09-07-2017 by Revista_Epale

contenido Consejo Editorial

Jorge Rodríguez Gómez Felipe Saldivia Gustavo Borges Revilla

Directora

Jesús Suárez Chourio

Mancheta y demás

Gregorio de la Rivera

Mma: Territorio Sagrado

— perfil

Mercedes Chacín

— EL MENJURJE

Editor Jefe

Carlos Cova

DirecTORa de Arte

Edarlys Rodríguez

COORDINADOR DE FOTOGRAFÍA

Jesús Castillo

— mitos

— ciudad

Asesor Editorial

Reinaldo González

Coordinadora 2.0

Yanira Albornoz

— filo y borde

— Crónicas peatonales

Techo de estrellas

Desensamblados

Las caras del odio

La dictadura del mercado

Miedo de encuentro (I)

LOGÍSTICA

Colaboran en esta edición

Luis Lira

¿Qué no te gusta de los demás?

Web y redeS

Joseph Castellanos Gaizka Orta

Redacción

Nathali Gómez Moscoso Gustavo Mérida Ander De Tejada Marlon Zambrano Malú Rengifo

— música

DiseñO

Lisbeth Montell Arturo Gonnella

FotOGRAFÍA

Michael Mata Enrique Hernández

— opinión

CORRECTOR Rodolfo Castillo Idania Bracamonte Daniela Fernández Edi Cordero Clodovaldo Hernández, Mercedes Sanz, Freddy Fernández, Rodolfo Porras, Víctor Fha, Miguel Posani, Leonardo Cantillo, Indira Carpio, L. “Razor” Balza, Jessica Mena, Henry Rojas y Neptalí Segovia. Archivo Ciudad CCS. Ilustración de portada: María Centeno.

Impresión

Complejo Editorial Alfredo Maneiro Imprenta Nacional.

— entrevista

— sexodiversidad

— libremente

Un chamatari de la Gran Sabana

— poesía o nada

Comercialización y Ventas: 0212-8080323/0426-5112114 Distribución: 0212-8085843

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Épale CCS

Una publicación de la

Premio Nacional de Periodismo “Simón Bolívar”, 2014 y 2015. Premio Municipal de Periodismo “Guillermo García Ponce”, 2014.

— crucicultura

— el rumor de las bolas

Revista Gratuita Circula los domingos con el Diario Ciudad CCS búscala de lunes a viernes en nuestra sede: esq. san jacinto, edif. gradillas “c”, piso 1, al lado de la taquilla única de servicios municipales

PERFIL

Jesús Suárez Chourio

comandante zulú Es uno de los últimos oficiales de la generación del 4F que quedan en actividad. Acaba de asumir la comandancia general del Ejército, un cargo clave en el ajedrez cívicomilitar del país, en un momento de rompe y rasga. Descendiente de la etnia africana zulú, devoto de San Benito de Palermo, el mayor general llegó al cargo con una banda sonora: el estruendo de los chimbangles POR Clodovaldo Hernández • clodoher@yahoo.com / ILUSTRACIóN jessica mena

Lo primero que dijeron de Jesús Suárez Chourio es que era cubano. “¿Viste al negro cubano que cuida a Chávez?”, se preguntaban los opositores entre sí. La supuesta cubanidad del militar dio motivo a múltiples especulaciones y chismorreos. Que si Chávez no confiaba en nadie en la Fuerza Armada y por eso tuvo que pedirle prestado un edecán a Fidel; que si, además, era babalawo y presidía las ceremonias santeras en el palacio; que si... ¡uf! Una vez, una señora en la sala de espera de un doctor me juró por Dios que alguien de su total credibilidad (ya saben, la prima de la cuñada de un amigo que trabaja en Miraflores) lo había oído dando órdenes y que hablaba cubanito-cubanito. “¡Cosa má’ grande, qué ba’baridad!”, me acordé de Kico Mendive, vaya usted a saber por qué viejo mecanismo de la memoria. Lo que más me llamaba la atención, entonces, de esa leyenda urbana es que quienes la profesaban usaban el fenotipo de Suárez Chourio como prueba irrefutable de su procedencia antillana. “Aquí no tenemos negros así”, le escuché decir una vez a una colega periodista, a lo que otro ocurrente compañero comentó irónicamente: “Claro que no, aquí todos somos catires de ojos azules”.

Hace ya tres años, cuando comandó un desfile y, por tanto, tuvo que dirigir las palabras que manda el protocolo militar al presidente Nicolás Maduro, todo el mundo debió haberse convencido de que el hombre es un representante de la afrozulianidad, esa que ha florecido especialmente en el sur del lago de Maracaibo, esa que le ha dado al folclor regional el toque exquisito de los chimbangles. Sin embargo, los expertos cubanólogos no se rindieron: “Ese negro es cubano, lo que pasa es que el G2 le hizo un lavado de acento”. Los militares, tanto chavistas como antichavistas, siempre se han reído de esas versiones, pues conocieron al joven Suárez Chourio desde que llegó a los cuarteles y saben que venía “enguacalao” desde esas tierras zulianas. Los antichavistas viudos de las antiguas Fuerzas Armadas, con la intención de desprestigiarlo, dicen que comenzó como lo que entonces se denominaba “suboficial” (para remarcar semánticamente que estaban por debajo de los oficiales) y que estudió el bachillerato nocturno, lo que ameritó que algunos superiores “lo ayudaran” a ingresar a la Academia. Uno oye el tono despectivo que utilizan estas personas y no entiende mucho por qué... ¿qué tiene eso de vergonzoso? Por el contrario, es una de esas demostraciones de superación personal que suelen escribirse en las biografías y contarse en las películas sobre personas que se hacen a sí mismas, especialmente si se trata de grandes capitalistas o figuras del deporte o del show business.

Lo realmente digno de análisis no es que en esos primeros años, cuando se dio a conocer como parte del equipo de seguridad presidencial, mucha gente haya pensado que el oficial nacido en el pueblo de Sucre, estado Zulia, era cubano. Lo digno de análisis es que alguna gente se empeña en seguir creyéndolo, y digan que su reciente designación como comandante del Ejército es una prueba Pero, en fin, el punto es que Suárez Chourio comenzó como cadete en 1982 y se graduó de subteniente del Ejército en la promoción más de cómo “aquí manda el castrocomunismo”. Caracas, 9 de julio de 2017.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

04 Francisco de Paula Alcántara en 1986. Así que si el hombre es cubano, se las arregló para infiltrarse en el alma máter militar de Venezuela en una época en la que todavía los otros cubanos (los de la estirpe de Posada Carriles) andaban metidos hasta los tuétanos en los organismos de seguridad del Estado y se especializaban en detectar comunistas. Lo segundo que dijeron de Suárez Chourio es que Chávez, que en esos tiempos era un joven líder y profesor de la Academia, lo adoptó porque era uno de los pocos más negros que él en la institución armada. Con su campechana manera de ser, siempre se refería a él como el “Negro” Chourio. Lo cierto es que tan cerca estuvo del comandante que terminó formando parte del Movimiento Bolivariano Revolucionario 200, los insurrectos del 4 de febrero de 1992. Para ese año tenía el rango de teniente. Como les ocurrió a todos los integrantes de ese movimiento, aquel día a Suárez Chourio le cambió la vida. En el momento, derrotada la insurrección y presos todos sus participantes, parecía haber terminado prontamente su carrera militar. Pero la fuerza de aquel “huracán revolucionario”, como lo llamaría Chávez posteriormente, solo les iba a solicitar un poco de paciencia. Apenas unos años más tarde el pueblo pondría en la cabeza del poder político al líder del 4F, y los que habían sido sus soldados tendrían la misión de encabezar un cambio profundo en el ámbito militar.

Su nombramiento puso nuevamente al descubierto los resabios racistas de nuestra sociedad. La derecha lo ha atacado con sus peores operadores, presentándolo como un oficial cuyo único mérito es haber sido incondicional de Chávez —

sin participación del Ejército y, en este caso, quien lo intente se va a encontrar con ese negrote y, a través de él, con el espíritu del 4 de febrero, con el chavismo original”. Pérez, quien se forjó como experta en Ciencias Políticas en los tiempos de la fractura de las anteriores Fuerzas Armadas (luego de 1989, con acento en 1992), ve el nombramiento más allá de lo inmediato, en un horizonte temporal un poco más ancho: “Este año es comandante del Ejército, pero en 2018, que es un año electoral presidencial, podría ser jefe del Comando Estratégico Operacional de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana o, ¿por qué no?, ministro de la Defensa, y en ese caso las candidaturas presidenciales tendrían que gravitar alrededor del mismo negrote”.

Han pasado ya 25 años de aquellos sucesos y, justo después de ese cuarto de siglo, Suárez Chourio ha sido designado comandante general del Ejército Bolivariano. Previamente ocupó un cargo emblemático: la comandancia de la 42 Brigada de Paracaidistas de Maracay, el sitio desde donde partió Chávez con sus tropas (Suárez Chourio incluido) la noche del 3 de febrero de 1992, víspera de una sacudida histórica. También fue jefe de la Zona Operativa de El entrenamiento para el cariz político de estos altos cargos coDefensa Integral (ZODI) de Aragua. menzó de inmediato: el 24 de junio, aniversario de la Batalla de La larga pasantía en el equipo de seguridad de Chávez le permitió Carabobo y Día del Ejército. Le tocó dar el discurso de orden y explorar en busca de sus raíces. No lo hizo en Cuba, como podrían “presentarse en sociedad”. De entrada, dijo: “Espero estar a la altusuponer quienes insisten en que es un Avispa Negra (cuerpo de ra del compromiso histórico”, y luego declaró que, siendo también élite del Ejército cubano), sino en África, aprovechando las visitas el día de San Juan Bautista, estaban sonando los tambores en el presidenciales a varios países de ese continente. Allí comprobó que Ejército bolivariano, porque acababa de llegar a la comandancia la mayoría de las familias del pueblo donde nació, y de otros del un hijo de San Benito acompañado de sus vasallos chimbangleros. sur del Lago, proceden de la etnia zulú, que llegó a América como “Es la voz de una afrodescendiente que viene del pueblo, que nació como soldado dentro del Ejército venezolano, forjador de libermano de obra esclava en buques franceses. tades, y ahora es su comandante. Es la voz de quienes estuvieron Su nombramiento puso nuevamente al descubierto los resabios ra- silenciados a lo largo de la Historia; es la voz de la Negra Matea, de cistas de nuestra sociedad. La derecha lo ha atacado con sus peores la Negra Hipólita; del teniente Pedro Camejo, el Negro Primero, operadores, presentándolo como un oficial cuyo único mérito es quienes hoy aquí dicen presente”. haber sido incondicional de Chávez. Militares retirados y exiliados en Miami han difundido versiones según las cuales no ha realizado El nuevo comandante tiene por delante tiempos seguramente torlos cursos necesarios para su actual rango, de mayor general, ni mentosos, pero desde ya ha reservado su agenda del 27 de diciembre, cuando, continuando una tradición de toda la vida, irá a su tepara su cargo de comandante. rruño a participar en la procesión de San Benito de Palermo, en la “Su nombramiento es un contragolpe anticipado”, dice mi politó- que retumban los sonidos ancestrales de la etnia zulú, los mismos loga favorita, Prodigio Pérez. “Tú sabes que no hay golpe exitoso que le pusieron a la gaita del sur del lago el apellido tamborera. Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

el menjurJe

al mejor postor La brigada feminista latinoamericana anda interviniendo con amor los muros de la ciudad. Hacen arte para reafirmar su género. El 15 y 16 de julio, y solo para mayores de 18 años, en Río Teatro Caribe de San Bernardino, darán otro paso con una obra que aborda la temática del feminismo, visibilizando la violencia de género a modo de reflexión. “Sentimos que hay que potenciar a la mujer en los espacios visuales, entendiendo que el capitalismo se ha internado culturalmente en nosotros y una de sus expresiones es el machismo”.

Dos turistas argentinos y enamorados haciéndose selfies fente a la casa del Libertador

Los abrazos

Trancas, destrozos, terror: los psicólogos saben que esos condicionantes son efectivos para atizar el miedo. En la esquina de Alcabala, en Candelaria, una muestra viva de la emocionalidad guarimbera: pero ¿qué culpa tenían los pobres materos?

Maneras de abrazar hay muchas y también son muchas las formas de ser abrazados. Hay abrazos que abrasan. Y otros que inundan. Hay abrazos que como un río sumergen y de ellos se sale casi asfixiado. Hay abrazos entre sábanas que nos dejan sin aliento y otros que son fríos y duelen como un adiós. Algunos hay que son apenas un gesto y otros para los que basta una mirada. En algunos quisiéramos quedarnos para siempre, aunque sean de un verano. Hay abrazos que son muchos, abrazos que se dan juntos como pueblo y futuro. Abrazos hay de todos los tipos y cada uno se ajusta a nuestra talla, los abrazos nunca sobran y seguro siempre faltan. Hay abrazos alegres y otros que se visten de luto. Hay abrazos mudos, mientras que otros provocan algarabía. De algunos hay que irse pronto y algunos a los que nunca alcanzamos a llegar aunque procuremos la cercanía. De los abrazos, los mejores, son los que nacen del amor, esos son los que se quedan para siempre y dejan arrugada el alma que es la encargada de contabilizar las veces y las formas en que nos hemos dado a los demás.

La cazadera de güire de los comerciantes que, apenas aumentan los sueldos, se desatan a especular

Caracas, 9 de julio de 2017.

Odiar es pecado « Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

MITOS

Gregorio de la Rivera: cadena perpetua para conseguir cosas POR malú rengifo @malurengifo ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

Esto que le voy a contar parecerá una locura, pero haga caso por- presbítero Peña y Bohórquez, responsable del convento que resque es verdad. Hay un gentío en el purgatorio esperando entrar al guardaba a Josefa, y de un disparo lo mandó pa’l firmamento, concielo, y usted lo puede ayudar a cambio de sus favores. mocionando a la población merideña y a las familias pudientes, que exigieron la excomunión de Gregorio. Imagínese el purgatorio como una enorme sala de espera, o como una agencia bancaria al mediodía de un viernes de quincena y fin Luego de matar al cura, el hombre huyó a caballo de la ciudad. de semana largo, donde no hay cola ni numeritos para organizar la Cabalgó lejos, tanto como pudo, y al amanecer se encontró con pea, sino que todos los presentes tienen permiso de hacer favores que había llegado de nuevo a la plaza central de Mérida, de donde a los creyentes e ir acumulando puntos para ir al cielo. Así de bu- se había escapado. Atormentado, volvió a procurar su huida, pero rocrática es la cosa. una y otra vez se vio de regreso, inexplicablemente, en el centro de la ciudad; hasta que, agotado y arrepentido, se entregó a las autoriUna de esas ánimas que esperan la redención es don Gregorio de dades y a su muerte como condena por lo que había hecho. la Rivera. Pero fíjese usted cómo serán de raras las leyes del cielo que un día En el siglo XVIII un hombre de familia bogotana contrajo nupcias apareció una monjita anunciando que don Gregorio de la Rivera se en Mérida con una mujer llamada Josefa Ramírez. Para sorpresa le apareció en sueños, después de muerto, contándole que no se fue de Ramírez, Gregorio de la Rivera, su marido, reveló su carácter a la quinta paila, el botiquín de mala muerte, ese donde podría uno violento a muy poco de haberla desposado. Le gritaba, le pegaba y creer que se van los asesinos a tomar cerveza caliente por el resto hasta se dice que llegó a perseguirla con un puñal para quitarle la de la eternidad, sino al purgatorio, lugar donde lo admitieron con la condición de que hiciera el favor de hacer aparecer los objetos vida. La mujer huyó a un convento, donde consiguió refugio. perdidos a quien se lo pida, con la condición de que también pida Furibundo por la ausencia de su esposa, don Gregorio averiguó su por la salvación del alma de don Gregorio y su redención. paradero y se dirigió al convento a reclamar su derecho a llevarse a la mujer para su casa, en virtud del lazo que los unía. Ni la abadesa Desde entonces se dedica a hacer aparecer llaves y cualquier cosa ni el cura del convento lo quisieron ayudar, y en venganza, el 5 de extraviada, y puedo dar fe de que eso es así porque hace unas semarzo de 1739, don Gregorio de la Rivera se dirigió a la casa del manas hizo aparecer a mi gato. Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

CIUDAD

MMA: Territorio Sagrado En la sala Rómulo Gallegos del CELARG confluyen las expresiones de un colectivo de artistas que, a través de la plástica, manifiestan su arraigo hacia el territorio de lo ancestral y su preocupación por la preservación de la tierra de la que fuimos amasados POR MALÚ RENGIFO • @MALURENGIFO / FOTOGRAFÍAs JESÚS CASTILLO

Caracas, 9 de julio de 2017.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

08 Un tributo al origen

“Mma es una palabra que en wayuunaiki significa tierra”, explica Fabiola “La India” Gámez, piel de terracota, pelo negro y brioso, pómulos notoriamente indígenas que dan cuenta de sus orígenes kariña. Apasionada por su labor, fue la primera estudiante cuyo trabajo de tesis fue expuesto en muestra individual en una de las salas del Museo de Arte Contemporáneo de Caracas, uno de los espacios expositivos más importantes de Venezuela. Tal es la belleza y autenticidad de su trabajo que a “La India” Gámez le llueven propuestas, puertas abiertas para mostrar ante miles de miradas ávidas el producto de su amasar con las manos. A principios de este año, por ejemplo, le fue ofrecido el espacio de la sala Rómulo Gallegos del Celarg, en Altamira, y pese a que La India cuenta con una vasta obra capaz de llenar por sí sola todo el espacio, pudo más el deseo de colectivizar la oportunidad; y se vio, entonces, en la misión de convocar a un grupo de artistas con trabajos e inquietudes afines a las suyas, que compartían el afecto y la admiración hacia el artista homenajeado

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

“La idea de dedicarle este espacio al tema del territorio y la ancestralidad proviene de dos inquietudes mías. La primera: la necesidad de generar una reflexión en torno a la protección del territorio, que me ha preocupado más profundamente desde la activación del Arco Minero del Orinoco, en el sentido de que esta actividad atenta no únicamente contra el espacio físico que ocupa, sino también contra la cultura y el arraigo de las etnias que hacen vida en esos lugares, que ahora están siendo desplazadas. La segunda inquietud es mucho más personal y tiene que ver con mis propios orígenes, con la necesidad de rendir un tributo a las muchas generaciones de mujeres sanadoras y alfareras de las que provengo. Mi tatarabuela Mariela Nieves hacía cacharros de barro y sanaba con las manos. De ahí vengo”, cuenta. La obra seleccionada por Gámez para “Mma: Territorio Sagrado” se llama Kwe-Kwe, que en por la muestra, Guilermo Abdala, y pronto piaroa significa “rana de la fertilidad”, y está se embarcaron colectivamente en un viaje compuesta por una serie de máscaras totémihacia lo más profundo del Mma, el Territo- cas cuyas formas evocan diferentes animales rio Sagrado. que, a su vez, representan la esencia de varias Kwe-Kwe, tributo a una dinastía de sanadoras

Caracas, 9 de julio de 2017.

La exposición está acompañada de grabaciones testimoniales del maestro Guillermo Abdala

Un tributo al origen

de esas mujeres sanadoras que conforman la casta de la que proviene La India.

“Por nacimiento mi nombre es José Luis Enrique Reyes Molina; pero por misión de vida, arte y ancestralidad soy Shamán 314. Tengo 31 años”. Nació, creció y defiende con su arraigo los espacios del barrio El Pedregal, en Chacao. Esencias y sahumerio son fibra de sus raíces. Su abuelo fue sanador, hijo de una sanadora: “Juan Blanco Mañe, lo llamaban, era quien le abría el camino a los generales y a sus tropas en la guerra de guerrillas”, comenta orgulloso. Esta serie de datos nutren una interesante y bella obra llamada Ecogralma shamanero: resilbat siaccau, que hace alusión a la fuerza espiritual y a la reivindicación de los ancestros: “Siaccau es la forma kariña que dio origen a la palabra chacao”, explica Shamán. “Y siaccau significa lugar de tierra fértil”.

La toponimia de lo imaginario

José Ángel Arvelaiz fue convocado a participar en “Mma: Territorio Sagrado” por recomendación de Félix Hernández, curador e investigador de la Galería de Arte Nacional, quien ha seguido el trabajo de Arvelaiz desde los tiempos en que juntos hicieron vida en el colectivo artístico Urbe Emergente, por el año 2009. Ya para aquel entonces Arvelaiz exploraba, tímidamente, con su obra los confines del paisaje imaginario, lugar en el actualmente se desarrollan sus piezas Tairós y Pinderans, dos ejercicios lúdicos que combinan la plástica, la topografía, la geografía, la astronomía y el trabajo escultórico. “Por el año 2002 estábamos un grupo de personas, entre los cuales se encontraba el maestro Guillermo Abdala, en una tertulia en un bar. Mientras hablábamos jugaba con un envoltorio de una caja de cigarros, arrugándolo. Al extenderlo vi que los pliegues en el papel parecían una cadena montañosa, y comencé a pensar en espacios como ese, como topografías imaginarias, micropaisajes susceptibles de ser conquistados por el hombre”.

La reflexión del sujeto contenido

“Vivimos en cubos donde la organización de la vida se vuelve distinta a lo natural y somos los constructores de esa estructura que nos afecta”, narra Pablo García Sanoja, heredero del pulso artístico de una familia con tradición de pintura y poesía, un joven de 24 años

Con ternura dedica su obra al hombre a quien siempre la quiso mostrar, hasta que la fatalidad lo hizo imposible: “Para el maestro Guillermo Territorios íntimos conforma la muestra Abdala, hacedor de laberintos en el tiempo del criado en una idílica y boscosa montaña mi- territorio sagrado”. randina, quien encontró en las extrañas condiciones de vida que se desarrollan dentro de La levedad de escultura la ciudad el sujeto de estudio que nutre de Daniel Guerra, escultor margariteño, fue excontenido a su obra. ponente de la talla tradicional en piedra, pero al venirse a Caracas se convirtió en un bicho Contenedor sujeto es una reflexión generada raro para esa corriente tradicional de volúpor la convivencia del bloque, la cabilla y el menes masivos, al iniciar una búsqueda de cemento, junto a rostros y extremidades hu- formas que acercaran su trabajo escultórico manas fusionadas a los elementos constructi- al dibujo, despojándolo del exceso de masa y vos. “¿Qué relación tiene nuestra manera de haciendo un tributo a la línea. vivir con los espacios cuadrados que ocupamos? ¿Podemos pensar en la posibilidad de Decía Guillermo Abdala: “Las piezas de Daniel que esa estructura cúbica, tan ajena a lo que son como él, tímidas, con ganas de esconderse, es natural, nos estaría moldeando?”, pregunta pero se apropian de los espacios, los dominan García Sanoja. por sí solas, casi sin quererlo”. Caracas, 9 de julio de 2017.

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CRÓNICAS PEATONALES

Casi lo linchan (o para qué sirve una constituyente) POR gustavo mérida @gusmerida1 ILUSTRACIóN henry rojas Argumento: razonamiento para probar o demostrar una proposición, o para convencer de lo que se afirma o se niega (Diccionario del idioma español). “Si un peatón se queja del estado de las aceras, de la relación de la disposición del espacio para los vehículos y para las personas que caminan, imaginen qué puede pensar una persona que use silla de ruedas o un bastón porque es ciego o porque está viejo”. Anónimo.

Cuando el motorizado agarró impulso, el tipo que casi lo linchan tensó todos los músculos adoloridos —porque la coñaza era evidente: la sangre le chorreaba, lenta pero no espesa, desde la cabeza, bajando por el cachete izquierdo, llenando la nariz, metiéndose en los ojos, guindando de la barbilla— y esperó el cascazo (sin agachar la cabeza), que sonó como suena un cascazo con impulso desde abajo, desde el asfalto marchito hasta la cabeza del tipo que casi linchan (que es la forma correcta de decirlo, si es que no se desdeña el pleonasmo): fue un sonido triste. Y seco. El tipo estaba sentado en la parte trasera de una pick-up de la Policía Nacional Bolivariana que llegó a tiempo para evitar que muriera a cascazos, a coñazos y a patadas, y por todo eso que hace que un tipo pierda la vida cuando un grupo de personas quiere arrebatársela, como a dentelladas, como si tuviesen mucha hambre y quisieran devorarlo para desaparecerlo y que solo queden los huesos desperdigados o, quizá, sean llevados como trofeos o medallas por participar en eso que llaman linchamiento en, vaya homenaje, a un tipo que tenía el apellido Lynch. Gringo, por casualidad. El rostro del motorizado era, convencionalismos estéticos convenidos, menos agraciado que el del tipo al que casi linchan porque, según los curiosos que veíamos sin hacer nada (porque, entre otras excusas, cuando se está linchando a alguien, quien Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

se oponga corre el riesgo de que le suceda lo mismo, a menos que sea un grupo más numeroso de quienes intentan linchar o que llegue una autoridad, que igual tiene que irse rápido porque dos policías, aunque armados, tampoco es que puedan hacer mucho contra un grupo humano cuando este es convertido en horda), lo que se afirmaba era que “estaba robando un celular en la camionetica”. Daba la impresión que el motorizado, por esa rabia con la que dio el golpe, nunca se hubiese parado en su moto sobre el rayado. O que los crímenes de odio se parecen igualito. En otras palabras, el motorizado con el casco lucía más “cara ’e culpable” (Gino González dixit) que el tipo al que casi linchan. La camionetica, para las y los lectores que desconocen a Caracas y sus modos de comunicación, es un pequeño autobús, por lo general de marca Encava, propiedad de una persona (que a veces tiene muchos, pero muchos) que se lo arrienda a un chofer para que este, a su vez, maltrate a las personas que se montan y que pagan un pasaje costoso e Caracas, 9 de julio de 2017.

impuesto porque estos pasajeros, además, no se han organizado en sus comunidades y dejan que este chofer y su colector les maltraten de ese modo (arrancando antes que se siente la persona de tercera edad, no montando a estudiantes, parándose en medio de la calle e impidiendo la libre circulación de otros vehículos y etcétera), que es “necesario”, además, porque lo que le tienen que pagar al dueño de la camionetica es bastante y si no lo hacen así no montan a muchos pasajeros y no se ganan nada por andar todo el día luchando contra otros choferes de camioneticas que hacen lo mismo porque si no lo hacen no se ganan nada, y así. Cuando lo bajaron de esa camionetica a punta de coñazos y patadas y kungfú, el tipo que casi linchan pretendió huir en otra. ¿Por qué siguen robando en las camioneticas que van a lo que llaman ciudades dormitorio?

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FILO Y BORDE

Techo de estrellas POR Freddy Fernández @filoyborde ILUSTRACIÓN HENRY ROJAS

Mi tío fue a Estados Unidos y regresó muy contento. Me contó que había visto gente que dormía en la calle, “pero eso sí, cada uno con una buena chaqueta” y, aunque no lo pregunté, me aclaró que no era que estaban en situación de calle. Me dijo que se trataba de trabajadores que vivían relativamente lejos y que les salía más barato dormir allí que pagar el transporte hasta sus casas. Algo similar observé en Brasilia. A una cuadra del hotel donde me alojaba, en los alrededores de una estación de gasolina, vi unas 15 personas que dormían allí, bajo las estrellas, por decirlo con cierto tono romántico, para que no se note que estoy contando una realidad trágica. Pregunté a un amigo brasilero, a Phidias Barbosa, el porqué de esa situación. Su explicación fue sencilla, parecida al cuento de mi tío sobre los trabajadores cuyo sueldo no les alcanzaba para pagar el transporte. Phidias agregó que algunos carecían de vivienda porque venían de otras ciudades a probar suerte en la capital. Allá en Brasil descubrí que esa explicación, esa manera distante de mirar la miseria de los demás, se nos había borrado en Venezuela a partir de 1998. Antes de ese año, la percepción que teníamos los venezolanos sobre la situación de calle, sobre la pobreza, era similar a la de la mayoría de los ciudadanos del mundo. Es decir, no era nuestro problema. En Francia es otro nivel, allí la miseria se puede vender. A la gente en situación de calle se les denomina clochard, palabra que puede sonar elegante para quienes no conocemos ese idioma. Uno de los souvenirs que usted podría comprar en París, para recordar ese viaje, es una imagen “graciosa” de un clochard. En la ideología de hoy, en la visión neoliberal que hemos permitido que nos impongan, casi todos nos entendemos como si fuéramos no una persona sino una empresa. Desde esa perspectiva, quien está en la pobreza o en situación de calle es simplemente un fracasado. Lo más curioso de las ideas en torno a la miseria es que cuando gobierna la derecha cada quien es responsable de su situación. Mi tío asume que nadie más tiene responsabilidad en el hecho de que unos trabajadores tengan que dormir en la calle. Otra cuestión sería si allí gobernara la izquierda. Estoy completamente seguro de que en el caso de que mi tío hubiese visto esa situación en Cuba habría dicho que eso demostraba el fracaso del gobierno, y le concedo razón. Con Chávez aprendimos eso y apuesto porque nunca se nos olvide. Quiero que cultivemos ese sentimiento de que, en efecto, es responsabilidad gubernamental la situación de miseria o de calle de todas las personas que lo padezcan. Ojalá que nuestra visión se convirtiera en universal. Sería interesante que en Estados Unidos, en Brasil y en Francia también se percibiera como fracaso de sus gobiernos el hecho de que cualquier persona padezca una situación de calle. Caracas, 9 de julio de 2017.

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MÚSICA

Desensamblados arman música venezolana y del mundo El proyecto caraqueño, liderado por los hermanos Ulises y Tomás García, ya cuenta con un disco, … Y el rumor de Ccs, donde muestran parte de la riqueza musical del país combinada con un amplio abanico de ritmos del mundo POR Mercedes Sanz • @JazzMercedes ⁄ FOTOGRAFÍAs ENRIQUE HERNÁNDEZ

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

El flautista aún no llega; mientras, el baterista y los ejecutantes de instrumentos de cuerda están afinando en medio de la gente que va llegando, graneada. Arrancan con un pajarillo con bulería, para después empalmarlo con un rock, samba y merengue caraqueño. Y así van en el ensayo hasta que aparece el integrante que faltaba. Es una de las tantas presentaciones de Desensamblados en la Universidad Central de Venezuela, institución donde nacieron hace unos nueve años. “Íbamos a presentarnos en el auditorio del Hospital Clínico Universitario y en ese momento no teníamos nombre, entonces entre todos empezamos a inventar alguno con la palabra ensamble, pero no dimos con ninguno, y dijimos: ‘¡Desensamblados!’”, recuerda Ulises García, compositor y ejecutante de guitarra clásica y flauta, quien junto a su hermano Tomás (bandola llanera, mandolina y flauta) formaron este proyecto instrumental de música venezolana y del mundo, con músicos invitados que pueden variar. Se trata de unos estudiantes universitarios y de música que formalizaron esa inquietud artística a través de esta propuesta que hoy nos presentan. Acaban de bautizar su primer disco independiente, ... Y el rumor de CCS, con 11 cortes que se pasean por una diversidad de géneros de la música tradicional venezolana, como la llanera, la oriental, etcétera, los cuales combinan con ritmos del mundo (jazz, blues, rock, flamenco y un sinfín). En una misma pieza mezclan dos o tres estilos distintos, pero que pudieran tener semejanzas melódicas. “Los temas de este disco vienen de poemas que hace mi papá (Aurelio García) sobre anécdotas. Él nos entrega el poema escrito y nosotros lo llevamos a la música y decidimos qué tipo de estilo ponerle. Por ejemplo: “La fiesta de San Lorenzo” tiene gaita margariteña, malagueña oriental y rockabilly. Está basado

Ellos han sabido escuchar el rumor de Caracas

en una experiencia que vivimos en el pueblo San Lorenzo de Margarita”, cuenta Ulises.

es que todos los temas pueden ser cantados”, acota Ulises.

En el álbum destacan trabajos como “George’s”, una gaita de tambora con bossa nova. Es un homenaje a un clarinetista venezolano-estadounidense que tocaba por las calles caraqueñas: Georges García Martelli. “San Rafael Blue’s” es un San Rafael (variedad de joropo llanero) con blues. Y la única pieza cantada es “Claridad de la mañana”, en la voz de Rafael Pino, un canto de ordeño. El disco está producido entre los hermanos García y el pianista Víctor Morles.

¿Y por qué llamar ... Y el rumor de CCS a un disco que es de música del mundo con base en la venezolana?: “Bueno, es por una anécdota. Estaba con Juan Carlos Linares (percusionista en ese entonces del grupo) en una excursión al Ávila. Y cuando nos sentamos a descansar todo estaba en silencio, se oía como un murmullo, y Juan me dice: ‘Escucha eso, es el rumor de Caracas’”, comenta Tomás.

“Si algo nos diferencia de otros ensambles es la familiaridad entre sus integrantes, las composiciones y los arreglos. Al comienzo hacíamos versiones, pero ahora todo el repertorio es original”, señala Tomás. “La diferencia está en el formato, ya que usamos instrumentos de cuerda, flauta y percusión. Las piezas tienen una sonoridad particular en esa línea. Lo otro Caracas, 9 de julio de 2017.

A Desensamblados ya lo vemos en distintos espacios de la urbe. A pesar de que se han abierto camino con esfuerzo propio, Ulises considera que no es fácil que la música tradicional venezolana llegue al público: “Se ha trabajado por la difusión, pero siento que esto sucede por la falta de conocimiento de todo lo que existe aquí. La música venezolana se ha encasillado en joropo llanero y tambor de San Millán, y no es así”. Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

las caras del odio

MIRADAS

En distintos momentos de la historia, el rechazo al otro ha sido el arma de quienes han querido acallar su presencia con su exterminio POR nathali gómez • @laespergesia

La descripción de una habitación llena de cadáveres anónimos es la entrada al mundo de los exterminados por el odio que hace el escritor estadounidense Philip Gourevich en su libro Queremos informarle que mañana seremos asesinados con nuestras familias, publicado en 1999. “Yo nunca había estado entre muertos. ¿Qué hacer?, ¿mirar? (...) Aquellos ruandeses muertos se quedarán conmigo para siempre, espero”, relata en el primer capítulo de su obra. A partir del 6 de abril de 1994 el gobierno de Ruanda instó a la mayoría hutu, a través de los medios de comunicación, a aniquilar a los diferentes, es decir, a los tutsis. Durante 100 días de matanza a machete fueron asesinadas unas 800.000 personas. Pero ¿quiénes eran los raros? Según un entrevistado por Gourevich, antes del genocidio de manos de sus propios coterráneos, “éramos cristianos normales y corrientes”. Aunque ambos grupos étnicos compartían un mismo país (eran vecinos, familares o amigos), uno se sintió con la autoridad moral para acabar con el otro, al que consideraba de menor valor, como una manera “de aliviar su sufrimiento”. Los cálculos arrojaron que en tres meses murieron siete personas por minuto. Tras el exterminio, catalogado como el crimen de odio emblemático de las últimas décadas del siglo XX, quedó un país lleno de cicatrices: en rostros, en cuerpos, en familias enteras. El saldo de refugiados que murieron de hambre o de nuevos ataques, en una tierra donde tuvieron que seguir viendo a los ojos a sus verdugos, es la multiplicación en el infinito de la hoja del machete contra la carne.

las aristas del odio

La historia ha contado, desde distintos puntos de vista, el exterminio que hizo el nazismo y el fascismo en la búsqueda de la raza pura necesaria para alcanzar el dominio total del planeta. La literatura y el cine han hecho hincapié en el holocausto judío, donde murieron unos seis millones de personas. Sin embargo, también fueron exterminados otros cinco millones por sus ideas, color de piel, orientación sexual y grupo étnico. La “diferencia” a neutralizar eran comunistas, gitanos, luchadores sociales, oponentes, homosexuales, indigentes, prostitutas, giEdición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

Los grupos violentos en Venezuela han atacado a los chavistas por pensar diferente

tanos. En su libro Si esto es un hombre, Primo Levi, escritor judío sobreviviente de un campo de concentración, reflexiona sobre los alcances del odio, que lo contamina todo, como el agua podrida. “A nuestro alrededor todo nos es enemigo. Encima de nosotros se agrupan las nubes malignas, para separarnos del Sol (...) Y en los andamios, en los trenes en maniobra, en las carreteras, en las excavaciones, en las oficinas, hombres y más hombres, esclavos y amos, y amos que son esclavos de ellos mismos; el miedo mueve a uno y el odio a los otros, toda otra fuerza calla. Todos son aquí enemigos o rivales”. El periodista comunista Julius Fucik fue detenido en abril de 1942 por la Gestapo. Dentro de la prisión donde se encontraba pudo escribir, en hojas sueltas que luego su esposa compiló, el libro Reportaje al pie de la horca, publicado en 1945, dos años después de su muerte. Caracas, 9 de julio de 2017.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Fucik, quien nunca cedió ante las torturas para delatar a sus compañeros de militancia política, ve danzar ante sus ojos las traiciones, delaciones, atropellos e injusticias. En el papel que guarda celosamente quedó recogido su testimonio para alertar a la conciencia de la humanidad. “Has tardado mucho en llegar, muerte. Pese a En el éxtasis de acabar con las brujas todo, esperaba conocerte más tarde, después de largos años. Esperaba vivir aún la vida de un hombre libre: poder trabajar mucho, amar mucho, cantar mucho y recorrer el mundo. Precisamente ahora, cuando llegaba a la madurez y disponía todavía de muchísimas fuerzas. Ya no las tengo. Se me van agotando. Amaba la vida y por su belleza marché al campo de batalla”, escribió.

El genocidio en Ruanda dejó a tantos miles de ruandeses refugiados en su propio país

En la película Libertad, del cineasta argelino Tony Gatlif, incluso para los propios espectadores es complicado comprender la manera de pensar de los romaní, también llamados gitanos, que delinea en su obra. En medio de la Segunda Guerra Mundial un grupo de gitanos es perseguido en un pueblo de Francia. Su única salvación ante el asedio nazi es dejar de ser nómadas y tener una casa. Como testigos, nos esperanzamos en que dejen de lado su manera de ver la vida para adaptarse a la que le proponen, so pena de ser asesinados. Al final de la cinta se resuelve el dilema. En este caso, se materializa la duda de algunos: ¿dejar ser al otro, “intervenir” para cambiarlo o eliminarlo para cambiar la realidad?

recordamos las imágenes de esa suerte de fantasmas de la limpieza étnica: el Ku Klux Klan, que nuevamente creía en la superioridad étnica y en el exterminio del diferente: del negro, del homosexual, del comunista. De allí se puede saltar a una larga lucha por los derechos civiles, dentro de su mismo país, de la población afroamericana estadounidense.

Los fantasmas de la limpieza étnica

Contra la población afro

Las colonias españolas abolieron la esclavitud, pero eso solo significó el redoble de labores por sueldos miserables. Incluso, en países como Argentina fueron exterminados de raíz, como parte de los planes desarrollistas del siglo XIX.

Muchos han hablado de “Madre África”, aunque hayan cometido matricidio tantas veces. La población afroamericana ha sido la gran perseguida desde que fue sacada por la fuerza de su continente por los conquistadores, en el Gatlif, al hablar de su película, define el pro- siglo XV, tanto dentro del él como fuera. “Durante la fiebre amarilla de 1871 (en reablema principal con respecto a las minorías: lidad la epidemia reunió variadas enferme“Durante la Segunda Guerra Mundial los ro- Junto a los indígenas, en las Américas, repre- dades contagiosas), los barrios más castigamaníes fueron encerrados y masacrados con sentaban a esos seres “sin alma”, según la Igle- dos por el flagelo fueron los que habitaban el acuerdo de todos los países, con la excep- sia, que eran considerados lo más bajo de la los negros”, reseña el portal rebelion.org. ción de Bulgaria que, aunque fascista, rechazó naciente sociedad colonial. En esta acción sis- Además, la población afroamericana era entregarlos a los nazis. Todavía hoy, muy po- temática de exterminio y esclavitud, que aca- usada como carne de cañón en la guerra cas personas conocen esta historia y tampoco bó con casi 100% de la población originaria, se contra Paraguay. intentan comprender los problemas de este unieron todos los sectores del orden establecipueblo de mas de diez millones en Europa, do en aquella época: el clero, la aristocracia, la En el otro extremo, en Estados Unidos, que parecen flotar en el aire en medio de una ciencia y cuanta persona se considerara supe- en los siglos XIX y XX pobreza extrema”. rior por poseer un tono más claro de piel.

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Caracas, 9 de julio de 2017.

En 1968 ocurrió el asesinato de uno de sus líderes, Martin Luther King, quien se caracterizó por defender los derechos de la población afroamericana. “Cien años después, la vida del negro es todavía minada por los grilletes de la discriminación. Cien años después, el negro vive en una solitaria isla de pobreza en medio de un vasto océano de prosperidad material. Cien años después, el negro todavía languidece en los rincones de la sociedad estadounidense y se encuentra a sí mismo exiliado en su propia tierra”, dijo Luther King en su célebre discurso “Tengo un sueño”, pronunciado en 1963.

Primero fue la mujer

La segregación contra la mujer está unida al devenir histórico. En la antigua Grecia no se le consideraba un igual, en la Biblia es una compañera secundaria y aún, siglos después, sigue siendo la gran arrinconada, la gran diferente. Durante la Edad Media y Edad Moderna se persiguió sistemáticamente. Ella, junto a los niños y ancianos, correspondía a la parte más vulnerable de la población, sobre la que recayeron las culpas. La Iglesia, nuevamente a la cabeza, la señaló como causante de todo mal por sus supuestos poderes sobrenaturales, producto de la brujería. En esos casos, el odio no solo era del clero sino de las propias vecinas que acusaban a otras de hechiceras para zanjar diferencias. El asunto fue que las delaciones se escaparon de las manos y terminaron muriendo quienes días antes habían acusado. Miles de mujeres fueron exterminadas como una manera de los poderosos de tapar sus propios errores.

Caracas, 9 de julio de 2017.

En la actualidad, las muertes ocurridas en distintos países, producto de la llamada violencia de género, ha traído de nuevo un viejo tema: la discriminación de la mujer por considerarla menor. “Existen muchas formas diferentes de violencia contra la mujer: física, sexual, psicológica y económica”, según Unicef. Una sola “Miradas” no alcanza para el peso sobre los hombros de la humanidad de la muerte del otro por considerarlo distinto. Es una espiral que nunca termina y que es difícil de parar cuando alguno se cansa y quiere echar el tiempo atrás. En la película francesa El odio un hombre que cae de una azotea piensa: “Por ahora todo va bien, por ahora todo va bien”, pero tarde o temprano alcanzará el suelo, y eso es lo peor. Así me mueve este sentimiento: va cayendo y cayendo hasta que llena al otro por completo, y eso es lo peor.

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OPINIÓN

La dictadura del mercado POR Rodolfo Porras ILUSTRACIÓN HENRY ROJAS

Si tomamos en cuenta que el humano es un animal irremisiblemente gregario, podríamos deducir que su recurso de sobrevivencia más adecuado es la cooperación y que el sentimiento más acorde con su naturaleza es la solidaridad.

La máquina se ha ido perfeccionando cada vez más y este desarrollo tecnológico (que no humano) ha cambiado de manera contundente los modos de producción y, lo que es más importante, los modos de explotación.

Sin embargo, el desenvolvimiento histórico de las manadas hu- En las últimas décadas el desarrollo tecnológico le dio otra vuelta manas, con sus disímiles estrategias de supervivencia, la han ido de tuerca a la explotación humana. Ya la fuerza de trabajo no llevando hacia estructuras más bien contrarias a este carácter. define el valor de cambio, lo define el consumo. La acumulación de bienes, según Federico Engels, fue el detonante fundamental para la construcción de un orden social que descansa en el concepto de propiedad privada, asunto que tiene que ver con el usufructo de la fuerza de trabajo que antes era colectiva, solidaria y cooperativa. La energía de trabajo del ser humano degeneró en mercancía.

Los nuevos elementos que están en juego no son la cantidad de horas-hombre que se emplean para la fabricación; eso lo hace la robótica, las grandes procesadoras de lo que sea, las empaquetadoras automáticas y los sistemas de distribución. A falta de maquinarias están las maquilas, que utilizan al ser humano como piezas de producción mecánica. Aquí tenemos la punta —una de las puntas— del hilo del sistema económico y político que impera La propiedad privada es un recurso intrínsecamente excluyente, en esta contemporaneidad. no cooperativo ni solidario. Así se establece una contradicción inherente entre la naturaleza humana y el orden que se sostiene La dictadura del mercado en la propiedad privada. El consumo define la nueva cultura. Si antes la Biblia, los sermones en la iglesia, los garrotes, las canciones y los poemas llevados La tierra, la maquinaria, las leyes y el orden social se convirtie- por juglares y trovadores eran el aparato que introducía con varon, paulatina e implacablemente, en una estructura sólida, bien selina el orden social, ahora es la televisión, el cine, las mal llaaceitada y que contó con dos herramientas de apoyo: los cuerpos madas redes sociales. El sacerdocio lo ejercen los publicistas, los armados y la fundamentación filosófica y cultural. Así, la estruc- planificadores del mercadeo. Y en vez de garrotes hay, en ciernes tura fue vertiéndose a sangre y palabras en las mentes con la re- —y muchas veces de facto—, armas de destrucción masiva. Los ligión, las canciones, los garrotes, las leyendas, las ballestas, los sacerdotes antiguos —los curas— son ahora voceros y pontificapoemas, los instrumentos de tortura, las discusiones en la plaza, dores de segunda. las mazmorras, etc. La estructura social sigue siendo la misma que describimos en ¿El espíritu gregario, inevitable? Sí, pero dirigido a la conglome- los primeros párrafos. La diferencia es que esta energía humana ración masiva, dócil, acrítica y sumisa. se gasta en la compra de insumos. La alienación tenía la cara de Chaplin dando vueltas entre engranajes y poleas, hoy la cara es Nunca se ha detenido la lucha de la masa que fue heredando la la del idiota frente a la televisión, frente a la pantalla del teléfono, pobreza y la formación servil contra los grupos que fueron he- ante una vidriera que termina siendo lo más concreto con lo que redando la riqueza y los instrumentos de dominación. Es lo que se relaciona. El producto que le vendieron por las múltiples panCarlos Marx, el compadre del señor mencionado más arriba, lla- tallas está allí, de plástico y colores, detrás del vidrio. ¡Es verdad! mó “lucha de clases”. ¡Existe! Y tiene que tenerlo, porque esa es la concreción del universo virtual que le inoculan todos los días. Esta situación —con más o menos énfasis en la tierra, el poder político y la maquinaria— ha sido la estructura básica del orden Esta idiotización es, tal vez, uno de los logros más importantes social desde los anales de la sedentarización hasta nuestros días. en toda la historia de la explotación del ser humano. La víctima Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

Hoy, en todo lo que se ha llamado el mundo civilizado, las leyes del mercado prelan sobre cualquier otra estructura política, social o económica — se desvive por serlo y no siente que es explotado, más bien cree que logró algún tipo de éxito cuando consume lo que sea. Esto ha generado una acumulación de riquezas y poder que no tiene proporción con ningún otro momento de la Historia. Y ya sabemos lo que le hace la acumulación al instinto gregario, a la solidaridad y a la condición humana. Esta inmensa riqueza les ha otorgado a las clases hiperdominantes la capacidad de operar con un abanico que va desde la manipulación, vigilancia y conducción de un individuo, hasta la movilización, conducción y vigilancia de grandes masas de seres humanos. Hoy, en todo lo que, paradójicamente, se ha llamado el mundo civilizado, las leyes del mercado prelan sobre cualquier otra estructura política, social o económica. Es una dictadura que quita y pone gobiernos, cambia la estructura económica de los países, destina la función productiva de regiones enteras en el planeta, acaba con grupos étnicos, seca los ríos, desaparece montañas, propicia guerras, desnaturaliza por completo a los seres humanos, crea monstruos transgénicos, fabrica enfermedades para poder aplicar medicinas previamente formuladas y un largo y terrorífico etcétera. Es un sistema que para mantenerse debe crecer, si se estanca se debilita. Pasa como con Detroit, que se convirtió en una ciudad fantasma porque el mercado la fue desplazando hasta morir. El síndrome Detroit es para el mercado como la kriptonita verde para Superman. Por ello la dictadura del mercado no deja de acelerar la caducidad de todo lo que fabrica, por ello no deja de inventar bombas, por ello los medios de comunicación se multiplican, por ello sistemas como el socialismo bolivariano le genera el síndrome de destrucción. Por eso lo combaten a sangre, fuego y propaganda, usando todos los organismos internacionales a su cargo, a todos los medios de comunicación a su cargo, a todos los funcionarios a su cargo. Lo que no esté bajo la égida de esa dictadura va a ser atacado, vituperado, saboteado. Y siempre, pero siempre va a encontrar quien esté dispuesto a traicionar a su familia, a su país, a la humanidad, al planeta, a lo que sea para sentirse privilegiado en el engranaje del mercado y su implacable dictadura. Caracas, 9 de julio de 2017.

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SOBERANÍAS SEXUALES

Miedo de encuentro (I) POR víctor fha ILUSTRACIÓN L. “RAZOR” BALZA

Maikel y Estrella caminan aún somnolientos. “Para rumbear hay que chambear”, se anima a sí mismo Maikel, mientras la voluntad domina los malestares del ratón. Estrella, a unas cuadras, taconea a un ritmo marcial, casi autómata, y en cada sonido pareciera aguijonear el dolor que le ha dejado, no la rumba, sino la vida. Exhorto en sus anhelos, Maikel desacelera el paso mientras se abstrae en lo que sueña será el fin de semana que le prometió su costi Manuel: “Las botellas y las negras ya están cuadradas Mano. Solo faltan las lucas pa’ la comida”, le gritó al oído la noche anterior. Por su parte, Estrella suspira al recordar la última frase de quien fuera su cliente predilecto y ahora amante: “Este mes me separo de mi mujer, te busco y vamos pa’l rancho, allá en El Tigre”. ¿Será que esta vez sí?, se pregunta ella, mientras una sonrisa de esperanza le ilumina brevemente el rostro. Sorprendido por un tumulto de gente Maikel aseguró, casi por reflejo, los sobres que aún debía entregar. Son los últimos de la jornada y luego se irá donde el puesto de cachapas del primo para cenar y hacer unas lucas extra que garanticen el viaje a la playa. En cambio, la sorpresa de Estrella fue más discreta. En la puerta de un bar, a poco menos de media cuadra, vio salir a un grupo de cinco o seis tipos, todos con las botellas de cerveza aún en mano y uno haciendo un movimiento hacia el bolsillo que Estrella identificó rápidamente: “Perico”. Maikel, apenas cruzó por un costado una barricada en la que había más corotos atravesados que gente, siente que lo miran desde atrás y de reojo reconoce que el autor le está haciendo señas a alguien que debe estar cerca de él. “Tanta paja que hablan del barrio y en esta verga el malandreo es peor”, piensa mientras acelera el paso. En ese momento, cuando Estrella cree que dejó los tipos atrás, escucha: “Qué te pasa reina, ¿’tás apurada?”, y otro del grupo grita mientras ríe: “¡Es un tranfor pajúo!”. Se arma el chalequeo, y el chalequeado solo logra detenerlo con un: “¡Vamos a agarrar a ese marico ’e mierda pa’ que aprenda a respetar!”. Al mismo tiempo, Maikel escucha: “Ahí va un negro chavista infiltrado. ¡Agárrenlo!”. Maikel y Estrella empiezan a correr. En cada zancada Maikel piensa en el chamo que quemaron cerca de ahí, en la plaza Altamira, mientras Estrella se sacude los tacones y recuerda como hace unos meses vio a su amiga Emperatriz perecer ante unos tipos que con tubos en mano la rodearon. Luego de mucho correr, cuando ambos desaceleraron solo un poco para comprobar que habían escapado, un estrepitoso choque los tumba al piso. “¡Ay, coño!, perdón flaco, es que unos locos me quieren matar”, dice Estrella aún nerviosa, mientras se incorpora rápidamente y le da la mano a Maikel. Él, aún aturdido, se la acepta, pero en lo que logra enfocar su rostro se la sacude bruscamente... Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

ENTREVISTA

estamos obligados a conversar La psicología explica el odio desde la ciencia: a la gente la condicionan para que vea en el otro al enemigo, apelando a los instintos. Luis Lira, psiquiatra, le agrega la pimienta política, y lo deja todo más claro POR marlon zambrano • @marlonzambrano ⁄ Fotografías jesús castillo

Caracas, 9 de julio de 2017.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

La imagen de un hombre quemado vivo por manifestantes opositores en Altamira, a quien relacionaron con el chavismo, detonó las alarmas. Luego de agonizar por varios días, el joven Orlando Figuera falleció a consecuencia de las heridas, convirtiéndose en la imagen icónica de un crimen que abrió un nuevo capítulo en el debate político venezolano, en medio del paroxismo y con síntomas desconocidos en nuestra sociedad, hasta ahora. El I Foro Internacional “Violencia y operaciones psicológicas en Venezuela” que se realizó del 12 al 14 de junio en Caracas, para evaluar esta terrible circunstancia, concluyó, entre otras cosas, que se observa en el panorama de la confrontación “signos alarmantes que requieren una urgente atención y que podemos considerarlos como efectos muy recientes de estas operaciones psicológicas. Se observa un creciente nivel de intolerancia política y social, con sus correspondientes expresiones de odio y violencia, el cual puede llegar a naturalizarse, legitimarse e, incluso, glorificarse”. Para Luis Lira, psiquiatra, las explicaciones tienen un sino político y, por supuesto, científico. Pero, por sobre todas las cosas, “este momento debe obligarnos a conversar”. En lo político, está claro y muy señalado que la pérdida de los espacios de poder y, por ende, de dominación de parte de la burguesía ha generado un sustrato reactivo permeado por una apetencia desesperada de partidos políticos de derecha y empresarios, luego de casi dos décadas de gobierno revolucionario. En lo científico, el cerebro límbico y el ataque sistemático al neocórtex han animado el instinto de supervivencia y la rabia que desconocen la racionalidad.

a la transformación “con acupuntura urbana” de la capital para su apropiación por las mayorías excluidas durante la Cuarta República —y que puede entenderse como una de las catapultas del odio—, va incluso más allá y establece que la irrupción de los nuevos sujetos sociales constitucionales, visibilizados por este segundo momento constituyente de la Revolución Bolivariana, es motivo de mayor encono opositor. —¿Es difícil querer a Caracas?

-Mucho más allá de la ciudad y del ser humano que la habita está el sistema que la obligó a estructurarse de esa manera. Cuando entra el capitalismo de lleno a Caracas, al volverse centro del poder, hace que se convierta en epicentro de un montón de gente que llegó buscando establecerse y vivir, obligándola a habitar a las riberas de las casi 350 quebradas que atraviesan a Caracas, sumando tener que subir laderas y montañas. Esa exclusión se hizo muy evidente en los años 60, 70 y 80, acumulando conglomerados humanos en la periferia (llamados barrios), que casi no visitaban la ciudad plana. Gente que instintivamente tenía que sobrevivir. La gestión bolivariana, a lo largo de estos 17 años, recupera Caracas y la posibilidad de ser una ciudad para la paz y para la vida ciudadana. Los que podían vivir felizmente, sobre la base de la posibilidad económica, en el extranjero o en los grandes centros comerciales, vivían en modos privatizados. El que no tenía recursos económicos tenía que vivir frustrado por solo mirar vidrieras, apiñado en un barrio. —Uno de los aspectos debatidos en el encuentro de psicólogos fue que las expresiones de odio se observan más en las clases medias e ilustradas que en los sectores populares

desarrolló un pensamiento que les hacía creerse realmente dueños de Venezuela y que todos los otros (negros, afrodescendientes, indios) no éramos de la misma clase, aunque algunos pudiéramos llegar a vivir en sus urbanizaciones. El sistema capitalista hace que la clase acomodada crea que es natural el hecho de que ellos sean dueños de los medios de producción y que existamos los excluidos de esos medios, que en una época fuimos esclavos y ahora somos obreros. Como no hallaban la manera de manejar esa emocionalidad una vez que Venezuela se va desarrollando y aparece la clase profesional y la clase intelectual, entonces venden el espejismo de la clase media, que es un desclasado que cree que ya no pertenece al proletariado y que en cualquier momento va a poder pertenecer a la clase alta, y eso es mentira porque no es poseedora del gran capital. Lira, quien militó en la izquierda a través del Movimiento 80 en sus días de ucevista, junto al alcalde Jorge Rodríguez y Jacqueline Faria, entre otros, ha estado involucrado en las transformaciones de la ciudad de los últimos ocho años, pues ha ocupado cargos vitales de la Alcaldía de Caracas como director de despacho, director general e incluso interventor de la Policía Municipal. Este momento práctico-político de la Constituyente, como lo definió el presidente Maduro, adecuado para que los nuevos actores sociales plasmen en la Constitución un articulado que permita que no desaparezcan ni ellos ni sus derechos, es lo que “asusta” a la derecha. —¿Existe alguna forma de lograr el reencuentro?

-El Presidente, desde el punto de vista político y social, ha tratado de ilustrar su llamado: no es cualquier diálogo, es un diáFreud nos agarre confesados. logo para reencontrarnos. Ese diálogo tiene elementos didácticos, comunicacionales, Lira, responsable del área de infraestructura -Herrera Luque en Los amos del valle, y importantes. La Asamblea Nacional Consde la Alcaldía de Caracas, donde ha asistido en otros trabajos, muestra cómo esa gente tituyente tiene la posibilidad de mejorar Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

la diatriba a lo político y sacarla de la escena guerrerista o de guerra civil incipiente. Esta guerra que nos tocó tiene a la gente alejada del neocórtex, del cerebro racional. Hemos sido atacados por años para dejar la racionalidad de lado. Esto hace que la gente empiece a funcionar en base al miedo y por reacciones defensivas. —hay elementos que entraron en juego, como la dificultad del acceso a la comida

Lira es copartícipe de la transformación “con acupuntura urbana” de Caracas

las normas que tenemos. Es un momento para el encuentro. Supongamos que un sector social no quiere asistir, pues viene otro nuevo momento que es cuando los consti-

tuyentistas digan: “Nosotros creemos que la Constitución del 99 podría mejorar con estos elementos”, ese es otro momento para un gran diálogo nacional que vuelva a traer Caracas, 9 de julio de 2017.

-¡Claro!, ¿y ellos qué hacen?: desde el fascismo, durante la II Guerra Mundial, saben que el ser humano tiene esas tres estructuras cerebrales (reptiliano, límbico y neocórtex), que neuroquímicamente activan una cosa: esa emocionalidad que genera miedo y reacciones de rabia, y esa rabia humanamente tienes que buscar explicarla. El cerebro se estructura un enemigo interno al que hay que neutralizar porque te produce malestar; entonces tú, inconscientemente, quieres destruirlo. Si sigue esa sensación de rabia, a ese enemigo le quiero producir daño, a veces sintiendo placer. Si te sigue molestando, entonces quieres neutralizarlo. ¿Y qué viene cuando pasas todas esas etapas internamente?: que lo proyectas y buscas la explicación, no en tu inconsciente sino en tu exterior, en otro, y ese otro ha sido muy bien trabajado. Después de la muerte del presidente Chávez, a quien muy poca gente se atrevía a culpar de algún problema práctico más allá de la clase alta y los grandes empresarios, empezaron a venderle a la gente la idea de que todo lo malo estaba asociado a una figura en particular: el presidente Maduro. Los psiquiatras más biologicistas dirán que hay menos comida, en consecuencia hay menos azúcar en la sangre, hay menos glucógenos, hay menos pan, no encuentras chocolate, entonces no sacias el hambre rápido: menos serotonina. Si hay menos serotonina hay más rabia, lo cual es caldo de cultivo para el odio, que es eso: la sistematización de esa rabia proyectada en un enemigo externo que puedes llamar chavista, o constituyentista, o Maduro. Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

libremente

¿Qué no te gusta de los demás? Por Miguel Posani @mposani ILUSTRACIÓN JESSICA MENA

El no gustarme algo de los demás puede tener diversas acepciones. Una básica es la totalmente emotiva, que se concreta en afirmaciones como las siguientes: “No se qué es, pero no soporto a esa persona”. “Hay algo en esa persona que me cae mal”. “Esa persona que a primera vista ya te cae mal y sientes que le caes mal”. Y otro nivel, menos emocional, que se prefigura en diversos aspectos, que pueden ser éticos o estéticos, ideas, imaginario compartido, pensamiento funcional y operativo (oportunidades/ ganancias), en otras palabras, lo que sopesamos inconscientemente en nuestras relaciones cotidianas, nuestras expectativas. Es el nivel de la explicación de lo que no te gusta y por qué de la otra persona, por ejemplo: su forma de expresarse, de vestir, cierta forma de ver el mundo diametralmente opuesta a la mía, etc. En este caso —qué es “lo que me cae mal del otro”— reaccionamos siempre inconscientemente a través de sensaciones desagradables o de disgusto que, generalmente, producen respuestas de alejamiento, introversión y defensa y que, además, lo que producen es una reafirmación de nuestra percepción negativa del otro. Detengámonos aquí. Seguramente nunca te has preguntado si lo que no te gusta y detestas en los demás tal vez lo albergues en ti sin darte cuenta. ¿Te parece absurdo? Entonces, con mayor razón insisto en que te observes y te interrogues en cómo eres contigo y con los demás; y, sobre todo, busca eso que no te gusta de los demás en ti a ver qué consigues.

Con esto no se está planteando que todos tienen que caerte bien y chévere. La persona puede reunir una característica que te parezca negativa, y esa característica ciertamente es real, pero lo opcional es que te parezca negativa o la importancia que le des a esa característica. Lo que no te cae bien del otro es tu sombra, la que no quieres ver y la proyectas a los demás. Se trata de que utilices lo que sabes que no te gusta de los demás, tu sombra, como un espejo en donde reflejarte, cuidando no caer en esos errores o de corregirlos si hemos caído en su repetición.

Ejercicio Justamente, comienza a notar lo que no te gusta del otro y obsérvate en tu cotidianidad a ver si hay momentos en donde demuestres tú mismo eso que no te gusta del otro.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

“Todo lo que nos irrita de los demás nos puede ayudar a entendernos a nosotros mismos”. Jung

minicrónicas

Un chamatari de La Gran Sabana

FOTO MARTURINO PÉREZ

Marturino inicia su jornada temprano. Cuando aún duerme el sol. A pocas horas del amanecer, el frío implacable de la sabana sirve de antesala a la espesura verdinegra. El camino se acorta con el avance de sus pasos zigzagueantes, producto de una brujería que casi acaba con su caminar. Se niega a sucumbir a la pesadez y los bostezos. A lo lejos, la selva luce impenetrable. Sin embargo, el viejo pemón es un domesticador de lo salvaje. El verano pasado ya hizo lo suyo, abriéndose paso ante la tupida floresta. Este indio taurepán se impuso. Allí, donde la civilización se inmuta y se rinde ante la imponente conciencia de Dios. Por algo se autodenomina chamatari, aludiendo a los grandes guerreros amazónicos yanomami. Sus manos son instrumentos fieles de su resistencia cultural en contra de lo que los criollos llamamos tiempo. Este elemento vital, abstracto e intangible para unos, sublime para otros, para este chamatari constituye la oquedad perenne de su cosmovisión. Sus manos orquestaron la formación agreste. Este viejo terco e incansable reacomodó la selva, así como lo hicieron también sus ancestros. Su famélica insistencia le llevó a domesticar el suelo silvestre y reacondicionó la flora y la fauna, como quien redimensiona el espacio de una casa o cualquier edificación. Reacomodó la cosa selvática. Se abrió paso en el mar de bosque y una mañana de octubre comió un trozo de casabe mezclado con ají y cumachi, se colgó el guayare, se armó con su machete y decidió hacer ahí su conuco. Y en aquel lugar, en donde la vorágine silvestre lucía inclemente, éste surcó los suelos, los bañó con sudor de indio, los moldeó con sus callos, los sufrió y los alimentó con semillas frutales traídas de la sabana y de otras regiones fértiles. Un invierno después del suelo brotaron piñales, ajizales y yucales que fueron testigos del impacto simbiótico de sus prolíficas manos de chamatari de la Gran Sabana.

POR Leonardo Cantillo Caracas, 9 de julio de 2017.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

El canto del gallo El canto está fuera del gallo; está cayendo gota a gota entre su cuerpo, ahora que duerme en el árbol. Bajo la noche cae, no cesa de caer desde la sombra entre sus venas y sus alas. El canto está llenando, incontenible, al gallo como un cántaro; llena sus plumas, su cresta, sus espuelas, hasta que lo desborda y suena inmenso el grito que a lo largo del mundo sin tregua se derrama. Después el aleteo retorna a su reposo y el silencio se vuelve compacto. El canto de nuevo queda fuera esparcido a la sombra del aire. Dentro del gallo solo hay vísceras y sueño y una gota que cae en la noche profunda, silenciosamente, al tictac de los astros.

POR INDIRA CARPIO @indira_carpio

Principio y fin

Por Wislawa Szymborska (Polonia)

Después de cada guerra alguien tiene que limpiar. No se van a ordenar solas las cosas, digo yo. Alguien debe echar los escombros a la cuneta para que puedan pasar los carros llenos de cadáveres. Alguien debe meterse entre el barro, las cenizas, los muelles de los sofás, las astillas de cristal y los trapos sangrientos. Alguien tiene que arrastrar una viga para apuntalar un muro, alguien ha de poner un vidrio en la ventana y la puerta en sus goznes. Eso tiene poco de fotogénico y requiere años. Todas las cámaras se han ido ya a otra guerra. A reconstruir puentes y estaciones de nuevo. Las mangas quedarán hechas jirones de tanto arremangarse. Alguien con la escoba en las manos recordará todavía cómo fue. Alguien escuchará asintiendo con la cabeza en su sitio. Pero a su alrededor empezará a haber algunos a quienes les aburra. Todavía habrá quien a veces encuentre entre hierbajos argumentos mordidos por la herrumbre, y los lleve al montón de la basura. Aquellos que sabían de qué iba aquí la cosa tendrán que dejar su lugar a los que saben poco. Y menos que poco. E incluso prácticamente nada. En la hierba que cubra causas y consecuencias seguro que habrá alguien tumbado, con una espiga entre los dientes, mirando las nubes.

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Por Eugenio Montejo (Venezuela)

TRINOS

Hilse León @HilseCaracas:

Te incorporas /e incorporas olvido que ahora te mantiene de pie. Alfredo Silva Estrada. Venezuela.

Nocturno

Por Rafael Alberti (España)

Cuando tanto se sufre sin sueño y por la sangre se escucha que transita solamente la rabia, que en los tuétanos tiembla despabilado el odio y en las médulas arde continua la venganza, las palabras entonces no sirven: son palabras. Balas. Balas. Manifiestos, artículos, comentarios, discursos, humaredas perdidas, neblinas estampadas. ¡Qué dolor de papeles que ha de barrer el viento, qué tristeza de tinta que ha de borrar el agua! Balas. Balas. Ahora sufro lo pobre, lo mezquino, lo triste, lo desgraciado y muerto que tiene una garganta cuando desde el abismo de su idioma quisiera gritar lo que no puede por imposible, y calla. Balas. Balas. Siento esta noche heridas de muerte las palabras.

Caracas, 9 de julio de 2017.

SOLUCIÓN DEL ANTERIOR

UCI R C POR Neptalí Segovia

17 22

51 54

1. Caperucita..., cuento de hadas de la literatura infantil. 4. Arpa..., instrumento musical del grupo de los cordófonos. 10. Número atómico del hidrógeno. 11. Funde metales juntos. 12. Dios fenicio del tiempo eterno y de la prosperidad (mit.). 13. Sustancia de la que está hecha una cosa. 15. Novena letra del alfabeto griego.

36 43

33 35

18 24

16 21

16. Orificio terminal del tubo digestivo. 17. Energía que hace visible todo lo que nos rodea. 19. Iniciales del premio Nobel de Medicina en 1991. 20. Sufijo de un alcohol. 22. Vigésima segunda letra del alfabeto fenicio. 24. Buque, nave, embarcación. 26. Cifra romana que vale cincuenta. 28. Conocido diario revolucionario

venezolano. 30. Igualdad de nivel. 32. Comité Olímpico Internacional. 33. Conjunto de dos personas o dos cosas de una misma especie. 34. Planta hortense comestible. 35. Número atómico del helio. 37. En este lugar, aquí. 39. Símbolo químico del americio. 41. Apócope de mamá. 43. Tiempo que dura la claridad del Sol

1. Camino que uno se propone seguir. 2. Oficina Nacional Antidrogas. 3. Décima letra del alfabeto español. 4. Ciento cincuenta y uno en números romanos. 5. Cobra..., serpiente venenosa más grande del mundo. 6. Caso de diptongo. 7. Quinto signo del zodíaco. 8. Parcela de tierra. 9. Piña americana. 11. Río del estado Yaracuy. 14. Asociación u organismo vinculado al Estado. 15. Enarbola la bandera en el asta. 18. Siglas de universidad venezolana. 21. Paso la vista por lo escrito. 23. Fruto de la vid. 25. Elemento N° 79 de la tabla periódica. 27. En buena..., por buenos medios. 29. Espacio de tierra limpia y firme donde se trillan las mieses. 31. Órgano de vuelo de las aves. 32. Ciudad capital del estado Sucre. 33. Vigésima tercera letra del alfabeto griego. 34. Edificio o parte de él para vivir. 36. Poema para ser cantado. 38. Ciudad de Venezuela, patrimonio de la humanidad. 40. Gran Misión en Amor..., uno de los programas sociales del Gobierno Bolivariano. 42. Flor del rosal (inv.). 44. Asunto, materia o idea sobre los que trata alguna cosa (inv.). 46. División importante de una obra escénica. 48. Extremidad de la pierna (inv.). 50. Piedra consagrada del altar cristiano. 51. Iniciales del premio Nobel de Física 2003. 53. Naipe que lleva el número uno.

sobre el horizonte. 45. Sufijo de los azúcares. 47. Limpia, adecenta, arregla. 49. La ciudad jardín de Venezuela. 52. Partícula con carga eléctrica (inv.). 53. Prefijo con significado de aire. 54. Insignia de los comendadores de la Orden de San Antonio Abad. 55. Músico que toca el arpa. 56. Sinónimo de alabar, encomiar, elogiar.

POR NATHALI GÓMEZ @laespergesia Ilustración: L. "Razor" Balza

Imaginario Cuando te dicen:

MINIMANUAl para resistir a “la resistencia”

"Estamos luchando por el futuro de tus hijos"

pregunta de la semana

TUIT DE

Edición Número Doscientos treinta y cinco. Año 05. ÉPALE CCS

Caracas, 9 de julio de 2017.

por qué el precio de la pasta dental hace que ahora sea un privilegio para los dientes de los dioses

Cada vez que escuchamos hablar de las acciones de “La Resistencia” respiramos hondo porque sabemos que pudieran dañar a alguien, causar destrozos, impedir nuestro libre tránsito o “acusarnos” de chavistas en medio de una turba enfurecida. Nosotros, querido rumorólogo, los que pateamos la calle, somos quienes de verdad resistimos. 1. ¿La sensación es la de estar secuestrado por un grupo mínimo que impone su manera de ver la vida? Es de la resistencia. 2. Le da miedo hablar sobre sus convicciones en voz alta en cualquier lugar más allá de Chacaíto. Bienvenido. 3. Le indigna la violencia desde donde venga y contra quien vaya. 4. No entiende porque usted ve encapuchados con molotov y piedras donde otros ven a Bambi. 5. Le cierran las calles, le trancan el Metro. Le cercenan las posibilidades. Pues sí, en esa andamos. 6. Lo insultan y ante su defensa vienen más insultos. Mejor resista en otra parte porque lo pueden atacar. 7. Sabe que aunque algunas cosas no funcionen bien, no tiene que quemar su país para expresar su desacuerdo. 8. Trata de levantarse, aunque últimamente se la pase por el suelo. 9. No cree en vencedores pero tampoco se considera vencido. 10. Nos queda seguir resistiendo