Regreso a clases
La salud, lo primero Antes del inicio del año escolar se recomiendan chequeos generales para los niños, sobre todo considerando que el aprendizaje depende, entre otros factores, de una adecuada capacidad visual y auditiva. Texto: Portal abcdelbebe.com. Fotos: Canstock.
solo por el otro) y la ambliopía (ojo perezoso), es decir, la falta de desarrollo visual en un ojo que se origina, especialmente, por defectos refractivos no corregidos oportunamente. Chequeo de audición: Para saber qué tan bien está oyendo tu hijo hay que hacerle una audiometría. Es una prueba audiológica cuyo objetivo es determinar el umbral mínimo de audición de una persona para cada una de las frecuencias e intensidades del sonido. Las frecuencias van desde los sonidos más agudos hasta los más graves (de 125 Hz a 8.000 Hz) y los niveles de intensidad se miden en decibeles (de 0 a 110). Si la curva de audiometría da entre 0 y 20 decibeles, significa que se escucha muy bien. La buena audición garantiza un aprendizaje escolar correcto. A veces sucede que un niño escucha mejor por un oído que por otro y éste es un problema difícil de detectar sin el examen previo. De igual forma, puede tener un retardo en el lenguaje asociado con una disminución de la agudeza auditiva. Algunas señales que podrían indicar retraso en el lenguaje del niño: - Solo señala y se comunica por gestos, o no muestra intención de comunicarse por ninguna vía. - No se le entiende nada de lo que dice. - Presenta enfermedades crónicas a repetición, como otitis, rinitis y reflujo, lo cual altera los patrones de sonidos. - Tiene un año y medio de edad y no pronuncia ninguna palabra. - A los dos años es incapaz de unir dos palabras para formar frases sencillas. - Pasa el tiempo y no incrementa progresivamente su vocabulario. Chequeo de dientes: La valoración odontológica es vital antes del arranque del año escolar para que llegue sin problemas de higiene oral. Un niño con caries u otra enfermedad bucal va a tener inconvenientes para alimentarse, además de otras incomodidades, y consecuentemente no va a rendir en la escuela. Por eso es importante mantener una higiene bucal adecuada, especialmente cuando muchos pequeños pasan su jornada escolar sin cepillarse los dientes. En este caso se recomienda disminuir el consumo frecuente de alimentos durante la permanencia en el aula (algunos comen golosinas y comidas de paquetes con frecuencia, lo cual debe evitarse), hacer enjuagues bucales vigorosos con abundante agua después de haber comido y cepillar los dientes apenas lleguen a casa. V
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ue los hijos comiencen el año escolar con muy buena salud es un propósito que todo padre debería tener. Es de vital importancia practicar a los niños una serie de exámenes y valoraciones para garantizar que cuentan con la salud, bienestar, disposición y ánimo necesarios para iniciar con pie derecho sus retos académicos. Se recomienda hacer: Chequeo de los ojos: La valoración de la vista, a través de un examen oftalmológico y de optometría, es importante porque muchas veces un mal rendimiento escolar (niños que se saltan palabras o letras y leen despacio) puede ser causa de una mala visión. El primer examen
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oftalmológico de un niño sano se hace hacia el primer año de edad y permite detectar anomalías congénitas del desarrollo visual, así como patologías adquiridas posteriormente. El inicio de la escolaridad es un buen momento para hacer un segundo examen muy completo. Entre las causas de mala visión se encuentran los defectos refractivos, es decir, que las imágenes no se enfocan con nitidez en la retina y llevan a tener visión borrosa; miopía (ve mal de lejos), hipermetropía (visión borrosa de objetos cercanos, fatiga ocular) o astigmatismo (pierde renglones, confunde letras o números, los invierten). También están el estrabismo (ojo desviado, éste ve mal y el cerebro actúa como si no existiera y trabaja Valles 53