Revista NN #01

Christian Bendayรกn - Basurama - PREVI - Flash - Portafolio: Lima - Sub-Limen - Le Petite Mort

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Revista NN # 01 Setiembre 2012 www.revistann.com contacto@revistann.com

Ilustración de portada: Héctor Delgado 2

Búscanos en

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Frau Diamanda: Cuando el sexo anal se convierte en una práctica de igualdad

CODA Luis Alvarado, Vanessa Rinón y Rafo Ráez

Portafolio: Lima

Sub-Limen: NN para Mírala

PREVI, 45 años después

Flash, las letras de un pincel ambulante

Le Petite Mort: NN para La Morada

Basurama: El no arte de crear felicidad con desperdicios

Christian Bendayán: La Amazonía en la mano de un pintor

ÍNDICE

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COLABORADORES

Walter Higueras Fotógrafo Martha Quirós Rodríguez Arquitecta

Edinson Oswaldo Guerreros Fotógrafo

Joseph Zárate Periodista Camila Rodrigo Fotógrafa

Héctor Delgado Artista

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Adrián Portugal Fotógrafo

Inés Flores Arquitecta

Kuna Estudio Fotográfico

Rafael Robles Periodista y poeta Alejandra Devéscovi Fotógrafa

Lucia Rodriguezh Fotógrafa y arquiqtecta

Juan Pablo Aragón Fotógrafo

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Christian Benday谩n

Escribe - Chiara Rizo Patr贸n Fotos - Walter Higueras 9

Se viste de negro como si llevara todo el color de la Amazonía por dentro, en su corazón, como si supiera todos los males de la selva para luego pintar de color chirriante solo los buenos, o viceversa.

Quizás esté cansado, como ella, de haber esperado tanto para mostrar al mundo su generosidad, la generosidad de su tierra, y ahora vive solo para escupirla dejando rastros por todos lados, porque, como dice el pinto, Iquitos es tan compleja como su realidad, como la que nunca se va a llegar a entender, no como él lo hace: Christian Bendayán, el pintor que, mientras recupera su pasado, recupera también el espíritu de una región olvidada por su propio país.

Derecha: “Amazonas”

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“Y de hecho sigo sintiendo que hay una estética dominante en el gusto de la gente, que a mí no me agrada nada y que cuando lo siento parte de mi obra pienso que las cosas andan mal.” (C.B) La pintura peruana deja mucho que desear y la obra de Bendayán resulta inolvidable por lo horrorosa que es, mencionaron los críticos en España en la exposición colectiva “Resistencias” llevada a cabo en el 2001 en La Casa de América en Madrid. Una crítica que a Bendayán le resulta, de todas, la más interesante. Hablaban de una de sus pinturas más complejas en cuanto a simbolismos y mensajes: Quistococha. Y es precisamente este tipo actitudes las que hacen del pintor de la selva urbana un acérrimo estratega para el intercambio, para el contagio, para la apertura a las múltiples infecciones, como lo diría el critico de arte Gustavo Buntinx, de propuestas, de ideas, de visiones, de sueños entre todos los peruanos.

Un cuadro que representó el llamado del animal que todos llevamos dentro y que la selva despierta, a través de la lucha entre un otorongo y una

serpiente; que representó el triunfo de la selva sobre las imposiciones de la religión católica con la imagen de la cabeza de Cristo decapitada sobre la laguna rosada de Quistococha. Una pintura que alude, como muchas de las obras de Bendayán, a esa práctica actual de vender todo lo bueno que tiene nuestro país para satisfacer al turista, sin dejar nada para nosotros. *** “Es justo esa falta de galerías, de museos, de conceptos tan cuadriculados de lo que debe ser el arte y el lugar que debe acogerlo, que ha permitido que en Iquitos estalle toda esta producción magnífica de arte informal, popular (...)”

Para él ,lo más importante de sus pinturas es que regresen, muevan y comuniquen a las personas que las inspiraron: a los pobladores de la Amazonía.

Es ahí cuando Bendayán siente que su tarea se está cumpliendo, cuando sus pinturas regresan como le gustaría que regrese el río alrededor de la

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ciudad de Iquitos y se quede ahí junto a la gente y que la cuidad crezca alrededor y no lejos de él.

Es por eso que en su trabajo la estética callejera y de cantina convive con la técnica académica, mostrando dos tipos de lenguajes, uno muy realista lleno de simbolismos y otro muy cercano a la estética del pueblo. Es por eso que no dudó en llevar, apenas se le presentó la oportunidad, la exposición “Tropical” ubicada en la sala del Banco Continental de Iquitos a la discoteca La Jarra, espacio marginal que inspiró muchos de los personajes retratados en el año 2000. Y en el 2002, gracias a la organización del Festival de Arte de Iquitos de la que él formó parte, ocho artistas populares nativos presentaron sus trabajos por primera vez en una sala de exposiciones, que se trasladó ese mismo año a Lima.

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Las pinturas de Bendayán en parte son influenciadas y dan comentarios sobre las obras de otros artistas de la selva como Lu.Cu.Ma (Luis Cueva Manchego), un artista autodidacta y ex convicto redimido por la práctica pictórica, cuyo retrato hecho por Bendayán criticó las diferencias de percepción artística entre sectores sociales; como Piero (Julio Walter Guevara Sepúlveda), Luis Saquiray Macuyama, José “Ashuco” Araujo o César Calvo de Araujo, cuyos murales destruidos y ubicados en el Palacio Municipal de Iquitos fueron representados y registrados en la última muestra de Bendayán: El Paraíso del Diablo.

Donde los diablos son todos aquellos que miran la Amazonía como un lugar destinado para coger y no para dejar.

A veces desde la pintura no he podido conseguir resultados tan inmediatos con respecto a generar cambios en la estructura del circuito cultural y es por eso que me he interesado tanto en otros proyectos

*** “ Lima es justo el espacio limpio, claro; yo me contamino en Iquitos, en Iquitos es donde dejo que todo me toque (…)”

De un barrio donde todo es íntimo y no hay mayores pretensiones que el de vivir con intensidad y disfrutar cada día, a un espacio donde las relaciones son más frías, más estructuradas, donde para ir de un lado al otro tienes que cruzar kilómetros de silencio: el paso de Iquitos a Lima significa para Bendayán una gran ruptura. Un quiebre presente en su niñez y que ahora se encuentra reflejado en sus trabajos al pintar la urbe de su ciudad natal, lugar en el que está tan afectado por la realidad que le es imposible trabajar, donde sus poros se dilatan al punto que,

como una esponja, simplemente se dedica a absorber sensaciones, ideas e imágenes.

Cuando nos cuenta de su barrio iquiteño, Belén, una sonrisa cómplice e inmediata invade su rostro y sus ojos se pierden recordando un espacio que es selva y ciudad, un espacio que nace y muere constantemente como la fugacidad de la vida que retrata constantemente en sus obras. Nos deja solos y entrega una sonrisa reservada solo para aquellos que conocen la magia que la selva e Iquitos esconden. “¡Allá viene el ladrón!”, se pasaban la voz los pobladores del barrio. “Todos sabían que él iba a robar”, aunque en Belén era un personaje que formaba parte del paisaje. “De repente cogía una cartera y todo el barrio corría tras él y todos los niños también.” Ese tipo de anécdotas, nos 13

“Yo reinaré”

cuenta Bendayán, hacen que él perciba el mundo con mayor intimidad, una cercanía que recuerda muy bien: “A Iquitos me gustaría verla con sus casas de colores, sus ventanas y puertas abiertas, con sus mecedoras en las veredas; que desaparezca todo el asfalto de las pistas, que todo vuelva a ser de tierra. Que desaparezcan los ficus y los árboles vuelvan a ser amazónicos como los de castaños, de mamey, de guaba. Y me gustaría que las casas bonitas, que aún están ahí abandonadas y deterioradas vuelvan a brillar.”

realmente somos, de aceptar nuestro cuerpo y de no negarlo. Se trata pues de que seamos más naturales como la misma Amazonía, porque lo que ella le ha dado a los selváticos es precisamente la sensualidad, una que tiene que ver con las plantas y con el movimiento de las aguas de los ríos. Para Bendayán, en Iquitos no existe el tiempo y tampoco el pecado. Allá todo es efímero y eterno. Todo se renueva cada día, todo empieza constantemente y así nada es sagrado. “De niño, perseguí una sirena y jugué mucho con mariposas”, dijo en una entrevista el pintor aludiendo a las mujeres hermosas de la selva.

*** *** “Mariposa: belleza, libertad y algo imposible de atraer.”

El travestismo, la exuberancia de los cuerpos, las poses o acciones osadas, la naturaleza, las mariposas o las sirenas representadas en los cuadros del pintor son llamados, a fin de cuentas como explica Bendayán, a olvidarnos de lo que la moral impone y a disfrutar más de lo que 14

“ A veces desde la pintura no he podido conseguir resultados tan inmediatos con respecto a generar cambios en la estructura del circuito cultural y es por eso que me he interesado tanto en otros proyectos (…)”

Como curadorías, promover las obras de algunos artistas, editar publicaciones, todas ellas acciones que resultan más efectivas para

“Culo”

“Piedad”

promover la idea de que hay mucho más que ver y que el arte está cambiando. Así podemos ver su participación a través del colectivo Kacharpari Producciones (2005), en un ciclo de conferencias en las cuales se reflexionó sobre los principales cambios que han tenido lugar en Lima en campos como la música, el cine, la plástica de los afiches y la moda, a partir de las experiencias de exitosos provincianos migrantes de nuestra capital. O cuando trabajó con la artista shipiba Daysi Ramírez Flores, en el

2006, diversas pinturas que mezclaban diseños tradicionales del arte shipibo con motivos característicos de la obra de Bendayán. Así como cuando asumió el cargo de Director del Instituto Nacional de Cultura de Loreto, o formó parte del comité organizador de la Semana Turística de Iquitos o cuando el siguiente año participó como ponente en el Seminario Internacional de Curadurías de la UNESCO y el ICOM-LAC con la conferencia “Curaduría y públicos en Loreto”. Recientemente, curó la segunda 15

Arriba: “Las chicas de Apolo”.

Aba jo: “La primera piedra”

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versión de La Noche en Blanco (2012), uno de las más grandes exposiciones artísticas planteados en los últimos años en el Perú, donde hubo un proyecto gigantesco que consistía en 1000 metros de pintura contemporánea con la obra de artistas de todo el Perú. De la misma manera, curando la exposición Selva Virgen, Salvaje y Sensual como parte de la Bienal de Fotografía en Lima (2012), donde se muestran a través de la mirada de 10 fotógrafos la sensualidad y sexualidad de la Amazonía.

Es así como uno de los pintores contemporáneos más representativos del Perú a sus 39 años, además de

cuestionar a través de sus obras, busca establecer estrategias de apertura, porque lo que siempre está junto a su condenado oficio de ser pintor es el deseo de generar un interés justo hacia el arte amazónico, de crear en cada una de sus acciones un registro que enseñe lo que ha sido la producción amazónica a través de los años, de generar un mercado para que esta se autosostenga.

Porque si hay algo que Bendayán ha dejado y continúa dejando, a través de su trabajo para las generaciones venideras de artistas peruanos, es que el arte no está desligado de lo social y quien mejor que ellos para sentir y reflejar su realidad.

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de crear felicidad con desperdicios

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Escribe - Rafael Robles Fotos - BASURAMA

Basurama, un colectivo de españoles con más de diez años de fundado, cruza fronteras utilizando los desechos de las ciudades para cuestionarlas, darles algo en qué pensar y, de paso, divertirlas con la sacudida. Donde unos ven basura, otros encuentran oportunidades. ¿Para qué hacer papel reciclado en tu licuadora cuando puedes crear algo mucho mejor?

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(Alberto, miembro fundador de Basurama quien no quiere decir su apellido porque no le interesa figurar, responde desde Argentina. Es español, pero en su voz ya se deja escuchar cierto dialecto porteño (“venís”, “decís”, “bancar”…) Digo escuchar, porque la deplorable conexión entre nuestras computadoras nos impide activar el botón de video del Skype. De hacerlo, el audio empeoraría y así no hay cómo). *** Lo primero que deja claro Alberto es que Basurama no es un colectivo de arte. Lo dice varias veces, para asegurarse de que la recepción de sus palabras haya sido la correcta y que, por ninguna razón, luego se me ocurra escribir algo así como “la manifestación artística de este grupo se basa en la reinterpretación de la basura que habita en cada ciudad, para darle un nuevo uso, donde el arte se mezcla con la cara más cotidiana, clandestina e inevitable de las personas: la basura”. Aunque, a decir verdad y quitando lo del arte, todo lo anterior se aplica a Basurama.

Dependiendo del punto de vista, Basurama es un

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grupo de amigos de la Escuela de Arquitectura de Madrid, que no se dedica a la arquitectura; una manera eficaz para conseguir que las ciudades se cuestionen a sí mismas, buscando la identificación colectiva a través de las instalaciones; el acto irreverente que dio sus primeras patadas en el 2001 con el Festival de Basura en Madrid; una manera constructiva, divertida y no-turística-convencional de viajar por Sudamérica y España; un motivo para entablar amistades en el extranjero y buscar salidas creativas a los residuos urbanos; un proyecto que, quizás sin que sus integrantes se lo propongan, ha sabido consolidarse a través del tiempo y que hasta la fecha ha llegado a Bruselas, San Sebastián, Sao Paulo, Caracas, Palma de Mallorca, Milán, Corea, Jordania, México DF, Miami, Santo Domingo, Buenos Aires, Montevideo, Asunción, Córdoba, Lima, entre otras ciudades y países.

Lo que no es Basurama: ni arquitectura, ni arte, ni un manifiesto cultural, ni un rollo ecologista que busca concientizar a las poblaciones con mensajes obvios, ni una organización profesional,

“(…) Basurama es buscar salidas creativas a los residuos urbanos; un proyecto que, quizás sin que sus integrantes se lo propongan, ha sabido consolidarse a través del tiempo llegando a Bruselas, San Sebastián, Sao Paulo, Caracas, Palma de Mallorca, Milán, Corea, Jordania, México DF, Miami, Santo Domingo, Buenos Aires, Montevideo, Asunción, Córdoba, Lima, entre otras ciudades y países.”

Izquierda: RUS Lima AutoParque de Diversiones Arriba: Jordania, campo de refugiados de SUF, Jerash 02 Derecha de arriba hacia aba jo: Sao Paulo Bras Madrid.

RUS Niamey-Taller de Formación.

RUS Santo Domingo

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ni gente en busca de reconocimiento, ni material para galerías, ni ningún tipo de iniciativa que busque salvar al ser humano. *** -Alberto: no elegimos fundar Basurama.

Comenzamos a hacer este tipo de cosas por deseo, por necesidad y urgencia y no porque nos pareciera importante. Siempre pensamos que, o lo hacíamos nosotros, o no lo hacía nadie. En ese sentido, el Festival de Basura fue un buen inicio. Lo repetimos por tres años consecutivos y logramos cosas que no esperábamos.

-NN: Definitivamente no debe parecerse a un festival de cine.

-Alberto: al tratar con basura se generan cosas impredecibles, porque con ella nunca sabes lo que vas a encontrar y cómo van a reaccionar las personas. La basura es infinita. La basura es la representación simbólica de la economía de un país. Probablemente siempre se vaya a producir, mientras existan las civilizaciones. Usamos la basura que hay en la ciudad donde estamos: muebles antiguos, llantas, cajas, papel. Lo que más encontramos y lo que menos nos facilita la tarea son las bolsas de basura, porque son difíciles de trabajar. No tienen resistencia.

-NN: ¿Cómo se da el salto entre el patio de la universidad y las calles?

-Alberto: Luego de tres años en la facultad, la idea se hizo muy repetitiva. Nunca hemos querido aburrirnos, así que buscamos centros culturales, aunque el ambiente era un poco hostil ahí. Uno que nos apoyó muchísimo fue La Casa Encendida.

Estuvimos en ese espacio un par de años. Igual no nos interesa una muestra en una galería, beber vino y tomarnos una foto con el director del lugar. Lo nuestro es para exteriores, de manera que podemos hacer piezas específicas en cada sitio. Nuestro trabajo está enfocado bajo el deseo de siempre seguir aprendiendo y de no conocer nuestros límites. Todo de una manera amateur.

-NN: ¿Pensaron alguna vez que la basura los llevaría a conocer América Latina?

-Alberto: en 2007 Eneas Bernal, entonces becario de cultura en la embajada de españa en Caracas, 22

nos invitó a lo que fue nuestra primera experiencia en América Latina. Eso pasó en mayo. Luego, en agosto, fuimos a San Paulo, a rehabilitar la plaza de un poblado con un proyecto alternativo a lo que habían propuesto las autoridades. En América Latina hay un mundo más interesante de lo que encontramos en España. Hay más por conocer, por replantearse y por hacer. *** Como parte del proyecto experimental RUS (Residuos Urbanos Sólidos), en el 2010 los Basurama llegaron a Lima por segunda vez: un año antes, el colectivo vino a hacer una inspección de la ciudad, como astronautas cautelosos que buscan tierra firme donde izar una bandera. El lugar elegido, entonces, fue el cruce de las avenidas Aviación con Angamos, en Surquillo, justo debajo del esqueleto a medio construir que era por entonces el Tren Eléctrico.

Fue así que, con la ayuda de los vecinos y de artistas locales, se ideó una serie de juegos que simularían un parque de atracciones diferente, accionado no por motores sino por la fuerza humana, con un barco pirata, un tren fantasma, pilares coloridos, ambientes de fiesta, la palabra “Deseo” hecha con luces de neón, que iluminaba los rostros de los niños jugando y la posibilidad de que los asistentes pudieran concluir el camino imposible del tren eléctrico con sus propios cuerpos colgados de un cable. Se trataba –aunque esto no lo supieran los de Basurama- de sacarle la lengua a nuestra clase política, de conseguir diversión gratuita en el cráter que había formado el bombardeo de ofrecimientos sin cumplir. Aquella pista aérea de hormigón, por fin estaba al alcance de las manos.

En lugar de discursos y mentiras (o mentiras en forma de discursos), este grupo de ocho españoles había traído, con nuestros neumáticos usados, nuestra gráfica chicha y las piezas de autos que encontraron en el camino, aquello que venimos escuchando prometer a políticos, religiosos e inversionistas: esperanza y felicidad. Solo que en lugar de tomarse veinte años en cumplir, se demoraron solo una semana. Las sonrisas y los recuerdos, sin embargo, se mantienen hasta hoy.

No se las llevó el tren.

Más: http://basurama.org/

Arriba: RUS La Paz (El Alto). Aba jo: Workshop en Ghent

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le petite mort 25

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NN para La Morada Fot贸grafo: Alonso Molina / Modelo: Kabuki Pistolas Peinado y Maquillaje: Haydee Cabrera y Karen Monsefu para Solmakeart / Asistente de Producci贸n: Natali Maravi

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Escribe - Joseph Zรกrate Fotos - Adriรกn Portugal Intervenciรณn - felipe esparza 33

Dice que si hubiera podido, si tan solo hubiera tenido más plata, si su papá no lo hubiera jodido con eso de que el arte no te da de comer, que si no hubiera tenido hijos tan joven, que si otra hubiera sido su historia, él sería un artista famoso ahora y no un señor de sesenta años que pinta letreros a mano para sobrevivir. Pero vamos, así es la vida de dura, dice, mientras sigue trabajando en su vetusto puestito ambulante de madera, tan veloz como siempre. Porque los clientes, siempre apurados, jamás piensan en los sueños de un viejo pintor de la calle y solo quieren su letrero terminado: bonito, vendedor, rápido, para ahorita, para ayer.

Las gigantografías le han malogrado el negocio. Flash recuerda que hasta el año 2000, su puesto estaba lleno de letreros para pintar y para todo tipo de locales (…)

Por eso todos lo buscan. Por eso todos lo llaman Flash.

Vestido con su gorra verde y la camisa oscura llena de manchitas de colores, Flash lleva casi toda la vida –veintidós años para ser exactos– pintando letreros en la misma calle de siempre: la cuadra trece de Nicolás Arriola, una avenida grande y sucia de La Victoria, llena de importadoras de tractores y repuestos automotrices.

Aquí, cualquier día, como hoy que es sábado y que el tráfico de las dos es un estruendo de motores y bocinas impacientes, Flash dibuja letras blancas sobre un letrero para un puesto que vende manzanas. «Hace ocho años que no cambio mi letrero», dice el cliente, un gordo de camisa floreada, que lo ve trabajar. «Flash es un trome.

Siempre vengo acá. Ya no hay pintores como él».

Con la rapidez que solo dan los años de práctica, Flash traza líneas horizontales en segundos con un cordel y una tiza blanca, donde después pintará las letras con su pincel, a pulso y de memoria. En su carreta de pintor ambulante, hay potecitos de pinturas esmalte y glossy (amarillo, negro, fucsia y blanco son los colores que más utiliza), soplete artesanal, una botella de plástico con 34

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Por ejemplo, los comerciantes de La Parada me piden letras tipo gótico, esas que tiene cachitos.

Los de las combis me piden letras estilizadas, como escritas a mano, esas son más libres, y se hacen a la mentalidad nomás”

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thinner, dos docenas de pinceles sucios de todos los tamaños existentes. La calle es el taller del artista clandestino.

—Hacer letras también es un tipo de arte, así como el de Picasso, Da Vinci, que fueron grandes pintores— explica el viejo, mientras se concentra y achina los ojos para que la letra M de “Manzanas” le salga perfecta.

Flash es un profesional que pinta de todo: desde letreros para discotecas, bares y bodeguitas, hasta placas de autos y rótulos estilizados sobre la piel metálica de las combis y microbuses. A veces también le piden paisajes o formas distintas: una fruta si es una tienda, un tiburón o una langosta si es una cebichería.

Pero son las letras y los números de todas las formas y colores, su verdadera especialidad.

—Letra recta, letra gótica, letras abecedarias, letra perpendicular… yo pinto varias clases de letras, y de números igual—explica Flash, quien tiene su propia clasificación de tipografías.

Cuenta que solo necesita concentración para que las letras queden perfectas. A veces necesita utilizar escala y moldes,

Puedes encontrar a Flash pintando en las primeras cuadras del óvalo de Nicolas Arriola, La Victoria.

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pero la mayoría de veces las hace a pulso. Puede terminar un letrero en una hora dependiendo del diseño, y cobra según la cara del cliente: «Mirándolo nomás veo si es misio o si tiene plata», dice y se ríe cachoso.

Habla la experiencia de un hombre que aprendió este oficio cuando tenía veinte años, con un viejo pintor también de letreros en los años setenta. Aquí, exactamente en esta misma vereda, la misma avenida sucia, gris y ruidosa de La Victoria, quizá el distrito con más ambulantes informales de toda Lima. *** Muchos años antes de convertirse en Flash, Máximo Bernardino Bastidas Bautista quiso estudiar dibujo en la escuela de Bellas Artes de Lima. Desde que tenía doce años, cuando llegó a la capital, pintaba paisajes en cualquier pedazo de papel que encontrara: el cielo azul, las cerros verdes, el cóndor volando,

las casitas una sobre otra, las nubes gordas y blancas. Era la postal de Huancayo, un pueblo de la sierra central donde nació.

—Pero Bellas Artes costaba un huevo de plata y yo era misio.

—recuerda Flash, mientras pinta números negros sobre la placa amarilla de una auto—.

Mi papá, que era obrero de construcción, me dijo: no te metas en eso, hijo, en el dibujo no hay futuro, ayúdame acá, carga cemento. Yo le dije que iba a pintar igual. Si sale, sale pues, a la suerte.

Pero la suerte para Flash era conseguir dinero para estudiar, así que tomó el consejo paterno y se metió a trabajar de albañil.

—Hasta que un día conocí a un viejo pintor, ya finadito, que pintaba letreros así como yo, en esta misma avenida, y me ofrecí de ayudante.

El empleo no era malo: Flash sentía que diseñar letreros, pintar letras y números, lo acercaban en algo a lo que siempre quizo ser: un artista.

Ambulante, claro, pero artista.

Entonces comenzó con los números. Flash dice que son fáciles de hacer por que son puro trazo y se pueden dibujar de memoria. «Hay que practicar todos lo días. Una vez que le

agarras la maña al pincel, no lo sueltas. Es como agarrar una pistola. Ya nunca te olvidas», dice Flash, que también fue infante de marina a los 18 años.

Hacer letras es otro cantar. Las letras tienen varios ángulos, dependiendo del diseño que tengan. «Por ejemplo, los comerciantes de La Parada (ese famoso mercado lleno de ambulantes donde, hasta hace poco, uno podía comprar desde verduras y vinilos hasta refrigeradoras viejas y partes de autos) me piden letras tipo gótico, esas que tiene cachitos.

Los de las combis me piden letras estilizadas, como escritas a mano, esas son más libres, y se hacen a la mentalidad nomás». Sin embargo, si se trata de letras imprenta, entonces Flash utilizará siempre el metro (el cordel y la tiza) para señalar cada espacio, cada línea donde dibujará las letras.

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—Los más jodidos son los ingenieros, arquitectos y abogados. Quieren que haga letras imprenta perfectas y a escala. Ellos buscan la perfección, en cambio otros no se hacen problema. Ahora, todo depende de cuanto me paguen.

Si quieres perfección, entonces hay que tomar medidas, hacer trazos, todo eso tiene su costo.

Y a Flash le cuesta. Por eso siempre lee revistas y periódicos para sacar nuevas tipografías, aunque nunca las llame así. «Yo encuentro los tipos de letra que me gustan y luego las saco para mi trabajo». Flash dice que el último diseño que sacó es el de las letras ovaladas con sombra y me señala la parte trasera de auto escarabajo rojo donde dice Cristo es Vida: cada letra pintada en amarillo tiene una sombra blanca detrás que le da la sensación de profundidad, como en 3D. Flash se siente y habla como un experto en su oficio. Por eso le molesta, le jode, que a veces los clientes lo subestimen y piensen que hacer letritas y números es cosa fácil.

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—Una vez, me dijo un cliente: “Compare, hasta mi hijo puede pintar más rápido” “Un momentito, amiguito, ¿tú me estas retando?”, le dije. “Claro pe’, compare, hace rato estás…” “Mira, ¿sabes una cosa? si me pintas una A perfecta, te regalo mi trabajo”… ¿y qué crees que pasó?

—¿Qué pasó?

—El pata no hizo nada, se chupó —dice Flash y se ríe—.

Varios se han ido de cara así.

Verme pintar es fácil, ahí parado, pero hazlo tú pues. A ver, hazlo.

*** Pintores como Flash ya no quedan muchos. Uno a uno se van muriendo. Peluca, por ejemplo, murió de un infarto.

Mocho, el pintor de la otra esquina, fue atropellado por un auto, al salir borracho de una licorería que acababa de pintar.

«El único antiguo soy yo», dice Flash, que con sesenta años encima, quizá sea el último maestro pintor de letreros de esta avenida. Aunque, dice también, está dejado un legado.

—Le he enseñado a varios, de mi mano han salido cinco pintores que también tienen sus puestos por acá. Yo les digo: ya te enseñé, ahora cómprate una carretita y trabaja tú. Solo cuídate de la municipalidad, de los policías, que no te lleven.

Para Flash, es importante que haya gente que todavía se dedique a este negocio. No sorprende por eso que sus dos hijos también se dediquen a pintar letreros y hasta tengan

sus propios puestos a unos pocos metros de él. De hecho, también se llaman Flash. Han heredado esa velocidad con el pincel.

—En vez de que estén trabajando en una fábrica ocho horas por veinte soles, les dije que se vengan a trabajar acá y van a ganar más plata. Ahora ellos en un letrerito ganan veinte, treinta soles. Al menos sacan pa’ vivir la vida, pa’ comer bien. A veces, si hay suerte, uno puede sacar 100 o 200 soles al día. Aunque ya no hay tanto trabajo como antes.

Las gigantografías le han malogrado el negocio. Flash recuerda que hasta el año 2000, su puesto estaba lleno de letreros para pintar y para todo tipo de locales: ferreterías, carnicerías, peluquerías… «No teníamos tiempo para nada, ni para el amor. Pero llegó la gigantografía y nos jodió, ahora estamos con pequeñeses, pintando plaquitas de autos. Si no existiera esa máquina, ahorita estaría mi obra en toda esta avenida», reniega el viejo pintor y señala los carteles de los negocios que están frente a él: letreros inmensos con letras perfectamente diseñadas por computadora, más rápidos de hacer y mucho más baratos que los pintados por Flash.

Pero ya no se lamenta. Después de todo, dice, su pulso ya no es el de un joven y solo espera que, cuando ya no esté, sus hijos puedan continuar el negocio y hacerlo crecer. Tal vez a un nieto suyo le guste el arte, la pintura, y pueda estudiar en Bellas Artes, como el siempre soñó. Quién sabe.

Quizá alguno, dice Flash. Quizá algún día.

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PREVI, 45 AÑOS DESPUÉS Escribe - Martha Quirós e Inés Flores Foto e Intervención - Lucía Rodriguezh

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Han pasado 45 años desde que se dio inicio, quizás al

más peculiar experimento de vivienda social sin precedentes subsidiado por el Gobierno Peruano, que convocó a los mejores arquitectos del mundo para diseñar 467 casas en el distrito de Los Olivos. ¿Cómo ha cambiado el diseño de estos prototipos a través de los años? ¿Podemos conocer más sobre las expresiones culturales de los peruanos a través de nuestra arquitectura emprendedora y progresiva?

Las invasiones masivas a raíz de las migraciones conllevaron a un déficit de la vivienda, a la precariedad de los asentamientos espontáneos y al deterioro del centro de Lima durante el gobierno de Fernando Belaúnde Terry en la década de los años 60. Todos estos problemas estimularon al gobierno a tomar una iniciativa a fin de incorporar nuevas políticas de vivienda social para la ciudad, sin saber que era el inicio de un proyecto que rompería los paradigmas: la primera vivienda progresiva en el mundo. De esta manera, surgió el Proyecto Experimental de Vivienda PREVI con sus tres proyectos piloto. De ellos, el de mayor connotación es el PP1 (proyecto a analizar asentado en el distrito de los Olivos), ya que mediante un concurso nacional y otro internacional, reunió a los arquitectos más prestigiosos de aquella época y materializó las recientes discusiones en torno al tema de la vivienda. La lista de participantes estaba conformada por, mencionando solo a algunos de los más famosos arquitectos, James Stirling, Aldo van Eyck, the Metabolists, Charles Correa, Christopher Alexander y Candilis, Josic y Woods. Se convocaron a trece grupos internacionales y trece peruanos. *** PREVI fue concebido como un proyecto de alta densidad en baja altura, como un modelo para la futura expansión urbana. En él, se incorporaron ideas como la flexibilidad de los espacios, el crecimiento progresivo, las unidades vecinales, la peatonalización de las vías, el paisajismo, la escala humana como factor de diseño arquitectónico y 44

Ventanas con rejas: no solo es un elemento de protecci贸n sino que los ornamentos empleados en su composici贸n juegan con diversos simbolismos.

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“PREVI se convirtió en una anomalía, un laboratorio de viviendas que contenía muchas ideas de diseños, muy diversos y adaptables; un proyecto de carácter experimental, que probablemente por su magnitud, no se repita más.”

(Justin McGuirck)

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nuevos métodos de construcción sismo resistente.

Inicialmente, se había previsto la realización de un proyecto integral desarrollado por un solo ganador que ofreciera alrededor de 1500 viviendas.

Pero, la calidad de los proyectos motivó al jurado a optar por varios de ellos y así generar un proyecto “integral”. De esta manera, se incorporaron un total de 26 propuestas y se recortó la cifra a 467 viviendas, donde se utilizó desde ladrillos hasta paneles de concreto prefabricado.

El planeamiento general fue desarrollado por el arquitecto Peter Land y sus colaboradores. El diseño del conjunto

Todos estos problemas estimularon al gobierno a tomar una iniciativa a fin de incorporar nuevas políticas de vivienda social para la ciudad, sin saber que era el inicio de un proyecto que rompería los paradigmas: la primera vivienda progresiva en el mundo. se basó en una estructura de pequeñas plazas, interconectadas por pasajes peatonales, que articulan las múltiples formas de agrupación de viviendas. De este modo, se creó una estructura urbana basada en las unidades vecinales y jerarquización del espacio público, desde parques de gran tamaño, hasta plazuelas, pasajes peatonales y jardines en torno a las viviendas. También se incorporó en el diseño una escuela, un centro comunitario, un centro médico, áreas de estacionamiento y un parque multiuso.

Cinco décadas después de su creación, el conjunto de PREVI conforma una zona consolidada de la ciudad con decenas

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Fachadas: Caras de la ciudad que componen el escenario mutante de la urbe, son la estĂŠtica subjetiva de la vida Ă­ntima de quien habita el interior.

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Fachada Módulo COOPER GARCIA-BRYCE GRAÑA NICOLINI, PERÚ. Estado actual autoconstruido, foto intervenida.

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de actividades productivas que lo convierten en un barrio muy activo.

Sin embargo, este cuenta con un significativo deterioro, producto de la falta de asistencia técnica y la falta de difusión de dicho acontecimiento a sus habitantes.

Actualmente, alberga una segunda y tercera generación de los habitantes originales. Sus viviendas han mutado de tipología, de unifamiliar a multifamiliar, a medida que las familias han ido creciendo. Asimismo, han cambiado su uso de acuerdo a las necesidades de sus ocupantes. Esto último se refleja en la presencia de actividades productivas, terciarias o de servicios que se ubican en el primer piso, lo que ha permitido el desarrollo económico de las familias.

Dicha dinámica, se puede apreciar en las distintas expresiones culturales como soporte de lo que es una obra colectiva.

Este hecho ha generado que PREVI sea visitado regularmente por estudiantes de diferentes especialidades, quienes quieren ver cómo se ha ido transformando de manera autogestionada el barrio, piso a piso, año tras año; casas transformadas en colegios,

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guarderías, bodegas, espacios de alquiler, tiendas de disfraces, librerías, locales de internet, etc. *** La importancia de PREVI radica fundamentalmente en ser un proyecto, donde por primera vez se construyeron viviendas bajo el concepto de “vivienda progresiva”, es decir, que va creciendo en el tiempo y bajo las posibilidades económicas del usuario y el crecimiento de su familia.

Es importante, además, porque se dio paso al replanteo de la vivienda colectiva para los sectores populares, generado a partir del estudio de las invasiones limeñas en la época de las grandes migraciones del interior del país a la capital. Estas viviendas fueron pensadas en torno a la arquitectura informal y espontánea que utilizaban los mismos pobladores de los sectores más pobres y marginados de la periferia limeña.

El gobierno de Belaunde buscó una alternativa diferente de hacer ciudad y organizó este concurso que trajo consigo nuevos valores respecto al urbanismo.

Destacaron las macro manzanas, que

Ante patio: Espacio cuasi teatral en vías de extinción a causa de la tugurizarían de la ciudad, que por su carácter semi-cerrado invita al transeúnte a descifrar la vida de quien vive en el interior.

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son, como su mismo nombre lo indica, grandes manzanas pero peatonales, así como también las áreas verdes. Ambas impulsan la caminata, el ejercicio, los encuentros espontáneos entre vecinos y de esta forma, se promueve el bienestar y la salud física y mental de la población. Se origina así un sentido de barrio, de vecindad que genera confianza y fortalece las relaciones humanas. Estas son cualidades que humanizan el espacio y responden a las necesidades reales de una sociedad emergente con características particulares. Debemos preguntarnos ahora si estos valores son los mismos con los que se está trabajando el urbanismo actual. O si es que la ciudad de Lima y sus proyectos de vivienda social sobreexplotan el suelo de manera individualista.

Finalmente, como dice el periodista Justin McGuirck en la revista Domus, PREVI se convirtió en una anomalía, un laboratorio de viviendas que contenía muchas ideas de diseños, muy diversos y adaptables; un proyecto de carácter experimental, que probablemente por su magnitud, no se repita más.

A través de un reportaje gráfico hecho por la fotógrafa y arquitecta Lucía Rodriguezh, veremos cómo PREVI se ha consolidado en un tejido urbano, en un collage de casas intervenidas por los ciudadanos que forman a su vez una ciudad viva, compleja e interconectada. Básicamente, la idea nace del concepto con el cual fue concebido PREVI, diseñar una base que pueda ser intervenida y adaptable al uso en el tiempo gracias a la autoconstrucción. Partiendo de eso, se intervino el material fotográfico obtenido en el lugar 45 años después, para crear escenarios ficticios con la intención de llevar al límite la forma y proporciones de la figura urbana actual (Primer Grupo). El segundo grupo de esta propuesta fotográfica es una serie de detalles de fachadas, producto de la autoconstrucción y el intento de experimentar con la evolución estética de sus formas. ¿Dónde queda PREVI? A dos cuadras del kilómetro 17,5 de la Panamericana Norte, por la Av. Alfredo Mendiola. Distrito de los Olivos.

Arriba derecha: detalle módulo CHAPARRO RAMÍREZ SMIRNOFF WYSZKOWSKY, PERÚ. Estado actual autoconstruido, foto intervenida. Aba jo derecha: fachada módulo CARLOS MORALES, PERÚ. Estado actual autoconstruido, foto intervenida.

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NN para MIRALA Editorial “Sub- Limen” Fotografía: Alonso Molina Modelo: Macarena Guerra García Maquillaje: Gabriella del Campo Dirección de Arte y Producción: NN

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“La ciudad es un estado mental (…) un cuerpo de sentimientos organizados”.

Oswald Spengler (1880-1936), historiador y filósofo alemán

Ocho fotógrafos peruanos plasman la cuidad de Lima en una fotografía: Juan Pablo Aragón Santiago Barco Alejandra Devéscovi Renzo Giraldo Alonso Molina Adrián Portugal Camila Rodrigo Macarena Rojas

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BĂşscalos en: www.revistann.com

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MAQUINARIA DE ASCENSOR POR CÁNDIDA LICHI Siempre es bueno darle vuelta a las cosas. A todo y con todo. Sacarle el polvo. Utilizar la lengua y sentir el gusto de que te vas o de que te vienes. Este blog descarta el sentimiento y se centra en la praxis. Porque para eso no estamos hechos de ideas, las palabritas a los poetas. Puedes leerlo como quieras y mirarlo de reojo. Cándida Lichi tiene más de 25 y menos de 30, escribe desde un quinto piso con terraza y muchas plantas, tiene unaPhysalis peruviana y monta bicicleta (entre otras cosas). Escribe desde España, ese país que al morir su dictador, las mujeres muestran sus tetas y todo es socialmente soportable. En el barrio donde vive se respira sexo. O al menos eso parece. Ya te irás enterando.

DEMENCIA POR MENCÍA OLIVERA Soy mujer, diseñadora, peruana. Amante de lo diferente, de lo único, de lo bello, de lo nuevo. Escribo sobre lo que me gusta y sorprende, comparto todo lo que sé.

BRAVE NEW WORLD POR JUAN TRAGANT “One cubic centimetre cures ten gloomy sentiments.”

ERRATUM MUSICAL POR LUIS ALVARADO Soy melomano y coleccionista. Tengo un programa de radio y un sello discográfico.

Me gusta la música en todas sus formas. Tengo cierta predilección por aquella particularmente ruidosa, cerebral y absolutamente maquinal, pero no es ningún parámetro, en realidad me gusta escuchar un poco de todo. En este blog escribiré sobre esos sonidos que me apasionan, conciertos a los que voy, discos que lleguen, discos que recuerde, canciones, en fin, todo aquello que pueda compartir. Notas sobre aquello que vaya leyendo y viendo también. Un poco al vuelo siempre, y dispuesto en todo momento a escuchar lo que me hagan llegar.

NERDNOMICON POR RAY RAY AFRIKA Ray Ray Afrika (1987-????) tenía aún cero años cuando jugó por primera vez Super Mario Bros. A pesar de no haber tenido la coordinación suficiente para pasar el primer nivel o entender qué estaba pasando, su obsesión por la cultura geek quedó marcada para el resto de su vida. Comics, videojuegos, Sci-Fi e Internet; estos temas van desbordándose de la cultura estrictamente nerd y van formando cada vez más parte de nuestra vida cotidiana. Así, a través de Nerdnomicon, Ray Ray buscará retratar cómo la cultura geek poco a poco toma control del mundo entero bajo la premisa de que hoy en día probablemente hasta tu abuelita juegue Angry Birds.

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CO DA Tres personajes, un melómano y dos músicos, amplían nuestro horizonte musical recomendándonos un álbum. Porque sabemos que siempre están en busca de nueva sangre musical, porque ya no tiene mayor atractivo que sigan sacando a relucir el mismo disco ochentero o noventero que marcó su adolescencia y que ya todos conocemos, les pusimos una única regla: que fuera un disco contemporáneo, y en lo posible, de este año.

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LUIS ALVARADO Escúchalo: http://newalbumreleases.net/44067/julia-holter-ekstasis-2012/

Investigador y poeta, Luis Alvarado, es dueño del sello independiente Buh Records, director del documental “Ruido vulgar: la historia del noise limeño” y conductor del programa de música experimental y sonidos contemporáneos “Cazar Truenos”, que se transmite por Radio Filarmonía.

Julia Holter “Ekstasis” RVNG

(2012)

Hace poco descubrí el trabajo de la norteamericana Julia Holter. Quedé asombrado por la intensidad de su disco Tragedy, del 2011, el montaje de sonidos, y ese lirismo que celebraba y lamentaba, inspirándose en Hipólito, un drama de Eurípides. Los drones (uso de sonidos repetidos en el tiempo), que parecían heredar algo del New Weird America (a lo Fursaxa), se combinaban con esa voz angelical, en un aire de cuentos de hadas. Estremecedor. Luego me topé con Ekstasis, el nuevo disco que Holter (quien es graduada en composición) ha publicado este año. Melodías más definidas, crescendos, un aire pop, que no por más accesible resulta menos arriesgado. Ekstasis mantiene los drones, el meticuloso montaje de sonidos, los arreglos de cámara, y los juegos vocales, que a veces tienen aires orientales, cuando no cuasi corales y en algunos casos hasta remiten a Laurie Anderson. Sus letras son misteriosas, como pequeñas viñetas góticas sobre desapariciones. Las atmósferas oníricas están de vuelta. Las sombras y la belleza. Esta época ha vuelto a invocar a lo siniestro y a lo melancólico. This is not the quietness, this is ekstasis.

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Escúchalo: http://newalbumreleases.net/45044/baby-woodrose-third-eye-surgery-2012/ 88

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VANESSA RINÓN A.K.A MISS COLMILLO

Voz y bajo de la banda argentina Los Colmillos, un dúo power de blues y garage elegida como banda revelación del 2009 por el diario Clarín. Han visitado dos veces Lima y editado un disco con el sello peruano Discos Gordos.

Third Eye Surgery “Baby Woodrose” BAD AFRO RCDS

(2012)

Sexto disco de la banda oriunda de Dinamarca. El gran gurú Lorenzo Woodrose se despacha nuevamente con otra gema desbordante de psicodelia actual. Sitares, órganos, guitarras hipnóticas y palabras que como mantras van llenando tu vacío existencial. Nueve canciones adictivas y placenteras, la dosis justa para despegar de tu sillón y pegarle una vuelta al microcosmos. Oriente y occidente se funden con tan solo un PLAY de tu sound system favorito, disponible en vinilo para los más románticos. El nirvana yo lo alcanzo en el track 3: DANDELION, “I could show how I feel”.

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RAFO RÁEZ Raúl Montañez ”Montaña” (2012) OGRO RECORDS Dos ejes definen lo que uno oye en el disco de Raúl Montañez, su amor por el rocanrol y su pasión por Lima. No me gusta como arranca el disco, pero debo reconocer que cuando empieza a rodar las calles y situaciones de Lima Metropolitana, comienzan a aflorar las trasversales de la Avenida Tacna y la misma Avenida en sí. Luego me entero que ahí había un cine donde tocó Bill Haley & The Comets y aumenta el misterio. Raúl Montañez pertenece a una generación que vivió el lanzamiento del álbum conceptual de David Bowie, Ziggy Stardust y las Arañas de Marte, como algo propio, también hay algo contemporáneo con la banda de rock británica T Rex. Sin embargo, hay una naturalidad con el idioma limeño y un sonido que, tal vez digo esto influido por el hecho de que Raúl tocara la guitarra en varias canciones emblemáticas de Lima actual (repartidas en los repertorios de Zcuela Crrada, Leusemia y Voz Propia), suena definitivamente a Lima.

Elogios también para el muy buen empaque que acompaña al disco, uno que vale la pena coleccionar.

Escúchalo: http://www.youtube.com/watch?v=IykY9bwi2pM

Antropólogo de profesión, inició su carrera musical a finales de los ochenta. Es uno de los músicos más talentosos e incomprendidos de nuestro medio. Entre sus logros figura haber convencido al poeta José Watanabe de escribir canciones rockeras para su disco “Pez de fango”.

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Cuando el sexo anal se convierte en una prรกctica de igualdad

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Columna de Drag Queen Frau Diamanda ILUSTRACIÓN - HÉCTOR DELGADO

Es sabido que la práctica sexual anal está bastante difundida, e incluso goza de cierto furor entre la población heterosexual en las últimas décadas. Según estudios actuales, aproximadamente el 40 % de las parejas heterosexuales lo han intentado y lo disfrutan, volviéndose así una práctica común, junto con el sexo vaginal y oral; y si bien –antes era considerada tabú por presiones religiosas, sociales, médicas, psicológicas o de otra índole– su propia condición “prohibitiva” la catapultó como objeto de deseo hasta convertirse en fetiche comercializable por la industria pornográfica o en método anticonceptivo ultra recomendado, ambos a escala mundial. Se me viene a la mente las imágenes reveladoras del actor Joe Dallesandro penetrando a la actriz Jane Birkin en la película Je t’aime moi non plus (1976), donde vemos la práctica del sexo anal heterosexual, pero cargada de una libido homosexual incontenible, que justamente plantea la disyuntiva de hasta qué punto el deseo sexual es amorfo, difuso y anárquico y deviene en una fuente de placer inagotable.

De hecho la sexualidad y la política van de la mano, pues en ambos casos se trata de la toma de decisiones que acarrea consecuencias y que exige una postura que compromete el ejercicio de la libertad personal. Por otro lado, después de que mis amigos muy sueltos de huesos me

bombardearon de anécdotas insospechadas y me recordaron una escena de la película española Pepi, Lucy y Bom y otras chicas del montón (1980), donde Pepi encarnada por la actriz Carmen Maura tiene que acceder a tener sexo con un policía al ser descubierta con plantas de marihuana bajo la condición de que la penetración sea anal, pues ella debía cuidar su virginidad para luego venderla al mejor postor; concluyo que deberíamos dejar de lado la estrechez de mente que conlleva a una estrechez de ano. Esta estrechez limita nuestro deseo natural de exploración frustrando nuestro apetito de conocimiento y experimentación. Reflexionemos sobre el ansia de penetrar esa zona prohibida tan imperfecta como fascinante; tan desatendida y expectante y probemos con formas o métodos ingeniosos y eficazmente placenteros como es la penetración con los dedos –práctica muy extendida entre hombres heterosexuales por su contraparte femenino–; penetración con dildos o juguetes sexuales; sexo oralanal o “beso negro” y un sinnúmero más de procedimientos. Así, el placer del sexo anal puede aplicarse a mujeres y hombres de cualquier orientación sexual convirtiéndose en una suerte de práctica democratizadora, que por fin nos equipara en un mismo plano de búsqueda del placer como derecho legítimo.

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Un mundo iluso Nos sumergimos en el mundo visualmente ilusorio y lúdico de un artista que no pierde en sus trabajos la cualidad que hace del trazo de cualquier niño, una expresión sorprendentemente auténtica.

Quizás por eso podemos encontrar entre sus obras minúsculos y coloridos monumentos de plastilina escondidos en la ciudad de Lima, con el objetivo de que el espectador, a través de ciertas pistas, los encuentre. O collages ocultos detrás de cuadros colgados en el baño de hombres de una de las galerías más importantes de Lima, que al final de cuentas, busca poner sobre la mesa el no tan cordial trato que estas grandes empresas tienen con los personajes que realmente originan sus movidas comerciales.

Estas experiencias divertidas que generan las obras de Eriván Phumpiú han sido cuestionadas y replanteadas por él una y otra vez, sobre todo después de convertirse en padre de familia. ¿Es que acaso no puedo ser más serio con mis trabajos? Así que comenzó a diseccionar cada elemento que conformaba sus imágenes y llegó a la conclusión de que su esencia parte de la improvisación, de objetos y personajes naif, de su torpeza al trabajar, de su afán por los colores brillantes, de su trabajo como docente de arte para niños y de la música experimental que realiza como bajista de su grupo Velvet Cotorro.

Sus procesos creativos siempre han estado en función a lo que el espacio le permite hacer y sus materiales están supeditados a lo que el entorno le ofrece, de ahí que experimentara trabajar con diversos objetos entorno a la Escuela de Bellas Artes o con bordados y aplicaciones realizadas con la máquina de coser de su abuela.

Extrañamente, uno de los críticos de artes visuales y curador de exposiciones independientes más importante del Perú, Jorge Villacorta, señaló que era un artista neo-conceptual. Eriván nunca entendió porqué, ya que a la hora de trabajar no encuentra, en muchos casos, una justificación o un concepto definido. No obstante, Phumpiú anda sin prisa dejando en cada trabajo procesos abiertos para que los espectadores no solo cuestionen, sino que se conviertan en actores de sus obras.

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ARTISTA DESTACADO: GALERIA NN

Fotos - edison guerrero

Leyenda: Auto-retrato hecho por Eriván Phumpiú a modo de bodegón.

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