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DR. EN ARQ. JOSÉ GERARDO GUÍZAR BERMÚDEZ

*Facultad de Arquitectura, UNAM.

Fotos: Francisco Del Toro

Panorámica del Estadio Olímpico Universitario, que deja ver el mural en relieve del muralista Diego Rivera.

Foto: Francisco Del Toro

La universidad, la familia y el deporte en México en el Estadio Olímpico Universitario

DR. EN ARQ. JOSÉ GERARDO GUÍZAR BERMÚDEZ*

Continuemos con el recorrido de los murales y entremos por el acceso principal de la Ciudad Universitaria; la escalera descendente ubicada al norte de la torre de Rectoría. Al bajar nos cubrirá una gran trabe que sirve de mirador al campus con el remate de la antigua torre de Ciencias, hoy de Humanidades. Pasemos rumbo al poniente por debajo de los puentes de la avenida de los Insurgentes proyectados por el arquitecto Santiago Greenham Ballescá, cuyo diseño fue inspirado en Le Corbusier, con columnas de planta ovoideas y costados en derrame terminados en una banda delgada. Este paso es la frontera entre la zona académica y la de esparcimiento en la Ciudad Universitaria en la que destaca el Estadio Olímpico Universitario, obra de los arquitectos Augusto Pérez Palacios, Jorge Bravo Jiménez y Raúl Salinas Moro.

Mucho se ha dicho del concepto del proyecto inspirado en la boca de un volcán, pero también recuerdo haber escuchado a mis maestros destacar el talento y la observación del sitio del arquitecto Pérez Palacios al utilizar una hondonada del manto de lava, origen del Pedregal de San En la fachada oriente encontramos solamente un segmento realizado del proyecto original del mural titulado La universidad, la familia y el deporte en México que cubriría la totalidad del talud del estadio, creado por Diego Rivera y su equipo con cientos de piedras con tintes naturales; en él vemos en el centro a dos atletas, una mujer y un hombre, tocando a su hijo que lleva en las manos una paloma, símbolo de la paz

Detalles del mural La universidad, la familia y el deporte en México.

Ángel, producido por el volcán Xitle, hace 1600 años aproximadamente.

En la fachada oriente encontramos solamente un segmento realizado del proyecto original del mural titulado La universidad, la familia y el deporte en México que cubriría la totalidad del talud del estadio, creado por Diego Rivera y su equipo con cientos de piedras con tintes naturales; en él vemos en el centro a dos atletas, una mujer y un hombre, tocando a su hijo que lleva en las manos una paloma, símbolo de la paz. Los tres están soportados por Quetzalcóatl en forma de serpiente, pero ahora en vez de plumas aparecen mazorcas de maíz, alimento fundamental de México. De fondo, vemos parcialmente una composición del escudo universitario con el cóndor y el águila, ambos con sus alas extendidas, símbolo de libertad, que además protege la escena, por último, este conjunto flanqueado por otros dos atletas, una mujer y un hombre, que encienden cada uno sus antorchas en el Tlecáxitl o pebetero del fuego nuevo. La técnica usada fue la de piedras de colores naturales que forman un mosaico con las figuras en relieve imitando la solución de escultopintura usada por David Alfaro Siqueiros en el mural El pueblo a la universidad, la universidad al pueblo de la torre de Rectoría.

Durante años me han preguntado por

qué es tan simple y carente de compromiso social esta obra plástica en el estadio comparada con los otros murales de Ciudad Universitaria e incluso algunos dudan que fuese obra de Rivera. Esta situación creo, que se debió a que este gran muralista se sintió desplazado en la toma de decisiones artísticas en la Ciudad Universitaria, además de tener rivalidades con otros colegas. Recuerdo los múltiples recorridos con Rodrigo Eppens, amigo entrañable, vecino y compañero de clases desde la niñez hasta mi entrada a la Facultad de Arquitectura, refiriéndome como Rivera atacó a su padre, Francisco Eppens, acusándolo incluso de plagio presentando un boceto falsificado parecido a la idea final del mural de la Facultad de Medicina. Todo esto por fortuna fue aclarado y el maestro continuó con sus trabajos en los edificios de Medicina y de Odontología.

El estadio ha sido escenario en obras cinematográficas, además de ser un ícono de nuestra universidad y de la República Mexicana; sitio de encuentros y desencuentros personales y colectivos, de celebraciones por múltiples triunfos deportivos en torneos y récords olímpicos, asimismo por desgracias, como la estampida en el túnel 29, en 1985, que causó la muerte de varios asistentes al encuentro clásico capitalino de Pumas contra América.

Además, es uno de los edificios que casi todos los mexicanos, por lo menos una vez en la vida, hemos visitado.

Diego Rivera presente en los trabajos del mural en relieve en el Estadio de Ciudad Universitaria.

Foto: Captura de pantalla de youtube El estadio ha sido escenario en obras cinematográficas, además de ser un ícono de nuestra universidad y de la República Mexicana; sitio de encuentros y desencuentros personales y colectivos, de celebraciones por múltiples triunfos deportivos en torneos y récords olímpicos

Diego Rivera supervisa los trabajos de relieve del mural La universidad, la familia y el deporte en México.

Foto: Tomada del libro Ciudad Universitaria. Crisol del México Moderno

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