BEBIDA DULCE. BERTHA LARAF. VERACRUZ, MÉXICO Era una mañana tan fría, tan fría que cuando la mamá se veía las manos eran hielitos congelados. Marcaba el reloj las once de la mañana, el día a pesar del frío, en sus corazones se tornaba soleado. Muchas risas y gritos de los tres pequeños, pero Polita como siempre estaba aseada y ya peinada de trenzas. Justo en la cocina que tenía un gran anafre, había un letrero con la receta de la bisabuela para preparar el mejor ponche. La mamá de Polita, apareció abrigada tanto como se puede proteger alguien en el puerto, ¡la abuela le recomendaba ponte calcetines en las manos y guantes en los pies! Se sonrío… era muy bromista. Decía la receta frutas como caña, manzanas, ciruelas pasas, peras, de cada fruta 500 gramos, clavos de olor, piloncillo o panela, la cáscara de una naranja, todo esto en 4 litros de agua, al último el tejocote y canela. Le dijo la mamá, vamos al mercado a comprar todas las cosas del mandado, bueno, ya se sentía la patita. Tomó la lista, dicho y hecho empezaron a caminar por las empedradas calles de la ciudad. Mientras caminaban le contaba a su hija que el ponche de Navidad es una bebida dulce que data desde la conquista, su origen se cree viene de la antigua Persia. El mercado en singular ebullición, niños, niñas familias enteras escogiendo la mejor piñata la más grande, para la posada navideña, para romperla al canto de dale, dale, dale. Mas noche se desprendían los aromas de aquel exquisito y ancestral ponche, servido en jarritos de barro, con su raja de canela adornando, no faltó entre las invitadas, alguna comadre que pidiera un poco de ron, muy clásico, porque ponche que no tiene piquete, no sabe a navidad.
LAUREADOS AÑOS Elena Guzmán Ramón México El presente como símbolo de fortaleza, enfatiza el pasado aproximado, lo que de un ayer se culturiza. en este momento se cosecha. Cada día no es igual que el anterior, más significa el contexto del hoy, La decisión tomada y las acciones cumplidas durante épocas generadoras y creativas. Laureados años, sin dejar decaer el ánimo Año nuevo, existencia nueva, Que los suspiros dados no sean de satisfacciones añejas. Nuevo ciclo, nuevo año, etapa de transformación. Es tan cierto, queda claro que hay quien no madura con los tiempos, Ah ¡tontería no darse cuenta que todos precisamos crecimiento y renovación. Laureados años, que bien¡¡ Que buscan bienestar con resultados alcanzados Juventud, etapa madura, vejez. ¿Y después que más? Culminar con salud, armonía y felicidad Feliz navidad¡¡¡ que prosigan los años dorados.
Que se logren ahora felices años.
Navidad una vez más Felipe Cancino Castro Boca del Río, Veracruz. México Navidad una vez más llegas nuevamente me llenas de alegría y recuerdo al ausente Aun con un presente no es posible aludir a esos años preciosos que me hicieron sonreir Años maravillosos en que se compartía una mesa y ante todo la certeza de estar presente a la cabeza Aquel qué por tantos años tuvo la voluntad de mantener en paz su rebaño lleno de bienestar Haces Navidad que de nuevo viva en mi por lo menos en mi interior al que me educó para servir Aquel que fue dichoso de tener un hogar y que nos acogía ante tu llegada navidad Hoy que llegas Navidad puedes dar fe y constatar
que mi mesa está servida y te puedo dar la bienvenida Agradecer ante mi padre por la gran oportunidad de recibirte en mi hogar y mis fallas perdonar Todo hoy es diferente navidad hay presente que añora un mejor futuro y brindaré tenlo por seguro Por el bienestar y la salud por el amor y el bien común por la riqueza espiritual y serás testigo Navidad Navidad se bienvenida ante la dicha y algarabía y espero en este día saludar manos amigas Que me hagan recordar pero ante todo valorar lo que le vida me ha brindado y sentirme agraciado Por el hecho de saber que haremos todos comunión y agradeceremos unidos el nacimiento de Dios Por esos seres bienvenidos por los niños que han nacido y haremos una oración por los que ya han partido Por el ciclo de la vida pero ante todo Navidad
el mejor de mis brindis será agradecer por está vida. Que no sé si merecida pero te agradezco Navidad por el don de las letras y esta pizca de sabiduría Feliz Navidad ...
Significado de la Navidad Felipe Cancino Castro Boca del Río, Veracruz. México. Entiendes el significado de la Palabra Navidad tampoco lo conozco espero estás líneas te puedan ayudar. Navidad es detenerse por un momento y mirar con nostalgia hacia atrás recordar a todos los que un día fueron y contigo no sé encuentran de hoy en más. Navidad es entrar en comunión contigo y hacer una firme reflexión dar sin esperar recibir nada a cambio y enriquecer tu corazón. Navidad es alimentar al hambriento y no en un solo día dar a todos un buen ejemplo y compartir con todos la alegría.
Navidad es abrazar a tus padres cada día con el pensamiento siendo así y no fallar, la Navidad será un bello sentimiento. Navidad es no decir en este día ha nacido el creador porque desde que tengo memoria Dios vive en mi corazón. Navidad es aceptar quien eres y sentirte orgulloso decir gracias a la vida ser parte de este mundo maravilloso. Esperando que estás líneas te brinden un poco de paz sólo deseo querido hermano desearte una FELIZ NAVIDAD.!!!!
Un niño huérfano en navidad Jorge preciado Romero Seudónimo: El caballero letras y susurros España, Badajoz Camina un niño huérfano solo que vive abandonado en las calles desoladas el día de navidad, tiene las manos cristalizadas y no tiene donde calentar sus tiernas manitas ni quien le dé cariño y mucho menos juguetes. Llegó hasta un pino se sentó con una melancolía que le abrazaba el alma, y las lágrimas que le salía del corazón se cristalizaba de la frialdad de la cruda realidad de la vida. Un matrimonio ve al Pequeño desde el cristal de su ventana pidiendo Limosna para alimentar su estómago vacío, el matrimonio veía al pequeño tan triste y desolado que el cuerpo y el Alma se le estremecieron. Era una tarde fría de invierno y de nieve con los pinos con sus luces de colores, Estrellas, en las casas se oía los hermosos villancicos, pero el matrimonio miraba al niño desde su ventana, lloraban detrás de los cristales observando la necesidad del pequeño. El matrimonio ya no sentía igual la navidad al presenciar la injusta realidad de un alma inocente en la calle, el matrimonio llama al Pequeño y le invita a su casa, entra sentándose en la chimenea y las llamaradas se reflejaban en los ojos del niño, podían ver el alma noble del pequeño y la transparencia de su corazón, y en la luz de sus pupilas veían su triste pasado. El matrimonio da de comer al pequeño y sus ojos se iluminan, su alma triste se alegra abrazando el pequeño a la pareja emocionándose. Le preguntaron al pequeño ¿qué le pedirías a los reyes magos juguetes? el niño respondió que si tuviera juguetes los cambiaría por los abrazos y besos de sus padres. El matrimonio al ver al niño con tal necesidad el día de navidad
sus corazones inertes lloraban, juntaron las manos mirando al cielo y le pidieron a Dios que ampare a los niños estando siempre con sus padres porque es el mejor regalo que se le puede dar a un niño dándoles paz bienestar y armonía. Dios hizo el milagro al niño de darle un papá y mamá, de esta manera estuvieron juntos las navidades cantando villancicos con el matrimonio que fueron sus padres al lado de la chimenea, nunca le faltó besos abrazos paz bienestar ni armonía.
Ellos y nosotros Lucila Reyes González Ciudad de México, México Nosotros somos millones ellos unos pocos, nosotros llenos de ilusiones, ellos; son los locos. Los locos, que con un bolillo pasaran su navidad, tirados en un pasillo que les dará seguridad. Ellos sí son solidarios, su único bien lo compartirán, ya sea un pollo, unos fideos o un trozo de pan. Ellos a quienes emociona sentir de la droga su tibieza, olvidaran un momento su tristeza y sacaran el alcohol o la mona. Quizá hasta su hambre olviden y por unos ratos reirán, y la gente pensara que son felices y usaran ese pretexto para ignorar. Ellos, los sin hogar, los sin fortuna, festejaran bajo la luna y se olvidaran de rezar. Ellos de quienes ni tu ni yo queremos ver o hablar, ellos a quien preferimos ignorar, el sin hogar, el ladrón, el pillo, ellos van a festejar su navidad; con un bolillo.
MAGAS Autor: Ma.Angelina Bustos Bargas La Cruz, Córdoba, Argentina En un pesebre mullido de esperanza Un cobertizo de paja y eno te sirve de cuna. En el útero de una maga se gesta la redención del mundo. La misteriosa luz de un astro peregrino convoca y guía al lugar de encuentro. Los senderos se colman de sumisos pastores que ofrendaron su ganado. Un burrito de algodón ensaya nanas de alabanza y los arroyos murmuran villancicos de bienvenida. Desde el seno virginal profeta y mesías vienes a redimirnos con tu verbo y tu sangre. Las manos de las magas te reciben piadosas. Solo ellas reinas de la protección para los hijos ungen tu calvario de bienaventuranza. Solo ellas, las que enjugan las aguas de tu rostro en el tormento. Solo ellas, las que piden piedad ante la pedrea de los hombres. Ellas las magas, te ofrendan incienso y mirra para ensalzar tu nombre, y oro para engrandecer el poderío de tu reino infinito.
Navidad. María del C. Rodini. Río Tercero Cba. Argentina Llegó diciembre todo se vuelve a recordar revivir nuestra infancia envuelta en magia e ilusión. Las sombras se hacen luz son momentos de reflexión de gozo y alegría con aire de canción. Tendiendo luces de colores y blancas con villancicos vistiendo de fiesta todos los lugares con esencia de Navidad. Rodean Paz y Amor recordemos y celebremos el nacimiento del Mesías juntos familia y amigos reunidos a festejar, es así la Navidad. ------
EL CINTURON DE ORIÓN María Luz Olivares Aldana Veracruz, México Era diciembre, las pocas tiendas y cooperativas lucían su mejor iluminación, los compradores con bultos en las manos y casi tropezándose en las escaleras bajaban contentos, la navidad había llegado. En la casa de René los niños, hermanos y primos jugaban en el jardín, un columpio era el centro de sus juegos que, entre risas, jalones de trenzas y empujones todos esperaban el turno para mecerse en él. La casita era modesta, limpia y ordenada con un piso de madera que rechinaba al caminar. No había árbol de navidad, ni preparativos de cena conmemorativa, el pavo ni sus luces, sólo un mole con romeritos, pero sí ricos buñuelos, torrejas bañados con miel y un ponche de frutas del huerto con guayabas, naranjas y canela, todo un deleite al paladar. Ellos no conocían al viejo canoso bigotón y barbudo vestido de rojo que otros niños tal vez esperaban su llegada. Ellos esperaban a Melchor, Gaspar y Baltazar los 3 reyes magos. Las ilusiones rayaban en locura pues sus sueños eran cantar la posada, romper la piñata con cacahuates, bastoncitos de caña y dulces de colación. No faltaban las velitas y las luces de bengala, Y cantarle arrullos al niño del nacimiento que la tía Gelo entonaba orgullosa de su dulce voz acompañándolos a pedir la posadita. Después ya cansados de correr y jugar merendaron los sabrosos manjares que la abuelita Chayo y la Mamá Nena habían preparado. zumbador.
Entre mordiscos y sorbetes platicaban lo que en sus cartitas escribirían a los Reyes Magos. Que unos patines, un juego de matatena, bolsas de canicas, libros de cuentos, juegos de té, y muñecas de sololoy, y tal vez un balero y un trompo zumbador. Todos primos y hermanos habían colaborado en hacer el nacimiento con piedritas pintadas con blanco para los caminitos de aserrín y con betún negro de los zapatos del papá para las grutas y montes con paxtle y no faltando el pedazo de espejo para el lago y los patos, los palitos de paleta para los corrales, los borreguitos y los pastores el pesebre en su heno y un buey y lo más hermoso la virgen María y San José. Y en un camino lejano venían un elefante, un camello y un caballo y donde luego Melchor, Gaspar y Baltazar los 3 reyes magos que llegarían con regalos al niño del pesebre. Con oro, Mirra e incienso. El más pequeño de los niños preguntaba porque país o por dónde vendrían caminando y la hermanita mayor le señalaba el cielo y le decía: ¡MIRA! ¡MIRA! Allá están en esas tres estrellas que se ven juntitas y brillando intensamente. Por eso se sentaban en los escalones a contemplar el firmamento. Con la ilusión de ver más cerca las tres estrellas, pues tendrían que llegar la noche del 5 de enero por la noche y pudieran leer sus cartitas y dejarles regalos por ser niños buenos. Y el tiempo pasó... Hoy ya crecieron y por siempre guardan en su corazón la ilusión de su infancia. Y buscan en el Cinturón de Orión para así ver las tres estrellas brillando en el firmamento. Y también buscan la estrella fugaz que anunció el nacimiento amoroso del niño Dios en el mundo de los hombres y donde en una noche Paz nació.
LA ESTRELLA DEL ORIENTE. Mirella Guadalupe Salido García. Veracruz, Ver.
cuando mires en la noche oscura, voltea hacia el cielo azul, observa sigiloso la estrella que viene del oriente, es una estrella fulgurante, bella como ninguna, ella junto a su amiga la luna iluminan todo el espacio sideral. ¡Oh! estrella hermosa, de singular armonía, eres la luz de mis noches y mis días, eres linterna mágica, eres la luminaria que deslumbra el horizonte y nos das tus destellos de luces, nos contagias de tu mágica belleza, nos indicas que la navidad se acerca SI, llega la navidad cargada de esperanzas, de albricias y bienaventuranza que gloriosa eres navidad. Hasta el próximo año, estrella del oriente, te estaré esperando con ansias como siempre gritándote muy fuerte: bendita estrella, ¡Feliz, feliz navidad!
EL COLIBRÍ Y LA NAVIDAD. Mirella Guadalupe Salido García Veracruz,Ver. Había una vez en un espeso bosque, un hermoso colibrí que se encontraba muy triste, pues su lindo piquito estaba lastimado y no podía chupar la miel de las hermosas flores, su preocupación crecía y él iba desfalleciendo poco a poco así que un día se le acercó un ruiseñor que era su amigo y le dijo:¿por qué estás tan débil y triste?, veo que has perdido el bello brillo de tus ojos y ya no te veo jugar entre las flores.- me siento muy triste. Respondió el colibrí. Estoy enfermo y ya no puedo llevar regocijo a las flores y a mis queridas amigas las aves silvestres. -no te aflijas. Le dijo el ruiseñor, mañana será navidad y dicen que se cumplen los deseos, pídele al niño Jesús que te devuelva la salud, que sane tu piquito; así lo haré-contestó el colibrí. El colibrí mirando hacia el cielo hizo esta plegaria: niñito Jesús, concédeme la curación a mi piquito y yo te prometo que haré muy felices a todas las personas que me vean, que repartiré alegría por doquier, creare ilusiones y así con esa fe en su interior el pobre colibrí se quedó dormido sobre la rama de un árbol con la incertidumbre de un amargo despertar. Al día siguiente, el colibrí despertó sobresaltado, se dirigió hacia el lago pues tenía mucha sed y cuál no sería su sorpresa que al inclinarse a beber agua notó que su piquito ya no le dolía, no lo podía creer, estaba curado, eso era un milagro navideño. el niño Jesús le había escuchado, el colibrí emocionado le dio las gracias diciéndole: te prometo que haré muy felices a todos los que me vean, te contare
todos sus deseos, seré tu mensaje en el bosque y así se aliviaran pronto sus penas, esta fue una inolvidable navidad, el bosque lucia esplendoroso alumbrado con las luces de las bellas luciérnagas, los animales del bosque miraban hacia el cielo, rindiéndole homenaje a Jesús salvador, las estrellas brillaban a lo lejos y en el aire se aspiraba la fragancia de pinos, todo el entorno era de dicha, paz y de amor.
EL CAMINO Ramón de Jesús Hernández Olivares Veracruz, México Escasos seis años debí haber tenido cuando llegamos a casa, veníamos del catequismo con mi mamá y mi hermano que era un travieso que no podías controlar. Creo que pronto tendría canas verdes de tanto coraje. Yo un santo, de eso no tengo la menor duda. Cómo les vengo diciendo, en el transcurso vimos muchas velitas encendidas en las calles, me llamó mucho la atención, algunos vecinos las tenían en las banquetas y apagaban la luz exterior de su casa, se veía muy bonito todo. Yo le pregunté a mi mamá por qué y ella sacó de una bolsita de papel varias velitas de color café y me dijo que, así como los vecinos habían puesto velitas en la calle, que nosotros las pusiéramos en la barda de la casa. Ya emocionados de ver nuestras velitas encendidas, mamá nos explicó que en el mes de diciembre el día siete para ser exactos se festeja el día del “Niño Perdido “en memoria al niño Jesús cuando tenía doce años de edad, que se había perdido tres días a sus padres la virgen María y su esposo José. Cuando festejaban las pascuas, encontrándolo en el templo de la ciudad, platicando con los judíos, por tal motivo era algo así como indicar al niño Jesús a encontrar el camino para regresar a casa de sus padres. Creo recordar que algo nos había comentado nuestra catequista Rosita, de esta tradición navideña, allá en la iglesia del “Sagrado Corazón de Jesús” Antonio y yo estábamos super contentos por la experiencia de ver todas esas velitas encendidas en la barda de la casa. De esta conmemoración la disfrutamos algunos años más,
posteriormente fuimos a vivir a otra ciudad. El Maravilloso Puerto de Veracruz, en el esta festividad no se festeja, no sé, pero un mes de diciembre se nos ocurrió hacerlo en la banqueta de la casa, y los vecinos un poco chismosos se asomaban por las ventanas de su casa, hasta habían comentado entre ellos que estábamos haciendo brujería. Ya mi mamá les explicó la celebración y estaban maravillados con el suceso. Algunos nuevos amiguitos que vivían cerca de la casa, Jorge, Aida y Gabriel se acercaron a contemplar esa estampa maravillosa de la iluminación con velas. Han pasado algunos años, y me emociona aún recordar esa tradición, ignoro porque no se sigue, pero muchas veces cada ciudad tiene sus tradiciones. Desde entonces los días siete de diciembre, en punto de las siete de la noche, allá en mi ciudad de antaño se escucha un silbato para dar inicio al rito.
- El pasaje bíblico en el que está basada la festividad se encuentra en Lucas 2:39-52.
Rosa Caldevilla España Ya llega la navidad Las calles se visten de luces La mesa hay que llenar De manjares y dulces Eran fiestas religiosas Ahora son un derroche Hay que comprar y comprar Aunque al final algo sobre Habrá mesa en q abunden Los manjares navideños Habrá otros que no tengan Ni siquiera para una cena Los nietos los ilusionados Esperan los reyes amagos Unos les piden juguetes Otros tan solo calzado Pues fríos llevan los pies Y no tienen para comprarlo Dicen q aquellos niños Que bien se han ido portando Le traerán lo pedido Y con ello serán premiados Aquellos que no han tenido La suerte de encontrarlo Se quedarán cabizbajos Pensando que han sido malos Las fiestas que eran de Cristo Ahora son del consumismo
DIAS MÁGICOS Santa Velia Flores B. Sabinas, Coahuila, México Ya se acercan días mágicos que alegran y entristecen a la vez, todo cabe dentro de la magia la nostalgia y calidez. El aire transmite aromas que invitan a recordar, a sonreír, a festejar....a extrañar. Los fríos días nos envuelven, sólo la calidez se siente en el corazón que gozoso de vivencias venideras late al son del amor. Amor por la llegada de quien tanto nos amó, amor que se comparte en estos tiempos de añoranzas. El viento acaricia nuestro rostro, como beso angelical que nos recuerda que la paz es lo importante en todo tiempo, que demos al corazón ese regalo y la maravilla de ser agradecidos a quien por nosotros dio su vida. Es la navidad todo un festejo de alegrías, sabores y de abrazos, cubriendo de luces nuestra casa
...y tambiĂŠn los corazones. Y de confetis imaginarios que dan color a nuestros dĂas y a la vez llenando nuestra alma de alegrĂas.
"La Navidad de mi infancia" Sara Muñoz Gapiz Seudónimo Sarahaiadelina. Veracruz, México
La Navidad de mi infancia aún la recuerdo con gran nostalgia. cuando ponía el árbol de navidad con mi madre y yo contenta junto a ella. Y mis hermanos más pequeños y todos los niños por las calles con panderetas, para cantar la rama tradicional de mi Veracruz, pidiendo el aguinaldo de puerta en puerta. Y en las tiendas comerciales se escucha música navideña y la fiesta de las posadas, pidiendo posada para el niño Dios. Y romper piñatas y recoger dulces y comer ricos bocados tradicionales de la posada. Nos daban mazapanes, chocolates, mandarinas, caña de dulce y dulces de sabores. llenábamos la bolsa hasta los topes. Y después entre todos mis hermanos con alegría nos repartíamos. Que niñez de mi infancia junto a mi madre; ¡cuánto añoro esos momentos! pero ella ya ha partido con Dios y los ángeles. Nuestras fiestas navideñas eran muy sencillas, sin manteles de lujo y sin vajillas bonitas.
Sólo era una mesa puesta por mi madre con sus ricos guisados que ella acostumbraba a cocinar cada año. Éramos todos felices. Hoy mi corazón siente mucha nostalgia, que me invade cada año y ya mi madre no está conmigo...es otro ángel en el cielo. Recuerdo madre siempre cantaba canciones de navidad y nosotros junto a ella y yo me recostaba en sus brazos. Cosa muy rara, yo, pegadita junto a su pecho, casi lloraba pues era fin de año, ya terminaba un año más. Hoy ya no puedo estrechar los brazos de mi madre, hoy cada año es triste mi navidad. ¡Qué navidades más entrañables en mi Veracruz e inolvidables!