Creyentes e iglesias secretas

Objetivo de persecución en Irán

Los cristianos en Irán son considerados una “amenaza” a la seguridad nacional del país por parte del Estado, que tiene al Islam como religión oficial. Decenas de creyentes son capturados, torturados, juzgados y condenados a prisión por su fe mientras que las iglesias son lugares secretos de congregación, porque son el objetivo de constantes redadas, restricciones y vigilancia por parte de las autoridades de Irán.

Irán es el octavo en la lista de los 50 países que más persiguen a los cristianos y está clasificado como una nación que ejerce persecución extrema hacia las minorías religiosas. Actualmente, esta nación del Medio Oriente tiene una población de más de 80 millones de personas, de las cuales 1’245.000 aproximadamente son cristianos, según estimaciones de la organización no gubernamental cristiana Open Doors. La persecución a los creyentes aumenta al mismo ritmo de las preocupaciones de las autoridades iraníes por el crecimiento y expansión del cristianismo en este país.

Información recogida por Open Doors durante el último año detalla que: “La presión sigue siendo extrema contra los cristianos en todas las esferas de la vida. Ha habido un aumento en los informes de incidentes violentos, incluido un secuestro. Todas las instituciones políticas del país, incluida la presidencia, están dominadas por personas de línea dura que no toleran el cristianismo, en particular la conversión al cristianismo”. La persecución es ejercida de forma extrema desde el gobierno islamista iraní encabezado por el Líder Supremo Ayatollah Ali Khamenei. Article18 junto a otras organizaciones no gubernamentales religiosas como Christian Solidarity Worldwide (CSW), Middle East Concerny Open Doors International publicaron su quinto informe anual de 25 páginas titulado “Violaciones de derechos contra los cristianos en Irán: 2023 Reporte Anual”. Esta es una de las investigaciones más recientes acerca de la libertad religiosa y los derechos humanos en Irán y señala que los conversos son privados del derecho a practicar libremente su fe mientras que los cristianos siguen siendo perseguidos y tiene que enfrentarse constantemente a acoso, arrestos y encarcelamientos únicamente por la práctica pacífica de su fe. Datos de este reporte indican que al menos 30 cristianos sufrieron encarcelamiento o exilio en el 2022 (el mismo número que en 2021), mientras que hubo más del doble de arrestos: 134 en 2022 frente a 59 en 2021. Asimismo puntualiza que también hubo un marcado aumento en el número de cristianos detenidos: 61 en 2022, frente a 34 en 2021 y que a finales del 2022, al menos 17 cristianos seguían en prisión, cumpliendo condenas de hasta 10 años por cargos como “actuar contra la seguridad nacional” y “propaganda contra el régimen”.

30 Cristianos que soportaron duras penas de prisión.

49 Creyentes reportaron intensas torturas psicológicas.

468 Cristianos afectados lo que incluye a sus familiares no cristianos.

61 detenidos

98 Casos reportados (solo una fracción reportada públicamente)

Uno de estos casos es el de Sara Ahmadi & Homayoun Zhaveh, quienes fueron arrestados en junio del 2019 bajo cargos de “Liderazgo/pertenencia a una organización ilegal [iglesia en casa]” y condenados a 10 años de prisión en conjunto. Homayoun, que sufre de Parkinson, y su esposa y cuidadora principal, Sara, fueron sentenciados en noviembre del 2020 y sus apelaciones rechazadas en diciembre del mismo, aunque a Sara se le redujo la pena. A ambos se le prohibió viajar al extranjero o ser miembro de cualquier grupo social o político durante dos años después de su liberación y deben realizar seis meses de servicio comunitario en un centro para personas con problemas de aprendizaje. Todo esto por su fe.

Como ellos, decenas de creyentes y líderes religiosos son perseguidos en todo el país y violentados y agredidos durante los arrestos, interrogatorios y en su tiempo en prisión. Incluso, decenas de cristianos de habla persa se vieron obligados a huir del país en 2022 por temor a ser procesados, pero las dificultades de buscar asilo en países vecinos hacen que huir sea una opción poco atractiva para la mayoría de las víctimas.

Acoso judicial contra pastores e iglesias

Debido a la cruel y asfixiante persecución, los cristianos deben reunirse para leer la Biblia y realizar los cultos en grupos pequeños y en casas de familia o espacios incognitos para no ser arrestados y judicializados por las autoridades. Según el informe de Article18, estos espacios congregacionales son el objetivo de la Guardia Revolucionaria Islámica para intentar suprimir el crecimiento de bajo perfil que ha tenido el cristianismo en distintas ciudades de Irán.

“Estas reuniones en casas particulares suelen ser denominarse como ‘iglesias en casas’ y son objeto de redadas por parte de las autoridades iraníes. Las redadas en iglesias domésticas y el arresto e interrogatorio de sus miembros son cada vez más frecuentes es llevado a cabo por el Cuerpo de Guardias Revolucionarios Islámicos (CGRI). En consecuencia, hay informes más frecuentes de cristianos que sufren abusos físicos durante el arresto y el interrogatorio”, señala el informe. En este sentido, el análisis de Open Doors sobre Irán detalla que “Los creyentes de origen musulmán o convertidos sólo pueden reunirse en iglesias domésticas secretas. Corren un gran riesgo de ser vigilados, acosados, arrestados y procesados por ‘crímenes contra la seguridad nacional’. Los líderes y miembros

Así son las extremas condiciones de los creyentes en Cristo en Irán y a pesar de la enconada persecución hacia ellos, en muchas ciudades iraníes se ha visto un ‘explosivo’ crecimiento de los cristianos e iglesias- casa. El deber de los cristianos del mundo no solo se debe quedar en orar por estos hermanos que sufren sino alzar la voz en contra de los abusos y exigir a las autoridades políticas, judiciales e internaciones que estos se detengan y que se cumpla con lo establecido en tratados internacionales, donde Irán es estado parte, en materia de libertad religiosa y de cultos. Este es el llamado de distintas organizaciones, que a través de la presión internacional sea respetado y garantizado el creer libremente en Cristo en esta nación del Medio Oriente.