S ección
Costumbres
Inteligencia y calidad de vida
44 >>> CPIC
- Por el Ing. Industrial y Abogado Santiago Gallo Llorente
La palabra inteligencia proviene del latín “intelligentia” y está compuesta por el prefijo “inter” que significa “entre”, como intercalar, intervalo, el verbo “legere”, el cual significa escoger, separar, leer en palabras tales como colegio, elegir, el sufijo “nt”, es decir, el agente como en arrogante, confidente o potente y el sufijo “ia”, indicando la cualidad como en confluencia, frecuencia y sentencia.
La inteligencia implica una “Cualidad del agente que sabe elegir entre varias opciones”. Entonces, es inteligente quién sabe elegir la mejor entre diversas alternativas y también saber leer entre líneas. En síntesis, es alguien capaz de discutir, analizar, deliberar y brindar un veredicto… Se trata de una opción etimológica, aunque existen otras opciones del término inteligencia, por ejemplo: “Quién sabe adaptarse a situaciones cambiantes”. Evidentemente, quién ha completado un estudio terciario es una persona inteligente, y a partir de ello damos por descontado que quién hoy lee estas líneas posee una suficiente dosis de inteligencia cómo para aprovechar todas las oportunidades a su disposición. Deberíamos estimar a la inteligencia como a una planta, la cual crece con el riego, con la luz del Sol, más todas las formas de alimentarla, enriquecerla, fertilizarla y preservarla. No el enterrarla, como los de la “Parábola de los talentos” para no perderla, sino todo lo contrario: Invertir en ella, ejercitarla, arriesgarla, someterla a toda clase de pruebas y desafíos. Dentro de la inteligencia está incorporada la capacidad de experimentar una vida plena, creativa y capaz de superar las pruebas del estrés y las circunstancias cambiantes presentadas a lo largo de la vida. Es factible asociar la inteligencia con la mayor capacidad de resistencia al estrés. Contrariamente a ciertas leyendas populares, la fortaleza frente a situaciones de estrés nos asegura una mayor calidad de vida, y en paralelo, desarrolla un mayor optimismo. Ese optimismo es, sin duda, un gran