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IMPERDIBLES NATURALES DEL MAR Y ESTEPA PATAGÓNICA
Fotos por Lucas Caamaño
Destinos integrados que proponen motivos diferentes para recorrer sorprendiendo con paisajes únicos en el mundo, encuentros con animales, playas solitarias, gastronomía autóctona, deportes y el encanto de pueblos, ciudades y comunidades.
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Cabo Dos Bahías y Camarones. Playas agrestes y solitarias, pequeños pueblos pesqueros para descubrir cómo es la vida frente al mar y una gran cantidad de fauna marina incluyendo una de las colonias de pingüinos de Magallanes más grandes de Argentina. Un destino ideal para descubrir un paisaje de rocas volcánicas que contrastan con el azul del mar. Camarones, catalogado como “Pueblo Auténtico”, con playas de arena gruesa, caletas ocultas y vistas hacia un intenso mar azul, es un pueblo pesquero que invita a descansar, practicar deportes náuticos y bucear y disfrutar de la gastronomía con productos recién salidos del mar.
Comodoro Rivadavia y Rocas Coloradas. Playas inmensas para realizar actividades desde buceo, paseos náuticos, nado en aguas abiertas, kitesurf, surf, apostaderos de fauna marina, incluyendo el
Área Natural Protegida Rocas Coloradas que recibe con un paisaje de total inmensidad en colores rojizos que contrastan con el azul del mar. Ideal para aquellos que quieren vivir una experiencia diferente, pudiendo hacer trekking, observando geoformas y troncos, flora, huellas petrificadas de más de 60 millones de años. También hay vestigios arqueológicos de antiguos pueblos originarios y se puede ver fauna como guanacos, aves marinas y hasta ballenas.
Rada Tilly es centro de actividades como buceo, kitesurf, surf, carrovelismo y parapente, lo que permite disfrutar a pleno durante todo el año sus playas, por la diversidad de actividades que se pueden realizar. El Área Natural Protegida Punta Marqués puede visitarse por el día e invita a disfrutar espectaculares vistas del océano y las costas, hacer observación de aves, conocer una colonia de lobos marinos y, según la época del año y con algo de suerte, ver pasar delfines, toninas overas, ballenas francas, ballenas jorobadas y ballenas, también disfrutar de gastronomía con productos regionales.
Sarmiento y Bosque Petrificado. Conocer el Bosque Petrificado Sarmiento es viajar a un pasado remoto en el que la Patagonia estaba cubierta por un bosque prehistórico tropical. Hoy parece un escenario de ciencia ficción con innumerables troncos, árboles, ramas, hojas y hasta semillas de árboles convertidos en piedra hace 65 millones de años.
Río Mayo ofrece una combinación de gastronomía del cordero patagónico local, animales alimentados con pasturas del valle del lugar, como tomillo silvestre, le aportan un sabor único a la carne, y muy característico de la región. Pesca deportiva con mosca permite encontrar truchas arco iris, percas y pejerreyes, entre otras especies, y actividades al aire libre, con la posibilidad de ver de cerca el trabajo de los hombres de campo y su cultura.
Caleta Olivia accidente geográfico que le da el nombre de “caleta” es Reserva Natural y su perfil marino costero se caracterizada por sus majestuosos acantilados, playas de arena fina y canto rodado, con un paisaje poblado de una variada avifauna. Pero aquí, la estepa patagónica se abre hacia el oeste de la ruta y dibuja un singular atractivo natural de mesetas que llegan hasta el mar formando los característicos acantilados patagónicos. El ambiente exhibe las típicas especies de la fauna patagónica: guanacos, martinetas, liebres europeas, caranchos, aguiluchos, el cuis chico y el águila mora. Nos ofrece una gastronomía local con la clásica pesca del día y actividades para hacer desde trekking, ciclismo hasta observación de vida silvestre.
Puerto Deseado es uno de esos destinos no tan conocidos que cuando lo descubrís, te atrapa por su biodiversidad y costas. Paisajes marinos espectaculares, historias de exploradores y naufragios, excursiones embarcadas y la posibilidad de visitar una colonia de pingüinos de penacho amarillo, observarlos en un pequeño islote rocoso rodeado por el océano Atlántico, también lobos marinos, toninas overas pingüinos de Magallanes, skúas, ostreros, y cuatro especies de cormoranes.
Perito Moreno y Cueva de las Manos sobre un farallón en el corazón del Cañadón del río Pinturas, es uno de los grandes tesoros arqueológicos de la Argentina, además de ser Patrimonio Mundial. Resguarda pinturas rupestres realizadas por cazadores recolectores con pigmentos minerales extraidos del suelo y las rocas, que habitaron la zona hace más de 9 mil años.