19-03-2017

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contenido

Consejo Editorial

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Mercedes Chacín

Juan Vicente Torrealba

Mancheta y demás

Editor Jefe

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Lo que esconde un diente roto

Piélago

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Jorge Rodríguez Gómez Felipe Saldivia Gustavo Borges Revilla

— perfil

Directora

Carlos Cova

DirecTORa de Arte

Edarlys Rodríguez

— mitos

COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA

Jesús Castillo

Asesor Editorial

Reinaldo González

— caracas, monte y culebra

Coordinadora 2.0

Yanira Albornoz

Web y redeS

Joseph Castellanos Gaizka Orta

— música

Redacción

El Cazador Novato

Nathali Gómez Moscoso Gustavo Mérida Ander De Tejada Marlon Zambrano

DiseñO

Lisbeth Montell Carlos Hernández Vicmairis Aguilera

Ilustrador FotOGRAFÍA

CORRECTOR

Rodolfo Castillo

Idania Bracamonte Daniela Fernández Edi Cordero

Colaboran en esta edición

Clodovaldo Hernández, José Roberto Duque, Humberto Márquez, Miguel Posani, Rodolfo Porras, Víctor Fha, Víctor Villasmil, Indira Carpio, Pedro Delgado, L. “Razor” Balza, Jessica Mena, Julietnys Rodríguez y Neptalí Segovia. Archivo Ciudad CCS. Fotografía de portada: Enrique Hernández

Impresión

Complejo Editorial Alfredo Maneiro Imprenta Nacional. www.epaleccs.info epale.ciudadccs@gmail.com

Comercialización y Ventas: 0212-8080323/0426-5112114 Distribución: 0212-8085843 Depósito Legal: pp201202dc4166 Una publicación de la

@epaleccs

— fotorreportaje

MUD descolorida

¿Cuán consciente eres en el día?

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Pichones de sibarita

Manifies.to, conexión a conciencia

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Cine y teatro

Apareció la cabeza

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— crítica y media

LOGÍSTICA

— boleros que curan el alma

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— gastronomía

Michael Mata Enrique Hernández Maryori Cabrita

— ciudad

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— sexodiversidad

Alfredo Rajoy

— EL MENJURJE

— poesía o nada

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— el rumor de las bolas

— libremente

— entrevista

— minicrónicas

— crucicultura

Crucigrama

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— la bitácora de amón-ra

@epaleccs Revista Gratuita Circula los domingos con el Diario Ciudad CCS búscala de lunes a viernes en nuestra sede: esq. san jacinto, edif. gradillas “c”, piso 1, al lado de la taquilla única de servicios municipales

Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar”, 2014 y 2015. Premio Municipal de Periodismo “Guillermo García Ponce”, 2014.


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PERFIL


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Juan Vicente Torrealba fértil, prolífico y centenario

La vida de este caraqueño, tempranamente asimilado al Guárico, ha sido como la llanura a la que le ha dedicado acordes y letras: extensa, inabarcable, hasta el punto de completar un siglo. Algunos dicen que le ha faltado humildad, pero no fue eso lo que demostró cuando al recibir la Espada del Libertador dijo: “Espero vivir un poco más para ser digno de merecer tanto” POR Clodovaldo Hernández • clodoher@yahoo.com / ILUSTRACIóN l. “razor” balza

Cuando nació Juan Vicente Torrealba, el planeta estaba envuelto en la Primera Guerra Mundial, en Rusia comenzaba la revolución que conduciría al experimento del socialismo y Venezuela se encontraba en plena dictadura de Juan Vicente Gómez. Era el año 1917.

En la larga lista de canciones destacan varias que son ya parte de la historia musical del país: “Concierto en la llanura”, “Sinfonía del palmar”, “La potra zaina” y “Muchacha de ojazos negros” son algunas de las más célebres.

Desde entonces han ocurrido tantas cosas: finalizó aquella guerra y comenzó la Segunda, hubo una guerra fría y muchas calientes; el socialismo convirtió a la miserable Rusia en la superpotencia soviética que, siete décadas después, se desintegró. Gobernó Gómez mientras vivió y luego hemos tenido dictaduras blandas, dictaduras duras, dictaduras disfrazadas de democracia y democracias acusadas de ser dictaduras. Y, mientras tanto, ese señor ha seguido tocando el arpa.

Es lógico que una persona con tantos años de actividad artística tenga muchos admiradores y haya acumulado numerosos premios y reconocimientos, entre los que se cuenta un Grammy Latino y el rango de Patrimonio Cultural de la Música Universal, entregado este último no por una institución venezolana sino por el gobierno del departamento colombiano de Meta, territorio donde se escucha, se toca, se baila y se admira la música llanera de ambos lados de la frontera.

Su vida, ya está dicho, ha sido como la llanura a la que le ha dedicado acordes y letras: extensa, inabarcable, hasta el punto de completar un También es natural que haya acumulado unos cuantos detractores. Algunos de ellos lo acusan de haber caricaturizado al llanero, al presiglo, privilegio reservado a pocos. sentarse con unos elegantes liquiliquis y unas bufandas o cobijas soTorrealba ha llegado a la centena de años con una envidiable salud, bre los hombros. Dicen que esa fue una manera de “vender al llanero lo cual le permitió ir al palacio de Miraflores a recibir la Orden de en Caracas”, entendido el término desde el punto de vista mercadolos Libertadores en su primera clase y una réplica de la espada de técnico. Por muchos años, los capitalinos creyeron que de verdad los llaneros andaban por ahí con esas colchas terciadas. Bolívar. Prolífico compositor y exitoso intérprete de la música llanera, este maestro nació en Caracas, pero muy temprano fue llevado al que sería su verdadero terruño: Camaguán, en el estado Guárico. Allí, en el hato Banco Largo, trascurrió su infancia y adolescencia. Durante su periplo vital ha sido fértil y prolífico: diez hijos (ocho caballeros y dos damas) y más de 300 temas son parte de su legado. Tuvo descendencia a finales de los 30 y luego en los 40, los 50, los 60 y los 80.

Musicalmente, Torrealba hizo algo parecido a eso del vestuario: potabilizó los cantos llaneros para que pudieran ser consumidos por públicos refinados, incluyendo algunos visitantes europeos y estadounidenses. Para ello apeló a sus dotes de arpista fino (aunque autodidacta), incorporó un contrabajo al conjunto y hasta prescindió de algunas voces sin domesticar, como la de Ángel Custodio Loyola. En su lugar, se decantó por los exquisitos registros vocales de Rafael

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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El conjunto de aquellos años iniciales se llamó Los Torrealberos, pues estaban presentes Arturo Torrealba, el hermano de Juan Vicente, así como su hijo, Santana Torrealba, quien comenzó a sonar las maracas del grupo desde los siete años de edad.

Algunos de sus detractores lo acusan de haber caricaturizado al llanero, al presentarlo con unos elegantes liquiliquis y unas bufandas o cobijas sobre los hombros _

Pero si queremos analizar los momentos opacos de la centenaria vida de Torrealba debemos hacer un alto en 1958, luego de la caída de Marcos Pérez Jiménez. Al músico se le pasó una extensa factura por su participación en actos públicos de la dictadura, especialmente en las inauguraciones, que eran muy frecuentes porque aquel era un gobierno que se dedicaba con el mismo esmero a construir obras y a apresar, torturar y asesinar adversarios.

En todo caso, el mismo datero enmascarado dice que eso ya no tiene la menor importancia porque, a estas alturas, el hombre está más allá del bien y del mal, como tendrá que reconocerlo cualquiera que oiga “Concierto en la llanura”, en especial si oye la versión sinfónica que dirige Gustavo Dudamel. “Él casi la baila”, ha dicho el propio autor.

Montaño, Mario Suárez y Héctor Cabrera. “Fueron los tres pilares de aquella época”, ha dicho el propio Torrealba en entrevistas concedidas recientemente. Otra voz prodigiosa que se acopló a la perfección fue la de Magdalena Sánchez, a quien por algo llamaban la “Reina del folclor venezolano”.

A Pérez Jiménez le gustaba el grupo Los Torrealberos, seguramente porque había en ellos algo de militar y del Nuevo Ideal Nacional: eran recios, nacionalistas y siempre con el uniforme (cobija incluida) de punta en blanco. El maestro tiene una manera muy escrupulosa de referirse a los adecos y copeyanos que lo sancionaron cerrándole todas las puertas que pudieron. Los llama “los que vinieron después de Pérez Jiménez” y dice que lo silenciaron en todos los medios de comunicación. “Se dedicaron a decir que yo era una hechura de Pérez Jiménez, algo completamente absurdo”, expresa. A Torrealba parece haberle ocurrido en el campo de la música lo mismo que le pasó al sabio Humberto Fernández Morán en la ciencia. La maquinaria ideológica y mediática del puntofijismo (que no era como las de ahora, pero vaya que existía) se empeñó en descalificarlo, llamándolo “El Brujo de Pipe” (en referencia a los Altos de Pipe, estado Miranda, donde se ubica la sede del Instituto Venezolano de Investigaciones Científicas). Fernández Morán tuvo que irse del país y terminó prodigando sus inventos y talento a países desarrollados. Torrealba también pasó un tiempo fuera, sobre todo en España, pero luego logró sobrellevar el veto. “Los que vinieron después de Pérez Jiménez” no lograron borrarlo por completo, y la mejor prueba es que los niños y jóvenes de los años 60 y 70 oímos hablar de él, desde muy temprano, como una luminaria de la música llanera. Un conocedor del tema accede a darme algunos datos, bajo la condición de que no lo identifique con su nombre. Le digo que eso parece una exigencia más apropiada para informaciones escabrosas de la política o de los sucesos. “Bueno, es que la gente se puede molestar si uno se pone a decir cosas pesadas acerca de un señor que está cumpliendo 100 años, y lo que voy a decir es pesado: Juan Vicente Torrealba no ha sido nunca un míster simpatía. Era un poco pedante de joven, y la cosa se le agudizó con el paso de los años... Si hubiera tenido algo del carisma que tuvo Simón Díaz, no te cuento el tipo de ídolo que sería”. Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Al profundizar en sus testimoniales se constata que Torrealba es agradecido con quienes le ayudaron a surgir. Recuerda a Natividad Marchena, un arpista de llano adentro, quien le enseñó las primeras nociones de ese complicado instrumento típico. “Ese señor tocaba que era una maravilla. Viéndolo, yo aprendí a medio rasguñar el arpa”. También expresa gratitud por María Luisa Escobar, quien le dio oportunidad de presentarse en Radio Nacional y luego le recomendó grabar un disco. Cuando finalmente lo hizo, fue para él un gran impacto, pues en ese tiempo no era tan fácil tener acceso a una grabación de sonido, así que él jamás se había escuchado a sí mismo de esa manera. “Estuve oyendo el disco toda la noche, hasta las 3 de la madrugada”, cuenta en su anecdotario. Su gusto por los discos lo llevó luego a tener más adelante su propio sello, denominado Banco Largo, igual que el hato de sus años mozos. En cierto momento decidió dejar esa aventura y firmó contratos con sellos como Sonográfica y Basf. Además de la discografía, Torrealba ha dejado algunos testimonios escritos, entre ellos un libro titulado El llano de Juan Vicente Torrealba. “Allí no hablo del llano en general, sino de mi llano, el que yo conocí”, explica. También hay un archivo importante de material fílmico, incluyendo películas protagonizadas por astros del cine mexicano, como Antonio Aguilar. Con motivo de arribar, el 20 de febrero, a los 100 años de edad, el presidente Maduro le otorgó la máxima condecoración nacional y la emblemática espada del Libertador. Y al recibirla, este hombre, al que algunos le atribuyen una perenne arrogancia, dijo las siguientes palabras, cargadas de humildad: “Espero vivir un poco más para ser digno de merecer tanto”.

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el menjurJe

el señor de los barquitos En Altamira, cerca de la entrada de Sabas Nieves, un señor construye y reconstruye barquitos de madera. Tiene un peñero que hace soñar con el mar. Fue buzo, guía de turistas en Margarita y cuando usted se baja de la montaña con ese espíritu revuelto pero sosegado, y se queda un rato mirando los barquitos, se da cuenta de que la esperanza está intacta, aunque la piel esté adolorida, si ese fuese el caso. Como dice la canción, pero cantada por la periodista que canta: En el mar la vida es más sabrosa. El señor de los barquitos pidió que lo llamásemos así.

Si al pan pan y al vino vino... ¿qué pasó con el vino?

El sentimiento que viene después de esa sensación justo antes de

Simbolismos Hipólita, Matea, Apacuana. No importa que Hipólita “solo” haya amamantado a Bolívar. No importa que Matea “solo” sea negra. No importa que Apacuana “solo” sea indígena. Lo que importa es que son símbolos que exaltan la solidaridad, el patriotismo, el amor y la nobleza de la mujer venezolana. Su ascenso al Panteón Nacional no fue bien visto por algunos y algunas. Eso tampoco importa. Al final la Historia debe ser escrita por los justos, por la justas, no por quienes creen tener el poder de dominar con “certezas” retintas, “certezas” manchadas de racismo.

Talleres EN EL TERESA CARREÑO Maquillaje Teatral por Mariana Noguera, el 25 de marzo. Escritura Creativa por Luiz Carlos Neves, el 27 de marzo. Estas dos actividades, dirigidas a jóvenes y adultos, serán acreditadas con certificados de asistencia y tendrán un costo de 10.000 y 15.000 bolívares, respectivamente. Los talleres estarán a la venta en las taquillas del teatro y página web. Posteriormente se debe formalizar la inscripción en el Centro Documental.

« Manifiésta.te « Caracas, 19 de marzo de 2017.

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MITOS

lo que esconde un diente roto POR Marlon Zambrano @marlonzambrano ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

No sé si realmente sea demasiado interesante una biografía de Pedro Emilio Coll (1872-1947). Parece deslucido detrás de esa imagen clásica del funcionario ladeado, trajeado con la estricta levita negra asolapada, el chaqué de botonadura cruzado y el corbatín tiznado que no transmiten sino cierto escozor por la distancia almidonada, ese aire de busto apolillado y aroma a naftalina augusta detrás de los bigotitos de leche y el pelo tallado con espesor de tejido.

sidencia de la República, y aunque suponemos que Pedro Emilio Coll hizo acopio de la sola imaginación en su obra, las punzadas biográficas de la historia patria se condensan abismalmente en su ficción.

Fue asiduo de las peñas intelectuales de la Caracas de entre siglos, moviéndose cómodamente en círculos literarios y políticos, fundando con Luis Manuel Urbaneja Achelpohl la revista Cosmópolis y colaborando con El Cojo Ilustrado, donde asomó por primera vez “El diente roto”. Lo que hace de Pedro Emilio Coll atractivo, quizás, es la destreza con Publicó sus obras de ensayo y cuento en varias ediciones, integró las la que condensó el drama fundacional de uno de nuestros más íntimos academias de la Lengua y de la Historia, fue ministro y hasta senador. dilemas sociales: el silencio como signo de erudición y la habladera de Llegó a ocupar el cargo de cónsul de Venezuela en Southampton, Inglapaja que esconde nuestras aspiraciones de ascenso. terra, entre 1897 y 1899, desde donde coordinó la sección “Letras Hispanoamericanas” de la revista Le Mercure de France, editada en París. Un cuento clásico de su autoría, “El diente roto”, nos permitió intuir un principio místico: si un hombre calla es que está pensando. En cambio, Quizás por allí, o por otro resquicio, se desaguó una de las tendencias detrás de uno que habla, sobre todo si habla mucho, hay alguien que más aborrecibles, pero no por ello menos reiteradas, de la creación liteexagera, manipula, adula y, aún peor, se equivoca. raria: el plagio. Muchos años después de la muerte del nuestro, el escritor polaco nacionalizado estadounidense Jerzy Kosinski publicó Desde “El diente roto”, para no hablar de Pedro Emilio Coll sino de su desi- el jardín (1971), que trata, ¡oh casualidad!, de un personaje que hace su derátum, es un texto inaugural del modernismo, escrito en 1889 e vida perdido en la nada, dedicado, con un ostracismo casi monacal, al impelable en cualquier antología de la literatura venezolana. En resu- cuidado de las flores de un jardín mientras ascendía los escaños de la men, narra la historia de Juan Peña, un enigmático personaje que por fascinación adulante de “las masas”, que veían en Chance (nombre del chuparse un diente partido por una pedrada de adolescencia, atravesó protagonista del polaco) una especie de némesis que enaltecía el valor la existencia sin decir esta boca es mía hasta hacerse diputado, acadé- del recato ante la sobresaturación de palabras, argumentos, mensajes mico y ministro con el único crédito de no hacer nada sino acariciar y banalidades para encontrar, cada quien, su espacio en este mundo la sierra de su incisivo apenas sin pensar. Una apoplejía en su adultez y en el de los demás, contrario de alguien que prefiere reservarse en el le escamoteó trepar al máximo escaño de la aspiración social, la pre- silencio, mientras piensa. Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

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FOTO JESÚS CASTILLO

CIUDAD

piélago a la hora que las guacamayas se devuelven (o se van), caracas empieza a transformarse en una ciudad con ese vaivén digresivo que no todos sabemos bailar POR gustavo mérida• @gusmerida1

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A las 6 pm el sol le daba de través y al Waraira Repano, visto desde la parte más alta de la autopista —tan alta como la noria del parque Italoamericano— le pasaba “eso” que le pasa a la montaña y que el mejor modo de describirlo es el lugar común: la luz del Sol, que lo baña suavemente, pinta el claroscuro que anuncia su pronta ausencia, que presagia “eso” que pasa en algunas ciudades sin lugares comunes: las calles se quedan vacías demasiado temprano.

en sus casas, porque si la sensación de esconderse de la oscuridad existe es porque hay oscuridad. Sin sombra no hay luz, la sucursal del cielo, valle de balas, lo demás es monte y culebra y si se pone suficiente luz porque —aquí queda bien un “coño”—, coño, hay luz pero falta luz. Caracas asediada .

Demasiado. Ir al grano es algo que da miedo. Por eso tanto recoveco: hay que tener claro lo que está oscuro allá, bien adentro de cada quien, para ir y decir lo que se sabe, que al final es ¡quién sabe! A las 6 y 30 pm todos los bancos de la claroscura placita Andrés Bello —esa que está al lado de la Fuente de la Plaza Venezuela, después del parque para niños— están ocupados por parejas, unas más románticas que otras. De repente, del banco que está más cerca del aviso luminoso hasta la mitad de corazones coloridos, una de las parejas comienza a bailar una canción demasiado lejana para saber si era merengue o salsa.

Ella y él danzan mientras oscurece

Mientras, en otra parte de la Ciudad Universitaria y apenas una hora más tarde, detrás de la oscura placita Salvador Allende, la todavía más oscura parada del Hospital Clínico Universitario en el Paseo Los Ilustres está llena de infortunados y fantasmales transeúntes que esperan un transporte de mierda —que público no es— en medio de una oscuridad que se extiende hasta el principio de la avenida Presidente Medina, cuando al Paseo vuelven las más tímidas luces que alumbrado público del mundo pueda entristecerse de tener. Ellas se extienden Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

FOTO ENRIQUE HERNÁNDEZ

hasta donde la semioscuridad deja ver. A veces, una semiclaridad emociona para luego volver a la claroscura, débil, parpadeante y exasperante semioscuridad que, como palafitos dispersos, angustian la esperanza de lo gratificante que debe ser —Chávez dixit— esta Revolución.

para bañar a sus hijos —ah, el proletariado— sino porque le da miedo esta semioscuridad que nos salpica con ese ritmo desafinado que nadie quiere bailar.

Una bolsa, pequeñita de verdad, de cotufas cuesta 500 bolos y la grande 800. La grande es mediana pero el cotufero, colombiano Por eso es que quedarse un rato en la Plaza amable, da una ñapa que vale 500 bolos. “Si Venezuela, al lado de la alcabala que instala viene la Policía Nacional me tengo que ir. la Guardia Nacional, hace que se disperse Con la Guardia no”. esa desesperanza. Es la misma alcabala que le parece inútil al conductor apurado por A las 7 y 50 ya la oscuridad acecha, pero llegar a su casa antes que anochezca, no las luces del agua de la fuente no se dejan; Caracas, 19 de marzo de 2017.

los niños corretean mientras transeúntes con forma de seres humanos con alma se agarran las manos, o se sacan las espinillas, o se miran embebidos. O discuten y se cruzan de brazos y uno los mira mientras anochece. Suerte que la luna estaba llena. O semillena. Ese vaivén de oscurana, que a veces nos gana, marea las peas y ya el regocijo de la noche se diluye porque ya el transporte, sin luz, funciona peor. Irse para los Altos Mirandinos después de las 8 de la noche es arriesgarse a, por lo menos, descompletar la

De una manera garciamarquiana, es como si toda el agua de la fuente luminosa se desparramara y el Tuy III desatara la sequía caraqueña en pleno siglo... ya va. El portal La Patilla, hace un año, mencionó el texto del escritor colombiano “Caracas sin agua” y lo mezcló para decir que la Revolución nos retrasó hasta la mitad del siglo XX. Por ese chantaje, por ese poder que ejercen los medios de comunicación es que da miedo ir al grano, como si se supiera bien a dónde ir, cómo si se supiera bien cómo es que se hace bien. Si hubiese suficiente luz en toda Caracas como en Plaza Venezuela, o en la Cota Mil como en la avenida Bolívar, o en todo el Paseo Los Ilustres como entre Gradillas y San Jacinto, quizá la gente ralentice esa angustia de encerrarse demasiado temprano y alguna Ruta Nocturna aclare el claroscuro de las calles solitarias luego de que se van, o vienen, las guacamayas.

quincena, que aunque se sienta que viene En Plaza Venezuela los bancos de la placidescompleta, quién sabe. Menos mal que ta se van quedando solos demasiado temprano. Las parejas se van y no quiero que no está todo oscuro. se vayan. La noche se queda y tampoco me quiero quedar. Encontrar un sitio en Y se hizo la luz Los mismos árboles frondosos, que dan esta ciudad que los esconde en todas las sombra y que tienen un himno, volvieron penumbras se hace difícil. Hay una clase añicos las aceras y ningún ser humano en de seres solitarios que necesitan atisbar la silla de ruedas rueda por la acera porque luz de los demás y en esta semioscuridad, las raíces de esos árboles hicieron que cre- que semioscurece demasiado todas estas cieran frondosos entre aceras y postes, y la calles, esos seres, que también son humatímida luz que hay se opaca aún más entre nos, no caben todos en una sola Plaza Vefiguras fantasmales que esperan un trans- nezuela. Que se deshaga la luz mortecina porte para ir a esconderse de la oscuridad para siempre. Caracas, 19 de marzo de 2017.

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cARACAS, MONTE Y CULEBRA

“Lo nuestro” POR josé roberto duque @jrobertoduque ILUSTRACIÓN ALFREDO RAJOY

Viví 30 años en Caracas, ciudad a la que sigo yendo (irremediablemente y por fortuna), y doy fe de los resultados de un experimento. Del gentío al que le hice la pregunta durante varios años, solamente dos (2) personas me respondieron que sí: que son caraqueños de tercera generación. Es decir, nacieron en Caracas, al igual que sus padres y abuelos maternos y paternos. Una de esas personas (Sandra Zapata) nació en San Juan y la otra (Claudia Hernández) en Antímano. Parroquias viejas y con sólida personalidad. Debe haber muchos sanjuaneros, pastoreños y antimanenses de varias generaciones, seguro que sí. Le propongo que vaya y haga una encuesta a ver a cuántos encuentra. Quiero adelantarle el resultado: los encontrará, pero lo logrará con el sudor de su frente. Esa dificultad para encontrar caraqueños de larga raigambre no significa, de ninguna manera, que lo caraqueño o la caraqueñidad se estén disolviendo. Puede significar, más bien, que debemos acostumbrarnos a la idea de que Caracas, como cualquier otra urbe, ciudad o poblado, no es un asunto estático —que si se mezcla con cosas foráneas puede desintegrarse— sino un ser vivo y dinámico que, por mucho reguetón que le zampes, siempre será Caracas: una ciudad que muta al ritmo de la humanidad a la que pertenece. No hubo ni habrá Caracas única y mucho menos pura, ya de eso se ha hablado bastante.

menta de nostalgia, y la nostalgia no siempre se la lleva bien con la Historia. El eslogan con pretensiones de sentencia: “Todo tiempo pasado fue mejor”, olvida o ignora que esos techos rojos eran para los ricos y que para los pobres siempre hubo techos de cartón, o ausencia de techo. Caracas es un hormiguero multiclasista y volátil. Volátiles son también nuestra música y nuestra cultura “venezolanas”. ¿“Nuestras”? Obviemos la peculiaridad del lenguaje de propietarios; relajémonos, respiremos profundo y repitamos: menos mal que “nuestros” hijos no son solo los que engendramos, también lo son los que adoptamos (recordémosle al cultor del joropo por qué la resonancia árabe o andaluza de sus pajarillos y carnavales).

Postdata: un fantasma recorre los pueblos de la Venezuela de provincia (“el interior”, lo llaman algunos), y es ese empeño de los muchachos en querer hablar, moverse, comportarse, vivir como ciertos caraqueños, o como ellos creen que son los caraqueños: moto, jerga más o menos malandra, música o ruido a reventar, actitud violenta. Palabra de aliento y alivio: tranquila, madre; tranquilo, padre: eso que tu hijo andino, llanero, oriental, marabino o insular se esfuerza en copiar es, al mismo tiempo, una copia. Tu chamo pretende imitar a un caraqueño que no existe, mientras que El discurso que reivindica a los techos rojos y a la Billo’s como el rasgo vital de tu cultura madre permanece latente, ahí, al ladito, rasgos de lo que la capital nunca debió dejar de ser solo se ali- a la espera del despertar.

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BOLEROS QUE CURAN EL ALMA

“Tú me acostumbraste” POR Humberto Márquez ILUSTRACIÓN Julietnys Rodríguez @julietnys

Es un bolero emblemático de Francisco Manuel Ramón Dionisio Domínguez Radeón, nacido en la Villa de San Julián de los Güines, en Matanzas, Cuba, en 1927, y mejor conocido como Frank Domínguez... la letra es matadora para estas cosas de las separaciones amorosas: Tú me acostumbraste a todas esas cosas y tú me enseñaste que son maravillosas. Sutil llegaste a mí como la tentación, llenando de inquietud mi corazón... Pero su final es la suplicante pregunta que hacen los amantes al borde de la separación: Por eso me pregunto, al ver que me olvidaste, ¿por qué no me enseñaste?, ¿cómo se vive sin ti? Decía Frank: “‘Tú me acostumbraste’ es uno de los números míos que más gusta y el más difundido. Me lo grabó, primero, René Cabell, después Olga Guillot, Lucho Gatica y ahora Luis Miguel. La verdad es que me emocionó mucho, mi hija fue la que me llamó y me lo puso para escucharla por teléfono. ¡Qué bueno!, porque este chico vende bastante”. Sin embargo, ese bolero, que ha servido para enamorar mujeres, pudo haber sido escrito para un hombre. Y digo pudo porque Frank era un hombre casado y con hijos, lo que implica pero no impide. Y sería entonces un bolero bi, o sea, que sirve para susurrarlo en la oreja de ambos sexos. En su artículo “El código secreto de algunas letras”, Jorge Aulicino, periodista y escritor, cuenta que hay en la mitología del bolero historias secretas, mensajes cifrados cuyos conocimientos introducen en un mundo de profesantes y les dan a determinados temas el valor de una clave. Cierto es que la eficacia de ninguna letra o poema debería basarse en hechos exteriores a los que la ficción narra, pero el bolero es más que un género musical: es un mundo cuya carta de membresía requiere menos erudición que el tango y mucha más información improbable, chismográfica, novelesca. Y cuando entra en este bolero, nos dice: “Casi no hay dudas, en el mundo ultraerotizado del bolero, de que el tema ‘Tú me acostumbraste’, de Frank Domínguez, es un mensaje cifrado de amor gay (Yo no comprendía cómo se quería / en tu mundo raro)...”. Ojo, lo gay no le quita, para nada, su belleza. Caracas, 19 de marzo de 2017.

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MÚSICA

el palabrerío de el cazador novato Ponga youtube y escoja varias de sus canciones. si al terminar de escucharlas no siente que le hablaron directamente a usted, pida que le revoquen la nacionalidad POR nathali gómez • @laespergesia

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Un texto escrito por una caraqueña sobre Rafael Martínez Arteaga, conocido como El Cazador Novato, tiene como prueba principal sortear la desconfianza de los lectores que nacieron más allá de la capital, en lo que soberbiamente algunos llaman “el interior”. Este coplero, cronista y declamador colombo-venezolano, nacido el 26 de enero de 1940 en el fundo Jurapal, en Arauca, le contó a José Roberto Duque, ante la duda sobre su nacionalidad, que el cuarto de la casa donde lo parió Ramona Arteaga quedaba en Venezuela y el fogón donde le cocinaba, del lado colombiano. El 5 de marzo, cuando Chávez cumplió cuatro años de haberse despedido, también lo hizo El Cazador, como si en el llano confluyeran las casualidades y los infortunios, que a pesar de la distancia, siempre llegan a Caracas. A los 16 años Rafael ocupó el primer lugar como compositor e intérprete en el Encuentro Nacional de Folclor, en Manizales, Colombia. Y es que, para cualquier amante del joropo, la frontera entre “los copleros de aquí” y “los de allá” es solo una línea que no logra fracturar la música.

La vida de Rafael

Como todo muchacho criado en el campo, le metía el pecho a las labores de cualquier hato y lidiaba con los animales. De su experiencia, llena de sudor y tierra, salió la canción con la que ganó en 1966 el Primer Torneo Internacional de Joropo en Arauca: “Llanura, yo soy tu hijo”. Si algún día voy a dejarte no debes de dejar marcharme / Llanura yo soy tu hijo trátame como mi madre. Y si aún se hurga más, lo vemos una tarde, cuando tenía 5 años y puso a bailar a todos en el parrando llanero de Navidad en el hato donde nació. “Sin haber preparado

FOTO FELIX GERARDI

nada resulté contrapunteando con grandes copleros de la región”, refiere Duque. Después vendrían unas 300 composiciones más entre las que están “El cazador novato”, “La ley del llano”, “El viagra”, “Evitar no es cobardía”, entre otras.

La vida de El Cazador

Un escrito sobre El Cazador Novato, más que leerse y escucharse, tiene que haber sido vivido. A pesar de la distancia y la visión de cemento que deja la ciudad, confieso que lo intenté. Cuando era una caraqueñita, que se asustaba ante un tuqueque, recuerdo que unos amigos en San Felipe, Yaracuy, a unos 400 km de las llanuras del Arauca, terminaban cualquier reunión coreando canciones de El Cazador Novato. Yo, que no las conoCaracas, 19 de marzo de 2017.

cía ni por casualidad, me sentía fuera de lugar por no saberme con tanta seguridad ni un pedacito. Ellos decían las estrofas como si hubieran ensayado la escena por años. Cuando les pedía que me las enseñaran, se tapaban la boca con las manos y con esa sonrisa tímida de quien sabe que no debe hacer algo, me decían: “No podemos cantarte más porque son muy groseras”. Y es precisamente en esa lírica “muriática”, como la llama Duque, donde está el interés que me fue vedado en mi infancia. El Cazador cantaba como hablaba y hablaba como somos. “Soy un poeta dicharachero que canto como hablo, no utilizo un lenguaje rebuscado y le debo respeto al público”, dijo alguna vez. Y es precisamente eso, el respeto, que va mucho más lejos que las buenas palabras. Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


ENCARTADO

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fotorreportaje

Las alturas de El Rodeo III

La torre, la que todo lo ve

Fotografiado pillando a fotógrafo

redimirse en el rodeo El presente trabajo muestra a hombres eN distintas tareas. Los muestra uniformados y desde ángulos INUSUALES. Pero lo que más muestra son hombres trabajando POR ANDER DE TEJADA / Fotografías MICHAEL MATA

Cotidianidad angosta del visitante común

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Los azules, los procesados

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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Las banderas del país ondearon junto a las del penal y fueron entregadas al equipo visitante

Quizás una de las cosas más difíciles con las que se pueda enfrentar un ser humano sea el encarcelamiento. No importa si antes te calificas a ti mismo de animal salvaje e indomable, de león del Serengueti o de jaguar del Amazonas. Parece no haber animal imposible para las rejas del cautiverio. Con la excepción de los peces gordos, dirían por ahí, con soporte claro de la evidencia. Más que acostumbrados estamos a escuchar el mismo tipo de relato en lo que respecta a la cárcel: el dolor, el tormento de las rejas, los sistemas de poder y las formas de interacción con el otro. Como si el mundo exterior fuera la cara de una concha que, al voltearse, deja este inframundo, este mundo al reverso.

El básquet, quema de energía y amor común de procesados y penados

Cárcel: comida de El Gran Combo y almuerzo multicultural de hogar caraqueño

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Sin embargo, este relato (Gustavo Mérida, edición 215) parece del mundo exterior.


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Los poderes de la crónica reproduciéndose en El Rodeo III

El agua: si se le dedica tiempo, crecen las cachamas

El aprendizaje de lo nuevo como motor

Cosecha, esperanza: dos días de trabajo, uno de redención

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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SOBERANÍAS SEXUALES

MUD descolorida POR Víctor Fha ILUSTRACIÓN L. “RAZOR” BALZA

El 31 de enero se cumplieron tres años desde que se introdujo en la Asamblea Nacional (AN) el primer proyecto de ley para modificar el Código Civil y reconocer legalmente a las parejas del mismo sexo. Lxs opositorxs, que no se cansaron de acusar al chavismo de homofóbico por no aprobar este proyecto ley, hoy nada comentan del silencio e inacción que al respecto ha tenido la ahora mayoritaria Mesa de la Unidad Democrática (MUD), a pesar de contar en sus filas con la primera diputada transgénero del país. Tamara Adrián, que llegó al recinto como suplente por el partido Voluntad Popular, comentó en la entrevista que le hizo el periodista Ernesto Villegas en el programa Siete Preguntas de Telesur, el 28 de marzo de 2016, que en los próximos meses la AN iba a aprobar una normativa que reconocería derechos a parejas del mismo sexo. A casi un año de esa entrevista, nada ha pasado en el parlamento. A contracara de los buenos augurios que hizo la diputada sobre la actual gestión en la AN, y de las acusaciones que vocerxs de su partido hicieron sobre los demás poderes del Estado al señalarlos de títeres de un Gobierno nacional al cual consideran homofóbico, los dos avances en materia normativa que tuvieron lugar el año pasado fueron por parte del Poder Judicial y el Poder Ciudadano. En el caso del Poder Judicial, el 15 de diciembre pasado la Sala Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) sentenció a favor de la doble filiación del hijo biológico de Migdely Miranda y Ginyveth Soto, nacido del vientre de la primera y concebido en el óvulo de la segunda a través de una fertilización asistida que esta pareja de lesbianas se realizó en Argentina luego de contraer matrimonio en ese país. Previo a esta decisión, el niño no era reconocido en suelo venezolano como hijo de Ginyveth, limbo jurídico que se agravó cuando Ginyveth fue asesinada en diciembre de 2014. Con la sentencia del TSJ, el niño ahora figura como heredero legítimo y se sienta un histórico precedente. Por su parte, la otra noticia vino del Poder Ciudadano cuando el Ministerio Público anunció en septiembre del año pasado que luego de varias mesas de trabajo, y a petición de organizaciones sexo-género disidentes, acordó con el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería que toda persona debe ser fotografiada en su cédula de identidad con la expresión de género con la cual se asume. Lo que nos señala un diagnóstico mesurado es que en nada está contribuyendo la MUD para que sea cada vez menor la opresión fundada en la identidad y orientación sexual disidentes. En cambio, son cada vez más las banderas de arcoíris que se ondean en las movilizaciones del chavismo y cada vez más visible el impacto de estas organizaciones en las políticas públicas. Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 19 de marzo de 2017.


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libremente

¿Cuán consciente eres en el día? Por Miguel Posani @mposani ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

Todos los días nos despertamos y comenzamos nuestra rutina, entramos en nuestra cotidianidad y vamos escogiendo cosas, comidas, tareas, actividades, preocupaciones, entre otras, y generalmente todo eso lo hacemos en una óptica reactiva. Reaccionamos y desarrollamos un guión inconsciente, sin darnos cuenta. Así somos en nuestra cotidianidad, generalmente. Por eso no te preguntas nunca si eres consciente o no, crees que siempre eres o estás consciente. Todos creemos que nosotros, “ese yo”, esa consciencia que está leyendo estas palabras, es la que controla todas nuestras escogencias cotidianas y nuestro andar por el mundo. Nada más lejos de la realidad. Para hacer eso deberíamos estar siempre conscientes, en actitud reflexiva sobre nuestros actos, respuestas, pensamientos y sentimientos y eso se da muy poco en la cotidianidad. La cotidianidad del capitalismo se mueve en la inconsciencia, necesita de esta. Por eso se nos hace aún más difícil ser conscientes en este sistema. Creemos, constantemente, que nos controlamos y tratamos de controlar la realidad, pero es una especie de espejismo. No controlamos el cuerpo, lo mueve el inconsciente; no controlamos ni nuestras emociones ni deseos y tampoco nuestros pensamientos. Pero creemos que sí, hasta que tratamos de reflexionar sobre nosotros mismos, nuestras vivencias; tratamos de vernos de forma distante, observando simplemente cómo reaccionamos, por ejemplo.

Habría que desarrollar un trabajo de reflexión sobre nuestras acciones cotidianas a ver si nos damos cuenta. Y darnos cuenta de cuán dormidos vamos todos los días repitiendo ¿Cuántas veces somos conscientes verdaderamente de nuestras escogencias, de lo que nos gusta, de nuestros juicios y respuestas? acciones, repitiéndonos en nuestros comportamientos y pre¿Cuántas veces no nos arrepentimos luego de respuestas que juicios, repitiéndonos sin ponernos en discusión. Es más, la misma repetición implica que no hay reflexión. damos bajo ciertas emociones?

Ejercicio Prueba a detenerte un momento y recuerda todo el día transcurrido. Trata de darte cuenta en cuáles momentos fuiste realmente consciente de ti, de la situación, de cómo respondías en ese momento, a ver si lo con-

sigues. Puedes preguntarte, si quieres explorar más profundo en ti, qué significa ser consciente: es ver, moverse, responder o, tal vez, observarte en tus acciones y respuestas. Trata de cultivar ese acto de observarte. Caracas, 19 de marzo de 2017.

“Puedes pasar tu vida dormido o despierto, eso depende de ti”. Buda Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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o ir e sg bl de e la rie u e u p p s A Im Se

GASTRONOMÍA Calidad

PICHONES DE SIBARITA

Ambiente

“volveré”

Atención

POR reinaldo gonzález d. @odlanierØØ FOTOGRAFÍAs enrique hernández

“Cantidad no es sinónimo de calidad” (ofrezco excusas por el lugar común o el dicho tonto, que por lo general son la misma cosa), y menos cuando hablamos de los ingredientes que contempla un plato. Una arepa, por ejemplo, resulta difícil de morder cuando el relleno alcanza para dos (arepas). Todo se desparrama. No es manejable. No se disfruta. Ayuda pedir un cubierto y comerse parte del relleno por separado, pero prefiero una cantidad prudente que, además, disminuya el precio. Es por esa razón que mi preferencia “jamás y nunca” (lugar común [LC] No 2 y redundancia) será atendida. La solución que por mucho tiempo apliqué fue pedir una arepa sencilla y una viuda (sin relleno), dividir el relleno de la primera y compartir la comida y los gastos con otro u otra, pero se fue corriendo la voz de esta práctica y hoy, como consecuencia de un plan orquestado por los dueños de las areperas (LC No 3), la viuda “brilla por su ausencia” (LC No 4, y ya). Una cantidad excesiva de queso crema en una pizza Philadelphia (que además incluye champiñones, tocineta y cebolla en tiras), solo para que salga bien la foto, puede convertir una experiencia gastronómica potencialmente grata, dada la estimulante combinación de sabores, en un suplicio empalagoso. “Cabe destacar” (perdón) que el término aplica principalmente a lo dulce, pero no es exclusivo de ello. Omitir la cualidad tostada pero suave de la masa de Mazzini sería injusto. En este restaurante, inaugurado el 2 de mayo de 2002, se cocina a leña, una ventaja incuestionable sobre los hornos de gas o eléctricos. Recuerdo haber comido allí excelente pizzas, cuando compromisos laborales de principios de siglo me llevaban a La Candelaria: el local está ubicado en la avenida México, entre las Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Minis Públiterio co

Plaz Parqua e Carab obo

Rest. Mazzini

Av. M éxico

M

Bel Artelsas

Av. B oliv ar

Horarios

Lunes a domingo de 11:30 am a 10 pm Precios

Pizzas entre Bs. 4.000 y 20.000 Fideuá: Bs. 21.000 Batidos: Bs. 1.600 FORMAS DE PAGO:

✓ Efectivo ✓ Débito ✓ Crédito ✓ Cesta Ticket ✓ Tarjeta de alimentación estaciones de Bellas Artes y Parque Carabobo, a pocos metros del Paseo Anauco. Posee un amplio estacionamiento, exento de pago para los clientes. Caracas, 19 de marzo de 2017.

Antonio de Abreu, uno de los socios, habla bien de la pizza Capricciosa, que incluye jamón serrano y vegetales varios; y la Parmigiana, con salsa boloña y queso parmesano. Recomienda, además, la fideuá (variante oral de la “fideuada”), un plato originario de la Valencia española a base de fideos y mariscos, cuya preparación se parece mucho a la de una paella. Es, a su vez, el plato más costoso del menú, pero alcanza para dos personas y “donde comen dos, comen tres” (“no puedo evitarlo”, “va más allá de mí”, “me excede”). Volveré como un comensal más, sin anunciar reseñas ni fotos. En honor a los recuerdos, Mazzini merece una segunda oportunidad.


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ENTREVISTA

www.manifies.to Para conectarse a conciencia No fue hecho para hacerse selfies. Sí para organizar. No quiere tener un millón de amigos fatuos. Sí los quiere para promover iniciativas sociales. Ninguno tiene la plata de Zuckerberg. hacen vaca para pagar las cuentas. Llevan un año en el ruedo y son una mezcla de Twitter con Facebook, con el Plan de la Patria. Son Manifiesto POR Marlon Zambrano • @marlonzambrano / Fotografías Maryori Cabrita

Caracas, 19 de marzo de 2017.

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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Nadie tiene sueldo. Cuando se reúnen para las pautas cuadran una vaca, reparten entre todos para la logística, para los viajes, para el café. Todos tienen hijos menos una. Se reúnen los lunes y programan una interrogante para dejarla en el aire y generar debates. Se alojan en una oficina del piso 48 de la Torre Oeste de Parque Central, donde funciona una comuna tecnológica con varias unidades de producción de software y hardware libre, robótica y formación. Allí tienen una computadora y una maquinita de café. Desde allí, y así, Manifiesto (www.manifies.to) da la batalla ideológica desde la trinchera tecnológica. Dentro de lo convencional ya registraron una empresa y van a empezar a vender espacios publicitarios a través de varios modelos de negocios, buscando los cobres entre la empresa privada y las instituciones públicas, y arrimando el hombro a los emprendedores que están haciendo cosas y necesitan publicidad a muy bajos costos o, incluso, trueque. Los han llamado desde Colombia y Argentina para que repliquen la iniciativa que desde el 7 de marzo de 2016 ha logrado captar a 6.000 usuarios en Venezuela, que más bien son militantes porque, más que cubrirse con el ropaje de las nuevas tecnologías de la información a través de un uso superficial de las redes sociales, las “usan” como recurso para el debate y la organización. Adriana Cruz, una de las responsables de la primera red social con acento criollo, saca un pequeño resquicio del poquito tiempo que le sobra de las atenciones filiales que prodiga a sus hijas: Simoné Victoria (de 3 años) y ManiEdición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

—¿Es Twitter, Facebook, Instagram?

—Mucha gente dice que es una mezcla. De hecho, su presentación tiende a parecerse más a Twitter pero con capacidad de 280 caracteres, y tiene dos instancias de publicación: postcortos y posibilidad de artículos más amplios. Una de las cosas que estamos evaluando es eliminar el límite de caracteres. —¿Tienen capacidad de almacenamiento?

—Sí, sustentado por la capacidad que tenemos de nuestros servidores. La de ahorita es más o menos para 50.000 usuarios, o sea que hay para rato. Se están incorporando, por el mes fiesto (de 1), para hablarnos desde la perspec- aniversario, cosas muy sencillitas pero que ya tiva del primer aniversario. funcionan en otras redes. Por ejemplo: ingresar a Manifiesto con tu nombre de usuario. Ahorita tienes que poner tu correo completo. —¿Qué se siente un año Es como para hacerle la vida más fácil a la gendespués? —Se siente mucha satisfacción porque he- te y tener mecanismos de comparación mos comprobado que lo que nació siendo una propuesta resultó completamente perti- —¿Los ciberatacan? nente. El primer logro es que ya tenemos más —Cuando nacimos éramos muy de prueba, de 6.000 usuarios, mujeres y hombres que muy débiles en código fuente. Salió, se dio vieron un potencial en nuestra plataforma a conocer. Se proyectaban 2.000 usuarios al tecnológica para comunicarse, para dar a co- año y en dos semanas tuvimos 1.600 y solo nocer sus luchas, sus trabajos, sus denuncias. nos sacaron dos medios nacionales. Y, bueLo novedoso es que es venezolano. Mucha no, eso llama la atención de las personas que gente en Venezuela y América Latina y el Ca- tienen como reto ver cosas y extraer informaribe está haciendo cosas interesantes. Hay un ción, y allí nos atacaron y golpearon durísiproceso de reflexión muy propio de la crisis mo. El ataque fue en junio. No cerramos porinternacional de valores, política, económica, que pudimos salvar la base de datos, aunque etcétera, y hay gente que se le están ocurrien- los contenidos que la gente había publicado do cosas interesantes, que en otras platafor- se perdieron. En septiembre sacamos una mas tecnológicas quizá se diluyan porque segunda fase de Manifiesto que llamamos están hechas para las banalidades, bombar- Manifiesto B2, que es la que tenemos actualdearte de publicidad, etcétera. mente. El último fue en diciembre y fue un Caracas, 19 de marzo de 2017.


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ataque masivo en los servidores que tenemos, por ahora, fuera del país. —¿Dónde?

—Tratamos de no decir dónde están. —¿En Chicago?

Adriana Cruz es internacionalista y fotógrafa y no usa Facebook ni Twitter

—Bueno, tenemos unos servidores en Brasil y en Venezuela tenemos uno de respaldo que constantemente se está actualizando, y a la grande, que es el tema de la información en hora de una eventualidad se bajan los breakers el momento. Estoy aquí, está pasando algo, por allá y seguimos con el de aquí. suena mi teléfono y de inmediato puedo ver lo que está sucediendo y opinar. Pero —¿Los critican por chavistas? ese poder, obviamente, algunos sectores lo —Nos han atacado, nos han hecho llamadas utilizan a favor de sus intereses y en contra telefónicas, nos han pasado correos, ya en tér- de los intereses de la mayoría de los venezominos personales, diciendo que eso no sirve, lanos que quiere paz, quiere organización, que eso es una porquería. Algunos usuarios quiere producir, quiere salir adelante. Claro entran y consiguen mucho contenido político que se pueden utilizar las redes sociales con y se van. ¿Qué queremos nosotros?, bueno, fines inescrupulosos, porque manejan munosotras, porque la mayoría somos mujeres: cha información, sobre todo información que esto no solamente sea de un sector. No- personal de los usuarios. Ahí queremos hasotros somos de izquierda pero queremos cer énfasis. Nosotros queremos proteger la invitar a venezolanos y gente de otras partes información de los usuarios y las usuarias del mundo a reflexionar junto a nosotros para de Manifiesto y queremos, también, que si que se haga el debate de las ideas. Porque, al hay alguna posibilidad de anonimato, que menos en Venezuela, tenemos muy poco ca- eso se dé. Eso lo logramos con el encriptamino recorrido con relación a eso. Aquí tú miento total de, por lo menos, las claves y te lanzas un debate y el contrario cree que lo los correos de los usuarios que se registran, estás atacando. ¡Cónchale!, hay que masajear que ni el equipo de Manifiesto puede ver. el cerebro, estimular, lanzar propuestas, pero Estamos dispuestos, bajo las condiciones en términos de respeto, y creemos que la red que sean, a no entregar por ninguna razón ni ningún monto esa información. social es muy fructífera en cuanto a eso. —¿Y si Primero Justicia se Agrega?

—Bienvenidos sean, queremos que eso suceda y que se dé el debate en los mejores términos. Claro, Manifiesto tiene sus condiciones de uso y términos de seguridad donde el respeto es lo fundamental. El que vulnere esas líneas recibirá las sanciones pertinentes. —¿Es verdad que las redes tumban gobiernos?

—De hecho, tienen como política devolver los contenidos al usuario

—Sí, eso es algo muy novedoso y no existe en otra red social. Después de que Manifiesto devuelve la información al usuario, porque quiso irse de la red, esa información queda eliminada completamente. —¿Ni siquiera queda en los servidores?

—Los medios de comunicación, sobre todo —Completamente. Y no solamente estamos las redes sociales, tienen un potencial muy en capacidad de devolverlo sino que estaCaracas, 19 de marzo de 2017.

mos en el deber de hacerlo, porque si queremos construir algo completamente distinto y brindarle seguridad a los usuarios, tiene que ser así. —¿La batalla de Facebook no es mejor darla por dentro, para hacerlo implotar?

—Yo digo que sí. De hecho, Manifiesto tiene sus cuentas oficiales en todas estas redes sociales que conocemos, porque creemos que ahí hay gente todavía a la que nos interesa darle a conocer nuestra herramienta. Pero va a llegar un momento en que no va a ser necesario, si nosotros, tecnológicamente, avanzamos con nuestros propios espacios. —¿Cuál es la posición de ustedes ante la Big Data?

—Mira, más allá de un tema ético es de principios. Obviamente, no estamos de acuerdo: traficar y vulnerar la información de las personas es terrible y cada vez vamos perdiendo más intimidad. No nos podemos desprender de toda esta movida del algoritmo. Tú agarras tu teléfono, le das a un botón y puedes prender ya la luz de tu casa, el microondas. Te montas en un carro autónomo y él va solo mientras tú vas leyendo. Cada vez es más voraz, el tiempo de avance tecnológico ahora es cada tres meses. No nos podemos hacer a un lado, tenemos que hacernos de esa herramienta para construir la alternativa. Vamos a estar en ese mundo, pero hay que ver en qué espacio se quiere estar: o dando la batalla o controlado. Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS


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crítica y media

La Trama Cotidiana

TRAS EL DISCURSO

El Otelo de Rufino Es indudable que todo el equipo de Ciane asumió con mucha responsabilidad y rigor el espectáculo que descansa en una versión libre de Otelo. En esta oportunidad el espectador se confronta con los tres personajes más emblemáticos de la pieza original: Yago, Desdémona y Otelo. El trío solo utiliza —si no en su totalidad, casi— textos de la pieza original de William Shakespeare. Sin embargo, protagonizan una historia distinta. Más allá de una manifiesta capacidad corporal, propia del teatro físico, de la disciplina y el esfuerzo sostenido, la puesta en escena también da cuenta de mucho respeto al hecho teatral y al espectador. Ahora bien, debo reconocer que se me presenta la situación de escribir sobre un espectáculo que no comprendí del todo. Ante la probable pregunta del lector de por qué escribir sobre algo que no se comprende, podríamos argumentar que la duda siempre ha provocado mejor reflexión que la afirmación y que la ignorancia abre un universo infinito, mientras que lo sabido siempre, en cualquier circunstancia, es mucho más limitado. La incomprensión, por su lado, puede ser la invitación más adecuada a abordar muchísimas incógnitas.

Yimou en el sótano. En térmi-

vez se enfatice que la condición de celoso de Otelo nada tiene que ver con la fidelidad o infidelidad de su compañera, o que el encono de Yago no se basa en el comportamiento de la mujer sino en su propio odio. Está bien, pero, de ser así, para qué trocar la condición del personaje femenino. La intensidad dramática de la obra original descansa en la confrontación de dos opuestos: la traición, el encono, la envidia y la manipulación de Yago versus la fidelidad, la liviandad, la transparencia y la solidaridad de Desdémona. Y frente a estos opuestos Otelo, por inseguro, machista e ingenuo, sucumbe a los celos y a los planes de Yago. En esta versión los opuestos no son tales, son iguales: tres depravados con ansias de poder y dinero. ¿Para qué disminuir la intensidad dramática? Si parte de la grandeza de la obra original es que un elemento tan sencillo como un pañuelito desate semejante desmadre, para qué trocarlo por un maletín lleno de billetes. No lo comprendo. Los contrastes, en ambos casos, quedan limados, rasados.

A mi juicio hay una intensidad en el hacer actoral que parece suplir lo que se ha suavizado en la escritura ¿Qué hubiera pasado si esa misma intensidad actoral se expresaEn el caso de esta versión de Rufino Dor- ra con la del texto en vez de suplirlo? No lo ta, se me hace incomprensible para qué sé, pero creo que es una buena pregunta. cambiar la condición de Desdémona si las consecuencias van a ser las mismas. Tal Por Rodolfo Porras

nos generales, la cultura occidental de los siglos XX y XXI siempre ha arrojado truculentas teorías con el objeto de minorizar —cuando no, banalizar— los grandes logros de las culturas que se desarrollaron fuera de su órbita. Para poner apenas un pequeño ejemplo de esto, solo basta mencionar la supuesta intervención de elementos extraterrestres en la construcción tanto de las pirámides mesoamericanas como de las egipcias. Obviamente, la maquinaria fílmica estadounidense ha sido una poderosa aliada al hacerse eco de estas temerarias afirmaciones. Así, en el filme La Gran Muralla (China-EEUU, 2016) se plantea, abiertamente, que la colosal construcción no fue erigida para defenderse de los nómadas de Mongolia y Manchuria, sino para repeler un enjambre de monstruos que comen carne humana. Es una perogrullada decir que desde siempre el cine ha falseado la Historia obedeciendo a los más oscuros intereses, pero en el caso de La Gran Muralla se desborda los cánones establecidos, vulnerando así el pacto comunicacional mínimo para que una historia, por lo menos, roce lo verosímil. La preponderancia de Occidente sobre el extremo Oriente no queda allí. William y Pedro, dos mercenarios del siglo XV, se adentran en el continente asiático en la búsqueda del auténtico Santo Grial: la pólvora. Mercenarios que simbolizan a los imperios que han de oprimir al planeta los venideros cuatro siglos. Ellos traen consigo un imán, al que la narrativa del filme le atribuye el poder de somnífero sobre las monstruosas criaturas. Este objeto, como elemento narrativo cinematográfico: un bodrio; como símbolo del pragmatismo de Occidente sobre un Oriente más místico tiene un poco más de sentido, aunque no mucho. La inconsistencia del guión, aunado a un corpus actoral que no logra alcanzar engranaje alguno, dotan al filme de un halo de cine serie B que ni siquiera el refinado preciosismo visual puede salvar. Es una pena que en aras de la internacionalización del cine chino, el mismo se rebaje a tal impostura, y que un director del talante de Zhang Yimou se preste para semejante aquelarre. En descargo de Yimou, podríamos afirmar que cualquier trabajo futuro significará una recuperación en su filmografía: es imposible caer más bajo. Rodolfo Castillo @magodemontreuil

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Caracas, 19 de marzo de 2017.


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minicrónicas

Apareció la cabeza —No lo sé, soy nueva vendiendo cachapas 1952 tras un golpe militar para liberarse de los aquí. colonialismos británico y francés. Consolida su régimen nacionalista entre 1955-1956, dánY por ahí te vas a la vuelta del caso. Un cha- dose a conocer internacionalmente. Aliado mo vendedor de café te dice que “se la llevaron importante de la Unión Soviética, fue uno de ellos”, y presumes que son funcionarios del go- los líderes fundadores de la Organización de bierno municipal. Eso te hace recordar cuan- Países No Alineados junto al yugoslavo Tito do fuiste hasta Fundapatrimonio a indagar y el hindú Nehru. Fue referente principal del sobre la desaparición de la placa del Billo que nacionalismo árabe, de orientación socialista; está en la esquina de Padre Sierra, y te vieron nacionalizó el canal de Suez en 1956 y se encara de preguntón sin darte una respuesta ade- frentó militarmente al Estado sionista de Iscuada. Insistes. Te tropiezas con la ignorancia rael: Guerra de los Seis Días (1967), Guerra de de los empleados de la minipizzería que queda Desgaste (1968)...”. al lado de la pastelería Arte París, lo que te da pie para deshojar la nota: Quieres seguir tu discurso. La clientela crece y tus palabras se detienen. Te despides y uno de “Se trata del busto en bronce (sin placa) del co- los empleados te devuelve un “Gracias, señor, ronel Gamal Abdel Nasser, presidente egipcio la verdad es que no tenía ni idea. Esta noche nacido el 15 de enero de 1918 y fallecido de un tendré que ir al internet”. —Señora, ¿usted recuerda cuándo reapareció infarto al corazón el 28 de septiembre de 1970, en pleno mandato. Llegó al poder en julio de eso que está allí? Por Pedro Delgado

FOTO maryori cabrita

Pasas por esas calles que has recorrido infinidad de veces. El deambular diario te da la condición del viandante que observa todo mientras trajina por una ciudad como esta Caracas de 2017. Vas recordando algo que oíste alguna vez sobre los caraqueños, que eran sus propios cronistas inmersos en una ciudad muy compleja. Un día bajas por pleno centro, digamos que por la esquina de la Catedral de Caracas, y al doblar por Las Madrices: “¡Santo Dios! ¡Apareció la cabeza!”, dices. Te acercas y te la quedas mirando. Ella también te mira. Erguida. Estuvo un tiempo desaparecida, desde que la descuajaron en complicidad con la noche (eso te dijo un comerciante de la zona). Te activas y haces un pequeño sondeo escudriñando en el testimonio:

Caracas, 19 de marzo de 2017.

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LAGO AMARILLO

POR INDIRA CARPIO @indira_carpio

LOS PECHOS Por Yutaka Hosono (Japón)

Tú has vuelto a mí como lo presentí en la pena desquiciante de haber estado separados miles de noches y días tuyos y míos. Y a la juventud en que no éramos hábiles regresamos volando de un tirón. Y tus pechos que nunca vi y tus pezones como ciruelas un poco hundidos tal vez, aparecen claramente en mis ojos entrecerrados, como estaba en aquel entonces. Por eso, permíteme tocarlos levemente. Tu sonrisa coqueta como rizos de agua me estremece, y cosquillea mis orejas. Es demasiado penoso para mí jurar con el corazón que nunca dañaría tus pechos. Por eso te abrazo con fuerza vestida con el traje de bodas del sueño, ese que nunca puede recuperarse, en el césped de medio día donde se [alinean las lápidas en las que han grabado la pena que me has dado más allá de millares de noches.

Kazuko Shiraishi (Canadá)

LA FRASE PROHIBIDA

POEMA

Puedes pescar aquí peces deliciosos y ponerlos en tu mesa pero el lago es amarillo Para ocultar su profundidad los Indios que viven cerca del lago también ocultan su fondo Quizás los peces vivan en sus ojos o deliciosos espíritus canten al hervir [con odio las profundidades de sus ojos oscuros nadie puede ver algo que vive en el lago [amarillo sin mostrar su forma sobre la mesa

Haikus

Por Toriko Takarabe (Japón)

No mires el pozo profundo, que ahí siempre está muerta la hermana [pequeña. No te despiertes al amanecer, que escucharás el eco de los disparos y los retumbos de las orugas En el mundo aún copian aquella época. “La vida no tiene sentido”: al escribir esta frase, originará una [carcajada a mi hermana difunta por primera vez. “Claro, no tiene ningún sentido”, sigue escribiendo la poeta con énfasis. Sobreviviendo como refugiada, mi [hermana, un día antes de su muerte, tuvo ansiedad por comer una salchicha. El sentido de la vida que se intensifica día tras día es siempre carnal.

Ni budas ni dioses Para mí Vientos de otoño.

Masaoka Shiki

En una choza escondida entre los árboles en pleno mediodía vuelan las luciérnagas. Donde haya hombres habrá moscas, y habrá Budas también.

Kobayashi Issa

La mariposa vuela en el campo, sola: sombra bajo el sol. ¡Cuánta quietud! La voz de la cigarra taladra rocas.

Matsuo Bash

Cuando mi vida atienda el crisantemo se tranquiliza

Mizuhara Shuoshi

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Caracas, 19 de marzo de 2017.


SOLUCIÓN DEL ANTERIOR

UCI R C POR Neptalí Segovia

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1. Ciudad capital de Libia. 7. Escuchaban, auscultaban, atendían. 11. Prefijo con significado del viejo continente. 12. Cielo, gloria, paraíso. 14. Sensación de terror, pavor o inquietud manifiesta. 16. Concepto equivocado o juicio falso.

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17. Caso dativo del pronombre vosotros. 18. Introduzca el balón en el cesto. 21. Vuelve a ordenar algo. 23. Dueña de alguna cosa. 25. Antílope surafricano de la familia de los bóvidos. 26. El Ejército Republicano Irlandés (inv.). 27. Antónimo de listo, cuerdo (inv.).

28. José “…” Délano, futbolista chileno. 29. El propio yo. 31. Preposición de lugar. 32. Esfera, lucero, en inglés. 33. Persona que reside temporalmente en un campin. 36. Dais forma o figura de óvalo. 38. Matrícula vehicular internacional de Irán.

1. Presunción o sospecha de un posible daño o perjuicio. 2. Ave paseriforme de la familia de los túrdidos. 3. Asistiré, concurriré, acudiré. 4. Facultad para hacer algo. 5. Dativo del pronombre personal de 3ra singular. 6. Contracción de I am. 7. Grupo de tres unidades (inv.). 8. Ficticio, imaginario, engañoso (pl.). 9. Antiguo nombre de Trípoli (inv.). 10. Habitual, corriente, común. 13. Sinónimo de peso, contrapeso. 15. Ola del mar. 19. Gramínea de cuyo fruto se obtiene harina. 20. Cosa difícil de entender. 22. Embarcación fuera de borda (voz inglesa). 24. Cosa que se dice sabiendo que no es verdad con intención de engañar (pl.). 28. Concavidad que forma el arranque del brazo con el cuerpo, axila. 30. Narcótico de las adormideras verdes. 33. Edificio para habitar. 34. Religión de Mahoma. 35. Instrumento para labrar la tierra. 37. Bebida alcohólica del zumo de la uva. 40. Raspé, limé, rallé. 42. Pronombre demostrativo neutro. 44. Símbolos del deuterio y de la hora. 45. Iniciales del premio Nobel de Física en 1921.

39. Labráis, surcáis, cultiváis. 41. Percibirá un olor. 43. Cebo animal para pescar o cazar. 46. Haced comestible un alimento tostándolo al fuego. 47. Órgano de la audición. 48. Bonito, lindo, precioso.


POR NATHALI GÓMEZ @laespergesia Ilustración: L. "Razor" Balza

Imaginario

MINIMANUAL para no hacer nada No hacer nada precisa de hacer algo: perder tiempo. Hay días en que se ocupa de mil cosas y, al final, se da cuenta de que su esfuerzo no lo llevó a ningún lugar. Recuerde cuando pasó horas en una computadora y no escribió ni una línea, cuando habló horas con alguien que no siguió ni un consejo o cuando no pudo pararse de la cama, pero tampoco descansó, pensando qué sería lo primero que debía hacer.

te perturba

pregunta de la semana

TUIT DE

Edición Número Doscientos veinte. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 19 de marzo de 2017.

¿

por qué el aumento de precio casi siempre implica disminución de la calidad

¿

1. Haga algo: no se desespere. 2. No confunda “no hacer nada” con “echar carro”. Usted no está fingiendo hacer algo, simplemente no pudo. 3. Si pierde la calma por tan poca producción, ríase de los memes de las redes sociales. 4. Sepa que esos días nulos están contemplados en cada mes, por siempre. 5. Piense en lo difícil que va a ser terminar este minimanual. Es en serio. 6. Tener ganas de hacer algo no es hacerlo. Regla de oro. 7. No se ofusque: somos una brizna de paja en el viento. Que no hagamos nada hoy no cambiará el curso de la Historia. 8. Si lo tildan de conformista, diga que sí y confórmese. 9. Si le indignó lo anterior, no se conforme y haga su propio minimanual. 10. Al fin llegamos al último ítem.

cuando la opinión de los demás




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