Devoci贸n religiosa al universo o a alguna de sus partes en particular: naturaleza, cuerpos celestes, plantas, animales o el hombre. Los cuerpos celestes han sido prenda de divinizaci贸n desde las 茅pocas primitivas hasta la actualidad.
Otro elemento del culto a la naturaleza es la adoración y construcción de objetos con formas fálicas. Los dioses mayas tenían forma humana, de animales o plantas. Las familias primitivas que habitaron el altiplano cundiboyacense adoraron la naturaleza, principalmente las fuentes de agua, los lugares altos y la planta del maíz por ser su principal fuente de alimentación.
CONCEPCION HOMBRE: era considerado hijo y servidor de la tierra. Hombre y naturaleza se fusionaban, se identificaban y conformaban un solo elementos interdependiente. MUNDO: El mundo era concebido de modo mágico y como si fuera una persona, es decir cercano y familiar; la tierra era amada como padre y madre de la humanidad, era tratada como un miembro de la familia. Además, toda actividad humana relacionada con el trabajo de la tierra debía ser posterior a una ceremonia de expiación , purificación y compensación. DIOS: La diosa madre , o sea la tierra, toda la naturaleza o el universo entero eran en conjunto un dios al que se debía adorar, ofrendar, cuidar y respetar incluso con la propia vida. La naturaleza y todos sus fenómenos eran objeto de temor y temblor.
ACTUALIDAD Esta religiosidad primitiva fue perdiendo toda vigencia con la desaparici贸n de las culturas primitivas y con ello fue apareciendo la depredaci贸n irracional del medio ambiente. Aunque en la actualidad y desde la perspectiva de religiones estructuradas se siguen considerando sagrados algunos lugares geogr谩ficos, ya no se profesa tal respeto y veneraci贸n de aquel entonces.