15-08-2018

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contenido Consejo Editorial

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Fondo Monetario Internacional

Mancheta y demás

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Primer ensayo

El momento de Sebastián Araujo

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La grandeza del tequeño

Estar bien y estar mal

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Lucha desde el museo

El encanto de la vergüenza

CORRECTOR

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MANEJADORA DE REDES

Pesada corona

Jacqueline Faria

Idania Bracamonte Daniela Fernández Edi Cordero

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Colaboran en esta edición

Pichones de sibarita

Cine y teatro

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Jorge Rodríguez Gómez Felipe Saldivia Gustavo Borges Revilla

Directora

— (Anti)perfil

Mercedes Chacín

Editor Jefe

Carlos Cova

DirecTORa de Arte

Edarlys Rodríguez

COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA

Jesús Castillo

Asesor Editorial

Reinaldo González

Redacción

María B. Chacín Kay Yam Hung Gustavo Mérida Ander De Tejada Marlon Zambrano

— ciudad

— mitos

DiseñadorEs

Lisbeth Montell Oscar Hernández

— miradas

Ilustrador

Alfredo Rajoy

Fotógrafos

Jonathan Mendoza Michael Mata Rodolfo Castillo

— sexodiversidad

Bárbara Baralt

LOGÍSTICA

— gastronomía

Clodovaldo Hernández, Mercedes Sanz, Víctor Fernández, Miguel Posani, Indira Carpio, Nathali Gómez, Rodolfo Porras, Yanira Albornoz, Jessica Mena, Jean Piero Sánchez, L. “Razor” Balza y Nataly Sanoja. Archivo Ciudad CCS. Fotografía de portada: Jonathan Mendoza.

Impresión

Complejo Editorial Alfredo Maneiro Editorial Papirus Impresores 2004, C.A. epale.ciudadccs@gmail.com

@epaleccs

Comercialización y Ventas: 0212-8080323/0426-5112114 Distribución: 0212-8085843 Depósito Legal: pp201202dc4166 Una publicación de la

— poesía o nada

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— CRUCICOMPACTO

— EL MENJURJE

— música

— libremente

— minicrónicas

— entrevista

— crítica y media

— novela

Historias de la Calle Lincoln (XV)

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— el rumor de las bolas

Revista Gratuita Circula los domingos con el Diario Ciudad CCS búscala de lunes a viernes en nuestra sede: esq. san jacinto, edif. gradillas “c”, piso 1, al lado de la taquilla única de servicios municipales y en la librería-Bar el techo de la ballena, edif. Gradillas “A”, planta Baja, Bulevar del Eterno Retorno

Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar”, 2014 y 2015. Premio Municipal de Periodismo “Guillermo García Ponce”, 2014.


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(anti) PERFIL


FMI

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Robar a los pobres para poner más buchones a los ricos Desde las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial ha sido un factor de respaldo al poder hegemónico del capitalismo planetario, en los últimos 30 años ha intensificado su rol de Hood Robin. Los planes de ajuste, avalados por una perniciosa tecnocracia, han asolado al mundo entero. Venezuela ha sido vanguardia en las rebeliones contra este terrible organismo multilateral POR Clodovaldo Hernández • clodoher@yahoo.com / ILUSTRACIóN ALFREDO RAJOY

El Fondo Monetario Internacional es, después de todo, un gigantesco banco. Y como todo banco grande, se dedica a robar a los pobres para dar a los ricos. Como decían los viejos izquierdistas: es un Hood Robin porque hace exactamente lo contrario de lo que hacía Robin Hood. Si usted se toma la molestia de leer los objetivos de esta institución multilateral encontrará un cuento de hadas: su propósito es auspiciar la estabilidad económica mundial, facilitar la expansión equilibrada del comercio internacional, fomentar la estabilidad cambiaria y ayudar a las naciones que caigan en dificultades financieras. Pero si usted se toma otra molestia, la de estudiar un poco para qué ha servido el FMI en sus 70 años de existencia (y especialmente durante los últimos 30, desde que comenzó el reinado intelectual y fáctico del neoliberalismo en el mundo), comprobará que ese enorme aparato global solo sirve para lo ya dicho: quitar a los que menos tienen para poner más buchones a los que ya tienen mucho. Seamos justos: no se trata de satanizar al organismo en particular, sino de verlo como expresión —sin duda, satánica— del capitalismo que hasta san Juan Pablo llamó salvaje.

Puede decirse que los acuerdos alcanzados en Bretton Woods reflejaron el temor que EEUU y sus aliados de entonces le tenían a la paz que estaba por llegar. Suena un poco retorcido, pero es que así es este mundo. Las grandes potencias económicas querían vacunarse contra una eventual nueva crisis del capitalismo, parecida a la ocurrida en 1929, el año de la célebre Gran Depresión. El propósito fundamental era lograr que, una vez terminada la guerra, en el mundo imperase la libertad plena de comercio y se usara el dólar como moneda de referencia. El FMI y su hermano, el Banco Mundial, fueron partes fundamentales del tinglado que se armó para esa nueva etapa del imperialismo estadounidense, que ya llega a su séptima década. Durante los primeros 20 años de la postguerra, el FMI cumplió a cabalidad su función de consolidar a EEUU como superpotencia capitalista. Incluso, cuando Richard Nixon, en 1971, anuló unilateralmente parte de los acuerdos de Bretton Woods al eliminar el patrón oro como respaldo del dólar, el Fondo demostró a quién era sumiso: no hizo nada. Pero la parte más oscura de la historia del organismo vino después, en la década de los 80, cuando comenzó a patrocinar sus primeros programas de ajuste macroeconómico y, con ello, a llenar de miseria al planeta entero. En este propósito tuvo el aval de una secta académica, formada en las más prestigiosas universidades del mundo industrializado, economistas de altísimo nivel que se empeñaron en perfeccionar el trabajo del FMI: robar a los pobres y llenar las arcas de los ricos.

Los orígenes de este ente demoníaco se remontan a 1944, en las postrimerías de la Segunda Guerra Mundial. Las potencias que se encaminaban hacia la victoria estaban buscando la manera de repartirse el mundo del futuro, y como Estados Unidos andaba en plan de héroe, le iba a tocar la mejor parte. El encuentro del que surgió el FMI se realizó en un lugar llamado Bretton Woods, en el estado norteamericano Para imponer estos programas, los tecnócratas no tuvieron empacho en aliarse con los más sanguinarios dictadores, cuyo arquetipo fue el de New Hampshire. chileno Pinochet. Luego, para no rayarse tan feo, los supergerentes EEUU impuso sus puntos de vista sin muchos problemas porque sus optaron por otros compinches: viejos políticos socialdemócratas o aliados europeos estaban prácticamente demolidos por la guerra, los socialcristianos que aceptaron convertirse en catequistas de la nueva adversarios en el conflicto bélico (Alemania, Italia y Japón) se encon- doctrina neoliberal. El más destacado por estos lares fue Carlos Andrés traban al borde de una aplastante derrota, mientras el resto del mundo Pérez. El pueblo venezolano, para sorpresa de muchos, fue el primero estaba formado por países coloniales (como India y casi toda África) y en rebelarse contra las recetas fondomonetaristas. El Caracazo de fepor naciones formalmente independientes pero muy sometidas a los brero de 1989 tuvo el efecto de un preludio de lo que luego sería —y sigue siendo— una colección de rebeldías. En eso estamos. designios de Washington, como casi todas las de América Latina. Caracas, 15 de noviembre de 2015.

Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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el menjurJe

Los conciertos SonARA

«

Repito: como sea «

La provocación del Comando Sur con su pedazo de avión

Andrés bello de cumple Durante todo este mes la Casa Nacional de las Letras Andrés de Bello tiene una programación interesante para celebrar al maestro. Busque toda la información en www.casabello.gob.ve.

Cipriano Martínez expone Beatriz Gil tiene una galería en Las Mercedes. Ella dice que para Cipriano Caracas ha sido siempre una fuente de inspiración. “El artista asume el riesgo entre las formas tradicionales y los nuevos conceptos de la pintura como reflejo de una realidad que se debate entre lo virtual y lo cotidiano”.

eN RESPUESTA Al EDITORIAL DE EL NACIONAL DEl 09/11/2015 El Nacional ha dedicado un editorial para celebrar el hecho de que, según la Encuesta Nacional de Imaginarios y Consumos Culturales, 40,5% de la población venezolana lee periódicos y revistas, mientras solo 32,5% lee libros o cuentos. No importa que El Nacional cite los resultados de manera incorrecta. En todo caso, en la ventaja a favor de los que considera suyos, cree advertir una victoria de la civilización sobre la barbarie, o cosa parecida. La cuestión es que la encuesta no contiene ningún indicio de relación entre el referido porcentaje y El Nacional. De hecho, la encuesta no incluyó a los panfletos como objeto de estudio. Error nuestro, que procuraremos corregir en estudios futuros, para felicidad de todos y todas, y no solo de 79% de los venezolanos y las venezolanas.

Reinaldo Iturriza López Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 15 de noviembre de 2015.


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CIUDAD

Primer Ensayo Calentando los motores para la carrera electoral, el PSUV tiene mecánicos y mecánicas, pilotos, porristas, jefas y jefes de taller y hasta un conductor de vehículo de pasajeros. La MUD tiene a Chúo POR GUSTAVO MÉRIDA • @gusmerida1 / FOTOGRAFÍAs MICHAEL MATA

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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No había pensado en esa posibilidad, pero para un adulto mayor, con bastón, en cola para ensayar cómo votar, la contagiosa canción de la banda española Ska-P “El Libertador”, a buen volumen, le resultó incómoda. Estamos en las afueras del liceo Andrés Bello, en la parroquia La Candelaria, donde los resultados de las últimas elecciones para la Asamblea Nacional, en 2010, fueron los siguientes: por lista, la oposición sacó un diputado y una diputada; el chavismo, una. Por nombre y apellido, ganó Richard Blanco, quien en mayo de este año sacara sus pectorales de una manera espectacular, ocultos por la franela que, según él, todos deberíamos llevar: la de España. Luego explicaría que lo hizo para darle la bienvenida al expresidente del gobierno español, Felipe González, alias Feli-pillo. Había una señora que venía de compras con un par de bolsas del supermercado más famoso de los inmigrantes de Portugal. Del mercado pa’l ensayo. En los ensayos (precisamente para eso son) se detectan las fallas para corregirlas. En el liceo José Ávalos, de la parroquia El Valle, las baterías de respaldo de las máquinas de votación fallaron. Aquí y allá estaba la invitación a firmar por la paz que nos hiciera el presidente Maduro: “Ha llegado la hora de defender la Paz que tanto nos ha costado alcanzar. Los enemigos de la Patria no se cansan en su empeño de volver al pasado y arrebatarle al pueblo las conquistas de Participación, Igualdad, Educación, Cultura, Vivienda, Bienestar y Poder Popular que, junto a nuestro Comandante Chávez, hemos logrado en todos estos años de lucha, esfuerzo y amor. Bien sabemos que el camino de la oposición es el odio y la mentira. No en vano, cada vez que en Venezuela triunfa la voz de las mayorías, la respuesta de la oposición es el camino de la violencia. Hoy, el pueblo de Venezuela está unido y alerta a cualquier ataque que pretenda atentar contra la Democracia, la Paz y la Vida”. En la acera del liceo, las gorras estaban a 2.500 y las chaquetas tricolores, con la firma de Chávez, a 5.000. Un tipo vestido de negro, con lentes oscuros, camina en dirección a Bellas Artes. Le invité a firmar el acuerdo para resEdición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Explicando con paciencia

Militancia activa

petar los resultados de las 114 elecciones del 6 de diciembre, para la que solo faltan dos domingos. “Pero soy extranjero”, me dice con su acento sureño. “No importa. La patria grande”. Y firmó, luego de leer: “Nosotras y nosotros, el Pueblo revolucionario y bolivariano, en compañía de nuestro Presidente Nicolás Maduro y las candidatas y candidatos de la patria a la Asamblea Nacional, nos comprometemos a aceptar, incondicionalmente, los resultados que de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre arroje el Consejo Nacional Electoral. Nosotras y nosotros, hijas e hijos de Hugo Chávez, hoy y siempre firmamos por la paz”. A esa hora, poco antes del mediodía, ya DieCaracas, 15 de noviembre de 2015.

go Rojas, el argentino vestido de negro, había probado el ron venezolano. La discusión fue larga pero entretenida. Al final, apostamos, y se comprometió a enviarme una botella “del mejor vino argentino, un Rutini” si el chavismo obtiene la mayoría en esas 114 elecciones (87 circuitos electorales, 24 listas y 3 diputadas o diputados indígenas). “El descontento” es el argumento que le hizo apostar por el triunfo de la oposición.

El condón

Un chavista le dice: “¿El descontento? Imagina que compras un condón hoy a 300 bolos. Lo usas en la noche. Ella, complacida, quiere


Pasos para votar Para tener en cuenta el 6 de diciembre

de información 1 Estación (centro de votación) Deposita 4La máquina de votación emitirá un

comprobante de voto, retíralo sin halarlo, verifica tu selección, dóblalo y deposítalo en la caja de resguardo.

Una vez en el centro de votación debes presentar tu cédula de identidad, para que te sea indicado el número de mesa electoral que te corresponde para ejercer tu voto.

Sistema de Autenticación Integrado (SAI)

VOTAR

3 Vota

Selecciona las candidatas o candidatos de tu preferencia, y luego confirma tu voto presionando en la pantalla de la máquina de votación el recuadro VOTAR. Los funcionarios del CNE también son responsables y facilitarán el llenado de la Planilla de Registro y Control de Acompañantes.

En el punto de información podrá estar presente un testigo por cada candidato

5 Firma y pon tu huella

El miembro de mesa te indicará dónde firmar y poner tu huella. Una vez hecho esto el presidente de la mesa desbloquea la máquina de votación.

La máquina tendrá conectado el tarjetón electoral y visualizará al candidato seleccionado con la opción VOTAR. Imprime el comprobante de votación.

Impregna tu dedo 6 Por último, antes de retirarte de la mesa

2 Identifícate

Dirígete al operador del SAI. Entrégale tu cédula de identidad y coloca tus dactilares. huellas dactilares

Durante el evento electoral no se permitirán aglomeraciones o reuniones en un perímetro de 200 metros alrededor del centro de votación.

Prohibido utilizar equipos fotográficos, celulares, de video o cualquier aparato En la herraduraaudiovisual. pueden estar máximo electrónico 4 electores simultáneamente.

En la herradura pueden estar máximo 4 electores simultáneamente.

El elector ejercerá el derecho al sufragio en una sola oportunidad.

7 PPlanilla de incidencias

En caso de presentarse algún inconveniente en el SAI, específicamente con la huella dactilar, deberá llenar la planilla en compañía del miembro de reserva.

Fuente: CNE

Máquina segura

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electoral, introduce el dedo meñique en el desengrasante, sécalo y sumérgelo en la tinta indeleble.

El nuevo tarjetón no tiene óvalos y es un poco más grande que el tradicional. Incluirá la foto del candidato. SSus símbolos y nombres sserán más grandes.

Ide Identifica al elector o eelectora con nombres y aapellidos, número de cédula y foto, entre otros cé datos. da Este dispositivo tiene Es incorporado el captahuella. inc

El acto de votación se desarrollará desde las 6 am hasta las 6 pm. Continuará después de dicha hora mientras existan electores en la cola.

Ninguna persona podrá estar armada, salvo efectivos del Plan República.

Infografía: DAVID LEONET

Elizabeth Navarro atiende y escucha

repetir. Vas mañana, a la misma farmacia, y el tipo te dice que ahora cuesta 500. ¿Esa vaina es culpa del gobierno?”. Diego se queda pensando. Elizabeth Navarro le suelta, a bocajarro: “Anda para un barrio. Ahí está el voto que no es duro sino de hierro”. Navarro es la jefa de la UBCH del sector y estaba activa. La música no deja de sonar y el ambiente, con la apuesta de Diego, se convierte en una especie de predespacho, de fiesta. Música llanera, hip hop, salsa. No suenan las versiones que Gillman hizo de las canciones de Alí. Por cierto, en los resultados de la encuesta que publicó el ministro de cultura, Reinaldo Iturriza, dejaron por fuera al rock.

Un carro pasa muy despacito por la avenida... Frena frente a la entrada del liceo y el conductor baja el vidrio, observa unos segundos. Lo reconozco. Él sube el vidrio y arranca pero el semáforo me ayuda con la pauta inesperada. Toco el vidrio, vuelve a bajarlo y le pregunto a Julio César Pineda, el sempiterno embajador de Globovisión, su opinión. “Me parece bien, todo lo que tenga que ver con movilización del pueblo es bueno”. “¿Y la MUD por qué no hace nada de esto?”. “¡Están quedaos!”. El semáforo cambia. “¿Cómo ves los resultados?”. “Reñidos”. Y se va. Por cierto, Julio César, debes usar el cinturón de seguridad. Tal vez te dé a probar una copa de buen vino argentino. El próximo Caracas, 15 de noviembre de 2015.

Chávez presente

domingo 22 de noviembre, cuando falte uno solo para esas 114 elecciones, sucederá otro ensayo. Se corregirán los errores. Dos ensayos, movilización, maquinaria, juego democrático. La dirigencia opositora de este país, en cambio, no está haciendo nada. Sin duda, no tiene principios. Usted, simpatizante de oposición, la tiene más difícil: sus candidatas y candidatos son lo que son. Hay que tener mucha fuerza de voluntad para darles, literalmente, un voto de confianza. En el liceo Andrés Bello, escoger entre Ramos Allup y Daniel Aponte, así, con nombre y apellido, es una decisión fácil. ¿Hay alguna razón para no comprometerse a respetar los resultados, sean cuáles estos sean? Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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MÚSICA

“NO ES UN MOMENTO EMBLEMÁTICO DEL ROCK” Reducir la vida musical de Sebastián Araujo a Sentimiento Muerto, Dermis Tatú y Bacalao Men es un lugar común, pero estas etapas ya fueron superadas. Ahora el músico emprende nuevos retos POR Mercedes Sanz • @JazzMercedes / FOTOGRAFÍAs jonathan Mendoza

Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 15 de noviembre de 2015.


09 “Actualmente estoy dedicado a otras cosas. Sigo produciendo música en la parte de televisión. Pero después de Bacalao no he tenido grupo. Tengo proyectos musicales en mi cabeza, que son una tarea pendiente. No me veo sin música y sin la posibilidad de crear. Lo que estoy haciendo ahorita me absorbe mucho”, comenta quien fuera el baterista de tres grupos íconos en el rock y la música en Venezuela: Sebastián Araujo. Después de su actuación en las recordadas bandas Sentimiento Muerto, Dermis Tatú y Bacalao Men, Araujo se dedicó a producir de forma independiente y a estudiar Comunicación Social en la Universidad Central de Venezuela (solo le falta la tesis de grado). Ahora es productor de televisión y forma parte de la junta directiva de Ávila TV. Por eso dijo que su tiempo está copado. Son tres décadas de vida musical, contando su paso por Un Perfecto Extraño y Cero a la Izquierda, bandas decisivas para el Sebas, como lo llaman sus amigos. Todo ese cúmulo de experiencias lo han llevado a donde está, a ser buscado por otros músicos y proyectos de distinta índole. Si algo tiene Araujo es ser polifacético. —¿Qué pasa actualmente en la música?

—Es una pregunta difícil porque no lo conozco todo. Ha habido un crecimiento creativo en la técnica, hay ámbitos y espacios para todo. La gente puede buscar sus canales de producción. Antes era más difícil, había un embudo que solo lo manejaban quienes tenían el poder mediático. Ahorita hay más mecanismos, más exposición. —¿Hay buenas propuestas?

—Hay muchas propuestas, aunque siento que tenemos una deuda. Falta algo, un proyecto que trascienda y eso no se prepara ni se inventa. Siento que hay una libertad creativa, pero añoro el tema de los contenidos. —¿Y en el rock?

—Es que te estoy hablando del rock, no del hip hop, donde hay sobredosis de contenidos, en los cantautores también. Vivimos una época roquera fuerte, de expresividad. Las tendencias del momento

Sebastián ha crecido en proporción directa al auge creativo de la música venezolana

no me gustan. Quizás sea un tema generacional. A mí estos grupos no me han movido. Sé que hay más visiones sobre esto. Cuando estábamos nosotros también había otras voces que no se oían. Hubo grupos que trascendieron y otros que se quedaron por fuera. Ahorita aquí todo el mundo habla. El rock tiene una vertiente coherente en nuestro país, nos expresa, tiene mucho de calle, de nuestro carácter como sociedad. No es un momento emblemático del rock. No niego que haya rock, pero a mí no me ha transformado. —¿Hacia dónde va la música?

—Bueno, nuestra música siempre ha ido evolucionando como centro cultural que somos. El sitio donde está Venezuela es una suerte. Somos un puerto donde llegan referencias de afuera. Estamos oyéndonos más desde adentro. Fui parte de una generación que conocía más compositores y artistas de afuera que lo que hacíamos aquí. Ahorita ya no es así. Hay un florecer, y no se puede medir qué va a pasar en el futuro. —¿Ahorita es cuando nos estamos conociendo musicalmente?

—¡No! Yo creo que en los 80 y 90 hubo un vacío cultural en cuanto a lo que somos. Caracas, 15 de noviembre de 2015.

Había dos fenómenos: el rock a la par de los cantautores pop. Detrás de este movimiento había otro, nuestra música tradicional, eso nunca fue una prioridad estatal ni de nadie. Nos impusieron una visión de la música moderna sin profundizar en nuestras raíces. Ahorita hay una revalorización de nuestra música. ¡Y ojo!, no soy purista, nosotros somos más que arpa, cuatro y maracas. Es tan importante rescatar nuestros tambores como conocer lo que se está haciendo afuera para mezclarlo y crear otro lenguaje, que es nuestra visión. Venezuela está en camino de convertirse en una potencia cultural, pero nos falta. —¿Qué nos falta?

—¡Coño!, esa es una pregunta con una profundidad que no me atrevo a responder. Intuitivamente creo que somos una cultura que no se puede anclar en lo viejo, creo que estamos creando. Somos un país joven. Tenemos que, también, ver lo que está pasando en el mundo. Si me pides que defina lo nuestro es difícil. Somos una cultura de mezclas. Ahorita estamos mucho mejor, no hemos dejado de recibir información de afuera y ver lo nuestro. Sí hay una crítica: siento que hemos centralizado la cultura, pienso que debemos ir a los sitios donde podamos llenar más el tanque. Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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MITOS

¿llegaron los tequeños? POR reinaldo gonzález d. @odlanierøø ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

Quienes nacimos o crecimos en Los Teques somos tequeños, no tequenses. El falso dilema, muchas veces planteado por recién llegados que quieren tirársela de interesantes con temas que no dominan y ni siquiera les incumben, tiene su origen, paradójicamente, en un cronista de la capital mirandina: Aníbal Laydera Villalobos, quien quiso diferenciar al más popular de los pasapalos venezolanos del gentilicio de los nacidos en las tierras de Guaicaipuro. Eche. “Desconocía que el comestible fue un invento de la familia Báez aproximadamente en la década de los años 30 del siglo XX y nuestro gentilicio es de un siglo por lo menos” (Los Nadie, Salvador Chito Aguilar).

a la casa. Se convirtió en una exigencia frecuente durante las meriendas y fue propagándose en el pequeño pueblo, siendo motivo de conversaciones e intercambio de recetas”.

Se refiere Aguilar al origen del tequeño, que nació a pocos metros de mi colegio de primaria: el Sucre, en ese colorido sector que forman la intersección de las calles Sucre, Ricaurte y Páez, conocido como La Vuelta del Paraíso. Allí vivían Juan Báez, su esposa Antonia Hernández y su descendencia directa: Josefina, Socorro Inés, Luisa Antonia, María Eloína y Juan Vicente. Josefina se sentía atraída por la cocina y hacía delicias dulces, como besitos y conservitas de coco, además de ricos pasapalos, como pastelitos y torrejas. Un afortunado día para la humanidad, Josefina usó unos recortes de masa sobrantes para envolver pedacitos de queso blanco y los metió al caldero...

Cuenta Aguilar, “el cronista silvestre” o “el gran fabulador de Los Teques” hasta el pasado 7 de junio, cuando fue juramentado como el cronista oficial de la ciudad, en reemplazo de Ildefonso Leal, que el mismo día que Laydera Villalobos publicara aquella especie en un periódico local, comenzó la segunda guerra idiomática que se haya librado en el pueblo. “Mi hermano Casagua y yo lo resolvimos de esta manera. Son tequenses los nacidos en Los Teques y venidos de otros lares que han apoyado la destrucción de la ciudad. Son tequeños los nacidos en Los Teques y venidos de otros lares que han defendido la ciudad”.

La historia fue publicada en el diario El Nacional por Carmen Manarino, amiga de los Báez, en los años 80, y rescatada luego por Miguel Ángel Estrada, sobrino de Josefina: “Este enrollado de masa y queso gustó mucho a la familia y a los amigos que iban Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Años más tarde el pasapalo superó las fronteras de la capital mirandina gracias a Luisa Casado, quien daba clases de cocina y preparaba comidas para fiestas. La creación de Josefina, incluida en los pedidos de Casado, pronto despertó ansiedad entre los caraqueños, quienes preguntaban insistentemente: “¿Llegaron los tequeños?”, en alusión a las personas de Los Teques que les llevaban la exquisitez. Así, el canapé adquirió el nombre del gentilicio.

Hoy, en el mismo sector donde nacieron los tequeños, siguen ocurriendo cosas maravillosas. La esquina El Dato, donde se cruzan las calles Sucre y Guaicaipuro, es frecuentada por nacidos en Los Teques y venidos de otros lares que comen tequeños en Pasapalos Dato y sonríen. Hablan por teléfono pero sonríen.

Caracas, 15 de noviembre de 2015.


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libremente

¿Qué es estar bien y qué es estar mal? Por Miguel Posani / mayleni curros @mposani / @maylenicurros ILUSTRACIÓN FRANKLIN ALVIáREZ

Constantemente vamos por la vida enfrentando problemas, juzgando, atentos al peligro, tratando de lograr cosas, llenos de emociones diferentes según las circunstancias, en una carrera constante hacia algún lugar que nos parece significativo para nuestra vida. Todo ese afán que nos mantiene, generalmente, en una carrera contra el tiempo, no permite reflexionar sobre qué es estar bien y qué es estar mal. Es más, generalmente creemos que estar bien es no tener ningún malestar o enfermedad, o simplemente ser feliz; y estar mal, en cambio, consiste en estar enfermo o deprimido, en sentirse solo, o no estar a gusto consigo mismo. Pero el problema es que esta visión, además de simplista, solo funciona momentáneamente. Vivimos en una sociedad enferma e inhumana que genera constantemente malestar. No nos damos cuenta de que nos hemos acostumbrado a estar mal y eso lo vemos como natural. Estar bien va más allá de la ausencia de los malestares físicos o enfermedades. En el estar bien entran nuestra actitudes, creencias, qué sentimientos producimos, cómo nos vemos y vemos a los demás, entre otras cosas. ¿Qué estoy haciendo para mantenerme bien? Esta pregunta nos hace tomar conciencia sobre nosotros mismos y nuestra salud. Hay una tendencia a no comprometernos con nuestra salud, a dejárselo todo a los médicos para que “nos reparen”. Entrar en una perspectiva preventiva, en cambio, es preguntarnos: ¿qué estoy haciendo para mantener mi salud física y mental?, ¿cómo me defiendo de este contexto, generalmente patógeno, patológico y negativo?, ¿cómo trato a mi cuerpo y mi mente?

Consejos útiles Comienza por darte cuenta de las cosas que te puedes disminuir su influencia de manera hacen bien y las que te hacen mal. relevante en tu cotidianidad. Siéntate y escribe en una columna aquello que te hace bien y en otra lo que te hace mal respecto a tus hábitos de vida. Por ejemplo: comida, emociones, actitudes, relaciones, etc. Luego, repasa qué escribiste en cada columna y date cuenta si cada una está en la columna correcta.

Infórmate sobre qué alimentos son sanos. Comienza a hacer ejercicio, aunque sea caminar por la calle una media hora todos los días. Date cuenta de cuántas veces al día te ríes. Si lo haces poco, comienza, testarudamente, a reírte más. Lo mejor es siempre reírnos de nosotros mismos y tomarnos menos en serio.

Pregúntate: ¿por qué pienso que esto me hace bien o mal?, ¿de verdad me hace bien o mal? Luego, escoge lo que te hace mal y decide Comienza el día de hoy a cuidarte y a querercómo eliminarlo de tu vida o, al menos, cómo te más. Caracas, 15 de noviembre de 2015.

“El acto de desobediencia como acto de libertad es el comienzo de la razón”. E. Fromm

Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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MIRADAS

Lucha desde el museo desde el 1ro de noviembre hasta febrero de 2016 se exhibirán las obras que pretenden reflejar las expresiones, más que sentidas, de los pueblos del sur político que están en resistencia al sistema capitalista POR Ander De Tejada • @EPALECCS / fotografías jonathan mendoza

Me gusta caminar por Bellas Artes, a pesar de que a veces te sorprende con cierta hostilidad. A veces son malandros, a veces son pacos, pero la mayoría de las veces uno disfruta de su renacer para las labores artísticas. Ahora los descamisados —término aliprimeriano— pueden adornar con su presencia lo que antes solo era para gente de la élite. Pueden ir a museos, pueden ir al teatro y pueden apreciar música que se consideraba solo para gente “culta’’, aunque todavía hay quienes aún lo siguen considerando (lea más abajo). La transformación fue tal, que ahora en esos espacios no solo se aprecia los productos artísticos que consumía la burguesía —cosa que no los hace malos ni, mucho menos, despreciables— sino que ahora se exhibe el arte que trata de concientizar, para así impulsar los cambios necesarios dentro de un proceso tan complejo como lo es una revolución. Todavía quedan retazos del elitismo que fue ley dentro de ellos (en la Feria Internacional de la Música quisieron sacar a un viejo de un concierto en la Ríos Reyna porque estaba mal vestido, pero el hombre no se dejó joder y, ante la obvia humillación y violación de sus derechos, gritó que ese teatro y ese concierto eran para el pueblo, por lo que el protocolo del evento tuvo que buscarle una chaqueta, cosa que no deja de ser humillante), pero el lugar, poco a poco, va quedando en manos de la gente. Ahora se baila salsa en el piso que Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

han pisado tantos corruptos, tantos ladrones y tantos tipos que se vomitaban encima si no escuchaban música compuesta por Bach. Ahora se hacen sancochos en zonas que se habían prometido libres de sancochos, ahora se pintan murales, ahora se hacen ferias del libro, ahora la gente va en bluyines y en franelilla, ahora se sonríe. En primer orden: Morella Jurado es la presidenta del Instituto de las Artes y el Espacio (Iartes). Ella, a quien no se le ve un pelo fuera del cauce correcto que debe llevar un peinado bien elaborado, junto con el equipo del instituto, fueron los que hicieron posibles este evento. El país de honor, en esta ocación, es Palestina. Por otro lado, Giordana García, viceministra de Cultura, me explicó qué era el sur. Ya el sur no solo manifiesta ubicación geográfica, ahora hay un sur político, y la Bienal trata de darles cabida a los países de ese sur que, como lo dijo ella misma, “pertenecen a una categoría política que produce discursos antihegemónicos’’. “Esta es una iniciativa del Ministerio del Poder Popular para la Cultura a través del Iartes. Se inauguró el domingo pasado y va a estar abierto hasta febrero de 2016. Son cuatro meses de exposición en todas las salas del Museo de Bellas Artes, en el ala posterior, que reúne Caracas, 15 de noviembre de 2015.


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Por donde sea que camines, una pieza de arte se te atravesará

artistas de los países que se configuran en la relación de poder actual, lo que nosotros hemos llamado ‘los sures del mundo’, pensando en el sur político entendido como una categoría política. Le quisimos dar prioridad a los discuros antihegemónicos, anticapitalistas y antiimperialistas. Por eso fortalecimos al sur e invitamos países como Haití, algunas islas del Caribe como Trinidad y Tobago, Martinica. Hay obras de países africanos como Mali y Sudán. De toda América Latina, de Centroamérica también, de El Salvador, de Nicaragua, entre otros. La curaduría divide la Bienal en cuatro escenarios: el cuerpo, la tierra, la identidad y las transformaciones. Todas estas inscritas en este discurso subversivo y trasgresor de la lógica capitalista-hegemónicaimperial. Es un espacio donde se encuentran diversas voces de los sures del mundo para levantarse ante lo que consideramos un sistema que expolia la naturaleza y que aliena las relaciones sociales. Creemos en el arte comprometido, de alguna manera, al discurso que, al final, estamos exponiendo a través de esta bienal’’. Sobre los ejes, los cuales se ubican, cada uno, en los distintos pisos del ala posterior del museo, helos aquí con su breve descripción: El cuerpo: “El cuerpo ha sido, a lo largo de la historia, el espacio en el cual la domiCaracas, 15 de noviembre de 2015.

Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS


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La Bienal del Sur presenta las artes plástica y visual en distintas formas y disciplinas

nación capitalista y patriarcal ha ejercido más directamente su esfuerzo de control y domesticación. El arte que se crea con compromiso político de género es un discurso que funda la necesidad de construir una sociedad equitativa y plural a partir del cuestionamiento de la ‘norma’, la reconstrucción y resignificación de otras formas posibles de relación social’’.

La identidad: “La construcción ideológica que se ha impuesto desde el discurso hegemónico genera representaciones estereotipadas sobre las personas, sus cuerpos, sus roles, sus identidades, sus transformaciones y formas de vida, siendo el reflejo del control que el mercado ejerce en los individuos, orientándose en la peor de las aversiones: el endorracismo que fortalece la figura del explotador. Frente a este sistema de valoraciones el arte, La tierra: “El imaginario de la tierra se en su compromiso político, ha hurgado en construye desde la experiencia de vida las diferentes expresiones, representaciones y del artista con su entorno y la naturaleza. ausencias de lo que nos define como pueblo’’. Desde ella brota y en ella se transforma. Desde el diálogo natural que le da perte- La transformación: “Una de las caras más nencia y territorialidad define su obra, ya salvajes del capitalismo es la imposición de desde una mirada cosmogónica, mágico- una cultura única fundamentada en el conreligiosa, ya desde una mirada antropo- sumidor como actor social relevante. Borrar lógica que construye su identidad y, des- la diversidad cultural en pro de un universo de ella, sus modos de resistencia’’. mercantilizado es el sueño de la propuesta Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

globalizante del imperialismo. Los seres humanos pierden su esencial constitución cultural. Desde diferentes prácticas artísticas, el mercado es el ojo del huracán, como objeto de crítica, frente al cual se erigen diversas luchas que pretenden, finalmente, la recuperación de la dignidad del ser humano y el reconocimiento de su capacidad de accionar, transformar y cambiar la historia’’. Hay de todo, de verdad. Desde esas obras que te estremecen hasta aquellas que solo las entiende quien las hizo y que jamás en tu vida relacionarías con la descripción. Esas últimas, personalmente, no me gustan. Pero qué importa eso. Desde pinturas hasta documentales, desde fotografías hasta arte interactivo y hasta cosas que no se sabe ni con qué están hechas. Todo tiene lugar ahí, en los silenciosos pasillos del museo, subiendo las rampas


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Visionario, obra del mexicano José Miguel González

del ala posterior, bajo el resguardo del aire acondicionado, acompañado de muchas obras que de verdad hacen pensar. Hacer una descripción o un recuento de todas las obras sería inútil porque no alcanzaría esta crónica, además de que sería muy extenso y aburrido. Lo mejor es que se visite el lugar. Sin embargo, podemos recomendar una, al menos, cuyo nivel artístico y la profundidad del mensaje que hay en ella la hacen inolvidable. Es la pieza de José Miguel González, mexicano, que presenta Visionario, un recorrido inmenso de dibujos, uno tras otro, que reflejan la impersonalidad dentro de la convivencia humana y cómo los seres, por la diseminación cultural de la ideología liberal-burguesa, hemos aprendido a vivir pensando que somos individualidades y nada más, dispuestos a “comernos el mundo’’ sin mirar para los lados, y no una colectividad entera.

Hay una gran visualización de las culturas no occidentales. Está Palestina, como ya sabemos, y persiste esa nueva narrativa del mundo árabe que la despoja del tinte terrorista. Se logra representar el sufrimiento y el terror de un pueblo azotado, justamente, por Occidente. Además, obras africanas y del este de Asia presentan los padecimientos del capitalismo en esos pueblos. Por último, una jaima desplegada en el sótano del museo reproduce la forma de vida de los saharawis, un pueblo que, como explica Yulia Pino, fue colonia española y, tras su independencia, pasó a ser colonia de Marruecos. Por fuera del museo también habrá actividades. El pasado 3 de noviembre se develó el mural de Pablo Pérez Riesco, conocido en las calles y en las paredes latinoamericanas como el Kalaka, llamado La comparsa de los Caracas, 15 de noviembre de 2015.

quijotes y que, según dijo en entrevista con la prensa de Iartes, representa a los “seres de luchas confluyendo con seres fantásticos de la realidad latinoamericana, que también son la representación de las tradiciones más populares de los pueblos en resistencia”. Además, se dictarán talleres, como el que impartirá Lina Girado para los artistas visuales, que tratará sobre la elaboración de proyectos; y como el que se dictó en el Museo Carlos Cruz-Diez sobre la técnica de xilografía. Es la primera vez que se hace la Bienal, pero ahora, como lo dice su nombre, será cada dos años. Esperemos que crezca con cada una de sus presentaciones y que se siga alimentando el arte que busca atentar contra la cultura del capital. Le quedan cuatro meses. Tiene tiempo para ir. Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS



AUTOR: CARLOS ANDRADE BLOG HTTP://CARLOSANDRADESIGN.BLOGSPOT.COM/ BEHANCE: HTTPS://WWW.BEHANCE.NET/ANDRADESIGN1

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minicrónicas

el encanto de la vergüenza

Vigilancia masiva.

los bajos de la pensión una celebración que pintaba para largo. Decidida a escapar de aquella fortuita emboscada, la chica echó mano a su cultura cinematográfica para proponerme una forma de huida. Habríamos de enlazar un par de sábanas por cuya línea ella descendería, ágil y subrepticiamente, desde el piso superior hasta la planta baja. Frustrado y confuso, accedí sin pensar dando por sentado que la firmeza virginal de mi compañera se extendía a sus delicados brazos y manos. Cuando me percaté del dislate, la muchacha pendía del lado afuera del balcón, sus manos resbalaban por sobre la tela del improvisado cabestro y sus gritos echaban por la borda el esforzado sigilo de las últimas horas. Recuerdo que mientras la sostenía, durante un instante que pareció eterno, pensé que lo encantador de tener vergüenza es que nos obliga a vencer obstáculos que de otra manera no serían. Después de aquella pausa la chica se desplomó. No sabría decir si ella resbaló o yo la solté. Suerte que ya solo le faltaban pocos centímetros para alcanzar el suelo. Por carlos cova

Foto Jesús Castillo

Y siendo que hallar hospicio para el ayuntamiento carnal se hacía tan cuesta arriba, convencí a mi pareja de trasponer las murallas de Jericó. Frisábamos ambos la edad de veinte años y nuestros prejuicios morales comenzaban a ceder ante la natural impulsividad amorosa. Aquella noche, por fin, había accedido ella a pernoctar en mi compañía, efecto de una larga conversación en la que sus argumentos fueron rebatidos, filosófica y afectivamente, con lógica cartesiana y caricias empíricas. Pero esa era apenas la primera de las tareas. La segunda suponía burlar la férrea restricción de la familia Cornejo, regentes de mano dura en la pensión Coromoto de Los Caobos en la que entonces me hospedaba. Decidimos montar guardia en el callejón aledaño a la espera de nuestra mejor oportunidad. Tras una o dos horas, acrecentadas por la expectativa, logramos acceder en lo alto de la casa a una pieza pequeña y misérrima, sin baño propio ni mayores comodidades, en la que la pizca de indecisión de mi compañera se rehizo como un código sacramental. Aquel no iba a ser el lugar donde ella perdería su virtud, dijo. Para más “inri”, habíase ido gestando en

enredados

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El anuario Project Censored, the news that didn’t make the news 2014-2015 (Proyecto Censurado, las noticias que no fueron noticia 2014-2015) publicó el mes pasado las 25 noticias más censuradas por los medios corporativos de Estados Unidos, entre estas destaca la referida al motor de búsqueda Increach. Se trata de una herramienta similar a Google desarrollada por la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) estadounidense capaz de procesar un aproximado de 850 millones de registros. Esto incluye más de 30 tipos diferentes de datos privados tomados de correos electrónicos, llamadas telefónicas, faxes, chats y mensajes de texto, así como información de ubicación obtenida de equipos electrónicos y teléfonos móviles de personas, tanto extranjeras como estadounidenses, que no han sido acusadas de ningún delito. La revista electrónica The Intercept, donde originalmente se publicó la noticia en agosto de 2014, reseñó que la NSA aceptó que comparte la información recopilada con organismos como el FBI, la CIA y la DEA, entre otros, pero no ofreció detalles sobre el método y el alcance de tal intercambio. Para Ryan Gallagher, periodista de The Intercept, la creación de Increach evidencia que la NSA ha venido recolectando y almacenando por años grandes volúmenes de datos. Además, considera que “la información compartida a través de Increach se puede utilizar para rastrear los movimientos de las personas, trazar sus redes de asociados, ayudar a predecir las acciones futuras y revelar afiliaciones religiosas o creencias políticas”. Desde las escuchas de las líneas telefónicas de un centenar de periodistas de la agencia AP en 2013, hasta las denuncias de Edward Snowden y Julian Assange sobre programas de espionaje utilizados a gran escala, que implican a compañías a las que cotidianamente le suministramos información y opinión personal como Facebook, Hotmail, Yahoo, Google, Skype, PalTalk, Aol, YouTube y Gmail, entre otras, el asunto de la construcción de un sistema de vigilancia masiva cibernético es un fenómeno en franco crecimiento en EEUU que las corporaciones hegemónicas de difusión tratan de silenciar sistemáticamente, naturalizando el miedo a la libertad a cambio de una falsa percepción de seguridad. Yanira Albornoz Ríos

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SOBERANÍAS SEXUALES

Pesada corona POR VÍCTOR FERNÁNDEZ fhavictor@gmail.com ILUSTRACIÓN jessica mena

Sé que esta afirmación hará reír a más de una mujer, pero la verdad es que los hombres también somos víctimas del patriarcado, aunque no por ello dejemos de gozar de miles de privilegios. Sufrimos día a día la mutilación que nos hicieron de pequeños para que no supiéramos qué hacer con nuestros sentimientos. El dolor, natural y cotidiano para las mujeres, a nosotros nos fue prohibido expresarlo. “Los hombres no lloran”, nos dijeron cientos de veces. Recientemente conversaba con varios compañeros cuán difícil nos son las lágrimas y las estrategias que desarrollamos para alcanzarlas. Algunos las consiguen en la más exclusiva privacidad mientras otros acudimos a una terapia de autoinducción casi robótica. Mucha alegría también es sospechosa. Reír es permitido, pero no muy alto, y jamás sobre chistes o comentarios “de mujeres”. Bailar, que es en sí un placer, siempre se nos atribuye como artilugio sexual. No se baila porque se disfruta sino para sacar un teléfono e ir calentando la noche. Son absurdas la cantidad de peleas a las que estamos expuestos por esa hipótesis; y, claro, si te buscan pelea “tienes que defenderte” porque el miedo también está prohibido. Pero de todas las castraciones, la más estratégica para el machismo es dejarnos sin instrumentos para expresar afecto. Tenemos que oler a cerveza y confundir algunas vocales para abrazarnos con los amigos y decirles que los queremos. Tenemos que aguantar acurrucarnos mucho con una amiga porque tantas caricias la confunden a ella y al entorno. Cuando nos separamos de las madres de nuestros chamxs tenemos que regocijarnos en nuestra libertad de ir de polvo en polvo y de casa en casa, para no hurgar la duda permanente de si tenemos la capacidad de criarlxs bien por cuenta propia. Tenemos que celebrar que siempre haya mujeres disputándose cuidar de nosotros para no pensar en la dependencia que nos genera no saber cuidarnos nosotros. Y es por todo lo comentado que los hombres no asumimos el feminismo como una causa políticamente correcta para que digan “tan bello que la acompaña en esto”, como cuando nos ven fregando platos y sonríen con ternura. Fregar platos y cocinar no es un favor. Asumir “lo doméstico”, que más bien yo llamaría “lo vital”, no es un sacrificio por una causa justa sino un derecho por el cual debemos luchar. No se trata de contribuir a la liberación de las mujeres para seguir siendo los héroes de la película. Se trata de liberarnos compañeros. De gritarle al mundo que nosotros tenemos derecho a demostrar afecto, a explorar nuestra sexualidad, a disfrutar al atender a lxs demás, a equivocarnos sin sentirnos culpables... La lucha no es solo por ellas, ¡es por todxs! Caracas, 15 de noviembre de 2015.

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ENTREVISTA

el casa por casa de faria y alemán A 21 días de la jornada electoral para escoger a las y los diputados a la Asamblea Nacional, los candidatos del PSUV, Jacqueline Faria y Juan Carlos Alemán, escuchan, directamente de las comunidades, sus necesidades POR maría betania chacín • @epaleccs / Fotografías jonathan mendoza

Para el momento en que se hizo esta entrevista, los candidatos por el Circuito 5 del Distrito Capital, Jacqueline Faria y Juan Carlos Alemán, acababan de hacer su “casa por casa” número 110: ya habían visitado más de 100 comunidades entre Antímano, El Paraíso, Caricuao, Macarao y La Vega. Esta vez, el recorrido 111 —un número altamente cabalístico— empezó en la escuela Miguel Otero Silva en el sector Santa Ana de la parroquia Antímano. Allí, en el piso 3, está ubicada Radio Sendero de Antímano, 88.5 FM, donde empezó la jornada de la candidata Jacqueline Faria con una larga entrevista desde las 11 am. Un casa por casa debe ser la actividad más ardua que a un candidato o candidata le toque realizar: hacer una preproducción días antes en la localidad, llegar, visitar más de 20 casas, escuchar las necesidades de sus habitantes, observar el perímetro, tomar notas —escritas y mentales— sobre el territorio donde se está parado, tratar de complacer a todos. Sin mencionar que no se puede dar un paso sin que un grupo de personas esté siempre detrás, hasta para ir al baño. Nada fácil. Jacqueline Faria no es nueva en esto de hacer política. Desde el Movimiento 80, su grupo estudiantil de la UCV, hasta la actualidad, ha desempeñado numerosas tareas gubernamentales. Se destaca en los temas ambientales, en el agua, especialmente; como buena

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ingeniera hidráulica fue pionera en las Mesas mínimos la gente pone su nombre, la cédula, Técnicas de Agua al lado de Chávez. teléfono y lo que necesita. Estábamos en la Calle Real de Santa Ana, parroquia Antímano. Subimos y subimos por el sector El Progreso hasta el punto de casi llegar a la verticalidad. A empujones llegué a donde estaba mientras ella me buscaba con la vista. —Más allá de ser una rutina preelectoral, ¿cuál es la esencia de un casa por casa?

—La esencia es la celebración del encuentro. La gente sale, saluda, quiere que entres a su casa, sienten como un placer de invitarte a su hogar. Eso es una de las cosas más bonitas que nos identifica como venezolanos y venezolanas. Te invitan un cafecito, te preguntan cómo lo quieres, es una tradición bien bonita. Luego, por supuesto está el planteamiento, lo organizativo: se habla con el consejo comunal tal, se habla con la UBCH tal, se habla con las mesas técnicas de agua, se habla con las diferentes organizaciones de la Revolución y de lo que han logrado —que es mucho— y de, por supuesto, lo que falta —que también es mucho. Nosotros apenas vamos a cumplir, el 6 de diciembre, 17 años de Revolución, y en ese tiempo es mucho lo que se ha resuelto, pero es mucho lo que está pendiente. Entonces, en un casa por casa la gente te hace sus planteamientos, los hay de diferentes tipos. Recibimos cartas, carpetas, solicitudes; hasta en papelitos chiquiticos, Caracas, 15 de noviembre de 2015.

—¿Dónde estamos? ¿Hacia dónde vamos?

—Estamos en Antímano, en el sector La Acequia. Un sector de barrio donde la gente, obligada por el capitalismo en el pasado, se vino desde el interior con hambre, sed, desempleo y se fue colocando aquí en barracas, como lo dijo Chávez. Poco a poco la gente ha ido mejorando su vivienda y, ahora, con la Gran Misión Barrio Nuevo Barrio Tricolor y la Gran Misión Vivienda Venezuela, todos nuestros barrios están incluidos en corredores de esta primera misión que nombré, donde se está aplicando la política de mejora de viviendas, mejora de las calzadas. —¿Cuáles serían las primeras metas a cumplir en el tema de servicios, específicamente el agua, su especialidad, digamos, que se cumplirían si usted llegara a la asamblea en diciembre?

—Nosotros, como también el Gobierno de Distrito Capital, todo el ejecutivo y el presidente Maduro está dando prioridad al término de servicios. Fíjate, venimos de una casa donde la señora dice que tiene filtraciones, ¿por qué pasa eso? Porque no hay buen drenaje, entonces, ¿qué hacemos nosotros con arreglar la casa sin atender eso primero? Para eso está Barrio Nuevo Barrio Tricolor con la Alcaldía de Caracas y el Gobierno de Distrito


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“La calidad de vida de los ciudadanos debe ser lo prioritario”

Capital para meterse en todas las transformaciones de las redes: agua potable, recolección de aguas servidas y drenaje. Luego de eso viene la recuperación de fachadas, ventanas, techo. Creo que esas cosas son prioridad: mejorar la calidad de vida de los ciudadanos que residan en nuestra jurisdicción. A una pequeña casa entraron, aproximadamente, 30 personas. Afuera se quedó una centena. Faria y Alemán se sentaron en las sillas del comedor de la señora Luz Marina Machado, integrante del consejo comunal Santa Ana Norte. —Mira, Chacín, como te decía: ellos se reunieron previo a este recorrido de los candidatos e hicieron sus prioridades —me explica Faria. Faria y Alemán con miembros del Consejo Comunal Santa Ana Norte Caracas, 15 de noviembre de 2015.

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—Nosotros nos reunimos y redactamos una carta. La primera problemática es que no tenemos Mercal. Teníamos uno, pero el señor murió y perdimos el código —según Luz Marina. —¿Y este sector pertenece a cuál corredor de Barrio Tricolor? —Carapita-Junquito. —¿Y ustedes participan en las mesas técnicas de agua? —Sí, la sala situacional principal está en la Luisa Cáceres de Arismendi, allá abajo. —¿Se reúnen todas las semanas? —Sí, todas las semanas. Ya metimos 50 casas por Tricolor y estamos ayudando a la gente a cambiar sus casas, porque hay muchos techos que se están filtrando. —¿Cuánto tiempo tienen gestionando con su consejo comunal? —Nosotros estamos registrados desde 2008. Y lo poquito que hemos obtenido se ha logrado desde la comunidad. —¿No han postulado bodega patriota? —No hemos podido. Tenemos una traba con el registro. piden y él tiene que resolver. Nosotros somos aceleradores, catalizadores de procesos. —Pues, pero eso es lo básico para que resuelvan el problema del abastecimiento. Entramos a una casa larga, un hogar cristiano, con un gran mural en la sala dedicado —Sí, por eso le estamos entregando esta car- a Jesús y a Chávez. Allí vive la señora Elisa Acosta, de 80 años, con los 16 integrantes de ta. Fírmela, por favor, para tener un aval. su familia. Para ese momento llegaron más periodistas, más entrevistas, de radio, perió—¿En cuánto tiempo se le dico y televisión. El casa por casa se vuelve da respuesta a este tipo de lento, acalorado, cansón, sudoroso, pero sigue requerimientos que hace la y sigue, hasta visitar la última casa pautada gente en un casa por casa? —Ellos entregan eso para que uno los ayude a para el recorrido. Jacqueline tiene un equipo acelerar, pero en realidad no somos nosotros fiel, en su mayoría compuesto por jóvenes, los que respondemos, es el ejecutivo que le que la acompaña a todos lados. Su asistente transfiere poder al pueblo. Ellos hacen su lista, se guarda absolutamente todos los papelitos uno lo que hace es articular con los ministerios que le van dando en un bolsito o en el bolsillo e instituciones necesarias. Esto no es como de su pantalón. Visitamos muchas casas con en la Cuarta, que a un candidato le piden y le filtraciones. Casas donde no tenían cuartos Edición Número Ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

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y, aún así, vivía una familia numerosa. Casas cuyas ventanas no se podían abrir porque del otro lado había una pared de bloques. Entramos a una casa cuya filtración era tan evidente que había charcos de agua en el piso. Una parte del techo dejaba ver el cielo abierto, también dejaba entrar a la rabiosa lluvia cuando esta arreciaba. “No me pongan a priorizar a mí o a Juan Carlos. Son ustedes los que tienen que decidir. Son ustedes los que identifican la situación de una familia”, le explica Faria, con paciencia, a la señora que allí vive. “La solución es integral, nada hacemos con arreglarte la casa si el consejo comunal no se reúne para arreglar las filtraciones”, termina de explicar Alemán. Ante las situaciones críticas de cada casa, las caras de los candidatos afinaban su interés por ayudar.


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Los votantes y candidatos del Circuito 5 de Caracas intercambiaron visiones en el casa por casa preelectoral

La gente tiene todo tipo de peticiones. Ellos insisten en que la comunidad misma, si se organiza, a través de las distintas ayudas sociales, puede ser independiente y resolver hasta la última de sus necesidades. Pero la llamaban hasta para mostrarle un árbol que está rompiendo una acera con sus raíces. —¿De dónde viene y para dónde va ahora?

—Vengo de la caminata nacional “Tócate para que no te toque” a favor de la lucha contra el cáncer de mama. Empezamos a caminar desde el Cardiológico Latinoamericano Infantil Dr. Gilberto Rodríguez Ochoa hasta el IND. Luego me vine para acá y ahora creo que voy a Los Teques, a una reunión con el presidente sobre las Mesas Técnicas de Agua. Hoy mi día termina tarde. Calidez, afabilidad y compromiso Caracas, 15 de noviembre de 2015.

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GASTRONOMÍA

o ir e e sg bl ed la rie u e p p su A Im Se

PICHONES DE SIBARITA

Calidad

la Empanada y pa’ la playa

Precio Ambiente Atención

POR marlon zambrano @marlonzambrano FOTOGRAFÍAs michael mata

En un ángulo gordo de la autopista Gran Mariscal de Ayacucho, saliendo de Guatire rumbo a Barlovento, está un corredor de quioscos apiñados que siempre está full. Carros, motos y camiones entran y salen al son de los pitazos de los parqueadores informales que administran los puestos con marcialidad inapelable, aunque uno nunca les para mucho. El enjambre vehicular oculta, tras un muro de parachoques, un espectáculo esencial del ser venezolano: gente comiendo empanadas. La escena está incompleta si no se le agrega una malta bien fría o un café hirviendo, de pie, sentado, los carajitos brincando por entre los comensales, la suegra indecisa ante la variedad de los rellenos, los zarpazos asesinos de la guasacaca sobre las camisas y una explosión de olores, colores y sabores fundamentales para comprender nuestra identidad.

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Troncal 9

DELICIAS CRIOLLAS DE MIRANDA

Calle 12

Son 42 locales alineados en el sobreancho de Río Grande, donde todo caraqueño de fin de semana en pos de las costas mirandinas ha hecho escala para meterle al saco. Están agremiados en una cooperativa de nombre Delicias Criollas de Miranda (Decriomi II) y, según la leyenda, todo comenzó hace como 25 años, cuando la señora Juana Fuentes enterró una sombrilla en un pipote con tierra y sacó un primo para freír las primeras empanadas, a disposición de los turistas que comenzaban a darle uso a la nueva vía expresa a Oriente. Importante es que el azar juegue a tu favor y del tin marín para escoger y caigas en un puesto donde la fórmula de la empanada, la arepa o la hallaquita de chicharrón sea aplicada con amor. Nosotros anclamos nuestras apetencias pseudosibaritas sobre el local Punto Alfa y Omega y Dios hizo el resto, porque María

Guatire

Antonia Rosas, Eliana Martínez y Maritza González no solo nos ofrecieron un desayuno entrañable sino que nos hicieron sonreír tempranito en la mañana. Hay de todo, a toda hora y todos los días (menos el lunes): empanadas de cazón, guacuco, camarón, pollo, carne molida, mechada, dominó, a Bs. 100, por ahora; pero también ofrecen arepas (a 350 y 400 las mixtas) con todos los rellenos recordables, incluyendo una variedad que fue muy apreciada hasta hace pocos años en distintas regiones del país y hoy resulta una rareza: teretere, que no es más que una mezcla de vísceras que, según las manos que la condimenten, puede saber a cielo o a infierno. Esta vez nos abasteció San Pedro en persona. Maritza Caracas, 15 de noviembre de 2015.

González, la morena del sabor, le pone vida a buena parte de lo que se come en ese sitio; además, le agrega rudimentos consagrados que le dan sabrosura especial a la comida, desde el asado negro hasta la hallaca, pasando por la salsa tártara. Confiesa, sin dar detalles, que entre sus secretos está la nuez moscada, el laurel, el orégano y algún pellizquito erótico a la masa. En estas páginas se ha concluido, sabiamente, que la empanada no debe comerse ni muy caliente ni muy fría, para que el sabor se diluya con soltura en el paladar. Le agregaría, irrespetando a los que saben, que una buena guasacaca, fresca, completa el círculo místico que le da vigor e inmortalidad a uno de los platos más arraigados de la gastronomía venezolana.


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crítica y media

TRAS EL DISCURSO

La Trama Cotidiana

Pisando firme “Suol” es un término muy antiguo que se refiere a la parte de abajo del calzado, es decir, la “suela”, y de suela viene suelo, y de suelo “solar” que, por razones de ubicación, se opone a “solar” de Sol, que más bien viene a darle a uno en el cogote y en la mera testa. Solar, entonces, es un espacio marcado por lo que se pisa con la suela, y en muchísimos casos con la mera planta del pie. Por su lado, aburrido viene de “abhorrere” que significa algo así como “sin ponerse los pelos de punta”. Sugiere estar sin estímulo. También nos evoca una cotidianidad tan cuadrada, tan sabida que ni se sufre ni se padece. Estas procedencias lingüísticas alcanzan a tener sentido cuando nos encontramos con un espacio escénico nuevo (en el TTC) que pisan unos bailarines, dando cuenta de unas condiciones físicas muy bien afinadas, igual que su sentido del ritmo, de la armonía y de la entrega. Logran conmover al público, sacarlo de la abulia por su frescura, su alto sentido del cuerpo como herramienta estética y porque bailan alcanzando expresiones y modos que, evidentemente, le son propias y, sobre todo, significativas. La calle, lo urbano, la violencia, la ternura, el amor, la soledad no se desdicen, se amalgaman, construyen un cuerpo para esa nueva mixtura y sentido ético de la vida. Por su lado, el trabajo de Félix Oropeza podría calificarse como la coreografía

del riesgo. Porque el tiempo en que se está frente al espectáculo uno ve que todo se pone en peligro. Comenzando por los parámetros clásicos de danza contemporánea. El equilibrio escénico es, a veces, muy precario y nunca deja de ser armónico. Los desplazamientos en grupos son muy divertidos y amenazan con partirle la testa (o el cogote) a cualquiera que se descuide. El espacio se vacía en varias oportunidades amagando con volcar desastrosamente el escenario a uno u otro lado, pero esto no ocurre. Vemos, permanentemente, componer y descomponer escenas que nos dicen cosas cercanas, casi anecdóticas; siempre derrochando energía e impidiendo el aburrimiento, no solo del espectador sino del hecho de danzar. El solar de los aburridos es una puerta abierta a formas auténticas de moverse en el escenario como bailarín, actor, director, coreógrafo, dramaturgo, escenógrafo, musicalizador, músico, etc. Se agradece este trabajo que, entre otras cosas, es una conminación a hacerlo bien y con mucha seriedad cuando se trata de encaramarse en un escenario, solar, piso o como se quiera llamar a ese espacio que se hace mágico solo si hay magia. Por Rodolfo Porras

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

historia make up. Sería un absurdo negar el talento como director de cine que posee Steven Spielberg: es un maestro de la narración cinematográfica. No obstante, dicha destreza se circuncribe a lo técnico y a lo visual; no así en lo concerniente al contenido. Sus filmes son entretenidos —en su acepción más benévola—, son reflejo, elegante por demás, del entertainment, del cine cotufa. Al observar aquella parte de su filmografía en la que pretende auscultar la historia, deja mucho que desear. Asímismo, utiliza el cine como discurso para hacer posturas abiertamente ideológicas y maquilla de apostolado histórico sus enunciados, lo que va en detrimento de la narración. Así, Puente de espías (EEUU, 2015), navega en las aguas del desencanto y constituye un enorme lugar común de la Guerra Fría: supremacía, en todos los órdenes, de Occidente sobre Oriente. De entrada, la dualidad maniquea se antoja extemporánea dada la cantidad de información a la que hoy día se tiene acceso y la velocidad con que fluye la misma. Además, los planteamientos morales del filme son un monumento a la impostura: el ignominioso muro de Berlín, trato justo a los prisioneros políticos en EEUU en contraste con los vejámenes practicados por los soviéticos. La incesante violación de los derechos humanos en el campo de concentración gringo en la base de Guantánamo, en la actualidad; la cacería de brujas del macartismo y la aplicación del código Hays que atentó contra la libertad de expresión, en aquellos años, sumergen a los ejes temáticos del filme en el ridículo y en la más rancia hipocresía. Ni siquiera la pequeña posición autocrítica cuando plantea, a lo interno del guión, vender una imagen de las bondades del sistema judicial norteamericano, salva a la película del panfleto político intrascendente; en lo más mínimo nos hace olvidar los consuetudinarios desmanes en las políticas interior y exterior de la potencia imperial: irrespeto al debido proceso cuando se trata de las minorías étnicas y flagrantes violaciones del derecho internacional. Tampoco sirve como salvavidas el idealismo profesional del abogadonegociador Donovan, el cual luce, por la misma naturaleza de su profesión, forzado en extremo. Es una lástima que la impecable técnica del filme no esté a la altura de su contenido, lo que se traduce en un desperdicio de recursos. Rodolfo Castillo @magodemontreuil

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Una excursión a Ruanda Por Clarissa Pinkola Estés (Estados Unidos)

POR INDIRA CARPIO @indira_carpio

sin título Por Blas Perozo Naveda (Venezuela)

Se pierde Ya. La casa entretanto Se construye en su hierba Y un brebaje sagrado Y las lanas antiguas Fabrican las piedras El barro negro Un coro sefardí Que todos llevamos Y cargamos en secreto O sin saberlo Un canto de ajonjolí Un fuste.

Los hambrientos Por Diana Moncada (Venezuela)

LIBRO

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Eisenhower por la carretera a bordo de su jeep, descubrieron que las nativas se habían puesto las faldas, pero, como las blusas no les gustaban, las habían dejado en casa, por lo cual todas ellas se apretujaban a ambos lados de la carretera vestidas con las faldas pero con los pechos al aire y sin ninguna otra prenda ni el menor asomo de ropa interior. Al gobernador por poco le da un ataque de apoplejía al enterarse, por lo que mandó llamar al jefe de la tribu, el cual le aseguró que la jefa de la tribu había hablado con él y le había asegurado a su vez que las mujeres habían accedido a cubrirse los pechos cuando pasara el general. —¿Estás seguro? —rugió el gobernador. —Estoy seguro. Muy, muy seguro —contestó el jefe de la tribu. Bueno pues, ya no quedaba tiempo para discutir y solo cabe imaginar la reacción del general Eisenhower cuando su jeep avanzó traqueteando por la carretera y, una tras otra, las mujeres se fueron levantando graciosamente la parte delantera de la holgada falda para taparse los pechos con ella.

Temas de literatura indígena Por Esteban Emilio Mosonyi Colección Delta, Fondo Editorial Fundarte El verbo de nuestras raíces indígenas habita el tiempo, los días en que el gran río se abrió para recibir al sebucán que se convirtió en pez caribe, el manare en raya, la estera en babilla, porque nuestra historia se transformó en el agua.

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

CUENTO

Avanzamos como las nubes en su [terrible poética del desgarramiento Somos el residuo que arrastra entre sus [manos el desfigurado gesto de ser Hemos heredado la desolada curva de [la cacería y henos aquí hambrientos llenos de lodo y rabia esperando de los espejos la esquiva mirada en la que nacimos [por primera vez.

El general Eisenhower tenía que efectuar una visita a sus tropas de Ruanda. (Hubiera podido ser Borneo. Hubiera podido ser el general MacArthur. Los nombres significaban muy poco para mí por aquel entonces). El gobernador quería que todas las nativas se alinearan al borde de la carretera de tierra y saludaran y vitorearan a Eisenhower cuando este pasara en su jeep. El único problema era que las nativas solo llevaban encima un collar de cuentas y, a veces, un pequeño cinturón de cuero. No, no, eso no podía ser de ninguna manera. El gobernador mandó llamar al jefe de la tribu y le expuso su apurada situación. —No se preocupe —le dijo el jefe de la tribu. Si el gobernador le pudiera proporcionar varias docenas de faldas y blusas, él se encargaría de que las mujeres se las pusieran en ocasión de aquel trascendental acontecimiento. El gobernador y los misioneros de la zona consiguieron proporcionárselas. Sin embargo, el día del gran desfile, pocos minutos antes del paso de


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NOVELA

Historias de la calle Lincoln (Xv) DE CARLOS NOGUERA

/ Ilustraciones jean piero sánchez

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

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Viene del número anterior

—Ya casi es un atractivo turístico —dije para hacerle honor a la industria.

—Digo la visión de cualquier divinidad —y yo entré en órbita—. Tal vez deberíamos cubrirla para evitar el purgatorio. ¿No se te ocurre nada macabro, pequeña?

bata de Graciela que comienza a escurrírsele por su cuerpo gracias a Guaica, y Graciela que lucha, no, no, qué loco, bicho, diciendo, imagínense con qué griticos, y yo que ayudo a la tarea sosteniendo a la niña y la niña que chilla gozosa y nosotros excitados, claro, pero activos, y el sostén de la niña que sale al aire como banderín deportivo y la niña que se cubre con sus dos manitas, con la concavidad rosada de sus dos manitas, y como puede trata de subir, no sé con qué manos, pienso yo que trata de subirse la bata por simple coquetería seguro que piensa Guaica mientras, éstos sí que pueden soportarse, grita Guaica, y yo que ayudo y Graciela que uno pensaría que ayuda, riéndose como una loca, retorciéndose feliz como desesperada, semidesnuda y los tres que rodamos ya inevitablemente, declive abajo, ladera abajo sobre la grama, entrelazados los cuerpos indescifrables, rodamos jardín abajo, acostados, hasta el límite en que ya no hay tierra ni jardín ni grama y los tres que tratamos de frenarnos con todos los brazos y todas las piernas en acción y el laberinto de cuerpos que se detiene justo en la orilla, y los tres que estamos un segundo después, de pie en el límite donde comienza el definitivo declive de cemento, en la canalización del río, y Guaica que convence a Graciela, es un gesto estético, pequeña, para que nos deje admirar su torso desnudo debido a que, como ya todos saben, el de María Lionza es el aleph, ya se sabe que dijo, y no se puede admirar directamente a los ojos sin enloquecer, como si los senos tuvieran cara, de modo que qué iba a hacer la niña, y de allí estábamos los dos pajes a cada lado y la jipita semidesnuda en medio de nosotros, en la ribera misma del río, al lado de la vía, aunque no por mucho tiempo, porque ya conocemos las implicaciones olfativas del Guaire, de manera que

Y Graciela que queda en blanco sin saber qué contestar, tan fuera de base, tan sorprendida ella, y a Guaica que no le queda otro recurso que, manos a la obra, dice, y la polícroma

—Lo habrán canalizado, pero el olor a mierda le sigue intacto —dictaminó Guaica, casi con De un salto, ayudado por Ernesto, escaló el tristeza, sosteniendo, pendulando, en su mano pedestal, haciendo flamear el sostén como bandera. izquierda el sostén de Gracielita.

—Realmente es bello —dijo Graciela, persuadiéndonos, de una vez por todas, de que para ella sólo bello e increíble eran adjetivos. —Son una metáfora —anoté, sin estar muy convencido y sin saber muy bien por qué. —¿Ves, pequeña? Ernesto ha dado en el clavo, aunque sólo parcialmente. En realidad esos senos son —y aquí moduló la voz como poniéndole resonador— la metáfora de todas las metáforas, el significante que remite a todos los significados, con ellos la confusión de Babel sería totalmente impensable porque son el lenguaje de una sola palabra, el sitio donde convergen todas las cosas que han sido y serán sobre la Tierra, es decir: el aleph. No podremos mantenernos indefinidamente concentrados, mirándolos, ya se sabe que nadie soporta por mucho tiempo la visión directa del Uno. Yo también me había quedado fijo porque estábamos demasiado bien los tres, con todo ese cielo encima, inconmesurable y vacuo en el fondo, y apenas el sonido, atrás en algún lugar de la cabeza, el sonido de los Suinguel Singuers y el contrapunto de las voces emergiendo, apagado, desde el Mustang, cuando Guaica: —Nadie lo soporta por mucho tiempo —fue que dijo. —¿Qué? —pregunté desde el otro lado de Graciela, creyendo no sé cómo que podía referirse al problema del cuerpecito.

Edición Número Ciento ciento cincuenta y cinco. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 15 de noviembre de 2015.

—De todas maneras fue una rodada feliz —dijo Guaica, volviéndose hacia Graciela, que todavía estaba enrollada como un ciempiés, riéndose a todo dar, mientras trataba de organizar sus ropas, para impedir un escándalo en la vía. —Déjame acomodarme esto. Nunca falta un maldito asomado —advirtió, tratando de calcular la distancia que nos separaba de la autopista, más acá de la escultura—. Sí, fue una rodada feliz. —Y sintomática —dijo Guaica—. Observen que hemos caído desde la divinidad a la cloaca —señalando doctoralmente, sucesivamente, a María Lionza y a los excrementos invisibles que flotarían en el río—. Procedemos del seno y culminamos en la mierda, origen y destino, amiguitos. Y los tres nos quedamos mirando al río, dijera que con nostalgia, si el sustantivo no luciera inadecuado y hasta escandaloso, tomando en cuenta que se trataba más de una cloaca que de un río. Resultaba, resulta cómico mirarlos a los tres, subiendo casi arrastrándose para escalar el desnivel del terreno, bueyes cansados después de la faena, Ernesto a la cabeza, avanzando y retrocediendo como bailando la chichamaya y más atrás Graciela, apoyada contra el brazo de Guaica, tratando de recostar su cabeza, y Guaica, sosteniéndola a duras penas, arrastrando del otro lado la punta del sostén que aún pendula colgando de su mano derecha. —Ahora cubriremos el sagrario —dijo Guaica al pie de la escultura, una vez que terminaron el ascenso e invirtieron la ruta a través de la autopista.


29 tras descendía desde lo alto de los cinco metros, ejecutando incómodas cabriolas. Había rodeado el volumen del cuerpo y se había sentado a caballo detrás de la escultura, para ajustar los ganchos del sostén, ahora debía repetir la operación, esta vez en sentido in—No, mi sostén no —chilló Gracielita, dándo- verso, para garantizarse, sobre el cuello de la se cuenta finalmente de lo que Guaica intenta- danta, un apoyo conveniente antes de deslizarse al pedestal. ba hacer. —Ya no causarás más problemas, camarada —dijo tratando de dialogar cara a cara con María Lionza, y apoyándose en el cuello de la danta se incorporó hasta quedar a caballo en el lomo del animal, pero de frente a la escultura.

—Calla, amiguita, debo concluir mi labor —tratando de hacer coincidir las copas del sostén con los escandalosos pezones—. Además tú no deberías usar estos artefactos, te sobran, me has decepcionado.

—Te sale gimnasio, loquito —le dije. Y me di cuenta que aquella pequeña excursión representaba una verdadera hazaña para los músculos de Guaica, bastante flojos gracias al oficio.

La maniobra resultaba complicada y grotesca y ya se veía que ni haciendo trampa lograría ensamblar la prenda con las enormes masas de la estatua.

—Ya sabes: mens sana, en suspenso, el corpore es un decorado marginal, mientras funcione discretamente. Claro, si me mides con tu estándar —y jadeaba, recuperando el aliento— debo parecerte un enclenque despojo.

—Indudablemente éstos son el arquetipo platónico de los senos —dijo Guaica forcejeando Saltó desde el tope del pedestal hasta la grama. inútilmente con el sostén—. Ante éstos los tu- El impulso lo hizo rodar algunos metros sobre yos no son más que vulgares y fallidas aproxi- el jardín. maciones, mi niña. —Ni tanto —le dije—. Me siento en forma, —Lo que ya es bastante —protestó Graciela, pero, por ejemplo, ese salto que diste, yo ni de orgullosa de sus medidas, aunque después de vaina lo repito, si me lanzo desde allí, mañana la rodada, jardín abajo, cualquier explicación mismo la humanidad tiene un nuevo cojo —y le señalé mi vieja pierna lesionada. adicional resultaba totalmente redundante. —Bien, compañeros, ahora no causará más problemas —discurseó Guaica desde lo alto de la danta, mostrándonos, con un gesto que recordaba el de los gobernadores de estado cuando develan un busto, las consecuencias finales de su agitada peregrinación sobre la estatua.

Vistos los senos de Graciela, liberado el sostén, cubierto el busto de la estatua, nada teníamos que hacer en aquel semiparquecito, como no fuera sentarnos a contemplar la noche o esperar la muerte. Aquello ya lo había hecho y esto no me seducía ni un poquitico así, de modo que planteé:

Por supuesto: a la prenda de Gracielita le faltaron cuando menos diez puntos para quedarle a la medida al busto de María Lionza, más que un sostén parecía un pañuelito envolviendo grotescamente las masas, dando la vuelta alrededor del torso completo hasta ajustar con dificultad sobre la imaginaria columna vertebral en la inmensa espalda, gracias al estiramiento desmesurado de las frágiles gomas, cuyo vencimiento era una tragedia próxima, dada por segura de antemano.

—¿Qué tal si nos vamos? Graciela era la del suiche, claro, pero ya se sabe que si bien ella prendía el carro, era Guaica el que la prendía a ella, de manera que busqué la mirada de Guaica. —Okey, a la carga, aunque el movimiento sea sólo una ilusión —dijo Guaica, contactando la señita de vamos, con la cabeza, que yo le había hecho; quiero decir: la señita que yo le había hecho con la cabeza.

—El sagrario está oculto; la divinidad, velada; ya la podremos mirar sin riesgos, sin contor- Graciela recogía sus collares con una minusiones, sin locuras —clausuró Guaica, mien- cia que nos hubiera hecho llorar si hubiéseCaracas, 15 de noviembre de 2015.

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rumbo a Bello Monte y un poco abusando, un poco picando goma, los corceles respondiendo a la voz del ama con una violencia tal que se me torció el cuello hacia atrás en el preciso momento en que yo —sentimental al fin, me viene por la línea de los López que son tan bolsas todos— lanzaba mi última mirada de despedida a la erguida princesa de Sorte, serena y Por ahora, sin embargo, no hay senti- briosa sobre el pedestal. miento ajeno, marginal, que matice esta labor de recolección, de manera que aquí Gracielita miró el reloj del tablero y se exestá ya, ciertamente, la jipita, acercándo- cusó torpemente con Guaica, de nuevo, no se más o menos sinuosa, atrapando en su sé si por lo enamorada que estaba o por lo boca alguna vuelta del infinito enredijo estúpida que era, o por las dos cosas. que adorna su cuello. —Oh, nada grave, pequeña —dijo Guai—Ya era hora. Según mi horario tenemos ca, suspendiendo los lentes a la altura de retraso, pequeña, así que apresura tu paso los ojos, a distancia— ese plan vital minuy azota con vigor estos corceles, si no cioso se cayó por el hueco cierta vez que quieres que me enoje y todo este hechizo se me ocurrió repasarlo mientras cagaba se rompa y vuelva a mi antigua y dolo- en el excusado de la casa, en el solar del rosa condición de ceniciento sin siquiera fondo. Nunca comprendí por qué el Miuna zapatilla de cristal que dejarte como nisterio de Sanidad no incluyó los atriles recuerdo de esta noche —recitó Guaica, en su plan de profilaxia para el interior del país, tal vez allí residía el origen de mi casi sin respirar. arrechera morbosa hacia la burocracia: —Ay babito, berdóname, no sabía que siempre despreciando los pequeños detatenías horario —dijo Graciela, como un lles; y ya ven, por culpa de un olvidito mi vidita se fue volando, hueco abajo, en un conejito hablando con acento turco. papel, volando como una mariposa hasta —Bara que sebas tengo mi vida blanifica- posarse en una vasta pradera de mierda, da desde el brimer chillido hasta la tum- mientras mis pequeños ojos infantiles, ba, y no bienso desviarme ni un ábice — pueblerinos, la contemplaban, lánguidos desde arriba, con una tristeza tan pero turqueó Guaica. tan honda que hasta ahora me dura, por Graciela se dio cuenta de las b y se sacó el eso soy así, tan pero tan triste, amiguitos. collarcito de la boca, toda sonreidita ella, Fue Graciela la que me rescató de la cartoda azuquita. cajada, con un: —¡Bicho! No me había dado cuenta. ¿Ahora sí? —y arrancamos, después se sa- —¡Ay, qué máximo! —saltando sobre la brá que rumbo a Bello Monte, de manera esterilla, como una ardillita de Uoldisni que mejor lo digo de una vez: arrancamos cuando consigue una avellana. mos sospechado el cruel destino que les aguardaba doce horas más tarde, antes —¿o después?— de entrar a la cuna, la cascada de cuentas, pero ésta, como toda reseña del futuro, no es para ustedes más que una cábala, aunque haya ocurrido, aunque ocurrirá en cualquier recodo del tiempo.

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Caracas, 15 de noviembre de 2015.

—¿Qué coño es lo que es máximo, pequeña? —dijo Guaica, mientras yo repasaba, inútilmente, mi diccionario de adjetivos: ¿máximo? —Que hayas conocido los excusados, papi. Durísimo. Guaica me miró por encima del espaldar del asiento, mientras sostenía los lentes con la mano derecha, doctoralmente. —Les tengo un gran cariño, si supieras, a pesar de que hayan arruinado mi vida, debe ser cierta forma de masoquismo. ¿Qué es lo que te gusta? —Ay, no sé. Me parecen así como más naturales, más libres, más campestres, deben ser chéveres. —Sí, muy campestre, hasta que agarras una campestre enfermedad en el recto —dijo Guaica—. La verdad es, preciosa, que no me gustaría ver tu manzanita posterior sometida al embate de esos asquerosos ejércitos de amibas y parásitos. Te lo digo yo que tuve que calármela completita, ahora me llevo un uatercló portátil cada vez que retorno a mi pueblo natal, la nostalgia y el aseo vencen a la comodidad. Así es que me gusto: puntual y ordenado. Sobre todo puntual, pequeña, de modo que azote con los corceles. Gracielita le dio más gasolina al Ford y yo sentí un gran alivio con aquella brisa soplando sobre mi cara. Arriba veía un cielo limpio, inmóvil a pesar de nuestro loco deslizamiento sobre las elevadas vías del Pulpo. Guaica pisó el cuarto botón del reproductor y los Suinguel Singuers exhalaron el último eco del contrapunto. Próxima semana: Capítulo 10


POR NATHALI GÓMEZ @laespergesia Ilustración: L. "Razor" Balza

Minimanual para ser empresario venezolano Este minimanual se viste de pompa y levita porque le enseñaremos a ser empresario venezolano en tiempos de guerra económica. Usted debe verse distinguido, por sobre todo. Recuerde que las apariencias engañan tanto como usted. 1. Agradézcale cada mañana a “Santa Renta Petrolera”, sin ella usted sería un don nadie.

Imaginario oh, por dios, otra vez los de la MUD

2. Tenga un apellido importante, y si es ambicioso, mejor tenga dos. 3. Piense que si Chávez no hubiera llegado, ya tendría un pozo petrolero en Arkansas. 4. Diga que es apolítico y que solo quiere el bienestar de su país. Demuéstrelo con ejemplos: sea antichavista y disminuya la producción de productos esenciales para ver qué pasa. 5. Hable mal de su país dentro y fuera de él. Por culpa de él usted es rico. 6. Diga que la política le da asco, pero oculte que sus abuelos, padres, hermanos, tíos y primos tuvieron un cargo importante en la Cuarta. 7. Llénese de pueblo: sépase el nombre de su chofer. 8. Diga que la Revolución no ha hecho nada por el país. Que la “señora que lo ayuda en la casa” sepa leer y que sus hijos tengan una Canaimita no es un asunto que le importe a alguien como usted.

están de campaña en la parroquia

9. Sueñe con irse demasiado y piense que su parasitismo rentista lo va a acompañar a cualquier parte del mundo adonde vaya. 10. Desprecie y odie. Es lo único que hace de corazón.

¿

Si Venezuela está al borde del cataclismo económico, ¿cómo es que acaba de pagar $13.500 millones de deuda externa?

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¿

pregunta de la semana

TUIT DE

Caracas, 15 de noviembre de 2015.




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