despedir el 2018, pensé en su madre y su inmenso dolor. El segundo regalo es la "seguridad". A los niños les encanta jugar y a los padres nos gusta consentirlos, otorgando inútiles y caros regalos que solo nos endeudan.
Con la madurez te das cuenta de la importancia de dar amor y buen trato, escuchar y respetar su persona son regalos mejores. Aquí el regalo es el "amor " entre padres e hijos. Pero todo sería imposible, sin el último obsequio de ustedes para los hombres y este es " la voluntad" para llevarlos a cabo. Me hundo en el sueño de la imaginación, y espero mañana lluvia, quizá norte, para que lleguen a todas las casas, este 6 de enero, estos regalos: justicia, seguridad, amor y voluntad. Más que regalos caros, serían estos valores para una mejor sociedad para nuestros niños. Aprovecho para cerrar esta carta, agradeciéndoles tantos regalos y amor en mi infancia y el hecho de que en mi vida adulta me hayan otorgado la voluntad y los medios para ser generosa con mis hijas. Los abrazo de manera fuerte y cariñosa Mary Carmen Gerardo Veracruz, México
CARTA A LOS REYES MAGOS Melchor, Gaspar y Baltasar no dejes nunca a los de atrás, mejora en todos el bienestar, destruye el habito del malestar, reafirma el buen y sabio vivir, así como en paz, el buen discernir; ya con ello seguro llega el consuelo, y con éste, se instala el anhelo justo del sano convivir. Juan Guerrero México
Carta a los Reyes Magos Aquí me tienen con mis ojos pegados en una vidriera como aquella vez cuando niña mi madre me acomodaba las ideas para que entienda que ustedes tenían demasiado que repartir, que en mi rancho no podían llegar por tan empantanado barrial de una noche de tormenta. Pero la ilusión estaba ahí en un pasto cortado, un plato de lata con agua y esos zapatos negros con enormes agujeros por el recorrido que hacían de haber sido heredados. La noche se hacía larga debajo de unas sábanas remendadas con la esperanza de saber que ese año sería la privilegiada. Siii lo fui. Un columpio estaba en mi patio de arena mientras los ojos hundidos de la pobreza me miraban con envidia. De qué no lo sé. Pues al mecerme solo quería llegar a un Dios que pudiera quitar los miedos de que tan bello regalo tenía un costo muy caro. Pero no... no fue así... era un merecido regalo de los Reyes a cambio de tanto sufrimiento acumulado. Hoy lo sé, también fueron los impulsores de saber que todo es posible cuando los sueños se transforman en realidades. Zira Luz Aimé II
Queridos Santos Reyes: Lo que más anhelo es que blinden a todos los niños, que ninguno sufra por las malas decisiones y muchas veces maldad de los adultos, que no haya hambre ni dolor para ellos, que cualquiera que intente dañarlos con el solo hecho de que lo piense "algo" pase y eviten que el daño se propague. Más que juguetes tráeles imaginación, mucha imaginación desbordada que les permita crear muchos juegos pero sobre todo protegerlos y fomentarles la creatividad. ¡Ah! Y ayúdanos a los adultos a encontrarnos de cuando en cuando con esos sueños e inocencia que alguna vez tuvimos porque hoy será noche de reyes. 5- Enero-19 Isela Aparicio
CARTA A LOS REYES MAGOS ES NAVIDAD ÉPOCA DE AMOR VINIERON LOS REYES SIGUIENDO UNA ESTRELLA LA QUE VINO ALUMBRANDO EL MUNDO CON AMOR Y PAZ. SE PREPARAN LOS REGALOS CON PAPELES MULTICOLOR Y GRAN BRILLANTEZ PARA ILUMINAR EL CIELO CON RESPLANDOR Y ESPERANZA. LOS NIÑOS CANTAN DULCES VILLANCICOS POR TODOS LOS LUGARES VAN SONRIENDO CON JÚBILO PORQUE VENDRÁN LOS REYES MAGOS. MELCHOR, GASPAR Y BALTASAR NOS DAN MUCHA ALEGRÍA CON SU AMOR Y NOS DARÁN UNA GRAN PROMESA DE UNIÓN PORQUE EL NIÑO DIOS NOS CUIDARÁ Y GUIARÁ A TODA LA HUMANIDAD CON SU ORO, INCIENSO Y MIRRA DANDO ASÍ LA ALEGRÍA MUY ESPIRITUAL DE ESTA ÉPOCA NAVIDEÑA. LES AGRADEZCO QUERIDOS REYES MAGOS POR TAN HERMOSO GESTO DE AMOR. MARISOL SOTOMAYOR PUERTO RICO
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Queridos Reyes Magos”
Hace ya muchos años que no les escribo que casi olvido la forma en que lo hacía, antes dirigirme a ustedes era de manera tan natural, con tanta familiaridad que me resultaba tan fácil pedirles una muñeca, un tocador con pinturas, un horno mágico para hacer pasteles y muchas, muchas otras cosas más. Hoy, quiero pedirles una cajita con polvos de generosidad para cuando lo esparza el viento lo lleve a todas las personas y ellas puedan ayudar a sus semejantes, pues a la mayoría nos cuesta mucho trabajo hacerlo en este tiempo. Quiero también un frasco con esencia de humanidad para que su aroma nos haga más sensibles ante el dolor de los demás. Deseo una cajita con cristalitos de amor y que estos al destellar puedan transformar el odio en amor a nuestros hermanos. Y por último deseo una cajita con incienso de fe, para que al encenderlo su aroma nos permita recordar de dónde venimos y a donde vamos, pues la vida es el camino para llegar a nuestro padre. Camoni C.
HUELE A REYES De niña era mi mayor alegría ese olor a Reyes; despertar y percibir ese aroma, bajar las escaleras y ver junto al pinito de navidad los regalos que nos habían dejado a mis tres hermanas y a mí los 3 Reyes Magos; Melchor, Gaspar y Baltasar. El ritual comenzaba cuando mi mami nos llevaba a la iglesia a llevar la ofrenda para que los Reyes Magos pudieran ayudarse y comprar regalos para todos los niños. Después de ir a misa y dejar la ofrenda al regresar a casa colocábamos la carta en nuestro zapato y el zapato junto al pinito de navidad. Nuestras cartas comenzaban siempre así… Queridos Reyes Magos. Nunca olvidaré esa bicicleta con un moño grande. O cuando a mi hermana le dejaron una popo de vaca envuelta en un celofán y ella pensaba era un dulce grande. Ella enojada pidió eso… pues eso le trajeron. Obviamente en otra parte los Reyes le dejaron su muñeca y una carta. Qué recuerdos… todos con olor a Reyes. Cuando fui mayor comprendí que ese olor a reyes que yo percibía era el olor del plástico nuevo que venía en los juegos de té o en las muñecas. Después me convertí en Rey Mago para mis sobrinos; sí, para esos 7 pequeños hoy adultos y adolescentes que son como mis hijos. A un angelito lo perdí a 19 días de nacido en un diciembre del 2004 y aún recuerdo que su hermanito en ese momento pidió a los Reyes que le dijeran al Niño Jesús que le devolviera la salud a su hermanito y mamita que estaban hospitalizados.
A mi otro muchacho lo perdí en el 2015 y recuerdo que su último regalo de Reyes fue una gorra. Esos son recuerdos tristes que quisiera que ese olor a Reyes borrara y que todo fuera como un sueño. Pero lamentablemente es una verdad que no cambiará. Por muchos años disfruté siempre con ellos al darles sus regalos y seguía disfrutando el olor a Reyes. Hoy ese olor es más tenue cada día porque los niños ya no tienen esa ilusión, ni esa inocencia de esperar a los Reyes Magos. Ya son ellos los que van a escoger sus regalos, son ellos los que a otros niños les matan su inocencia y la creencia de que los Reyes vienen del Oriente. Durante cerca de 40 inviernos he mirado el cielo y ubico la estrella que es más luminosa y digo ahí están ellos. Antes les pedía juguetes o ropa y disfrutaba mucho recibir mis regalos con ese olor que invadía mi ser al despertar. Hoy en este 2019 en mi bello Veracruz y en mi hogar no huele a Reyes, huele a tristeza, huele a ausencia. Pero a pesar de todo hoy agradezco a mis queridos Reyes Magos porque siempre nos dieron lo mejor, nos dieron mucho amor y valores. Y a mis 45 años escribo mi carta y la comparto. Queridos Reyes Magos:
Hoy quiero pedirles que con su magia llenen nuestra Tierra de amor y humildad, ternura y empatía, compasión y solidaridad. Que en cada corazón depositen mucho amor para que la violencia, la envidia y deseo de poder se acaben. Pero el mayor de los regalos que hoy quiero pedirles es que marquen el camino que me permita a mí y a todas las personas que sufrimos de este dolor, para que podamos encontrar a nuestros seres queridos que se encuentran desaparecidos. Un día la vida y seres sin sentimientos nos arrebataron con saña a nuestros muchachos. Muchachos que un día también con su gran inocencia escribieron su carta a los Reyes y pedían sus juguetes favoritos. Y que hoy no sabemos dónde están. En esta noche de Reyes quisiera dormir profundamente y que al despertar mi casa estuviera inundada de ese olor a Reyes y con muchas noticias de mi sobrino desaparecido. Con noticias de dónde localizarlo. Si fuera posible con su presencia. Y si no es mucho pedir que en cada una de las casas que sufren lo mismo que en la mía sucediera ese milagro. Les dejo galletas y leche tibia para que cenen algo. Descansen y sigan haciendo felices a todos los niños del mundo. Los quiere Lupis María Guadalupe Castillo López Veracruz, México
Magas Las mujeres son reinas y son magas Tienen la palabra adecuada El acto idóneo Saben qué hacer con el sueldo mínimo En su sabiduría idean cómo hacer de comer y que rinda para toda la familia Reinas para transformar un cumpleaños en fiesta familiar Magas para ir a la junta escolar, asistir a la cita médica y presentarse puntal a la fábrica Son tres en una cuando es necesario (todos los días) mamá, amiga y proveedora Tres reinas magas que se elevan a santas cuando callan para evitar rencillas Abuelas, madres e hijas que con alquimia obsequian a la infancia cada 6 de enero María Guadalupe Martínez Bernal México