LAS MIL Y UNA NOCHES. LAS INFINITAS HISTORIAS DE ORIENTE

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LAS MIL Y UNA NOCHES. LAS INFINITAS HISTORIAS DE ORIENTE



PRÓLOGO: Este es un trabajo que hemos realizado los chicos de quinto grado durante el 2018. Se trata de una antología con cuentos producidos “a la manera de Las mil y una noches”. Para llevar a cabo este proyecto, tuvimos que leer muchos cuentos orientales. Luego, pensamos qué características tenían en común esas historias. Estos aspectos nos ayudaron a empezar a pensar nuestros propios cuentos.

Para esto, empezamos completando un plan de escritura donde volcamos las primeras ideas sobre el cuento. Luego, comenzamos a escribir la primera versión, utilizando distintas guías para producir la situación inicial, la complicación y la resolución. A continuación, revisamos nuestras propias escrituras y las de nuestros compañeros. A partir de eso, produjimos las segundas versiones de los relatos orientales. Finalmente, revisamos con la profesora estas historias y escribimos las versiones finales. En esta instancia, tuvimos la colaboración de nuestros compañeros quienes nos ayudaron a mejorarlas y a ilustrarlas.


De cómo sherezade evitó que el rey le cortara la cabeza

Hace muchísimos años,en un reino vivía un rey llamado Shariar que era amado por todos. Un día fue de cacería y volvió antes de lo esperado. Entonces, encontró a su esposa apasionadamente abrazada con un esclavo. El sintió en su corazón un fuego que quemaba y horas después ordenó decapitar a los dos. Pasó el tiempo y el visir cada noche le traía doncellas al rey. Él las tomaba como esposas y al amanecer las decapitaba ya que recordaba lo que le hizo su primera mujer. El ministro una noche fue a buscar doncellas y no encontró ninguna. Él sabía que cuando le diera la noticia al rey, éste lo mataría. Sherezade que era bella y había leído innumerables libros era la hija del visir. Ella se ofreció para ser la esposa del monarca. Su padre no estaba muy convencido, pero la dejó. Mientras el visir iba a darle la noticia al rey, Sherezade le dijo a Doniazada, su hermana, que en la noche de bodas la iba a mandar a llamar para despedirse. Entonces, Doniazada tenía que pedirle que le cuente una historia para pasar la noche. Finalmente, Sherezade se casó con el rey y su hermana cumplió con el plan. Así fue que cada historia que contaba Sherezade siempre la cortaba en la parte más importante, dejando al monarca con intriga.

Estos son algunos de los relatos que Sherezade compartió con Shariar durante mil y una noches...


Faisal y el pincel mágico He llegado a saber ¡Oh rey afortunado!, que en la antigüedad en Pesia había un hombre llamado Faisal que tenía los ojos celestes como el cielo, el pelo anaranjado como el amanecer y la piel blanca como la leche. Éste diariamente iba al bosque a pintar y/o dibujar cuadros. Él era muy pobre, ya que su padre, el único que trabajaba, había muerto y su madre tuvo que tejer y vender bufandas para conseguir dinero para comer. Además, Él tenía toda la ropa manchada con colores. Pero, de repente, un día fue al bosque como habitualmente iba y se encontró con un pincel mágico, a primera vista él creía que era un pincel ordinario como cualquiera, pero cuando empezó a pintar, este dibujo se transformó en realidad. Luego de saber que su pincel era mágico, el protagonista dibujó una casa muy pero muy hermosa con un jardín de pasto verde claro y las flores de colores hermosas. Él estaba tan feliz sin saber que en una tierra muy lejana vivía un viejo hechicero que le había robado a un mago ese pincel. No sabía que ese hechicero había viajado a sus tierras para devolver sus pertenencias. Cuando el viejo hechicero encontró a Faisal de inmediato lo siguió con la intención de robarle el pincel y matarlo. Entonces éste se disfrazó de mercader y siguió al joven. Pero éste al darse cuenta de inmediato le preguntó quién era. El hechicero le contestó que era el amigo de su tío. Al saber esto el joven lo dejó entrar a su casa. Al entrar, no estaba su madre ya que estaba en el mercado. El viejo apenas vio su habitación entró a buscar el pincel. Al encontrarlo borró la casa que Faisal había dibujado y de inmediato se escapó. Faisal al darse cuenta, empezó a seguirlo con el resultado de no encontrarlo. Entonces, el malvado hechicero no se rindió con su plan y continuó con la intención de matarlo. A continuación, la siguiente noche, él sin dormir pensó en el pincel que había perdido. Y con la tristeza le contó la historia a su madre. Pero el mago mientras, ideó un plan que era por la noche esperar a que ellos se duerman y asesinar al protagonista. Al intentarlo pasó esto: fue a la casa y esperó, hasta que se durmieron y trató de entrar. Pero al tratar la puerta no abría. Luego, Faisal le cuenta la historia a la hija del amigo de su padre, que había conocido antes. Esta se llamaba Lina. Al saber esto ella ayuda a matar al malvado. Después hace un plan que era: agarrar un puñal y esconderse en una vasija y esperar hasta que salga el hechicero. Cuando salió, ella agarró un puñal y lo trato de apuñalar con el resultado de no lograrlo. Entonces, no se rindió y usó otro plan que era disfrazarse de una plebeya y pedirle que venga a su casa con Faisal ya preparado con un puñal en la mano para asesinarlo. Luego el viejo entró a la casa y Faisal lo asesinó. Luego, entierran el cuerpo del malvado hechicero. Y el pincel se lo regala el joven hermoso a Lina por ayudarlo. Luego, se casan y viven felices para siempre.

Autora: Azul Álvarez con la colaboración de: Lurdes Bolívar.


Wang y el diente de león He llegado a saber ¡oh rey afortunado! Que en la antigüedad en China vivía un chico llamado Wang. Él era pobre y se mantenía gracias a la venta de frutas. Wang era un chico débil, blanco y flaco pero muy listo. Su hermana mayor lo ayudaba siempre cuando tenía un problema. Un día mientras iba a su casa encontró un diente de león y supuestamente “cumplía deseos”. Así que pidió un deseo y luego lo soplo un poquito y apareció un mono ayudante. Él se asombró porque se había cumplido su deseo. Entonces lo escondió con cuidado porque temía que lo roben. En ese momento lo vio un bandido escondido en un callejón y quiso robarle el diente de león, pero lo iba a ver la policía entonces no se arriesgó. Cuando llegó a su casa no le dijo a su familia porque pensó que lo iban a gastar en un segundo. Subió a su cuarto y lo escondió en un frasco porque tenía que bajar a comer. El bandido lo siguió hasta su casa y con ayuda de una escalera le robó el diente de león. Mientras el ladrón escapaba Wang lo vio, pero no sabía que tenía el diente. Luego de comer subió la escalera y vio que no estaba el diente de león. Entonces se dio cuenta de que el ladrón se llevó el diente por eso lo persiguió corriendo a su máxima velocidad. (Porque no podía desear un caballo) pero no lo pudo seguir ya que el ladrón era muy rápido, entonces, le dijo al mono que corra hacia él y lo atacara. El mono lo obedeció y lo atacó. El bandido se sorprendió por el animal y enojado preguntó de quien era. Wang le lanzó una roca. le dijo que el diente era suyo y el malhechor le respondió que él lo “ganó” justamente. Por eso le contó toda la “historia” a su hermana mayor y la hermana lo iba a ayudar. Pero, primero tenían que encontrar al ladrón. Pero, Wang tenía un plan: la hermana iba a ir al callejón que estaba en donde Wang encontró el diente de león con delicadas joyas para que el ladrón saliera de su escondite. Ya listos para ejecutar EL PLAN, fueron al lugar indicado. Como en EL PLAN, el malhechor estaba allí. Entonces la hermana del joven se peleó con el bandido, pero en la pelea se le cayó el diente de león entonces Wang agarro el diente y deseo una muerte horrible para el bandido: destruido por lobos hambrientos. Aparecieron los lobos mágicamente y devoraron al bandido. El niño por último deseó tener mucho no, muchísimo dinero para mantener a su familia y entonces, el diente de león se acabó.


Cuando Sherezade termino de contar la historia, se cayó sonriendo. El rey Shariar dijo: -Es sin duda una historia extraordinaria. Sherezade contestó: -Sí, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autor: Dante.L.Kriger con la colaboración de Agustin.N.Manzo y Matteo.U.Biglia


De no ser nadie a ser la persona más amada en el mundo Eh llegado a saber oh rey afortunado, que en la antigüedad en Persia había un hombre llamado Aban. Tenía el pelo negro como el carbón, los ojos verdes como el pasto y era moreno como el café . Era bueno y siempre quería resolver problemas. A él le gustaba caminar y recorrer lugares. El era muy pobre, su padre estaba muerto y su madre enferma. Casi que se cuidaba solo. Él tenía diecisiete años, ya casi era mayor de edad y estaba muy feliz por eso. Pero también muy preocupado ya que su madre estaba mal de salud. Aban encontró a un ser mágico, se llamaba Asim. Su poder era teletransportarse. El joven de ojos verdes lo había encontrado en medio del bosque. Aban estaba recorriendo el lugar. El muchacho como buena persona decidió ayudarlo y llevarlo a su casa, una vez que ya estaban acomodados Aban empezó a investigar quién era, qué hacía y sobre todo de qué trabajaba. Había encontrado todo. Se dio cuenta de que lo quería matar. Aban salió corriendo, pero Asim apareció de repente y le dijo DONDE QUIERA QUE VAYAS HAY ESTARÉ ESPERÁNDOTE. Así fue como Aban se escondió por diez años. Después de todo salió de su cueva y ya tenía veintisiete años. No había festejado sus dieciocho y estaba muy triste por eso. Pero también estaba feliz porque se había salvado del enemigo Un día se cansó y fue al lugar en el que estaba Asim. Después de tres días lo encontró, fue y lo intentó derrotar. No pudo por su poder de tele transportarse. Aban le dijo a su mamá: -Siempre hay un segundo intento. La madre le dijo: -No hijo, no lo hagas. Es muy peligroso por favor. Asim le decía que sí iba a poder y de tanto insistir un día la madre se cansó y le dijo: -¡NO! Te puedes lastimar. Ven que vamos a cenar. Una vez que habían cenado el muchacho de ojos verdes se escapó por la ventana. Llegó con Asim y con un cuchillo lo mató. Volvió a su casa de la misma manera en la que salió, entró muy silenciosamente pero su madre lo estaba esperando en el cuarto. -¿Dónde te fuiste? Aban le contestó: -No quería hacerte enojar pero te voy a decir la verdad: me fui a derrotar a Asim. Su madre le dio un fuerte abrazo. Después de todo cuando Aban mató a Asim lo que hizo fue usar los poderes de Asim con buenas intenciones. Como para ayudar a la gente, llevar a la gente malvada a la cárcel, ETC. Un día consiguió una novia y dos años después se casaron, hicieron una familia y terminaron todos felices con sus dos hijas llamadas Tuxe y Jazmín. Aban se había vuelto la estatua del pueblo y su mujer trabajaba en un kiosco. La madre lamentablemente se había muerto. Todos los años el catorce de septiembre la iban a visitar a su tumba. Cuando Sherezade acabó de contar la historia, se calló sonriendo. El rey Shariar le dijo:


-Es sin duda, una historia extraordinaria. Sherezade contestó: -Si, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autora: Constanza Benítez con la colaboración de: Lisa Harina y Martina Pérez


Karime, el afortunado y la piedra de deseos He llegado a saber oh rey afortunado que en tipos muy lejanos vivía en Bagdad un joven llamado Karime con cabellos castaños hermosos y ojos celestes como un mar de emociones. Él había caído en la pobreza. Ya que la madre se le había muerto y para olvidar su lamento iba a nadar siempre a un mismo lugar. Ese día vio algo que brillaba en una especie de cueva, entró y se detuvo a mirar una piedra. Era blanca y brillaba como un diamante. Él al momento ya sabía que esa piedra era muy valiosa y que no podía cambiarlo por nada. Entonces dijo: - Ojalá pudiera darle esta piedra a mi madre. Le apareció la madre, se duplicó la piedra, una se la quedó ella y la otra él. En ese momento estaba un engañador que cada vez que veía algo brillante y valioso lo quería robar. El malvado empezó a darle confianza engañándolo. Karime le daba información. Hasta que le dijo que tenía una piedra mágica y se despidieron. Al día siguiente el engañador le ofreció dar un paseo en los magníficos ríos de las maravillosas montañas. Su plan era cansarlo y que se quede dormido así tenía ventaja para quitarle la piedra. Luego Karime empezó a estar cansado entonces le preguntó: –¿Cuánto falta para que termine el paseo? El engañador ya empezó a tener nervios pensando que el chico ya sabía el plan. Luego exclamó: - Ya falta poco joven Karime. Él ya se estaba durmiendo entonces el malvado aprovecha y le saca la piedra de la bolsa donde él la guardaba. Tiempo más tarde, Karime se despierta y el señor no estaba. El no entendía nada, lo llevó a un hermoso paseo por las maravillosas montañas. Eso para él era inolvidable pero antes de pedir un deseo abrió la bolsa en la que debía estar la piedra mágica y no había nada. El joven ya supo que era todo una trampa para sacarle la piedra mágica. Entonces se preguntó: ¿Cómo sabía que él tenía una piedra mágica? El joven afortunado, con ojos lagrimosos se fue a su casa. Estaba muy apenado. Pero luego vio a una joven hermosa. Se acercó y le preguntó: – ¿Por qué estas triste? Karime le responde: – Es que un señor se acercó y me invitó a un paseo de las maravillosas montañas y luego me robó algo muy valioso para mí. No lo entiendo La joven le responde: – ¿Querés que te ayude a buscarlo? Él exclamó:


– Si… gracias pero… ¿cuál es tu nombre? - Mi nombre es May ¿el tuyo? Él le responde: – Karime… mi nombre es Karime. Entonces lo buscaron por todas partes de la montaña y no lo encontraron fueron al pueblo y tampoco lo encontraron. Luego viajaron a la cueva que encontraron la piedra y ahí estaba. Entonces a May se le ocurrió una idea. Decidió hacerse pasar por una ¨mucama¨ que le daba la merienda y lo que el engañador no sabía era que la merienda traía un especie de polvo venenoso. El malvado empezó a tener un poco de sueño cada vez más y más. Karime quedó sorprendido porque una mujer pudo vencerlo y él no. Entonces le pregunto: – ¿Cómo pudiste ser mujer y vencerlo? Ella le respondió: – Sólo por ser mujer no significa que no pueda vencerlo. El joven se avergonzó y quedo callado. El engañador se durmió, prácticamente para siempre. Karime y May se quedaron con la piedra y se casaron.

Cuando Sherezade terminó de relatar el cuento, el rey dijo: - Tus historias son maravillosas. Sherezade contesto : - Las historias que te he contado no se compararan con el proximo relato. Cuentan que… y Sherezade vio llegar al amanecer se cayo discretamente.

Autora: Agustina Caballero con la colaboración de Lourdes Mastroianni y Marcela Maya


Mustafá y el libro maravilloso

He llegado a saber !oh¡ rey afortunado que en tiempos muy lejanos en la ciudad de Bagdad había un hombre llamado Mustafá que era muy travieso y nunca hacía caso. El joven había crecido solo con su mamá ya que su padre había muerto cuando él era muy pequeño. Debido a eso le gustaba ir al zoco y jugar con los chicos de ahí para olvidar sus penas. Él era un chico muy bello de quince años, con el pelo rubio como el sol, ojos verdes como los arbustos y piel morena como el café. Ya que su situación económica no era la mejor el pobre hombre llevaba toda la ropa rasgada, agujereada y mal cosida.

Un día, en el que estaba jugando en el zoco se alejó demasiado de allí y se cayó en un pozo. Empezó a rodar por unas escaleras. Después, terminó en un patio con pasto y flores bien cuidadas. Empezó a caminar por donde se encontraba y allí, vio un cofre con una llave al lado. Abrió el cofre y dentro de éste encontró un libro y una pluma mágica. Comenzó a escribir en este ¡ábrete sésamo! Y comenzó a salir humo del libro. Muy asustado por lo que estaba pasando Mustafá soltó el libro rápidamente y del cuaderno salió un efrit. El efrit al terminar de salir del ejemplar tan único le dijo a su nuevo amo: ¡Oh amo mío, qué deseo quieres que te cumpla en este momento!. El joven ya tranquilo le pidió por favor al ser mágico que lo sacara lo más pronto posible de ese horrible pozo.

Al salir de allí encontró a un mercader que cambiaba libros con sus respectivas plumas por unos mucho más nuevos y cuidados, pero en realidad era un mago muy despiadado que quería robar todos los objetos mágicos de ese tiempo. El mago se enteró que Mustafá había encontrado el libro que él estaba buscando. El joven sabía cuan valioso era ese libro y la pluma. Decidió quedárselo para así poder ayudar a él, a su mamá y a las otras familias del pueblo que no tenían la mejor situación económica en estos momentos. El hechicero decidió seguir pensando un plan para robarle el libro al joven. Él mientras tanto había encontrado a una chica llamada Melisa con la que había contraído matrimonio y con la que estaba muy alegre. Al terminar de pensar el plan el mago decidió aprovechar su falso oficio para intentar quitarle el libro mientras Mustafá no se encontraba en la casa. Ese hogar lo compartía con su esposa, pocos sirvientes y las mucamas que había contratado con la plata que consiguió del libro que encontró en el pozo. Cuando el muchacho volvió y vio que su hogar, su esposa, sus sirvientes, la pluma y el libro no estaban, se asustó mucho. Sin saber qué hacer corrió por toda la ciudad buscando sus pertenencias hasta que al alejarse un poco de donde vivía encontró todas las cosas y por una de las ventanas de su casa robada logro llegar a ver a su querida esposa. Cuando estaba a punto de agarrar el libro el hechicero lo descubrió y lo encerró junto a su esposa. Por suerte él había llevado con sigo una navaja con la que pudo romper la soga que lo estaba sujetando y luego ayudar a escapar a su esposa.


Cuando terminó de pensar un plan le dio a su mujer un polvo que le arrebató al mago. Ese polvo hacía que las personas quedaran desmayadas. Como el hechicero no estaba en la casa por esas horas, Melisa aprovechó y le vertió el polvo en la copa de vino del mago quien al beberlo quedó desmayado. Rápidamente Mustafá agarró el libro con su pluma y su esposa al mago para que al llegar a su casa pudieran matar al hechicero con la guillotina que su querido esposo le había obsequiado por el primer mes de casados (hay que decir que era muy costosa pues estaba forrada con oro y varios rubíes de decoración). Al llegar a donde verdaderamente debía estar su hogar se fueron lo más pronto a dormir ya que era demasiado tarde. Unos pocos meses después compraron una caja de madera forrada de plata que en esos momentos en Bagdad ese objeto era llamado “caja fuerte”. Allí, el joven protagonista de esta historia junto a su muy querida esposa guardaron el libro que tantas aventuras buenas como malas les había traído. También, un montón de objetos muy bellos para ellos y para todas las familias pobres del reino. Sherezade al terminar de contarle la historia se cayó muy discreta y el rey Shariar le dijo: -Sherezade tus historias son todo un deleite pero este es el mejor relato que he escuchado hasta ahora. Sherezade le respondió: -Hasta ahora, porque la próxima historia será muchísimo mejor.

Autora: Julia Valerga con la colaboración de Rocío López


ASHMED Y EL RELOJ MÁGICO

He llegado a saber oh rey afortunado que en la antigüedad en Persia había un hombre llamado Ashmed que había vivido todo su tiempo con su padre, era bello como una flor. También era muy pobre y le encantaba ir a jugar al zoco con los chicos. El joven era muy inteligente pero nunca usaba su inteligencia. Tenía ojos negros como la oscuridad, era pálido como la harina y tenía pelo castaño. Trabajaba de vendedor de café aunque casi nunca ganaba dinero. Un día Ashmed estaba escalando una montaña se cayó, rodó y rodó hasta que llegó a la base . Mientras se paraba encontró un reloj todo dorado. Se le dio por mover su perilla y al instante se teletransportó a una cueva donde había muchísimos diamantes. Miró para la derecha y se dio cuenta de que había un reloj haciendo una cuenta regresiva. Agarró todos los diamantes que pudo y cuando se acabó la cuenta volvió a donde estaba. Se fue a su casa cargando todos los diamantes. Cuando la madre lo vio le preguntó qué llevaba adentro de esa bolsa. Ashmed le respondió: “diamantes madre, diamantes”. Después un mago barbudo, con pelo blanco, viejo y rico fue a la montaña ya que había perdido el reloj mágico que había encontrado Ashmed. El enemigo había robado el reloj y fue al pueblo donde vivía Ashmed ya que era la única ciudad por la zona. Justo en ese momento el joven estaba en el zoco jugando al fútbol y el mago lo vio al niño con el reloj en la muñeca. Esperó hasta la noche para forzar la cerradura de la casa de Ashmed. Cuando logró forzarla entró a la casa y trató de robarle el reloj a Ashmed. Él al instante se despertó y sacÓ un cuchillo gritando: “vete de mi casa”. Al dÍa siguiente Ashmed se puso a pensar qué quería el mago. Al instante recordó el reloj. A la noche el mago lo intentó de nuevo pero con polvo somnífero. Entró a la casa y le tiró el polvo. Horas después Ashmed se despertó por el calor de una parrila pero sin el reloj. Vio al mago y se acordó de él. Se estaba cayendo al fuego, intentó romper la soga y no podía intentó e intentó. Segundos después, se pudo soltar, vio al mago, lo golpeó, le robo el reloj y se escapó. El mago planeaba matar al joven pero no sabía cómo asesinarlo. Ashmed caminaba de vuelta hacia la montaña. El mago salió de su guarida y secuestro al joven. Horas después una doncella se enteró de la noticia y decidió ayudar al joven. Más tarde encontró la guarida del mago y entró. Acuchillo al mago y fue la heroína de Ashmed. Meses después, se casan y él quema el reloj.


Cuando Sherezade termino de contar la historia,genero un clima de suspenso. El rey dijo: - ¡Que historia más bella! Sherezade contestó: -Nunca será como la que te contaré la próxima noche.

Autor: Benicio Sáenz de Tejada


Aisha y el perfume mágico He llegado a saber ¡oh rey afortunado! que en la antigüedad había una joven llamada Aisha que era hermosa por naturaleza y vivía en Bagdad con su madre llamada Zubaida, ya que los otros miembros de su familia habían muerto tristemente en un incendio. Aisha era muy pobre pero siempre ayudaba a su madre con unos trabajos. También era inteligente y su pelo albino era llamativo cual vela en la noche. Un día en el cumpleaños de Aisha le habían prometido que cuando cumpliera quince le regalarían un perfume con lo que tenían y le obsequiaron un perfume con olor a rosas. La joven quedó encantada. Lo empezó a frotar para que no se ensuciara y de la nada salió un humo raro que olía rico. Apareció una efrit. Su madre era asustadiza entonces se escondió atrás de la chica. La protagonista le dice a su nueva genio personal: - ¿Hola…? El magnífico ser respondió: -Soy tú esclava pídeme lo que quieras. La señorita sin saber qué pedir pensó algo rápido y ordenó a la efrit una olla repleta de oro y joyas. Un día estaba comprando en el zoco y encontró un viejo. Él le pidió un poco de comida. La joven era generosa. Entonces, le dio una de las galletas que había comprado. El viejo le preguntó si tenía espació en su casa para dormir al menos una noche. La adolescente dijo que lo siga y ella le explicó a su madre. La mamá de la protagonista aceptó porque le daba pena ese señor y se quedó una noche, pero el viejo tenía un plan malvado y quería sacarle ese perfume porque él sabía que era uno mágico. Se lo intentó sacar pero su madre lo vio. Ella lo sacó de la casa por intento de robo. Al otro día, la joven aventurera se dio cuenta de que el viejo no estaba y le preguntó a su madre, ella le contó todo. El viejo había conseguido un aliado que lo ayudara a conseguir ese perfume mágico con esa genio dentro. Cuando era de noche el aliado que era su sobrino fue a la casa de la chica valiente y entró por la ventana que estaba abierta y caminando de puntas agarró el perfume. Se fue con el objeto mágico. Al día siguiente la protagonista despertó y no vio el perfume y se asustó, corrió con su madre pero ya no estaba y la buscó por todos lados pero no la encontraba. Pidió ayuda pero no habían señales de su madre. Entonces pensó y se dijo: -Me párece que fue ese viejo malvado que logró conseguir mi perfume. Además, también raptó a mi madre.

Al poco tiempo Aisha se dijo a si misma: -Tengo que ir a buscar a mi madre y a mi perfume mágico. Cuando le preguntó a los guardianes del reino si sabían dónde vivía ese viejo malvado, le explicaron que ese viejo vivía en la colina y que si iba sola podría morir en el intento. Le dijeron que la ayudarían. Así fue. Cuando llegaron hicieron el mayor silencio posible y llegaron a donde estaba la madre de la joven. La protagonista se alegró mucho. Ella la abrazó felizmente. Su madre le dijo que el perfume estaba en una caja en ese cajón a la derecha. La chica llegó al perfume. Luego de un rato la señorita pidió a su efrit que destierren al viejo y que lo mataran de una forma dolorosa, pidió riquezas y vivió feliz con su madre y la genio del perfume para siempre.


Cuando Sherezade terminó de contar la historia, generó un clima de suspenso. El rey dijo: -¡Que historia más bella! Sherezade respondió: -Nunca será como la que te contaré la próxima noche...

Autora: María Clara Mira de los Santos con la colaboración de Ashanti González Bello.


Los Hermanos y el pincel mágico.

Recuerdo, ¡oh rey afortunado! que en tiempos muy lejanos, en la ciudad de Bagdad vivía un niño llamado Sinan. Él era muy bueno con todos, también era generoso, siempre estaba feliz y le encantaba jugar con los chicos del barrio. Tenía el cabello negro como el ébano y los ojos marrones como el café. Sinan vivía con su madre y su hermana mayor llamada Zeynep. Ella era muy hermosa. Tenía el cabello marrón como la madera y los ojos negros como la noche, a ella le encantaba pintar desde que era niña. También cuando tenía tiempo iba al mercado con su hermanito a ver las cosas tan hermosas que habían. Su padre había muerto cuando ella era muy chiquita y él ni si quiera lo había conocido. Cuando murió su madre, Zeynep tuvo que cuidar a su hermanito pero él se comportaba muy bien en todo momento y ella estaba muy feliz de que la muerte de su madre no le afectara. Ellos eran muy pobres y Zeynep dibujaba dibujos muy lindos y luego iba al mercado a venderlos mientras que Sinan iba a jugar con los otros niños de la calle. Tiempo atrás la madre de Zeynep y de Sinan se había casado con otro y tuvieron un hijo. Ese hijo llamado Alí había muerto. Luego se separaron y ella conoció al que sería el padre de Zeynep y Sinan. Esa historia era muy conocida en todo el pueblo, era una familia muy popular. Pero un día un hombre que trabajaba haciéndose pasar por cualquier persona se hizo pasar por él. Se dirigió a la casa de los supuestos hermanos para vengarse del padre de Sinan y su hermana por matar a su padre hace muchísimos años atrás. Cuando se enteró Alí de que había muerto el padre de Zeynep esté decidió matar a sus dos hijos. Ellos no sabían que tenían un hermano de otro padre entonces se alegraron mucho cuando lo vieron. El plan de Alí iba muy bien Zeynep y Sinan le estaban creyendo todo lo que decía o lo que contaba ya que él se sabía toda la historia de memoria gracias a la mamá de los jóvenes. Un día cuando Zeynep estaba pintado un cuadro de repente se le rompió el pincel y fue a decirle a su hermanito que le vaya a comprar otro al mercado. Cuando Sinan compró el pincel se dio cuenta de que se veía raro pero después lo vio como un pincel común. Luego, llegó a su casa y se lo dio a Zeynep. Ella también notó lo raro en el pincel, pero no le dio importancia y siguió pintando. Ali que era muy bueno para saber qué cosas eran valiosas también notó algo en el pincel que le llamaba la atención y en ese mismo momento cuando Zeynep terminó de pintar lo agarro y se dio cuenta de que ese pincel tenía algo mágico. Al día siguiente, la muchacha como hacia diariamente se dirigía a la sala a pintar y se asustó porque no encontraba el pincel que su hermano había comprado y lo empezó a buscar por toda la casa con ayuda de Sinan. Mientras ellos dos buscaban Alí que era quien tenía el pincel estaba muy enojado porque trataba de descubrir qué era lo mágico en ese pincel. Él estaba escondido en una parte de la casa hasta que Sinan lo encontró con el pincel en la mano, pero en seguida Ali inventó una excusa para estar escondido con el pincel. Sinan le creyó y se lo devolvió a Zeynep. Pasaron varios días y Ali seguía sin descubrir lo misterioso en el pincel. Hasta que un día Alí descubrió lo extraño en el pincel. Él estaba sentado en una silla y Zeynep le preguntó si quería pintar y él le dijo que si entonces ella le prestaba su pincel. Él se puso a pintar un dibujo que representaba su sueño: tener un cofre repleto con monedas de oro. Cuando terminó el dibujo se dio vuelta y sorprendido vio el mismo cofre tal como lo había dibujado. Él no se dio cuenta de que le contó todo a Sinan y a Zeynep. Alí estaba muy enojado con él mismo porque les había dicho todo a sus supuestos hermanos y se arrepintió de haber hablado de más. Mientras tanto Sinan y Zeynep estaban muy contentos de tener un objeto mágico que los ayude a salir de toda la pobreza que tenían. Cuando Sinan fue a jugar con los niños del barrio les contó que habían conocido a un hermano que ellos no sabían que existía y los niños como ellos conocían toda la historia de memoria le dijeron que su hermano había muerto hace más de diez años. Él se quedó


inmóvil. Al escuchar esas palabras supuso que ese hombre que creía su hermano en realidad era un impostor. Cuando se dio cuenta de toda la verdad, fue corriendo a contarle a su hermana. Cuando terminó ella se enojó mucho con el hombre y al instante se dieron cuenta de que él les había robado el pincel y el atril que usaba la chica. Al día siguiente Ali se refugió en una cueva y con el pincel se puso a pintar un cuadro tal como lo había dibujado antes. Mientras tanto Zeynep y Sinan estaban buscando y preguntando si conocían a un tal Alí pero todos les decían que ya había muerto. Alí seguía dibujando muchos cofres con dinero. Cuando vio pasar a los jóvenes que lo buscaban, de inmediato se escondió detrás de una piedra con todo el dinero dibujado. A Zeynep se le ocurrió buscar en la cueva y Sinan se fue por el mercado. Ella que estaba buscando por la cueva encontró un cofre repleto de dinero. Supuso que Alí se había escondido ahí pero como no lo vio se fue corriendo a avisarle a su hermano. Mientras Sinan buscaba por los alrededores de los puestos y hasta se fijaba en las caras de la gente para ver si no se había hecho pasar por algún mercader. La joven encontró a su hermano y le mostró el cofre. Ambos pensaron en que era hora de vengarse de Ali y recuperar el pincel mágico. Ellos se fueron a su casa y se sentaron a pensar un plan para derrotarlo. Mientras tanto Ali ya se había escapado del escondite y se había dirigido a su casa que quedaba a la vuelta de los jóvenes. Cuando llegó a su casa rápidamente escondió el cofre con todo el tesoro. Al mismo tiempo Zeynep ya había pensado un plan y se lo contó a su hermano. Luego, ella se dirigió a buscar la casa de Alí pero recordó que le decían que ya se había muerto. Entonces, preguntó si conocían a Jafar ya que Alí cuando dibujó por primera vez con el pincel mágico firmo como Jafar. Toda la gente decía que era un hombre muy malo porque se hacía pasar por otras personas, además era muy astuto, nadie lo quería y toda su familia lo había abandonado. Le dijeron donde vivía y ella fue corriendo a la casa. Cuando llegó, llamó a la puerta y nadie le abrió toco tres veces más y le abrió la puerta. Jafar cuando vio a Zeynep se asustó mucho estaba desesperado. No sabía qué hacer ni qué decir pero luego se calmó y le preguntó: -

¿Qué quieres?

Zeynep le contestó: – No quiero nada, sólo vengo a perdonarte por lo que nos hiciste a mi hermano y a mí. Él la hizo pasar a la casa e intentó matarla ya que en el plan había pensado matar a los dos. Jafar le ofreció un café pero ella no quiso porque ya se tenía que ir. Zeynep al decir esas palabras notó que él café estaba envenenado porque el café normal no tiene ese color verde. Luego, se despidió y se fue. Mientras tanto Jafar estaba enojado porque ella no había tomado el café pero, inmediatamente se le ocurrió otro plan: matar a los dos. Pero, ahora quería enfocarse en matarla a ella ya que había notado que él intentaba matarlos. Luego de irse Zeynep fue corriendo a contarle a Sinan lo que le había pasado. Cuando llegaron a la casa de Jafar tocaron la puerta pero nadie abrió. En ese mismo momento Zeynep vio a Jafar por detrás de la casa y rápido los dos entraron corriendo a la casa. Mientras buscaban un lugar donde esconderse, también buscaban el pincel. Cuando ella se decidió esconder debajo de la cama vio que a su costado había una caja muy chiquita, por curiosidad lo abrió y rápidamente le gritó a su hermano que lo había encontrado. Los dos salieron de donde estaban escondidos y se fueron de la casa.


Al llegar Sinan quiso asegurarse de ese era el pincel mágico. Su hermana se puso a pintar y ahí descubrieron los dos que ese era el pincel que ellos tenían. Mientras ellos estaban tranquilos dentro de su casa, él escuchó que alguien llamaba a la puerta. Sinan fue a abrir la puerta y todos los vecinos preocupados por ellos querían saber que había pasado. Entonces él los hizo pasar y en ese momento Zeynep les empezó a contar todo. Los vecinos quedaron muy asustados al escuchar el relato que había contado ella y a la vez muy contentos de que se hayan salvado. En ese mismo momento a Zeynep se le ocurrió una gran idea: ella pensó en que los vecinos podrían ayudarlos mucho para poder librarse de Ali. Finalmente, entre todos fueron a la casa de Alí y decidieron echarlo del pueblo por todo lo que había causado. Todos los del barrio quedaron tranquilos ya que él tenía prohibido volver. Zeynep y Sinan estaban muy feliz que habían podido volver a su vida normal.

Cuando Sherezade terminó de relatar el cuento, el rey dijo: -¡¡¡Tus historias son maravillosas!!! Sherezade contestó: -Las historias que te he contado no se comparan con el próximo relato. Cuentan que...

Autora: Azul Agüero con la colaboración de Alejandro Cartagena


Safrán y los problemas con la bruja

Recuerdo !Oh rey afortunado¡, que en tiempos muy lejanos, en Egipto vivía un hombre llamado Safrán. Cuando su familia murió el protagonista se quedó con toda la casa. Encima, tenía poca plata. El pobre chico era estudioso, su pelo era platinado como la plata brillando y sus ojos celestes como el mar en la playa. Él se levantaba todos los días a estudiar como veinte libros seguidos. Pero el día en que murieron sus padres cambió todo. Se volvió rebelde, vago y malcriado. Como era pobre no le alcanzaba ni para la comida ni para la ropa. Tampoco tenía zapatos para jugar con sus amigos. En su estudio le iba pésimo. Ya habían pasado cuatro años de que no visitaba a su familia, y sólo se dedicaba a estar con sus amigos. Así es como dejó de ir a la escuela. Desde ese momento, comenzó a trabajar para una anciana maga que terminó adoptándolo. Un día Safrán fue a la casa de su madre adoptiva y encontró allí una caja en el patio. Cuando la abrió vio que tenía papeles y un lápiz mágico, el cual tenía tinta invisible y se veía en la oscuridad. Entonces dibujó un perro recién nacido y luego puso el papel dentro de la caja y el dibujo se hizo realidad. Al verlo se asombró y decidió no decirle nada a nadie. Cuando empezó a ir a la escuela volvió a ser todo como antes. Entonces, conoció a una chica llamada Amira la que después de unos largo años se hizo su mejor amiga. En un cumpleaños de Safrán, Amira intentó protegerlo de la anciana maga pero no lo logró y terminó lastimada gravemente. Entonces, Safrán a cambio de la vida de Amira, le da a la maga una caja de mandarinas, que no era lo que se veía, estaba pintada. De repente, se escucha una explosión y también un grito que es de Amira. El protagonista y su amiga corren lo más lejos posible. Por eso, la anciana los persigue y los atrapa. Luego, se los quedó como unos cinco días hasta que le den la caja. Él tenía su objeto para salir de la jaula. Unos días después, la anciana después de conseguir la caja hace un conjuro. El conjuro era que si Safrán le llegaba a sacar la caja mágica ella de un segundo a otro se muere por fuego. Pasados cinco años Safrán logra sacarle la caja después de muchos intentos. Por esa razón, la malvada cumple con su hechizo y se muere. Cuando pasaron más o menos veinte años tuvo hijos pero el espíritu de la señora seguía viva. Entonces, él no perdió la esperanza e intentó matarla devuelta. Lastimosamente, no lo logro. Cuando él se acordó que tenía la caja dibujó la muerte total de la malvada bruja. Después, de meter el papel en la caja se cumplió lo que dibujó y el objeto desapareció pero también desapareció Safrán y de ahí no se supo más de él.

Cuando Sherezade terminó de contar la historia, genero un clima de suspenso El rey dijo: - ¡Que historia más bella! Shrezade respondió:


-Nunca será como la que te contare la próxima noche…

Autora: Milagros Guzmán con la colaboración de Marcela Maya.


Jal y el Árbol mágico Recuerdo ¡oh Rey afortunado! que, en tiempos muy lejanos, en Bagdad vivía un hombre llamado Jal que eran tan pobre que con la plata que tenía no le alcanzaba para comprar su comida. Apenas tenía dos manzanas y una naranja. Él era bueno, agradable y tenía ojos marrones al igual que los tenía su padre. Al joven se le había muerto el papá. Era hijo único y vivía con su madre. Jal era un mercader que vendía la ropa que tenía. El hombre era honesto, escuchaba problemas de otras personas y las ayudaba a resolverlos. Con eso ganaba dinero, pero muy poco. Un día fue a acampar con su mejor amiga. Ella se llamaba Zara. Había gustado de Jal y seguía gustando. También era muy fanática de las historias, por eso le contó una. Se llamaba “El Árbol Mágico”. Se trataba de una planta a la que se le podía pedir un solo deseo. Mientras Jal estaba distraído Zara le contó que si una persona llegaba a arrancar una rama para obtener más de un deseo le aparecería un espíritu maligno. Como él quería ser millonario fue a ese árbol y pidió ese deseo. Entones, arrancó una rama para obtener uno más. Él encima no había escuchado lo que dijo su amiga. Él joven pidió tener un hijo que se llame Mahir. Lo tuvo. El hijo era valiente, inteligente y tenía trece años. Cuando lo tuvo lo mandó a que lo cuide una amiga de Jal llamada May. Era muy valiente e inteligente. Mahir y ella eran tal para cual. Pasó un buen rato que Jal estaba en la calle caminando y haciendo otras cosas por ahí. Entonces, salió el espíritu maligno que lo persiguió por mucho tiempo. En un momento se dio cuenta de que lo estaba persiguiendo porque él lo iba a empujar al lago para que se ahogara. Después, se fue corriendo a su casa. Se escondió y llamo a May. Ella llegó y sin miedo mató al espíritu con un cuchillo. Entonces, le agradeció y se casó con Zara. Ella le contó que al espíritu se lo mata con agua. Jal se asustó y en ese momento llegó un nuevo invitado: el espíritu. El lanzó un cuchillo a Zara y la mata. Finalmente, Mahir mató al enemigo tirándole un cubo de agua porque el espíritu quería eliminar a Jal y quedarse con la rama. Entonces, el joven les contó a muchos niños la historia de su vida. May y Mahir se casaron. Vivieron muy felices. Cuando Sherezade terminó de relatar el cuento, el Rey dijo: -Tus historias son maravillosas. Sherezade contestó: -Las historias que te he contado nose comparan con el próximo relato. Cuentan que…

Autora: Martina Pérez


EL DIAMANTE Y SALFÍN He llegado a saber, oh rey afortunado que en la antigüedad, en Egipto había un hombre llamado Salfín al que le faltaba el papá y era pobre. Él tenía pelo rubio como el oro, ojos celestes como el cielo de día y era realmente hermoso. Además el protagonista tenía un don para los acertijos y era muy inteligente. El joven se pasaba todo el día en las pirámides mientras resolvía cuentas. Era muy pobre y lo que tenía le alcanzaba para una o dos frutas por día. La comida se gastaba muy rápido porque vivía cuidando a su hermanita ya que su padre adoptivo había muerto. Un día fue a una de las pirámides, se sentó y sintió algo duro, al levantarse para ver que era vio un DIAMANTE azul como el cielo de noche y brilloso como las estrellas. Lo agarró y salió corriendo para su casa. Al llegar dejó el diamante y fue a buscar a su mejor amigo que vivía al lado. Cuando llegó a la casa de su mejor amigo Aldofo le dijo: - ¡Amigo vení a mi casa tengo algo que mostrarte!. Entonces llegaron a la casa de Salfín. Él le mostró el diamante, su amigo lo agarró y dijo: - Reluciente como la luna. Entonces el diamante empezó a temblar y saliÓ una voz diciendo : - Hola amo Soy el Diamante de los deseos y de la Riqueza, yo le cumpliré todo los deseos. Además le daré la cantidad de oro que desee. El protagonista quedó boca abierta, le pidió al diamante que le dé un cofre de oro. A los dos segundos el objeto mágico le dio un acertijo para encontrar el cofre y él lo encontró, así fueron pasando los días y Salfín pasó de ser pobre a rico, fue un gran cambio en su vida para él y su hermanita Cleopatra. Adolfo un día llegó a su límite, estaba envidioso porque su mejor amigo era rico y él seguía siendo pobre, entonces el mal le llegó al corazón y se dijo: -Voy a robar el diamante y matar a Salfín. Desde ese momento él se convirtió en el enemigo. Entonces, al llegar la noche el enemigo llegó a la casa de Salfín y robó el diamante, pero no tuvo tiempo de matarlo porque Cleopatra empezó a llorar. A la mañana siguiente Salfín se despertó y no vio al diamante ni a su hermana. Entonces fue a preguntarle a su amigo a ver si sabía algo pero Aldofo no estaba, se había ido a Arabia. Salfín preocupado volvió a su casa, desesperado buscando a su hermana encontró un papel con un acertijo, cuando empezó a leerlo se escuchó una voz que venía desde la tierra diciendo: - Hola soy el que se llevó tu diamante y a tu hermanita Cleopatra, si quieres recuperarlos ven encuéntrame, pero te advierto te va a costar pasar por el Mar Rojo. Espero tu visita adiós.


Salfín quedó impresionado, agarró sus cosas y emprendió un viaje hacia el Mar Rojo con destino a Arabia. Cuando salió corriendo de su casa se cruzó con una chica de mirada luminosa, intrigante y era realmente hermosa. Al acercarse la reconoció, era Amarna, la hermana de Aldofo. Hace tiempo que no la veía y se había convertido en una hermosísima muchacha. Apurado le preguntó: - Donde está tu hermano? Ella contestó: - No lo sé yo también lo estoy buscando. Entonces él le contó qué viaje iba a emprender y cuál era el motivo. Amarna al escucharlo lo quiso ayudar y lo acompañó. Entonces, los dos emprendieron el viaje juntos. Después de pasar una noche y un amanecer caminando llegaron a Arabia, estaban agotados pero el joven no bajó la frente y siguió caminando. Salfín sacó un acertijo con el nombre Mar Rojo y lo leyó al revés: quedaba Ojor Ram. Entonces, se cruzaron con unas personas muy amables y les preguntaron: - ¿Ojor Ram es una cueva? Ellos contestaron: - Sí, queda allí a la vuelta. Pero tengan cuidado solo las personas de mal corazón entran a esa cueva, no se sabe con qué se pueden encontrar, pero igual les deseamos mucha suerte. Estaban a un metro de llegar y Amarna se desmayó por el cansancio y el calor. Entonces, Salfín la agarró para recostarla en la sombra. Al rato ella se despertó y retomaron camino a la cueva. Al llegar, se encontraron con un hombre con una máscara roja en la cara. Los jóvenes se dieron cuenta de que al lado de él había un diamante idéntico al de Salfín, se acercaron y quisieron agarrarlo. Pero una magia que salía de las manos del enemigo, los tiro para atrás. El joven reaccionó muy rápido y le tiró un cuchillo, pero el enmascarado lo esquivó. Ellos se fueron corriendo hacía algún lugar seguro mientras oscurecía. Al día siguiente Salfín y Amarna no se rindieron ni tuvieron miedo de enfrentar al enemigo, entonces continuaron el viaje pero ahora con ropa negra y con unos pedazos de tela en la cara que los hacía irreconocibles. Entonces, al llegar a la cueva, no encontraron a nadie pero había una manta tirada en el piso por lo tanto, el protagonista tomó valentía y saco esa manta. Debajo de ella estaba su hermanita muerta con una herida de cuchillo en el corazón el joven lloró, lloró y dijo gritando: - Te voy a encontrar y te mataré. Voy a vengarme de lo que le hiciste a Cleopatra te lo juro. Después de un largo tiempo llorando por su hermana se oscureció y Amarna lo abrazó diciéndole: - Vamos a la cueva a ver si está el de la máscara. Tiene que pagar por haber matado a tu hermana. Cuando oscureció se fueron de vuelta para la cueva y encontraron al enemigo. Pero los jóvenes estaban disfrazados y él no los reconoció. Amarna hizo que se le caía algo. Fue por atrás del enmascarado, agarró un palo que estaba ahí y lo golpeó en la cabeza . El protagonista estaba tan pero tan enojado


que agarró dos palos de hierro. Estaba a punto de matarlo pero de repente escuchó un llanto de bebé. Los jóvenes salieron de la cueva y corrieron hasta ese llanto, llegaron y vieron un hermoso bebé con ojos azules como el mar con una piel morena como el café. Al verlo Salfín se enamoró de él y se lo llevó. Cuando volvieron a la cueva el enemigo no estaba y el joven enojado dijo: - No me iré hasta que no lo vea muerto. Entonces pasó toda una tarde, hasta que llegó la noche, él juro no distraerse con nada y matarlo de una vez. Pero en esta partida él estaría solo porque Amarna se había quedado cuidando al bebé. Cuando él llegó a la cueva lo vio y volvió a tomar los palos de hierro, se acercó para clavárselo y el enemigo con su poder lo tiraba para a trás pero el joven no se rindió, se paró firme y lo mató. Luego, le sacó la máscara. Vio que el enemigo era su mejor amigo Aldofo, se puso mal por haberlo matado pero se acordó de que el había matado a Cleopatra. Entonces, se paró agarró su diamante y se fue. Le comentó a la joven que ya podían volver a Egipto. Al amanecer agarraron al bebé que decidieron llevar y cuidar. Estuvieron una noche y un amanecer, por fin llegaron a su hogar. Salfín se ocupó de cuidar al bebé que en realidad era nena y se llamaba Jazmín. Se casó con Amarna y ella fue la mamá de la bebé . Se quedaron con el diamante pero lo usaban en ocasiones especiales, a veces ayudaban con comida a la gente pobre. Ellos tres fueron felices para siempre. Cuando Sherezade terminó de relatar, el Rey dijo: - Tus historias son maravillosas. Sherezade le contestó: - Las historias que te he contado no se comparan con las que te contaré la noche próxima. Cuentan que...

Autora: Lara Loingburd Claisse


Isis y la mudanza a un pueblo nuevo

He llegado a saber, ¡oh Rey afortunado! que en tiempos lejanos vivía en India una mujer llamada Isis. Era pobre y tenía pelo negro como el ébano y ojos como la oscuridad de la noche. Era hermosa como una flor delicada. Era inteligente, amable y astuta. Le gustaba leer un montón entre las flores delicadas, el pasto y le gustaba ayudar a la gente Ella con su familia tenían un negocio. Su papá estaba trabajando y lo acuchillaron porque su hijo había robado de un negocio lo mataron también al hijo. Un día a la mamá de Isis se le ocurrió mudarse por lo que les había pasado a una ciudad muy lejana, fue un viaje larguísimo y se quedó dormida. Cuando llegaron mientras la hija estaba recorriendo la casa y ordenando sus cosas, dentro de un armario encontró un cajón que contenía una pequeña caja lo abrió encontró que ahí habían aretes mágicos. Después de un rato se dio cuenta de que eran mágicos. Luego, salió de su casa y fue a pasear por el nuevo pueblo pasó por muchos lugares por ejemplo mercados, casas. Ya estaba cansada de caminar y entonces de repente se cruzó con un joven lindo, soltero y con mucha plata. Ella le dijo que era nueva en el pueblo y estuvieron hablando por mucho tiempo hasta que se hizo tarde y se fue a su casa. Entró y pensó en él. Dijo en su mente es simpático y lindo, se dio cuenta de que se enamoró de él. Ella al otro día pensó que podía ser rica para casarse con el joven entonces dijo con los aretes mágicos puedo pensar en oro. Pensó en dinero y se hizo rica en un instante. Un día la sirvienta de Isis paseando por alrededor de su casa se encontró con un señor que antes vivía en la casa llamado Surinder. Le dijo a ella: “puedo entrar a tu propiedad es que antes era mi casa y me he olvidado una pertenencia mía.” Justo en ese momento sacó el cuchillo de su ropa robada y la amenazó con matar a toda su familia y a sus dueños. Ella tenía escondido un cuchillo en su ropa. Lo sacó y lo intentó matar acuchillándolo. Lucharon hasta que la joven se cayó al suelo. El señor se marchó hasta su casa. Cuando llegó dijo: “logré encontrar los aretes de mi esposa” de manera muy triste por el fallecimiento de su esposa y se puso a llorar. Un día la sirvienta de ella se escapó a ayudarla y se enfrentó a su enemigo, lo mismo que antes cayó ella. Al otro día la protagonista estaba paseando con su madre la joven le dijo me voy no te preocupes por mí voy a estar bien. Se fue a vengar del señor del otro día su sirvienta preparó té y le puso veneno, luego se marchó a la casa del enemigo le dio de tomar el té envenenado. La sirvienta fue y le dio de tomar a Surinder el té y se desmayó para estar segura lo acuchillo. Se murió de verdad. El chico joven rico lindo que se había encontrado con Isis le pidió matrimonio y ella aceptó casarse con ella. Después, de nueve meses ellos tuvieron tres hijos dos nenas y un nene. La sirvienta se quedó con los aretes por ayudar a Isis. Un día la sirvienta cumplió 18 años. El hijo de su patrona cumplió veinte años. El hijo de Isis le propuso matrimonio a la sirvienta ella dijo que si se casaron y tuvieron dos hijos un hombre y una mujer. La familia del enemigo quedó muy triste hasta que vivieron felices para siempre.

Cuando sherezade terminó de contar la historia, generó suspenso. El rey dijo: - ¡Qué historia más bella!


Sherezade contestó: -No se parece nada a la que te contaré la próxima noche...

Autora: Karen Sosa con la colaboración de Valeria Fernández.


Onur y el libro mágico del futuro Recuerdo, ¡oh rey afortunado! que, en tiempos muy lejanos, en la ciudad de Persía había un joven llamado Onur que vivía con su madre y eran pobres ya que su padre había muerto. El joven tenía pelo corto de color negro y sus ojos eran de color celeste como el cielo. El muchacho siempre iba a jugar con sus amigos. Un día se entera de que su madre se iba a casar y él no quería aceptar a su nuevo padre. Entonces, él decide irse de su casa y no volver nunca más e ir a la casa de su abuelo con el libro que le había dado. Tiempo más tarde mientras iba en marcha a la casa del abuelo vino un hombre desconocido le vendó los ojos y lo secuestró. Cuando el muchacho se despertó no se despertó en la casa de su abuelo sino en una cueva. El chico se quería escapar pero no podía porque tenía las manos y pies atados. Después vio una chica secuestrada por el mismo hombre le preguntó su nombre y la joven respondió: -Melek. Un rato después el chico vio al hombre que lo había secuestrado con el libro que su abuelo le había dado también escucho decir esto: -Este libro me dirá mi futuro dijo el desconocido. Luego el protagonista le dijo esto: -Ese libro no te dice el futuro. El desconocido respondió diciendo: -¿Tu abuelo no te contó que el libro te cuenta el futuro? Sí tu abuelo te lo hubiera contado vivirías sabiendo tu futuro, pero ya es demasiado tarde ahora yo lo tengo. Después el joven recordó que tenía un cuchillo que le había dado su padre se desató las manos y después los pies. Acuchilló al hombre que lo secuestro en la pierna derecha y desató a la chica y finalmente se escaparon pero el chico sabía que el desconocido los encontraría así que prepararon un plan era así la chica se iba a disfrazar de adivinadora del futuro y Onur estaría escondido en los muebles y esperaron al hombre. Llegó y lo invitaron a comer. Cuando entró al cuarto se sentó y comió después el chico salió de los muebles y lo apuñalo en el corazón. Un rato después lo enterraron en el bosque. Después Onur se casó con la joven y tuvieron cuatro hijos dos nenes y dos nenas. Vivieron sabiendo el futuro de su familia y felices por siempre hasta que la muerte los separe.

Cuando Sherezade terminó de contar el cuento, él rey dijo: -tus historias son maravillosas. Sherezade contestó: -Las historias que te he contado no se comparan con el próximo relato. Cuentan que…


Autor: JosĂŠ Jonathan Tafur con la colaboraciĂłn de Leonel Coria


Khalil y el libro de los dibujos Recuerdo ¡oh rey afortunado! que en tiempos muy lejanos en el antiguo Egipto vivía un hombre llamado Khalil. Su padre había muerto cuando él tenía ocho años. Su madre lo crió por veinticinco años. El muchacho era paciente, cuidadoso y responsable era pobre. Pero a pesar de su mala suerte él tenía una gran sonrisa. Su pelo se movía como el mar y brillaba como el oro. Su hermana Abbear era inteligente y graciosa. Un día el protagonista encuentra un libro mágico en una cueva que hace los dibujos realidad pero que pero un efrit. Él poseía a las personas y las convertía en sus discípulos. mientras tenía el chico el libro pidió ayudar a las personas pobres que no tenían casa. Ese era su deseo, lo cumplió y su mamá escuchaba ruidos en la casa. Viene su mamá preguntando con curiosidad: -¿De dónde sacaste ese libro?khalil con dudas no dijo la verdad: -emm...lo encontré en la biblioteca. De repente el efrit rompió la puerta de su casa alarmando al muchacho y a su mamá de pronto, gritó: -¡Devuélvame mi libro! ¡AHORA¡ El efrit tan rápido como una serpiente tomo el libro. Por esa razón, el efrit reapareció en otro lugar con el libro seria imparable. El muchacho fue a la biblioteca más grande acompañado de su hermana. El joven con odio al efrit buscó y buscó hasta que lo encontró. Abbear ideó un plan para matar al efrit y recuperar el libro. Khalil dice que para derrotar a un efrit hay que hacer un conjuro y tenían que sacrificar a alguien amado pero el muchacho tenía miedo de sacrificar a sus seres queridos. Pero había otra forma: sacrificando a un ANIMAL. Luego, la hermana buscó y buscó pero no encontró. Después de tanto buscar, apareció una vaca pero lo que no sabía es que el animal era el genio. El malvado enemigo capturó a su hermana Abbear y la absorbió. Mientras Khalil preocupado de que su hermana tardara mucho en volver, recibió un mensaje mental del efrit: dijo que si no le devolvía el libro los mata a todos los del pueblo. El efrit apareció. De repente y como es tan desesperado lo atacó, khalil recordó el libro que leyó y le dio en en su punto débil. Eran trece puntos. El efrit se volvía más débil hasta que lo mató y después se desintegró. Al matarlo, su hermana Khalil regresó sana y salva. También, salvó a la gente absorbida. El deseo de Khalil era que el efrit no volviera a aparecer y que todos sean felices. La mamá


estaba orgullosa de Khalil y su valentía. También su hermana. Ella se alegró mucho de salvarle la vida. Después de cincuenta años el libro se desvaneció y al final Khalil, su hermana y su mamá descansaron en paz.

Cuando Sherezade terminó de contar la historia, el rey dijo: -Que historia maravillosa. Sherezade respondió: -Nunca será como la que te contaré la próxima noche…

Autor: Joseph Orellana con la colaboración de Albert Eguiluz


El Efrit mágico con siete colas

He llegado a saber, ¡oh rey afortunada! que en tiempos lejanos vivía en la ciudad de Bagdad un muchacho llamado Sharil. Era un joven muy encantador con un hermoso ojo verde como las esmeraldas y el ojo derecho de un hermoso color rojizo y un hermoso pelo castaño. Pero él tuvo la desgracia de nacer sin padre. Sin embargo, siempre jugaba con los chicos del barrio. Pero un día cuando estaba jugando encontró a un señor que estaba maltratando a un gato que tenía siete colas el señor enojado le dijo al gato: -¡MALDITO EFRIT, SE SUPONE QUE TIENES QUE HACER LO QUE TE DIGA! Lo que parecía un gato realmente era un efrit con forma de un gato con siete colas que al parecer concedía deseos. El protagonista se quedó impactado por lo que veía. Pero sin pensarlo dos veces salió corriendo a defender a ese tal efrit con forma de gato con siete colas. Fue corriendo hasta el efrit y cuando el señor muy enojado estaba a punto de “matarlo” el protagonista agarró al efrit y salió corriendo hacia una pequeña cueva. Con muchísima suerte el señor no logró encontrarlos. El pobre niño enpezó a curar las heridas del efrit. El malvado señor ideó un plan: que cuando el protagonista se vaya a dormir se robaría al efrit y se lo quedaría para él para pedir deseos para perjudicar la vida de Sharil. Al cabo de un rato, se hizo de noche, el joven se durmió en la cueva y llegó el viejo señor se robo a la criatura. Al despertar no vio al efrit y salió a buscarlo. Cuando llegó al centro de la ciudad encontró a su hermana cuyo nombre es Fareli y le pidió ayuda para encontrar al malvado que se robó el efrit. Después de que el personaje principal le explicara todo lo que había pasado a su hermana menor, fueron corriendo donde Sharil encontró al ser mágico. Al llegar a la casa del maldito hombre, encontraron al efrit en manos del señor. Cuando el viejo vio a los dos se enojó mucho más pero sin pensarlo pidió al efrit que secuestre a los dos niños. Pero el efrit se negó. Entonces, el malvado señor lo lanzó a una jaula para atraparlos. El protagonista cayó dentro de la trampa que el malvado señor le había lanzado, pero con suerte la hermana menor pudo esquivar la trampa. Al ver que el malvado soltó al efrit, la hermana del protagonista fue y agarró al efrit. Pidió que quemara vivo malvado viejo. De esta manera los dos niños pudieron seguir viviendo felices y como vivían antes en tranquilidad, pero ahora con el efrit.

Cuando sherezade acabo de contar la historia de “el Efrit mágico con siete colas” se calló sonriendo.


El rey shariar dijo: - Ciertamente la joven Fareli no tiene par entre las mujeres de hoy. -No creas,¡oh rey afortunado!, que todas las historias que has oído hasta ahora pueden valer tanto como la historia que te estaré a punto de contar. El rey shariar dijo para sí: -No la mataré hasta después! Entonces Sherezade sonrió y dijo: -Cuentan que… Pero en ese momento vio aparecer la mañana y se calló discreta.

Autora: Martina Marenco con la colaboración de Guadalupe Custode


El secreto de Ghazari

He llegado a saber, ¡oh rey afortunado! que en tiempos muy lejanos vivía una chica que sus padres la abandonaron porque no podían darle de comer. La joven vivía en Oriente, era hermosa y se llamaba Ghazari. Así que una pareja la encontró y el hombre siempre había querido una hija, mientras que la mujer le bastaba con el hijo que ya tenían. El señor levantó a la dulce niña. El niño llamado Sheizu no quedó muy contento con la sorpresa, pero después se encariñó. Cuando ya tenía dieciséis años era una joven linda con el pelo rubio cual sol. Tenía ojos verdes cual hoja del árbol, perfecta piel un poco morena, buena estatura y era delicada como las flores de primavera. Poco después sus padrastros le trajeron una hermanita la cual era llamada Sheiry. Aunque sus hermanos Sheizu y Sheiry eran los consentidos nunca se enojaba, nunca se veía triste y nunca le faltaba una sonrisa. Su padrastro consentía a los tres mientras su madrastra no. A pesar de que eran pobres se conformaba con lo que le daban. Un día llevando leña para la fogata de la noche se encontró con una vasija reluciente y puso la leña a un lado. Al abrir la vasija no vio nada, unos segundos después salió un ser mágico que dijo que era una efrít y que ella le va a dar todos los tesoros que podría soñar cualquiera y las comidas más deliciosas cual lujo. Al llegar a su hogar la criatura le dijo que nadie podía saber de ella. La joven estaba sola en su hogar ya que sus padrastros y sus hermanos salieron a buscar agua. La joven apurándose le pidió una deliciosa comida, la efrit se lo concedió. La chica juró que no iba a abusar de lo que ella tenía. Cuando llegaron sus padrastros, su hermana y su hermano se encontraron con la bella sorpresa. Su madrastra al ver esto no pudo aguantar el apetito y rápidamente se sentó a comer. La madrastra sabía que la joven no podía hacer tanta comida en unos instantes. La señora sospechaba de la joven así que hizo un plan. A la noche cuando todos dormían esta se levantó silenciosamente y fue a la habitación de la muchacha. Al entrar provocó un ruido pero no se notó. Entonces la efrit se levantó. Astuta se escondió bien, esto provocó que la madrastra no la encontrara. A la mañana siguiente la madrastra mandó a la chica a recolectar leña para la noche y agua. Ghazari se había olvidado de llevar a la efrít ya que con tanto apuro no pudo llevar nada. Cuando la muchacha se fue la madrastra no dudó en pensarlo y fue a la habitación de la chica. De repente vio una vasija que no había visto la noche anterior. La madrastra abrió aquella vasija y salió aquel ser mágico que Ghazari tenía de secreto. Al ver que ella tenía razón sonrió malvadamente. Ghazari al llegar a su hogar su madrastra la esperaba. Luego, llegó su padrastro al que la adolecente quería mucho. La madrastra no quería que su esposo se enterara de aquel secreto de la chica. La joven no entendía qué quería la señora. Al día siguiente fue al mercado a comprar pan. La madrastra fue quien se lo pidió ya que la estaba esperando. La muchacha pasó por donde estaba la mujer. Como la señora sabía que le gustaba a la joven le ofreció una riquísima tarta de un dulce exquisita a cambio de su preciado secreto. La chica no pudo aguantar y se lo dio. Al llegar a su casa buscó en su bolso y se dio cuenta de que había dado todo lo que tenía y se echó a llorar. La mujer quiso obtener el


objeto preciado de su hijastra. No tardó mucho y la abrió. El efrít pensó que Ghazari tenía todo planeado para que la encuentren. A la noche la malvada se durmió. Ghazari tuvo tiempo para escabullirse y sacarle su objeto preciado. Al despertar la señora al no ver la vasija supo que su hija la había tomado. La señora estaba cansada y quería sacarse de encima a la pobre e indefensa chica. Mientras que la chica hacía una corona de flores del río, escuchó un caballo que se acercaba a ella. De repente vio un hermoso caballo con un encantador muchacho que era el príncipe de todo Oriente. Al ver a Ghazari no dudó en que era hermosa y quería casarse con la dulce y hermosa joven. Ghazari también sintió lo mismo al verlo. Mientras tanto, su madrastra quería que Ghazari se fuera de su hogar para siempre y entonces le puso un veneno en la copa de agua para el almuerzo, Al llegar el almuerzo su esposo no volvía y los cuatro se preocuparon por él. Muchas horas después, les llegó una carta diciendo que había muerto su padre. La joven no pudo aguantar el llanto y se echó a llorar. A la mañana siguiente Ghazari en el río volvió a ver a su príncipe. Ésta le contó todo lo que le había pasado. La señora no sabía por qué se iba primero que todos. Pasaban los días y Ghazari se desahogaba con el príncipe para olvidar sus penas, mientras la señora sospechaba. Un día la madrastra fue a espiarla. Al ver a la joven con el príncipe la madrastra enfureció casi sacando humo de las orejas. El príncipe estaba cada día más enamorado de la joven. Cuando Ghazari regresó a su casa la señora le gritó como nunca lo había hecho. Los hermanos de la joven escuchando los gritos de su madre decidieron ayudar a Ghazari. Sheizu le preguntó por qué le gritaba a su hermana. La mujer al ver que la estaban enfrentando respondió con voz temblorosa que estaba viendo al príncipe en secreto. Mientras tanto la efrít salió del bolsito de la joven y los hermanos quedaron impresionados con la efrít. La señora al ver que estaban distraídos se encerró en su cuarto. A la mañana siguiente la efrít cansada de que a Ghazari la tratara con desigualdad, le dijo a la joven que tenían que hacer un plan para acabar con aquella señora. Su madrastra como se iba a comprar, la joven aprovechó para contárselo a su hermano Sheizu. Tenían que hacer un pequeño líquido que eso haría que no pudiera respirar y le daría dolor de estómago. A la noche, su madrastra volvió y todos estaban dormidos. Antes habían puesto en el té de la señora el líquido. La señora muerta de sed tomó el té y se durmió. A la mañana la joven se levantó temprano por escuchar a alguien gritar. en la habitación de su madrastra. Fue y vio a la señora en el piso muerta. Sintió pena pero por fin podía dejar de ser la que no quería la señora, su hermano al enterarse de la noticia fue a enterrarla en jardín de su casa. La efrít se enteró de aquello sucedido. Poco después llevó a la joven a una cueva llena de oro. A continuación, el príncipe aburrido de elegir telas y manteles elegantes quería escaparse y ver a la muchacha. Mientras que la joven estaba en la cueva tenía que contárselo a su hermano. El príncipe logró escaparse y esperaba a la chica con un ramo de flores. Ghazari corriendo hacia su casa se encontró al príncipe con el hermoso ramo de flores. El príncipe la detuvo la chica apurada. La chica tomó el ramo de flores y le dio un beso. El príncipe al recibir el beso y ver a la muchacha correr la siguió hasta su casa .El hermano de la chica vio al príncipe atrás de su hermana. Le dijo si quería pasar a tomar algo y el muchacho le dijo que sí. La joven apurada por decirle a su hermano se lo dijo


en un segundo, de repente salió la efít y se fue a la cueva la joven la siguió, el príncipe también y su hermano con la hermanita menor en brazos. Fueron a la cueva, pusieron un poco de oro para que Ghazari fuese la esposa del príncipe. Fueron al palacio le entregaron el oro al rey, el príncipe le rogó a su padre y el rey feliz de que su hijo le rogara tanto, le dijo que sí. Así fue como la familia de Ghazari se mudó al palacio para que ella sea princesa. Cuando ella cumplió veintiuno el príncipe le propuso matrimonio. Se casaron y fueron felices.

Cuando Sherezade termino de contar el cuento y genero un clima de silencio y el rey dijo: ¡Que historia más bella! Sherezade respondió: Nunca será como la que te contaré la próxima noche...

Autora: Rocío Candia con la colaboración de Victoria Chipana


¿El misterio de la madrastra? He llegado a saber oh rey afortunado, que en la antigüedad vivía una mujer llamada Arale. La joven era linda, educada e inteligente. Arale tenía unos ojos celestes como el cielo y como el mar, un cabello rubio como los rayos del sol y su sonrisa tan linda que todos los pájaros cantaban. La bella era huérfana ya que sus padres fallecieron así que estaba en un orfanato. Un día vino una señora cuyo nombre nunca decía así, que la llamaba madrastra. Arale siempre tenía curiosidad por la señora como si ocultara algo. Una noche muy oscura la anciana estaba dormida. Entonces, entró al cuarto, era raro, vio un cofre y una llave. No le dio importancia. La señora por suerte no vio a Arale pero ésta vio que su madrastra se convirtió en una hechicera vieja. Su piel eraarrugada como si tuviera heridas, su nariz puntiaguda como las montañas y era anciana. La joven Arale salió. En el barrio todas las personas la querían siempre cuando salía al parque a pasear. Un día la madrastra se dio cuenta de que tenía la llave mágica. Entonces, decidió matarla porque ella era la única que sabía el secreto. Pero Arale sin querer escuchó que dijo eso, así que salió corriendo a empacar para irse lejos. La anciana buscó, buscó pero no la encontró. La joven se fue y quería hacer su nueva vida . La llave era mágica abría todos las cosas del mundo. Entonces, como Arale era pobre decidió vender la llave o algo más valioso, ya que ella encontró muchos tesoros al usar la llave. Al fin y acabo ella se hizo millonaria y vivía en un palacio. Pero igual no se salvó de su madrastra ya sabía que vivía en un palacio así que se hizo pasar por la empleada. La villana tenía una esfera y veía todo así que quiso verla a Arale, cuando la vio ya tenía un plan. A la noche la madrastra entró al cuarto de su hijastra y vio la llave. Entonces, agarró la llave y salió corriendo. A la mañana siguiente se despertó Arale y no vio la llave. Sabía que era su madrastra ya que la quería matar sólo por la llave. Ella no pudo encontrar la llave buscaba y buscaba no pudo encontrarla. A lo lejos vio a su amigo de la infancia Tadeo. Ellos querían hablar de muchas cosas pero no tenía tiempo así que le contó el problema que tenía Arale a Tadeo. Escuchó todo así que idearon un plan para matarla y nunca saber nada de ella. Fueron a la casa antigua porque ahí seguía viviendo la madrastra. Cuando llegó a la casa Tadeo por la espalda la agarró uy la acuchilló. Ya no se supo más de ella. Al verlo tan valiente Arale a Tadeo se enamoró. Después, de muchos años vivieron felices y tuvieron dos hijos.

Autora: Génesis Cisneros con la colaboración de Mailén Lucena


Las aventuras de Basín

He llegado a saber, oh rey afortunado, que en tiempos lejanos vivía en Egipto un chico llamado Basím. Él vivía en un pueblo muy chico. Era hermoso, con ojos azules y pecas. El muchacho era muy pobre. Siempre ayudaba a su mamá y su papá por lo tanto Siempre ponía la mesa. Durante el día vendía cosas en el zoco. Vivía con su mamá y su papá. Un día conoció a un chico llamado Nassr que también era pobre. Pero una tarde murió su padre. Eso no lo frenó a seguir su camino . Yendo a su casa encontró una pulsera. La frotó para sacarle la tierra y salió un efrit. Él se sintió emocionado. Llegó a su casa y le dijo a su mamá. El chico estudió la pulsera y averiguó que eran pulseras mágicas que te cumplían tres deseos y desaparecían. Pidieron un deseo cada uno, les quedaba uno. Un día yendo a su casa con su amigo encontraron a su mamá con un cuchillo y los quiso matar. Pero la ataron y la llevaron a su casa. Tiempo más tarde, cuando entraron vieron un montón de oro. Su madre gastó el último deseo en oro. No sabían qué hacer. Nasser le avisó que su hermana era maga .Basím dijo : - Dale vamos a tu casa. Tenemos que matarla, no hay otra opción. Imaginate si la soltamos. Nasser dijo: -Y tu mamá, qué hacemos con ella. -No pasa nada Entonces fueron a la casa de Nasser. Cuando llegaron le contaron lo que pasó a la hermana de Nasser y dijo : -Bueno voy a ir con ustedes y la mataré Como consecuencia por tardar tanto, cuando llegaron a la casa la madre no se encontraba, se había escapado. La madre no sabía en qué parte vivía el amigo y los siguió. Así descubrió la casa y para recordarla marcó una de las paredes. Pero ese día Basin y Nasser venían de comprar materiales para mejorar la casa. Cuando terminaron parecía una casa de millonarios. La madre cuando llegó a cambiar la casa, la marcó. No se veía no sabía cuál de todas era la casa. Como sabía en qué lugar se encontraba le hizo otra marca. A la hora de atacar decide entrar con bolsas por el patio trasero. Al entrar recogió todo el oro y se lo llevó a su cueva donde se resguardaba. Tiempo más tarde volvió con un cuchillo. A la hora de matar a Basin Nasser se levanta para tomar un vaso de agua. Cuando la ve se tira arriba de la madre. Se levantan todos por el tremendo ruido. La hermana de Nasser le clava un cuchillo en el pecho y la mata. Así vivieron felices como una familia y el cuerpo lo tiraron al mar.


Cuando Sherezade acabó de contar la historia,se cayó sonriendo . El rey Shariar dijo: -Es sin duda una historia extraordinaria. Sherezade contesto: -Si, pero mi próximo relato será mucho mejor.

Autor: Nicolás Beck con la colaboración de Santiago Rordríguez


Ashia y el collar mágico

He llegado a saber ¡oh rey afortunado! que en tiempos lejanos vivía en Persia una niña llamada Ashia que era muy hermosa como la mañana, con unos ojos celestes como el cielo y un pelo marrón como la madera. Ella era hermosa aunque tenía toda la ropa agujereada. También, era muy pobre aunque en los días malos igual ella era divertida y jugaba con los muchachos de su barrio. Además, ella iba a la escuela. La madre Anees vendía cosas perdidas y siempre a ella le decía que tenía que tener mucho cuidado con el padre aunque Ashia nunca lo conociera. Un día su madre murió ya no por culpa de una enfermedad. Entonces, para Ashia fue una pesadilla porque su madre ya no estaba y se quedó sola. Luego, como su madre tiene a su padre osea su abuelo Ashia decidió ir a su casa. Encontró en unos de los cajones de su madre la dirección y desde ahí siempre iba a la casa de su abuelo. Él le contaba historias maravillosas, muy hermosas. Ashia siempre se imaginaba todo lo que él le contaba. Cuando creció hasta que cumplió los diecisiete años fue a la casa de su abuelo que ya iba a morir. Antes de lo que iba a pasar, el abuelo le dio un collar que cuando Ashia lo usaba sale un efrit que le concedía deseos. Pero siempre el abuelo le decía: -Nunca le hagas caso a ningún extraño. Un día normal Ashia se fue a la escuela y se encontró con un señor llamado Abraham que era su papá oculto en una clase de disfraz. Él la conocía a ella, pero la joven no lo conocía a él. Entonces Ashia preguntó: -¿Quién es usted? El respondió: -Soy tu padre biológico. La niña dijo: -okey. Pero Ashia no se acordó lo que le decía su madre antes de morir. Entonces para Ashia va a ser una pesadilla porque no sabía lo que le esperaba. Cuando, el padre de la joven fue a la escuela le explicó que él era su padre biológico y la protagonista le creyó. Cuando la niña escuchó que era su padre se quedó sorprendida porque nunca había visto a su padre biológico. A continuación, el padre se fue con Ashia a una casa pero ella no sabe lo que le esperaba una horrible pesadilla. Después de una semana de que la joven conoció a su padre, empezaba la pesadilla. El padre la maltrataba, le decía tonta, le hacía limpiar todo y no podía ni dormir. Todo el día estaba trabajando mucho. Entonces, Ashia se escapó de su casa a un lugar lejos y en ese momento se acordó del collar que le dio su abuelo antes de morir se lo puso. Salió un mágico efrit que le concedía deseos. Ashia le pidió a ese ser mágico que le diera ayuda con


alguna persona y el efrit le dio la ayuda pero la joven no podía ver nada, estaba sola. En ese momento se le ocurrió a quien le podía pedir ayuda. Le iba a pedir ayuda a su hermana que se llamaba kala. Ella era muy hermosa, tenía el pelo de color castaño y sus ojos de color marrón como la madera. La joven era una chica sencilla y normal. La chica venia de un lugar muy lejano. Luego, Ashia le decía a su hermana que iban a idear un plan para que el padre la deje de maltratar. El plan era muy sencillo: Kala se iba a disfrazar de una chica e iba a invitar al padre a comer. Entonces en la comida le iba a poner un veneno para que el padre se quedaba inconsciente para siempre. Pero kala dijo: - ¿Y de dónde vamos a sacar el veneno? Entonces, Ashia se le ocurrió una idea fantástica y le dijo: -Del collar que me dio mi abuelo. Respondió: - ¿Y que nos puede ayudar el collar del abuelo? Ashia le dijo: -Bueno el collar tiene un efrit que concede deseos y le podemos pedir que nos dé una clase de veneno. Kala respondió: -Ok, pedile al efrit un veneno. Tiempo más tarde Ashia le pidió al efrit el veneno. Luego, el día del plan llegó. La hermana se disfrazó de una chica e invitó al padre a comer algo a su casa. Después de una larga conversación por fin le trajo la comida. El padre dijo: -¿Qué tiene la comida? Kala respondió: -Tiene una salsa. El padre comentó: -Ah pensé que era algo venenoso. Kala dijo: -No,no nunca pondría algo venenoso en su comida. Finalmente, el padre comió la comida y calló duramente al suelo. Finalmente, Ashia y Kala agarraron el collar y pidieron ser felices por siempre.


El rey Shariar dijo: -Es,sin duda,una historia extraordinaria Sherezade contesto: -Si,pero el próximo relato sera mucho mejor.

Autora: Rocío López con la colaboración de Julia Valerga


Laila y las frutas mágicas

Recuerdo Oh Rey afortunado que en tiempos muy lejanos en Egipto vivía una chica Laila con un pelo marrón como el tronco de un árbol, ojos azules como el mar, una piel clarita como el color blanco y una sonrisa deslumbrante. Un día sus padres salieron de viaje en un barco. El barco se empezó a hundir. Entonces, llega alguien a su casa. Esa persona le dice a la chica que murieron sus padres. Ella se echó a llorar cuando escucho la noticia. Como sus padres eran pobres ella no sabía qué hacer. Un día la protagonista andaba caminando por el pueblo y vio una señora que vendía frutas, un kg. por veinte monedas. Laila dijo: -Señora me llevo un kilo. La mujer respondió: -Bueno sólo cuesta veinte monedas. Luego fue a su casa y comió una fruta. Entonces, apareció un efrit. El efrit dijo: -Yo soy tu efrit. Vuelo en el aire y camino por la tierra. ¿Qué necesitás? La chica se asustó, pensaba que el efrit era malo. Como el genio era bueno, sólo te concedía tres deseos al día. Pero la señora era una maga, ella era mala porque tenía un anillo con un efrit malo. Entonces, ella mandó a matar a Laila. Entonces la maga dijo al ser mágico malo: -Ve y mata a la doncella. El efrit al escuchar las palabras fue a la casa de la protagonista. El ser mágico se transformó en un turista. Llega a la casa de Lila toca la puerta y le abrió el amigo de la protagonista que se llama Osman, él le dijo: -Hola ¿quién sos? ¿Cómo te llamas? El supuesto turista le respondió: -Yo soy un turista soy de China, me llamo Hailin ¿Tu cómo te llamas? Osman respondió. -Yo me llamo Osman. ¿Qué se te dio por tocar esta puerta? El señor contestó:


-Pensé que había buena gente. Osman respondió: -Sí, somos buena gente. Pasa pasa. Y el señor pasó de repente se puso a buscar a Laila y no la encontró. Osman dijo: -¿Qué estás buscando? El señor dijo: -Nada nada. Cuando la protagonista volvió, le preguntó al amigo quién era el señor. Osman dijo: -Es un turista de la China que no tiene donde quedarse ¿Te molesta? Ella respondió: -No me molesta, sólo preguntaba. Unas horas más tarde estaban durmiendo todos cuándo el señor se levantó y se dirigió a la cocina. El amigo escuchó ruidos de pie en el pasillo y fue a ver qué pasaba. El señor fue por un cuchillo mágico que tenía en su bolso. Se dirigió al cuarto donde dormía ella e intentó clavarle el cuchillo, pero de repente se despertó. La protagonista dijo: -¿Qué quieres? Halin dijo: -Nada, sólo pasaba por acá. La noche siguiente, lo volvió a intentar y así la siguiente noche, hasta que lo descubrió Osman hablando con la señora mala de su plan para matarla. Fue y le contó a la protagonista. Osman dijo: -El señor no es bueno. Está hablando con alguien que tiene un plan para matarte. Ella dijo:


-Deja de bromear, es mentira. Ella no le creyó. En la noche volvió pero él vino y le sacó el cuchillo mágico de la mano, lo intento matar pero el cuchillo lo traspaso. Se volvió efrit, Osman se asombró y como tenían las frutas mágicas, salió el efrit le pidió que lo matara al efrit malo, pero la señora seguía viva , entonces Osman la fue a buscar con el cuchillo mágico para matarla, como la señora estaba en el mercado , Él le dijo que quería matar a la amiga y empezaron a pelear , le pudo clavar el cuchillo la logro matarla, las frutas las destruyeron traigan más problemas y Osman y Laila se casaron tuvieron hijos y vivieron felices por siempre. Cuando sherezade acabo de contar la historia, se cayó sonriendo. El rey Shariar dijo: -Es, sin duda, una historia extraordinaria. Sherezade contesto: -SI, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autora: Aldana Domínguez Silva


Yassér y su pulsera mágica He llegado a saber oh rey afortunado que en tiempos muy lejanos vivía un hombre llamado Mohamed, que tenía un hijo de once años llamado Yasser. Mohamed siempre le enseñaba a su hijo a ayudar a los pobres con lo poco que les sobraba. Él y su hijo iban al zoco a comprar agua porque estaban muy sucios. Eran muy flacos ya que no comían mucho. Ellos eran muy observadores. Yasser se sentaba y miraba que pasaba en el zoco Un día Yasser vio dos hombres peleando por una pulsera. Uno era negro como el barro y el otro blanco pálido como la leche. El negro empezó a correr al blanco y se olvidaron la pulsera. Yasser y un señor se quedaron mirando la pulsera fijamente, los dos fueron a buscarla y Yasser llegó primero. El hombre le ofreció mucho ORO, pero Yasser al ver la belleza de la pulsera le dijo que no. Yasser al llegar a su casa le contó a su papá lo que pasó y éste le gritó que hubiera aceptado. El niño triste fue a buscar al señor. Preguntó por todo el zoco. En una tienda la señora le preguntó por qué lo buscaba. El niño le contó lo que había pasado. La señora miró la pulsera y le dijo que lo ayudaba si le compartía un poco de ORO. El niño aceptó. El señor que le había ofrecido el ORO, sabía que de alguna manera iba a aceptar el trato. Encontraron al señor, resulta que la señora era dueña de la pulsera mágica. El señor agarra su espada pero no contaba con que la señora tenia poderes mágicos. Con sus poderes hizo que el señor suelte su espada. Si no fuera por la señora Yasser hubiera muerto. La señora le regaló la pulsera al niño y lo ayudó a venderla para que el padre no se enoje. Cuando Sherezade acabó de contar la historia, se calló sonriendo: El Rey Shariar dijo: -Es, sin,duda, una historia extraordinaria. Sherezaden contestó: -Sí, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autores: Matías Beck y Lautaro Spina

Ilustrador: Albert Eguiluz


Aisha y la Efrit que concedía deseos. Oh, rey afortunado he llegado a saber que en tiempos lejanos entre una de las muchas ciudades de Irán vivían dos hermanas. La mayor se llamaba Aisha. Ella tenía el pelo de color rojo como la sangre y los ojos eran azules como el cielo en un atardecer. La menor se llamaba Alsina y su pelo era como una rosa amarilla. Sus ojos eran como la luna en la noche misma. Un día cuando la protagonista fue a buscar agua a un pozo encontró a una persona peculiar. Cuando se acercó a la señorita, la “desconocida” se convirtió en un efrit llamada Aria que le concedió tres deseos. Uno fue paz en el mundo, otro que su hermana sea feliz y el último fue ser rica. Entonces, su casa se hizo de ¡ORO! Todo lleno de monedas y plata. Todo era perfecto hasta que un día como cualquiera, un hechicero llamado Giban Ligur dijo que su efrit había desaparecido “de la faz de la tierra” y era la que estaba con las protagonistas. Él las vio con todos los tesoros a su alrededor. Estaba muy enojado, así que lanzó un hechizo y de repente Aria se convirtió en piedra y dijo: -El hechicero me descubrió. Entonces Aisha y Alsina preguntaron: - ¿Qué hechicero? Entonces, contestó: - El de piel blanca, ojos rojos como la sangre, dientes chuecos y pelo negro como el carbón. El hermano de… -Se comvirtió en piedra totalmente. Entonces el hechicero entró y dijo: -Soy el hechicero mas -Ahisha interrumpió: - Más poderoso… ya sé se la historia de quién eres Él contesta: - Soy el hermano del rey Mustafa. Entonces lanza un hechizo sobre la hermana que estaba escondida. La protagonista dice: - ¿Qué quieres?


Responde: -Quiero el tesoro y mi efrit Aisha contesta: - Pero matame. -no. Entonces aparece una luz que con solo mirarla uno se quedaba ciego. Eran efrits todas mujeres. Les concedieron dos deseos: uno su hermanita y su amiga no sean más de piedra y el segundo que el malvado desaparezca. Entonces, desapareció, pero no se sabía si completamente.

El rey Shariar dijo: - Tus historias son maravillosas no crees. Sherezade respondió: - Pero no se compara con la de mañana.

Autora: Bianca Rodríguez con la colaboración de Camila Manzo


La historia del niño y el pincel Recuerdo, ¡oh rey afortunado! que en tiempos muy lejanos en Bagdad vivía un hombre llamado kamil. Él estaba en una granja que tenían plantas de algodón y un corral donde dejaban sus ovejas. Era un hombre hermoso, bueno, vago, tenía ojos un poquito verdes y tenía bonito pelo, un poco de rubio, así era kamil. Vivía con sus dos hermanos menores que se llamaban Namir y Nasim. Él era el mayor que estaba con sus padres, que eran pobres. Su papÁ comercializaba pescado para conseguir plata y estar en paz. Unos pescados que pescaba no los vendía, para que coma su familia. Por esa razón su mamá trabajaba siendo mercader de lana y algodón con las ovejas que tenían ellos y plantas de algodón. Al chico le gustaba jugar con las ovejas, así se divertía. Pero un día se encontró una cueva y él fue a explorarla. Ahí en ese momento vio un pincel y cofres con dinero. Él no sabía si recogerlo pero en la mente pensaba que lo podía usar para proteger a su familia. Pero antes de recogerlo fue a buscar una bolsa que tenían sus padres. Buscó la bolsa y la halló. En ese instante vio a su padre. Él no lo dejo pasar. Luego le dijo todo. Él lo dejó recoger una bolsa. Él también recogió una. Su padre le dijo que lo lleve con él. A continuación, fueron a la cueva. Ahí encontraron la cueva, pero había algo diferente: más cofres, joyas y dinares. En ese momento kamil se sorprendió al ver más cosas. En ese instante se dio cuenta de que había alguien o un ser que traía las cosas a la cueva. Pero su padre dijo: - Que se lleven el tesoro Y así fue. Más tarde el niño le contestó: -Que se lleven un poco de dinero paro no ser exigentes. Ahí su padre le respondió: - okey Kamil, nos llevaremos un poco, mientras tanto, de lo que dijo su padre a continuación se llevaron el oro pero el niño además de llevarse el oro con su papá, se llevó el pincel. Mientras se iban los vio un mago que era el portador de todo el oro. Por esa razón, se enojó y los quiso matar. En cuanto se fueron a su hogar, el chico se preguntó en su mente: por qué estaba el pincel en un lugar con tesoros, joyas, monedas y dinares. En las próximas horas dibujo una abeja en un papel y de repente lo que dibujo se hizo realidad. Él se sorprendió al ver su dibujo hecho realidad dibujo otra abeja y de vuelta se hizo realidad. El niño no se lo pudo creer se los contó a sus dos hermanos menores. Cuando se los contó a sus dos hermanos menores, se emocionaron. Cuando se lo contó a su padre, éste decidió esconder el tesoro. Lo escondió en un hueco que cavo. Pronto el mago que los observaba aprovechó para robar el pincel mágico. Así vino el mago y aprovecho que kamil estaba dormido y toda su familia. Pero de pronto se dio cuenta que las ovejas que tenían en su casa lo vieron y escucharon que el hizo ruido. Ellas se despertaron y se pusieron a balar. Todos se empezaron a despertar. el mago se fue porque si no sabían que los observaba. El señor al día siguiente fue a la casa ya que el niño se había ido. Aprovechó a robarle su pincel mágico y lo consiguió. Él se emocionÓ mucho. De repente se fue y cuando kamil llegó a su casa se asustó ya que su pincel mágico no estaba ahí. Vio a alguien salir de su casa que traía su pincel. En ese momento vio a su amiga que se llamaba Iris que jugaba con él y lo visitaba.


Repentinamente él fue con su amiga que le contó todo. Le dijo un plan para derrotar al mago. Le dio un polvo de arena que había recolectado antes que le dijera todo lo que había pasado. Luego de unas horas le dijo: -Cuando lo veas pon un poco del polvo de arena en tu mano y sopla para que no vea. Así le robarás el pincel y me lo darás. Entonces ella fue como le dijo kamil. Cuando lo buscó, lo vio que quería dibujar un ejército con espadas y escudos. En ese momento fue corriendo hacia el mago que lo distrajo y luego le tiró el polvo de arena para que el chico lo empujara hacia un pozo. En ese instante su amiga agarró el pincel. Pero el mago la agarró para que no se caiga. En ese instante kamil fue corriendo para agarrar a iris. Ella lo pateó al mago para que se caiga y muera en el pozo profundo. Finalmente, ellos limpiaron lo que había dibujado el mago con agua, así si cayera en las manos de alguien malo no podía terminar lo que quería hacer el mago. Al cabo de unos años se casaron y tuvieron tres hijos. Escondieron el pincel en un cofre con llave, que solo sus hermanos sabían dónde estaba. Pero después de un tiempo vino el cavador de las tumbas, la muerte. Cuando Sherezade acabó de contar la historia se cayó sonriendo. El rey Shariar dijo: -Es, sin duda, una de las mejores que me has contado Sherezade contestó: -No se compara con lo que te contare en la próxima noche Shariar dijo - No la mataré hasta después de escuchar esa historia. - Cuenta que… pero en ese instante Sherezade vio el sol y se calló discreta

Autor: Mishael Mamani con la colaboración de Josué Terán Rojas


BRUNO Y EL RELOJ MÁGICO

He llegado a saber oh rey afortunado que en tiempos lejanos vivía en china un chico llamado Bruno con el pelo negro como la oscuridad y con ojos celeste como el mar. Era listo y divertido. Ayudaba a su mamá limpiando los vasos, los platos y limpiando la casa. Era pobre. Su padre murió. ante le había dado un reloj a su hijo. Su mamá trabajaba de limpiando la casa. Se acordaba del reloj que le dio su papá. Encontró el reloj, giró la perilla y salió un efrit que concedía deseos. Entonces, pidió comida para él y su mamá. Por el comino se encontraron tres hombres. El primero era morocho y fuerte. El segundo era de piel blanca y su pelo era rubio. El tercero era el líder, era muy fuerte y su pelo era negro. Casi a Bruno le roban el reloj porque lo agarraron por atrás. Pero Bruno le pegó a la cara y a los hombres. Se escapó y se fue a su casa. Le dio la comida a su madre. Al otro día Bruno fue caminando. Una señora le dijo: - Soy la amiga de tu padre. Bruno dijo: -enserio. ¿Cómo lo conocías? La señora dijo: -Lo conocía de pequeña. El chico dijo: -¿Cómo te llamas? - Fatiana Se fueron a la casa del niño. La mamá dijo: -Hola fatiana, hace diez años que no te veo. Se fueron a la calle. Más lejos se veía a los tres hombres corriendo hacia ellos. Los hombres atraparon a Fatiana y a Bruno. Estaban atados. La joven tenía una navaja, cortaron la soga y salieron. Al lograr escapar se fueron a la guarida de los tres hombres. Entraron y vieron que estaba llena de guardias con cuchillos. Fatiana y Bruno los agarraron por atrás y les pagaron a los guardias con una maleta de metal que estaba tirada. Fueron al centro de la guarida y vieron que los tres hombres estaban durmiendo. El niño llamó al efrit del reloj y deseó que los tres hombres estén manchados con estiércol y quemados.


Cuando sherezade acabó de contar la historia, se calló sonriendo. El rey shariar dijo: -Es, sin duda, una historia extraordinaria Sherezade contestó: -Sí, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autor: Adrián Torres Luna con la colaboración de Benicio Sáenz de Tejada


Mustafa y la tela que cumplía deseos He llegado a saber ¡oh Rey afortunado! que en tiempos muy lejanos vivía en Siria un hombre llamado Mustafa que era tan blanco como la leche, tan rubio como el sol y los ojos marrones como el café. Él era muy amable. Él También era muy pobre. Su papá había fallecido cuando era pequeño y su mamá trabajaba muchas horas para poder mantenerlo. Su pasatiempo era escribir historias que empezaba repentinamente con útiles que encontraba en su casa. Un día estaba caminando recolectando granos de café y encontró una cueva que se perdía con la mirada de lo oculta que estaba. Luego de estar pensando un buen rato, decide entrar y encuentra unas coordenadas que lo lleva a varios lugares. En camino a la tercera coordenada se encuentra con una señora mayor que lo empieza a perseguir y a hacer muchas preguntas de su vida cotidiana. A mitad de camino le da una tela estirable que cumplía deseos. La señora le dijo que tenía quince deseos y que esa tela era querida por un hombre peligroso llamado Aban que la estaba deseando hace años. Después de eso, la vieja se retiró y él se quedó solo en el medio del bosque sin entender nada. Luego, al llegar a la casa descubrió que cada vez que la estira se cumple un deseo y le da diez monedas de oro. Mientas tanto el malvado Aban estaba pensando un plan para recuperar la tela. Entonces, un día yendo por la quinta coordenada se encontró al joven que deseaba la tela mágica, que amenazó a Mustafa para que le dé la tela y la joven siguió sin haberlo escuchado. El enemigo empezó a planear un intento de robo. Al día siguiente, Mustafa fue a ver una amiga que se llamaba Jazmín que la conocía desde la infancia en el pueblo. De repente cuando estaba llegando a la casa de su amiga el malvado se hizo pasar por la hermana de la señora que le dio la tela, le dijo que era de ella y que su hermana se la había quitado. El joven no se lo creyó y siguió directo para la casa de su amiga. Luego, al llegar a la casa de su amiga le dijo: -Jazmín, el otro día estaba caminando y una señora me dio una tela, de la que un muchacho quiere apoderarse Jazmín le contesto: -Dime quién es, yo lo enfrentaré y le diré que deje de molestar Mustafa le dijo el nombre, donde encontrarlo y le pidió que tenga cuidado. Al día siguiente el enemigo fue a la casa del protagonista y se hizo pasar por un vendedor ambulante que estaba muy cansado. Su madre lo dejó pasar. Cuando Mustafa fue a hablar sobre el tema con su mamá, Jazmín agarra un cuchillo que estaba sobre la mesa y lo acuchilló al enemigo. El protagonista se arrodilló y le dijo que estaba muy agradecido. Finalmente, se casaron y ya no necesitaban esa tela. Ellos se la dieron a su mamá Cuando Sherezade acabó de contar la historia se calló sonriendo El rey Shriar dijo:


-Es, sin duda, una historia extraordinaria Sherezade contestó: -Sí, pero sin duda el próximo relato será mucho mejor

Autora: Amara Lupo con la colaboración de Melina Rodríguez


Elaia y el anillo mágico

He llegado a saber oh rey afortunado que en tiempos muy lejanos vivía en Egipto una chica llamada Elaia que tenía quince años. Su pelo era rubio como el sol, sus ojos celestes como el mar y la piel blanca, la más blanca. Era muy curiosa y muy astuta. Era una chica muy pobre. Todos los días iba a trabajar, nunca faltaba. Sus padres habían muerto, ella era muy linda. Egipto era un lugar muy lindo. Pero un día ella estaba tejiendo, entonces se le terminó la lana y fue al sótano. Había una caja que se le cayó. Encontró un anillo. Si lo frotabas, pensabas lo que querías y lo adivinaba, te lo daba. Entonces todos los días pedía la misma cosa que era pedir comida para no morir de hambre.Pero un día vio que vino gente de Bagdad a adueñar se de Egipto .Pero un hombre se le acercó y le preguntó: - ¿Dónde encontraste ese anillo? Ella le dijo: - ¿Por qué esa pregunta? Él le dijo: - por curiosidadEl señor la miraba con cara de ladrón. él era de Bagdad. Era un comerciante de cosas, a veces cambiaba cosas nuevas por viejas. su intención era robarle el anillo. Pasaron dos días y él fue a su casa. Ella lo había invitado. Ella mientras estaba tejiendo lana y sé le había roto el palo para tejer. Siempre dejaba el anillo en el lugar dónde están los palitos para tejer. Él fue, buscó el anillo y lo encontró. Él dijo: -Me tengo que ir a mi casa. Ella dijo: - ¿Por qué? él le dijo: -Porque es el cumple de mi hermana. y ella le preguntó: - ¿Puedo ir? y él le dijo: - No


Él se fue de la casa, Pero ella sospechaba de él. Decidió seguirlo y vio que estaba yendo a un lugar dónde se encontraban bandoleros. Él se subió a un barco con un montón de cofres. Justo ella corrió hasta alcanzarlo, pero se dio cuenta que ya era muy tarde. Al día siguiente, se encontró con el mismo que le había robado el anillo que había agarrado los esclavos del rey porque él había robado el barco. Pero, lo lograron detener en la frontera de Bagdad. Ella fue a la cárcel del monarca, vio su anillo y se lo dieron. Ella confiada fue al mercado y como no se podía entrar con anillos se lo sacó y se lo dejó al chico de la puerta. Pero ese chico no era un chico era el que le había robado. Lo habían declarado inocente. Había salido el día anterior de la cárcel. Salió corriendo del mercado porque ya había cambiado el turno. Unas pocas calles después lo encontraron sus amigos y se escaparon. Mientras ella salió del mercado vio que no era el mismo señor, había cambiado. Ella corrió de una calle a otra. Fue a la casa de su prima que era inteligente, astuta y tenía el pelo más largo de mundo. Decidió ayudarla. Pasaron dos meses de la desaparición del anillo, fueron a todas las cárceles y lo encontraron. Ellas buscaron porque lo habían traído a la cárcel por robar a una señora y a una chica de veintiún años. Fueron a ver al que lo había traído a la cárcel. Le dieron al ladrón prisión perpetua. El objeto mágico se lo devuelven, ella lo guarda y lo utiliza cuando lo necesite así no tenía maá problemas.

Cuando Sherezade terminó de contar la historia generó un clima de suspenso El rey dijo: -Qué historia más bella. Sherezade respondió: -Nunca será como la que te contaré la próxima noche...

Autora: Celeste Rojas con la colaboración de Karen Sosa


Elena y el espejo mágico He llegado a saber ¡oh rey afortunado! que en tiempos lejanos vivía en la ciudad de Bagdad una joven llamada Elena que era hermosa por fuera y por dentro. Tenía el cabello tan oscuro como la noche y sus ojos eran las estrellas de esa hermosa noche. Ella era bella, hermosa y amable se decía que la joven era casi perfecta. De pequeña ella había perdido a sus padres. Habían sido una familia muy feliz. Ellos habían vivido en una casa muy grande en la que tenían sirvientes y estaban con el hermano de su padre, su tío llamado Yassér. Él era un hombre muy antipático que quería tener todo lo que tenía su hermano. Al pasar algunos años los padres de Elena fallecieron supuestamente por un accidente, quedando el tío como dueño de todas las riquezas hasta que Elena llegara a la edad de 16 años. Era tratada como una esclava por Yassé, ya que había sido así desde que murieron sus padres. Ella tenía una vida muy pobre pero aun así seguía siendo como era antes: amable y bella. La joven solía ir en sus ratos libres que no eran muchos al zoco para comprar los pedidos que le mandaba Yassér. Un día fue para comprar unos hilos para Yassér al zoco, pero también pasó por el bosque al que le gustaba tanto ir porque le recordaba su niñez. Pero esta vez algo pasó: ella como era tan curiosa se acercó más, más, más y más hasta que quedó varada en aquel lugar. Conocía bien ese bosque, pero por alguna razón Elena estaba perdida. Ella caminó y caminó hasta que vio una casa abandonada, pero parecía tener una luz. Elena entró a la casa, vio que estaba vacía, observó una escalera y subió hasta el segundo piso y entró a la segunda alcoba que estaba llena de tesoros. Entre todas esas riquezas fue directo hacia un espejo, lo tomó y volvió a su casa. Al anochecer su tío la regañó, le pegó una cachetada y le dijo: “¿Dónde estuviste todo el día?” Elena no le contestó y se fue a su habitación. Su tío la agarró y la tiró al piso dejándola inconsciente, pero teniendo la intención de matarla para sacarla de su camino. Le robó sus pertenencias incluyendo el espejo, ya que la usó como un peón de su plan para conseguir el espejo porque si veías tu reflejo atravesabas un portal en donde había un montón de riquezas. Él las quería porque estaba en la quiebra. Tiempo después la joven despertó agradeciendo de que no estuviera muerta, buscó por todo la casa sus pertenencias y no encontró nada. Entonces, decidió llamar a su mejor amiga llamada Jazmín para combatir lo que sea que estaría tramando Yassér. Luego, volvieron a la casa abandonada en el bosque, en la cual encontraron al tío de Elena a punto de entrar al espejo, pero para entrar necesitaba la vida de una mujer de corazón puro y él sabía que la amigas tenían ese corazón. Entonces Yassér decidió encerrar a ambas en el espejo y con eso recibía el doble de recompensa. Elena y Jazmín supieron lo que Yassér tramaba gracias a la visita de los padres de Elena en sus sueños. Sus hermosos sueños empezaron desde su niñez. Al amanecer fueron de viaje a la casa del bosque. Encontraron a Yassér sacando todos los tesoros por el portal. Jazmín estaba atada actuando como una rehén. Elena fingió pasarse para el lado del hombre. Yassér la recibió con los brazos abiertos. Sólo quería meter a Jazmín dentro del espejo a la media noche. El tío de Elena se fue a dormir, ella liberó a su amiga pero Yassér despertó. Así empezaron a luchar por sus vidas. Pero el hombre era muy fuerte. Además tenía un navaja en el bolsillo. De repente jazmín ve la navaja. La saca del bolsillo del hombre y trata de defender a Elena. Él las empuja al espejos pero ellas tratan de empujarlo a Él. De repente aparecen dos espíritus, el padre les dijo a las


chica que no mataran a Yasser. Mientras que ellas escuchaban lo que le decía los espíritus él estaba sacando los tesoros. Los espíritus se iban desvaneciendo. Sin apuro el tío las trata de tirar, pero ellas lo tiran a él en el espejo. Jazmín y Elena devuelven todos los tesoros. Después de tanto trabajo aparece un efrit y les dice que cada una tiene un deseo por ser tan buenas. Elena dice que el ya no fuera más efrit y Jazmín que todos los pobres tengan un trabajo, una casa y que sean feliz. Él cumplió todo y se puso a correr, se arrodilló y le agradeció. Después de algunos años la casa de Elena se convirtió en un gran castillo. El efrit volvió y les contó que los padres estaban vivos y de repente los padres aparecieron. Cuando Sherezade acabó de contar la historia, se calló sonriendo -Es, sin duda, una historia extraordinaria Sherezade contestó: -Sí. pero el próximo relato será mejor

Autoras: Sasha La Rocca Hansen y Victoria Giménez. Ilustrador: Dante Kriger


Mustafa y la cueva mágica

He llegado a saber, oh rey afortunado, que en la antigüedad, en Bagdad había un joven llamado Mustafá que era pobre, tenía ojos verdes claros como el pasto, la piel como el café ,ropa toda rota y rasguñada como si fuera que le habían pasado tres elefantes por la ropa y era muy inteligente . Lo único que le quedaba era su padre. Pero después de unas semanas, lo mató un efrit. Por eso nunca volvió a ser el mismo de siempre. Paso un año y él se crió solo, ya estaba mejor. Consiguió una mujer muy linda, que tenía ojos celestes como el mar, pelo marrón como la madera del árbol más lindo y la ropa muy cuidada porque tenía mucho dinero. Él no sabía qué hacía ella para conseguir mucho dinero porque su familia era pobre. El joven trabajaba vendiendo plumas baratas. Primero las compraba y después las vendía por un precio mayor, no le compraban muchas personas entonces, . El decidió ir a una cueva donde todos dicen que pasan cosas raras, pero dicen que al final de la cueva hay mucho oro. Luego, su esposa Melissa dijo: - ¿Qué haces mi amor? Él le respondió: - Estoy aquí para irme a la cueva donde pasan cosas raras. La joven dijo: - ¿Quién te dio la idea? No me digas que fue la señora loca del pueblo. Él dijo: – Sí cariño, me lo dijo ella. Mencionó que al final de la cueva había un tesoro que no te imaginas. Ella le preguntó: - ¿Qué es lo que llevás en tu dedo? El le contó que cuando su papa murió, le dejó un anillo y él nunca lo uso porque pensó que era muy especial que lo tenía que guardar. En ese momento, él pensó que era especial así que se puso el anillo después, se fue a la cueva. Sintió algo raro. Cuando entró había una mesa, sillas, comida, ropa en el piso y al fondo de la cueva había una luz parecía los rayos del sol y él fue corriendo a ver. Vio que era todo oro. Él no podía creer que fue tan fácil conseguir el oro, no le importó. Cargó bolsas de oro y se fue. Llegó a su casa, le contó todo a su esposa. Ella se sorprendió, no sabía qué decir. En ese momento, a él le agarró la curiosidad de por qué ella nunca estaba pero nunca se animó a preguntarle así que siguió con su vida. El oro fue guardado abajo de su alfombra donde tenía una habitación con candado y al otro día Él estaba solo en su casa. Apareció una joven que decía que era su tía. Mustafa no sabía qué decir. Para él era verdad pero nadie sabía si era verdad. Él dejó que se quede ella en su casa por unos días hasta que ella consiga trabajo. Después de unos días, él ya confiaba en su tía así que le contó que fue a la cueva y le mostró el oro que tenía. Ella dijo


– Es mucho oro. Él no sabía que ella ya se había enterado que tenía el tesoro después. El joven estaba durmiendo y la tía no era lo que pensaba era un efrit. Ella había matado a su padre. intentó sacarle a Mustafá la llave para abrir el candado donde estaba el dinero y después lo iba a matar. Pero él se despertó y el anillo lo empezó a proteger de lo malo, por eso no le paso nada cuando entró a la cueva. Melissa sabía que estaba algo mal, así que llegó antes de lo previsto, pudo ayudar a que a él no lo no maten. Melissa no mató al efrit, sólo lo durmió. Pasaron dos años y ellos estaban muy felices, pero llegó un día, vino una persona y encontró un libro donde decía varias palabras. Había una que decía cómo despertar un efrit, dijo las palabras y se despertó. Se fue a la casa de Mustafa, el efrit se hizo pasar por vendedora de frutas y verduras. El le dijo a la vendedora: - Pasá. Ella pasó con todos sus cajones de verduras y le dijo: - ¿Qué quiere joven? - Quiero algunas frutas para sorprender a mi hermosa esposa. -Toma, aquí tienes algunas frutas y si quieres otras pasaré mañana. En voz baja dijo: -Así que sigues vivo. Él dijo: - ¿Qué ha dicho señora? -Nada nada, no importa. Luego su amada llegó de hacer sus cosas y dijo: - ¿Para quién son esos frutos mi amado esposo? - son para ti mi doncella. Ella estaba por comer una pero el joven dijo: -No mi amada no las has lavado. Con un lavado se iba ir el hechizo para que se mueran, pero el efrit no se rindió. Al otro día volvió, pero ahora se hacía pasar por mercader de plumas. Tocó la puerta y preguntó por Mustafa. Ella dijo: -Oh mi joven, ¿no te acuerdas de mí? soy a la que le comprabas la pluma y yo te vine a vender plumas.


Él contestó: -Yo ya no compro plumas, porque no conseguí mucho dinero. -Oh joven perdone la molestia pero me puedo quedar uno días. -Señora espere, tengo que pensarlo con mi esposa. Amor te acuerdas de la mujer que me vendía las plumas Melissa dijo: -Si me acuerdo, ¿qué tiene ella? Él le respondió; Es que está afuera esperando y me preguntó si podía quedarse en casa con nosotros unos días. - ¿Tú que dices? Le respondió: -Si, si. Claro, por qué no. - Bueno gracias cariño. Le dijo a la vendedora: -Señora mi esposa y yo hablamos y si te puedes quedar. Pase pase. -Oh gracias joven. ¡Qué Alah te dé suerte! Pasó una semana y todo estaba bien. Pero llegó un día en que ella decidió hacer un plan para matar a él y a ella. Lo único que quería era el tesoro que tenían ellos. El efrit lo que hizo fue preguntar sobre lo que hacía mientras él no estaba porque él se iba a recoger leña para que ellos no tengan frío. La esposa de Mustafa dice: -Voy a hacer las compras. La mujer no iba a hacer las compras se iba a juntar dinero. Pero eso ya no lo hace más porque cuando su esposo encontró el dinero ella ya no tenía que juntar dinero para comprar la comida. Pero él no sabía que su esposa salía a la calle a juntar dinero y cuando se enteró le dijo: -¡Oh mi amada! Tú no tenías que salir a juntar dinero yo podía conseguir un trabajo mejor. Pero ya tenía dinero así que ninguno consiguió otro trabajo después de eso. El joven pensaba que iba a un trabajo no a juntar dinero a la calle. Pero eso no es lo que pensaba el efrit ,así que pensó en otro plan que fue esperar que ellos se durmieran y les iba a clavar una estaca en el pecho primero a él joven y después a la esposa. Ya era de noche, la vendedora fue a la cocina a buscar una estaca y entró a la habitación. Cuando estaba por hacer que muera Mustafá, la esposa de él tenía en la mano un cuchillo, se levanta y mata al efrit. Cuando lo mató salió un polvo brillante porque no era humano. TAambién él se levanta y dice: -¿Qué pasó?


-Oh mi amado esa señora era el efrit que se hizo pasar por tu tía. - ¡Gracias amor por matar a ese efrit! Ellos se quedaron con el tesoro, tuvieron dos niños muy lindos y fueron muy felices.

Cuando Sherezade acabó de contar la historia. Se calló sonriendo: El rey Shariar dijo: -Es, sin duda, una historia extraordinaria. Sherezade contestó: -Sí, pero el próximo relato será mucho mejor.

Autora: Cielo Rolón con la colaboración de Natanael Andrada y Amara Lupo Ilustrador: Mishael Mamani


5°A Y 5°B 2018 LAS MIL Y UNA NOCHES. LAS INFINITAS HISTORIAS DE ORIENTE.


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