POETAS SIN FRONTERAS AGOSTO 2018

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Poetas sin Fronteras

Agosto 2018 AĂąo 6 ejemplar 52


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Hostal de Aves Ángel Valenzuela Ruvalcaba Veracruz, México Inquilinos del ruido y la polución, huéspedes del amanecer urbano. Aves que madrugan, se despiden, recuerdan su rama y regresan. Copas de árboles bajo la luna, son hostales en el medio de la calle, repertorio de silbidos en el ocaso. Aves que invaden lienzos vivos, que raptan la atención auditiva. Siluetas compartiendo raíces. Ya después el sonido disminuye.


La necesito Alejandra Inclán Veracruz, México Cada día necesito unas gotitas de vida, de líquido filosofal, de esa fuente que me permite continuar, de ese amor, de esa denuncia, de esas palabras metafísicas, de esa alegría, de esa tristeza, de los versos, del ritmo, de la métrica, la prosa libre… de lo que somos, de lo nos ayuda a descifrar nuestro existir… Poesía le llaman, no sé, yo sólo la abrazo y la invoco para encontrarle sentido a mis palabras y a mi alma.


Dicotomía América Guerrero González. México Fuego interior y agua. Anoche llovieron estrellas… Dejo las sábanas con dificultad nace el otoño. Cálida y tempestuosa la mañana llora… lágrimas resbalan en el cristal de la ventana. Dulce y fatal Miro el cielo… perezosa. Anoche llovieron estrellas… Ingrid silba, revolotea, despeina la fronda de los árboles Vuelo y muero en este poema ebrio de lluvia, de aroma a tierra mojada. ¡Torva inquietud! ¡Corre… Corre! Los ríos desbordan sus lechos… arrastran lamentos de muerte voraz destruyen su cauce. Místico llanto; acústica de abismo. Anoche llovieron estrellas… Inexorable… vibrante poema ebrio de lluvia muere… muere. ¡Quiere morir cantando como muere la cigarra!


Esta vez no. Bertha Laraf. Veracruz, México Esta vez ni siquiera lo sueñes. tampoco lo pienses ni veladamente. Esta vez no. no serás parte de mi secreta colección de amores imposibles románticos… platónicos, tengo archivos recónditamente ordenados minuciosamente por nombre por abecedario por rio, por mar por océano sé que venimos de encuentros lejanos por día, por mes, por siglos sin concluir los besos perversos los besos matutinos los besos furtivos, los besos que maquino Estaré al borde del precipicio por ese inesperado momento en que tú, en que yo con corazón nos demos nos volvamos dadores de amores placenteros primero rebosantes de miel luego, repletos de luceros.


Mi espejo Carina Andrea Córdoba, Argentina En verano, es arroyo que arrastra pasión de ciruelos y ternura de damascos. En otoño es viento sedicioso de castaños crujientes y amarillentas perezas. En invierno es frío que dibuja estrías en el ventanal con el aliento del cuarto y decora con mandalas los cristales de nieve. En primavera, es lluvia acariciando glicinas y rosados durazneros. Pero en la quinta estación de tu nombre es fuego. Baja la mirada cuando mi boca es racimo en el trapiche sediento de tus besos. Con el cincel esculpe llaves y cerraduras, en la penumbra es eco de susurros y juramentos, él lo sabe todo, en sus arenas cabalga la memoria. Conoce mi secreto, es guardián gemelo de tu piel que no me pertenece. En lo solitario de la noche le pregunto a mi espejo si en tus ojos negros, otros ojos, legítimos dueños, encontrarán mi reflejo.


Sólo, a veces Héctor Daniel Paz Córdoba, Argentina Cuando abro los ojos y mi atención mira hacia los costados, comprendo lo que la vida me entregó en todo éste tiempo. Cuando extiendo la mano para rozar las energías de lo que me rodea descubro todo lo que la noche de mis menosprecios fue tapando a los sentidos apagados de mi yo. Sólo…cuando. Porque avanzo entre sonidos que ingresan a mi interior, sin mi beneplácito, comparo el calor y el frío de mi caverna. Porque el espejo de mi destino me muestra la figura encorvada del cuerpo que ya no entiende de vanidades, es que razono la inacción de la vida que sueña en mis ilusiones. Sólo… porque. Como empujo los días pensando en las sensaciones que asaltan mis ideas de lo perfecto, es que me confundo. Como siempre, el pasado se mezcla con el presente y miro por la ventana de lo ido, que permanece omnipresente, y el agradecimiento me hace levantar los brazos con una sonrisa. Sólo…como. Donde las tardes se mezclan a la noche con nubes de tormenta, pienso que el día del mañana nunca llegará. Donde los aromas de la naturaleza me sublevan a lo que la ciudad tecnológica, que se mete por una portezuela inmensa, a la sociedad indolente que no se resiste, ni enfrenta. Sólo…donde. Entonces Sólo… a veces, grito mi enojo y tristeza al destino que no aglutina pensamientos ni modos para descubrir el juego que la vida nos preparó, al concebir un mundo de extremos tan inescrutables a mi mirar. Sólo…a veces.


¿Ascender? Héctor Daniel Paz Córdoba, Argentina Hoy comencé a escalar por sobre todos mis escasas sensaciones y saberes, tratando de subir a la cima, y no encontré el principio de esta locura que excedió a la vida, con la acción única del hombre. La naturaleza algo aportó pero muchas veces entusiasmada con el descontrol que generó esta señera raza, a la cuál pertenezco y que no voy a eludir. ¿Qué está bien y qué mal? ¿Qué es bueno y qué malo? ¿Dónde lo positivo y lo negativo? La historia cuenta a través de la palabra lo que en otrora ocurría. No hubo gran tecnología, religión, cultura, o gestas de experiencia, que hubieran aseado a la carretera de la autodestrucción que está planteado en la estirpe humana, desde el umbral. Los políticos lideran los procedimientos que marcan a la vanidad como el comportamiento madre, entre todos los defectillos que carga este habitante de la tierra. Sin duda el sistema democrático, tal como está planteado y manoseado no destruyó las castas y las realezas, las cambió de lugar. Las leyes que surgen de ellas son las espinas que lastiman la sociedad y en esa falta de sapiencia el hombre común, el que trabaja y se jubila, encerrado en una pieza, y el que cree por instantes, estudiando para mejorar, se cansa de llorar su inocencia y se convierte muchas veces en un fanático por el solo gusto de creer pertenecer a la historia. Quise deducir cuál es el sentido del paso por la vida y comprender el propósito del colosal equilibrio del Universo al dar alberge a nuestra raza en el mínimo espacio de un planeta y que a días de haberse formado ya tiene un final trágico a la vista por la irresponsabilidad genética y de decisión que cada uno, y en su individualidad, tomó. La oportunidad está en el momento que todas las sociedades se conviertan en un gran espíritu armónico y comprendiendo que nadie se lleva lo que al nacer no trajo -si al arribar creyó que el cuerpo o envase era su elección está errado-, dé paso a los humildes y buenos para crear por sobre lo que queda.


Almas Isidoro A. Gómez Montenegro. México Flores azules remozan nuestras almas tiempo… quédate inmóvil, adormece granos de arena sílice del reloj. La noche cae sobre mi cabeza con impulso abro el paraguas, cae la lluvia; nostálgicos recuerdos aparecen abisman mi alma. Descifro enigmas de lluvia taciturna giro en tus órbitas, cual asteroide. Me abrazo a tus cenizas en siete círculos; aíslame en tu luz. Círculos dibujados en instantes. Beso tu sabia imagen… alfaguara de agua torrencial, piedras cantan tus colores; helechos en tus ojos. Rayos en la oscuridad rasgan tu mirada. Venas, hojas desprendidas dentro de ti; destinataria del amor. Irradias desde el vientre temerario: Deseos de ser amada más allá de juegos amatorios. Eres paraninfo donde recito mis poemas en otra voz.


Dejas en espejos palidez ocre invisible, cohibida piel, absoluta fidelidad. Abriga el verano la ciudad, la estación inicia en estuche de aroma crepuscular. El tiempo ha transcurrido… perdura belleza y arte. Se abren sendas excitantes… cruzo umbrales en ciudades desconocidas. Con vergüenza ante la ordalía.


CON TU PARTIDA Jair Aguilera Veracruz, México He visto como pasa el tiempo en mi vida, como lograste hacerme tanto daño con tu partida, El tiempo pasa en todo, incluso en tus pertenencias. que con esta esquizofrenia escucho hablar y me preguntan dónde estas? Se muy bien que la muerte es un bien necesario, un paso final y a la vez primario, Ahora entiendo por qué todos llegan y se van de esta vida llorando, te he llorado mas de lo que mis lagrimas han podido, te he gritado y lastimosamente a mi llamado no has respondido, Han pasado solo 3 días desde que partiste a aquel lugar donde tus sentimientos me decías que serían eternos, Se que me esperas y quisiera estar a tu lado pero por mas que lo intento alguien me cuida y me impide hacerlo, sé que eres tú, quien con todo su sentimiento me impide a mi dar fin a este infierno. ¿Cuánto más? Ya no quiero esperar quiero verte, abrazarte, TE QUIERO VOLVER A AMAR.


Mi sueño James Coonor Monterrey Nuevo León, México Es verte sonreír siempre Quererte como eres así En la simplicidad cotidiana Porque así aprendí amarte Acariciando con palabras pero más escuchándote, tus pláticas esas que te gustaba decirme con el café en los labios Hablabas y escuchamos entrelazamos un camino indestructible entre los dos, era escucharnos Mi sueño es quedarme y que te quedes conmigo no sé como, Ni el tiempo, pero amarte así Por siempre aunque fuere Solo en tu mente, en tu recuerdo... Pero quedarme contigo...


Vestido James Coonor Monterrey MĂŠxico Me gusta ver tu vestido Entallado ese que imagino Quitarte a la luz de la luna El que puesto sobrevive A la imaginaciĂłn De tus volcanes y Valles De tus caminos sinuosos Y que anuncia besarte entre la luna y la aurora, en ese lugar tan breve Que solo yo conozco Cuando mi piel estremece. Me gusta verte con tu vestido Entallado ese que imagino Quitarte a la luz de la luna, Para amarnos...


Adiós James Coonor Monterrey México De estas soledades mías donde habitaste un tiempo, sentado en los portales de mi casa y durmiendo entre mis sueños Hoy... levantarás tu viaje como lo hacen las golondrinas que jamás regresan… dejando en libertad el nido Y es que fueron tanto los presagios, las horas y las lunas amontonadas en una misma noche, que me hice amigo del desvelo Y arropé en mis brazos alguna caricia huérfana, que parecía perdida… sobre un pliegue de nuestra sombra.


Mi día José Manuel Ambrocio Veracruz, México. Amanecer radiante, rayos del sol brotando de mi pecho, primogénito, deseado, amado, llanto atendido cubierto de besos en el regazo de una madre amorosa. Mañana iluminada con la sonrisa inocente, del que paso a paso descubre el mundo, se asombra, asimila, brisa de mar llena de conocimiento, sal marina sazonando la curiosidad innata, inagotable. Es ya mediodía y de la nada aparece, sigiloso, tímido, el llamado del corazón, el amor primero, el que deja huella, miel sobre miel, el segundo amor, de decisiones, de compromiso, tiempo de segar la mies que alimentará la vida futura.


Tarde brumosa, agridulce, claroscuros inevitables, ruptura de lazos dictada por el destino, viento del norte que arrastra cardos, espinas y duelo, aferrado a mis dos pilares me salvo, mantengo la cordura, salgo a flote. En mi anochecer brilla la luz de las estrellas, serena el alma, esplendor de luna, muy cerca del ocaso, ÂżFeliz?, si, mucho, satisfecho, amĂŠ, soy amado, mi vida ha sido feliz, sin importar los altibajos, los sinsabores, las amarguras, doy gracias por estar aquĂ­.


16 de julio 2018 Querido diario.

Hoy me vi al espejo. ¿Quién es ese hombre de blanca barba que tan serio me mira? —Soy yo. En qué momento llegué a estar tan viejo. Cuantas penas debí haber pasado para verme así, quizá solo haya sido el tiempo que me llenó el alma de cicatrices y que en algún momento borrará mi sonrisa y arrugará mi ceño. Confronto a la imagen que me mira y serio le pregunto. —¿Cuánto tiempo me queda? —No lo sé, ni quiero saberlo— decidido me responde. Pues entonces, ya que no lo sabes, seguiré aspirando de los botones de las flores sus perfumes, dormiré con mi cabeza apoyada en un par de palomas suaves, generosas. Descubriré noche a noche el paraíso en la tierra mientras pueda. ¡Bien por ti! —Le digo mientras cómplice al reflejo con el puño cerrado pego suave en mi mentón y le hago un guiño—. José Manuel Ambrocio Veracruz, México.


TRISTEZA Lourdes Lagardery Puerto Rico Que triste es pensar que ya no estas, que irremediablemente tuviste que partir y obligo al corazón a no pensar para no alimentar este sufrir. Que triste soledad la de mi alma, no puede acostumbrarse a tu partida, ya no hay aliciente, ya no hay calma que traiga paz a mi desierta vida. Algún día habremos de encontrarnos donde el sol ya no brinda sus destellos. solo Dios habrá de recordarnos, cuando también me vaya allá, lejos...Muy lejos


Luna y yo Lucila Reyes González México Luna que adornas los cielos, que escuchas mis lamentos, tú, que sabes de tormentos, conoces mis desvelos, y los terribles momentos, por el infierno de los celos. Tú que sabes reconocer, el sufrimiento que le provoque, cuando arrebatada lo rete, me sentí enloquecer, su intimidad no respeté, ahora sufro porque se fue. Comprende un poco mi duelo, pues ya no vivo ni muero, sólo la muerte yo espero, espero que se acuerde de mí, y me perdone por fin., porqué al igual que tú me desvelo, desde que le vi partir. Tú que lo ves desde allá, cuando lo veas salir, dile que lo quiero, esperando que me llame a su lado, dile que sólo a él he amado, dile que tenga piedad de mí.


Sí tienes una hermana Lucila Reyes González México Sí tu madre se fue, Pero, tienes una hermana; Verás que ella sigue contigo, la encuentras en su sonrisa, en su mirada, en sus consejos, y en su corazón escuchas sus latidos, y su sonrisa tiene su reflejo. Si tienes una hermana sabes que tienes alguien que te ama, como te amó ella y que jamás te dejará ella conoce tu lenguaje secreto, y también sabe leer tu mirada, sabe cuando estas frente a un reto, y conoce cuando estas angustiada. Sí tu madre se fue, pero tienes una hermana, te das cuenta que; no todo esta perdido, ella reirá con tus peores chistes, y llorará tus tristezas,y podrá conducirte, en tu agobiada existencia. Si tu madre se fue, pero tienes una hermana, dá gracias a la vida, pues, ella no será solo compañía, ó tu mejor amiga, o tu hombro para llorar, ella será; la mejor persona, que podrás encontrar. Sí tienes una hermana, debes dar gracias a Dios, por enviar un consuelo, un enorme consuelo, para las dos.


RUINAS María A. Bustos Bargas La Cruz-Córdoba-Argentina Húmeda la pupila retiene ingrávida tu figura. En la oquedad de la caverna la memoria resiste la distancia. Lágrimas calladas dibujan sílabas de arena. Y mis manos plenas de oscuridad contornean los muros de un castillo destruido. MANZANARES María A. Bustos Bargas La Cruz-Córdoba-Argentina Un bálsamo oloroso inunda la tarde sonrojada de manzanas. El fruto prohibido del génesis seduce las mariposas que ávidas de eternidad revolotean en el ocaso. Perfección de mujer magia y fertilidad se funden en la incertidumbre del pecado. La desnudez del invierno incendia los atardeceres de julio con el fulgor rojizo de los manzanares.


Autodidacta María Guadalupe Martínez Bernal México Aprender a vivir con carencias No hay curso o taller para eso Enseñar el camino a seguir No promete éxito Copiar Aparentar Fingir Algún día la verdad se sabrá El tinte de la tinta va a caer Entonces sin máscaras Sin dentadura Sin uñas postizas Sin castillos Engendraremos sendas Para hacer caminos reales Porque el mundo continúa el giro sobre su propio eje... Porque la luna se esconde cada amanecer... Porque tu conciencia tiene voz... Porque tienes el nombre igual y careces de talento Porque la mentira tiene fecha de vencimiento... No encontrarás la cadena Sigue creyendo que sí.


ATRAPADA POR UN SUEÑO María Zacarías. Seudónimo: Mariana Potosí. Argentina El tiempo corre por mis pupilas, retazos de lana que tejieron ilusiones se enredan con las fibras de un corazón marchito. En mi respirar profundo susurro incoherencias que en sueños la bruma, tapó con recuerdos. Recuerdos imborrables que producen un dolor inexplicable, un dolor en mi interior, mezcla de placeres y sabores inconfundibles. Entre la nostalgia y el dolor, en un sueño se vive la felicidad deseada. Sobre una nube de papel dibujé un rostro, un cuerpo y les dí vida. Sus labios alimentaron los míos, sus manos volvieron a acariciar cada burbuja de mi cuerpo y su boca absorbió cada poro de mi piel. En silencio lo miré a los ojos, que sin parpadear desnuda me dejaron. Me abracé a su sombra y sentí el calor de su cuerpo que por mi piel se metía. El amor de rojo pasión se vestía, mi boca mordió un gemido, mis ojos se inundaron de lágrimas, el alba me rozó la mejilla, el lecho estaba vacío, vacío como mi corazón. Nuevamente había caído en las redes de un sueño. Esos sueños que nos atrapan y al despertar agonizamos en silencio.


EL TREN DE LA VIDA María Zacarías. Seudónimo: Mariana Potosí. Argentina

En la vida no siempre hay trenes a los que debemos subir, la vida es el reto del día a día. A veces son estaciones en las que debemos bajar para vivir una vida plena de felicidad. Los conductores son Dios y el destino y nosotros los pasajeros. Es todo un misterio, nunca sabremos cuál es la estación ideal para bajar. Hay que jugársela, es a todo o nada, estamos ligados a nuestro destino. El tren seguirá pasando, una y otra vez, pero ya no será con los mismos pasajeros. Estará en nosotros confiar y aceptar los planes que Dios tiene para nosotros. ¡¡FELIZ VIAJE!!


La luz de mis ojos. Maruca Rodini Argentina Misteriosa luz crujiente, envuelve mis ojos con matices de colores, remonta los recuerdos e inspiran sentimientos y belleza. –ObservoEn el filo del camino se me acongoja el alma, un silencio se apodera, y lo demuestra el destino. Mis deseos se quebrajan, en una tristeza derrotada. Pongo voluntad, y me trasmite serenidad. Se llena de encanto de sol a sol, hasta confundir la noche. Las estrellas iluminan con esplendor, y la luna como magia, busca y encuentra la luz de mis ojos.


MASCARAS Octavio ponzanelli México Es duro estar enamorado y mostrarse tal y como eres, en esos momentos de transparencia y de fragilidad de cristal se es muy vulnerable, muy fácilmente lastimado. A todos nos ha pasado, y a los que no, ya les pasará. Cuando esa persona especial en tu vida te dice algo lindo, algo tierno, y ese comentario te llega al fondo y te mueve las fibras mas profundas de tu alma, y luego, intentas corresponder con un gesto, un detalle o una caricia de el mismo tamaño, quizás mas grande, buscando provocar el mismo efecto en esa alma gemela, tu intención es agradar, es sincerarte y hacer notar que de verdad te ha gustado, que de verdad te ha llenado las venas con ese fluido eléctrico que te estremece y te deja sin sentido. Y ¿Qué pasa? Si lloraste de emoción y tu corazón palpitó a una velocidad increíble, si tu garganta se ahogo con ese sentimiento que de verdad te ha llevado al cielo y…. y al decirlo te contestan: -Se sincero, di la verdad, no inventes cosas que no sientes y no agradezcas lo que no te ha gustado. Entonces, de nuevo a usar máscaras, de nuevo a esconderse debajo de ese mito de que los hombres no deben llorar, a llorar hacia adentro y sonreír hacia fuera. -¿Qué te pasa? Los hombres no lloran, los hombres no expresan sus sentimientos y no se rinden ante palabras bonitas; los hombres son fuertes, de carácter y de físico, no se entregan al amor, los hombres nos regimos por pasiones de otro tipo. ¡Mentiras! Los hombres sentimos, los hombres amamos y quizá con un amor mas grande que las mujeres. A los hombres, nos duele el desamor, nos lastima el desprecio. Pero… somos hombres. ¿Machos? No todos, mas bien muy pocos, algunos usamos mascaras, pero todos amamos, todos sentimos. Y para amar, hay que quitarse las máscaras. Y para amar, hay que estar dispuesto a ser lastimado, esa persona que te hirió, es la misma que va a lavar tus heridas y te amara de nuevo y tu, de nuevo te mostraras como eres y será un circulo y estarás encerrado, felizmente atrapado en esa trampa que duele y que renueva tu espíritu cada día.


EL AMOR PUEDE SER VIENTO… Osvaldo Pettinicchio (Daniel Vattimo). ARGENTINA. El amor no se busca, "aparece", no se siembra pero crece, no se compra, no se alquila, permanece y no vive entre rejas porque muere. El amor puede ser Luna, amanecer, aroma, anochecer, insomnia, puede ser la brisa nocturnal, puede ser sombra, y si queremos volar… el amor también puede ser viento. El amor no se toca, no es un cuerpo que se siente cuando llega. Es como el chirrido misterioso de una puerta que queremos abrir, sin alterar los íntimos umbrales del silencio. El amor es mirada serena al horizonte. Es palabra, es el Zen de los sabios que muchas veces no entiendo o del que quiero huir pero me quedo. Y finalmente, amigos, el amor es semilla que crece en algún lugar, es sustancia, es una leve tempestad, es aquello que nos viene sin espera y que vive solamente en Libertad.


PALABRAS URGENTES. Osvaldo Pettinicchio(Daniel Vattimo). ARGENTINA. Creo haberla escuchado una vez a través del camino irreverente de los sueños. Es una estrella de cristal, que me mira y me tienta, que me habla, que esta quieta, que… que me embarga el cielo por su cuenta y reduce a polvo mis querellas. Yo vengo de la guerra fría de un amor distante, que aún así dejó su melodía. Que se jugó por mí en cualquier parte, que es mi escudo y mi lanza, que aún en la ceguera es mi batalla. Creo haber quebrantado mi voz en el grito fugaz, en el noble fulgor de unas pocas palabras de amor que dejaron de mí, su fragancia de Abril. De los puertos de mar, de una playa sin ti. Del rodar por allí, sin pensar. En las brumas que niegan el Sol se esconde austera la libertad del brillo, cae la tarde con sombras precoces que tardan, que envuelven, que dejan pendiente, que nada resuelven y se van, esperando ese día voraz que me quiera abrazar.


VERSOS DESNUDOS. Osvaldo Pettinicchio(Daniel Vattimo). ARGENTINA. ¿¿Por Dios?? ¿¿Qué me pasa hoy con estos versos que nacen maduros de dolor agudos de vivir?? ¡¡Salen!! No sé, salen a la luz desvergonzados sin miedos a nacer excomulgados, exiliados en viajes instantáneos a veces crueles. Salen con manos de gigante, tórridas, humeantes, rocallosas, sedientas de agua miel, apabullantes. Son versos descarados que preguntan por la Luna con vulgar desparpajo, buscan la desnudez de las palabras muertas y otras veces se las callan. ¿Qué dirá el astro desnudo en la noche? Sin nadas, sin letras ahogadas que le hablen borrachas de dicción. Libres, disfonicas por tanto grito de demanda, duras como palo de bosque, fermentadas, astillosas, a veces poco amadas, consecuentes de una causa. Estos versos ya están fuera de mi alcance, soberanos sin corona, héroes salvajes, inmigrantes de la luz de las estrellas, pasajeros de la calle. Soles flagrantes de un amor sin nombre, de anochecer en un vértigo de frases que ya se han ido. Creadores de un Sol ardiente en madrugada.


ECLIPSE PATRICIA BUSTOS ARGENTINA

Circunda el aire dormido un fantasma de polvo entre los lirios grises. La órbita de sus ojos, lejana. Lejano el punto que dibuja la luz en las pupilas. Dormido el fantasma, la luz dormida. Dormidos los lirios y el plomo en su estigma. Dormida la sangre dormida. Abrazado a la cintura un rosario de pétalos entumecidos. Dormido el útero que acuna un niño dormido. Dormidos los pétalos y su cintura. El viento y el polvo, dormidos. Atardece el círculo enmascarado de auroras desahuciadas. Dormido el grito y también el llanto. Dormida la luna, tendidas las manos dormida la pluma el mundo dormido.


INSPIRACIÒN PATRICIA BUSTOS ARGENTINA

Te creo lejos y estas tan cerca. No reparo en observarte sublime verso que desnuda mi carne. Que deshoja mi piel para luego escribirla. Tan distante e inmediato. Tan suave y diáfano. Te escondes en la tinta que besa mis dedos. Y me escribes y te escribo nos leemos punta a punta. Cada centímetro mío proviene de tu pluma. No resisto un instante sin tu trazo en mi envoltura. Y me tienes y te tengo en las notas musicales que dejas en tu impronta y cantas y me traes melodía talentosa. Entonces despierto te leo punta a punta escribo y reescribo tu perfume sobre este lecho de papel hecho ternura.


EL GRITO DE DANIEL PATRICIA BUSTOS ARGENTINA Los pájaros de papel se agitan con el viento. Y tu voz, arpegio doloroso que desciende a la oscuridad del alma, burlando lágrimas. Suspiras en silencio palabras delicadas que el ansia de las musas escribe en los ojos. Un sollozo cristalino desteje la lluvia. Ópalo salobre que abre surcos en las mejillas paspadas. La entraña desnuda permanece inmóvil a las sílabas que se desarman en mis labios. Misterio crispado en un bollo de dibujos que duerme sobre el regazo. Oprimes mi mano, agrietando el camino del doloroso consuelo. Y me contemplas. Crepúsculo del tiempo que conjuga el yugo en llanto infinito. En un alarido que rasga la puerta de la memoria desangrándose en el espejo eterno donde el silencio es un fantasma. En un grito absurdo, cargado de la espuma ciega del olvido. No llores Daniel, el cielo se dará cuenta podará tus alas, el mar se llenará de sueños y libros de cuentos rotos. No llores Daniel, que los peces de colores saltarán del reloj. Y yo, soy solo un pájaro de papel agitado por el viento.


Puesta en mis ojos Patricia C Cervantes Domínguez Veracruz México A mitad del sol de mis ojos, se forma un mar de agua salada, mientras lo miro, montaña abajo, se vuelve rio de agua helada, mas en el borde se hace cascada... Y la compuerta de mis labios… bebe despacio sin ser ahogada. Que gran tormenta llevó a mí cielo volverse rojo, que de sus nubes soltara lava, que fue que hice ante tus ojos ... ¿Para que hoy yo no sea nada? Que fea tormenta inunda mí alma, que con desprecio es masacrada, que feo destino me ha dado el olvido, ser solo lagrima de dolor, ser una puesta de sol, que te despide al atardecer sin la esperanza de ver el sol… Sin un amor sin un mañana.


RIMAS Pío Domingo Rosales Sena Cosamaloapan, Veracruz, México I Sólo me inclino frente a la verdad, sólo sigo a la belleza y sólo obedezco al amor: Dios. Estas tres virtudes las posees tú; por eso eres: ¡El Cristo de mi corazón! II Por un beso tuyo virgen esplendorosa, por un beso tuyo al infierno lo llenaría de amor. III Necesitaré el pincel y el amor con que pinta Dios para hacer un poema o una canción a la dueña de mi corazón… ¡Porque el retrato de mi amor solo Él lo pinto! IV El Cielo del que habla el pastor yo lo veo niña en tus ojos, y creo que existe Dios porque tus ojos mi cielo son y el Cristo tu corazón.


TE SENTI Por Pío Domingo Rosales Sena Cosamaloapan, Veracruz, México Tuve un hermoso sueño, en él me amabas con toda la furia y la pasión, la ternura y la locura que encierra tu alma de niña. Te sentí… Tan terrestre, tan selene, racional y lunática. Te sentí terrestre con líneas de luna, locamente real, sutil, rosada, tan niña… Te vi bebe y te serví de cuna.


HACERTE SENTIR MI AMOR Pío Domingo Rosales Sena Cosamaloapan, Veracruz, México Cuando la lluvia te da en la cara, y todo el mundo te da la espalda; te ofrezco un cálido abrazo, un abrazo de amor. Cuando caiga la noche obscura, y no haya nadie quien te de ayuda; te ofrezco mis manos extendidas, manos llenas de amor. Cuando el llanto inunde tu vida, y no hay nadie que seque tus lágrimas; te ofrezco el pañuelo de mis labios, labios reconfortantes y de amor. Cualquier infortunio soportaría, no hay nada que no haría; no dudaría un instante para hacerte sentir mi amor. Tu hogar está en mis brazos, ¡No tengo duda! Tu altar está en mi corazón ¡Conságralo! Te hará sentir mi amor.


Gracias por seguir colaborando estimados amigos Los sueĂąos compartidos tienen sabor a gloria

RamĂłn de J. HernĂĄndez Olivares Director y Editor


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