EDULCORANTES ARTIFICIALES

Recientemente

os edulcorantes suelen ser una opción cuando se busca sustituir el consumo de azúcar, ya que su abuso está asociado al envejecimiento; obesidad; enfermedades metabólicas, como diabetes; desbalances hormonales, como resistencia a la insulina; síndrome de ovario poliquístico; entre otros.

EXISTEN DOS GRUPOS DE EDULCORANTES:

NATURALES: SUSTITUTOS DEL AZÚCAR

En este grupo se encuentra el sorbitol, xilitol, manitol, maltitol, jarabe de maltitol e isomaltitol.

Estos son alcoholes que provienen de los azúcares y lo sustituyen. Entre sus ventajas está que endulzan con muy pocas calorías y pueden ser consumidos por diabéticos, mientras que entre sus inconvenientes podemos mencionar que son absorbidos lentamente por el intestino y la ingestión en exceso puede causar gases y diarreas.

SINTETIZADOS: EDULCORANTES ARTIFICIALES

En esta categoría están presentes la sacarina, el ciclamato, aspartamo y acesulfame.

No deberíamos tener una ingesta sostenida en el tiempo con edulcorantes, ya que al final estamos fomentando que nuestro paladar siempre tenga un sabor dulce y no se acostumbre al sabor natural de los alimentos.

El 15 de mayo de 2023, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado una nueva directriz sobre los edulcorantes, en la que desaconseja su uso para controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles.

El uso excesivo de edulcorantes artificiales puede tener sus desventajas; como, por ejemplo, el aspartamo o la fenilalanina —aditivos que encontramos en las gaseosas dietéticas— que pueden generar elevación de la insulina, incitando a un declive importante en la glucosa, lo que a su vez lleva a algo parecido a una hipoglucemia reactiva, lo cual genera una disminución importante de la glucosa, provocando hambre, sueño y antojos descontrolados por alimentos dulces.

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Esto hace que nuestro cuerpo bombee insulina, la hormona de almacenamiento de grasa, lo que lleva a acumular más grasa abdominal y a su vez nos deja más hambrientos y ansiosos de azúcar y carbohidratos con almidón.

El aspartamo y la sucralosa dañan y modifican la microbiota intestinal, así que a pesar de no tener calorías, sí tienen otras repercusiones. El aspartamo también fue correlacionado con riesgo de cáncer de mama y cánceres vinculados a la obesidad.

Los polialcoholes —como el xilitol y sorbitol— son la mejor opción, ya que —a excepción del maltitol— mantienen los niveles de glucosa estables. Sin embargo, en exceso pueden causar malestares gastrointestinales, así que debemos consumirlos con moderación.

Recomendaciones Actuales

El 15 de mayo de 2023, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha publicado una nueva directriz sobre los edulcorantes, en la que desaconseja su uso para controlar el peso corporal o reducir el riesgo de enfermedades no transmisibles.

La recomendación se basa en los resultados de una revisión sistemática de la evidencia disponible que sugiere que el empleo de edulcorantes no azucarados no confiere ningún beneficio a largo plazo en la reducción de la grasa corporal en adultos o niños.

Los resultados de la revisión también sugieren que puede haber posibles efectos indeseables de su uso a largo plazo, como un mayor riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardiovasculares y mortalidad en adultos.

“Las personas deben considerar otras formas de reducir la ingesta de azúcares libres y consumir alimentos con azúcares naturales, como la fruta o alimentos y bebidas no azucaradas”, dijo Francesco Branca, director de Nutrición e Inocuidad de los Alimentos de la OMS. “Los edulcorantes sin azúcar no son factores dietéticos esenciales y carecen de valor nutricional. Las personas deberían reducir totalmente el dulzor de la dieta, desde una edad temprana, para mejorar su salud”, agregó.

Una de las mayores desventajas es que con los edulcorantes artificiales uno mantiene acostumbrado al paladar con alimentos dulces y, por ende, no se disfruta de los alimentos en su estado natural.

No usemos edulcorantes sin calorías para todo. Cada vez hay más alimentos en el mercado que contienen elevadas cantidades de edulcorantes en su composición y, si a este hecho se le suma la ingesta de bebidas o productos sin azúcar, la suma final puede ser extremadamente elevada.

Guadalupe Barriocanal. Licenciada y especialista en Nutrición Deportiva y Entrenamiento. Ingeniera en Tecnología Alimentaria. Clínica Villa Morra (Migone) (0975) 182 700 gbarriocanalnutricion@gmail.com