11-12-2016 by Revista_Epale

contenido

Consejo Editorial

Mercedes Chacín

2016: el año de los ultimátums

Mancheta y demás

Editor Jefe

Jorge Rodríguez Gómez Felipe Saldivia Gustavo Borges Revilla

— perfil

Directora

Carlos Cova

DirecTORa de Arte

Edarlys Rodríguez

— galería

COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA

Jesús Castillo

Asesor Editorial

Reinaldo González

Coordinadora 2.0

Yanira Albornoz

Web y redeS

Kay Yam Hung Gaizka Orta

Diseñadores

Lisbeth Montell Carlos Hernández Vicmairis Aguilera

Ilustrador FotógrafoS

CORRECTOR

Rodolfo Castillo

LOGÍSTICA

Idania Bracamonte Daniela Fernández Edi Cordero

Colaboran en esta edición

Clodovaldo Hernández, Ángel Méndez, Rummie Quintero, Reinaldo Iturriza, Freddy Fernández, Miguel Posani, Indira Carpio, Jessica Mena, L. “Razor” Balza, Henry Rojas y Neptalí Segovia. Archivo Ciudad CCS. Fotografía de portada: Jesús Castillo.

Impresión

— crónicas oficinescas

Isa La Roca

Sectarismo navideño

Las luces de la ciudad

@epaleccs

— música

— foto-reportaje

Mi universidad amada

El mito de la felicidad

Sin sombra no hay luz

Cine y oralidad

— libremente

— crítica y media

Pichón de Oro 2016

— gastronomía

— poesía o nada

— crucicultura

Crucigrama

— el rumor de las bolas

Complejo Editorial Alfredo Maneiro Imprenta Nacional.

Una publicación de la

— miradas

Michael Mata Enrique Hernández

Comercialización y Ventas: 0212-8080323/0426-5112114 Distribución: 0212-8085843 Depósito Legal: pp201202dc4166

— mitos “Guacaipuro”

— sexodiversidad

Alfredo Rajoy

www.epaleccs.info epale.ciudadccs@gmail.com

Doce casi portadas

— filo y borde

Redacción

Nathali Gómez Moscoso Gustavo Mérida Ander De Tejada Marlon Zambrano

— EL MENJURJE

@epaleccs

— la bitácora de amón-ra

Revista Gratuita Circula los domingos con el Diario Ciudad CCS búscala de lunes a viernes en nuestra sede: esq. san jacinto, edif. gradillas “c”, piso 1, al lado de la taquilla única de servicios municipales y en la librería-Bar el techo de la ballena, edif. Gradillas “A”, planta Baja, Bulevar del Eterno Retorno

Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar”, 2014 y 2015. Premio Municipal de Periodismo “Guillermo García Ponce”, 2014.

PERFIL

2016: El año de los ultimátums El bisiesto año 2016 fue de terror en materia económica, en especial para los pobres y la clase media. En el campo político, ha durado más de la cuenta porque fue el fruto de un parto prematuro. Ha sido un tiempo de sonoras amenazas que luego no se cumplieron. En eso seguimos. Mientras en la política afloró con furia la misoginia opositora, en el plano deportivo 2016 fue un año de grandes mujeres POR Clodovaldo Hernández • clodoher@yahoo.com / ILUSTRACIóN ALFREDO RAJOY

Como año bisiesto, es natural que 2016 termine siendo un poquito más largo de lo normal. Ahora bien, si lo vemos en el plano político, no tuvo un día, sino casi un mes adicional: comenzó el 6 de diciembre de 2015. Y para la Revolución, ese parto prematuro no fue nada bueno.

clima de confrontación con su anuncio de que en seis meses, ese poder legislativo habría liquidado al gobierno de Nicolás Maduro. Ese gesto de amenazar, de dar ultimátums, de decir “cuento tres y llevo una”, ha sido uno de los más recurrentes de este 2016. A estas alturas, cuando ya el año está por irse, seguimos en lo mismo.

El punto de partida de esa especie de prólogo fue la victoria de la oposición en las elecciones parlamentarias, un hecho que adelantó la llegada del año 2016 propiamente dicho, el del calendario gregoriano, y lo tiñó íntegramente con una tinta amarga. La nueva correlación de fuerzas legislativas ha traído consigo discusiones bizantinas, peleas necias, conductas misóginas, leyes abiertamente destinadas a restaurar el neoliberalismo y recurrentes tentativas de malponer a Venezuela en escenarios internacionales. ¡Vaya cosecha!

Veterano de la pugna política, Ramos Allup aprovechó su momento para resucitar y ponerse de una vez en la lista de los presidenciables opositores, desempolvando aquella cínica idea de que con los adecos se vivía mejor. Consciente del peso simbólico que tienen para los revolucionarios las figuras del Libertador Simón Bolívar y del comandante Hugo Chávez, arremetió contra ambos referentes. La escena del burdo diputado ordenando sacar los retratos de Bolívar y Chávez de la sede del Parlamento fue el preludio de lo que sería un año de desacuerdos y rencillas. De allí en adelante, la Asamblea, convertida de nuevo en Congreso de la República (al menos en el imaginario del escualidismo) salió a buscarle pleito al resto de los poderes, a través de la lengua viperina de Ramos Allup, quien se ensañó particularmente con las mujeres que ocupan altas responsabilidades.

El triunfo más contundente del antichavismo en 18 años desató toda clase de ambiciones en las entrañas de ese sector político, desde las más racionales hasta las más desquiciadas, con predominio de las segundas, al menos hasta el pasado noviembre, cuando se produjo la gran sorpresa de la temporada: el inicio del proceso de diálogo entre el Gobierno y la oposición. De aquellos primeros días (los del prefacio decembrino y los de enero) quedaron grabados en la memoria los gestos triunfalistas, arrogantes, sobrados de ciertos personajes que entendieron el 6D no como una renovación del Poder Legislativo, sino como una autorización para la soñada operación de caída y mesa limpia. En el rol de los ganadores atorrantes, el lugar más destacado se lo llevó desde muy temprano el líder acciondemocratista Henry Ramos Allup. Electo presidente de la nueva Asamblea Nacional, Ramos Allup marcó el

La temprana proyección de Ramos Allup como vengador del antichavismo desató los celos y recelos de los otros líderes opositores, de modo que a partir de enero se presentó entre ellos una curiosa competencia en la que cada uno de los aspirantes intentó presentar su propia fórmula para sacar a Maduro de la presidencia. Llovieron entonces las propuestas más variadas: referendo, constituyente, declaratoria de insania, juicio sobre la nacionalidad, juicio por abandono del cargo, desobediencia civil y aplicación de la Carta Democrática de la OEA estuvieron entre las propuestas.

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

04 Los no hechos del año

Curiosamente, en aquellos mismos días de enero ocurrió un hecho trascendental en la historia del año político, aunque sería más preciso decir que el hecho no ocurrió, sino más bien dejó de ocurrir: la Mesa de la Unidad Democrática no hizo las gestiones necesarias a partir del 10 de enero para activar el referendo revocatorio. Ese día nacía el derecho a tramitar la consulta, pues se cumplían tres años, la mitad exacta, del período constitucional para el que, originalmente, fue electo el comandante Chávez, pero la coalición opositora no inició entonces el procedimiento constitucional. Sobre las causas de ese comportamiento hay varias conjeturas: una dice que, en realidad, no querían ir a un proceso revocatorio y por ello incurrieron adrede en la tardanza; otra señala que, borrachos de victoria, estaban seguros de que lograrían apoderarse del Gobierno sin necesidad de consultas populares.

También han dado algunos frutos el incipiente aparato productivo comunal, las pequeñas iniciativas de la gente para proponer una opción ante los opulentos monopolios de la burguesía nacional y transnacional. Son apenas embriones de algo que puede que llegue a ser y puede que no —

En fin, por la razón que sea, la MUD terminó recogiendo firmas en abril y aunque aquel primer paso era una tarea fácil para una coalición que venía de una contundente demostración electoral (solo debían reunir 1% del padrón electoral), algunos de sus líderes no pu- se han sumado a la cadena, esa cuyo último eslabón son las clases dieron resistir la tentación de inflar las cifras, recurriendo para ello a populares y medias. viejas tácticas de la época en la que acta mataba voto. También ha sido —¿qué duda cabe?— un tiempo de resistencia Entre los no hechos del año hay que anotar las ya referidas amenazas popular. Estoicamente, el pueblo ha resistido las humillaciones en y ultimátums que no se han concretado. Los seis meses de Ramos las colas y ha ignorado los llamados de quienes procuran generar el Allup se fueron velozmente y al procaz parlamentario no le quedó caos. Poco a poco, se ha consolidado la alternativa del Comité Local otra opción que una muy socorrida en el campo opositor: decir que de Abastecimiento y Producción, no exenta de errores y de brotes él nunca había dicho lo que dijo. de corrupción, pero que ha salvado literalmente la vida de mucha gente. También han dado algunos frutos el incipiente aparato proEntre otros ultimátums dignos de recordar están los del 1º de sep- ductivo comunal, las pequeñas iniciativas de la gente para proponer tiembre (la Toma de Caracas) y 26 de octubre (la Toma de Venezuela). una opción ante los opulentos monopolios de la burguesía nacional Mientras se prepara esta edición de Épale CCS corre otro de esos pla- y transnacional. Son apenas embriones de algo que puede que llegue zos finales, el del 6 de diciembre. “O hacen lo que nosotros queremos a ser y puede que no. Si algún día cristalizan esos logros, alguien o nos levantamos de la mesa de diálogo y nos vamos a la calle”, dicen deberá decir que el hervidero de una crisis terrible, como la de 2016, ahora. Y hasta los propios militantes fanáticos oyen la frase y bostezan. tuvo algo que ver en su gestación.

Un año de mujeres

Año de guerra y de resistencia

En el campo económico, 2016 ha sido un año de terror para la mayor parte de la gente, en especial para los trabajadores y los pequeños y medianos productores. Se redoblaron la escasez, la especulación y las colas. Desde aquellos días de enero, subrayados por el triunfalismo opositor, hasta los actuales, el poder adquisitivo de la ciudadanía ha sido pisoteado cientos de veces, a pesar de los esfuerzos del Ejecutivo por defenderlo. Los que se negaron durante años a aceptar la tesis de la guerra económica, tendrán que reconocer luego de este 2016 que la situación se parece mucho a una confrontación bélica. Los ingredientes principales son crueldad, inclemencia, traición y sálvese quien pueda. Bajo el lema de la necesidad de supervivencia, muchos esquilman a sus propios vecinos. “Guerra es guerra”, racionalizan. Redes mafiosas han florecido al amparo de la anormalidad imperante. Muchos de los que tendrían que combatir las sinvergüenzuras Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Este pedazo de vida al que llamamos 2016 daría mucho más de qué hablar si se analizaran los hechos (y los no hechos) de los campos internacional, artístico, científico-tecnológico, los terremotos, los atentados terroristas, las elecciones y los golpes de Estado. No hay manera de abarcar tanto. Reservemos estas últimas líneas del año para un aspecto grato del mundo: el deporte. Para Venezuela, 2016 fue un año más de éxitos en el beisbol. Nuestros peloteros, esta vez encabezados por el diminuto gigante José Altuve, regresaron inflados de premios. También fue un año espantoso para la selección masculina de fútbol. Por fortuna, las chicas de la Vinotinto sub-17 defendieron la honra del balompié criollo y se metieron en el cuarto lugar del mundial de la especialidad. En los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, aparte del boxeador Yoel Finol (medallista de bronce en peso mosca), dos mujeres sacaron la cara por Venezuela: la ciclista Stefany Hernández (bronce en BMX) y la atleta Yulimar Rojas (plata en salto triple). ¡Qué ironía! Mientras Ramos Allup y otros líderes opositores se entrenaban en la misoginia de alta competencia, 2016 fue —deportivamente— un año de grandes mujeres.

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

el menjurJe

suena ccs vuelve El Suena Caracas 2016 reinició su programación con un concierto en homenaje al líder revolucionario Fidel Castro. Esta fiesta de la música, que se extenderá hasta el sábado 17 de diciembre, llevará a las tarimas caraqueñas la salsa, el merengue, los ritmos venezolanos, el rock, el reggae y el reguetón.

Bailando al son « Quienes pasaron por la plaza Diego Ibarra y se preguntaron por qué la aguja y la fuente estaban encendidas con luz verde, les contamos que se hizo en homenaje a los jugadores del equipo brasileño Chapecoense, cuyos jugadores fallecieron luego de que el avión donde viajaban se estrellara en Medellín. ¡Salud, eternos campeones!

Ahora vamos con pu-bli-ci-dad: La feria navideña de El Cuchitril, al lado de Coppelia.

Que nadie nunca nos diga nada.

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

GALERÍA

12 CASI portadas

Todos los dioses, todos.

Inclusión diversa.

Solo para feos.

El Mukumbarí.

Gloria emergente.

Los primeros pasos.

foto MICHAEL MATA

foto enrique hernández

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

foto michael mata

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

foto nathaly sayago

foto michael mata

07 en el balance de fin de año recuperamos las imágenes descartadas al cierre de distintas ediciones que también merecieron ser fachada de Épale CCs

Protege al ciclismo. foto michael mata

Decisión indeleble.

foto enrique hernández

Poesía o nada. foto michael mata

Caracas paso a paso. foto enrique hernández

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

La patria mama. foto michael mata

Corazón valiente. foto michael mata

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

MITOS

“Guacaipuro” POR reinaldo gonzález d. @odlanierØØ ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

Los Teques no tenía Plaza Bolívar. Tenía Plaza Guaicaipuro, por designio de sus moradores. Lo que para algunos patriotas, católicos o no, era inaceptable: la imagen del más recio de los caribes y no la del Libertador frente a la Catedral San Felipe Neri, se resolvió en 1927 moviendo al “guapotori” de “El Pueblo” a “El Llano”, de acuerdo a la sagrada nomenclatura tequeña (quienes han intentado modificarla o siquiera obviarla, han perecido “en extrañas circunstancias”). Los reordenadores urbanos no fueron tan drásticos con la calle Guaicaipuro, un camino más o menos nivelado a lo largo de cuatro cuadras tradicionales que luego se aparta de la cuadrícula española para amoldarse a las sinuosidades de la montaña. Todavía comienza en la antigua residencia del doctor Matute, apreciado médico general; pasa por donde vivió el caballeroso Victorino Santaella (epónimo del principal hospital de la ciudad); continúa por el colegio Ave María hacia las Cuatro Esquinas (ángulos que surgen del cruce con la calle Ribas); saluda sin lástima ni resentimientos al cine Canaima (relegado a oficina electoral y otras especies), a la Catedral (reducida por el terremoto de 1967) y a la estatua ecuestre de Bolívar (que primero fue pedestre); avanza hacia la esquina El Dato (donde los chismes se pasaban con pan cubanito y café de la Panadería Moderna, en lugar de tequeños y pastelitos de Pasapalos El Dato), traspasa las honduras del sector Punta Brava y los picos de Residencias Miraflores hasta fundirse, acertadamente, con la plaza La India. El nombre de Guaicaipuro pesa, aunque esté mal escrito según los documentos hallados por el hermano jesuita Nectario María en el Archivo General de Indias, en Sevilla, donde aparece más de 150 veces nombrado como “Guacaipuro”. Léase bien: sin la primera “i”. Es uno de los tantos desaguisados atribuidos al español Oviedo y Baños, más dado a la escritura fantástica y a la búsqueda de sonoridad que al rigor historiográfico. Los manuscritos dan constancia de que el “indio principal” no vivió en los linderos de la “moderna” ciudad Edición Número Docientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

de Los Teques, sino en Suruapay, lugar enclavado entre los actuales San Diego y San José, a las márgenes de la quebrada Paracotos (antes Paragoto). Tuvo un hijo mayor de nombre Baruta y dos hijas no identificadas; seis hermanos (Epicuro [Blas], Anariguaima, Amesaguar, Apequetene, Campocagua y Cuamacane); dos hermanas (Caycape y Tiaora); al menos seis sobrinos (Taguiarere, Cariguacane, Tacariguane, Caracuriguata [Juanico], Teguarere y Pategueime, todos hijos de Apequetene) y un nieto (Auyareguata, gracias a una de sus hijas). Su presunta esposa, Urquía, a quien amó con fidelidad desde los tempranísimos 17 años, solo aparece en el libro Los caciques heroicos, publicado en francés, bajo el seudónimo del abate Jean Moulin, por el escritor venezolano Rafael Bolívar Coronado, un cuento desestimado por dos autoridades en la materia: Aníbal Carrasco, quien impulsa La Ruta de Maracapana —buena forma de andar y desandar los relieves por donde transitó la nación Teque— desde el Centro Huellas Karaíve, en Laguneta de la Montaña; y Saúl Rivas-Rivas, uno de los promotores del traslado de los restos simbólicos de Guaicaipuro al Panteón Nacional el 8 de diciembre de 2001, 471 después de su supuesto nacimiento (1530). Guaicaipuro es también el municipio mirandino conformado por las parroquias Los Teques, Paracotos, San Pedro, Cecilio Acosta, El Jarillo, Tácata y Altagracia de la Montaña; el estadio donde Oswaldo Guillén aprendió casi todo lo que sabe de la mano de Ernesto Aparicio, hermano de Luis “El Grande”; un teatro, y luego cine, degradado a templo evangélico; el edificio más antiguo de la capital mirandina, erigido muy cerca de la esquina La Lucha; el motivo de la figura de bronce que vigila la entrada de Los Teques desde el cerro Pan de Azúcar, El Indio, esculpida por el artista plástico Benito Chapellín; y una cátedra de debate al aire libre que se realiza cada dos semanas en la plaza Danilo Anderson. También es inspiración del semanario Somos Guaicaipuro, que para quedar bien con todos, sustituyó la primera “i” por la silueta de la estatua que se levanta en la Plaza —por supuesto— Guaicaipuro.

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

CRÓNICAS OFICINESCAS

Silencio POR REINALDO ITURRIZA @REINALDOI ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

El tipo tenía tiempo persiguiéndome. Al principio, al cruzarnos en eventos públicos, no pasábamos de sostener conversaciones de ocasión: breves e intrascendentes. Luego comenzó a dejarme mensajes en el teléfono, casi siempre solicitándome una reunión. Si dejaba de responderle, me escribía entonces lamentando mi falta de atención: “No quieres ser mi amigo”. Hasta me felicitó el día de mi cumpleaños.

Acto seguido, me habló de los negocios que manejaba, los puso al servicio del Ministerio y dejó deslizar, como quien no quiere la cosa, con la más absoluta naturalidad, la sugerencia: “Tú te quedas con tu comisión, diez, veinte por ciento”.

Se hizo el silencio. En algún punto se hizo costumbre, incluso, que se apareciera de improvisto en actividades organizadas por el Ministerio: llegaba, Continuó hablando, pero no pude escuchar nada más. Tal vez procuraba estar presente y a tiro de cámara en el momento de las hice algún tímido ademán en señal de rechazo, tal vez lo intedeclaraciones televisivas, y se marchaba inmediatamente después. rrumpí, no recuerdo. Sentí vergüenza ajena. Lo traté con alguna condescendencia. Lo que sí recuerdo es no haber estado sentado Con todo, el tipo me caía bien. O mejor dicho, le daba el beneficio en aquel lugar mucho tiempo más. de la duda. Su proceder era dudoso, pero no tenía las mañas de los politiqueros de oficio, a quienes rechazo de plano. Su desfachatez No sé qué es de su vida, pero alguien me contó que está al frente me producía algo parecido a la curiosidad. Sabía que en algún mo- de alguna institución pública. mento despejaría la incógnita. No puedo dar fe de ello y no quise comprobarlo. El momento llegó: al término de alguna actividad nos reunimos. Me agradeció de entrada, celebró la ocasión, y sin que pudiera Tú sabes: la gente habla mucho. Habla, habla y habla y chismoadvertirlo me encontraba escuchando una larga exposición sobre rrea y ataca directo a la integridad de las personas y después de todo lo que había significado hacer público su apoyo a la Revolu- todo es difícil saber qué es verdad y qué es mentira. ción: el odio, la intolerancia, la vulnerabilidad de su familia. Pero nada de eso importaba: los principios estaban primero. Prefiero no hablar. Prefiero el silencio.

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

MÚSICA

swing latino

París en Salsa es un orgasmo musical Isa La Roca rinde homenaje a su tierra mezclando la tradición francesa con los ritmos caribeños POR Ángel Méndez • @swing_latino ⁄ FOTOGRAFÍAs michael mata

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

11 Márquez en el Festival Toros y Salsa en Dax, Francia, y en 2012 en el Festival Ollin Kan de México. De esa fecha a esta parte Isabel La Roca no ha parado.

“Ya está listo y se está mezclando, se está mezclando... sale a comienzos del próximo año”. Uno podría intuir que se trata de una exquisitez culinaria. Algo de eso hay, porque lo que nos trae Isa La Roca es un plato bien fino, pero musical, con mucha salsa, adobado en esa Francia que ama a pesar de la distancia. Comparte el plato con gente que la adoptó en una Venezuela que se ha rendido a sus pies. Difícil no quererla. Eso de La Roca es pura bulla, porque lo que esta mujer exuda es miel en pasta. Los franceses tienen fama de antipáticos, pero ella pertenece a los que piensan que siempre es Navidad. En esta época del año los franceses son toda amabilidad e iluminan la ciudad con su sonrisa. Pues bien, Isabel Roch —que así se llama en verdad— anda con esa expresión los 365 días del año. Encima le pone música al asunto... ¡Y tiene un swing... muchacho! Nació en Meulan-en-Yvelines, una población en las afueras de París. Un 12 de mayo del año 1973 llegó al mundo la cuarta hija de los Roch, una “rubita” que adoptaría la negritud musical barloventeña como forma de vida. ¿Y cómo es eso? Habría que ver a una de esas negras de Cuyagua bailando tambor, meneando esas caderas como Dios manda. Isa quiso formar parte de ese aquelarre criollo y le metió trombón al asunto. Un instrumento que, bien tocado, puede causar sensaciones extraordinarias... ¡Tienen que ver a Isa cuando suena su trombón! Lo de ella es sabrosura de la pura. En cada sonido su cuerpo vibra, la sangre se le alborota y sin ser santera, ¡el santo que quiere bajar! ¡Un espectáculo total! Yo la resumo como... ¡un orgasmo musical! Cuenta que se abrazó a la música por casualidad. “No hay en el mundo un niño que no se sienta atraído por el sonido de un instrumento. Me acerqué a las bandas marciales que tocaban en mi pueblo. Yo no fui alumna de ninguna Sorbona o algo parecido, lo mío fue de pura guataca. Uno entraba en esas bandas pueblerinas, te enseñaban un poquito de lectura y dale, a tocar se ha dicho. Puro oído, pura guataca... improvisar”. La historia comenzó cuando a los 7 años ingresó a la banda marcial de su pueblo natal. Allí le ofrecieron tocar el trombón. En la Harmonía Banda Marcial La Meulanaise,

—Ha sido un gran recorrido.

estudió un poco de solfeo y se topó con el jazz de la Big Band hasta llegar a los 16 años, edad en que decide abrirse paso por sí sola. La nocturnidad le abre camino y entra en bandas como la New Time Style de afroreggae, la agrupación Kolity, exclusiva de música africana; el grupo Azúcar de salsa y el proyecto Tony Allen de afrobeat. Conoce al venezolano Eduardo Vals y entra a trabajar con Kanabayen, donde permanece desde 1997 hasta 2006. Pasa por Tumbao y Trombón de Daniel Gauch (París, de 1999 a 2004) y Agualoca (latin jazz, Barcelona, de 2002 a 2006). Entre 1997 y 2004 Isabel forma parte del proyecto de afrofunk y salsa Les Pepitas, del cual fue directora musical; una agrupación integrada exclusivamente por mujeres. “Les Pepitas era un grupo ‘de calle’ que hacía tarima en festivales y mezclaba todos los ritmos que se nos ocurrían; desde salsa pura hasta llegar al funky, paseándonos por el reggae, cha cha, cumbia y ska. Eso quedó registrado en un disco grabado por la agrupación”.

VENEZUELA, SU SEGUNDA PATRIA

“Yo me enamoré de lo que vi cuando vine por vez primera a Venezuela. La vitalidad musical que hay aquí difícilmente se encuentra en otra parte. Los músicos venezolanos viven literalmente la música. Yo me he contagiado de todo eso. No tengo salida. Soy de aquí”. Lo cierto es que para 2003, ya Isabel es invitada regular de grupos y orquestas de salsa del patio. En 2005 acompaña en gira por Europa a Andy Montañez y en 2006 a Gabino Pampini. En 2011 entra en la orquesta de Pibo Caracas, 11 de diciembre de 2016.

—He tocado con un gentío. He formado parte de varias orquestas como las de Orlando Watussi y Cheo Linares. Formo parte de El Guajeo de Alfredo Naranjo, la Orquesta Tokún, el Grupo Herencia y On Fire, entre otros. En cuanto a acompañamiento, he sido apoyo de Cheo Feliciano, Rodrigo Mendoza, Wilmer Lozano, Frankie Vásquez y Jimmy El León. —Y entonces, ¿el CD está listo? París en salsa, ¿así se llama? —Oui. Es un proyecto que vengo desarrollando desde 2015 y ya se culminó, gracias a la ayuda y el apoyo de muchos amigos. Fue un hermoso proceso de grabación, de muchas risas, mucha alegría. Eso se nota al escuchar el disco. —¿Y qué trae la criatura? —En esta integración de música contemporánea “tradicional” francesa con el ritmo caribeño fueron incluidos temas archiconocidos, como “La Bohemia” y “Quién”, conocidos en América Latina en la voz de Charles Aznavour. Mira, así viene la cosa: 1: “Raíces” (instrumental); 2: “La Bohemia” (canta Noel Machado e Isabel Roch); 3: “Quién” (Édgar “Dolor” Quijada); 4: “La vida en rosa” (canta Rodrigo Mendoza); 5: “La Foule” (canta Marcial Istúriz); 6: “Boogaloo en París” (canta Mariana La Sonera); 7: “La Sabrosura” (canta Orlando Watussi); y 8: “Alma compartida” (instrumental).

Invitados

Piano: Pancho Santangelo, Willy Melo, Eric Blanco. Bajo: Jesús Torres Mandinga, Elio Torres, “Guachafa” Guzmán. Percusión: Gerson Aranda, Cheo Navarro, Víctor Cardona, Freddy Rivas, Orlando Poleo, Joel “Pibo” Marquez. Coros: Gonzalo Martínez, Frederman Franco, Evy Acevedo, Édgar “Dolor” Quijada, Marcial Istúriz, Isabel Roch. Trombones: Isabel Roch. Arreglos: Héctor Velázquez, “Guachafa” Guzmán, Eric Blanco y Daniel Gauch. Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

FILO Y BORDE

Sectarismo navideño POR Freddy Fernández @filoyborde ILUSTRACIÓN HENRY ROJAS

Decía Benedetti que no hay que ser sectarios, que a veces la niñez fue un infierno. No voy a quejarme de mi niñez, puedo decir que fue sobria, fuerte y creativa. Hubo mucho disfrute allí, donde hoy solo encontraríamos quejas. De lo que sí me voy a quejar es de las Navidades. Ocho hermanos. Unos tuvimos el privilegio de nacer más temprano. Eso significó más poder y más libertad, pero también más responsabilidades. Todos los mimos y los cuidados eran para la última o el último. Cada año era alguien nuevo. Después se fue distanciando esta ventaja, hasta que, al final, se estancó en Jhonatan, quien todavía la ostenta. Daliany se subía a un pote de leche para cocinar las arepas cuando solo tenía cuatro años. Yo sabía cambiar la mecha, llenar la botella de kerosén y hacer funcionar la cocina con tres años. Los juguetes los inventábamos con lo que encontrábamos por allí y ninguna multinacional fabricó nunca uno mejor que los que hacíamos nosotros. Claro que durante todos estos años hubo Navidades y su balance no es fácil. Por un lado la infinita ternura del encuentro con mis abuelos Isabel y Juan Pedro y con el batallón de tíos, tías y primos. Toda la creatividad y el humor del tío Carlos borracho. Hasta allí, todo muy bien. Hay que compensarlo con la dificultad de unos niños de Mérida de vacaciones en las calles de un duro barrio maracucho. Para mi hermano Jaime y para mí, eso significaba al menos una pelea diaria para ganarnos respeto. Por suerte, en dureza, nuestro barrio de Mérida era peor. Entre los “ratones” de mis tíos, las hallacas recalentadas y el sancocho de gallina del 25 de diciembre, lo más deslumbrante eran los regalos de dos de mis primos y la alegría del más pequeño o la más pequeña de mis hermanos, a quien el niño Jesús sí le había traído algo. Entenderán que la obligatoriedad de la euforia sectaria de la Navidad no lograba tocarme. Esas fechas eran momentos estresantes. Levantarse un día a las 4 de la mañana, meternos todos en el carro de papá, aparecer a eso de las 2 de la tarde en el barrio Los Olivos, volver a adaptarnos al calor y a hablar maracucho, prepararnos para las peleas con Maguila, con Joche y con Pablo. Aprendí entonces a cuidarme de estar alegre porque así lo dictaba la cultura imperante. Si no tenía motivos personales, no tenía por qué estar alegre. La fórmula, afortunadamente, me ha valido para todas las festividades que se comercian abiertamente. Sin embargo, tengo dos hijas a quienes no he inculcado la Navidad pero tampoco se las he negado. Para ambas siempre ha existido el niño Jesús, aunque no ha estado vinculado al chantaje del buen comportamiento. Así que la Navidad no es solo Tun, tun, quién es... A veces, la Navidad también puede ser una trampa. Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

ENCARTADO

foto-reportaje

las luces de la ciudad Fotos jesĂşs castillo

Los 37 metros de la Cruz del Ávila se encienden cada diciembre. Foto Michael Mata

Una jirafa iluminada pasea distraídamente

El Teatro Principal se llena de luz

Las luces cotidianas de la ciudad se integran con las de la Navidad. En un recorrido por Caracas vemos las distintas maneras de celebrar los espacios recuperados para la paz y el compartir. La Cruz del Ávila se yergue sobre este valle. La montaña todo lo llena de luz. Mucho más abajo, desde donde se trazó esa primera capital, en la Plaza Bolívar, la estatua del Libertador con su luminiscencia se funde con el Teatro Principal. Las ventanas iluminadas, ojos impasibles de los edificios de la Misión Vivienda, miran los animales incandescentes que pastan sobre el puente de la avenida Libertador: elefantes, gansos, jirafas y leones. Un pesebre, que surge entre las flores, perfuma con la mirada. El muralista Felipe García plasmó, con la fuente de Plaza Venezuela multicolor de fondo, un nacimiento que representa al pueblo venezolano con su piel y su color. Sobre los adoquines de Sabana Grande, donde siempre es de día, se posa el pesebre tallado en madera hecho por los hermanos merideños José Orlando y Gonzalo Erazo. La luz nos recuerda durante todo el año que salimos de las sombras. Una flor para la Misión Vivienda

Nathali Gómez

El colorido del pesebre venezolano acompaña la fuente de Plaza Venezuela

Los elefantes de la avenida Libertador se alimentan con la luz de las farolas

Un nacimiento de madera acompaĂąa a los caminantes del bulevar Sabana Grande

SOBERANÍAS SEXUALES

Mi universidad amada POR Rummie Quintero @rummieactivista ILUSTRACIÓN L. “RAZOR” BALZA

Tomar decisiones no ha sido ni es fácil para nadie, sobre todo en momentos donde la propia vida o desarrollo futuro inmediato de la vida se coloca enfrente de ti y te pide cuentas de tu accionar y cómo sobre este influye el contexto. En momentos decisorios, afloran innumerables sensaciones, pero las más comunes son sentimientos de inseguridad y de incertidumbre ante hechos que puedan ser, para avanzar o no, en una meta que te habías trazado conquistar. El contexto juega un papel fundamental para la concreción de ese objetivo, este que desde hace tiempo tenías en mente y no pudiste concretar por diversas causas: temores, hastío, rabia, fastidio, cansancio, pero sobre todo, el tener un nombre legal que no te identifica y vivir con un nombre asumido socialmente que se suscribe a un género autopercibido que si bien no te asegura la felicidad plena, te produce satisfacción cuando te llaman por él. El contexto se busca de acuerdo a las necesidades particulares, en las creencias en lo que más se parezca a ti, y lo contrario también ocurre. En ese sentido, yo busqué y él me buscó... Estudiar en la UBV ha sido y es apasionante por todos los preceptos con los cuales el Comandante Supremo la creó, con su visión humanista, antiimperialista, antipatriarcal, incluyente, empero, no solo basta la inclusión, sino como bien reza en su documento rector, es igual de importante la prosecución y consecución. Poder graduar a cada una de las personas que se gana el cupo en la ¡casa de los saberes!, que debe avanzar en una arremetida a favor de la ética, de la disminución de la deserción, de la garantía de la atención suprema de los servicios estudiantiles y de administración, del buen trato a sus trabajadores y trabajadoras, en la promoción y potenciación de los procesos de investigación, a dar ingreso a profesionales casados y casadas con el proyecto bolivariano y en la continuación de aperturas de nuevas profesiones adaptadas a las demandas y realidades de nuestro país, desde el semillero de la Revolución, y es allí donde debemos obligatoriamente hacer los cambios pertinentes para garantizar los y las profesionales de la nueva vida y la suprema felicidad para nuestro pueblo, ¡con amor, ética, transparencia y patriotismo! Las decisiones que tomamos definitivamente repercuten en el tiempo... Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

libremente

El mito de la felicidad Por Miguel Posani @mposani ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

Todos nadamos como peces buscando una imagen interna de lo que creemos que es la felicidad (y que generalmente se expresa en imágenes), pero resulta que como mito es un anzuelo, el del sistema económico que busca que constantemente te atiborres de cosas, consumas más buscando que se concrete el mito de la felicidad. Y resulta que la felicidad es un estado del ser como la tristeza, el dolor, la seguridad, es parte de un conjunto de estados pasajeros y placenteros, que tiene intensidades y generalmente esta ligado a situaciones externas. Un regalo, sentirte realizado, un nuevo trabajo, un nuevo hijo, etc. Pero, como acabamos de decir, la felicidad es un estado pasajero, y resulta que nos venden una imagen sobre todo con la publicidad y las novelas por ejemplo, que la felicidad puede ser constante, continua, inacabable, el éxtasis absoluto, increíble darnos cuenta que es dan de lo externo, sino en apoyarnos en nosotros mismos, y tal vez lo mismo que buscan los que se inyectan heroína. no te has dado cuenta que hay un estado del ser que no es consecuencia de factores externos. Así el sistema nos mantiene inconscientemente, como a ratones en un laberinto, corriendo por acumular dinero para Es ese estado en donde te das cuenta de ti mismo y comienzas comprar cosas que supuestamente nos harán felices como como campesino entusiasmado a cultivar la paz interna. Al inicio lombrices. Porque todos de una u otra forma buscamos eso, es muy duro, porque estamos acostumbrados a estar sobrealimenesa felicidad mítica y eterna. tándonos de angustia, miedo, desconfianza, es decir, eso que llamas Pero así como viene el dolor o la tristeza y se van, lo mismo hace la estrés, y que se produce buscando momentos de alegría, placer o distracción como momentos de inmediatez que luego desaparecen felicidad. impulsándonos a buscar a veces frenéticamente más pero, olvidándonos de nosotros y de vivir y sentir que vivimos. Tú dirás, ¡que desgracia! y entonces, ¿no hay salida a esta dependencia de los eventos externos? Así no logramos estar en paz disfrutando de la vida casi nunca y Tal vez hay otra vía que no sea afincarse en emociones que depen- esto nos sucede todos los días.

Ejercicio para estar en paz No salgas de casa, no salgas de tu cuarto, no veas a nadie, no veas televisión ni escuches radio, al menos por un día, pero no podrás darte cuenta porque estarás lleno de pensamientos, tus fantasmas y demonios, miedos, incertidumbres, reclamos, necesidades, etc.

y paz viene a través de un proceso de toma e distancia de todos tus demonios, que tu mente produce constantemente como un perro loco que no se cansa de dar vueltas. Por eso meditar es importante.

Cierra los ojos y concéntrate en tu respiración por 15 minutos. No lo Date cuenta que aún si te aíslas no lograrás, pero trata y sigue tratando estarás en paz. ¿Por qué? Porque esa todos los días hasta que te sorprendas sensación de calma, tranquilidad de ti mismo. Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

“No vivimos nunca, sino que esperamos vivir; y disponiéndonos siempre a ser felices, es inevitable que no lo seamos nunca”. Pascal

MIRADAS

Sin sombra no hay luz Un tipo escribe un correo electrónico a Épale CCS y dice que sí se puede sembrar cebada en Venezuela. Le creímos (no es un representante de la oposición en la Mesa de Diálogo) y fuimos a Bailadores, en el estado Mérida. Esta es parte de ese viaje, de ese ir y venir, de ese intentar hacer POR gustavo mérida / fotografías jesús castillo

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

La eme

“El primer instante, extender los brazos, impulsarse, cerrar los ojos, suspirar. Sentir el aire en tu cara, mover los brazos. Dejarse llevar, colocarse de punta, a diez metros por segundo, eres de acero o de plumas. Tu peso es algodón y tu nariz en una fracción de segundo toca el suelo. La cornisa quedó atrás y ahora eres bruma, ahora te elevas, ahora brillas translúcido, ahora eres energía y tu cuerpo es una pintura con relieves pronunciados. Ahora el asfalto se pintó de sangre y despojos. Ahora los fotógrafos te inmortalizan”. Ese texto es un extracto de un poema de Richard Castillo, nuestro guía en Bailadores. Sin sombra no hay luz. El acento merideño se esparce por estas montañas excepto en El Vigía, donde no hay montañas y lo que hace es un calor de verga, igualito que en Maracaibo. O casi. Caracas, Maracaibo, Mérida y, en lugar de “parar de contar”, siga usted imaginando lugares de esta tierra coñaceada y, parece increíble, por gente que nació aquí. Resistimos “bello” este año que termina y por eso y por muchas cosas más, ven a mi casa esta Navidad, por eso, repito, por esa resistencia y a pesar de ellos, esta tierra es hermosa. Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

realidad es esta, porque escribo desde “‘¿Ah, sí?’ —imitaría aquí, por lo que “estas montañas”, en realiel andino al otro dad serían “aquellas”, pero esto es un ardid andino—, pues para que recuerde que sin sombra no hay que me la hagan luz) repito, a aquella montaña, el amor de triple’” y es así como esa mujer no le sirve de nada. Cosas, como diría Earle Herrera. la carretera se introdujo y se salió En Mérida varias veces en Silencio. Como el de estas montañas llenas esas tierras hasta de siembra. Es otro ritmo el que bailan por aquí. “Hay que producir, al menos ideas”, quedar esa especie de letra eme que, por asegura Juan Carlos Valdez, el de Boza con Valdez, aquel programa de VTV que debería cierto, tampoco se estar en horario estelar pero grabado en la come. calle. La gente en Bailadores está clara: pasa — tiempo con el lomo doblado trabajando la

tierra, trabajando en la tierra. Yo tecleo una computadora y me creo gran vaina, porque de seguro, cuando me dé hambre dentro de “Qué hermosa es esa montaña: la amo”, un rato, voy a degustar la letra eñe, que este dice una mujer cuando ve la imponen- teclado no tiene imprimida, por cierto. cia del Guaraira Repano desde el nuevo elevado de la ampliación de la autopista Es la última crónica de este año. Richard Valle-Coche del que ya nadie se acuerda, Castillo es un hombrón (un metro noventa ni de los 60.000 millones de dólares que se centímetros, corpulento y de vozarrón raro, pagaron de Maduro pa’cá. “Ajá. ¿La amas? por el acento andino) que, de momentos, ¿Y por qué no firmaste para que Obama asusta. En medio de la carretera, él detuvo la camioneta bruscamente, chirriar de cauchos derogara el decreto?”. incluido, “voltióse” del mismo modo que Silencio. Como el de estas montañas. No detuvo la camioneta y dijo, con su vozarrón le sirve de mucho, a aquella montaña (en raro: “¿Quieres que te hable de la muerte?”. Caracas, 11 de diciembre de 2016.

21 Ya más calmado y sin demostrar temor, le escuché contar por qué esa carretera era así: “Cuando planificaron la Transandina, a Gómez le dijeron que el señor tal había dicho que por sus tierras no pasaría ninguna carretera. ‘¿Ah, sí? —imitaría el andino al otro andino—, ‘pues que me la hagan triple’” y es así como la carretera se introdujo y se salió varias veces en esas tierras hasta quedar esa especie de letra eme que, por cierto, tampoco se come.

ro antes del almanaque, están sucediendo cosas interesantes, que hacen pensar un poco en que de verdad estamos haciendo algo distinto, inventando y errando y volviendo a inventar hasta que salga: en este momento cuatro personas, porque son personas, no “hombres” o “mujeres”, se desvisten y se visten para iluminar un mes del almanaque, cualquiera.

Parafraseando al perro José Roberto Duque, uno no conoce nada en dos días. Valentina Quintero tampoco. La primera escuela del poblado La Playa, cerca de Bailadores, funcionó en esta casa en la que nos encontramos ahorita, producto del chimó de entonces, del miche de ahora, del final de este año duro. Lugar de jardines cuidados, Milena Mora y su mamá Blanca la enseñan no sin ese pequeño orgullo andino que no se diluye entre musicalidades y cascadas. Bañarse sin bañador en las Lágrimas de la India Carú temprano, antes de que el sol llegue a esa montaña, vale la pena. Así es cuando te das cuenta de lo ridículamente estúpidos que somos como especie y ahora, cuando ya no hay más reflexiones de Fidel, uno se pregunta hasta cuándo.

Esta es la última crónica de este año y cuando uno viene subiendo de Maiquetía y mira las montañas de tierra labrada que se pareMiche El burbujeo de la fermentación del pa- cen a las de Bailadores, uno piensa en cuanpelón era hipnotizante. Un saco de hi- ta gente dobló el lomo para sembrar. nojos en el suelo —que es muy distinto de los hinojos fitos—, su rostro severo Chimó y su alambique amable y sombrío están Escupí 1.500 veces en tres minutos y meahorita conmigo porque, cual Humber- dio. Es fácil compartir chimó y es impoto Márquez, saboreo ese miche que salió sible no tragar un poco. Bailadores es La lengua se le enreda a Castillo, el guía. La de ese alambique en esta redacción en la perfecto para probarlo bien. El miche de botellita de agua mineral estaba a medio llenar de miche, luego de medio vaciarla duque, en este cierre de este último núme- ahorita se parece al chimó de entonces.

¡Salud, caraqueños!

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Con el lomo doblado

rante todo el medio día. El clima va y viene entre tragos y atardeceres. La muerte también. “Esos grandes generales, que se llenan la boca...”. Y Castillo habló con su vozarrón de dimes y diretes, de antros y perversión, de cosas sin nombre y de nada que pueda comprobarse. Pueblo pequeño infierno grande (¿será un dicho tonto?), en Bailadores se rumoraba que unos periodistas andaban con un rufián y este escribidor escudriñó al tipo. Lo veía de reojo. Sospechando de todo, decidí indagar. ¿Por qué escoger esta revista? Un tipo me habla directo: “Castillo es un estafador. El tipo hizo...” y blablablá. "Mira tipo: háblame claro: esta gente me dijo que tú...” y blablablá y Castillo me mira, me asusto, cierro el puño derecho y pienso: “Si le conecto en la mandíbula, con todo, quizá se caiga”. Y Castillo, con su vozarrón, me da su versión y he aquí como surgió la idea de hacer una columna de chisme en esta revista, porque si usted está leyendo, es porque le entretuvo.

prueba y no ha sucedido ni una sola delación en todo este año duro en el que tanto nos costó entender el concepto de guerra económica. El miche costó 6.000 el litro. Estos datos son importantes porque si alguien quiere saber qué ha pasado en Caracas —y a veces en Mérida— los últimos cuatro años, solo tiene que ir al archivo de esta revista. Será más fácil de leer que cualquier otra lectura, eso es seguro, y eso satisface en un año lleno de coñodemadradas. “Qué hermosa esa montaña: la amo”. No se olviden.

sembrando / en Mecedores están bailando y en Caracas algo está pasando. El temor es una vaina arrecha. Cuidar la papa, que es lo que hacía ese niñito de la foto, acostado en la tierra, es el mensaje. Cuidar la patria a ese carajito, con todo y su perrito, es la misión. La de Chávez y Fidel. La suya. La mía.

La pelea es peleando. Dialogando sin caernos a coñazos, aunque provoque. Richard Castillo lloró a medias, animado por el miche y frenado por el sentimiento. Volver a Caracas a través del calor amargo de El Esta es la última crónica de este año. Vigía te acelera la increíble incapacidad de emocionarse ante lo breve que es el espacio Cuando llegamos a ver la cebada sembra- en el que uno está. da, unas 16,5 hectáreas (que siempre imaginé todas juntas, colindantes, inseparables: La vida y la la alegría en tremenda lucha maldita influencia hollywoodense), me sor- contra. El año que viene llegará justo a tiemprendió el desperdigamiento. Los sueños de po, bailando y moviendo ese culo que jode, Castillo van más allá de mostrar que sí se porque si no, volvemos a perder. Es increípuede sembrar cebada y cosecharla exitosa- ble la incapacidad de algunos funcionarios mente. Pero son sueños. Y los sueños no se de tomar decisiones que aceleren eso que se van con la muerte. intenta hacer: una revolución. Los tipos preEl miche está desapareciendo, la redacción fieren quedarse en ese estrecho cuchitril que está más alegre. Y lo que en la redacción Esta es la última crónica de este año. El mi- les aprisiona el cerebro: hay que cambiar el pasa, se queda en la redacción. Ya hice la che se está acabando / en Bailadores están concepto de cuchitril. En eso andamos. Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

crítica y media

A golpe de control

dicho tonto

Criaturas cotidianas He comenzado a ver Stranger Things una vez ha terminado de transmitirse vía Netflix su primera temporada. Me veo obligado a justificar el porqué no la he visto en directo asumiendo el pecado que hoy supone ignorar el protocolo de conexión a Netflix. Aunque esto pudiera atribuirse sencillamente a la pereza —no me importaría reconocerlo—, la razón es que no he querido aprender a hacerlo. Ya surgirá una motivación. Me transo ahora por la opción del DVD. Hay un particular deleite en entregarse así a una larga sesión televisiva que, como tendido eléctrico, se va hilvanando por encima de nuestra dinámica diaria. Enciendes y apagas el reproductor a voluntad, como un pequeño dios creador. La historia espera siempre por ti. Lo gozoso en este caso estriba en la ligazón con el hito individual, ese bagazo que va quedando al consumirse la existencia. De eso trata Stranger Things, una serie que se regodea en el candor de una época ida: los años 80. No hay que engañarse con el subterfugio dramático. No tenemos tiempo para perder descifrando misterios.

Tuvimos suficiente con Lost. La ficción enganchará sobre todo a quienes ya cerca de la media centena de vida lastran aún referentes de un estilo —visual, musical, estético— de una ingenuidad extraordinaria. Los ocho capítulos de esta primera temporada discurren sobre tópicos como la amistad, el honor y la solidaridad, atributos circunscritos a los ecosistemas rurales o interioranos, esos donde el sueño de la razón produce monstruos. Como está visto en el mejor cine norteamericano, las “criaturas extrañas” de que se hace eco el título del serial no son en modo alguno las que se ocultan en la oscuridad. Son esas otras que la vida ha vuelto de revés, invisibilizándolas en sus respectivos entornos. Son los niños mismos, esa edad eternamente subestimada. Si bien cuanto tiene que decir es de una simpleza desconcertante, la serie es un portento en actuaciones y dirección. Atención al trabajo del sheriff (David Harbour). Por Carlos Cova @CarlosCobero

“Todo tiempo pasado fue mejor” o “Mi mejor época pasó”. “Pa’trás ni pa’ cogé impulso” fue el primer Dicho Tonto que no tiene sentido, justo ahora: siendo mi compañero de la izquierda un tipo certero, el dicho de marras tiene que ser el que él recomendó. (Rozar la cacofonía es la mejor manera de provocar al corrector. Son unos arrechos todos... y todas. Fin de la cita, con punto antes del paréntesis incluido). Los pocos que nos leen sabrán de qué estamos hablando. Si “Todo tiempo pasado fue mejor”, entonces, desde el principio de los tiempos —o desde la noche de los tiempos, como diría Earle Herrera—, que es, justamente, cuando el dicho deja de ser tonto y cobra sentido (lugar común aparte), se forma allí, justamente, el principio del desastre que somos. Queda poco tiempo. Decir eso explica el proceso de extinción de nosotros mismos hecho, con mucha estupidez, por nosotros mismos. Vamos sin freno, sin policía acostado que valga, sin cariño, sin anestesia, sin bolas ni ovarios. Hoy se cumplen 40 meses desde que Chávez partió y 16 días desde que lo hizo Fidel. No se homenajea a ninguno si pensamos que todo tiempo pasado fue mejor. Ni Maduro ni usted ni yo somos como ellos, pero Maduro necesita de nosotros para parecerse a Chávez. Yo lo necesito para parecerme a Chávez y no le llego. El Presidente lo está haciendo mejor que yo. ¿Usted lo está haciendo mejor que Maduro? Verga, quiero conocerle: usted es quien me puede explicar entonces por qué todo tiempo que pasó fue mejor que este, el tiempo de la Revolución. Es triste pensar en cuánto nos quejamos por no saber explicar el concepto de guerra económica: saberlo nos costó caro a todos. Con ese sabor amargo, los venezolanos sonreímos mojándonos el gaznate con cocuy o miche, tragando fuerte y resistiendo con las rodillas (es un decir, quién sabe si tonto: en realidad es con una sola rodilla) sin arrodillarnos, en la tierra. Feliz año y disfruten el almanaque... todo el año. El dicho tonto del próximo año, ojalá, será “A quien madruga, Dios le ayuda”. Gustavo Mérida

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

GASTRONOMÍA

PICHONES DE SIBARITA

oro vegetariano POR mercedes chacín @mercedeschacin FOTOGRAFÍAs archivo épale ccs

Si hay algo que produce diferentes sensaciones, humores, amores, resquemores, alegrías, contenturas, rabietas, gozo y hasta puede tumbar gobiernos, ese algo es la comida. No solo de pan vive el hombre es un dicho tonto, que bien podría desmenuzar Gustavo Mérida, pero es tan tonto que acaba con el espíritu de esta sección que se ha mantenido rozagante y con buen diente por casi cuatro años. Este es el cuarto Pichón de Oro que entregamos de alrededor de 200 visitas a distintos comederos de Caracas, degustados por una docena de pichones de distintas edades y sexos. Y gustos.

rozado otros municipios de la Gran Caracas sin rigurosidad pero con la seria intención de colonizar sabores traspasando fronteras. Tan seria es que el Pichón de Oro este año recayó en un comedero vegetariano ubicado por los lados de Ocariz en Sucre, tal vez con aroma de diálogo exquisito. Es el tercer premio de oro que recae en comida vegetariana.

1. naturlandia (pichón de oro)

2. el pasaje (pichón de plata)

3. combo real (pichón de bronce)

4. estatero restaurante café

Lo que en principio era una animadversión, tirando a rencor, por lo que nos disponíamos a comer, se convirtió en una cada vez más grata sorpresa al descubrir el encanto sobrenatural de lo natural. Una opción válida y necesaria en el trapicheo impuesto por las falsas necesidades de carne y químicos. (Marlon Zambrano, Épale CCS Nro 204).

Al final de ese “pasaje” aguarda cada mediodía una febril actividad. Al mando de Manuel Rodrigues (desde mediados de los años 70), no menos de una veintena de empleados despliega una coreografía graciosamente caótica para servir con celeridad los platos de una carta hispanovenezolana. (Carlos Cova, Épale CCS Nro 175).

La atención es una mímesis de las franquicias de comida rápida, decoración y publicidad interna similar a la de los años 50 y el menú entre lo tradicional y el fast food. El híbrido no desentona gracias a la diligente y esmerada atención del personal, desde la cajera, pasando por los cocineros, hasta las camareras. (Rodolfo Castillo, Épale CCS Nro 191).

Observamos en la costilla de res una hoja de laurel que “ni enriquece ni empobrece a nadie” pero que el cliente conocedor sabe agradecer: las especias bañan al plato de una aura casera, íntima, amén de potenciar el sabor de los alimentos. Tiempo que no me topaba con una sopa de pata de res tan exquisita. (Rodolfo Castillo, Épale CCS Nro 197).

No sabemos qué significa eso de que nuestro máximo galardón sea, otra vez, verde. Lo que sí sabemos es que contrasta con la vocación carnívora de estos pichones por los cadáveres cocinados Lo decimos sin falsa modestia: esta sección es el más completo re- con cualquier técnica. Cualquiera sea el significado aquí les dejagistro de lugares para comer en el municipio Libertador. Hemos mos los lugares y platos ganadores y sobresalientes de este año.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2015.

5. da nino

6. The Veggie’s

7. casa bermeo

8. pita’s

Un grupo de gente unido por la satisfacción que da atender a los demás como quieren ser atendidos siendo, al mismo tiempo, sus propios jefes, y entendiendo que los demás solo quieren que tú les des comidas y bebidas para seguir la jornada. (Gustavo Mérida, Épale CCS Nro 169).

Un elemento que llama la atención es la honestidad que se practica. Por ejemplo: si usted desea acompañar su plato con una sopa, el cajero le recomienda que llene lo más que pueda el recipiente destinado para la misma, puesto que su precio es único e invariable. (Rodolfo Castillo, Épale CCS Nro 205).

El plato insignia es un timbal con tres tipos de arroz: amarillo, verde y negro. Por la calidad de los tres platos degustados, imaginamos que ese timbal se las trae, así que si tiene fuerza, lléguese de Puente Anauco a Puente República. (Mercedes Chacín, Épale CCS Nro 174).

Al probar el shawarma italiano, la lengua saborea la carne marinada en siete especias y se pierde en la personalidad fuerte del pesto. Es la posibilidad de ir del Mediterráneo al Medio Oriente sin conquistas, sin guerras y sin moverse de Caracas. (Nathali Gómez, Épale CCS Nro 190).

9. prana

10. el bambino D’oro

11. chirel

12. café sur 21

La idea de un bar de jugos (juicy bar) se amplió con los conocimientos de cocina de Melanie Rosenqvist, quien diseñó los platos principales. Entre los más buscados están los Thai Wrap. Todo muy sano, muy rico, y muy frío. Se toma de la nevera y se come en el mesón. (Reinaldo González, Épale CCS Nro 176).

La salsa, elemento totémico de mi comer, diosa de mis alimentos, no venía líquida en su totalidad —como me gusta— sino que venía en trozos de tomate tan suaves y cargados de sabor que hacen que la boca, como otras cosas desbordadas de emoción, rápidamente se moje. (Ander De Tejada, Épale CCS Nro 194).

Pedí un burrito: elegí caraotas rojas, plátano dulce, carne molida, pico ’e gallo, guacamole, aceitunas, pimentón. Hay hasta 12 diferentes salsas. La galleta, que tiene trocitos de chocolate, sorprende y redondea para completar un círculo que se puede volver vicioso. (Gustavo Mérida, Épale CCS Nro 186).

De servicio discreto y jovial atención, ofrece dos o tres opciones diferentes cada día. Además de la versión ejecutiva, pastas, arroces, ensaladas y pastichos (berenjena y calabacín), complementan una carta que da cabida a ingredientes de orgullosa factura propia. (Carlos Cova, Épale CCS Nro 183).

menciones especiales La Doña (Rodolfo Castillo, Épale CCS Nro 180). Rancho Paisa (Nathali Gómez, Épale CCS Nro 179).

Papelón Gourmet (Ander De Tejada, Épale CCS Nro 185). El Rey del Bollo (Marlon Zambrano, Épale CCS Nro 187).

Caracas, 11 de diciembre de 2015.

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

VOLVERTE A VER (frag.) POR INDIRA CARPIO @indira_carpio

UNA

De Lydda Franco Farías (Venezuela)

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Andá a entrar la ropa, me grita desde la cocina. Salgo lentamente, sintiendo como la brisa empieza a hacerse fresca. Respiro hondo el olor a la lluvia que se acerca. Truenos como ruidos ahogados parten el silencio de la tarde y la luz blanca de los relámpagos me da en los ojos. Apurate, me dice en voz alta. Salgo y me demoro con la cabeza alzada dejando que me den en la cara las

Por Marcela Alluz (Argentina)

NOVELA

UNA amanece con el cuerpo de cera con la víspera haciendo piruetas con ojeras que delatan los retorcimientos [del amor UNA sabe que tiene prejuicios y los va perfeccionando UNA es a-política UNA no se mete en camisa de once varas UNA estampa el beso curricular ÉL se va con sus ínfulas con su ontológica suficiencia UNA comparece ante el tribunal de los [hijos y cede ante la tiranía de los hijos UNA tiene el deber de ser bella porque entre otras cosas para eso está UNA y para comprar lo que nos vendan y para sufrir por la muchacha de la [telenovela que es tan desgraciada (la muchacha y la [telenovela) y para llorar de felicidad porque al final el sapo se convierte en magnate y se casa [con ELLA UNA es tan sentimental UNA es tan fiel tan perrunamente fiel qué asquerosamente fiel es UNA UNA se asoma al espejo y comprueba lo [que no es sabe qué cara va a poner qué silencio va a arriar qué píldora de domesticidad va a tener que [tragarse qué anticonceptiva es UNA UNA queda tendida knock out para reaparecer al día siguiente pidiendo la revancha

primeras gotas. Mi madre está aterrada, un pánico irracional a las tormentas la refugia en el centro de la sala por si cae un rayo. De nuevo me grita, apurate enferma, te va a partir la cabeza una centella por hacerte la Greta Garbo. Qué tendrá que ver. Dejo la ropa sobre la mesa. La luz se ha cortado y mientras ella busca velas en la alacena yo me quedo pegada a la ventana abierta. Amo las tormentas, le digo. Como los locos, comenta ella mientras enciende un fósforo. La gente cuerda sabe que tiene consecuencias, los dementes no, van de cabeza al medio del desastre. Como vos Margarita. Como vos.

LLEGARÁN TIEMPOS

De Katerina Gogou (Grecia)

Llegarán tiempos donde cambiarán las [cosas. Recuérdalo, María. Recuerda, María, en los recreos aquel juego en que corríamos con el [testigo en la mano. No me mires. No llores. Tú eres la esperanza. Escucha, llegarán tiempos en que las niñas elegirán a sus madres, no vendrán al mundo por casualidad, no existirán las puertas cerradas y el trabajo lo elegiremos nosotras. Ya no seremos caballos a los que mirar los [dientes. La gente, ¡imagina! hablará con colores o con notas. Tan solo quedarán en una gran botella de [agua palabras y conceptos como estos /inadaptación, opresión, soledad, precio, [ganancia, humillación/ para las clases de historia. Son, María —no quiero mentirte—

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

[momentos difíciles. Y habrá otros. Yo no sé... no esperes mucho de mí. Tanto viví, tanto aprendí, tanto digo... y de todo aquello que estudié mantengo solo una cosa: “Lo importante es seguir siendo [humanas.” ¡Cambiaremos la vida! Incluso a pesar de todo esto, María.

SOLUCIÓN DEL ANTERIOR

UCI R C POR Neptalí Segovia

5 11

10 15

34 40 45

1. Tercer día de la semana, entre el lunes y el miércoles. 6. Rasgo de amabilidad o generosidad. 10. Patriarca bíblico, padre del rey David. 11. Paraíso terrenal. 13. Dominio de internet de Islandia. 14. Símbolo químico del galio. 15. Monje budista tibetano. 17. Oriente, punto cardinal del horizonte. 19. Raíz cuadrada del número cuatro.

28 32

48 53

18 22

21 27

17 20

19 23

44 49

55 59

20. Símbolo químico del sodio. 22. Símbolos del área, del oxígeno y del amperio. 23. Personaje bíblico, madre de Set. 25. Yo, en portugués. 27. Punto cardinal. 29. Cincuenta y uno en números romanos. 30. Raíz cuadrada del número nueve. 32. Asisten, acuden, concurren. 34. Asistiré, acudiré, concurriré.

36. Resultado de la adición. 38. Caso dativo del pronombre vosotros. 41. Enarbola la bandera en el asta. 43. Quinientos uno en números romanos. 44. Sinónimo de antorcha. 45. Una de las memorias principales de un ordenador. 47. Dominio de internet de Venezuela. 49. Mayoral o capataz. 51. La antigua Persia.

1. Arcángel..., el jefe de los Ejércitos de Dios. 2. Asidero de vasija. 3. Gran dios solar egipcio. 4. Bebida de infusión. 5. Personaje bíblico, primogénito de Noé. 6. Símbolo químico del germanio. 7. Decimocuarta letra del alfabeto español. 8. Emperador romano, hijo de Vespasiano. 9. Último rey de Israel. 12. Otorgan, conceden, asignan. 16. Octavo hijo de Jacob. 18. Personaje bíblico, madre de Isaac. 19. Cede, otorga, regala. 21. El primero en su clase. 24. Siete en números romanos. 26. Plural de vocal. 28. Fruto de la vid. 30. Cutis, piel de la cara. 31. Prefijo con significado de “sur”. 33. Patriarca bíblico, padre de Sem. 35. Composición en verso del género lírico. 37. Maullar el gato. 39. Juez de Israel, recordado por su fuerza hercúlea. 40. Animal que se está criando (pl.). 42. Abreviatura de avenida. 44. Teatro de Operaciones. 46. Instrumento musical de cuerdas. 48. Vigésima letra del alfabeto español. 50. Alimento milagroso que Dios procuró a los israelitas en el desierto. 52. Patriarca bíblico, relacionado con el Diluvio. 54. Nombre propio femenino. 55. Voz para contestar el teléfono. 58. Abreviatura de doctor. 60. Acudid, concurrid, asistid.

53. Provincia de..., provincia en el departamento de Santa Cruz, en Bolivia. 55. Naipe que lleva el número uno. 56. Apócope de papá (inv.). 57. Extremidad de la mano (inv.). 59. Río principal de África. 61. Conocer una ciencia, arte, etc. 62. Azada de pala algo curva y más larga que ancha.

POR NATHALI GÓMEZ @laespergesia Ilustración: L. "Razor" Balza

Imaginario MINIMANUAL para dejarse querer

No sé por qué

Ante cualquier calamidad, da el paso adelante y resuelve todas las complicaciones. No permite que los otros le den una mano. Eso está muy bien, desde aquí lo felicitamos. El asunto es que puede dejar un momento de sentirse invencible y admitir que también necesita quien le sobe el lomo cada vez que cae. 1. Usted es un ser humano. Por si no lo recordaba, siente, llora, ríe y goza como todos los demás. No es único. 2. Aunque el dolor es intransferible, es más llevadero si alguien lo apoya. 3. En los momentos más feos, cuando todos se fueron, quien lo quiere, lo acompaña. 4. Derrumbarse es permitido. 5. Deje que lo consientan, no se resista. 6. No piense que recibir cariño es depender del otro. 7. Disfrute cuando lo complazcan. 8. Cuando ocurra un problema, no trate de resolverlo todo usted. 9. Déjese abrazar. Libera. 10. Dígale lo que siente a quien le dé amor. A veces el tiempo se va y quedan cosas por decir.

siento como frío

Edición Número Doscientos ocho. Año 04. ÉPALE CCS

Caracas, 11 de diciembre de 2016.

todavía cree que los empresarios son tan víctimas como usted

pregunta de la semana

TUIT DE