Nº2 IMO: Muerte

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SEPT 15

Muerte


Tu publicidad puede venir aquí ¡quedará muy mona!


m nario Fidel Delgado, psicólogo clínico que lleva años acompañando a personas en su camino a la muerte física y enseñando a otros a hacerlo mediante charlas y cursos llenos de creatividad, cariño y sentido del humor

¿Cómo acompañar a nuestros animales en su muerte? Mariví Simona, comunicadora animal, cuenta su experiencia con su perro dándonos claves muy importantes para ellos y para nosotros.

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Editorial Hoy es un buen día para morir Datos curiosos Arrepentimientos a la hora de morir Crecimiento personal Todos queremos que nada cambie Somos voluntarios Alaia y su labor frente al duelo Viajando Nos trasladamos a la orilla del Ganges Libros para pensar Libros para entender mejor el paso de la muerte Nos vamos al cine Tres miradas a la muerte desde la cámara de cine Recetas para ser feliz Tacos de verdura y mole Momento astrológico Año nuevo judío, por Miguel Mateo

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Contacto Redacción y publicidad: revistaimo@gmail.com Raquel Rús: 650 96 89 55 Jose Mª Escudero Ramos: 639 60 88 05 Si quieres colaborar, consulta cómo en nuestra web: www.revistaimo.com Facebook: Revista IMO Twitter: @revistaimo Google+: Revista Imo

Reiki y muerte. Igual que la energía de Reiki ayuda a la hora de sanar enfermedades y en el día a día de nuestra vida, es muy bonito ver cómo cambia la experiencia de la muerte para la persona y los familiares

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ISSN: Revista IMO es una marca registrada, su web y la APP están registradas en Registro de la Propiedad Intelectual. Revista IMO no se hace responsable del contenido expresado por sus colaboradores

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Entrevistamos a Amit Goswami, doctor en física cuántica, famoso por su aparición en “Y tú ¿qué sabes?” y por sus revolucionarios estudios que unen ciencia y espiritualidad

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Editores: Raquel Rús Jose Mª Escudero Ramos Diseño portada: Guillermo Niebla Maquetación: Jesús de Lasheras

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Revista IMO La primera revista de pensamiento y acción positiva

Qué decir en un funeral. Todos queremos hacer sentir mejor a la persona que llora a un ser querido y en estas ocasiones nos suelen faltar las palabras.No recuramos a frases hechas y vacías. Veamos otras opciones

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editorial

Hoy es un buen día para morir E

stábamos terminando el primer número de IMO cuando le comenté a mi hija de 11 años el tema del siguiente. “Va a tratar sobre la muerte” le digo. María me pregunta “¿y tú qué sabes de ese tema?”. Me río y respondo que no sé mucho pero me junto con los que saben, y que nadie nace sabiendo sino que se documenta, observa, aprende durante toda la vida. Ahí m ismo empezó a gestarse este editorial. En estos días voy recordando todo lo que hasta ahora he aprendido sobre el tema, todas las frases mil veces repetidas, los tópicos. Tenemos toda una vida para “documentarnos, observar, aprender y prepararnos” para vivir con la muerte de fondo, sabiendo que nos espera aunque siempre acabe por sorprendernos. Para este número hemos entrevistado a dos grandes investigadores: Amit Goswami -un gran físico cuántico que une ciencia y espiritualidad y tiene un trabajo muy hermoso-, y a Fidel Delgado, un titiriterapeuta que ha convivido también con la muerte y, como buen observador, ha conseguido entender la vida y su transcendencia. Personalmente he tenido la inmensa fortuna de vivir próximo a la muerte desde joven. Mientras era voluntario en diferentes lugares del mundo ayudaba a morir a enfermos de SIDA en NYC (Nueva York) y Madrid, a jóvenes indios de aldeas perdidas de México, enfermos de cáncer en Madrid... mientras ellos me ayudaban a encontrar mi propio sentido de la vida. Es una paradoja,

pero es así. Y sí, he dicho inmensa fortuna porque todo ese dolor me ha formado y me ha hecho tal cual soy, ni mejor ni peor que otros, sencillamente tal cual soy. Me enfrento a la enfermedad y a la muerte, no como algo personal tipo ¿por qué a mí? ¿Por qué ahora?-, sino como una parte de la evolución espiritual de cada uno. Vivimos en una sociedad del bienestar donde ocultamos los sufrimientos como queriendo obviarlos, no queremos ver las enfermedades ni la muerte y las alejamos. Antiguamente se moría en las casas; yo velé a mi padre y a dos de mis abuelos en el salón de mi casa; murieron en sus camas, rodeados de la familia, pero hoy tenemos unidades especiales en los hospitales para fases terminales y tanatorios, como franquicias, donde poder hacer un velatorio muy bien llevado.

José M. Escudero Es director de la Revista IMO, fotógrafo e instructor de Reiki, así como autor de varios libros sobre Madrid escuderoramos.com

SOBREPROTECCIÓN. Alejamos a los ni-

ños de enfrentarse con los dramas de la vida, evitando así una parte de la evolución del ser. Nosotros mismos, en lugar de afrontar el proceso tan bien descrito y documentado por la tanatologa Elisabeth KüblerRoss, ocultamos y posponemos los sentimientos. Puede que acabemos haciendo una sociedad blanda que no los afronta, que los oculta a base de pastillas de colores, aunque con el tiempo llegue a ser somatizado y todo lo que no se ha sacado en su preciso momento salga por otro sitio en forma de enfermedad. Por eso es bueno sentir, llorar, conocerse, dejar que salga todo lo que tenemos

Vivimos en una sociedad del bienestar donde ocultamos los sufrimientos como queriendo obviarlos, no queremos ver las enfermedades ni la muerte

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que soltar y que no nos quedemos con nada dentro. Es bueno sentir, aunque sea dolor, pues nos hará más fuertes. Pero lo más importante es que nos hará entender la transcendencia del Ser. No entenderemos el sentido de la vida hasta que no comprendamos el significado de la muerte y para ello tenemos que enfrentarnos cara a cara al proceso, al duelo y superarlo con tiempo y con amor. Yo siempre digo en los funerales que el dolor se pasa y nos quedará el amor, y cuando hice mi libro sobre cementerios pude confirmarlo: los camposantos están llenos de historias de amor. Los indios nativos americanos decían todos los días “hoy es un buen día para morir”. En las películas que hemos visto pintaban a los indios como salvajes, pero para mí, eran y son seres muy conectados al universo y al decir esa frase querían decir que estaban en paz consigo mismo para poder morir. Tengo mi trabajo hecho y mi conciencia tranquila, por lo tanto Hoy es un buen día para morir.

No entenderemos el sentido de la vida hasta que no comprendamos el significado de la muerte y para ello tenemos que enfrentarnos cara a cara al proceso, al duelo y superarlo con tiempo y con amor

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entrevista

“ Fidel Delgado Psicólogo clínico y titiriterapeuta

Con la muerte no se acaba la tontería

Fidel Delgado es Psicólogo clínico y titiriterapeuta. Le gusta innovar en la enseñanza. Aprende de las experiencias que le pone la vida por delante, entre ellas las que tuvo cuando trabajaba en el Hospital La paz de Madrid en Paliativos. Comparte sus pensamientos a través de conferencias y talleres muy divertidos a la vez que llenos de mensajes profundos que calan hondo en la consciencia del que los escucha. IMO. El tema de la muerte es muy in-

tenso por sí mismo... FIDEL. Hablar de asuntos de cierta in-

tensidad no me gusta mucho porque falta la realidad de la situación: ni te estás muriendo ni yo estoy con alguien que... y a veces, de todo lo que se habla del morir y del vivir, su contexto lo hace variar. En mi caso, yo regulo absolutamente lo que voy a comentar o decir por la situación en la que estoy. No tengo ideas propias sobre algo y le doy al PLAY y te las cuento, sino que estoy con un grupo de gente, conecto y doy una charla. Al cambiar la gente o la reunión o el lugar se condiciona mucho lo que sale de uno. IMO. Fidel, nos gusta cómo expresas la

transcendencia de la muerte porque eres un gran conocedor de este tema a través de tu experiencia en el hospital. ¿Cómo empezó? ¿Qué te hizo interesarte? FIDEL. Tengo varias versiones distintas

para responderte. Una, cuando dejé el hospital de La Paz; antes de que me dedicase a estar con “los que se van”. Luego otra versión más profunda, donde te das cuenta que la vida te está dando los regalos oportunos para que estés exactamente donde tienes que estar, y por último, la versión más auténtica es de 400 condicionantes de porqué estamos aquí. Pues no sé, estoy aquí porque tú me has llamado, porque María -una conocida común- te contó...

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IMO. Hay una inquietud de obser-

vador. María, mi maestra de reiki, me habló mucho de ti en cuanto le comenté el Proyecto IMO y el pensamiento positivo, y aún más con el segundo número, dedicado a la muerte, ¿qué tiene que ver la muerte con el pensamiento positivo? ¿Hay que hablar de ella para perderle el miedo? FIDEL. Hay cuentos “abridores” que

te dejan abierto el horizonte, la maravilla, la fantasía, el misterio, y hay cuentos “cerradores”, muchos con “metemiedos”. A partir de lo estrictamente conocido, todo lo demás es malo, terror, brujas y ¡cuidado! IMO. Quizás sea por esa sociedad li-

mitante, creada siglos atrás, que nos inculca el miedo para que no crezcamos por nosotros mismos. FIDEL. Igual tiene más fundamento

¿por qué vienes a esta tierra en modo tan reducido? Luego te apalancas con un apego tal que cuando te invitan a “volver a casa” pides quedarte a hacer un master, intentar aguantar otro poco... Es alucinante el reenganche a lo malo conocido. IMO. ¿El sentido de la vida es volver a

“nuestro hogar”? FIDEL. ¿Volver? En “casa” estamos

siempre; yo diría que es “seguir”. Ese paradigma lo he manejado mucho tiempo. El asunto es si cambias volver por otro formato. Por ejemplo, todas las dimensiones o todas las formas son simultáneas, el ir y volver es un relato de “dos dimensiones”. Si pudiésemos incorporar otra metáfora, sería simplemente cambiar de frecuencia, porque somos lo mismo venidos a menos frecuencia. Un “ser” venido a “ser humano”. Es un fluctuar en un ser que es simultáneo. El morir es el truco que tiene la vida para que te apegues un rato a un formato porque si no, no te quedas. IMO. En uno de tus vídeos comentas

que temer a la muerte nos mantiene infantilizados.

pectiva muy cortita, muy personal, y dices “este mundo, que pena, sufre” Yo creo que el conjunto está perfecto y hay unos niveles de escuela y formas de vida para cada una de las necesidades desde el sitio donde tú y yo estamos viviendo. Hay cosas que evalúas como “¡penosas, que horror, que sufrimiento!”, y hasta echas una mano, pero en el conjunto hay veces que existen personas que están ahí por auto-encargo, que tienen que hacer esa experiencia porque es la única frecuencia en la que ese experimenta algo que en esta otra, y entonces la comprensión de que cada cosa está perfecta como está, pero continuamente cambiando. IMO. Bruce Lipton dice: “No intentéis

FIDEL. Según estábamos hablando,

a veces fluctuamos desde una pers-

luchar contra el sistema, cread otro y si es bueno, la gente os seguirá”.

“Es un fluctuar en un ser que es simultáneo todo, entonces ahí el morir es el truco que tiene la vida para que te apegues un rato a un formato porque, si no, no te quedas”

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FIDEL. Rebobinando por donde ha

ido mi vida, he visto que ha habido unos cambios importantes, yo las llamo “Muertecillas Sucesivas, micromuertes”, pero nunca he tenido un impulso reformador, me sorprende todo lo que está pasando con mis videos porque yo nunca he colgado ninguna conferencia en la red.

sonalizado. Si generalizas te pillas los que se la toman de otra forma, se la toman de otra forma pero dentro de cada cultura hay de todo. IMO. ¿Cómo te documentas para po-

der sacar tus teorías, todo el proceso evolutivo que cuentas? FIDEL. Tengo respuestas anecdóticas.

IMO. ¿Las personas también nos re-

sistimos a las micro-muertes?

según el vivir es el morir, según el ver es el vivir

FIDEL. La resistencia está incluida en

el pre-supuesto de que una forma de vida, para que aguante como forma, tiene que tener apego entre los componentes de su forma. Si es mucho apego, fragua y se fosiliza, si es muy poco, no cunde como forma. Ese milagro del punto es una maravilla. IMO. ¿Cómo explicar a una mente ra-

cional el sentido de la vida? ¿y el de la muerte? FIDEL. El sacar el morir de lo patéti-

co-tremendo y ponerlo en el vivir. Al escribir vivir y morir, el común denominador es –IR Y no hay manera de parar ese IR. Entonces, si lo vas notando cada día, te acostumbras a inspirar con ganas y expirar. El planteamiento del morir alrededor de la defunción y el sepelio es un reduccionismo que hay que atravesar. Lo anecdótico alrededor de la muerte tiene tanta intensidad emocional -por el previo miedo cultural- que se lee y se estudia con asombro. IMO. Osho dice que el suicidio se co-

mete pensando en acabar con los problemas, pero no, se despierta al otro lado y continúan los problemas. FIDEL. El suicidio lúcido, inteligente,

es exactamente lo que habría que enseñar, cómo soltar continuamente pero también cómo abrazar continuamente lo que viene. El modo de vivir nuestro, culturalmente hablando, es mi vivir para no morirme. Ni coges aire ni lo sueltas. IMO. ¿Tenemos más miedo a vivir o

a morir? FIDEL. Tendríamos que hablarlo per-

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Primero, el hospital donde empiezo a trabajar me deja clarísimo el mal morir de la gente y, aparentemente me intereso por ese tema por echar una mano. Aparentemente, hoy diría que voy a un hospital a visitar agonizantes por casualidad. Me impresiona eso y me digo “espabila”, entonces no existía ni la palabra paliativos y los cuidados de enfermos terminales, desahuciados, era no volver a pasar por allí. Solo pasaban las enfermeras, y los enfermos deducían como estaban de mal porque el médico ya no viene porque no hay nada que hacer, ¡Desahuciado!” ¿Cómo que no hay nada que hacer? Acompañar, oír, estar En un relato más egoico, fui comprendiendo la necesidad manifiesta de acompañar a éstos y a la familia. IMO. Gracias por compartir este mo-

mento con nosotros. Es ahí donde queríamos llegar cuando te preguntaba cómo te documentas. Esa es la base. FIDEL. Así es, mis maestros. Podría

pasar una hora enumerando a gente iletrada pero radiante, que te introduce en cosas que yo no había oído nunca. En un caso fui a una habitación y me cuenta el enfermo “menos mal que ha venido usted porque vi-


nieron mi padre y mi tío a decirme que a ver si me muero ya que estoy aquí dando la lata.” Miro a los lados y no veo a nadie, y yo que iba con mi bata y carpeta de psicólogo intentando controlar la situación. Hay un detalle muy divertido de cucología psicológica. Cuando alguien delira y le llevas la contra al delirio, pelea el delirio para demostrarte lo suyo, pero si no deliras, si le estás resultando evidente, si ve que no te lo crees, pues no discute. Este hombre me estuvo preguntando que creía yo, pues la familia venía de su pueblo el

“Rebobinando por donde ha ido mi vida, he visto que ha habido unos cambios importantes, yo las llamo Muertecillas Sucesivas, micromuertes, pero nunca he tenido un impulso reformador”

jueves, entonces lo mejor era esperar al jueves para morir. Yo salí de la habitación al Control de enfermeras y pregunté si le había puesto alguna medicina, pues entonces no estaba en la misma evolución y me resultaban difíciles de entender esas cosas. No le habían dado ninguna medicación especial. Esto ocurrió un lunes y murió ese jueves que predijo. Esto lo conté en una conferencia y al terminar me llegó un colega y me dijo que como podía decir esas cosas en una charla. Con el tiempo me lo encuentro y me comenta que ha tenido muchos casos como los que relato yo de terminales que han visto a familiares ya fallecidos, que incluso lo ha contado también en alguna conferencia, en un hospital le llamaron la atención diciendo que no se podían contar esas cosas porque la medicina es una ciencia basada en la evidencia. Y LA EVIDENCIA ¿EN QUÉ SE BASA? Ten-

drá que ser que tengas el ojo abierto. Esas son las fuentes pero te pillan disponible. IMO. ¿cómo explicarías la muerte a

tus nietos? FIDEL. Como digo, no ha habido to-

davía la oportunidad y para saber cómo lo haría tengo que estar; lo que he aprendido es que tienes que llegar, estar, sintonizar, ver, verte, dejarte ver y esperar un rato para hablar hasta que sientas que se puede decir algo, cuando sepas que estás en sintonía con eso. IMO. Una película que te marcó, que

quieras recomendar.

El Juego consciente Fidel Delgado Editorial Integral Se pueden descargar de su página web http://www.fideldelgado. com.es/nuevo-libro.html

FIDEL. Una película japonesa Departure, las despedidas de esa película está muy bien. Y luego hay otra de un hijo que está entrevistando a su padre. El fin es mi principio, de Tiziano Terzani. También recomiendo una sobre un médico muy famoso de Mallorca, Carlos Cristo, que sabe que va a morir a causa de una enfermedad degenerativa, y pide a un amigo que grabe sus últimos años de vida. Las alas de la vida. Es maravillosa, la he visto tres veces.

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Datos curiosos sobre...

arrepentimientos a la hora de morir

B

ronnie Ware es una enfermera australiana experta en cuidados paliativos y enfermos terminales, además de autora del libro Los cinco arrepentimientos de los moribundos. Escuchar a sus pacientes durante años la sirvió para ver lo que de verdad era importante. Esto transformó su vida y decidió compartirlo por lo triste que es llegar a ese momento y pensar “ojalá lo hubiera hecho”. Os resumimos cuáles son.

Ojalá hubiera tenido el coraje de hacer lo que realmente quería. Nos educan para hacer felices a otros, no a nosotros mismos. La idea es tener el valor de intentar lo que nos pide el corazón.

Habría querido volver a tener contacto con mis amigos. Dar tiempo y cariño a los amigos hace que nuestra vida sea más feliz y completa, que no se pierdan en el camino por las ocupaciones diarias.

Habría deseado tener el coraje de expresar lo que realmente sentía. Decir lo que no nos gusta y, a las personas que amamos, lo que sentimos; en definitiva saber que la sinceridad no es fácil pero lleva a tener relaciones saludables.

Ojalá no hubiera trabajado tanto. Llevar una vida sencilla que nos permita pasar tiempo con quienes amamos, ver a los hijos crecer y dedicar horas a las parejas.

Me hubiera gustado ser más feliz. Elegir ser feliz, no temer los cambios y tomar la vida con humor y no de forma tan seria.

Recuerda: ¡Nadie se arrepiente de lo que sí hizo!



cambia el mundo

Qué decir en un funeral P

uede que una de las situaciones más incómodas de la vida sea la muerte. De pequeña no podía dejar de preguntarme por qué nadie hablaba de ello si todo el mundo iba a morir. Como si hacer que no existiera lograse dar a los mayores la ilusión de que nunca les iba a llegar. Por absurdo que parezca, cuando uno lo piensa con tranquilidad, nuestra cultura niega la muerte de la misma manera que no acepta la tristeza, la ira, el agobio o cualquier cosa que les haga salir de su anestesia ante la vida. Cuando alguien muere seguimos buscando formas de escapar a la incomodidad. No entramos en la emoción, evadimos la conexión, intentamos no recapacitar y lo único que deseamos muy fuerte es que todo pase y vuelva “la normalidad”. Esta necesidad de no conectar y la cultura que nos acoge hacen que cuando estamos en un funeral nos sintamos como pez fuera del agua. No sabemos qué decir, asumimos que nada de lo que hagamos servirá de nada (ya que el muerto seguirá muerto) e intentamos cumplir con nuestro deber social de asistir. Nadie dice que las personas cercanas al fallecido no aprecien la sola presencia de familiares, amigos y conocidos, pero seamos honestos, podemos hacerlo mejor. Para ello vamos a comenzar por intentar no volver a usar ninguna de estas frases en un funeral:

·“Es ley de vida” ·“Siempre se van los mejores” ·“El tiempo lo cura todo” ·“Te acompaño en el sentimiento” ·“Sé lo que se siente” ·“Es mejor que te intentes calmar” ·“Hay que ser fuerte” ·“Era lo mejor”

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¿Se te ocurren más frases típicas? Pues esas tampoco. Veamos qué hay detrás de cada una de ellas y cómo tenemos mejores opciones.

Anabel Mera Fxxxna xxa. anabelmeraphoto.com

“ES LEY DE VIDA”. A veces lo es y otras

no. Todos los padres esperan que sus hijos les sobrevivan, aunque tristemente esto no siempre es así, por tanto en ese contexto esa frase sería extremadamente inadecuada. Y si la persona fallecida era ya mayor, sinceramente no hace que nadie se sienta mejor. Está claro que a cierta edad todo el mundo espera que llegue su momento y que es más fácil de aceptar, pero todos vamos a echar de menos a la abuela aunque tuviera cien años y su muerte suponga un dolor. Decir que es ley de vida supone intentar racionalizar una emoción, eso no es posible y además es injusto para los dolientes porque les hace parecer poco racionales al sentirlo. “SIEMPRE SE VAN LOS MEJORES”.

Siempre nos vamos todos,

Raquel Rús es directora de la Revista IMO, terapeuta energética y emocional e imparte cursos habitualmente raquelrus.es


mejores y algo peores. Si con esta frase queremos expresar que teníamos cariño y admiración por el difunto, digámoslo. Usar una frase hecha ya escuchada mil veces no hace sentir a nadie que está recibiendo una atención especial. Con una frase desde el corazón el efecto no se parece en nada. “Cómo admiraba a tu padre”, “Qué buena persona era tu madre, qué atenta”, “Era un buen amigo, siempre podías contar con él”, ¿verdad que estas frases no suenan vacías?

“TE ACOMPAÑO EN EL SENTIMIENTO”.

La intención de la frase es buena, pero al ser tan habitual le quita sinceridad. Es como un recurso fácil que podemos sustituir por un: “estoy aquí si me necesitas”, “es un momento difícil, lo siento mucho por ti y tu familia” o “que pena me da lo ocurrido, le tenía mucho cariño”. “SÉ LO QUE SE SIENTE”. Lo más proba-

“EL TIEMPO LO CURA TODO”. Expre-

sado así parece una máxima indiscutible y lo cierto es que hay heridas que no sanarán del todo jamás. Si bien es cierto que con el tiempo daremos, en situaciones sanas, otra dimensión a los hechos y habremos pasado por el dolor más intenso, el hecho de saber que estaremos mejor en unos meses no ayuda en el momento. En esa situación lo que sí que sirve es un buen abrazo, que nos tomen la mano, que sencillamente nos traigan una bebida o algo de comer.

Usar una frase hecha ya escuchada mil veces no hace sentir a nadie que está recibiendo una atención especial. Con una frase desde el corazón el efecto no se parece en nada.

ble es que en el transcurso de nuestra vida hayamos tenido contacto con la muerte de alguna manera (un familiar, un animal al que amábamos, un amigo cercano…). Con cada uno habremos sentido algo distinto según nuestra relación con ese ser o nuestras creencias y estado anímico del momento. Por tanto, no asumamos que tenemos la menor idea de cómo se siente la persona a la que se le ha muerto alguien. No lo sabemos y tampoco hace falta. Como mucho podremos decir: “yo también he perdido a quien amaba y lo pasé realmente mal, lo siento”. Ahí hablamos de nuestra experiencia, eso es muy válido y siempre ayuda.

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“ES MEJOR QUE TE INTENTES CALMAR”.

Estar triste, llorar e incluso sentir mucha rabia o culpabilidad puede ser normal cuando estamos en un funeral. Quizás estas emociones puedan incomodar ya que nosotros mismos no conectamos con las nuestras, o porque desearíamos poder ayudar más a esa persona y que no tuviera que pasar por este duro trance. Da igual cuál sea la razón o la intención; es absolutamente necesario permitir a los demás sentir y aceptar aquello que sienta. En caso contrario no nos engañemos, estamos siendo muy egoístas, mirando por nuestra comodidad y no por el bienestar de la otra persona. “HAY QUE SER FUERTE”. ¿Qué signifi-

ca ser fuerte? ¿No expresar dolor? ¿Llorar a escondidas para no incomodar a nadie? ¿Fingir que no nos importa? Para mí es vivir ese dolor sin juzgarse y admitiéndolo. Es algo muy difícil y hay que darle valor. “ERA LO MEJOR”. Esta frase es habi-

tual cuando alguien estaba muy enfermo, sufría o había perdido sus capacidades de manera importante. Es cierto que con estas muertes la familia puede descansar, pero no nos engañemos; esa muerte también duele. Nunca es lo mejor, siempre queremos un milagro y que hubiera una sanación espontánea y poder contar con la compañía del ser amado durante más tiempo. Un funeral nos conecta con nuestra mortalidad, no nos resistamos intentando pasar por la experiencia sin sentirla, diciendo frases vacías. Si nos cuesta, siempre recomiendo la Técnica de

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La despedida ofrecida por los Monty Python a su compañero Graham Chapmana (en la imagen, en un escena de La vida de Bryan) se convirtió en uno de los homenajes más hermosos que he visto: www.youtube.com/ watch?v=WhN7MkekMPA

Liberación Emocional (EFT), que es lo más efectivo que yo conozco para conectar con la emoción y liberarla, y así estar mejor. De este modo será más fácil abrir el corazón, mirar dentro de nosotros, aceptar la incertidumbre, revisar nuestra vida, ser honestos con lo que sentimos y empáticos con las personas que están intentando aceptar la muerte de alguien cercano. Más que dar consejos, escuchemos, que nos digan cómo están y qué necesitan. Sólo el hecho de hablar ya es liberador, es una forma de sacar el dolor. También puede que te pidan que saques a los niños a jugar un rato, que les ayudes con la compra de mañana o les expliques cómo hacer un trámite; parecen cosas mundanas, pero son importantes y quizás no tengan las ganas, la fuerza o el tiempo necesario para hacerlas. Si estamos bloqueados con lo ocurrido, digámoslo. Si no sabemos qué decir, digamos que no sabemos qué decir. Sostener la mano del otro o abrazar no requiere de palabras y siempre llega. Algo bonito que puedes hacer es contar historias del difunto que puede que no sepan, sobre todo si le conocías hace mucho tiempo. O compartir tus mejores recuerdos. El funeral más emocionante, divertido y maravilloso que jamás he visto es el que organizó el grupo Monty Python (cómicos ingleses) a su compañero Graham Chapman, fallecido a los 48 años. Lejos de la seriedad y solemnidad, se preguntaron qué querría su amigo y el resultado fue que las lágrimas de risa se unieron a las de tristeza en un hermoso homenaje.


R AQUEL RÚS

COMUNICACIÓN CONSCIENTE SI TODOS SABEMOS HABLAR ¿POR QUÉ NO NOS COMUNICAMOS? ¿Cuántas veces te has frustrado por que lo que querías decir no llegaba a la otra persona? ¿te has preguntado la mejor manera de hablar con tus hijos o cómo decir lo que sientes sin hacer daño? A todos nos han enseñado a hablar, ahora llega el momento de aprender a comunicarnos. Esto significa conectar con los demás, que haya un intercambio equilibrado que nos aporte a todos y que nazca de la consciencia de quiénes somos y de la importancia de lo que estamos haciendo. Cambiar la forma de comunicarte te hará ver el mundo de otra manera, eso renovará tu energía, transformará tu cerebro, liberará tu corazón y mejorará toda tu vida.

CONSIGUE TU LIBRO EN PUNTOS DE VENTA SELECCIONADOS O EN W W W.LIBROCOMUNICACIONCONSCIENTE.ES

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entrevista

¿Qué es lo importante de estar vivo? Vivir

El doctor en Física Cuántica Amit Goswami nació en la India en 1936. Se doctoró en Física Nuclear Teórica por la Universidad de Calcuta en 1964. Es Profesor Emérito de Ciencia Teórica de la Universidad de Oregón y lleva más de treinta años enseñando Física Cuántica y dando conferencias alrededor del mundo. Sus revolucionarios estudios sobre física cuántica unen la ciencia y la espiritualidad. Su participación en la película documental ¿Y tú qué sabes? (2004) dio mucha popularidad a sus teorías que El Activista Cuántico (2009) potenció. En esta película nos invita a ser activistas cuánticos, cambiándonos a nosotros y nuestras sociedades de acuerdo con los principios de la física cuántica. Tuvimos la oportunidad de entrevistarle y escucharle en su maravillosa conferencia del Congreso de Conciencia Cuántica, que la revista amiga Universo Holístico organizó, donde nos cautivó con su gran personalidad y la energía que transmite.

Amit Goswami Doctor en Física Cuántica y Profesor Emérito de la Universidad de Oregón

IMO. Somos la primera revista de

pensamiento y acción positiva. GOSWAMI. ¡Genial! A la gente le

gusta mucho hablar de problemas y habría que hablar más de soluciones... y la solución siempre está aquí. Desde la física cuántica, que es la integración de ciencia y religión, hablamos de un dominio potencial y uno espacio temporal. Antes de la materia en el espacio tiempo había un dominio potencial del que procede esta materia. Hace años el conocido Nicola Tesla dijo que cuando los científicos empezaran a considerar los elementos no físicos como parte de la ciencia, el progreso iría mucho más rápido que hasta ahora. Este pensamiento increíble que Tesla tuvo en su momento hoy lo estamos haciendo realidad. IMO. En su libro dice: “Si el futuro

puede cambiar el pasado, puede que en el presente estemos tomando ideas del futuro”. Entonces ¿hay algo real o lo real son las posibilidades? GOSWAMI. Ese es el tema, ¿qué es

real? Nosotros encontramos que la potencialidad es más real que las posibilidades que se han vuelto reales en este momento. Porque hay más potencialidad que lo que

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“No es un accidente o una coincidencia ¡es la biología!” dice Bruce. Sus investigaciones pioneras sobre células madre le hicieron ver que la genética no determina nuestras enfermedades o nuestra vida en general. El entorno en el que viven estas células sí lo hace.”


se está manifestando. Lo no manifestado es algo mucho mayor que lo manifestado.

dominio no local de la potencialidad. Algo no físico está siendo transmitido al dominio de la potencialidad que conecta todo: lo físico a lo no físico, no físico a lo no físico, etc.

IMO. Asumiendo que no hay tiem-

po ni espacio y todo es un presente continuo ¿cómo encaja la idea de la reencarnación?

IMO. En tu libro hablas de medicina

GOSWAMI. La idea de la reencar-

GOSWAMI. Todas ellas operan en el

nación es una de las grandes sorpresas de mi propia investigación, nunca esperé que esta idea generase interés en la ciencia. Porque suena tan imposible que una entidad siga viva en un cuerpo muerto y luego vuelva en otro, esta idea realmente suena inaceptable. En el principio se vio que debía de haber algún tipo de energía y empezaron a medirla, pesaban un cuerpo vivo justo antes de la muerte y luego al morir. Entonces la física empezó a incorporar este concepto de energía que no es energía física ni material y nuestra actitud comenzó a cambiar. Y encontramos la idea de memoria no local que no tiene que estar en una materia física, pero sí en las matemáticas. Si una persona está muriendo ahora y otra nacerá en el futuro, y comparten las mismas ecuaciones matemáticas (que es lo que da continuidad entre esta vida y la otra) podemos decir que es una reencarnación. Esas ecuaciones matemáticas representan tendencias. Esto nos dice que lo que nos llevamos con nosotros es el carácter que desarrollamos y que no deberíamos de estar tan predispuestos a dar importancia al mundo material ya que no es lo que nos llevamos con nosotros. Es mucho mejor desarrollar nuestro carácter porque así nos llevaremos el tesoro conseguido con nosotros y podremos disfrutarlo en la siguiente vida.

mismo nivel.

ayurvédica, medicina china.

IMO. Y con Reiki podemos mandar

energía a otro tiempo, incluso a otras vidas “La idea de la reencarnación es una de las grandes sorpresas de mi propia investigación, nunca esperé que esta idea generase interés en la ciencia.”

GOSWAMI. Sí, incluso al futuro. IMO. Hablas del “arte de morir”,

como ves el morir llenos de drogas para aliviar el dolor, algo que es habitual hoy en día. Cuáles son las consecuencias.

IMO. Sobre la energía de sanación,

el reiki por ejemplo, ¿estaría relacionada con la no localización cuántica? GOSWAMI. Reiki está relacionado

con dos cosas. Con la energía vital que se transmite y sí, tienes razón, se transmite no localmente, en el

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“Hemos perdido el concepto de calidad de vida, estamos demasiado concentrados en la longevidad y ésta no es nada si tienes que vivir con dolor o inconsciente tus últimos años.”

GOSWAMI. Simplemente hemos per-

IMO. ¿Cómo cuidas tú de esa salud

dido el concepto de calidad de vida, estamos demasiado concentrados en la longevidad y ésta no es nada si tienes que vivir con dolor o inconsciente tus últimos años. Entonces, qué es lo importante de estar vivo: vivir. Deberíamos de recordar eso y hacer más por vivir. Para vivir necesitamos tener una mente, pleno acceso a nuestra energía vital, necesitamos tener un cuerpo. Tener nuestro dominios activos, no solo los físicos, también los vitales. El dolor es la falta de correlación, de entrelazamiento entre el cuerpo vital y el físico. Es habitual que lo vital esté muy desasociado de lo físico y eso ocurre porque hemos olvidado qué es lo que lo mantiene junto: la mayoría de los científicos no creemos en la energía vital, la mayoría de doctores no creen en esta dimensión de la realidad si comprendiéramos todo ello sabríamos que la salud física depende enormemente de la salud emocional, tenemos que reconocerlo. La gente vive hoy en un estado constante de estrés emocional, porque la parte vital se deja de lado, lo físico y lo vital se disocian y cuánto más pasa eso hay más dolor. La profesión médica tiene que creer en ello completamente.

física y emocional? GOSWAMI. Tengo un conjunto de

ejercicios que sugiero habitualmente. En el plano físico sabemos que los doctores lo hacen muy bien, dicen que la nutrición física es muy importante, pero también lo es la nutrición vital y eso es algo que hay que añadir. Hay gente que toma proteínas añadidas en lugar de tomar las naturales. Hemos de basar nuestra alimentación más en lo integral que en los extractos. La energía vital está solo en el todo y no en lo que se extrae. Deberíamos de comer fruta en lugar de las vitaminas extraídas de la fruta, comer orgánico en lugar de comida procesada que destruye toda la energía vital. Eso es solo una parte, la segunda por supuesto es hacer ejercicios de energía vital. Andar es un ejercicio físico, pero otros ejercicios como el yoga, el pranayama, el taichi son importantes para la energía vital. IMO. ¿Tú practicas? GOSWAMI. Yo practico yoga y pra-

nayama habitualmente, y algunos ejercicios de taichí, los sencillos. Con ellos sientes la activación de tu energía vital, es una sensación reconfortante, relajante. IMO. ¿Cuántas veces meditas al día? GOSWAMI. Yo intento vivir de una

forma meditativa. Y si quieres practicar es bueno empezar con diez minutos al día, en cualquier momento. Imaginemos que estás estresado, pues medita durante seis respiraciones. La meditación es el proceso de bajar el ritmo de una forma atenta. Así que si lo hago por seis respiraciones, solo pongo atención en inhalar profundamente, desde el estómago hasta la nariz sintiendo lo que haces, y exhalar seis veces. Solo eso tiene un efecto calmante. Todo lo calmante es meditación. IMO. Todos somos UNO, esa

idea nos gusta

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GOSWAMI. Sí, y eso no es algo místi-

co ni imaginario, somos uno porque la ciencia lo ha demostrado. En el concepto de la no localidad cuántica, somos uno porque el dominio de la posibilidad nos une a todos y éste es solo una cosa, no hay ninguna diferencia. Así que realmente somos uno, no hay duda al respecto. IMO. Entonces ¿todos somos lo mis-

mo? GOSWAMI. No, somos uno, pero a

la vez somos todos diferentes. Es una pequeña paradoja. Somos uno potencialmente, en el dominio de la posibilidad, y cuando esa potencialidad se materializa, ahí ya realmente no podemos decir que somos uno. Así que también somos diferentes, pero podemos aprender a acceder y activar a ese dominio de la posibilidad para sentir esa unión y, cuando lo hacemos, cosas como el amor, el respeto, el crecimiento, la justicia entre nosotros aumentan. En otras palabras, las relaciones entre todos nosotros mejoran mucho. La idea es ir explorando este dominio en el que estamos conectados y menos el dominio en el que estamos separados y competimos. El egoísmo, el narcisismo da una sensación de poder personal que a los hombres les gusta, y está relacionado con el chakra del ombligo. Para acceder a lo no local, a la unidad, habría que integrar esto con nuestro corazón. Hay que llevar la

energía de los chakras inferiores a los superiores. Imagina qué pasaría si llegáramos a ese equilibrio y ese es el futuro de la humanidad. IMO. Recomiéndanos una película

que te guste. GOSWAMI. Hay muchas películas

“La gente vive hoy en un estado constante de estrés emocional, porque la parte vital se deja de lado, lo físico y lo vital se disocian y cuánto más pasa eso hay más dolor.”

CURSO DE GESTIÓN EMOCIONAL ¡Empezamos el 26 de septiembre! ¿ALGUNA VEZ TE ENSEÑARON QUÉ HACER CON TU IRA, TRISTEZA O FRUSTRACIÓN? ¿QUÉ PASA EN TU CEREBRO CUANDO ESTÁS ANSIOSO? ¿CÓMO HABLAR CON TUS HIJOS? SOMOS SERES EMOCIONALES, NO RACIONALES, COMPRENDERLO NOS AYUDA A VIVIR MEJOR, A TENER MEJORES RELACIONES Y A SER MÁS FELICES. EN ESTE CURSO, HOMOLOGADO POR FENACO, APRENDEREMOS A CONOCERNOS MEJOR Y MUCHAS TÉCNICAS PARA QUE NUESTRA VIDA CAMBIE HACIA DONDE NOSOTROS QUEREMOS.

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que me gustan… La película “Atrapado en el tiempo” habla de la reencarnación, me encanta. IMO. ¿Y un libro? GOSWAMI. Uno de mis favoritos

es “David Copperfield” de Charles Dickens.

MÓDULOS MÓDULO 1 - 26 y 27 de septiembre 2015 Conócete a ti mismo: tu cerebro y la ansiedad, el miedo y la felicidad MÓDULO 2 - 10 y 11 de octubre 2015 Introducción al Eneagrama MÓDULO 3 - 21 y 22 de noviembre 2015 Creencia y realidad. Consciente e inconsciente MÓDULO 4 - 5 y 6 de diciembre 2015 Emociones: qué son, qué significan, qué implican MÓDULO 5 - 23 y 24 de enero 2016 EFT 1 (Técnica de Liberación Emocional) MÓDULO 6 - 20 y 21 de febrero 2016 Psicosomática MÓDULO 7 - 19 y 20 de marzo 2016 Proceso de presencia: meditar para ser y estar MÓDULO 8 - 23 y 24 de abril 2016 Comunicación Consciente MÓDULO 9 - 7 y 8 de mayo 2016 Técnicas energéticas para estar mejor MÓDULO 10 - 4 y 5 de junio 2016 Aceptación

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*Cada módulo tiene una duración de un día y medio (12h)


crecimiento personal

Reiki y muerte E

n la vida y en el Reiki, me gusta creer que hay un maestro para cada alumno y un alumno para cada maestro. Nunca sabemos bien quienes son nuestros maestros: quizás los que más daño nos hacen sean los que nos hagan evolucionar más. Yo que soy de lo que piensa que detrás de un dolor hay una gran evolución, cuando me topo con alguna situación difícil, cuando veo que alguien me intenta poner las cosas difíciles, en vez de sacar las uñas, abrazo y dejo fluir y me veo como cuando soy yo el que, sin darme cuenta, saco las uñas. Al final ¿quién soy yo para juzgar? He tenido la gran suerte de tener a una gran maestra de Reiki quien me ha enseñado y ha aportado mucho a mi vida. Recuerdo que en todos los cursos que he hecho con María Sánchez siempre habló mucho de la muerte, pues ella, al igual que Fidel Delgado -al que entrevistamos en este número- ha podido sentir muy de cerca todos estos procesos gracias a sus trabajos en la UCI y en paliativos de diferentes hospitales. María me enseñó dónde hay que poner las manos para ayudar a la transición de esta vida al siguiente nivel energético y me contó durante horas casos y casos que ella vivió en primera persona. Cuando me emancipé y pude tener mis propias experiencias, apliqué sus enseñanzas y tuve las mías propias. Es muy hermoso ayudar a morir, sí, de acuerdo, el Reiki es una técnica de sanación, entonces ¿cómo es que ayuda a morir?. La pregunta se responde con otra cuestión ¿qué es la sanación? Sanar podría ser entender que todo pasa por algo, que una vez que hemos hecho nuestro plan de vida, aquello a lo que hemos venido a este plano físico, todo está bien y podemos volver a nuestro hogar, ese plano energético en el que no existe el tiempo, ni el do-

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lor, ni el bien ni el mal. La sanación es entender la transcendencia de la vida, encontrar un sentido a la vida para entender el significado de la muerte. Durante un tiempo estuve yendo a La Paz a dar Reiki a niños con cáncer y allí pude ver a mucho ángel; muchos de esos niños tenían un mensaje que han dejado en sus padres, médicos, enfermeras, voluntarios... una vez llegué y pregunté por un niño, me respondió una enfermera que esa hermosa criatura había fallecido unos días atrás, pero “curiosamente se nota cuando un niño y su familia reciben Reiki, la familia queda en un estado de paz inusual. Es como si entendiesen que todo está bien.” Esas palabras me llenaron de esa misma paz

Hay que viajar sin miedos y llegar a la última estación así, feliz, tal cual se ha de vivir.


que dejó ese ángel anónimo. Es todo tan bonito. Con mi gran maestra María he tenido la oportunidad de realizar un taller específico de “Acompañamiento al proceso final de la vida desde el Reiki,” he aprendido lo que hay que hacer desde el punto de vista del “otro lado”, he sentido lo que hay una vez terminada la vida y sé que no da miedo, he visto que nos espera ese ángel guardián que día a día nos cuida y que nos llevará a nuestro nuevo hogar sin miedo. Hay que viajar sin miedos y llegar a la última estación así, feliz, tal cual se ha de vivir. También he podido ir a dar

José M. Escudero Es director de la Revista IMO, fotógrafo e instructor de Reiki, así como autor de varios libros sobre Madrid

Reiki a una persona que estaba en fase terminal, me recibió en su casa y en el hospital. Le di reiki tres veces, cada cual mejor, muy intenso. Son sensaciones tan personales que no se pueden describir. Nuestros seres interiores se comunican, todo es hermoso. El último día que le vi estaba en el hospital. Le di reiki solo en los pies, tal y como me había enseñado mi maestra María. Pasaron 20 minutos cuando me llamó por mi nombre, deja ya de darme Reiki, “he tenido la sesión más impresionante de mi vida”, me dijo con una cara de paz y felicidad que no tenía hace días. Sus familiares regresaron a la habitación y lo primero que me dijeron “¿qué le has hecho que le ha cambiado la cara?” Yo no hago nada, respondí. Yo soy un canal, todo lo hacen el Universo y él. Con respecto al duelo, para los que quedamos desconsolados en este plano energético, siempre es más llevadero cuando se recibe Reiki, pues nos aporta esa paz que necesitamos. En otra sesión de Reiki a una señora que había perdido a su hijo en un accidente de tráfico -era una señora muy nerviosa- cuando terminé la sesión me dijo que había sido terrible porque ella no estaba acostumbrada a estar tanto tiempo quieta. Continuó diciendo que había sentido cómo si le clavase un puñal en el corazón. Mi respuesta fue que no se lo clavé, se lo quité. Desde ese día su vida cambió radicalmente. Asimiló el dolor y lo dejó ir. Quizás sea porque nos regalamos una hora con velas, incienso y música, o será que es cierto eso de la canalización de energías. Yo te invito a que lo pruebes pues, como decía anteriormente, hay cosas que no se pueden explicar, hay que probarlas y recuerda que hay un maestro para cada alumno y un alumno para cada maestro. Deja que el Universo os una y aprovechad el regalo que nos dan día a día esas energías que somos y que nos unen y que algún día podremos entender de verdad en su totalidad, a través del Reiki y/o de la muerte.

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crecimiento personal

Todos queremos que nada cambie A

ninguno nos gusta que nos despidan de un trabajo donde nos sentíamos cómodos, ni deseamos pasar por una ruptura sentimental y, por encima de todo, no deseamos que un ser al que amamos muera. Todos esos eventos nos enfrentan a lo que somos. De golpe el cómodo día a día se rompe en pedazos y nos vemos llenos de inseguridades, rabia, tristeza y planteamientos de una profundidad inusual. Tan cierto es que no son situaciones que deseemos como que son parte natural de la vida. Sí, he dicho natural. Los duelos no son una enfermedad que necesite medicación de ningún tipo. Son procesos que nos cambian. En ellos hay una renuncia a lo que fue y que nunca más será ¡cómo van a ser fáciles! ¡duelen! ¿Y quién nos ha dicho que sentir dolor estaba mal? Ya es hora de que aceptemos que no hay emociones buenas o malas, hay emociones. Nosotros somos los que las generamos basándonos en nuestras expectativas, nuestros valores, nuestros patrones... Ellas

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nos dan información de todo ello y hacen que los revisemos, y ¿sabes? así es cómo crecemos. Cambiamos porque el dolor nos indica que algo no va bien y esa sensación de incomodidad nos impulsa a movernos de donde estamos. Al ir a nuevos lugares interiores descubrimos más de lo que somos y de lo que podemos ser, experimentamos la vida desde nuevos puntos de vista y conocemos a personas que pueden influirnos para mucho mejor. Pero no, atrás no volveremos. Jamás volveremos a ser los mismos. Nos rompimos y nos recompusimos, nos reinventamos y, si lo hicimos bien, ese nuevo ser en que nos convertiremos será mucho más auténtico que el anterior. Osho (explicar quién es) decía que lo que realmente requería de valor era el suicidio diario. Cada día morir un poco, sin apegos a lo que somos o creemos ser, para convertirnos en alguien que nos guste más, que sea un poco más feliz independientemente de lo que ocurra en la vida. Mientras nos acostumbramos a esa muerte habitual cuando hemos de

Raquel Rús es directora de la Revista IMO, terapeuta energética y emocional e imparte cursos habitualmente raquelrus.es


hacer un duelo permitámonos llorar desconsolados, sentir rabia hacia el Universo, culpa por lo que no hicimos o tristeza por lo que pudo ser. Todas esas emociones son nuestras y no tienen nada de malo; necesitamos imperiosamente sentirlas tanto que las agotemos. En yoga no hace mucho mi maestra vio como un alumno no se esforzaba lo suficiente y le dijo una frase que me dejó en suspenso: “del dolor no se puede huir, hay que traspasarlo”. Así que olvidemos hacer como que no ha pasado nada, fingir que no duele a morir, que no nos dejó desconcertados sin saber qué hacer o que podemos volver al trabajo y a las relaciones con los amigos como si nada hubiera pasado. Ha pasado y comienza una nueva etapa. Elizabeth Kübler Ross, una de las mayores expertas mundiales en moribundos y cuidados paliativos, fue la primera en distinguir cinco etapas por las que pasaba (sin importar el orden) la mayoría de las personas a las que ella atendía: -Negación -Rabia -Negociación -Tristeza -Aceptación Basándose en ellas, hace unos años Salomon Sellam, médico especialista en psicosomática, añadía algunas más que viven las personas en proceso de duelo:

Mientras nos acostumbramos a esa muerte habitual cuando hemos de hacer un duelo, permitámonos llorar desconsolados, sentir rabia hacia el Universo, culpa por lo que no hicimos o tristeza por lo que pudo ser.

-Explicación -Comprensiótn -Dejar ir, soltar y perdonar -Reinvertir en la vida Conocerlas puede parecer algo sencillamente curioso, pero cuando lo estás viviendo y eres consciente de tu paso por ellas da una sensación de normalidad que alivia mucho. Es otra forma más de evitar nuestra tentación de no vivir el dolor. Hace tiempo un amigo experimentó una separación de una pareja con la que había compartido muchos años de su vida y me aseguraba que estaba triste, pero bien. Yo le hablaba de las fases del duelo y de lo normal que sería sentir rabia, mientras él me miraba negando con la cabeza. Semanas más tarde me dijo: “oye, sabes qué, creo que estoy empezando a cabrearme”. Y los dos supimos que entonces todo estaba bien, porque había seguido su viaje por las etapas del duelo. Está claro que si pudiéramos, pasaríamos de puntillas por ellas, para no sentirlas, pero ya hemos dicho que si queremos hacerlo bien hay que sentir y mucho. No hacerlo puede parecer una ventaja temporal, pero nos deja estancados. Aparentemente podemos pensar que no pasa nada porque no llorásemos esa muerte, que estábamos en shock y era normal. La cuestión es que, si pasan años sin hacer el duelo, oficialmente tenemos un problema. Y quizás un día en el que ya ni lo tengamos presente nos sintamos tristes sin saber porqué, lloremos sin saber la causa y no sepamos cómo manejarlo porque no entendamos nada. Ahí estará el duelo intentando salir. Por eso, de verdad, llorad, gritad y haced lo que lo necesitéis cuando os toca y sabed que está bien como lo hagáis porque no hay una forma correcta. Aprovechad para mirar hacia dentro, para conectar con vuestra mortalidad y vuestra inmortalidad, para tener miedo a lo que viene e, incluso así, saber que traerá cosas buenas y un nuevo tú, uno que puede que ni siquiera te atrevieras a imaginar.

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somos animales

La muerte de mi mejor amigo G

astby llegó a mi vida y le dió la vuelta como a un calcetín. Se lo agradeceré siempre. He olvidado cómo era la vida antes de Gastby pero ahora reconozco mucha más vida a mi alrededor, más belleza y alegría en cualquier rincón. No fue él quien me descubrió la capacidad de hablar con los animales. Tuvo que acercarse una ballena azul y darme un buen meneo telepático. Así empecé a entender que, a veces, la voz en mi cabeza masculina y profunda, llena de paz provenía de mi perro. Desde entonces mi vida comenzó a desplegarse como un abanico. Pero cuando Gastby comenzó a pedirme que me preparara porque estaba cansado e iba a irse, un vértigo infinito se instaló en mi corazón. Él me enseñaba todo lo que es posible aprender sobre el proceso de muerte, sus fases, su acompañamiento y convertía su vida en una serie de lecciones magistrales: “Vivir es morir a cada instante” “Sólo se puede tener una vida plena muriendo plenamente” “La vida se abre como una flor de loto cuando nos rendimos al instante presente sin condiciones” Durante un año entero Gastby estuvo muriendo, ofreciéndome el tiempo y la sabiduría necesaria para afrontarlo. En ese año pude observar cómo construía su propia muerte con mimo y paciencia, sólo me pedía respeto y aceptación, -esta segunda me flaqueaba a cada ratopero él seguía firme su camino. Descubrí que la muerte es el fruto maestro de la vida que se vive. Morimos tal y cómo vivimos, en nuestra muerte se reflejan las mismas creencias que han marcado nuestra vida. A través de cientos de consultas de comunicación y terapias entre

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animales y sus personas, he ido observando el proeso de la muerte naciendo de la vida como un espejo, nuestra muerte y la de nuestros animales... Ellos ya lo saben y toman el proceso de muerte con tanta naturalidad como cualquier otro periodo de la vida. A menudo me llaman personas preocupadas por sus animales: “No sabemos si es momento ya de ayudarle a ir, no queremos que sufra” En especial la última semana que pasé con Gastby me llovieron este tipo de consultas... recuerdo cada una de ellas. En un principio lo sentí como una maldición, apenas podía con lo mío, ¿cómo iba a poder ayudar a nadie más?... y de repente resultó que cada animal con el que contactaba me daba una pieza más. Ayudándoles a colocar el corazón de su persona se colocaba el mío, me devolvían una y otra vez la serenidad y la paz. Desde aquí, a cada uno de ellos y a sus personas que les escucharon, les doy las gracias. Los animales no suelen hablar porque sí, no lo necesitan, sin embargo en sus últimos días suelen estar más charlatanes que nunca. Nos dan recados para las personas que han apreciado, consejos sobre nuestra vida para cuando ya no estén, responden preguntas que ni sabíamos que teníamos y una vez más nos maravilla su sabiduría. Aunque su cuerpo esté postrado bullen de actividad a muchos otros niveles. Gastby me explicó que la muerte es uno de los momentos más importantes de la vida; dejas este plano y, como quien sale de viaje por un tiempo, lo suyo es dejar todo bien atado y cerrado para que no interfiera allí donde vayas. Que nosotros no seamos conscientes de nuestra capacidad para recibir

María Victoria Simona es comunicadora entre especies y terapeuta de animales y personas, entre otras cosas entrespecies.com


sus mensajes telepáticos no les impide pasar sus últimos días enviándonos toda esta información, saben que incluso inconscientemente, siempre algo nos llega. Los dueños que no pueden recibir estos mensajes de sus animales a menudo confunden estos momentos de esfuerzo del animal con sufrimiento o dolor. Vemos a través del filtro del miedo el proceso de muerte de nuestro animal, rápido pensamos que el que sufre es él, no nosotros acosados por nuestros miedos, y a menudo se toman medidas de ayuda antes de tiempo. Ellos saben decirte cuándo realmente ha llegado su momento. No existe una fórmula, cada muerte es diferente. Algunos desean hacer todo el camino por sí mismos, otros necesitan resolver algunas cosas que, una vez resueltas, están dispuestos a recibir ayuda. Gastby me explicó que según tu energía va saliendo de este plano, el cuerpo físico se siente con menos intensidad, así hay dolores que no duelen tanto mientras uno muere. Algo que no debería sonarnos tan extraño

Vemos a través del filtro del miedo el proceso de muerte de nuestro animal, rápido pensamos que el que sufre es él, no nosotros acosados por nuestros miedos, y a menudo se toman medidas de ayuda antes de tiempo

pues los humanos tendemos a utilizar esta táctica como vía de escape ante el dolor físico y emocional. Sin embargo suele fallarnos precisamente durante el proceso de muerte, donde la repentina conciencia de lo que no nos hemos atrevido a vivir hace que nos aferremos a la vida con uñas y dientes, y esta lucha sólo intensifica los dolores que podamos sentir. Con los animales el proceso sigue su flujo natural y es exactamente al contrario. Ellos no han evitado un solo instante de su vida, han estado presentes en cada momento, no se arrepienten, no se avergüenzan y no les da miedo mirar al otro lado. Aceptan la muerte como han aceptado la vida, porque son lo mismo. Una vez una amiga me pidió que la ayudara con un caso terrible. La perrita “favorita” de su vecina había sido atropellada y, a pesar de las operaciones, no habían podido conseguir que la perrita recuperara el control del esfinter anal. El uso de pañales no eliminaba el olor, así que la perrita pasó de vivir en las faldas de su dueña al jardín con los perros más grandes. Ella no había entendido el porqué del cambio y se colaba en la casa cada dos por tres. Eso sumado al gasto en pañales y a que no se había encontrado la manera de evitar las manchas de excrementos aquí y alla, hizo que la mujer entendiera de esta situación que su perrita sufría y que lo mejor era sacarla de su sufrimiento. Mi amiga, que también comunicaba con animales como yo, había hablado con la perrita y sabía que ella no acababa de entender la situación. Había tener un accidente y necesitaba más mimos que nunca pero no los encontraba. Era mi amiga quien iba a encargarse de sacrificar a la perrita, su vecina se lo había pedido y le había hecho saber que si no lo hacía ella, lo haría otro... al menos ella la conocía y la comprendía. Su bola de emociones no la dejaba conversar sobre ello con la perrita y ayudarle a prepararse. Yo no quería -de hecho no creía- que pudiera porque la situación me parecía totalmente injusta. Uno de los principios básicos de la ética de un comunicador es, además, la no manipulación.

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Pero Gastby, en su último año, me dijo que no se trataba de eso, que aceptara. La perrita tenía tres días. No fui tanto yo como Gastby quien la ayudó. Al hablar con ella me quedó claro que no era su momento. Gastby le habló del proceso que iba a vivir, pero sobre todo le trasmitió paz y amor, y así transcurrieron los tres días. Cuando mi amiga me llamó para contarme que la perrita ya se había ido me explicó que cuando fue a recogerla a casa de la dueña (que no quiso acompañar a la perrita porque le dolía demasiado) los demás animales de la casa fueron pasando uno por uno a verla, olerla y despedirse, y cuando todos se hubieron despedido, la misma perrita se acercó a mi amiga, “ya estoy”. “Estuvo muy tranquila, me ayudó incluso a estarlo a mí” me dijo mi amiga. La misma frase me dijo Gastby llegado su momento, levantó la cabeza, me miró a los ojos y me dijo “ya estoy”. Acabábamos de ingresarle y le estaban haciendo pruebas; no creo que nada me haya costado más en esta vida que entrar en la habitación del veterinario y decirle “Mi perro dice que ya está. Él está preparado para irse”. Me escuchó, pero decidió esperar a que llegaran los resultados de las pruebas. Así pasé dos días en la perrera junto a Gastby, acompañándole, procurando no pensar en mi miedo, en el dolor de la separación, simplemente estando presente “¿acaso ya no estoy aquí?”. Lo estaba. Y yo con él. Fueron los días más intensos de mi vida, dándole Reiki que él agradecía, limpiándolo, acariciándolo, cantándole y sobre todo escuchando los mensajes que me daba para los amigos que tanto le querían, para mí... a ratos estaba ausente, en otros momentos estaba asom-

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Fueron los días más intensos de mi vida, dándole Reiki que él agradecía, limpiándolo, acariciándolo, cantándole y sobre todo, escuchándole

brosamente centrado y sereno. Su momento lo eligió él, sacó fuerzas de donde ya no había y salió del cubil directo al césped y allí se tendió. El frío de la inyección fue como una brisa suave entrando por su patita y suavemente ayudándole a salir por su tercer ojo, lo vi ocurrir y quedé fascinada. Su cuerpo estaba allí, vacío y a mi lado izquierdo sentía su energía, llena de alegría y vida, como cuando era un cachorro... casi la había olvidado... EL LUTO. Aún así me costó abando-

nar su cuerpecito en la mesa del veterinario. Durante el resto del día fui notando flujos de energía saliendo de mi cuerpo, mi corazón, mis riñones, mis dientes... él estaba recogiéndo las partes de su energía con las que había impregnado personas y lugares durante su vida. Así que procuré estar serena y bien acompañada durante ese día, dentro del estado de shock en el que me encontraba. Star of Bethelem y Rescue Remedy de las esencias florales de Bach y color naranja para los que se quedan, lo llevé al pie de la letra. Fue al día siguiente cuando comencé el duelo por la muerte de mi mejor amigo. Gastby se había ido y yo no volvería a ser “la chica del perro negro” nunca más. Realmente podemos elegir nuestra muerte y la de nuestros animales, aunque no en la manera en la que lo hacemos hoy en día. Tal vez entrar en esto sea demasiado para nosotros por ahora. Da igual la cantidad de miedo que tengamos. El Universo siempre tiene aún más Amor para nosotros y todo en él conspira para que ese Amor se abra paso a través de cualquier miedo.


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somos voluntarios

Ayuda para confrontar el duelo S

iempre digo que mi padre me dio la llave y mi pareja me abrió la puerta. Mis 44 años de vida habían transcurrido con el orden-desorden, armonía-desarmonía de cualquiera de las muchas existencias que nos rodean, naciendo, creciendo, desarrollándome -creía yo- en todos los ámbitos. De repente la muerte hizo acto de presencia. Mi padre, que venía padeciendo desde hacía años una enfermedad degenerativa, muere a principios de septiembre de un año cualquiera y poco más de mes y medio, a finales de octubre, mi pareja y compañero de camino durante 12 años, muere por un aneurisma tras cuatro días en coma. Y AHORA ¿QUÉ?... Comienzo diciendo

que mi padre me dio la llave, por la forma plena en que viví de cerca los dos últimos meses, cada minuto a su lado me acercaba más y más a él y este acercamiento era algo que sólo es explicable desde emociones muy profundas y difíciles de transmitir. Su muerte fue el colofón de esta VIVENCIA, dejándome con una enorme sensación de paz y amor no exenta de dolor había perdido a mi padre. Esta simbólica llave que me entregó fue la alfombra por la que día a día fui pisando desconociendo que, lo mullido de su material cuidaba y amortiguaba mis pies para lo que se avecinaba. Y efectivamente lo hizo o, al menos es lo que yo he sentido y creído; que la muerte de mi padre me allanó el camino para vivir la muerte de mi chico. A partir de aquí comencé poco a poco mi vagar por el duelo, al princi-

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Clara Rico es terapeuta de Alaia , (Asociación de Ayuda a Enfermos Graves y Personas en Duelo) www.alaia-duelo.com

pio totalmente noqueada, viviendo a caballo entre la realidad que sabía en mi cabeza y la ficción y la irrealidad que sentía y que se negaba a aceptar lo que mi razón quería imponer. Yo había crecido y me habían edu-


cado en la religión católica, siempre fui creyente, una creyente educacional, sin plantearme nada más allá de los rezos y ritos habituales y haciendo de esa práctica un traje a mi medida. Aproximadamente durante año y medio o dos años antes de la muerte de mi padre atravesé una crisis ¿existencial, vivencial, de identidad? llegué a sentir que nacíamos, crecíamos, nos desarrollábamos y moríamos, y todo terminaba. Lo que sí ocurría es que tenía pleno convencimiento de que los principios y valores que me habían inculcado eran los que tenían, en cualquier caso, que dirigir mi vida. EL VOLUNTARIADO EN ALAIA. La muer-

te de ambos y las últimas vivencias dieron al traste, por suerte, con mis dudas existenciales. Dos personas tan importantes en mi vida ni podían haberse esfumado, ni haber desaparecido sin más, ¿dónde estaban mi padre y mi pareja? Esa fuerza enorme y vigorosa, a la que antes hice mención, se hizo sentir con más intensidad y eso hizo que empezase a buscar e indagar, en internet, en la lectura... y los libros me llevaron a Alaia (Asociación de Ayuda a Enfermos Graves y Personas en Duelo), donde encontré un espacio de escucha empática, acercamiento y consuelo, un lugar donde no había prisa, se respetaba mi ritmo y el de mis compañeros de grupo, cada persona necesitaba y tenía su tiempo. Esta vivencia, en vez de alejarme, me acercó al entorno y al mundo del duelo, de la muerte. Me di cuenta de que vivimos en un mundo que da la espalda a esta tan universal realidad. Todos, antes o después, nos enfrentaremos a la muerte propia y/o ajena, es lo único seguro. Pero también es cierto que, en esta nuestra realidad, nos enfrentamos al duelo, solos, desnudos, incomprendidos y desprotegidos, como bichos raros que deambulan por un mundo extraño. Este mundo, hasta ahora desconocido para mi, comenzó a interesarme, empecé a leer sobre duelo, a buscar distintas informaciones, hasta que comencé mi formación teórico-práctica en Alaia y en la misma

asociación empecé como voluntaria y cofacilitadora de grupo, de esto hace ya ocho años. A parte de ese interés por todo lo que rodea al mundo duelo, sentía que podía servir de ayuda con mi experiencia; yo había vivido dentro de ese carrusel por el que pasamos. Mucho se habla y se escribe sobre el voluntariado, acerca de si se recibe más de lo que se da, la autosatisfacción, la generosidad, el altruismo, la entrega... Para mí es algo más natural, más sencillo, una forma de vida, una forma de vida de intercambio y aprendizaje a la que procuro acercarme con modestia, porque en todas y cada una de las entrevistas de acogida o sesiones grupales aparece algo nuevo, cada persona somos un mundo. Ni soy, ni me siento mejor persona por dedicar parte de mi tiempo a llenar mi bagaje personal. Hay quienes lo llenas estudiando carreras y másteres, quienes necesitan del deporte, del teatro, la costura, todo lo que satisfaga a la persona termina revirtiendo socialmente.

Me di cuenta de que vivimos en un mundo que da la espalda a esta tan universal realidad. Todos, antes o después, nos enfrentaremos a la muerte propia y/o ajena, es lo único seguro.

EL DUELO, ESE GRAN DESCONOCIDO. La

pérdida de un ser querido nos sumerge en un barullo de sentimientos y emociones que, en muchos casos, no hemos experimentado nunca. Nos miramos a un espejo y casi no nos reconocemos en la imagen que refleja. Estar en duelo no es estar enfermo, aunque a veces nos lo parezca, porque nos estamos encontrando con una persona que, en la mayoría de los casos, no conocíamos ni física, ni emocionalmente, y nuestras propias reacciones pueden sorprendernos y extrañarnos. El duelo duele, y hay que pasarlo. No hay una poción mágica que nos haga asumir en breve lo ocurrido. Con trabajo, ayuda y tiempo se va viendo cómo el dolor empieza a disminuir, a mitigarse, apareciendo nuevos sentimientos que irán colocando a nuestros seres queridos en el sitio que les corresponde en nuestro corazón. La noción del tiempo varía respecto a su trascurrir en nuestra vida anterior. Es difícil, muy difícil, aprender a vivir sin las personas que amamos,

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¿qué son unos meses de separación con toda una vida de convivencias, abrazos, cariños, y por qué no, también de desencuentros? El hecho de poner palabras al dolor ayuda a empezar a curarlo. Sabemos que la única manera de sanar el duelo es atravesándolo, y la mejor forma de hacerlo es experimentando y expresando los sentimientos que van surgiendo: dolor, tristeza, ira, culpa, añoranza. EL TRABAJO EN ALAIA. En nuestro centro Alaia, creado en 1998, trabajamos para ofrecer ayuda a personas que han sufrido la pérdida de un ser querido. Ofrecemos un espacio de apoyo donde pode compartir con otras personas en las mismas circunstancias la propia experiencia, y esto ayuda a encontrar maneras de aliviar el dolor. Un trabajo en grupo y poder compartir con personas que están en una situación similar ayuda a entender por lo que se está pasando, la soledad y la incomprensión se suavizan, hay un nexo que nos une: el dolor. Nuestra asociación es aconfesional y sin ánimo de lucro, basa su filosofía en la acogida incondicional a personas en duelo y a enfermos, en la escucha activa, el respeto por la persona y sus creencias y la potenciación de sus propios recursos para elaborar un duelo. Sabemos que el dolor compartido es más llevadero. Cuando conocemos a otras personas que están pasando por lo mismo que nosotros nos damos cuenta de que no estamos solos con nuestro dolor y eso nos ayuda a sentir más compasión y más amor por los demás. En Alaia pretendemos ofrecer un espacio de confianza y acogida que favorezca la expresión y elaboración de los sentimientos tras la pérdida de un ser querido. Los grupos están coordinados por personas con formación y experiencia específica en duelo, incluso algunos, la mayoría, hemos sufrido pérdidas. Tenemos en cuenta las necesidades individuales de la persona con respecto al tipo de pérdida, tiempo desde el inicio del duelo, complejidad de la pérdida, factores de riesgo... Todo esto basado en nor-

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El duelo duele, y hay que pasarlo. No hay una poción mágica que nos haga asumir en breve lo ocurrido. Con trabajo, ayuda y tiempo se va viendo cómo el dolor empieza a disminuir

mas básicas de privacidad, confidencialidad y respeto. NUESTRA LABOR COMO TERAPEUTAS DE DUELO. En su mayoría, las personas

que asisten a los grupos de duelo han sido informadas de su existencia por asistentes sociales, médicos de familia, psiquiatras o por otras personas que ya estaban asistiendo. El procedimiento que llevamos a cabo cuando se produce una demanda es el siguiente: En la llamada telefónica se ofrece una primera información sobre nuestros servicios y a continuación, si la persona está


En nuestro centro Alaia, creado en 1998, trabajamos para ofrecer ayuda a personas que han sufrido la pérdida de un ser querido. Ofrecemos un espacio de apoyo donde pode compartir con otras personas en las mismas circunstancias

interesada, se le da una cita para la entrevista de acogida y valoración, en la que además de ofrecer a la persona la oportunidad de hablar de lo que le ha sucedido y expresar sus sentimientos, se valora qué es lo que más le puede ayudar en esos momentos. Previamente a la integración en el grupo de duelo, las personas que acuden a la Asociación han de pasar por una entrevista de acogida, en la que el profesional responsable del grupo evalúa la situación de la persona en duelo y la posibilidad de que participe en las reuniones inmediatamente, o bien la necesidad de tener más entrevistas individuales antes de integrarse en el grupo. El apoyo se realiza fundamentalmente a través de grupos de ayuda en el duelo para personas que han perdido a un ser querido. En la actualidad están funcionando cuatro tipos de grupos, y el número de personas que los integran puede ser variable, puesto que son grupos abiertos. Estos grupos son: • Grupo de padres y madres que han perdido a un hijo. En la actualidad hay

seis grupos de padres/madres, uno de ellos de padres/madres que han perdido a un hijo por suicidio, y otro

de pérdida perinatal. • Grupo de parejas. Actualmente hay dos grupos, uno de los cuales es específico para mujeres que han perdido a su pareja estand o embarazadas. • Grupos de personas que han perdido a un hermano/a. • Grupo de personas que han perdido a un progenitor.

Nos reunimos una vez a la semana o cada quince días, con una duración de entre dos y tres horas. Los grupos están coordinados por profesionales con formación específica, psicólogas y/o terapeutas, para coordinar grupos de ayuda mutua. En estos grupos se pretende ofrecer un espacio de confianza y seguridad en el que las personas que están pasando por la difícil situación de la muerte de un ser querido puedan sentirse comprendidas, aceptadas y respetadas y de esta manera expresar todos los sentimientos que ésta conlleva. Son grupos abiertos, en los que cada participante tiene un tiempo para expresarse y que se rigen por una serie de pautas que garantizan su funcionamiento: no comparar el propio dolor con el ajeno, confidencialidad, no dar consejos, no juzgar, no interrumpir al que habla, respetar, etc.

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somos viajeros

No temas a la muerte y no temerás a la vida

Epicuro

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n nuestra cultura occidental la muerte es tabú. Pierre Chaunu, famoso historiador francés de las culturas, comentaba: “Al no poder expulsar a la muerte de nuestra vida, se ha decretado que es vergonzosa, que es indigna de nosotros, que debemos arrojarla de nuestra mente. La han excomulgado porque pone en crisis todas las culturas hegemónicas de nuestro tiempo. Como no han podido hacerle sitio, la han ocultado, proscrito y prohibido.” Por ese motivo, vivimos sin ser conscientes de nuestra propia transitoriedad, en lucha por esquivar la vejez y, por consiguiente, la muerte. VIVIMOS SIN VIVIR EL HOY, EL AHORA.

Todo lo contrario a este fenómeno occidental sucede en la cultura de la India. De por sí, India es tierra de puro contraste, no sólo por sus vivos colores y sus impactantes aromas, sino también por su tratamiento hacia la muerte. Dicho contraste se hace aún mas patente en la ciudad de Varanasi. En sus coloridas calles conviven la pobreza extrema con la eterna sonrisa incondicional de sus habitantes; la espiritualidad de sus gentes con el bullicio incesante de sus arterias superpobladas; la vorágine comercial y la paz que se puede experimentar en sus singulares templos y lugares sagrados.

Samanta Aretino es fotógrafa freelance samantaaretinophotocom

En fin, la vida y la muerte corretean por sus callejuelas animadas, entre niños descalzos y cadáveres rumbo al río a hombro de sus familias. Este conglomerado produce una experiencia sensorial de eufórico descubrimiento. Viajar a la India, y en particular a la ciudad sagrada de Varanasi, nos golpea con estas dos caras continuamente, hasta que logramos ver la fluidez con que su cultura “vive la muerte”. Vida y Muerte confluyen en esta Ciudad de la Luz flotando en las aguas del sagrado Ganges, bailando entre ofrendas y restos del crematorio, entre lavanderos y botes, entre saris y flores. Lo sagrado y lo cotidiano se mezclan en rituales religiosos y juegos de niños. A primera hora de la mañana la ciudad entera fluye hacia el río. La cara de la ciudad que baja hacia el caudal, con su espectacular amalgama de colores y edificios, se tiñe de dorado a la salida del sol. El aseo diario y la plegaria se unen en un todo mágico en las aguas del río que no deja indiferente a quien lo contempla. Mucho menos si quien lo contempla procede de la cultura occidental. Los ghats , las escalinatas que descienden al río y lo recorren de principio a fin en su paso por la ciudad, se salpican y abarrotan de gente y de


actividades. Un corte de pelo, masajistas en busca de clientes, hombres santos meditando cara al sol, vendedoras de ofrendas y relicarios. Escalones mas abajo, señoras haciendo la colada, adolescentes haciendo piruetas indescriptibles, ancianos purificando su alma, viajeros en su paseo en bote, animales bebiendo, y un sinfín de movimientos que resulta difícil dar cuenta de todos ellos. A escasos metros, en el ghat del crematorio más grande, el Manikarnika Ghat, se realizan unas 200 cremaciones diarias. Se dice que el fuego eterno que se utiliza para encender las piras funerarias fue encendido por el mismísimo Dios Shiva. EMPIEZA A OSCURECER. Al caer la tar-

de, y de forma diaria, se celebra a orillas del Ganga (nombre sánscrito de Ganges, y nombre de la diosa hindú que lo representa) un vistoso y envolvente ritual de agradecimiento y ofrenda a sus sagradas aguas; el Ganga Aarti. La mitología hindú ve en el Ganges la materialización en la Tierra de esta divinidad femenina: Ganga Ma, o la Madre Ganga, diosamadre de la India. Se acerca la noche y la ribera se ilumina de infinidad de lámparas ardiendo en coreografía a manos de jóvenes devotos, ante la mirada de cientos de personas. Otros cientos hacen sus pujas, ofrendas flotantes con velas y flores que inundan de luz las aguas, meciéndose al ritmo de las canciones de esta ceremonia. La atmosfera creada por estas luces, el olor a incienso, las campanas, los tambores y los mantras nos explican por qué esta ciudad es el punto mas importante de reunión de los fieles hindúes. Según la cosmología de dicha religión, esta ciudad es el centro de la tierra. Una de las ciudades más antiguas de la India y que recibe más

peregrinos al año, donde se encuentra el templo de Kashi Vishwanath (una manifestación del Dios Shiva, el principal dios hindú). En Benarés la deidad mas popular es Shiva, el destructor, representante de la trinidad sagrada Trimurti, junto a Brahma, el creador, y Vishnu, el conservador. BENARES. El escritor estadounidense

Mark Twain escribió: “Benarés es más antigua que la Historia, más antigua que las tradiciones, más vieja incluso que las leyendas, y parece el doble de antigua que todas juntas” Varanasi o Benarés, es el lugar donde se puede romper el ciclo infinito de reencarnaciones y ganar la salvación para los creyentes hinduistas. Millones de personas viajan a la ciudad, algunos a morir en las inmediaciones para poder estar cerca del Ganges, y otros con sus familiares muertos para incinerarlos en los crematorios y arrojar sus cenizas al río. También es uno de los principales centros educativos de la religión hindú. En todos los rincones de esta inigualable ciudad podemos ver girar la rueda del Samsara. Aquí la muerte no significa extinción. Toda vida es una ilimitada repetición fluyendo como las aguas del Ganges, ofreciendo una constante oportunidad a la persona de alcanzar la perfección. Varanasi y sus devotos habitantes y peregrinos nos desvelan una síntesis perfecta entre la vida y la muerte. Contemplar esta dualidad nos permite seguir girando en la rueda, dejando ir en cada vuelta algún prejuicio sobre la muerte e incorporando otra visión de ella, alcanzando así nosotros también la perfección, el conocimiento de otras visiones, otras formas tan diferentes a nuestras doctrinas culturales de ver la muerte como algo cotidiano y sagrado a la vez.

Vida y Muerte confluyen en Benarés, Ciudad de la Luz, flotando en las aguas del sagrado Ganges, bailando entre ofrendas y restos del crematorio, entre lavanderos y botes, entre saris y flores


La física del alma Q ué es la muerte?”, con esta pregunta tan sugerente comienza este libro el famoso doctor en física cuántica Amit Goswami. Y continúa diciendo que para saber qué es morir, primero hay que plantearse qué es la vida. De esta manera ya en el comienzo del libro intuimos que vamos a tener que hacernos planteamientos muy profundos. Este es un libro escrito por un científico que, como muchos, no creía en nada muy espiritual. La buena noticia es que cada vez son más los que se replantean el seguir el dogma de la ciencia y deciden convertirse en verdaderos científicos esforzándose en dar respuestas a nuestras preguntas más profundas, que es precisamente la intención del doctor Goswami. La separación de ciencia y religión hace años parecía irreconciliable pero, gracias a los nuevos descubrimientos y a los planteamientos básicos de la física cuántica en los que se da protagonismo al observador (como ser capaz de alterar lo que ocurre a su alrededor), lo cierto es que ciencia y espiritualidad están encontrando un espacio común. En él se sitúan científicos comprometidos y valientes que no temen ser juzgados por sus colegas.

Buen ejemplo de ello es este libro que explica El libro tibetano de los muertos desde la visión cuántica. Así los que desean conocer las nuevas teorías que explican la muerte y la reencarnación con toda lógica científica encontrarán respuesta a sus preguntas de manera sencilla y didáctica.

El Bardo Thodol más conocido en occidente como El libro tibetano de los muertos, es una guía de instrucciones para los moribundos y los muertos. Amit Goswami nos lo explica relacinándolo con sus conocimientos de Física.

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libros para pensar

La física del alma Dr. Amit Goswami Ediciones obelisco libros, 2010 amitgoswami.org


libros para pensar

Morir para ser yo H

ace años que me llegó el enlace a un vídeo de una mujer que había sobrevivido milagrosamente a un cáncer terminal. Tras verlo busqué su libro y siguió maravillándome cuánto podía ofrecer. Anita Moorjani era una mujer normal a la que habían educado como a la mayoría de nosotros; es decir, diciéndole que mirar por ella misma y buscar su felicidad era ser egoísta; que debía seguir los patrones culturales y familiares establecidos y todo aquello que nos graban desde pequeños en la cabeza. Anita cayó en coma tras años luchando contra el cáncer, durante el cuala llamaron a su familia para que se despidieran ya que era el final. Lo que no sabían los médicos es que era el principio. Anita estuvo “en el otro lado” y comprendió su vida, cómo no había entendido na da en realidad y que no se trataba de hacer cosas sino de ser uno mismo, de ser amor y ser alegría en cada cosa que se hace.

En sus palabras, “Antes perseguía un sentimiento parecido a tener que hacer, conseguir o lograr algo. Sin embargo, el mismo acto de perseguir algo viene del miedo; tenemos miedo de no tener lo que realmente queremos. Nos mantiene atascados en la dualidad, porque el enfoque está en la separación inherente entre el cazador y la presa. Ahora, sin embargo, ya no persigo nada. A cambio, yo permito.” Al volver se recuperó milagrosamente de su cáncer y comenzó a contar su historia. Ésta llegó a oídos del famoso Wayne Dyer que la propuso escribir el libro. El resultado es este, y es muy recomendable. De hecho, personalmente desde que lo leí cada vez que tengo un paciente que busca la aprobación constante de los demás, que intenta no molestar y hacer lo que le han dicho que es correcto, se lo doy para leer. Todos comprenden el mensaje. Gracias Anita por este regalo.

Morir para ser yo Anita Moorjani Gaia Ediciones anitamoorjani.com

La prueba del Cielo La prueba del Cielo Eben Alexander Booket ebenalexander.com

E

n agosto de 2012 la portada de la famosa revista Newsweek anunciaba: “El cielo es real. La experiencia de un doctor en el otro lado”. Y es que no es habitual que un neurocirujano que lleva toda la vida sin creer en el más allá escriba un libro sobre sus vivencias allí. Eben Alexander, el autor, escuchó los relatos de sus pacientes durante años, de cómo habían visto a familiares fallecidos, mensajes que les habían dado todo mientras él les operaba. Siempre los trató con respeto sin creer que fueran reales. Pensaba que era alguna reacción del cerebro que les hacía imaginar todo ello, hasta que lo vivió él.

Estuvo en un coma profundo durante siete días sin actividad cerebral alguna (dato muy importante para los científicos). Mientras su familia y los doctores esperaban que ocurriera lo peor, él descubría el otro lado, perdía el miedo a la muerte y comprendía más de su vida. Cuenta que le dijeron: “Te enseñaremos muchas cosas aquí, pero ahora debes volver”. Al hacerlo supo que lo vivido solo podía ser real y que debía compartirlo con el mundo. Es un libro lleno de sabiduría, humildad y esperanza. Hoy en día Eben está absolutamente comprometido con la difusión y el estudio de las experiencias más allá de la muerte.

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nos vamos al cine

Tres miradas desde la cámara de cine C

uando decidimos el tema del segundo número, inmediatamente se me vinieron a la cabeza tres películas que tratan el tema de la muerte de una forma muy distinta y hermosa. Se trata de All that Jazz (1979) de Bob Fosse, Mr Magorium, (2007) interpretada por un genial Dustin Hoffman y Natalie Portman y El fin es mi principio (2010), basada en un libro autobiográfico de Tiziano Terzani. ALL THAT JAZZ. (Empieza el espec-

táculo en España) se cuenta la enfermedad terminal de un coreógrafo. Es una película musical con mensaje, grabada como si fuera un documental. La vi en mi adolescencia y he de decir que me marcó la existencia, y no sólo por la hermosa música. Al principio del film el coreógrafo Joe Gilian (Roy Scheider) presencia la parodia que escenifica un comediante sobre las 5 fases del duelo de la Dra. Elisabeth KüblerRoss. Esa parodia marcará el ritmo de la película haciendo, a través de un diálogo con la muerte representada por la dama de negro, Angelique (Jessica Lange), la revisión de la vida autodestructiva del bailarín, diector y coreógrafo. El film es un hermoso baile con la muerte .

MR MAGORIUM Y SU TIENDA MÁGICA.

Dirigida por Zach Helm, es una bella poesía que describe la muerte como algo ineludible que debemos aceptar. Con esta obra afiancé mis convicciones: la muerte no es algo personal contra nosotros, ni es un castigo. Es lo que tenemos más seguro en la vida. Mr Magorium (Dustin Hoffman) es el dueño de una tienda mágica de juguetes; Molly Mahoney (Natalie Portman) es la dependienta y aprendiz del excéntrico Mr. Magorium quien, con 243 años, siente que llega la hora de su muerte y decide traspasar su negocio. La película tiene perlas de sabiduría que te hacen pensar mucho y para bien: “No sé por qué los adultos dejan de tener fe en lo que creían de niños, ¿no se supone que son más listos?” “Cuando el Rey Lear muere en el quinto acto ¿sabes cómo lo expresó Shakespeare? Escribió: muere. Eso es todo, nada más. Sin fanfarrias, sin metáforas, sin brillantes palabras finales. Sin embargo, cada vez que leo esa palabra, me invade un infinito sentimiento de tristeza. Ya sé que es natural sentirse triste, All that Jazz (Empieza el Espectáculo) dirigida por Bob Fosse protagonizada por Jessica Lange, Leland Palmer y Ann Reinking 1979

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Mr. Magorium y su tienda mágica dirigida por Zach Helm protagonizada por Dustin Hoffman y Natalie Portman 2007

José M. Escudero Es director de la Revista IMO, fotógrafo e instruao autor de varios libros sobre Madrid


libros para pensar pero no por la palabra muere, sino por la vida que hemos visto antes de esa palabra. He vivido mis cinco actos, no te pido que te alegres de que me tenga que ir, sólo te pido que pases página, que continúes leyendo y des paso a la siguiente historia. Y si alguien pregunta alguna vez qué ha sido de mí, cuéntale mi vida en todo su esplendor, y acaba con un sencillo y modesto murió.” “Todas las historias, hasta las que más nos gustan, tienen que acabar alguna vez. Y, cuando terminan, dejan paso a otra historia.” “Tu vida es una oportunidad, aprovéchala.” “La cruda verdad es que tengo que irme, lo siento querida, pero es un hecho ineludible y por mucho que te rebeles no lo impedirás” EL FIN ES MI PRINCIPIO. Película di-

rigida por Jo Baier y basada en un libro autobiográfico de Tiziano Terzani que cuenta el desgaste físico de un hombre italiano de origen humilde que se instruye y llega a ser reportero y así recorre todo el mundo. Conoce y se entrevista con políticos y presidentes en gran cantidad de conflictos de la segunda mitad del siglo XX y también conoce a muchos líderes espirituales que marcarán sus últimos días y harán que se enfrente a su fin como si fuera un nuevo principio. El film cuenta los últimos días de Tiziano en la Toscana, mientras conversaba con su hijo Folco sobre el sentido de la vida y la transcendencia de la muerte.

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El Fin Es Mi Principio dirigida por Jo Baier protagonizada por Bruno Ganz, Elio Germano, Erika Pluhar, Andrea Osvárt, Nicolò Fitz-William Lay 2010

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Recetas para el día de difuntos

Taco de verdura y mole

S

i algo tienen bien arraigado los Por Jose Escudero mexicanos en su cultura es la celebración del Día de Difuntos. Recuerdo cuando era pequeño y venían familiares de dicho país; me traían unas calaveras dulces hechas de azúcar y adornadas de muchos colores -¡rechulas! como dicen por allí-, donde ponían el nombre de cada uno en la frente de la “Calaca”. El origen de esta celebración se pierde en el tiempo, desde épocas prehispánicas, adaptándose a los rituales cristianos. Popularmente se cree que las almas de los seres queridos que nos han abandonado en este plano físico regresan durante este Día de Muertos para visitar a las familias, por lo que se les pone toda una ofrenda digna de reyes: Sus platos y bebidas favoritos, fruta, la calaDesde finales de verano se covera dulce, bollería tradicional, mienza a vender el Pan de Muerpan dulce, y en algún to: panes hechos con formas vacaso juguetes para los riadas y adornados con huesos s 4 taco Ingredientes para niños. Todo ello adornay calaveras de muchos colores. as rdur Para el caldo de ve s. do con fotografías de los Personalmente me gusta muco y el relleno de los ta difuntos y flores; flores cho el café de olla -siempre que 1 Calabacín grande de cempasúchil para ser puedo me tomo uno-, que se 3 Puerros exactos. hace en puchero, a fuego len3 Zanahoria Si preguntas por una to, con azúcar morena y cas 200 gr de garbanzo comida típica de difunnela mexicana. Para mí, que 2 Patatas tos, te pueden decir de no bebo alcohol, es la mejor todo ya que se trata de forma de acabar cualquier z) aí (o de m 4 Tortillas de trigo servir la comida favorita celebración, ahora si eres de Mole Poblano de cada difunto, pero por los de un chupito, un tequila o. esan Queso rallado parm mencionar las enchiladas, reposado, creo que reanima a los tamales, frijoles de los muertos. olla, pozole, tacos, el mole He crecido en España toPreparación ba la ca , s, zanahoria poblano, una salsa hecha mando comida mexicana, Pon a cocer puerro la a, cid co zos. Una vez de pimiento y ¡chocolate!. disfrutando de las carnitas cín, patata, garban rbanzos, y corta en ga Ummm, me está entrando -tacos de pollo y chicharrón-, escurre, separa los horias, patatas y el na za un hambre que me muero. y en México de los tacos al tiras los puerros, Entre las bebidas típicas, pastor. Me hice vegetariano calabacín. s la s, y, enrollada además de las “chelas” -cerpor ser coherente con mi Rellena las tortillas las cubres de mole. y vezas bien frías-, o el tequipensamiento, de origen bucolocas en un plato n un poco de queso r co la, están el Agua de Jamaica dista, y desarrollé este taco Se pueden adorna o la de Tamarindo. Refresvegetariano, el cual puede en rallado por encima. tra lo e m hecho, a mí cantes. Mi madre me solía hacerse también con pollo El mole lo venden r ce ha de , lo termino hacer cuando llegaban los o carne de res -ternera-, de Puebla en polvo uras sobre el proverd ingredientes desde México. cortado a tiras. echando caldo de ad id ns de la

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edé con ducto hasta que qu vecho las verduras ro ap í que me gusta, as y el caldo. delicioso. Resulta un platillo


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Año Nuevo Judío E

l 13 de septiembre comenzó el el ROSH HASHANÁ o año judío, que se inicia con la primera estrella del atardecer. y con él, el año 5.776 del calendario hebreo. Lo celebran durante dos días del mes tishrei, que es cuando Dios creó el Mundo y al Hombre. Astrológicamente está marcado por El Carnero, ascendente del signo Aries, y muestra el comienzo de un nuevo ciclo. En Aries encontramos a Urano, indicador de grandes cambios: Allí está situado el Nodo Lunar Sur, que nos plantea la oportunidad de sanar cosas del pasado. Mercurio, el mensajero de los dioses, se encuentra en el sector de los socios, y en el signo de Libra, en aspecto-relación con el ascendente y Urano entre otros. lo que quiere decir que es un buen momento para el diálogo entre las partes de una forma equilibrada y armoniosa, integrando ese “nuevo ciclo” de sanación kármica. Plutón está en Capricornio, en el sector más elevado de la carta, y esto indica las limitaciones del pueblo judío en este Nuevo Inicio que conectará con sus raíces para ver su identidad con nuevo ojos y podrá reconocer un nuevo camino. Neptuno y Quirón, situados en Piscis, compasión y lo oculto, revelan conexiones con la propia compasión y hacia los demás para sanar esa herida oculta, y así poder alcanzar el ideal de ese pueblo. Júpiter en Virgo nos dice que habrá más expansión en referencia al trabajo interno que hay que hacer a

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momento astrológico

Miguel Mateo Domínguez Es astrólogo y realiza terapias y cursos de reiki y quiromasaje entre otros miguelmaterod60@ gmail.com

través de la autocrítica para poder llegar a concretar una realidad, elegir lo que es válido y lo que no. Venus y Marte en conjunción y unión con Leo, muestran que desde este alto dignatario (Leo) se inicia un tiempo de más afecto. El Sol y la Luna, esencia y brillo por una parte y Maternidad- Nutrición por otra, en el sector servicio y en el signo de Virgo relacionado con el trabajo, indican conexión de su esencia que dará lugar a su propio brillo, conectando con su capacidad de nutrir-nutrirse siendo más afectuoso con vocación de servicio y humildad. El pueblo que se ama es el pueblo que no necesita nada más.


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En el trayecto mรกs oscuro

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Puede aparecer el Arco Iris


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