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Diseño que impacta
from sept_2020
by Modo de Vida
CUANDO SOFÍA MÉNDEZ DESCUBRIÓ LA IMPORTANCIA DEL DISEÑO PARA PROYECTOS HOSPITALARIOS CAMBIÓ SU CARRERA DE MEDICINA POR LA DEL DISEÑO INTERIOR ESPECIALIZADO EN “PATIENT CENTRIC DESIGN”.
Modo de Vida entrevistó a la diseñadora puertorriqueña, Sofía Méndez, NCIDQ y profesional acreditada por LEED (Liderazgo en Energía y Diseño Ambiental), quien nos contó su enfoque en el sector del cuidado de la salud y bienestar. “He dedicado mi carrera a crear espacios que directa e indirectamente impactan la salud física, mental, emocional y espiritual. Estos espacios creados en colaboración con equipos multidisciplinarios han resultado en interiores que marcan recuerdos y experiencias inolvidables en los que lo habitan. Es un modo de vida.”
En las conversaciones mundiales resuena la importancia del buen diseño en los establecimientos de salud. Los términos “Wellness Design” y “Patient Centric” han cobrado un protagonismo y se destacan las instalaciones esenciales, destinadas a proporcionar atención de salud con calidad y calidez.
El diseñador y decorador de interiores licenciado, debe de cumplir adecuadamente con la atención al detalle de múltiples disciplinas, así como colaborar con grandes profesionales que logran un proyecto hospitalario exitoso. El pensamiento crítico de cada paso es minuciosamente analizado y emocionalmente identificado para atender, desde los usuarios de cada espacio, visto desde varios puntos de vistas, ya sea el paciente, empleado y visitante, hasta todo tipo de connotación técnica, sanitaria, administrativa, económica y ética.
Probablemente, alguien con vocación médica pudiera ser el diseñador ideal para este tipo de proyecto. Y así conocemos a Sofía, una persona que procura el bienestar individual y colectivo de la comunidad desde que es joven. Nos cuenta “Recuerdo como ayer mi primer día en Naturales, en la Universidad de Puerto Rico en Río Piedras. Dieciocho años casi acabados de cumplir y en el comienzo de una carrera en Química. La emoción por algún día llegar a ser Oncóloga Pediátrica me llenaba de motivación a diario a sobrepasar las largas horas de estudio y cumplir con los requisitos que parecían no tener fin. A los dos años de esta etapa en mi vida, durante una de mis clases de psicología, se destacó cómo nuestro comportamiento, nuestros pensamientos y nuestra salud son impactadas por los espacios interiores y nuestras interacciones dentro de ellos. Este fue mi ‘Ajá Moment’. Dejé la carrera que algún día soñé por una que combina las ciencias con el arte. En cuestión de semanas, me mudé para Filadelfia para asistir a una universidad con un programa en arquitectura y diseño de interiores. Fue durante este tiempo que me di cuenta del poder del diseño.”
En el 2016, esta energética y enfocada mujer completó su bachillerato y maestría en arquitectura de interiores y diseño, presentando una tesis impactante. Sofía tuvo el atrevimiento de enfocar su investigación en víctimas de tráfico humano, específicamente por motivos de esclavitud sexual. Un tema serio que atiende una realidad cruda que pocos profesionales de diseño afrontan. Y al preguntarle porque lo escogió, nos dice “Mi contestación para todos ustedes es simple - el diseño es para todos y por todos. El buen diseño inspira, crea confianza y seguridad, es sanador, emotivo y espiritual, es una herramienta para crear esperanza, para expresarte; el diseño es personal y es colectivo y es cultural.”
Este proyecto ganó el premio “Graduate Faculty Award” como la mejor tesis de la clase graduanda por traer a la luz el poder como interioristas y por darle voz a aquellos que no tienen voz a través del diseño. Sofía es un vivo ejemplo la resiliencia del ser humano y el verdadero poder del esfuerzo y la educación. Actualmente comparte con nosotros los diseños para este.