El Cáncer Colorrectal detectado a tiempo salva vidas

Por Magaly Monserrate Cerpa / mmonserrate@elorientalpr.net

En marzo, mes de la Concienciación del Cáncer Colorrectal el Departamento de Salud de Puerto Rico hace un llamado a las personas en riesgo de padecer de este tipo de cáncer, a realizarse las pruebas de detección temprana, que salvan vidas. Cualquier persona puede tener cáncer colorrectal, pero ciertos factores aumentan su riesgo de desarrollarlo. Estos son; ser mayor de 50 años, obeso u obesa, fumar y tomar alcohol con bastante frecuencia. Aunque, hoy día las guías medicas recomiendan pruebas de detección desde los 45 años a aquellas personas que tienen antecedentes personales o familiares de cáncer colorrectal. También son recomendables para quienes padecen de colitis ulcerosa crónica o enfermedad de Crohn durante 8 años o más, tienen antecedentes de adenomas -que son pólipos colorrectales microscópicos no cancerosos que pueden evolucionar en cáncer- y quienes padecen del síndrome de Lynch (cáncer colorrectal hereditario sin poliposis).

El cáncer colorrectal es un cáncer que se desarrolla en los tejidos del colon o del recto cuando hay cambios en su material genético (ADN) que se conocen como mutaciones o variantes. Se desconoce la causa exacta de estos cambios. Aunque si se sabe que ciertos cambios genéticos que aumentan el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal se heredan, es decir, usted nace con ellos. Además de la genética, otros factores, incluyendo su estilo de vida y el medio ambiente, pueden afectar su riesgo de cáncer colorrectal.

Sobre sus síntomas se sabe que es muy posible no experimente ninguno sobre todo en sus inicios. Mas adelante podría observar cambios en los hábitos intestinales que duran más de unos pocos días, como: diarrea, estreñimiento y sensación de que el intestino no se vacía por completo. Sus heces fecales son más delgadas o tienen una forma diferente a la habitual y pudieran tener sangre. También pudiera experimentar dolores frecuentes por gases, hinchazón, plenitud o calambres, pérdida de peso sin motivo aparente y fatiga.

Debido a que el cáncer colorrectal puede no causar síntomas al principio, es importante hacerse pruebas de detección del cáncer colorrectal. Estas buscan signos de una enfermedad antes de que se manifieste y pueden ayudar a encontrar el cáncer temprano, cuando puede ser más fácil de tratar.

La mayoría de los expertos recomiendan comenzar las pruebas de detección a los 45 años. Las más recomendadas son la prueba de sangre oculta y la colonoscopía. Esta última tiene la ventaja que de detectarse un pólipo será extraído en el momento por el gastroenterólogo -que es especialista médico que la realiza-, quien además lo enviará a biopsiar para identificar si es canceroso.

De detectarse cáncer, las opciones de tratamiento dependerán de su edad, su salud general, la gravedad del cáncer y el tipo de cáncer que tenga. Pueden recomendarse tratamientos que pueden incluir una o más de las siguientes opciones: cirugía, ablación por radiofrecuencia, criocirugía, quimioterapia, radioterapia, terapia dirigida (que usa medicamentos u otras sustancias que atacan principalmente células cancerosas específicas y causan menos daño a las células normales e inmunoterapia.