A través de esta memoria, El Desafío de Bonn – Latinoamérica 2016, realizado en Panamá, deja una serie de reflexiones sobre la necesidad de generar una restauración con un “rostro humano” que este orientado a mejorar los medios de vida y disminuir el riesgo para las comunidades más vulnerables; donde la restauración requiere un abordaje intersectorial, con mecanismos de diálogo inclusivos y transparentes; y donde el financiamiento proviene del presupuesto nacional, las inversiones de sector privado y aportes de la cooperación internacional.