"Las realidades que nos atraviesan"

Las realidades que nos atraviesan Los alumnos de séptimo grado Escuela Nº16 DE 8 “Dr. José María Ramos Mejía”

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El 27/09/16 fuimos mi amiga Luciana y yo, a la marcha de “Ni una Menos”. Fue hermoso ver como miles de chicas lloraban y gritaban mientras sostenían carteles con las caras de las víctimas, incluso algunas tenían carteles de sus abusadores o de sus hijas. Ver como se manifestaban por sus derechos es algo que Luli y yo no vamos a olvidar, ni mucho menos lo que pasó después.

Estábamos en camino a la casa de Luli, cuando de la nada vimos una pareja, donde el hombre estaba acosando a la chica. Ella gritaba desconsoladamente. Luli y yo queríamos ayudarle pero era imposible, el señor tenía un arma. Justo cuando nos decidimos por llamar a la policía, sonó el celular de Luciana, entonces el abusador escucho el tono de llamada y fue rápidamente corriendo hacia nosotras, yo doblé a la esquina del callejón mientras que Luli se quedó ahí, paralizada del miedo.

Llegué corriendo hasta donde estaba la chica, le pregunté lo que había sucedido y no me contó mucho ya que me bastó con ver lo lastimada que estaba físicamente y mentalmente. Atendí el celular de mi amiga, contándole todo y suplicándole a la madre que llamara a la policía, para cuando fui a buscar a Luli era demasiado tarde, el acosador se la había llevado y el único rastro que quedó de ella fue su pañuelo de “Ni una Menos”.

Ada y Maia

2

Yo soy Guadalupe, cuando tenía quince años fui abusada sexualmente por un grupo de hombres a la salida de mi colegio. Por culpa de ellos estuve asistiendo a psicólogos y médicos. Me obligaron a consumir una cantidad de medicamentos muy alta que para una persona sana serían terribles. No salía de mi casa por miedo a que me volviera a pasar.

Empecé a tener ataques de ansiedad y depresión a niveles muy preocupantes. Pero recién a mis dieciséis años mi médico me dijo lo que tenía… Era VIH. Yo en ese momento no tenía ni idea de lo que era, pero no sonaba muy agradable. En ese momento lo único que pude hacer fue llorar, llorar como nunca lo hice antes. Voy a ser sincera y no voy a mentir si no pensé en suicidarme, aunque los medicamentos me iban matando poco a poco.

Mi madre nunca supo nada sobre la violación y ese fue mi primer error. Debí confiar en ella y decirle, fui una tonta. Ella se dio cuenta de que algo no estaba bien y decidió preguntarme al respecto. Tuve mucho miedo, realmente no sabía si decirle la verdad o mentirle. Pero le terminé diciendo la verdad. Ella solo se puso a llorar y a abrazarme muy fuerte, tan fuerte que con suerte podía respirar. Luego las dos nos calmamos e intentamos buscar una solución.

El grupo de hombres siguen por ahí, sueltos. Espero que no le haya pasado lo mismo que a mí a otra chica.

Y bueno, todavía sigo medicándome pero no de la misma manera que antes. Mi madre me ayudó a salir adelante. Y mientras cuento esto yo estoy en el mejor momento de mi vida, confío en mi misma, me quiero, soy feliz.

Soy yo en mi mejor momento a pesar de lo que pasé.

Brisa, Lucía e Isaiah.

3

Calendario mecánico Un día, saliendo de la escuela, me paró un señor por la calle. Me dijo que le había parecido linda, y me preguntó si quería hacer un trabajo para él.

No le contesté en ese momento, me limité a tomar su tarjeta y agradecerle.

Luego de unos días, tomé valor y lo llamé. Me dijo que nos viéramos en un café para charlar sobre el tema. El trabajo se trataba de modelar para un calendario. No me pareció mala idea, y le pregunté cuándo serían las sesiones. Contestó que podría ser en ese preciso momento. Como la paga era buena, me dirigí entusiasmada hacia su auto. Me llevó hacia un estudio y me pidió que me sacara la ropa. Lo dudé por un momento, pero finalmente cedí.

Me dio una serie de objetos y me dijo que debía modelar con ellos. En todo momento me sentí incómoda, pero la recompensa era tan grande que no me quejé.

Luego de unas semanas, vi mis fotos en un puesto de revistas. Nunca me sentí tan humillada y usada. Me sentí sucia. Ahora sé con seguridad que nunca lo volveré a hacer.

4

Canción romántica Era una noche lluviosa, estaba acostado en mi cama y triste por razones que no entendía, decidí agarrar mi celular para distraerme un poco.

Al poner Youtube encontré la canción perfecta para lo que me estaba pasando, era tan satisfactorio, tan romántico que no pude contener mis lágrimas.

Después de ese día el cual fue el más triste de mi vida, fui al colegio y la vi a ella tan bella como una estrella, recordé la pelea que habíamos tenido el día anterior y la razón de por qué había estado tan triste esa noche.

Esta es mi historia triste, no hay nada más que contar, sólo mi amor por ella que no para de cantar.

by: Matías V. y Santiago M.

5

Tu media naranja Cuando era chico, pensaba que todos necesitábamos de una media naranja para poder ser felices. Creí que Leya lo era, estuvimos juntos 2 años y medio. Soñaba con pasar con ella el resto de mi vida pero, sin aviso previo, me dejó.

Estuve muy mal por mucho tiempo, pero a la larga, me dí cuenta de que no necesito a un complemento para llegar a ser feliz. Yo soy una naranja completa.

Leonel Lima, Lautaro Gomez y Daniela Jaliff

6

PADRE E HIJO Yo soy un chico normal, pero parece que tener 2 papás hombres hace que no lo sea. Yo no le veo nada de raro, pero se ve que los otros no piensan lo mismo.

Soportar burlas no es mi fuerte y no es que me guste quedarme callado, aunque no sé por qué igualmente lo hago.

Hablar con el sacerdote de la escuela solo empeoró las cosas diciéndome "no es normal".

Me cambiarán de escuela y espero que allí me traten mejor.

Tomas Caballero y Fausto Riquelme

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TU HOGAR

CUANDO CUMPLI 20 AÑOS TUVE QUE IRME DE CASA Y VIVIR UNA NUEVA VIDA. ME HABÍA IDO CON TODAS MIS COSAS, PARA MUDARME A UN DEPARTAMENTO. AL DÍA SIGUIENTE FUI A DAR UN PASEO EN EL PARQUE, ME CAÍ Y ME RASPE LA RODILLA. UNA CHICA ME VIO Y ME AYUDÓ, AL VERLA ME ENAMORE Y LE PREGUNTÉ SI QUERÍA SALIR EL VIERNES A LA NOCHE. ME FUI A MI DEPARTAMENTO Y EMPECÉ A PENSAR QUÉ ME PODÍA PONER PARA LA CITA. DIJE “POR FIN, YA LLEGÓ EL DÍA” Y FUI A BUSCARLA A SU CASA. ELLA ABRIÓ LA PUERTA Y LA VI CON UN VESTIDO AZUL Y LE DIJE SE VEIA MUY HERMOSA. NOS FUIMOS CAMINANDO A UN RESTAURANTE Y AHÍ CENAMOS, LUEGO DE CENAR EMPEZAMOS A HABLAR DE NUESTROS PASADOS. DESPUÉS FUIMOS CAMINADO HACIA SU CASA Y LE PREGUNTÈ SI QUERIA VIVIR CONMIGO EN MI DEPARTAMENTO, PARA VIVIR FELICES Y BIEN.

Joel M y Joel C

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SALUD EMBARAZO Aún recuerdo todo lo que pase por vos, desde mi noviazgo hasta tu primera patada…

Recuerdo ese día de diciembre, yo estaba con tu padre bailando en aquella fiesta, había tomado mucho ese día y él también. Salimos de ahí para ir a su casa, fuimos a su cuarto…después ya no recuerdo nada de aquella noche.

A la mañana siguiente, amanecí en el cuarto de tu padre, él estaba dormido. Apenas me levante, fui corriendo al baño para vomitar, él se despertó al oírme, fue al baño para ver que me pasaba. Me estuvo “interrogando” por unos minutos…

Después de una semana de mareos interminables, decidí hacerme el test de embarazo. Me enteré que estabas dentro de mí, me emocioné al saber que existías, pero me asusté a la vez. Fui a decirle a tu padre y él se sorprendió… me gritó, me dijo que te abortara…Pero me rehusé. Me dejó sola cuidándote. Tenía que decirle a mis padres, pero tenía miedo que no me aceptaran, decidí ser valiente y decirles. Cuando lo hice no se enojaron, ¡es más! Me ayudaron dándome consejos de cuidados para vos.

Después de nueve meses te tuve, fue el día más feliz de mi vida, ya no me importaba si tenía que cuidarte sola, solo me importabas vos y nadie más, ni siquiera mi propia vida. Eso es todo lo que tuve que pasar por vos, pero no me arrepiento de nada.

Juan Carlos, Brisa

9

Vida Sana Cuando era adolescente sufría de sobrepeso, por las golosinas y comidas chatarras que consumía.

Cuando me hicieron una revisión médica el doctor me dijo que podía sufrir un paro cardiaco por mi estado de salud, lo que me preocupó mucho y me di cuenta que tendría que mejorar mi salud. Tuve que recurrir a revistas para hacer dietas y ejercicios continuos.

Hoy en día me encuentro bien físicamente gracias a estas revistas dietéticas y no tengo que preocuparme por mi salud.

Nombres: Morena , Nahuel, Tomas, Juan Pablo

10

Las parejas Hace un par de meses me preguntaron por Instagram si quería participar de una revista llamada “Las parejas del año” con mi novia. Me gustó la idea ya que la revista mostraba todo tipo de parejas, ya sean heterosexuales y homosexuales. Me pareció muy inclusiva porque muchas veces recibimos críticas por ser un apareja homosexual, entonces aceptamos.

Llegamos, nos sacaron fotos, hicimos una nota y nos fuimos.

A mi mamá nunca le dije que me gustan las chicas, ni que estoy de novia, porque sabía que no me iba a aceptar y se iba a decepcionar, por eso decidí tampoco contarle lo de la revista.

Pero un día todo cambió, mi mamá vio la portada de la revista en un local, y ahí estaba yo, con mi novia.

Al volver a casa, ella me estaba esperando, me preguntó si era verdad que yo estaba con una chica. Yo le dije que sí y que me iba a tener que aceptar como soy y con mis gustos. Se enojó, me pidió que me fuera de la casa y me dijo que había decepcionado a mi familia.

Llamé a mi novia y le conté. Me dijo que podía ir a vivir con ella.

Ahora vivimos juntas y estamos bien, pero en el fondo me duele mucho que mi mamá me haya despreciado así. Me gustaría que algún día pueda entender y pueda volver a mi casa con ella.

Jade G. y Agustina M.

11

Soy Nicolás, un chico de secundaria, tengo 15 años. No sabía todo lo que me esperaba y lo que tenía que aprender. Esto me sirvió como una lección, tanto como para mí, como para todos.

Salí del colegio y fuimos con mi novia a mi casa, ya que mi mamá no estaba, volvía a la noche.

Estaba ansioso, feliz y nervioso...eran muchos los sentimientos que tenía. Tuvimos relaciones sexuales, de tanta emoción, no medimos las consecuencias. Nos habíamos olvidado de comprar preservativos, no le dimos importancia...pensamos que no pasaría nada.

Desde aquel día mi novia presentó actitudes extrañas y se empezó a sentir rara y mal.

Cuando el doctor nos dio la noticia, no lo podíamos creer, nos sentimos muy mal al saber que fue nuestra culpa. Le contamos lo sucedido a mi madre, que tendría un nieto con sida, ella no se molestó, se sintió culpable por no haberme aconsejado antes. Yo decidí transmitir mi experiencia con los medios para que nos den educación sexual a todos y no les suceda lo mismo que a nosotros.

MAYRA Y SABRINA

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MI VIDA Yo soy Lucas , tengo 35 años y nunca me imaginé llegar a este punto de reconocimiento , soy famoso por escribir libros pero siempre pienso en mi adolescencia. Hasta escribí un libro llamado “Las cosas malas de mi adolescencia" pero nunca lo publiqué porque si no la gente iba a leer y saber lo triste que estaba.

Mi papá estuvo conmigo hasta que cumplí dos años pero ese día desapareció .

Cuando me desperté, lo busque por toda la casa y jamás lo encontré.

Cuando tenía 14 años le preguntaba a mi mamá si sabía sobre mi papá pero ella nunca respondía.

En la escuela me enamoré de una chica, ella me miraba y pensaba que lo hacía porque ella sentía lo mismo que yo pero en realidad me miraba porque con las amigas me burlaban debido a que no tenía papá. Siempre lo hacían.

Me iba bien en las materias pero no tenía amigos así que la pasaba solo.

Mi mamá estuvo con muchos hombres y por eso me pelee mucho con ella, pero nunca se daba cuenta cuando lloraba por ella.

A los 16 años tuve mis primeras relaciones con una chica y al mes me dijo que estaba embarazada así que no sabía qué hacer, no sabía ni que pensar, pero ella aborto clandestinamente y murió desangrada. Yo estaba muy deprimido porque la amaba. Pasé días llorando con antidepresivos pero en 3 años la pude olvidar.

Desde hace mucho tiempo me gusta la escritura, pero a los 20 años lo empecé a tomar más seriamente ya que me hacía olvidar mis problemas, gracias a eso soy famoso. Trabajando de lo que más me gusta, escribir.

Nicole y Axel 13

Las parejas del año Soy Juliana tengo 24 años.

Yo soy homosexual y tengo miedo de decirle a mis amigas, que me gusta una chica que conocí en la escuela. A mis padres, que son católicos, no le va a gustar la idea de cómo soy en realidad con mi forma de pensar, porque soy muy diferente. Por ser la única de mi familia que le gustan las chicas, no sé cómo contárselo porque tengo vergüenza de decirle lo que quiero en verdad, para conseguir lo que quiero.

Nicolas Francisco Carlos Manuel Solís Mariana Flores Gomez

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PADRES E HIJOS Cuando yo era bebé, mis papás me abandonaron junto a mi hermano mayor.

Con el paso de los años, mi hermano, trabajando, logró darme de comer y tener la posibilidad de estudiar para tener un mejor futuro.

En mi primer día de escuela, me acuerdo que, nos hicieron presentar.

Después de una semana, la maestra organizó un juego familiar, pero nadie vino a jugar conmigo, porque mi hermano estaba trabajando. Todos mis compañeros se empezaron a burlar por no tener familia, ni un hogar.

A la salida de la escuela, la directora me llamó a la dirección, yo pensé que era porque me había peleado con mis compañeros, pero cuando llegué ella me dijo que mi hermano había tenido un accidente y había fallecido. En ese momento me largué a llorar y me fui. Me quedé en el cordón de la calle un largo tiempo, hasta que una señora se acercó y me preguntó si necesitaba ayuda, le conté lo que me había pasado. Ella fue muy amable conmigo y me invitó a su casa.

Cuando estábamos comiendo, ella me contó que con su marido no podían tener hijos, pero les encantaría tener uno, y me preguntaron si quería que me adoptaran. En ese momento, les dije que lo iba a pensar porque estaba mal por la pérdida de mi hermano.

Hoy en día, ellos son mis padres, estoy muy agradecido que me han dado una familia y hogar, porque todos tenemos derecho a tenerlo.

Desearía volver a tener a mi hermano, decirle cuanto lo amo, y que estoy agradecido de todo lo que hizo por mantenerme sano y a salvo. Y también reencontrarme con mis compañeros para poder decirles todo lo que pensaba y lo que sufrí por culpa de ellos, y dejarles bien en claro que a pesar de que no tenía una familia como todos, (con un papá y una mamá, porque no todos tenemos familias iguales) podemos ser felices.

Agustina Spitznagel y Dylan

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CAROLINA 7-11-18

Cuando comencé mi etapa adulta (a los 18), no me importaba la política, directamente no me producía interés, no me gustaba opinar, ni preguntar la opinión de los demás, hasta que empecé a abrir mi mente, y así fue como comencé a interesarme por esos temas.

Uno de los casos que me interesó fue el del aborto, yo estaba a favor, no entendía por qué había personas que estaban en contra de la decisión de la mujer, si la mujer quería abortar que aborte o si no que lo tenga, total era su decisión, pero después pensé... Si yo tengo la mía ¿por qué otros no deberían tener su opinión?.

Asistí a marchas en las que había mucha discrepancia, en las que discutían si el aborto iba a ser legal o no. Cuando por fin se supo la votación, no salió como yo esperaba, porque no fue legalizado. Pero ahí no pensé que mi postura estaba mal, solo me dije a mi misma que iba a seguir luchando hasta que mi opinión valiera la pena.

Tiempo después, al cabo de todo ese suceso, quise estudiar abogacía para defender y opinar sobre el tema del aborto, entre otros. Pero lo que no sabía era lo que se aproximaba...

Sofia.M y Ashley 7A

16

Las parejas del año Cuando tenía 14 años descubrí que sentía cosas por personas de mí mismo sexo. Al principio no me animaba a decirlo, pero cuando me sentí seguro y se lo conté a mis padres empezó lo que me haría sentir una basura.

Mi padre me dijo que estaba loco, que eso era una enfermedad y que no volviese a repetirlo. Le dije que no me estaba confundiendo, que lo sentía hace mucho tiempo y que cuando lo confirmé se lo conté a ellos. Me pegó brutalmente. Mi madre no habló.

Ahora que cumplí los 18 años y me mudé, recién ahora, puedo expresar lo que siento y no esconderlo, de nadie, nunca más.

Morena Rey, Juan Pablo Cabriles, Nahuel Fritz y Tomás Fernandez.

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Yo soy Ailen, tengo 13 años. Hoy en la escuela me dejaron salir más temprano porque me dolía la pierna, ya que en Educación Física me había lastimado.

Cuando llegué a mi casa, no encontraba las llaves, así que golpee la ventana, pero nadie me escuchó. Miré el hueco de la cerradura, debido a que las cortinas de mi casa estaban cerradas; y vi a mi mamá desnudándose frente a un hombre con una cámara.

Como mi casa era antigua, con un golpe la puerta se cayó.

Mi mamá, sorprendida, lo primero que hizo fue gritarme lo siguiente ¿Qué haces acá?-. Y yo le respondí - eso debería preguntárselo yo a ese hombre.

Al no saber que pensar salí corriendo y cuando me di cuenta que ya me había alejado demasiado. Un hombre me tomó del brazo y me dijo – no grites y subí a la camioneta-, yo quise escapar, pero no pude debido a que el hombre me estaba tomando el brazo muy fuerte.

Dentro del auto él quiso que me sacara la remera, pero yo me negué, así que me ató los brazos en la espalda y me desvistió de la cintura para abajo. Llorando le dije -¡soltáme, dejáme ir!-; él me dijo – esta es tu parada nenita-, y me puso la ropa interior, me bajo del auto y me encerró en un local, que estaba abandonado. Estuve toda la tarde sin comer ni beber nada.

Pasada la noche, a la madrugada, el hombre volvió con 3 hombres más, ellos me obligaron a pararme, y por fin me desataron las manos, tomaron una cinta métrica y me empezaron a medir la cintura y el busto, luego de eso se fueron, Aproximadamente una hora más tarde volvieron con ropa interior muy llamativa y una cámara de fotos. Me pusieron la ropa interior y me obligaron a posar para tomarme fotos.

Luego esas fotos fueron puestas en un calendario. Cuando los hombres se fueron se olvidaron de atarme las manos, y gracias a eso pude escapar de allí. Lo primero que hice después de salir de allí fue correr, al mirar hacia mi derecha vi un policía, le conté lo que me pasó, entonces me dio su abrigo y me llevo a la comisaría. Allí me reconocieron y me preguntaron si recordaba mi nombre y el teléfono de mi mamá, ella rápidamente me vino a buscar.

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Durante el tiempo que ella tardó en buscarme los policías me contaron que mi mamá ya había hecho la denuncia por mi desaparición. Llevaban buscándome 3 días, luego de contarme todo, mi mama por fin llegó.

Me contó que hacía ese trabajo para que no me faltara nada, entonces comprendí lo que ella tuvo que pasar para darme todo lo que tengo ahora, y yo le dije que me prometiera que iba a tratar de conseguir un trabajo distinto. Ella lo hizo y ahora tiene un trabajo nuevo y pasa más tiempo conmigo.

Ximena, Isabella

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