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EQUILIBRIO INFORMATIVO
Sábado 24 de junio de 2017
que convocó una televisora local para el programa de “Dzereco y Nohoch”. Los participantes en las audiciones, recordó, consiguieron quedarse en la emisión por un lapso de seis meses, pero por diversas circunstancias algunos tuvieron que dejar el show. En la obra “Estar wish” fue donde Mario Herrera “Dzereco” la bautizó como “Chepita Kakatúa de la Papaya Fresca de Umán”, por parlanchina y vendedora de esa fruta.
EXPERIENCIA DE VENDEDORA El oficio de vendedora no es algo extraño para Salomé Sansores, pues al ser la menor de cinco hijos, acompañaba a su hermana a vender en el mercado de Umán. Esa experiencia le permitió escuchar anécdotas de los clientes, que en su momento le permitieron crear monólogos de alto contenido filosófico expresados con mucha sencillez. “Hacer lo ordinario algo extraordinario”, comentó la entrevistada, quien describe la vida como ese paseo en bicicleta en el que debes disfrutar del paisaje, y si te caes, levantarte y continuar. El camino llevo a Salomé Sansores a incursionar en otras facetas como la locución en el programa “Dos por la tarde, a ver si los aguantas” (Rivas 2007), al lado de Víctor “El Potro” Cisneros y Noé “El Makech” Cabrera (q.e.p.d.), con quienes hizo un buen equipo de trabajo. Además, consiguió el cariño de la gente adulta del interior del estado que hoy día recuerda ese programa, relató. Posteriormente continuó con “Una pareja dispareja” hasta que concluyó un ciclo en la radio yucateca.
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ara lograr los sueños es necesario despeinarse las ideas y el cabello, comentó la comediante Salomé Sansores, quien da vida a “Chepita Kakatúa de la Papaya Fresca”, mestiza que llegó a la ciudad para triunfar y hacerse de un lugar en el corazón de las familias yucatecas. Entrevistada por Punto Medio, la humorista comentó que desde niña quiso ser artista. “Festival escolar que hubo, siempre comprometí a mi mamá para que yo participe. Todo me pasaba, no buscaba en qué meterme”. Inspirada por la cantante Lucero, en ese entonces estrella juvenil, Salomé Sansores alguna vez quiso ser como ella. Sin embargo, su tío José de Jesús Sansores Pech, mejor conocido como “Mayambé, la mujer misterio”, decretó que la pequeña sería artista. –Era un ser muy amoroso, en vida me dio mucho amor. Mi mamá siempre me inculcó respetarlo. Mis papás, aunque son muy tradicionalistas, fueron tolerantes con él –recordó. Lucía Salomé Sansores López nació un 22 de agosto en el seno de una familia católica, originaria de Umán, conformado por el matrimonio de Julián Sansores y Teresa López. Ella es la menor de entre cinco hijos que incluyen a Julián, Blanca, Lilia y Teresa. –Los dos nombres me gustan, aunque Salomé más porque es muy fuerte. En la primaria nunca conocí a otra Salomé, en mi vida me
he topado con tres mujeres que se llaman como yo, pero con otros nombres, pero no las llaman así –comentó. Salomé, nombre hebreo que proviene de shalom o salem, significa “paz, salud o armonía”, cualidades que describen a la actriz, aunque al momento de registrarla con ese nombre hubo dudas en algunos de sus familiares porque “Salomé, según el Nuevo Testamento, le pidió a Herodes la cabeza de Juan Bautista”. Aclarado las razones de su nombre, único momento serio durante la plática, la comediante vuelve a lucir su sonrisa contagiosa, buena vibra y su cabellera ondulada pelirroja que contrasta con los pelos parados de su álter ego “Chepita Kakatúa”.
SUS PININOS EN LA COMEDIA El debut formal de Salomé Sansores en los escenarios ocurrió un 20 de agosto, durante los Juegos de la Juventud. En aquella ocasión, aún sin ser “Chepita”, la joven hizo reír al público con la anécdota de “Regalito”, un cochino que “se regaló” en su casa y que, después, fue sacrificado para el bautizo de un sobrino. –Fíjate que un día entró a nuestra casa un cochino para quedarse. Yo le puse “Regalito” porque pensé que la vida nos lo mandó por algo. Claro, nos lo quedamos luego de preguntarles a varios vecinos de quién era el cerdito, nadie supo ni lo reclamaron, así que nos lo quedamos para después sacrificarlo para el bautizo de un sobrino –relató. Luego del debut, Salomé Sansores buscó presentarse en diversos eventos que le permitieron tomar tablas. La formación actoral la recibió en la Casa de la Cultura. La inquietud por crecer hizo que en 2002 busque oportunidades en Mérida, como fue presentarse en un casting
Pero este año regresó a la radio para colaborar en “El madrugón”, emisión matutina que se transmite los lunes por La Reverenda.
EN EL GUSTO DE LOS NIÑOS Chepita Kakatúa goza de popularidad en el público de cualquier edad, sobre todo con los niños, algo de lo que su intérprete no supo dar razones. Debido a la aceptación del público infantil, hoy día participa en el programa “Teatro con valores”, de la Secretaría de Educación del Gobierno del estado de Yucatán (Segey), que le permite recorrer los planteles de educación básica de la entidad. Los valores y las tradiciones son las características que le permitieron continuar en el espectáculo yucateco, pues aseguró que cuida sus rutinas, en las que no se incluyen groserías y se respeta al público. Aunque pertenece a la generación de los “milennials”, Salomé Sansores definió a Chepita como una mestiza tradicional en la que se actualiza y prueba nuevas facetas y experiencias, como la yucayoga. A una pregunta, la humorista explicó que mantener las distancias entre su álter ego y ella es la clave del éxito. “Yo creo que Chepita hace cosas que nunca me atravería a hacer. Ella es muy aventada, no soy así”, afirmó. Como hacer reír es trabajo serio y cansado, cuando Salomé necesita recargar pilas recurre al mar para reencontrarse consigo misma y empezar a crear.– Irbin Flores Palomino