Poetas sin fronteras Mujer del Universo Marzo 2019 AĂąo 6 Ejemplar 62
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Ramón Hernández Olivares Director y Editor
Es la piel de tu existencia una caricia al mundo. Tienes el poder de un tornado en tu mirada calma, y el Ămpetu del mar en tus caricias tiernas. Eres el engranaje que mueve este mundo y endulza el viaje. Eres mujer y tienes el poder. Sar Poet Romero
LATINA Lucila Reyes González México Soy la mujer latina creativa y soñadora, soy la mujer de ahora, una mujer real. Soy la que estudia y se supera, soy la mujer que espera sacar adelante a su familia. No le temo a la ignominia que pretendan hacerme pasar, pues sé que se han de topar, con una fuerza avasalladora, producto de la mujer de ahora. No me limito, no descanso, alterno en todos los ámbitos me esfuerzo, me supero, he aprendido que el ser manso va de la mano con lo estúpido; y ahora ya no espero, lucho por lo que quiero. No quiero que traigan nada en charola, pues no siendo tan tarola, puedo lograr por mi misma, todo lo que quiera. Ha llegado una nueva era esta mujer no desespera, sale, lucha y recupera; soy la mujer de ahora, creativa y soñadora, muy emprendedora, la pereza y la flojera deje atrás
para realzarme con fuerza sabiendo de lo que soy capaz. He venido a ganar donde antes perdía, he venido a mejorar, dejé de lado la apatía, y ahora, sabiendo con quien estás, ya me puedes amar, no como a la débil que creías sino como alguien que es tu igual.
MUJER MARIA A. BUSTOS La Cruz-Córdoba-Argentina Quien pudiera cómplice de tu almohada atesorar tus sueños. Beber el néctar de esa piel en flor. Depositario del calor de tu cuerpo presentir la caricia y como un tenue rayo de luz que se cuela por la hendija de tu ventana beber la aurora en un rincón de tu alcoba. Ser el intrépido testigo de tu amanecer y robar complacido el silencio de tus suspiros.
A TI Santa Velia Flores Barrón. Sabinas, Coahuila. México. Donde habita mar y lago a la vez, con amor profundo y serenidad que invade. A Ti que dejas todo por lo que amas, que guias y vives por el sendero que tu corazón te traza. Que tu esencia impregna el borullo por donde pasas, que sigues firme, inquebrantable, segura de tu visión y tu propósito. A Ti manantial de sentimientos, pócima sanadora, cobijo celestial, balance de amor y placer, frescura del viento matinal a Mi, a Ti....por lo que eres, por lo que somos... con orgullo y respeto...Mujer.
Mujer casera. Omar Martínez Meza Ecuador. Mujer_ madre; ser insustituible, dotada de infinita ternura, amas sin censura, y no eres abatible. Mujer-esposa; ser engendrador, y acogedor, somos compañeros de lucha diaria, y eres del hogar luz y guía. Mujer - amante; ser de sorpresa, que vas directo a la presa, amas y deseas por demás, y no olvidas los encuentros jamás. Mujer_ amiga; ser complementario, dama de querer a diario, estas en las buenas y en malas, tú me das alegrías y alas. "Para el vuelo imaginario y mágico hacia el amor". "Mujer espejo de dicha y felicidad". Solo poesía para tus ojos. (Picardía y sal ).
“DICHOSO” Diógenes Escritor Boca del Río,Veracruz, México Dichoso sea aquel, que tiene a una mujer a su lado, que puede sentir su calor, recibir su cariño, estrecharla entre sus brazos. Aquel que pueda saborear, de su flor, la miel. el rico néctar de sus labios, sentir, como alcanza las estrellas, en cada beso, en cada libación, preciosas gotas de amor, que saben a gloria, a dulce rendición.
SOÑADORA Mónica Cifuentes Veracruz, Ver.México Siempre soñadora. Atrapada en sus sueños. Soñando en ser rescatada... Alma de niña traviesa, hermoso olor a manzana, a veces insegura pero siempre entregada y amando con locura. Quizá con certezas Quizá equivocada, conservando su esencia soñando despierta esperará un mañana.
Nuestra Mesa Mujer James Coonor Monterrey México Te recuerdo en el café, Cuando llegaste a nuestra mesa traías mariposas en la mirada y un suspiro eterno en tus labios, y a sus pies, la ternura de su huella dejando el camino marcado Para caminarlo conmigo Pero Yo... traía a la noche enredada en el viento y dos ríos reflejados en mis ojos… presagio de lunas y eclipses idos Doloridos en la esquina de mi rostro, ahogados en el tiempo Pero nos cambiamos con besos Donde unimos el horizonte de tus lienzos, y la alborada se pintó de atardeceres, con ternuras en la frágil pincelada de sus manos Pero ella... Cambio mi vida entre susurros Y arrullos de un te quiero... Si ella traía mariposas en sus ojos cuando yo me perdía lentamente, en la breve inmensidad de su mirada!!
OSCURO EN MADRID. (Osvaldo Pettinicchio-Daniel Vattimo). Argentina A la muerte del corazón pocos entienden, tal vez, nosotros la entendemos demasiado, porque lacró las manos de dos seres blancos que el cielo espera con un silente amparo. Me pregunto, que voy a hacer cuando te extrañe; cuando no tenga ni tus besos ni tu cuello. Cuando tu cuerpo se pierda entre recuerdos, cuando en vigilia siga en pos de tu regreso. Madrid se pondrá oscuro por un día, el día de tu muerte y de la mía. La vecindad clausurará sus ventanales como ojos ciegos intuyendo el alba. En esa alba en que seré tu dueño, porque nos mató un amor que siempre mata. Nos verán aparecer entre las gentes de aquellos viejos bares y posadas; entre tragos y chinos bailaremos abrazados como fue de antaño. Seremos como dos que se han amado, con ese amor que no sabe de quimeras… Que se quema bajo el Sol en los veranos rojos o entre las nubes grises del invierno se congela.
TE DAS. (Mensajes al viento). Osvaldo Pettinicchio-Daniel Vattimo Argentina Me sentí… como un chico armando barcos de papel con piratas de sueños de cartón andando solo por toda la ciudad Cuando te vi… consumí de unos ojos el dolor y como si nada, me acerqué Después… La charla le dio luces a sentir que la noche se acercaba sin temor y el tiempo comenzaba a sonreír. No te vi muchas veces… Me costó contarte toda mi manera de vivir, hay detalles que yo solo compartí con mi sombra, al momento de sufrir. No sé. Hay momentos… en que uno no tiene que temblar, aunque alguien de pronto se presente sin llamar. No hay temores cuando no tenes casi nada para dar.
Vivir… La vida es un poema que se pierde con el tiempo, que se disfruta como el vino, que se vela con la muerte… Hay veces que siento como me duele el porvenir. Hoy estoy… más cerca de las nubes que del Sol. Y sin embargo, cargo con esto de tenerte tanto allí, que me enciendo en un vuelo y te espero en el rincón más luminoso del color. Y vos… que sabes de rincones tan ocultos en la luz, también te das.
Mujer James Coonor Monterrey México. Tan inmarcesible, bella... deshojando una caricia Cuando mi silencio encuentra El sonido de tu voz En una larga noche sin ti Eres mía como el alma que deshila Una caricia que suspira entre tus labios rosándome En una tarde sin final Y soy tuyo Cuando esa dulce ternura Sabe reconocer el tiempo Que nos une en un sinfín De mis versos de poeta Diciéndote te amo... Y eres mía y yo tuyo Cuando nuestro amor Arde como una llama Indeleble dentro de mi y de ti
MUJER DIOSA. Bertha Laraf. Veracruz, México. Mujer diosa, recupera el reloj de arena destapa tus secretos, rescata tu ser, bella morena. Sacúdete, libérate, vístete de suave rosa con pétalos echados al viento, dispersos en el firmamento. Aunque fuera solo un segundo o un inhóspito momento, sin obstáculos, sin fronteras ni de aquellas verdes quimeras Empápate de plumas de quetzal, envuélvete en espumas báñate de fragante sabor a sal, brota virtuosa ¡mujer universal!
Ingratitud Felipe Cancino Castro Veracruz, México La mañana aún no llegaba el reloj marcaba las siete menos diez camino al colegio los estudiantes apresurados al grado de correr. La chica de nombre desconocido cabello negro bien peinado rimel expresivo. Falda corta más de lo común labios coloreados belleza y juventud. Llamaba la atención por su balanceo figura definida y pies pequeños. A tres metros de distancia apresurada por la edad sin lugar a dudas su abuela que la debe acompañar. La chiquilla estresada no puede disimular avergonzada por su compañera por la vestimenta, su torpeza y su andar. Llegada a la puerta donde se amontona la juventud unos bajan de sus autos otros más del autobús.
Entre los empujones propicios de la edad la canosa y tierna mujer trata un beso a la doncella robar. No fue posible entró corriendo sin miramientos de sus ojos brota una lágrima ingrata que tendrá que borrar el viento. Cabizbaja pero orgullosa emprende la retirada que importan las molestias de su edad ya avanzada. Que importa si no tiene miramientos de quienes procuró cuando era joven y brinda sus sentimientos. Cuánta ingratitud puede haber en nuestra sangre ella que ha Sido fuego sabiduría, vida honorable. No olvides tenerla presente como puede suceder aunque arrugada cabello blanco y cansada aún es una hermosa mujer…
A LA MUJER José Luis Jiménez Ayala Veracruz, México ¿Quién soy para hablar de ella? ¡Sólo tutelaría otro paradigma! Debe ser el tiempo y la historia ¡Quien a la mujer llene de gloria! Ejemplo de vida, educación, en luchas laborales y en el arte dejas mujer huellas al forjarte que causan hoy la admiración. Quiero en mis breves palabras resaltar, aplaudir y dar mención a toda mujer con emancipación en luchas para ser reconocidas. Mencionaré a mujeres de letras que fueron obligadas a escribir bajo seudónimo y ninguneadas y pese a todo hubieron de existir. A Sor Juana Inés de la Cruz que a pesar del tiempo y espacio que vivió, con su pluma dio la luz a la poesía, elevandola al máximo. A Jane Austen, que es quien criticó las diferencias sociales, de género propias de su época con su novela Orgullo y Prejuicio y su obra Abadía A Rosalía de Castro por sus obras en Cantares gallegos y follas novas que reivindica su identidad y lengua. Aún su pluma inspira a todo poeta.
A Virginia Woolf, figura literaria del monólogo interior y narrativa pionera de la identidad femenina relaciónando el arte, mujer y obra. A Gabriela Mistral poeta universal, Incluyó indigenismos a lengua oficial. Con la igualdad vivió comprometida, y ganó un premio Nobel de Literatura. A Doris Lessing, Nobel de Literatura. Abordó grandes conflictos culturales en episodios de la desigualdad racial inspirados en su experiencia personal. A Svetlana Aleksiévich una periodista En sus historias de las guerras deja ver que "La guerra no tiene rostro de mujer". Es hoy la primera escritora de no ficción que gana el premio Nobel de Literatura es la última mujer, que obtiene galardón. Son muchas las mujeres hoy en la tierra que trascienden más que los hombres en las profesiones oficios y actividades ¡ modelos de intelecto, sin duda alguna! Los hombres, en la mayoría de países apoyan ahora tan loable trascendencia, sin embargo mujer, ¡da la independencia en el mundo y libera a todas las mujeres! ¡Así cada mujer en el mundo trascenderá como trasciende cada semilla en la vida! En ciclos de hija, mujer, madre, abuela. A toda mujer, hoy la felicito en mi poema. por ser el intelecto, guía, líder y creativa. Gracias creador por tan bella compañera.
Nunca Juzgues Autor. Felipe Cancino Castro Veracruz, México Nunca juzgues sus pisadas si desconoces los caminos que ha transitado nunca te atrevas a sus espaldas señalar su honrado pasado. Jamás señales sus errores si estos pueden ser visibles jamas la critiques sin saber si ha sacrificado sus abriles. No mires y que no te importe la manera en que gana su alimento si ha Sido hada, heroína o la villana de algún cuento. Nunca pongas atención a su sonrisa si está luce desencantada al no tener idea de lo difícil que han Sido sus pesadas madrugadas. Jamás te atrevas a cuestionar sus decisiones por muy difícil que estás sean sin saber si en ella se pierdan todas sus emociones y no se asombre al mirar en el cielo las estrellas. Ella solo vive y despierta para alimentar ese gran amor para proteger como una fiera su nido
sin importar haya de por medio dolor. Erguida, valiente y serena es capaz de enfrentar la furia del mar porque está en su naturaleza ha sido concebida para amar. Jamás cuestiones su figura sus palabras o su fe tan solo admira y aprende de tan especial y maravilloso ser. Porque así sea de su último aliento o gota de energía pura limpia y toda entrega ella es capaz de brindar su propia vida.
Mas que una mujer Alejandra Inclán Veracruz, México Nacimos sin ser, crecimos sin saber cómo ser, vivimos sin conocer el camino correcto y al final, quizás sin querer, quizás sin pretender o tal vez queriéndolo todo, desafiamos y nos encontramos con mil obstáculos para florecer, para ser más que una mujer…
"Corazón de diamante". Jorge Alberto Troncoso Juárez. Veracruz, Ver. Tan frágil, en apariencia, como el cristal. Tan duro, en consistencia, como el acero. Por lo que pocos accesan en la profundidad de su capullo protector. A esas altas temperaturas; de su avasalladora pasión contenida, que resguardan sus virtudes. Se necesitan muchos años para, cual ave fénix, renazca de entre las cenizas. Y quien logre conquistarlo, aprecie, su magna belleza, en sus cortes. Esos trazos que el tiempo no hizo al azahar, sino por experiencias. Si lo encuentras, si lo tienes entre tus manos, cuídalo y protégelo. No lo profanes con el taladro de tú maldad o alguien más lo encontrará. Pero no lo encierres, necesita respirar, para compartir su belleza, y su alegría de que lo poseas. Así es el corazón de mujer.
Mujer Golpeada Nilda Acosta Argentina Sólo te calmas cuando un hilo de sangre corre por mis labios. Ahora tu desamor es como un fantasma que me quita el aire y la vida...ahora el desamor se desahoga con tu puño contra mi estómago. Y los moretones me aíslan de la luz, de la calle , de la gente. Me convertiste en esto que soy, una sombra de dolor Siento culpa, impotencia y desamparo, sin encontrar la salida en un túnel en el que me rodea el terror. Ahora tu desamor grita, insulta y me hace creer que lo merezco. Yo...era alegría, ahora soy silencio. Yo, me sentía mujer, ahora soy ausencia. Un día esta cárcel me verá renacer porque sé lo que valgo y lo que soy. Desplegaré mis alas bajo un cielo de esperanza, sin lágrimas y ya sin dolor. Las cadenas caerán y seré libre para amar y ser amada. Al fin, las espinas serán olvido y yo... conoceré la suavidad de la rosa.
“IMPAR” Jorge Gabriel López García Veracruz, Ver. México Juegas siempre con diez niñas que cantan en tus caireles, que saben correr veloces entonando primaveras, revoleándote mañanas que se alargan en luz… te galopan en el pelo, candorosas, sorpresivas, agitadas… Hiperventilas rosáceos placenteros del ayer. Fronda tu boscaje erótico y creativo, amatorio de tierras que pudieron ser, el destino y auge de tu verde antiguo, pero que no cabe ni ataja en crecer, que es un golpe andante de la esencia prima, que atraviesa fuerzas de lo sideral…y al abrir tus copas de sombra y enigma, brotas del cerezo y del aguazal… y entonces te bebo; primitiva, titánide, infinita…voluptuosamente salva en valles, vasta de semillas de celeridad, aguardando humedales de vigor y tiempos, para liarnos salazmente tal como se enredan los colgantes bejucos bajo aguacero; ¡como un torneo de rayos abismales!, una justa de axiomas indefinidos, ¡un cataclismo en tregua contenido!… ¡bah!... ¡una lid de milagros fatales! Juro en tu torso, como oficiante clandestino, como mordiendo un durazno ¡que revienta eternidad!, extirpando tu savia insomne y soñante, tu savia lacustre, cósmica e intacta, perfecta; que busca, que repta, como salamandra acuosa…transparente, lactífera, escurridiza, acechando en los rincones de tu estrujante silencio; ¡qué es un libro de pólvora encendido!, que se fuga pronto…pero sin olvido; que a bajas cenizas vuelve a ser latido, de ariétidas diurnas ¡prolíficas de inmensidad!
La castidad no está en tu cuerpo, sobre tus pechos zorzales ni en tu ombligo astral. Tu sacralidad adviene de mares, de dialectos profundos…de la eternidad. Mora en tu celo de pensamiento, tu interés de estrella y causalidad. Se encumbra en tus aguas, llenas y altivas, del Aries que engendra del viento impar… Yo soy el tiempo, Marlene… que tampoco acaba. Yazgo suspendido entre tu verdad. Quieto… siempre quieto como el sauce herido… lánguido y ficticio; vago e irreal. Nazco de tus ojos, marco los solsticios de tus transitorias risas sin final… Y ante libertades cortas y sumisas, vuelvo a ser principio, verbo y voluntad. Paridad no tienen las cavernas de lo incierto. Paridad no intenta la nebulosa de los siglos, ni los capullos tripulantes de la ingenuidad. Eres tú quien aúna todas esas fuerzas, las sobradas sales, los sobrados tumbos, para en contra ritmos, resurgir el mar. El mar de tu nombre que zurce las noches, las hordas de estrellas ¡y las vuelve clan! Se van hilvanadas con todos los puntos iridiscentes de tu edén interno, silvestre, abusivo, trasgresor, ¡mortal! Azotas en ecos. Retumba el espacio. Resonante y denso. Yo no sé girar… Adentro aturdido para desunirme, separarme en polvos de tu negritud crucial. Y entre los añicos cansados y obtusos, tu amplitud constante vuelve a remendar. Reconcilia el orden de mis estaciones y mis legiones de ambigüedad. Te comulgo toda; ¡fulminantemente!, reactiva, contraproducente, ¡como una vislumbre colateral!... ¡Y diviso El Todo!… ¡y grito a tu mano!, ¡para reintegrarme a mi humanidad!... centelleos, tienes centelleos que cunden tu espacio, y yo soy la inmensa nada que los sostiene.
En la complicidad discordante de nuestro sincretismo rendido, vamos ofrendando el retruécano de nuestra extensión ligada. La salvación del impávido no es consonancia natural de su templanza, surge de algún fuego que le da raíz. La expansión mía, se abre con tu lanza, tu punzante consciencia que me estratifica, que detona al vínculo y lo amplifica, ¡que arroja y regresa mi yo fractal! No entienden de pasiones los cardos secos, si se adornan de espinas para equilibrar, y la luz que engullen no repara al centro ¡pues al ser clavada, se cercena mal! Así de mis trozos recoges todo y si es necesario ¡me recortas más! ...Y el entallo no vive por ser suficiente, sino que hace capullo amorosamente entre los candores de tus lozanías y las plumas rojas de tus cardenales labios que entintan y empalman mi necedad… Hay temporadas que saben a frutales vientres… a calandrias germinadas del sesgo matinal; ¡horas ingenuas, castas, florecientes!! ¡Imprudentes, melifluas del amor vivaz! Hadas renacidas cándidas e indulgentes, ninfas vegetales que siembran corrientes… y entre hojas de otoño… se estacionan… mal.